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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACIÓN UNIVERSITARIA


DE CIENCIA Y TECNOLOGÍA
UNIVERSIDAD POLITECNICA TERRITORIAL
“JOSE ANTONIO ANZOATEGUI”
DIVISIÓN EXTENSIÓN ANACO

AUDITORIA

Profesor: BACHILLER:

Clay Arzola FRANCELYS LATOCCA

CI: 235.456.818

SECCION: CN04-V317
Que es auditoria ?

Consiste en realizar un examen de los procesos y de la actividad económica de


una organización para confirmar si se ajustan a lo fijado por las leyes o los buenos
criterios. Por lo general, el término se refiere a la auditoría contable, que consiste
en examinar las cuentas de una entidad.

Auditoria como profesión?

La profesión de auditor es una de las más demandadas en la sociedad sobre todo


en épocas de crisis económica en las que las empresas se preocupan
especialmente por analizar minuciosamente sus cuentas y procesos contables con
el fin de optimizar bien los recursos, evitar desajustes económicos y ser
responsables y transparentes. El trabajo del auditor de cuentas es precisamente el
de verificar y dictaminar que los libros contables de una empresa o institución son
fiables y veraces. El auditor comprobará que todo cuadra y se asegurará que no
existen incongruencias o indicios de fraude.

En las empresas grandes es habitual la existencia de un departamento de


auditoría interna, pero cada vez más el auditor se convierte en una figura esencial
también en las medianas y pequeñas empresas. "La auditoría de hoy en día
excede el ámbito financiero y contable, pues la complejidad, el volumen y la
internacionalización de los negocios exigen un conocimiento muy profundo de las
industrias, las normativas y los mercados"

Lo cierto es que la labor del auditor va más allá del simple control de cuentas y
hoy se valora especialmente su papel como asesor que ayuda a la compañía a
identificar deficiencias y errores en las cuentas y a optimizar todo su proceso
contable

Naturaleza de la auditoria?

“Auditar es un proceso de acumular y evaluar evidencia, realizado por una

Persona independiente y competente acerca de la información cuantificable de

Una entidad económica específica con el propósito de determinar e informar

Sobre el grado de correspondencia existente entre la información cuantificable

Y los criterios establecidos.”

Un concepto de auditoria más comprensible sería el considerar la auditoria

Como un examen sistemático de los estados financieros, registros y


Transacciones relacionados para determinar la adherencia a los principios de

Contabilidad generalmente aceptados, a las política de dirección o a los

Requerimientos establecidos.

Los estados Financieros publicados, son una serie de afirmaciones y

Manifestaciones asegurando tener una adecuada presentación de la posición

Financiera en fechas específicas y de los resultados de las operaciones para

Determinados periodos de tiempo.

Una auditoria de estas manifestaciones es un esfuerzo para determinar si los

Estados financieros están adecuadamente presentados en las fechas y

Periodos indicados. En cualquier presentación de información financiera –

Interna o externa- o en la ejecución de las actividades de control interno, las

Personas pueden ser culpables de “…ignorancia, influencias personales,

Interés propio, negligencia o incluso de deshonestidad” el principal objetivo de

Una auditoria es eliminar estas cinco causas de distorsión de los hechos

Diferencia entre auditoria y contabilidad?

La Auditoria y la Contabilidad tienen diferencias y similitudes, aunque muchos


contadores utilizan los dos términos indistintamente. Las dos palabras implican
procesos separados, que una empresa debe realizar para preparar y supervisar
sus datos financieros, y garantizar que la información financiera presentada a los
usuarios, sea confiable, integra y objetiva.

La contabilidad proporciona información financiera para los usuarios de dicha


información (Internos o externos), y la auditoria garantiza y asegura que dicha
información es confiable y que ha sido preparada de acuerdo con las normas y
reglamentos establecidos.

CONTABILIDAD:

El principal objetivo de la contabilidad es proporcionar la información financiera de


una empresa o entidad, la cual debe ser clara, completa y fiable sobre sus
actividades económicas, y la situación de sus activos y pasivos Estas
informaciones se presentan en forma de informes financieros, como el balance
general, estado de resultados, estado de cambios en el patrimonio neto (también
llamado estado patrimonio neto), y el estado de flujos de efectivo.
Los usuarios internos de los informes contables son gerentes, propietarios y
empleados. Los usuarios externos de los informes contables son los
inversionistas, acreedores y el gobierno.

Contabilidad en el caso de la teneduría de libro, implica el manejo de las


transacciones financieras diarias de una empresa. Esto incluye funciones muy
diversas que van desde los registros de las entradas de los ingresos, como
también los pagos salientes. Algunas de las funciones incluyen las cuentas por
cobrar, conciliación bancaria, Preparación de los estados financieros, cuenta por
pagar, tesorería, entre otras

AUDITORIA:

La auditoría es el proceso de examinar los estados financieros y los registros


subyacentes de la empresa con el fin de emitir una opinión sobre si los estados
financieros están presentados razonablemente y han cumplido con las normas
contables (NIC/NIIF). Por lo general, las auditorías financieras se realizan a
petición de una empresa para garantizarle la integralidad y objetividad de la
información a los diferentes usuarios (es decir, internos y externos). El principal
objetivo de una auditoría es llevar a cabo la evaluación a fondo de los registros
financieros de una empresa y proporcionar los informes con recomendaciones de
mejora sobre la base de esa evaluación.

El proceso de auditoria es un examen en profundidad de cada transacción


financiera realizado por un contador o firma de contabilidad, cumpliendo las
normas de auditoria ( NIAS/NAGAS), y abarca el total de las cuentas contable al
cierre de año. Tras la finalización de la auditoría independiente, el auditor culmina
con la emisión de un documento, denominado dictamen, en el cual se expresa su
opinión acerca del cumplimiento de la información financiera que evalúa con las
normas de contabilidad aplicables a la misma, si éstos son razonablemente
presentados o no".

"Diferencias"

Hay varias diferencias entre la contabilidad y la auditoría. Una diferencia


importante es que la auditoría comprueba el proceso de contabilidad para
determinar su validez y razonabilidad, y si esta se realiza de acuerdo a las normas
contables establecida. Otra diferencia es: que la contabilidad es un proceso diario,
mientras que una auditoría se suelen realizar anualmente o trimestralmente. Otra
diferencia es que la contabilidad es compilada por los empleados de la empresa,
mientras que una auditoría se realizar por un auditor o firma independiente, sin
vínculos financieros con la empresa, aunque en muchas empresas existe el
departamento de auditoría interna, pero la función de estos auditores es verificar
los cumplimientos del control interno y las políticas de la empresa.

