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“Trastornos mentales” del ámbito socio-laboral:

¿son las personas responsables de su malestar


o depende también del contexto?

“Mental disorders” of the social-labour area:


are people responsible for their discomfort
or it depends also on the context?
“Todo lo que está dentro ha estado antes fuera”

Lev s. Vygotsky

José Miguel Ribé Buitrón. Psiquiatra psicoterapeuta. Centro de Salud Mental


de Adultos Sant Andreu. Fundació Vidal i Barraquer, Barcelona.
Margarida Cleris Collelldemont. Psiquiatra psicoterapeuta. Centro de Salud Mental
de Adultos Sant Andreu. Fundació Vidal i Barraquer, Barcelona.
Jesús Gracia Alfranca. Psicólogo clínico y psicoterapeuta. Centro de Salud Mental
de Adultos Sant Andreu. Fundació Vidal i Barraquer, Barcelona.

Resumen: con el presente artículo se pretende poner de relieve la importancia en pres-


tar atención, no solamente a los elementos personales de los usuarios que nos solici­tan
ayuda por dificultades en el ámbito laboral, si no también al contexto sociolaboral donde
se hallan enmarcadas sus demandas. Se reflexiona acerca de los “trastornos mentales”
directamente relacionados con el ámbito laboral y aquellos, cuya influencia, está más en
relación con el contexto social. Finalmente, a partir de una comprensión sociolaboral, se
plantean formas de atender, prevenir y tratar dichas problemáticas. Especialmente, y de-
bido a su prevalencia, los autores toman como modelo de atención clínica y terapéutica
el acoso laboral.
Palabras clave: salud mental, trabajo, contexto social, acoso laboral, atención primaria,
crisis económica, prevención.
Summary: with this article we intend to relieve the importance of paying attention not
only to the personal elements of the users who seek us for help within the work world,
but also to the social-labour context of their demands. We meditate about the “mental
disorders” directly related to the work world, and those more influenced by the social
context. Finally, from a social and labour understanding, we set out ways of attend, pre-
vent, and treat this issues. Due to it’s prevalence, authors mostly take the model of clini-
cal and therapeutic care of the labour harassment.
Key words: mental health, work, social context, workplace mobbing, primary care, eco-
nomical crisis, prevention.

Norte de salud mental, 2011, vol. IX, nº 41: 13-26. 13


José Miguel Ribé, Margarida Cleris, Jesús Gracia

1. Introducción (3) y estructuras laborales de nuestra sociedad.


Las características personales, aunque inciden
La Unión Europea identifica los riesgos y las “en-
de una manera particular en cada situación la-
fermedades psicosociales” como el primer pro­
boral, no son determinantes para explicar la
ble­ma de salud laboral de este siglo, se estima
“patología” de quienes vienen a solicitar ayuda.
afecta al 40% de los trabajadores. Los trastornos
Interesarse por el traumatismo o estrés psicoso-
ansiosos y depresivos son los problemas psi­
cial sufrido y el contexto laboral de la persona,
quiátricos más comunes en la población general.
puede aportar elementos complementarios para
De estos trastornos, una proporción significativa
una mejor comprensión de la problemática por la
está causada o agravada por las condiciones del
que el paciente solicita ayuda.
trabajo. Según la última encuesta de Salud de
Cata­lunya (2010), el 5,7% de los hombres ocu- Los organismos son sistemas abiertos influen-
pados y el 13% de las mujeres ocupadas estaban ciados por el exterior. Sólo se puede entender a
en riesgo de sufrir algún “trastorno mental” (1). la persona en su contexto o medio. Es algo que
A pesar de los cambios sociales y formas de en- muchas veces se olvida, especialmente en salud
tender las organizaciones laborales de muchas mental. Afortunadamente, desde enfoques más
empresas e instituciones, la salud mental sigue relacionales se comienza a prestar atención a los
centrada en el usuario como un ser independien- factores externos disfuncionales que pueden da-
te y ajeno a su entorno social y, en especial, a ñar a la persona. Por otro lado se piensa que, en
lo que aquí se atañe: el ámbito laboral (2). De las poderosas clasificaciones internacionales CIE-
hecho, durante mucho tiempo, la literatura en 10 y el futuro DSM-V (4), la tendencia es la de ir
psiquiatría poco se ha interesado acerca de este soslayando la realidad social. La escasa presencia
tema. Y aunque las cosas van cambiando, se de los elementos sociales, como factores de re-
aprecia que una gran mayoría de trabajos la re- percusión o desencadenamiento de “trastornos
ducen a lo psicológico y al malestar centrado en mentales”, no sólo pueden influir en la práctica clí-
la persona que demanda ayuda, como elemento nica, si no también en las resoluciones ju­diciales,
parcial e individual, sin tener muy en cuenta el en los procedimientos periciales -por estamentos,
contexto laboral en el que se manejan las per- que evalúan las repercusiones emocionales por
sonas. Por contra, si son muchas las revistas de causas sociolaborales-, etc. Va­loraciones que,
disciplinas afines a la psiquiatría (trabajo social, siguiendo a pies juntillas los criterios clasificato-
planes directivos en prevención laboral, legisla- rios, pueden desestimar erróneamente, los com-
tura, sociología, epi­de­miología, atención prima- ponentes sociolaborales implicados en algunos
ria, enfermería…) que han escrito al respecto y “trastornos mentales”.
sin embargo, podría pen­sarse que los profesio-
En la propia elaboración de este trabajo, los au-
nales en salud mental, desde una visión parcelar
tores y colaboradores1 de este texto han topado,
de la esfera vital de los pacientes, obvia y no da
en numerosas ocasiones, con el dilema de si las
la suficiente importancia que se cree se merece.
alteraciones y consecuencias mentales del ámbi-
Desde los “búnkers” en salud mental, se atien- to laboral pueden o no considerarse “trastornos
den a personas que requieren no solamente una mentales”. Por este motivo se ha decidido entre-
exploración y ayuda focalizada en sus dificulta- comillar el concepto “trastornos mentales”. De
des personales, si no también una comprensión hecho, los autores se han sentido ambivalentes
que vaya más allá de sus conflictos intrapsíqui- y ambiguos en sus reflexiones, que provenien-
cos. Con­flictos presentes e inherentes a la perso- tes de los ámbitos psicológicos, sociales, admi-
na, que se han podido amplificar o despertar al nistrativos y biológicos han tratado de integrar
verse­envueltos por interdependencias patógenas con este trabajo. No piensan que exista una sola
con las a menudo, enloquecedoras instituciones respuesta y sí que deba reflexionarse en como

1
Este artículo surge a partir de unas reuniones mensuales en nuestro centro. Mediante un “grupo de trabajo”, interdisciplinar y con la
productiva metodología del brainstorming, se pensó y reflexionó acerca de la salud mental y laboral. Agradecer la colaboración, en
sus aportaciones teóricas y experienciales, a nuestras trabajadoras sociales Aina Baque, Raquel Muro y Àngels Valero, al psiquiatra
Eduardo Fleitas y a las administrativas Rosa Siñol y Susanna García.

