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Una Rosa para Emily

"Una rosa para emily" Es una narración escrita por William Faulkner y publicada por primera vez
el 30 de abril de 1930, cuyo narrador es representado por una voz colectiva que va describiendo
esta historia desde el punto de vista de una comunidad, en este caso la mítica ciudad de
Jefferson, es decir, quienes cuentan la historia son sus vecinos, la ciudad completa. Así pues,
entre los personajes principales está por su puesto, Emily Grierson, hija de una familia respetada
y acaudalada de esta ciudad, quien en su juventud era conocida como una joven dulce, cuyo
padre jamás consideró digno ni a la altura a sus pretendientes, luego de este fallecer la dejó sólo
siendo la propietaria de la casa, sin fortuna, por lo cual la ciudad pensó que este hecho la haría
acercarse más a las personas pero Emily se alejó del contacto social. Al transcurrir el tiempo,
entra a su vida un capataz encargado de asfaltar las calle de ciudad, los vecinos se referían a la
mujer como la “pobre Emily” quien era visitada y pretendida por este hombre con el cual
especulaban que se casarían, llamado Homer Barron, un hombre joven, cruel, desinteresado en
su relación e infeliz, quien planea dejarla, fue visto por última vez entrando a casa de la señorita
Emily luego que esta comprara arsénico en la farmacia. Luego de este hecho no se volvió a ver
mas a la señorita Emily, salvo por unos años en los que tras un convenio con el General Santori
Emily daba clases de pintura china a sus hijas y en agradecimiento era exenta de cancelar
contribuciones, tras el paso de los años, cuando el tiempo ya había pintado canas en su cabellera
y las nuevas generaciones habían tomado la administración de la ciudad, se solicitaba que la
señorita Emily cancele sus contribuciones, a lo cual la misma se oponía alegando el trato hecho
con Santori quien había fallecido ya hace unos años, en estas visita lograron ver a la Señorita
Emily tras largos años de sólo ver entrar y salir de esta casa sólo a su fiel sirviente “El negro
Tobe”, pues Emily era descrita como una persona obesa, de baja estatura, y que vestía de negro
todo el tiempo quien se tornó en una persona fría y de carácter fuerte y decisivo. En tal sentido,
Una rosa para Emily, esconde la radiografía completa de una sociedad caduca, simbolizada en la
simpleza de una mujer que se apartó y fue a su vez apartada por sus vecinos, aunque jamás
vencida, pero carente de afectos, solitaria y olvidada, que tras su muerte los vecinos se acercaron
a descubrir su forma de vivir, y qué escondía durante tantos años de encierro y aislamiento, fue
allí tras su sepultura cuando lograron abrir una habitación sellada donde yacía los restó de quien
fue su viejo amor, Homer Barron. Tras el descubrimiento final de la historia, queda al descubierto
su enorme desamparo existencial, junto al fragor de sus sueños amorosos. Así pues, finalmente,
tras la lectura de este cuento el cual describe la vida de una mujer hace muchos años, que tras
los acontecimientos que la marcaron se apartó del contacto social y de su vida sólo se supo lo
que podían apreciar sus vecinos pero en realidad sólo ella y quienes estuvieron cerca lograron
realmente saber lo que acontecía tras la paredes de su casa.

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