TIPOS DE AUDITORIAS?

Auditoría interna

Esta clase de auditoría se realiza en las organizaciones para dar garantías a la


administración sobre el correcto manejo de los recursos, procedimientos contables
y financieros. Es parte fundamental del control interno, por consiguiente puede
ayudar a plantear soluciones ante las problemáticas encontradas. Este tipo de
auditoría es realizada por una persona vinculada a la empresa.

Auditoría externa

A diferencia de la auditoría interna esta se realiza por parte de un profesional


independiente a la empresa, puede ser por requerimiento legal, con el fin de
auditar distintos aspectos contables y en algunos casos administrativos.

Auditoría administrativa

Busca evaluar la eficiencia de la administración por medio de un análisis detallado


a los procedimientos y los resultados obtenidos, además de indagar sobre la
correcta aplicación y seguimiento de las políticas internas.

Auditoría financiera

Se usa para revisar y examinar los estados financieros de una empresa con el fin
de dictaminar la transparencia y correcta aplicación de la normatividad vigente.

Auditoría operacional

Este tipo de auditoría busca mejorar la eficiencia y eficacia con respecto a la


productividad, por medio de un análisis a los procedimientos utilizados, dando
como resultado un informe de sugerencias o recomendaciones para mejorar.

Auditoría de sistemas o informática

Esta auditoria se lleva acabo para evaluar la seguridad y eficacia de los sistemas
informáticos utilizados en una empresa.
Auditoría contable

Está estrechamente relacionado con la auditoría financiera, pero esta busca un


análisis más generalizado sobre todas las cuentas que intervienen en la
contabilidad de una empresa.

Auditoría integral

Busca un análisis del desempeño de la organización por medio de evaluaciones


realizadas a los procedimientos, control interno, objetivos e información financiera.
En otras palabras la auditoría integral reúne distintos tipos de auditoría para
generar un informe más global sobre varios aspectos de la empresa.

Auditoría gubernamental o pública

Esta clase de auditoría se aplica en las entidades públicas, en algunos países está
a cargo del tribunal de cuentas. Busca determinar la eficiencia y transparencia con
la que se manejan las entidades públicas y sus recursos.

Auditoría fiscal

Es de carácter tributario y el objetivo es verificar que se están pagando los


impuestos por el monto correcto y de la manera adecuada.

Auditoría forense

En términos financieros la auditoría forense se encarga de ayudar en la


investigación de fraudes o actos inconsistentes voluntarios que evaden tanto la
normatividad de la empresa como las leyes impuestas por el gobierno. Se ejecuta
por medio de técnicas de investigación forense enlazadas con conocimientos y
destrezas contables, puede ser usada como material probatorio ante los
tribunales.

Auditoría de Inventarios

En resumen esta clase de auditoría compara los inventarios físicos con los
contables para determinar si existen diferencias y encontrar la causa del error, si
se presenta.

Auditoría Ambiental

El objetivo de esta auditoría es determinar el impacto ambiental que se genera por


parte de alguna entidad u otro órgano social, para dar soluciones o prevenir daños
con respecto al medio ambiente.
Auditoría Médica

Tiene como objetivo analizar la calidad en la prestación del servicio de salud a la


población por parte de clínicas y hospitales, se lleva a cabo por medio de datos
estadísticos y evidencia ocular.

Finalmente la auditoria es un aparte importante en el control interno de una


empresa, pues ayuda a preservar los bienes tanto materiales como intelectuales,
cual quiera que sean los tipos o clases de auditoria que se usen siempre tienen la
misma finalidad y es el de evaluar distintas áreas o procedimientos para hallar
falencias y brindar posibles soluciones, por lo tanto es un tema que no se puede
dejar pasar.

Tipos de auditores (internos y externos)

1. Auditoria externa o auditoria legal

Examen de las cuentas anuales de una empresa por un auditor externo,


normalmente por exigencia legal.

La definición de auditoria externa que recoge L. Cañivano, de aceptación


generalizada, es la siguiente: «El objetivo de un examen de los estados
financieros de una compañía, por parte de un auditor independiente, es la
expresión de una opinión sobre si los mismos reflejan razonablemente su situación
patrimonial, los resultados de sus operaciones y los cambios en la situación
financiera, de acuerdo con los principios de contabilidad generalmente aceptados
y con la legislación vigente».

Algunos autores, como J. L. Larrea y A. S. Suárez, califican la auditoria como


externa por su condición de legalidad y porque el auditor es ajeno a la empresa;
mientras que otros autores lo hacen por los efectos que ella produce frente a
terceros (inscripción en el Registro Mercantil).

2. Auditoria interna

Control realizado por los empleados de una empresa para garantizar que las
operaciones se llevan a cabo de acuerdo con la política general de la entidad,
evaluando la eficacia y la eficiencia, y proponiendo soluciones a los problemas
detectados.
La auditoría interna se puede concebir como una parte del control interno. La
realizan personas dependientes de la organización con un grado de
independencia suficiente para poder realizar el trabajo objetivamente; una vez
acabado su cometido han de informar a la Dirección de todos los resultados
obtenidos. La característica principal de la auditoria interna es, por tanto, la
dependencia de la organización y el destino de la información. Hay autores, como
E. Hevia, que la equiparan más a aspectos operativos, definiéndola como «el
órgano asesor de la dirección que busca la manera de dotar a la empresa de una
mayor eficiencia mediante el constante y progresivo perfeccionamiento de
políticas, sistemas, métodos y procedimientos de la empresa»

3. Auditoria operativa

Revisión del sistema de control interno de una empresa por personas cualificadas,
con el fin de evaluar su eficacia e incrementar su rendimiento.

La auditoría operativa consiste en el examen de los métodos, los procedimientos y


los sistemas de control interno de una empresa u organismo, público o privado; en
definitiva, se fundamenta en analizar la gestión.

También se conoce como auditoria de gestión, audito- ría de las «tres es»
(economía, eficacia y eficiencia), auditoria de programas, etcétera.

La Intervención General de la Administración del Estado (IGAE) define la auditoria


operativa como la revisión sistemática de las actividades de una entidad,
efectuada por personal cualificado con el propósito de valorar las «tres es»
(eficiencia, eficacia y economía) en el cumplimiento de los objetivos. La auditoría
operativa no está regulada por la ley, ya que su objetivo es verificar la eficiencia de
la gestión empresarial; su examen va más allá de los estados financieros, y los
resultados de la actuación del auditor son para uso interno y privado.

4. Auditoria pública o gubernamental

En España, la actividad auditora de organismos e instituciones públicas es


desarrollada por el Tribunal de Cuentas (TC) creado por Ley Orgánica en 1984,
que depende de las Cortes Generales, con independencia del Ejecutivo.