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“Trastornos mentales” del ámbito socio-laboral

enfocar las alteraciones mentales del ámbito so- A menudo, el trabajador que solicita la baja la­
ciolaboral. Es un tema complicado que los pro- boral representa al “loco” o débil de una familia.
fesionales en salud mental deben replantearse, El estandarte o portador de la locura de su nú-
decidir que hacer y no mantenerse al margen. cleo familiar, que acude a salud mental en repre-
sentación de toda ella. En soledad y en silencio
Con este trabajo se pretende poner de relieve la es aislado, culpabilizado y responsabilizado de
importancia en prestar atención a los elementos su propio disconfort emocional. En las empresas
personales de los usuarios que solicitan ayuda puede apreciarse en las víctimas del acoso labo-
por dificultades en el ámbito laboral y en la in- ral, en el agotamiento de quienes sufren el “burn
teracción persona y medio sociolaboral (5). Se out”, en las reacciones de ansiedad “desadapta-
reflexiona acerca de los “trastornos mentales” tivas” a situaciones laborables disfuncionales,
directamente relacionados con el ámbito labo- etc y un largo etc. Son personas que su­fren y
ral y aquellos cuya influencia está más en rela- en las que se les detecta un agotamiento en su
ción con el contexto social. Finalmente, a partir capacidad de adaptación y afrontamiento frente
de una comprensión sociolaboral, se plantean al estrés. Sin embargo, son también unos magní-
formas de atender, prevenir y tratar dichas pro­ ficos ter­mómetros y espejos de situaciones dis-
blemáticas. Especialmente, y debido a su preva- funcionales en las organizaciones e instituciones
lencia, los autores toman como modelo de aten- laborales. De forma global representan la conse-
ción clínica y terapéutica el acoso laboral. cuencia directa de un contexto social precario y
en crisis.
2. De como France Telekom puede representar
una forma de negar la realidad 3. “Trastornos mentales” relacionados
Apareció en septiembre del 2009 la alarma social con el ámbito del trabajo y sociolaboral
en Francia. Una serie de suicidios concatenados
En este punto se consideran dos posibles clasi-
en la empresa de telecomunicaciones y antiguo
ficaciones o formas de resituar las dificultades
monopolio en el país galo France Telekom (6)
emocionales propias del ámbito laboral. Unas,
puso en alerta al gobierno francés. Este trato
se relacionarían directamente con alteraciones
de buscar explicaciones a los suicidios y acabó
en el lugar de trabajo in situ y otras estarían en
argumentando que se trataban de hechos ais-
relación y como consecuencia, de la amplia in-
lados. Posiblemente las personas que optaron
fluencia del contexto social y laboral.
por esa salida presentaban cierta vulnerabilidad
caracterial. Sin embargo, responsabilizar a esta
a) relacionadas con el ámbito laboral
sería una forma de estigmatizar a la persona y
actuar la ceguera ante un contexto sociolaboral Se presupone, que una persona se acerca al tra-
nocivo (7). ¿Pero qué fue lo que les llevó a ello? bajo en buenas condiciones físicas y psíquicas,
¿qué significado social o laboral se le podría dar sucediendo que enferma en ese contexto. El
si es que existiese? “tras­torno mental” se inicia en la insatisfacción
laboral cuando el estrés, como sistema de regu-
En ocasiones, quien se suicida suele convocar a lación biológico, ante el entorno laboral se ha
los miembros de su entorno para hacerles “ver” hecho disfuncional (8).
algo que no pueden percibir. Son mártires y emer­
gentes de un sistema chamuscado o perjudicial El tipo de trabajo, la exigencia, la organización
que lastima a personas más sensibles y de forma de empresa, las reestructuraciones de plantilla y
exponencial, al resto del grupo. Sin embargo, no funciones, la solicitud de inmediatez, el trabajo
hace falta ser tan sensacionalista con el tema del con equipos de muchas personas… exigen, no ya
suicidio, casi a diario y en entornos más cercanos, un tipo de perfil personal, sino una constancia de
puede verse caer a compañeros que solicitan una funcionamiento personal que se piensa, puede
tregua, en forma de incapacidades laborables llegar a exceder las capacidades de adaptabili-
temporales. Son gritos, gritos mudos -y eso es lo dad “realistas” de las personas (9-11). El estrés
más triste- de desesperación ante situaciones y corresponde a una reacción física y psicológica
marcos socio-laborales desbordantes. ante un estímulo excesivo. Estar expuesto, cons-

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José Miguel Ribé, Margarida Cleris, Jesús Gracia

tantemente, a una situación de tensión puede pos con parecidas características. La consecuencia
ocasionar daños mentales y fisiológicos. última es la pérdida de la calidad asistencial (16).

Los trastornos, que suelen apreciarse con más fre- El síndrome del bore out o aburrimiento insopor-
cuencia son los “trastornos de ansiedad reactivos table en el trabajo, que lleva a la larga a una cri-
al contexto laboral”, los mixtos y los de caracte- sis existencial en que la persona está de cuerpo
rísticas somatomorfas. Estos, suelen codificarse presente y mente ausente (17). Puede confundirse
prioritariamente, según las clasificaciones al uso, con un trastorno depresivo. Suele darse en perso-
como trastornos adaptativos. Se considera poco nas, que en contra de lo que se suele pensar, son
adecuado dicho diagnóstico, ya que podría su- exigentes y con grandes capacidades. El bore out
gerir, que se trata de un déficit del paciente para es lo contrario del burn out. Se compone de bajos
adaptarse a una situación, que podríamos valorar niveles de exigencia laboral, aburrimiento y desin-
como patógena y por tanto, sin sentido el exigir a terés. La premisa de que sería genial no dar golpe
alguien que tenga que adaptarse a ella. en el trabajo es muy popular. Sin embargo, la ver-
dad es que las horas en las que no hay nada más
Es imprescindible definir bien la fenomenología que hacer que esperar a que llegue la hora de vol-
de estos “trastornos” (12). De sus descripciones ver a casa, pasan muy lentamente, con un terror
clínicas, se extraerán las formas de entender y mudo. El empleado a quien le ocurre esto termina
tratar dichas dificultades, sin acarrear más da- basando en esa insatisfacción, por paradójico que
ños que los propios del ámbito laboral. parezca, el resto de estrategias de su vida (18).

