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INTRODUCCIÓN

El desarrollo sostenible, ha sido considerado como uno de los factores de los cuales carecen

las empresas de países subdesarrollados, ya que priorizan la producción en masa, reafirmando

el capitalismo, y no una contribución responsable con el medio ambiente. Es así que Gómez

(2015), en su guía de evaluación para el desarrollo sostenible, lo define como “el proceso de

asegurar que se satisfagan las necesidades del presente, sin comprometer la capacidad de las

futuras generaciones para satisfacer las propias” (p. 91) Por ello las compañías deberían

implementar los principios de sostenibilidad en toda su cadena de producción, iniciando por la

reutilización de insumos directos o indirectos; que por una falla en los acabados no sean

desperdiciados o sacados del inventario; sino más bien ofertarlos a un menor precio, como

estrategia de venta, lo cual indica que todo se aprovecha y ubica en el mercado potencial de

clientes, este pensamiento es consecuente con el principio de integridad del negocio, que

según la UNESCO (2017), orientado a la ecología, busca no arrojar desechos en espacios

naturales, procurando que el sistema ambiental se desarrolle con naturalidad. Considerando

esta perspectiva, el presente ensayo evaluará las formas en que las empresas deben considerar

la sostenibilidad como indicador de competitividad de marcas, determinando los factores que

deben de tomar en cuenta, para ser recíprocos con el medio ambiente, al reforestar espacios

utilizados para la producción de bienes primarios como los vegetales, o fósiles como el

petróleo; ya que el único recurso renovable es la tierra, siempre que sea cuidada y atendida

con precaución, como parte de la responsabilidad social de todos los seres humanos; ya que

cada vez, los deterioros se vuelven irreversibles a través del tiempo.

DESARROLLO

Morales (2014) resalta que “en la actualidad, una gran variedad de compañías globalmente,

desarrollan como ventaja competitiva las prácticas competitivas al gestionar cambios al


interior de la organización, utilizando materiales reciclables o renovables en función de la tasa

de reposición, es decir, evitando productos tóxicos, disminuyendo la generación de emisiones

atmosféricas contaminantes” (p. 34). Las industrias poseen el poder del cambio, al adquirir un

nueva ideología adaptada a su identidad institucional, en la cual se valore la responsabilidad

social y acción regenerativa hacia el ecosistema. Las empresas pueden iniciar por una

reestructuración del sistema de ejecuciones de procesos de fabricación, al adquirir

maquinarias que utilicen energías renovables, o que requieran el menor uso de combustible

fósil. Otra de las estrategias importantes para establecer la competitividad entre empresas, es

el hecho de monitorear constantemente el cumplimiento de normas ambientales, propuestas

por entes reguladores, que en el caso de Ecuador, esta función la ejerce el Ministerio del

Ambiente actualmente a cargo del Ab. Raúl Clemente Ledesma. Esta entidad ejecuta acciones

regulatorias para más industrias que se rodean de espacios naturales, vigilando que los

desechos que se generan, no tengan contacto con suelo fértil, y en este caso, deberán realizar

actividades de irrigación de vegetación, lo cual le da a las fábricas la credibilidad de

sostenibilidad, importante para competir con otras, ya que genera un valor agregado a la

imagen de las mismas; lo cual se conoce como estrategia de neuromarketing. Al existir un

líder que los direccione al cumplimiento de estándares de calidad ambiental, se establece un

compromiso entre todos los colaboradores de una empresa, los cuales como grupo de interés

administrativo; desarrollaran un proceso de relación que incluye los siguientes pasos:

planificar, preparar, implementar, revisar y mejorar. Al planificar todos los individuos están

motivados a cumplir indicadores de adquisición de materias primas, como un compromiso

económico y social. La preparación consiste en la movilización de recursos ya sean humanos

y tecnológicos, como parte del compromiso económico y innovación de máquinas, en


respuesta al cuidado ambiental, ya que las maquinaras depreciadas y deterioradas, generan

mayor contaminación que una nueva. La etapa de implementación conlleva a documentar las