La función de la auditoria pública, equivalente a la auditoria externa privada, es


competencia del TC, sin perjuicio de las competencias atribuidas en la materia a
las CC AA a través de sus Tribunales de Cuentas. Así mismo, el control financiero,
semejante al control interno privado, corresponde a la Intervención General de la
Administración del Estado (IGAE), dependiente del Ministerio de Economía y
Hacienda, según la Ley 38/1988 de Haciendas Locales que creó la denominada
intervención con atribuciones sobre la fiscalización de las cuentas públicas.
Existen a su vez otros organismos estatales que realizan esta función, como son
la Intervención Militar la Intervención General de la Seguridad Social.

5. Auditoria de sistemas

En esta modalidad podemos incluir lo que se conoce por auditorias especiales,


como la auditoría medioambiental, auditoria informática y otras formas que
empiezan a tomar nombre (económico-social, ética y otras). Especial relevancia
ocupa la auditoría medioambiental, debido a la creciente conciencia social sobre
asuntos relativos a la conservación y preservación de la calidad medioambiental
(se trata de uno de los condicionantes actuales de la actividad humana que no
había en épocas pasadas).

En este sentido, una de las contingencias que ocupa un lugar más significativo en
las empresas es, precisamente, la de tipo medioambiental, debido a las presiones
socia- les, a las propias administraciones con

Legislaciones cada vez más rígidas, a los consumidores que exigen mayor calidad
y al personal de las empresas por motivos de seguridad.

A este efecto, el ICAC ha creado la Resolución de 25 de marzo de 2002, por la


que aprueba normas para el reconocimiento, valoración e información de los
aspectos medioambientales en las cuentas anuales.

se aprueban normas para el registro, valoración e información de los derechos de


emisión de gases de efecto invernadero. Como quiera que dichas normas crean la
existencia de un nuevo inmovilizado inmaterial, serán objeto de análisis en el
citado inmovilizado.

Dado que el proceso de información de una entidad está condicionado a los


sistemas informáticos, se hace necesario el análisis de los mismos mediante lo
que se conoce como auditoria informática. El objetivo general y el alcance de una
auditoria no cambia en un entorno de sistemas informáticos (CIS) o proceso
electrónico de datos (PED); pero el ordenador procesa y almacena la información
de forma diferente a la que se hubiese hecho manualmente, y este hecho afecta a
los procedimientos utilizados por la empresa para lograr un buen control interno.
Del mismo modo, los procedimientos seguidos por el auditor se ven afectados por
un entorno informatizado.
Analogías y diferencias

Dado que la función de la auditoria pública equivale a la auditoria externa, la


principal característica que comparten los otros tipos de auditorías (externa,
interna y operativa) es la independencia del auditor al emitir su opinión o evaluar la
gestión de la empresa.

En la auditoria interna, esta autonomía se ha cuestionado, ya que existe una


relación laboral con la empresa. Para salvaguardar el principio de independencia,
el auditor interno debe ocupar un nivel jerárquico en la empresa suficiente para
que se sienta respaldado en su actuación.

Normas de auditorías generalmente aceptadas?

Las Normas de Auditoría Generalmente Aceptadas (NAGAS) son los principios y


requisitos que debe cumplir el auditor en el desempeño de sus funciones de modo
que pueda expresar una opinión técnica responsable, también son llamadas
Normas Técnicas de Auditoría.

Clasificación de las Normas de Auditoría Generalmente Aceptadas

Estas normas pueden diferir de país en país (por lo general son dictadas por el
colegio de contadores de cada país) pero, en general, son 10 y se agrupan en tres
grandes renglones:

Normas personales o generales

Normas relativas a la ejecución del trabajo

Normas relativas a la preparación de los informes

1. Normas personales o generales

Regulan las condiciones que deben reunir el auditor de cuentas y su


comportamiento en el desarrollo de su actividad.

Entrenamiento y capacidad profesional: La auditoría debe ser ejecutada por un


personal que tenga el entrenamiento técnico adecuado y criterio como auditor. No
basta con la obtención del título profesional de contador público, sino que es
necesario tener una capacitación constante mediante seminarios, charlas,
conferencias, revistas, manuales, trabajos de investigación, etcétera, y el
entrenamiento en el campo.
Cuidado y diligencia profesional: Debe ponerse todo el cuidado profesional en la
ejecución de la auditoría y en la preparación del informe. El debido cuidado
impone la responsabilidad sobre cada una de las personas que componen la
organización de una auditoría independiente y exige cumplir las normas relativas
al trabajo y al informe. El ejercicio del cuidado debido requiere de una revisión
crítica en cada nivel de supervisión del trabajo ejecutado y del criterio empleado
por aquellos que intervinieron en el examen. La capacidad y cuidado profesional
es una norma común a la profesión del contador público y a todas las profesiones
que se desprenden del carácter profesional de la actividad de auditoría. Si bien es
cierto que un profesional no puede ser considerado infalible y, por lo tanto, no se
le puede exigir éxito, se debe evaluar la capacidad para el desempeño de las
actividades profesionales o su negligencia. En efecto, la actividad profesional, en
tanto humana, es falible y se debe considerar que el común de las personas no
tiene definido el concepto del alcance de auditoría que se realiza sobre la base de
muestras, evidencia selectiva y, sobre todo, de la opinión cuando se refiere a la
presentación razonable de la situación financiera. La razonabilidad financiera
depende del juicio y el juicio es susceptible de error.

2.Independencia: Para que los interesados confíen en la información financiera


este debe ser dictaminado por un contador público independiente que de
antemano haya aceptado el trabajo de auditoría , ya que su opinión no este
influenciada por nadie, es decir, que su opinión es objetiva, libre e imparcial.

Normas relativas a la ejecución del trabajo

Su fin es determinar los medios y las actuaciones que aplican al auditor en su


ejercicio.