Existen otras entidades específicas, que se en- El mobbing laboral o acoso laboral, como forma
marcan y etiquetan cotidianamente en los cen- característica de estrés laboral que tiene la carac-
tros de salud mental como “trastornos adaptati- terística de ser la consecuencia de una interacción
vos sin especificar”, que van más allá del estrés social negativa, en la que el trabajador (no nece-
psicosocial inespecífico -suscitado por los con- sariamente conflictivo, ni difícil) que resulta objeto
flictos laborales o tipo de organización del tra- del mismo se ha convertido en alguien que, por
bajo- que genera malestar. Estas situaciones se alguna razón, resulta amenazante para el grupo
agrupan en forma de síndromes y se han hecho (jefe, compañeros…) que le hostiga. A veces se
un lugar en otras disciplinas. Se piensa que en acepta que el mobbing pueda ser el resultado de
salud mental, se han obviado y se las ha reduci- un conflicto. Se plantea además la duda, de si ese
do al simple diagnóstico de trastorno adaptativo, conflicto se debe al carácter de las personas impli-
en un cajón de sastre sin casi profundizar. Desta- cadas o si, por el contrario, es una consecuencia
camos a continuación, las siguientes: de la misma estructura del medio laboral. No todos
los conflictos degeneran en un acoso. También son
El síndrome burn out, o agotamiento emocional necesarios otros factores, como una deshumani-
(13-14) y aparece en personas que tratan con pro- zación de las relaciones laborales, la omnipotencia
blemas humanos (15) y suelen ser muy exigentes de la empresa y la complicidad con los individuos
en la labor que desempeñan. Aunque se piensa perversos que van tras la víctima (19). A menu-
que es un “trastorno” que no se identifica mucho, do, quienes presentan este síndrome, expresan
debido a su dificultad en detectarlo en la práctica sueños traumáticos rememorativos, aparición de
clínica habitual, es bastante frecuente. En este sín- ansiedad y pánico al recordar las situaciones vivi-
drome se suele hablar de diferentes fases, que de das en el ámbito laboral o al aproximarse geográ-
no intervenir no tendrán remedio. Así, de un primer ficamente, incluso, al lugar de trabajo, medio de
momento de entusiasmo con el trabajo en perso- transporte utilizado para ir a trabajar… En base a
nas motivadas e implicadas, se llega a una última ello, se piensa, que este tipo de síndrome, sí fuera
de apatía, en la que la distancia emocional en tan conveniente tipificarlo como un auténtico trastor-
grande que la conducta de la persona es evitativa no mental. Según los parámetros DSM, podría cali-
y de intensa inhibición. El burn out puede incluso ficarse como “trastorno de estrés postraumático”.
llegar a ser contagioso, la pérdida de la autoestima Al igual que en el bore out, se tiende a pensar que
profesional y el cuestionamiento de las propias ta- las personas que padecen de acoso laboral son
reas llevan frecuentemente a la formación de gru- más bien débiles o poco trabajadores. Queriendo

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“Trastornos mentales” del ámbito socio-laboral

desmontar algunos falsos mitos, tomando como ne al cambiar de función en la empresa, y los
punto de apoyo la casuística y otras fuentes acer- recortes de plantilla, que no solamente puede
ca de este síndrome, en general puede confirmar- suponer un impacto sobre la salud para las per-
se que suele acontecer en personas muy capaces sonas que pierden el trabajo, si no también para
y con alto rendimiento en su trabajo. quienes siguen trabajando, que pueden presen-
tar incertidumbre sobre su futuro laboral y un
La búsqueda de renta, clásicamente descrita co­ aumento de los conflictos con sus compañeros
mo la búsqueda de compensación económica al tener que repartir el incremento del volumen
tras accidente de trabajo con secuelas no graves de trabajo (ya que habitualmente se reduce más
e inexplicables. Se piensa que el estrés psicoso- la mano de obra que las exigencias del trabajo)
cial, el acoso psicológico puede actuar como un (24-26). En según que empresas, largas jorna-
accidente de trabajo clásico y originar la nueva das laborales (›40 horas semanales) (28) impo-
“neurosis de renta” (20), como una claudicación sibilitan, en algunos casos, la conciliación entre
psíquica, donde se busca una compensación ante el trabajo y la vida familiar (29). Hay también
el convencimiento de que ya no se puede traba- evidencias bien documentadas acerca del efec-
jar. Quizás podría considerarse como una secue- to en la salud mental producido por las deudas,
la al sufrimiento mental derivado de una mala dificultades financieras y los problemas para pa-
gestión de los riesgos psicosociales, tanto en las gar la hipoteca.
empresas, como en la sanidad pública. El caso
es, que podría también pensarse, que el rentis- Con las crisis económicas (30) se cierran empre-
mo puede constituirse como la última salida ante sas donde personas de avanzada edad presentan
un importante estrés laboral, difícilmente asimi- dificultades importantes en hallar otros trabajos.
lable. El deseo de indemnización no siempre se Especialmente, desde la práctica del consultorio
haya basado en una avidez por el dinero y en una se observa, como personas de ›50 años suelen
desgana para el trabajo, puede radicar también, ser los más afectados. Son personas, con am-
en un auténtico temor a convertirse en inválido y plia experiencia y sobradamente cualificados,
a no poder sostener ya a la familia. no bien­venidos en las empresas. Esta situación
conduce a muchas personas a la desesperación
Otras dificultades que pueden relacionarse con el y al malestar psíquico. ¿Qué se puede hacer
ámbito laboral es la adicción al trabajo, más cono- ante estas situaciones?, ¿deben asumirse los
cida con el término anglosajón de workalcoholic. sentimien­tos de desesperanza, malestar como
auténticos tras­tornos mentales?, ¿deben reali-
b) m
 ás allá de los riesgos del lugar de trabajo zarse informes de inspección médica “favora-
y la crisis económica bles” para que se adelante la edad de jubilación
Las crisis económicas (21-22) se asocian a un au- en personas que ya no encuentran trabajo por
mento de los problemas de salud mental y de la su avanzada edad? ¿Debemos mantenernos al
mortalidad por suicidios y por problemas asocia- margen ante estas situaciones? Se piensa que
dos al abuso de alcohol. muchos de estos de­ter­minantes están fuera del
ámbito del sistema de salud y se atienden como
Las condiciones laborales están cambiando. Así si así lo fueran.
por ejemplo observamos que con la crisis se
están produciendo expedientes de regulación
4. ¿Cómo se reciben a los usuarios
de empleo, que echan a personal cualificado,
con problemas laborales en
creando una sensación de inseguridad e inesta-
bilidad laboral a quienes mantienen su puesto
los centros ambulatorios?
de trabajo, principalmente por hacerles sentir a Resulta interesante, y se cree deba reflexionarse
las personas como prescindibles (23). También más acerca de cómo los profesionales en salud
reestructuraciones laborales que, aún redu- mental se acercan a las personas que presentan
ciendo la dedicación a la jornada laboral los em- alteraciones del ánimo en el contexto laboral,
pleados se ven obligados a realizar las mismas que solicitan un informe ya en la primera visita
tareas en menos tiempo. La reestructuración de y la baja laboral por “enfermedad”. De entrada,
la plantilla, con la adaptabilidad que ello supo- el profesional debe tener la contratransferencia