evidencias sobre la acción de sostenibilidad que tienen las empresas frente a otras cuya

principal acción solo es introducir al mercado un nuevo producto; sin considerar los riesgos

que producen sus desperdicios al ser consumidos; por ello en sus campañas publicitarias,

deben priorizar el cuidado del entorno y la salud del ser humano. Tal es el caso de los

cigarrillos, que en su mensaje de advertencia, reconoce los daños que causa el consumo de

este producto. Según Buendía (2013), el índice global de competitividad está compuesto por

tres subíndices: Requerimientos básicos, Factores potenciadores de eficiencia, e Innovación y

sofisticación de los factores, los cuales diagnostican al conglomerado de elementos que

definen los grados de prosperidad y crecimiento económico.” (p. 64)[ CITATION Gó m17 \l

3082 ]. Por ello, los indicadores que se deben de considerar para obtener una ventaja

competitiva se responsabilidad social frente a otras industrias deben ser: Compromiso de

cambio ideológico con respecto al cuidado ambiental, acuerdos de trabajo comunitario,

actividades recreativas en contacto con la naturaleza, reformas reglamentarias internas en la

empresa con respecto al reciclaje dentro de las áreas de trabajo, modificación en la visión

institucional al reafirmar que una de sus metas es ser reconocidos por su labor regenerativa

hacia el medio ambiente.

CONCLUSIÓN

De esta manera queda demostrado que en el entorno social actual, la ventaja competitiva en el

Ecuador se ve limitada por la sobrevaloración de la ideología capitalista, ya que en nuestra

idiosincrasia prevalece el crecimiento económico por encima de la reserva animal y vegetal;

donde se produce de manera indiscriminada, y no se considera la renovación constante de los


recursos naturales y fósiles. Sin embargo a nivel mundial las empresas de países desarrollados

tecnológicamente, consideran de forma transversal el cuidado del medio ambiente, ya que

ellos prefieren mantener una estabilidad ecológica para el futuro, siempre que les represente

un ahorro económico en el mantenimiento de maquinarias o la renovación de las mismas, todo

por el cuidado de la capa de ozono. Es así que, Gutiérrez (2007), sostiene que “la idea de un

desarrollo orgánico sostenible inspira la definición de un proyecto de transformación de la

organización económica y social actual, es decir, la intervención del Estado y las

organizaciones, de forma que les conceda concretar nuevas regulaciones políticas para

establecer una sustentabilidad más fuerte e integrada.” (p. 94) Para ello se recomienda que las

empresas incorporen brigadas de control ecológico, donde se dedique un día a la semana, en

donde todos los colaboradores de las empresas se integren en una jornada de reforestación,

mingas y limpieza de entornos naturales. Es así, que la solución directa a esta problemática;

sea que el Ministerio de Producción, junto con la Cámara de Comercio incentiven a los

empresarios en un concurso, a que participen en implementar acciones de conservación

natural; y aquellos con la mejor propuesta, sean reconocidos a nivel nacional; siendo esta una

forma de culturizar hacia un nuevo estilo de vida.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁGFICAS

Buendía , E. (27 de Octubre de 2013). El papel de la Ventaja Competitiva en el desarrollo


económico de los países. Análisis económico, 28(69), 64.
Gómez , C. (Septiembre de 2017). UNESCO. Obtenido de
http://www.unesco.org/new/fileadmin/MULTIMEDIA/FIELD/Havana/pdf/Cap3.pdf
Gómez, E. (25 de Noviembre de 2019). United Nations Development Programme. Obtenido
de https://www.ec.undp.org/content/ecuador/es/home/presscenter/articles/2019/nuevo-
fondo-de-responsabilidad-social-y-sostenibilidad-promovera.html
Gutierrez, E. (Septiembre de 2007). Historias de un desarrollo sostenible. Trayectorias(25),
45-60.
Morales, D. (7 de Julio de 2014). El desarrollo sostenible como una posibilidad competitiva
para las empresas: Algunas reflexiones. ENSAYOS(7), 34.

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