Planeación y supervisión: La auditoría debe planificarse adecuadamente y el


trabajo de los asistentes debe ser supervisado apropiadamente. La auditoría de
los estados financieros requiere de una operación adecuada para alcanzar
totalmente los objetivos de la forma más eficiente. La designación de auditores
externos por parte de la empresa se debe efectuar con la suficiente anticipación al
cierre del período materia del examen, con el fin de permitir el adecuado
planeamiento del trabajo del auditor y la aplicación oportuna de las normas y
procedimientos de auditoría (incluyendo las normas internacionales de auditoría y
su marco de conceptos). Por su parte, la supervisión debe ejercerse en las etapas
de planeación, ejecución y terminación del trabajo. Debe dejarse en los papeles de
trabajo evidencia de la supervisión ejercida.
Estudio y evaluación del control interno: Debe estudiarse y evaluarse
apropiadamente la estructura del control interno para planificar la auditoría y
determinar la naturaleza, duración y alcance de las pruebas que se deben realizar.
Solo es obliga- torio para el auditor el examen de aquella parte del sistema general
de preparación de los estados financieros que se va a auditar. Este estudio y
evaluación del control interno se debe hacer cada año adoptando una base
relativa de las áreas de evaluación y profundizando su incidencia en aquellas
áreas donde se advierten mayores deficiencias. Asimismo, el auditor, al evaluar el
control interno, determinará sus deficiencias, su gravedad y posibles
repercusiones. Si las fallas son graves y el auditor no suple esa limitación de una
manera práctica, deberá calificar su dictamen y opinar con salvedad o abstención
de opinión.

Obtención de la evidencia suficiente y competente: Debe obtenerse suficiente


evidencia mediante la inspección, observación, indagación y confirmación para
proveer una base razonable que permita la expresión de una opinión sobre los
estados financieros auditados. Una evidencia será insuficiente, por ejemplo,
cuando no se ha participado en una toma de inventarios, no se confirmó las
cuentas por cobrar, etc.

3. Normas relativas a la preparación de los informes

El dictamen de un auditor es el documento por el cual un contador público,


actuando en forma independiente, expresa su opinión sobre los estados
financieros sometidos a su examen. La importancia del dictamen ha hecho
necesario el establecimiento de normas que regulen la calidad y los requisitos
para su adecuada preparación. Está compuesto por cuatro NAGAS:

Aplicación de principios de contabilidad generalmente aceptados (PCGA): El


informe debe expresar si los estados financieros están presentados de acuerdo a
los PCGA. Esta norma requiere que el auditor conozca los principios de
contabilidad y procedimientos, incluyendo los métodos de su aplicación.

Consistencia en la aplicación de los principios de contabilidad generalmente


aceptados: para que la información financiera pueda ser comparable con ejercicios
anteriores y posteriores, es necesario que se considere el mismo criterio y las
mismas bases de aplicación de principios de contabilidad generalmente
aceptados, en caso contrario, el auditor debe expresar con toda claridad la
naturaleza de los cambios habidos.
Revelación suficiente. A menos que el informe del auditor lo indique, se entenderá
que los estados financieros presentan en forma razonable y apropiada, toda la
información necesaria para mostrarlos e interpretarlos apropiadamente.

Opinión del auditor. El dictamen debe expresar una opinión con respecto a los
estados financieros tomados en su conjunto o una afirmación a los efectos de que
no puede expresar una opinión en conjunto. El objetivo de esta norma, relativa a la
información del dictamen, es evitar una mala interpretación del grado de
responsabilidad que se está asumiendo. El auditor no debe olvidar que la
justificación para expresar una opinión, ya sea con salvedades o sin ellas, se basa
en el grado en que el alcance de su examen se haya ajustado a las NAGAS.

Declaración sobre normas de auditorías?

Las Normas de Auditoría, como cosa distinta de los procedimientos de auditoria,


se refieren, no solo a las cualidades personales del auditor, sino también al
ejercicio de su juicio en el desarrollo de su examen y la información relativa a él.

1. Es conveniente aclarar que las normas de auditoría puede decirse que se


diferencian de los procedimientos de auditoría, en cuanto a que los últimos se
relacionan con los actos a desarrollar, mientras que las primeras conciernen a la
calidad del desarrollo de tales actos, y a los objetos que se persiguen en el empleo
de los procedimientos llevados a cabo; por lo tanto los procedimientos son
susceptibles a cambios según las circunstancias, mientras que las normas no
varían.”

2. Es responsabilidad de la Federación de Colegios de Contadores Públicos de


Venezuela, actuar con la debida amplitud con el objetivo de que las normas y
procedimientos de auditoría sean aplicados sin restricción alguna, permitiendo una
mayor confianza en los usuarios de la información financiera y del dictamen sobre
los estados financieros teniendo presente el proceso de globalización de las
normas internacionales. El Contador Público Independiente (CPI) no debe
limitarse en su labor por la no-promulgación en Venezuela de una norma de
auditoría específica, sino que debe contar con opciones adecuadas a nuestra
realidad nacional.
3. La Federación de Colegios de Contadores Públicos de Venezuela tiene como
política la adaptación, de acuerdo con las circunstancias locales de las normas
internacionales de auditoría y su supletoriedad.

4. El consejo de la Federación Nacional de Contabilidad (IFAC), según se declara


en su constitución tiene como misión “el desarrollo y enriquecimiento de una
profesión contable que sea capaz de proporcionar servicios de una consistente
calidad para el interés público. Al trabajar por esta misión, el Consejo de IFAC ha
establecido el Comité Internacional de Practicas de Auditoría (IAPC) para
desarrollar y emitir a nombre del Consejo, normas y declaraciones de auditoría y
servicios relacionados. De acuerdo a la Constitución del IFAC, los organismos
miembro se adhieren a la misión expuesta en el párrafo antecedente. Para ayudar
a los organismos miembros en la Implementación de Normas de Auditoría (NIAs),
(IAPC) buscara, con ayuda del Colegio de la IFAC, promover su aceptación
voluntaria”. A la fecha de entrada de vigencia de esta norma, el Comité
Internacional de Practicas de Auditoría (IAPC) ha promulgado cuarenta y tres (43)
Normas Internacionales de Auditoría (NIAs).

DEFINICIONES DE LAS NORMAS DE AUDITORÍA DE ACEPTACIÓN GENERAL.

Normas de Auditoría de Aceptación General

Las normas de auditoría aprobadas y adoptadas por los miembros colegiados de


nuestra profesión en Venezuela, son las siguientes:

Normas relativas a la capacidad y Personalidad Profesional del Auditor

a. El trabajo de auditoría, con la finalidad de emitir una opinión profesional sobre


estados financieros, debe ser desempeñado por personas que teniendo un título
universitario de Contador Público nacional o revalidado, o licencia otorgada
legalmente, tengan capacidad como auditores.

b. El auditor (en adelante es utilizado el termino auditor, el cual debe ser asumido
como Contador Público en el ejercicio independiente) está obligado a emplear el
mayor celo y diligencia en la realización de su examen y la preparación de su
informe.

c. El auditor está obligado a mantener una actitud de objetividad e independencia


mental en todos los asuntos relativos a su trabajo profesional.
Normas sobre Organización y Ejecución del Trabajo

a. El trabajo de auditoría debe ser planificado adecuadamente. Los asistentes que


se empleen deben ser responsablemente supervisados.

b. El auditor debe efectuar un estudio y evaluación de control interno existente


como base para determinar la extensión de los procedimientos de auditoria que va
a aplicar.

c. El auditor debe obtener evidencia comprobatoria suficiente y competente;


mediante inspección, observación, confirmación e indagación; para proporcionar
una base razonable con el fin de emitir un informe respecto a los estados
financieros examinados.