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José Miguel Ribé, Margarida Cleris, Jesús Gracia

bien trabajada o elaborada, como para no sentir región sanitaria. Principalmente las Áreas Bási-
una cierta molestia que estaría cercana a lo que cas de Atención Primaria y Salud Mental.
podría calificarse como sentimiento de rechazo.
Habitualmente, antes de recibir al paciente en
Salvado ese primer contacto con la reiterativa consulta, este ha sido visitado por su médico de
sensación, que puede tenerse, de trabajar cómo familia y se le ha recomendado que acuda a la
meros funcionarios (31) que tramitan incapaci- USL. Esta, una vez se recibe la notificación de un
dades, realizan informes para bajas laborales caso, se analiza su relación con el trabajo a partir
y practican la prescripción psicofarmacológica de la información clínica proporcionada por los
como único recurso, se pueden plantear varias médicos de atención primaria, a veces también
hipótesis que pueden servir, como punto de si no lo ha derivado el médico, por los profesio-
partida para plantearse desde donde el usuario nales en salud mental y a través de las condicio-
solicita ayuda. Se destacarían tres rutas explora- nes de trabajo proporcionadas por el trabajador
torias de acceso a la persona que se tiene delan- o trabajadora que expone, a partir de documen-
te: la dificultad que presenta estriba en él mismo tación del puesto de trabajo y de su propio re-
(eufemismo correspondiente a se lo ha buscado lato. A través de esta información se identifican
el trabajador), los factores ambientales de las posibles riesgos laborales relacionados con el
organizaciones laborables son los responsables trastorno de salud y se emiten recomendacio-
principales del malestar que la persona expresa nes dirigidas a los diversos agentes implicados,
o ambas. Se cree que hay que ir superando esa como el profesional del área básica de salud, el
dicotomía en su etiología (lo externo y lo interno) especialista en salud mental, el servicio de pre-
y prestar la atención, en su justa medida, de ma- vención o la mutua de accidentes de trabajo y en-
nera proporcional y realista, a la causalidad del fermedades profesionales de la empresa donde
malestar del usuario. está empleada la persona afectada, además de
al propio trabajador. Sin embargo, según dicha
A menudo, la forma de entender la dificultad de unidad, se constata que muchas personas que
la persona, en el ámbito laboral, condiciona tam- padecen dificultades de salud en el ámbito labo-
bién el plan terapéutico. De tal forma que, si se ral, muy a pesar que conocen donde acudir, no se
focaliza el problema del usuario en lo meramente atreven a notificar su situación por miedo a las
psicológico, como única solución, con el insis- represalias de su empresa.
tente empecinamiento en trabajar elementos ex-
clusivamente inherentes a la persona, se puede La USL, que pertenece a la red sanitaria pública,
descontextualizar al paciente de su realidad y hace un trabajo impecable y sin duda resulta ser
revictimizarlo cómo único responsable de lo que un altavoz y transmisor público e institucional
le sucede. Se piensa que en salud mental no todo del sufrimiento de muchos trabajadores. Des-
es explicable ni tratable desde los “objetos inter- de este organismo se legitiman y escuchan los
nos”, como muchos psicoterapeutas tratan, rígi- problemas de los trabajadores y se dan voz a
damente, desde el aislamiento de sus consultas. sus demandas. Aún así, a veces se observa que
Se debe prestar atención, de forma balanceada, los usuarios, que solicitan ayuda al profesional
a la realidad y la subjetividad de forma coherente en salud mental, acuden con unas altas expec-
(no hay manual para esto, es el sentido común de tativas que se verán frustradas en consulta. En
cada uno). Ambas van unidas, sin duda, pero de parte, y es algo que se ha transmitido a la USL, se
forma alterada. Ya que como dijo el soviético Lev piensa que, las recomendaciones que emiten en
S. Vygotsky, “todo lo que está dentro ha estado unos extensos y rigurosos informes, tras evaluar
antes fuera” (32). los casos en salud laboral, pueden ser poco rea-
listas y paradójicamente más centrados en las
En Cataluña existe desde 1980 una institución dificultades de la persona, como ser individual,
pionera: la “Unitat de Salut Laboral” (USL) (33- que en relación al medio. Lo mismo sucede con
34). Repartida por el territorio catalán, esta insti- las ideas y expectativas acerca del tratamiento,
tución, dispone de 9 centros que tratan de contri- que les dan algunos médicos de cabecera. Así,
buir a la interrelación entre los diversos agentes las personas acuden a los profesionales con la
de salud laboral en el territorio, en este caso la idea de que tienen síntomas depresivos y an-

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“Trastornos mentales” del ámbito socio-laboral

siosos y que, casi directamente y sin a penas 5. Manejo y consideraciones clínico-


entrevista psicodiagnóstica y terapéutica, serán terapéuticas en los “trastornos
derivados a un psicoterapeuta para poder “cu- mentales” del ámbito socio-laboral
rarse”. Se piensa que, a menudo y desde esas
expectativas, los pacientes adoptan una postura Ante nuevos valores sociales, culturales y eco-
pasiva difícilmente movible. nómicos, se presentan nuevas expectativas y
demandas que requieren nuevas ofertas y res-
Tampoco se cree que ayude mucho, en la rela- puestas. Respuestas que deben contextualizar-
ción terapeuta paciente, la burocracia que, con se en el origen de las dificultades por las que los
mansedumbre, los psiquiatras y los médicos de usuarios solicitan. Por tanto y en primer lugar,
cabecera asumen. Así, de cara a valorar una baja hay que tener presente que, aquellas dificulta-
laboral de un paciente, el Instituto de Evaluacio- des inherentes y como consecuencia de determi-
nes Médicas de Cataluña (ICAM) solicita a los nantes sociales, laborales y económicos deben
profesionales “el diagnóstico” de la situación del ser enfocadas y tratadas en su origen como en
paciente y el conocimiento de las posibilidades su propia naturaleza.
que presenta de cara a poder realizar su activi-
dad laboral. El reto que se plantea a los profe- Así y sirva de ejemplo, alguien a quien han echa-
sionales en salud mental es el de poder informar, do del trabajo con 50 años de edad, que presenta
sin asumir el rol pericial, incompatible con el de muchas deudas y no le dan trabajo en ningún sitio
clínicos terapeutas. por su avanzada edad laboral no debiera ser, de
entrada y sin un malestar añadido, subsidiario de
Con el paso del tiempo, a veces la situación del tratamiento psicofarmacológico ni psicoterapéu-
paciente no cambia mucho. Aún así, el ICAM tico. A pesar de ello, y desde la contraidentifica-
puede exigir otro informe, muy a pesar que haya ción proyectiva con su impotencia, de forma om-
transcurrido unos meses, tiempo que se piensa nipotente, es atendido para ser tratado. Desde
insuficiente como para que el paciente se haya la experiencia, pese a pautar al­gún antidepresivo
recuperado. A menudo los pacientes expresan, y/o la realización de psicoterapia el usuario no
con indignación e impotencia, la frialdad con la mejora significativamente en su malestar. Inclu-
que han sido tratados. Se sienten poco escucha- sive, el tratarle puede llegar a ser iatrogénico. El
dos, desatendidos y especialmente… deshuma- paciente, a la larga puede “acomodarse” a los
nizados en una, cada vez más, red sanitaria im- controles asistenciales con el médico y sigue
personal y burocrática. solicitando informes para que se le mantenga la
baja laboral. A veces, como salida a su situación
Debe pensarse también en la terminología que económica, pueden colocar a los profesionales
se utiliza en la medicina y en la salud mental. Por en la diatriba de ir a colisionar con demandas,
ejemplo, “medicación de/para crónicos”, “enfer- con las que no se está del todo de acuerdo ni
medad crónica”, “enfermedad mental”, “minusva- nada cómodo. Así, pueden solicitar que se favo-
lía o invalidez psíquica”… ¿Se pregunta, dedican- rezcan los informes clínicos (que se adecuen o
do un breve tiempo de la consulta, qué entiende adapten a una patología mental clasificable) de
el paciente por esos términos? ¿Le condiciona o le cara a que le otorguen una jubilación anticipada
impacta al paciente los términos que, a veces “ale- o peor aún, el reconocimiento de una minusvalía
gremente” se utilizan entre los profesionales? En psíquica parcial o total.
salud laboral sucede lo mismo. Debiera pensarse,
junto al paciente, acerca del término y connota- A pesar de dicho ejemplo, como en otros habi-
ción del concepto de “INCAPACIDAD laboral tem- tuales de la práctica diaria, se sopesan formas
poral”. Para personas que no llevan bien el tener de intervenir sobre estas demandas, que pueden
que estar de baja, ese término, si no es elaborado resultar terapéuticas. Quiere dejarse claro, que
a nivel psicoterapéutico, puede resultar, valga la la cuestión no es no atender, si no atender para
redundancia, incapacitante. Además, poniéndose devolver adecuadamente lo que para el paciente
como ejemplo el acoso laboral, ¿significaría qué la puede ser más beneficios. Y no siempre son los
persona “es incapaz” para tolerar el acoso de los psicofármacos ni la psicoterapia reglada de larga
compañeros? ¿Tiene qué ser capaz? duración. A continuación se exponen, a partir de la

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José Miguel Ribé, Margarida Cleris, Jesús Gracia

experiencia, intervenciones y aspectos comunes a gerido antes, debe recomendarse la desconexión


los problemas en salud mental del ámbito laboral temporal del ámbito laboral, de cara a evitar un
que se focalizan, especialmente por su prevalen- colapso o fase de crisis, que significaría que la per-
cia en atención primaria, en el acoso laboral. sona ha soportado demasiada presión en el ámbi-
to laboral. Esta baja debe tener una temporalidad,
Inicialmente las personas con dificultades en el ser reevaluada cada cierto tiempo y ser negociada
ámbito laboral, que no saben de entrada que les con la persona. Hay que vigilar el estancamiento,
sucede, expresan al profesional síntomas muy acomodación, por parte de la persona, con la baja
vagos como son la ansiedad y somatizaciones. y también, que no la viva como un ultimátum, ya
Este tipo de “trastornos” son en sus inicios muy que en este caso la persona no podría relajarse.
inespecíficos e insidiosos, el domingo por la no- Este desconectarse del medio laboral representa,
che, o el lunes por la mañana pueden presentar ante todo salir de un medio nocivo. A veces, pue-
dichos síntomas de forma más acuciante. Habi- de que se recomiende, estando de baja, la no co-
tualmente no lo relacionan con los determinan- municación con la empresa, incluida la telefónica.
tes laborales y los mantienen disociados (35). De Algunas empresas, con importante violencia labo-
una forma más específica, en el acoso laboral, ral, pueden llegar a utilizar la llamada telefónica o
también pueden expresarse en forma de irritabi- citar al paciente en la empresa, con algún pretex-
lidad y mal genio hacia su familia. Posiblemente to razonable (pagos, documentos pendientes…),
este ya sea un síntoma del maltrato que puedan como una forma para que éste no logre zafarse
estar padeciendo. Además de estos, sufren tam- de tanta presión (40). Cabe mencionar que, con
bién de insomnio, pérdida de alegría y fobias, con la crisis económica actual, se ha observado una
las que la persona se garantiza el alejamiento del disminución de las bajas justificadas por temor
foco de conflicto, permitiéndole así, no acudir al a perder el trabajo al reincorporarse. Este hecho
trabajo. Los síntomas más claustrofóbicos, como conlleva también que las personas no acudan de
agobio al entrar en el metro, pueden movilizar forma regular a las consultas de salud mental para
las ansiedades vividas en el medio laboral como recibir tratamiento porque deben ausentarse del
la opresión, estrecha persecución etc., etc. trabajo. A veces, incluso, algunas empresas llegan
a ponerse en contacto con los profesionales que
La detección en las fases iniciales del “trastor-
atienden a sus empleados para que se justifique
no” son esenciales, sobre todo para realizar un
su ausencia en el puesto de trabajo. Sin duda, la
abordaje precoz, antes de que la persona quede
presión externa es mayor.
más dañada y se comprometa su recuperación.
Así, en esta fase puede ser conveniente una baja
Una vez la persona está fuera del ámbito laboral
laboral para salir del medio patógeno.
puede empezar a pensar e iniciar un tratamien-
El acoso laboral suele implicar una descalifica- to psicológico. A menudo se repara en el hecho
ción profesional (36). Uno de los primeros sig- que, tras una baja de corta duración, existen
nos que presentará la persona que pida ayuda personas que se recuperan en seguida y quieren
será el de sentir dudas acerca de su capacidad volver a trabajar. En estos momentos de mejoría
profesional. Así, el sujeto empieza a dudar en hay que vigilar, ya que puede tratarse de falsas o
su trabajo, si hace bien las tareas. En estadios insuficientes recuperaciones producidas porque
más avanzados puede entrar en fases de confu- la persona está alejada del foco de estrés.
sión, sentimientos depresivos, autodepreciativos
y caída en picado de su autoestima (37). En este El tratamiento psicofarmacológico será comple-
punto la persona está con posibilidades de caer mentario y su función será mitigar síntomas de
en una depresión clínica. predominio ansioso. Se recomienda, explicar
que el tratamiento es temporal y que no es la
Una cuestión importante, a tener en cuenta, es solución a sus dificultades en el ámbito laboral.
que el daño que pueda tener una persona en el Es importante explicar esto. Se observa como
trabajo está en relación con la duración del acoso personas, desde una impotencia enorme ante un
y el tiempo en que una persona se siente sola y sin sentimiento de injusticia laboral, son incapaces
posibilidades en sus ganas de proponer y hacer de salir de ahí, sufren y demandan muy ansiosa-
proyectos (38-39). Nuevamente, si no se ha su- mente una ayuda casi mágica a sus problemas.