Normas Relativas al Dictamen

a. El informe debe indicar si los estados financieros se presentan de acuerdo con


principios de contabilidad de aceptación general.

b. A menos que el Contador Público haga una declaración expresa en contrario,


se considerara que él estima que las revelaciones incluidas en las notas los
estados financieros, están razonablemente presentadas.

c. El informe debe contener la expresión de una opinión en relación con los


estados financieros, tomados en conjunto; o una opinión: con salvedad,
abstención o negación, en estos casos debe indicarse las razones para el tipo de
opinión.

d. En todos los casos en que el nombre de un Contador Público quede asociado


con alguna información financiera, el Contador Público debe expresar, de manera
clara e inequívoca, la naturaleza de su relación con dicha información financiera.
Si se ha realizado algún examen de ella, el Contador Público debe manifestar, de
modo expreso y claro, el carácter de su examen, su alcance y grado de
responsabilidad que, como consecuencia de él, asumen.

NORMAS RELATIVAS A LA CAPACIDAD Y PERSONALIDAD PROFESIONAL


DEL AUDITOR

Capacidad

El trabajo de auditoria, con la finalidad de emitir un dictamen profesional sobre


estados financieros, debe ser desempeñado por personas que, teniendo un Título
Universitario de Contador Público, nacional o revalidado, tengan capacidad como
auditores.

El Contador Público al ofrecer sus servicios, está declarando públicamente estar


en capacidad para desempeñar satisfactoriamente las actividades propias de esta
profesión. La adquisición de esa capacidad empieza con la educación formal del
Contador Público y se extiende hasta su posterior experiencia.

La educación formal, o preparación académica, se adquiere, en Venezuela,


mediante la obtención del título universitario de Contador Público, lo cual indica
que este profesional se ha sometido al estudio programado y sistemático de la
Contabilidad y Auditoría y de otras disciplinas conexas y complementarias que le
permitan una mejor formación.

No basta sin embargo, la preparación teórica conducente a la obtención del título


de Contador Público. La Contaduría Pública y el ejercicio de las actividades
propias de esta profesión requieren un bagaje de madurez, de conocimientos y de
habilidades que es muy difícil transmitir por la mera preparación universitaria.
Debe pues complementarse tal preparación con la adquirida en la experiencia
práctica. Es conveniente que el Contador Público que se gradúa complemente su
conocimiento mediante un periodo razonable de experiencia.

No es sin embargo, la capacidad profesional una cosa que se adquiere


definitivamente, de una vez y que ya no requiere de ninguna actividad posterior.
La vida de los negocios cambia continuamente y a una velocidad desconcertante;
la investigación y el estudio hacen que los conocimientos técnicos vayan
avanzando también a una considerable velocidad. De aquí que sea necesario para
que el Contador Público conserve su capacidad y calidad profesional, que se
mantenga en una continua revisión de sus conocimientos para estar al corriente
de los avances de las disciplinas que afectan a su actividad, desarrollando el
estudio y la investigación paralelamente a todas las demás actividades y ciencias
de nuestro mundo con el objetivo de colocar y mantener la profesión en los más
altos niveles, para ofrecer el más óptimo servicio a la colectividad.
Cuidado y diligencia

El auditor está obligado a emplear el mayor celo y diligencia en la realización de


su examen y la preparación de su informe.

Es necesario que en el desempeño de su trabajo el Contador Público ponga la


atención, el cuidado y la diligencia con sentido de responsabilidad. Esto impone al
Contador Público la obligación de cumplir con las normas sobre organización y
ejecución del trabajo y las relativas al informe.

Ni el Contador Público, ni ningún profesional, puede ser considerado infalible, ni


puede, por tanto, exigírsele el acierto en todos los casos y la resolución
satisfactoria de todos los problemas, sin embargo, el profesional asume una gran
responsabilidad moral y falta gravemente a sus deberes profesionales si la
ineficacia se debe a la carencia

NORMAS SOBRE ORGANIZACIÓN Y EJECUCIÓN DEL TRABAJO

Planificación supervisión

El trabajo de auditoría debe ser planificado adecuadamente. Los asistentes que se


empleen deben ser responsablemente supervisados.

El trabajo de auditoría, como cualquier trabajo profesional, no puede ser realizado


sin una planificación previa. Tiene un objetivo definido: suministrar al auditor
elementos de juicio suficientes y competentes para su opinión; se realiza mediante
los procedimientos de auditoría de acuerdo con las circunstancias y a las
condiciones cambiantes que se presenten en cada uno de los negocios; las
características peculiares de la empresa cuyos estados financieros se examina.
En tal virtud, para que un trabajo profesional lleve perspectivas de realizarse con
éxito razonable tiene que ser planeado en el sentido de prever, antes de
emprender cada fase del trabajo, cuáles procedimientos de auditoría van a
emplearse, la extensión y la oportunidad en que van a ser utilizados y los papeles
de trabajo en que van a registrarse sus resultados.
Por otra parte, no es posible, ni sería conveniente que la totalidad del trabajo de
auditoría sea realizado personalmente por el propio Contador Público. En la
aplicación de los procedimientos de auditoría existen labores de ejecución que no
requieren la capacidad profesional del Contador Público u que pueden ser
desempeñadas por personal asistente de un nivel menor de conocimientos y
experiencia.

Una adecuada utilización de asistentes y una distribución apropiada de las labores


entre ellos, es conveniente para el trabajo de auditoría, y funciona en el sentido
más favorable para los intereses de la propia clientela y del Contador Público, al
delegar el Contador Público en sus asistentes aquellas labores que no necesiten
forzosamente de su criterio y capacidad y, por tanto, de la ejecución personal, está
aprovechando al máximo su propia capacidad, liberándose de tareas que
constituían una carga rutinaria excesiva y, por consiguiente, beneficiando al propio
cliente, al quedar libre para estudiar con mayor meticulosidad las decisiones de
verdadera importancia y también al permitir que los costos del trabajo de auditoría
no se eleven indebidamente por la realización de trabajos secundarios a través de
personas que requieren una remuneración mayor que la que el propio trabajo
justifica.