20
“Trastornos mentales” del ámbito socio-laboral

Desde la dificultad de los profesionales a la orientar su actividad laboral y su identidad pro-


contención, muchas veces se “empastilla” a las fesional. Querer reincorporarse de una manera
personas, no es posible contener su situación y apresurada, salir de esta situación de confusión
no se puede pensar junto a ellos acerca de que e inactividad responde a sentimientos de necesi-
poder hacer con los determinantes psicosocia- tar hacer algo, restablecer su autoestima.
les que, en parte, le han llevado a pedir ayuda.
Además, y peor aún, poniendo tanto el acento Posteriormente, en una fase de resolución y re-
en la medicación se descuidan los factores psi- orientación laboral se advierte que es difícil volver
cosociales. El tratamiento psicoterapéutico debe al anterior trabajo. Se piensa que deben darse una
ser realista y con objetivos muy claros. Deben va- serie de circunstancias favorables que consisti-
lorarse las expectativas del paciente y fijar unos rían en:
objetivos claros y limitados en el tiempo. a. Haber podido superar los sentimientos de
ansiedad y depresivos.
En psicoterapia se permite que la persona expre-
se todo lo sufrido en su lugar de trabajo, todo b. Cambiar de lugar en la empresa, por ejem-
lo que allí, en un ambiente de confusión no se plo de función o departamento.
ha podido expresar. Se legitimiza su sufrimiento c. No encontrarse bajo la responsabilidad del
(que suele expresarse en forma de rememoracio- mismo jefe.
nes oníricas), se pone sobre la mesa los posibles
d. Que estos cambios sean estables, no sola-
determinantes externos que le han traído a la
mente en el inicio de la reincorporación.
consulta y se trata de desculpabilizar sus senti-
mientos de culpa y masoquistas. e. Que exista un vínculo con el comité de em-
presa y recursos humanos. Que sean cons-
La culpa y sus manifestaciones son recurrentes cientes de la situación de la persona.
en este tipo de “trastornos”. Es importante, en
el acoso laboral, vigilar que los profesionales no Si se trata de una empresa más pequeña la rein-
revictimicen al paciente. Se deben tratar los au- corporación será más difícil, ya que:
torreproches, las conductas autopunitivas y ma- a. El jefe suele ser el mismo dueño.
soquistas. Así, la culpa se observa en personas
que sienten que han dañado a su familia, que no b. No hay gran división de funciones dentro de
debían haber abandonado el puesto de trabajo, la empresa, ni muchos puestos para recolo-
que piensan que se merecen lo que les pasa y que car a la persona afecta.
sienten malestar por no estar activos. Se piensa, A veces, “rendirse”, retirar las denuncias a la em-
que esta culpa “por no estar activos” es en rea- presa, no asistir a los juicios por sentirse satura-
lidad un desplazamiento por la tarea más urgen- do, y querer “olvidarse” de volver a la empresa es
te que el paciente debe realizar, y por la que se considerado por muchos pacientes como un sig-
puede sentir más confuso: la tarea, el trabajo de no de debilidad y de triunfo por quien les hostiga.
reorientar su actividad laboral y su identidad pro- Se piensa que, tanto si la persona decide seguir
fesional. Acostumbran también, a negar o reprimir con contenciosos legales con la empresa de cara
su propia hostilidad en la relación transferencial. a regresar, como si no, debe acompañársela. La
Es importante que identifiquemos en la consulta, “rendición” elaborada, la renuncia a una lucha
sus propios sentimientos de agresividad. “contra un gigante” puede ser una salida digna
y una oportunidad para volver a empezar sin res-
En adelante, se debe ir ayudando a la persona quemores ni secuelas en otro puesto de trabajo.
a restablecer su identidad (41) como profesional
y como persona con competencias. Algo que se Las intervenciones psicoterapéuticas como psi-
percibe, de forma muy notable en la clínica, es cofarmacológicas deben ir acompañadas, por no
que las personas que se encuentran en proce- decir precedidas, por asesoramiento legal (42)
so de recuperación y toma de conciencia acerca (más si hay denuncias o juicios), sindical o de
de la imposibilidad de reincorporarse al mismo recursos humanos, se debe poner en contacto al
puesto de trabajo suele transitar por momentos paciente con la USL, inspección laboral... Esto es
de importante confusión respecto a como re- algo que no se hace en consulta muchas veces

21
José Miguel Ribé, Margarida Cleris, Jesús Gracia

por desconocimiento. Estas indicaciones, orienta- la resistencia y falta de conciencia preventiva em-
ciones o sim­plemente, este saber derivar a otros presarial como una de las dificultades más impor-
servicios resultan esenciales, no solamente por tantes para el abordaje de estos casos (43).
la efectividad (en la actuación de dichos organis-
mos), y en la prevención, sino también por lo que Así, hoy en día se sabe que un 85% de las empre-
se le transmite (el factor psicosocial) a los pacien- sas viola la ley de prevención de riesgos labora-
tes. En este tipo de indicaciones los profesionales les (44). Sólo el 16% de las empresas españolas
de la salud mental deben contar con la ayuda y el tiene algún protocolo para tratar la intimidación y
trabajo interdisciplinar de trabajo social. el acoso. Los riesgos de acoso moral o sexual se
ignoran en la mayoría de los convenios. La ley de
La denuncia en este tipo de “trastornos” suele prevención de riesgos laborales, de 1995, exige al
aparecer tarde o temprano. La denuncia que in- empresario garantizar la seguridad y la salud de
terponen los pacientes puede contribuir de di- los trabajadores en todos los aspectos relaciona-
versas formas: dos con el trabajo. Eso incluye los riesgos psicoso-
a. U
 na forma de hacer intervenir a inspección ciales y, con ellos, la violencia laboral: agresiones
laboral, que puede solicitar una valoración verbales o acoso sexual, pero también órdenes
psicosocial a la empresa. contradictorias o aislamiento. Alrededor del 6%
de los trabajadores españoles sufre algún tipo de
b. Puede significar una forma de acabar con la violencia laboral, y el 28% padece habitualmente
empresa, de “cortar” el vínculo. A menudo, conductas violentas de baja intensidad, según la
cuando la persona la realiza puede pensarse V Encuesta Nacional de Condiciones de Trabajo de
que quiere irse definitivamente, que no so- 2008 (45). A pesar de dichas indicaciones los ries-
porta más la tensión. Suelen tener la creencia gos psicosociales y la prevención de los mismos
que tras la denuncia serán despedidos. siguen sin evaluarse de forma seria y profunda.
Aunque en los últimos años sí se ha avanzado en
c. La denuncia puede también no acabar en un
la evaluación y la prevención de los accidentes la-
despido y ganar el juicio contra la empresa.
borales todavía falta mucho para que se evalúen
En estos casos, la sentencia a su favor, puede
correctamente los psicosociales. Uno de los moti-
representar una restauración de su dañada
vos es que siguen siendo poco “visibles”.
autoestima, de sentirse rehabilitado profe-
sionalmente y porque no, de recibir también
Se piensa que todas las empresas habrían de
una compensación económica. En estos ca-
tener su propio protocolo dirigido a todos los
sos, aunque el paciente puede inicialmente
empleados, a la propia actuación profesional, a
sentirse bien, puede presentar una retrau-
las condiciones de trabajo, a las relaciones inter-
matización si no es despedido, debe volver
personales y a la influencia de los factores am-
a reincorporarse a la empresa, exponiéndose
bientales. Para dicha función es necesario que se
nuevamente a los conflictos o personas que
sensibilice desde las diferentes instituciones a la
le llevaron a consultar en su momento.
población en general y a todos los profesionales
d. La denuncia, social y legalmente, es una for- implicados (salud, jurídico, sindicatos, recursos
ma también de sumarse al sufrimiento de humanos, recursos sociales…). Es importante re-
muchas otras personas o de quienes pueden marcar la necesidad de impulsar, ahora más que
padecer conflictos o malestar laboral en el nunca, el papel de los servicios de prevención de
futuro. riesgos laborales para que realmente estén inte-
grados dentro de las estrategias y de gestión de
las empresas y de las organizaciones.
6. Promoción y prevención de la salud
mental en el ámbito socio-laboral Es también necesario mejorar la formación de los
En el contexto de la elaboración de una guía para profesionales de la salud laboral con el fin de aten-
la vigilancia de la salud mental relacionada con der adecuadamente los retos que la crisis supone
los factores de riesgo psicosocial se realizó en Ca- para la salud de los trabajadores y de las trabajado-
taluña un estudio entre profesionales sanitarios ras. Especialmente y desde Atención Primaria (46)
de los servicios públicos, en el que se identificó debe manejarse con sentido común las demandas