Pero la delegación de funciones en los asistentes no libera al Contador Público de


la responsabilidad personal e indeclinable que tiene en todo el trabajo. Aun
cuando la ejecución material no haya sido hecha por él, el Contador Público es
responsable ante su cliente y ante los terceros que usarán los estados financieros
sobre lo que dictamina, por lo adecuado de todo el trabajo de auditoría,
independientemente de quien prácticamente lo efectúe. De ahí que resulte
indispensable que la delegación de parte del trabajo de auditoría en los asistentes
vaya acompañada de un procedimiento de supervisión que permita dirigir y
orientar a los asistentes en la ejecución del trabajo y cerciorarse de la efectividad
con que lo realiza y la autenticidad de los resultados que obtienen a través de él.
Estudio y evaluación del Control interno

El auditor debe efectuar un estudio y evaluación del control interno existente como
base para determinar la extensión de los procedimientos de auditoría que va
aplicar.

El determinar qué procedimientos de auditoría van a aplicarse en cada caso y el


fijar su extensión y oportunidad depende de varios factores: en primer lugar
depende de los objetivos generales de trabajo de auditoría, que son los de
suministrar al Contador Público elementos de juicio suficientes para apoyar su
opinión; depende también de la naturaleza de cada una de las partidas
examinadas y de los principios de contabilidad aplicables a ella, y depende por
último de las condiciones particulares específicas que existen en cada empresa.
Las condiciones de la empresa, su forma de operar, su forma de tramitar
interiormente sus asuntos, las actividades de control sobre las operaciones, sus
registros contables y emisión de los estados financieros, son circunstancias
particulares de cada empresa que modifican la naturaleza de las pruebas de
auditoría que se van a realizar y la extensión y oportunidad con que estas pruebas
puedan ejecutarse.

De ahí que sea absolutamente necesario que el Contador Público para poder
realizar un trabajo satisfactorio, deba tomar en cuenta esas particularidades de la
empresa cuyos estados financieros están examinando. Sin esos elementos, la
planeación, la auditoría y la ejecución de ella serían cosas que estarían totalmente
alejadas de la realidad del negocio examinado y tendría muy pocas probabilidades
de éxito. Por ello es necesario que el Contador Público estudie y evalúe el control
interno de la empresa cuyos estados financieros va a examinar.

La evaluación del control interno tiene como objeto la determinación de la


existencia de adecuados controles, entendiéndose por esto: el ambiente de
control, la valoración cualitativa de los riesgos, la presencia de actividades de
control, la información y comunicación constante de las operaciones y la vigilancia
adecuada del cumplimiento de esas actividades.

La evaluación adecuada de un sistema de control interno requiere de dos fases:


Conocimiento y comprensión de los procedimientos y métodos prescritos y

Un grado razonable de seguridad que se encuentran en uso y que están


operando tal como se planearon.

Estas dos fases del estudio se describen como la, respectivamente. Aunque estas
fases se comentan separadamente, están íntimamente relacionadas en lo que
respecta de a que algunas partes de cada una deben realizarse concurrentemente
y pueden contribuir a la evaluación de los procedimientos prescritos y del
cumplimiento de los mismos.

El propósito de las pruebas de cumplimiento es suministrar una seguridad


razonable que los procedimientos relativos a los procedimientos contables están
siendo aplicados tal como fueron prescritos. Tales pruebas son necesarias si se va
a confiar en los procedimientos prescritos para la determinación de la naturaleza,
oportunidad o extensión de las de determinadas clases de transacciones o saldos,
como se comenta más a delante. El Contador Público puede decidir no confiar en
los procedimientos prescritos porque haya concluido ya sea (a) que los
procedimientos no son satisfactorios para este objetivo, o (b) que el trabajo
requerido en las medidas de control interno, excede a la reducción que se lograría
en las en virtud de tal confianza, lo que no se justifica desde un punto de vista de
eficiencia.

La evaluación de los controles contables hechos por el Contador Público, en


relación con cada tipo significativo de transacciones y cuentas de los estados
financieros, debe ser una conclusión de si los procedimientos prescritos son
satisfactorios para su objetivo. Los procedimientos de control interno y su
cumplimiento deben considerarse satisfactorios si la revisión del Contador Público
y sus pruebas no revelan ninguna situación que considerare que sea una debilidad
importante para su propósito. Dentro de este contexto, debilidad importante
significa una situación en la cual el Contador Público cree que los procedimientos
o el grado de cumplimiento con ellos, no suministra una razonable seguridad de
que errores o irregularidades por cantidades que podrían ser importantes
reflejados en los estados financieros que están siendo auditados, pudieran
prevenirse o detectarse en un periodo razonable por los empleados de la empresa
en el curso normal de ejecución de las funciones que se les asignan.
Ya que el objetivo de la evaluación requerida por la segunda norma de auditoría
sobre organización y ejecución del trabajo es suministrar una base <>, es claro
que su objetivo final es el de proporcionar una base razonable con el fin de emitir
un informe respecto a los estados examinados incluidos en la tercera norma
relativa a la organización y ejecución del trabajo.

La evidencia comprobatoria requerida por la tercera norma es obtenida por tipos


de procedimientos de auditoría: a pruebas de detalles de las transacciones y
saldos y (b) revisión analítica de razones y tendencias significativas e
investigaciones resultantes de fluctuaciones anormales y partidas cuestionables.
Estos procedimientos se describen en esta declaración como. El objeto de estos
procedimientos es obtener evidencia acerca de la validez y tratamiento contable
apropiado de las transacciones y saldos o, de otra manera, de errores o
irregularidades que puedan estas allí reflejadas. Aunque este objetivo difiere del
de las pruebas de cumplimiento, ambos objetivos pueden alcanzarse
frecuentemente a través de las pruebas de detalles.

La segunda norma no contempla que el Contador Público vaya a depositar


confianza completa en el control interno, al grado de la exclusión de otros
procedimientos de auditoría respecto a cantidades importantes que aparezcan en
los estados financieros. Esta interpretación es apropiada por varias razones.
Primero, la tercera norma no está expresada de manera que sugiera una completa
dependencia en el control interno. Las limitaciones inherentes a la efectividad del
control contable son las razones fundamentales en las que se apoya esta
interpretación.

La segunda norma sobre organización y ejecución del trabajo reconoce que la


extensión de las pruebas requeridas para constituir suficiente evidencia
comprobatoria en los términos de la tercera norma debe variar inversamente con
la confianza que tenga el Contador Público en el control interno. Estas normas
consideradas conjuntamente implican que la combinación de la confianza que el
Contador Público deposita en el control interno y en sus procedimientos de
auditoría, debe suministrar una base razonable para su opinión en todos los
casos, aunque la parte de la confianza que se derive de las fuentes respectivas
pueda variar apropiadamente en distintos casos.
Obtención de evidencia suficiente y competente

El auditor debe obtener evidencia comprobatoria suficiente y competente,


mediante inspección, observación, confirmación e indagación, para proporcionar
una base razonable con el fin de emitir una opinión respecto a los estados
financieros examinados.