22
“Trastornos mentales” del ámbito socio-laboral

de la población. Aquellas demandas con “sínto- El profesional debe también, tras la no indicación
mas” mentales en las que existen detrás situacio- de tratamiento, vehiculizar la demanda del usuario
nes sociales injustas, que exigen un análisis y una hacia cauces donde tenga sentido ayudarle. Para
solución colectiva, deben ser enfocadas en dicho ello los profesionales en salud mental deben tra-
origen. En estas, el profesional debe contener(se) bajar bajo modelos interdisciplinares y en equipo.
al usuario explicándole, razonadamente y empá- Deben salir del aislamiento, que a veces constitu-
ticamente, que la situación por la que pasa pue- yen algunos centros, conocer otras posibilidades
de ser temporal, que entiende su malestar y que, e interesarse por organismos que tiene más expe-
aunque no lo crea, la forma con la que puede ayu- riencia en la ayuda a personas afectas por proble-
darle es hacerle entender que su sufrimiento está mas laborales. De alguna forma, el proceso tera-
estrechamente vinculado a unos determinantes péutico debe ser holístico y surgir de la integración
que están fuera de la cobertura sanitaria. Si se de diferentes especialidades profesionales.
decidiese actuar sólo a nivel psicofarmacológico,
psicoterapéutico y con la realización de informes Ante dificultades en el trabajo, antes o durante
-que a menudo acompañan dichas intervenciones la intervención del especialista, se insiste desde
terapéuticas-, se puede caer en un reduccionismo la USL, que se afronte la situación ante los res-
psicológico o biológico de fenómenos y realidades ponsables de recursos humanos. Que se solicite
que son mucho más complejas. En estos casos, asesoramiento y soporte de un representante
desde Atención Primaria, como puerta de entrada sindical para gestionar el problema con el respon-
al sistema sanitario, es imprescindible que se co- sable de Recursos Humanos (RRHH) que según la
nozca la compleja interacción dialéctica entre los normativa vigente, es uno de los responsables de
individuos y la estructura social. De esta forma se que las condiciones de trabajo no se conviertan
puede actuar en ella en una adecuada perspectiva en factores de riesgo para la salud de los trabaja-
de curación. Es importante también que Atención dores. Posteriormente la persona afectada debe
Primaria se coordine con Salud Mental, ya que a ponerse en contacto con un abogado. En caso de
menudo se percibe como desde Atención Primaria no acabar con la situación causante de estrés la-
se transmiten unas expectativas de curación, des- boral se recomienda, en última instancia, cursar
de lo psicofarmacológico y lo psicoterapéutico a la denuncia o solicitar la intervención de la auto-
nivel individual, que entorpece y dificulta el seña- ridad laboral pertinente, en España, la Inspección
lamiento y comprensión, de la también dificultad de Trabajo y la Seguridad Social. Análisis realiza-
de los pacientes desde el horizonte y explicación dos desde la USL muestran que, tras las notifica-
etiológica de la dimensión social (47). ciones de dicha institución a las empresas donde
sucede los factores de estrés se producen con el
La prevención cuaternaria y la no indicación de tiempo cambios en los puestos de trabajo según
tratamiento es la mejor solución. La cuaternaria, las recomendaciones realizadas desde la USL.,
término desarrollado por Marc Jamoulle, es “la algo que se interpreta como algo positivo.
actividad médica que evita o atenúa las conse-
cuencias de la actividad innecesaria o excesiva El impacto de las crisis económicas sobre la sa-
del sistema sanitario” (48-49). Cuesta mucho, lud (50) depende en buena medida del gasto en
seguro, pero hay que ir implantándola, especial- políticas de protección social, de manera que es
mente en Atención Primaria. Si se sigue aten- superior en los países, como España, con gastos
diendo todas las dificultades sin demanda clara muy bajos. Por ello, como apunta el grupo de Lu-
y justificable “chamuscaremos” aún más el sis- cía Artazcoz y colaboradores, es fundamental que
tema sanitario. Como enseña el psiquiatra Ortiz, los gobiernos mantengan o incluso aumenten los
no se debe enmarcar en lo psicológico y en lo ín- gastos en protección social. Desde el punto de
timo asuntos de orden ético y de ámbito público. vista de la salud pública son necesarias políticas
Tampoco debe propugnarse un adaptacionismo activas de ocupación, pero se tiene que tener en
personal frente a situaciones sociales injustas. cuenta que el efecto beneficioso del trabajo remu-
Además, quiere señalarse que, la indicación de nerado sobre la salud depende de las condiciones
no tratamiento constituye per se, en el marco de de trabajo y en el contexto actual es probable que
la entrevistas con el paciente, una intervención muchas personas en situación de vulnerabilidad
psicoterapéutica en toda regla. económica se vean obligadas a aceptar condicio-

23
José Miguel Ribé, Margarida Cleris, Jesús Gracia

nes de trabajo duras y situaciones de explotación, las consultas, cada vez más, los usuarios son más
hecho que los agentes sociales habrían de vigilar exigentes con sus demandas y resulta más difícil
estrechamente para evitar que se produzcan. atenderles debido a que sus requerimientos co-
rresponden a malestares propios de la vida (52),
contratiempos que pensamos deben seguir su
7. Reflexión final
curso, sin censurarlos con medicación y sin prome-
Debería recordarse que el Sistema Sanitario no sas de psicoterapias mágicas. A todas las perso-
está para dar soluciones a todos los problemas nas puede irles de fábula ir a un psicoterapeuta.
de las personas. Menos aún cuando el origen de Siempre van a ver elementos internos de las per-
las dificultades son de índole claramente social, sonas que puedan ser explorados como también
económica o laboral. A la larga, si se trata de dar “citocromos” que funcionen mejor con otros anti-
respuestas no realistas a sentimientos reactivos depresivos todavía no utilizados. ¿Dónde se deben
y proporcionales a situaciones o acontecimien- plantar los profesionales en el tratamiento de las
tos que expliquen dichos sentimientos el resul- personas? Hay que saber donde se trabaja (la pú-
tado puede ser peor (iatrogenia, estancamien- blica), los recursos internos y externos de los que
tos tera­péuticos, contratransferencias negativas, se dispone (limitados), el origen principal del ma-
rela­cio­­nes sado-masoquistas médico-usuario…). lestar (¿biológico, psicológico o social?), trazar un
Pa­ra dichas demandas es el estado y la sociedad objetivo terapéutico (foco), limitado (con tempora-
quien debe responder. No debe Sanidad salvar lidad) y trabajar con sentido común (que se pier-
los puntos ciegos de una sociedad y un sistema de). Si no se presta atención a estos elementos se
socio-laboral precario. No está para ello, ya que corre el riesgo de mantener una saturación masiva
luego, quienes realmente son subsidiarios y con de los servicios en salud mental, especialmente,
plena indicación de tratamientos psicológicos y en detrimento de la atención a personas con gra-
médicos tienen que esperar debido al desborda- ves trastornos mentales severos.
miento de demandas sin motivos reales (51).
Se piensa que algunos medios de comunicación, 8. Referencias bibliográficas
desde el poder de influencia que tienen sobre la
opinión de la ciudadanía, buscando únicamente 1. R
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la noticia visceral y de mayor impacto, no favore- para la vigilancia de la salud mental rela-
cen en la educación social y en el saber hacer un cionada con los factores de riesgo psicoso-
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formación que vierten en los medios, puede estar ca. Generalitat de Catalunya. Accesible en:
también descontextualizada. Por ejemplo, se con- www.gencat.cat/salut/depsalut/html/ca/
sidera que no hay lugar a la duda respecto que la dir2143/riscpsicocompl2010.pdf
crisis económica está afectando, mediante los re- 2. Kalimo R, El-Batawi M., Cooper CL. Los facto-
cortes sanitarios en recursos asistenciales (pisos res psicosociales en el trabajo y su relación
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de mayor tiempo en terapia…), a personas con pa- de la Salud; 1988.
tologías mentales graves. Lo que no se está tan de 3. Menzies I. Containing anxiety in institutions.
acuerdo es que se diga, con cierta ligereza y bana- London: Free Association Books; 1988) Ley-
lidad, que la crisis económica y sus consecuencias mann H. Mobbing. La persécution au travail.
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nas” pueda producir siempre trastornos mentales.
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fuera más adecuado decir bajo ánimo o malestar. velopment. Accesible en: URL: www.dsm5.
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Contacto:
José Miguel Ribé Buitrón • Centro de Salud Mental de Adultos Sant Andreu.
Fundació Vidal i Barraquer (www.fvb.cat/) • C/ Sagrera 179, 1r. 08037 Barcelona.
Tel.: 93 340 86 54 • Fax: 93 349 54 98 • jribe80@hotmail.com

• Recibido: 27-7-11.

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