Ya sabemos que el objetivo principal que persigue el Contador Público al aplicar


los procedimientos de auditoria es el de obtener los elementos de juicio
indispensables para poder emitir su opinión sobre los estados financieros. Tales
elementos deben representar la evidencia suficiente y objetiva que demuestren lo
razonable de su examen. Por tanto, el trabajo de auditoría debe suministrar al
Contador Público la base suficiente para respaldar su opinión profesional.

La evidencia comprobatoria, debe llenar dos condicione: debe ser suficiente y


competente. La evidencia será suficiente cuando, ya sea por los resultados de una
sola prueba, o por la concurrencia de los resultados de varias pruebas diferentes,
el Contador Público y sus asistentes con la capacidad necesaria, pueden concluir
razonablemente de que los hechos que se están tratando de probar o los criterios
cuya razonabilidad se está juzgando han quedado satisfactoriamente
comprobados.

Además, la evidencia comprobatoria debe ser competente, es decir, debe referirse


a aquellos hechos, circunstancias o criterios que realmente tienen importancia y su
relación con lo examinado. El Contador Público al hacer su examen de estados
financieros y al dar su opinión sobre ellos, está haciendo un juicio de equilibrio y
evaluación. Los estados financieros presentan, por la selección de ciertos hechos
importantes y por la aplicación de ciertos criterios, una presentación razonable de
la situación de la empresa y de los resultados de sus operaciones, la cual debe ser
suficiente para dar a los interesados la información que necesitan como base para
tomar sus decisiones, pero que, por ningún motivo, es una descripción minuciosa
detallada y exhaustiva de todos los elementos que forman parte de la situación
financiera y de los resultados de las operaciones.

La evidencia que obtenga el Contador Público debe referirse a los hechos


importantes de su examen, estar relacionada con ellos y ser útil como base para la
opinión que va a emitir. La simple acumulación de datos, comprobaciones y
elementos que no tienen relación con los objetivos fundamentales e importantes
de la auditoría es, al mismo tiempo, un desperdicio de tiempo y energía y una
demostración de falta de eficacia profesional.

En realidad tanto en la conducción de su trabajo de auditoría, como en la


preparación de su informe, el Contador Público debe guiarse por los criterios.

Es cierto que entre los hechos, criterios y elementos que forman parte de los
estados financieros, no todos son de la misma importancia. En la misma forma,
entre los procedimientos que pueden utilizar el Contador Público y las partidas o
conceptos a los que puede dirigir su atención, tampoco son todos de la misma
importancia. Existen algunos cuya importancia es decisiva dentro del aspecto
general que los estados financieros dan, o que serían decisivos dentro de la
opinión que el Contador Público va a rendir; pero hay otros que no afectan
sustancialmente ni a los estados ni a la opinión, aun cuando hubiera dentro de
ellos errores.

El Contador Público debe graduar su examen y la atención que dedique a las


partidas conforme a la importancia relativa de éstas. Una partida tiene importancia
relativa cuando un cambio en ella, en su presentación, en su evaluación, en su
descripción o en cualquiera de sus elementos pudiera modificar la decisión de un
lector o analista sobre los estados financieros. Cuando esto no ocurre se dice que
las partidas carecen de importancia relativa.

Al mismo tiempo, el Contador Público debe adecuar sus procedimientos de


acuerdo con el riesgo relativo de error que corre en cada uno de los grupos
sometidos a su examen. Ya hemos dicho que es prácticamente imposible adquirir
la certeza absoluta sobre los hechos y criterios que se está examinando. Sin
embargo, las diferencias encontradas en el examen o el grado de comprobación
varían de acuerdo con la naturaleza de las partidas.

Aplicación de Principios de Contabilidad


El Dictamen debe indicar si los estados financieros se presentan de acuerdo con
los principios de contabilidad de aceptación general.

La presentación de la situación financiera, los resultados de operaciones, el


estado de movimiento del patrimonio y el movimiento del flujo del efectivo que se
hace a través de los estados financieros no es una presentación arbitraria. La
experiencia, el desarrollo de la técnica de contabilidad y la aplicación de los
principios de contabilidad hacen que, para que un estado presente
razonablemente la situación y los resultados de una empresa, el movimiento de su
patrimonio y su flujo de efectivo deben haber sido formulados de acuerdo con
principios de contabilidad de aceptación general.

La determinación sobre si se han requerido los requiere el ejercicio de un buen


juicio de parte del Contador Público, así como un conocimiento profundo acerca
de cuáles son los principios que han sido generalmente aceptados, aunque
algunos de estos hayan sido muy poco utilizados. Un principio de contabilidad
puede tener un uso limitado y aun ser de aceptación general.

Uniformidad en la aplicación de los principios de contabilidad.

La interpretación de los estados financieros requiere, en la mayoría de los casos,


la posibilidad de comparar la situación financiera de una empresa en distintos
periodos de su actividad. Así como entre empresas que se dediquen a igual
actividades. Esto no es posible si los estados financieros relativos a las distintas
épocas o periodos han sido formulados bajo bases diferentes o utilizados
principios distintos

El Contador Público por tanto debe verificar si los principios de contabilidad


aplicados en el periodo bajo revisión son semejantes a aquellos aplicados en el
periodo anterior. Cuando se haya llevado a cabo un cambio en la aplicación de los
principios de contabilidad durante el año o los años acerca de los cuales el
Contador Público está informando el tratamiento del cambio debe ser considerado
de acuerdo a lo señalado en la norma aplicable.

Revelaciones en los estados financieros


A menos que el Contador Público haga una declaración expresa en contrario, se
considerara que él estima que las revisiones informativas incluidas en los estados
financieros son razonablemente adecuadas.

La presentación razonable de los estados financieros, aparte de su relación con


principios de contabilidad de aceptación general, depende de la adecuada
revelación de aspectos importantes. Estos aspectos se refieren a las políticas
contables, y sus notas pertinentes; la terminología usada; los detalles expuestos;
la clasificación de las partidas en los estados, gravámenes sobre activos; atrasos
en pagos de dividendos; restricciones sobre la declaración de dividendos; pasivos
contingentes; la existencia de intereses en/y control de compañías afiliadas, así
como la naturaleza y volumen de las transacciones de tales intereses. Esta
enumeración no pretende incluir todos los casos posibles, sino que simplemente
indica entre otras la naturaleza y tipo de revelaciones que son necesarios para que
los estados financieros sean lo suficientemente informativos.

El Contador Público debe efectuar una revisión de las transacciones y eventos


subsecuentes, ocurridos desde la fecha de los Estados Financieros hasta la fecha
del informe y entrega del mismo al cliente, a fin de determina su efecto sobre los
estados financieros examinados.

Si se omiten en los estado financieros aspectos que el Contador Público considera


requieren ser señalados, debe incluir estos aspectos en su informe y salvar
adecuadamente su opinión.

Expresión de opinión

El dictamen debe contener la expresión de una opinión en relación con los estados
financieros, tomados en conjunto, o una declaración de que dicha opinión no
puede ser expresada, en cuyo caso deben indicarse las razones por las cuales se
expresa dicha opinión.

El objetivo del examen de los estados financieros por un Contador Público es la


expresión de una opinión respecto a tales estados. El dictamen de auditoría es el
medio por el cual el Contador Público expresa su opinión de los estados
financieros objeto de su examen.

El examen con esta finalidad debe efectuarse en base a normas de auditoría,


aplicándose los procedimientos de auditoría que se consideren necesarios según
las circunstancias. Una vez realizado el examen el Contador Público deberá; emitir
una opinión sin salvedades, expresar una opinión con salvedades, emitir una
opinión adversa, o abstenerse de emitir su opinión.

Aclaración de su relación con los estados financieros y la responsabilidad asumida


respecto a ellos.

En todos los casos en que el nombre de un Contador Público quede asociado con
algunos estados financieros, el Contador Público debe expresar, de manera clara
e inequívoca, la naturaleza de su relación con dichos estados financieros. Si se ha
realizado algún examen de ellos, el Contador Público debe manifestar, de modo
expreso y claro, el carácter de su examen, su alcance y grado de responsabilidad
que, como consecuencia él asume.

Aun cuando la auditoría de estados financieros con vista a dictaminar sobre ellos,
forma una parte importante, quizás la más importante del trabajo profesional del
Contador Público, no es la única actividad que éste realiza en el desempeño de
sus labores profesionales. No es raro que el Contador Público preste otra clase de
servicios, diferentes de la auditoría para efectos de informe, cuya consecuencia
sea que, en una u otra forma, su nombre aparezca asociado a ciertos estados
financieros o información financiera. Entre estos servicios profesionales se pueden
citar la preparación de estados financieros de carácter general o para fines
especiales, sin realizar auditoría de ellos; la interpretación de estados financieros;
las revisiones o auditorias parciales de partidas que, estando dentro de los
estados financieros, no forman su totalidad, y otros semejantes.

Informe de auditoría ?

El informe de auditoría, también llamado dictamen de auditoría de cuentas


anuales, es el documento final que redactan los auditores después de la
realización completa de la auditoría, donde señalan la situación económica de la
empresa y donde muestran su opinión sobre la realidad económica de la empresa.
Este documento es muy importante para todos los públicos, ya sean los
accionistas, entidades financieras o empleados para conocer el estado real de la
empresa y ver la salud económica y su viabilidad.

Los informes de auditoría poseen una estructura definida para la redacción de los
contenidos que debe incluir. Aquí es donde encontramos los conocidos párrafos
del informe de auditoría. Las entidades que tengan la obligación de someterse a
auditorías legales antes de entregarse en el Registro Mercantil deberán contener
como mínimo la siguiente información:

Título o identificación

Encargados de la auditoría y destinatarios

Párrafo de alcance: en este párrafo se describe la amplitud del trabajo realizado


en la auditoría. Se delimitará el marco de actuación de la auditoría realizada,
señalando los estados financieros auditados y haciendo referencia a las Normas
de Auditoría Generalmente Aceptadas (NAGA) utilizadas para hacer la auditoría.

Párrafo legal o comparativo: deberá informar de que las cuentas son únicamente
del último año. Las cuentas anuales deben incluir las cifras del balance, la cuenta
de pérdidas y ganancias y el cuadro de financiación del año anterior.

Párrafo de énfasis: en este párrafo el auditor debe señalar aspectos que le hayan
resultado relevantes, pero que no hayan llegado a afectar en la opinión que se ha
formado sobre la auditoría.

Párrafo de salvedades: aquí el auditor mostrará si existe algún reparo que


señalar sobre algún tipo de estado financiero y explicará la causa que lo ha
provocado. Estas salvedades sí que afectan a la opinión y pueden deberse a
alguna diferencia en la interpretación de diferentes cuestiones.

Párrafo de opinión: es aquí donde el auditor mostrará su propio juicio sobre las
cuentas que está auditando. Encontraremos en este párrafo un juicio valorativo
sobre la situación financiera, el patrimonio, los resultados de las operaciones, los
recursos obtenidos y aplicados. También valorará si dispone de la situación
necesaria para poder ofrecer una valoración real de las cuentas.

Párrafo sobre “otras cuestiones”: aunque este párrafo no es obligatorio, los


auditores podrán utilizar otros párrafos para añadir la información sobre
determinadas circunstancias que sea necesaria para completar el informe sobre la
auditoría.
Párrafo sobre el informe de gestión: en este párrafo se comentará la
concordancia del informe de gestión concuerda con las cuentas anuales de la
empresa o si por el contrario existe algo que no le hace ser diferente.

Nombre, dirección y datos registrales del auditor

Fecha del informe

Firma del auditor

Tipos de informe de auditoría

El objetivo del auditor es realizar un examen sobre las cuentas anuales de la


empresa para poder valorarlas y extraer un juicio de valor sobre su trabajo
realizado. Los informes de auditorías pueden ofrecer distintas opiniones sobre las
cuentas anuales de una empresa.

Opinión favorable: esto significa que el auditor está de acuerdo con la


presentación de las cuentas anuales y el contenido de los estados financieros. Es
la opinión más favorable que se puede conseguir de una auditoría.

Opinión favorable con salvedades: también denominada opinión calificada o


cualificada. En este caso el autor está conforme con las cuentas que ofrece la
empresa, pero señala ciertos reparos en algunos aspectos de la empresa.

Opinión desfavorable: en este caso el auditor señala que no está de acuerdo con
las cuentas y estados financieros de la empresa. En su juicio, las cuentas no
muestran la realidad económica de la empresa.

Opinión denegada: se le llama también “abstención de opinión. En estos casos el


auditor afirma que no tiene suficientes recursos para ofrecer una valoración sobre
las cuentas anuales de la empresa.

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