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Modelo de regulación

La génesis del ritmo básico de la respiración se basa en la actividad


alternada de los centros bulbares inspiratorios y espiratorios, que
constituyen el generador central del ritmo respiratorio.

En condiciones de respiración basal o de reposo, la actividad inspiratoria


se genera automáticamente, produciendo la contracción del diafragma.
Después esta actividad se detiene, lo que ocasionará la relajación del
diafragma, tras los cuales volverán a descargar de nuevo. En esta
situación, la actividad espiratoria está inhibida. Durante el ejercicio o
ante necesidades que requieran mayor intensidad y frecuencia
ventilatoria, se incrementará la actividad de las neuronas inspiratorias,
provocando la contracción de los músculos inspiratorios accesorios, pero
también activando a las neuronas espiratorias, que inducirá la
contracción de la musculatura espiratoria accesoria.

Es de mencionar que el pulmón puede inhalar 6 litros del aire, y en


ejercicio puede llegar a 150 litros

Mecanismo del Sistema Respiratorio


 Respiración:

La respiración es un proceso automático y rítmico mantenido


constantemente que puede modificarse bajo el influjo de la voluntad,
pudiendo cambiar tanto la profundidad de la respiración como la
frecuencia de la misma. La respiración no siempre es un proceso
absolutamente regular y rítmico, ya que ha de ir adaptándose
constantemente a las necesidades del organismo, para aportar el
oxígeno necesario al metabolismo celular y eliminar el anhídrido
carbónico producido durante el mismo.

 Ventilación: paso de aire a través de las estructuras


pulmonares durante la inspiración y la espiración

La ventilación pulmonar como el volumen de aire que se mueve entre


el interior de los pulmones y el exterior por unidad de tiempo, siendo
esta unidad normalmente el minuto. Su determinación se realiza
mediante el producto del volumen corriente por la frecuencia
respiratoria. Para un individuo adulto, sano, de unos 70 kg de peso con
una frecuencia respiratoria entre 12 y 15 ciclos/minuto y un volumen
corriente de 500 a 600 ml, la ventilación sería de 6 a 7 litros/minuto.
Aunque el volumen corriente podría tomarse tanto en la inspiración
como en la espiración, se considera habitualmente el del aire
espirado, estrictamente considerado debería ser la media entre el
volumen inspirado y el espirado.

 Inspiración. El principal músculo es el diafragma cuya contracción


es responsable del 75-80% del movimiento inspiratorio. El diafragma
al contraerse da lugar a una depresión o descenso del suelo de la caja
torácica aumentando el eje longitudinal de la misma y su
volumen. Los músculos intercostales externos, situados
diagonalmente entre las costillas, elevan la parrilla costal al
contraerse e incrementan el volumen de la caja torácica en sentido
antero-posterior y transversal. Aunque se les atribuía un papel
importante en la inspiración basal, se ha observado que su papel es
más de soporte de la pared costal y de participación en respiraciones
forzadas.
 b) Espiración. En condiciones de reposo, la espiración es un
proceso pasivo que se lleva a cabo solamente por relajación de la
musculatura inspiratoria y la recuperación elástica de los pulmones
previamente distendidos en la inspiración. Sólo en los recién nacidos
los músculos abdominales participan en la espiración basal.

 Difusión: paso de gases desde el alvéolo al capilar y


viceversa. Depende del gradiente de concentración de
ambos gases, del coeficiente de difusión de cada uno de
ellos y del estado de la membrana respiratoria.

Es el proceso mediante el cual se produce la transferencia de los gases respiratorios entre el alveolo
y la sangre a través de la membrana alveolo-capilar. La estructura del pulmón le confiere la máxima
eficacia: gran superficie de intercambio y espesor mínimo de la superficie de intercambio.

La difusión de los gases respiratorios es un proceso pasivo, no consume energía, se produce por el
movimiento aleatorio de sus moléculas que atraviesan la membrana alveolocapilar de forma proporcional
a sus presiones parciales a cada lado de la misma. Para mantener ese gradiente de presión es necesaria
la renovación continua del gas alveolar (ventilación) y de la sangre que riega el alveolo (perfusión).

Según la Ley de Grahan, la tasa de difusión de un gas es inversamente proporcional a la raíz cuadrada de
su densidad por lo que los gases difunden mejor a mayor temperatura. Según la Ley de Henry, la
disolución de un gas en un líquido es directamente proporcional a la presión parcial de dicho gas y a su
coeficiente de solubilidad. Así el CO2 difunde a través de los tejidos unas 20 veces más rápido que el O2,
ya que su peso molecular es similar pero su solubilidad es 24 veces mayor.

 Perfusión: irrigación del alveolo por parte del capilar


pulmonar.

Es el paso de sangre por el capilar. Está sangre va a ser la que se


oxigena y más tarde vuelva al corazón.
Cuando la sangre llega a los pulmones tiene un alto contenido en
CO2 y un bajo contenido en O2. El O2 pasa por difusión a través de las
paredes alveolares y de los capilares a la sangre. Allí es transportado
por la hemoglobina, que lo llevará hasta las células del cuerpo donde
por el mismo proceso de difusión pasará al interior de las mismas
para su posterior uso.
El mecanismo de intercambio de CO2 es semejante, pero en sentido
contrario, pasando el CO2 a los alvéolos. El CO2, se transporta una
parte disuelto en el plasma sanguíneo y otra parte lo transporta los
glóbulos rojos.

Las unidades alveolares ventiladas pero no perfundidas se


conocen como espacio muerto. También se denominan de esta
manera otras estructuras en las que no se realizan hematosis
como las fosas nasales, laringe, tráquea y bronquios
principales o fuente.

Centro respiratorio: La respiración rítmica basal, está regulada por


los centros respiratorios nerviosos situados en el encéfalo que recogen información
proveniente del aparato respiratorio y de otras partes del organismo, para dar lugar a una
respuesta a través de los órganos efectores o musculatura respiratoria que determinará la
profundidad de la respiración, o volumen corriente, y la frecuencia. La corteza cerebral
también participa cuando se interviene de forma voluntaria en el proceso respiratorio.

- Los centros bulbares inspiratorios


Se localizan en la región ventrolateral y constituyen el grupo respiratorio dorsal (GRD). Los
centros bulbares espiratorios se denominan grupo respiratorio ventral (GRV). Ambos
centros son pares y de localización bilateral, con comunicaciones cruzadas lo que les
permite actuar sincrónicamente para obtener movimientos respiratorios simétricos, es
decir, si uno se activa el otro se inhibe, y viceversa, coordinando el proceso respiratorio.
- El centro apnéustico
Se sitúa en la región inferior de la protuberancia, estimula el grupo respiratorio dorsal o
centro inspiratorio bulbar, e induce una inspiración prolongada o apneusis. En condiciones
de respiración normal, este centro se encuentra inhibido por
el centroneumotáxico situado en la región superior de la protuberancia, que es
estimulado por el grupo respiratorio dorsal o centro inspiratorio bulbar.

- La corteza cerebral: modifica la actividad de los centros bulbares y constituye


la actividad voluntaria de la respiración, induciendo la hiperventilación o la
hipoventilación. La corteza también coordina la actividad contráctil alternada
de los músculos inspiratorios y espiratorios para que actúen coordinadamente.
El sistema límbico y el hipotálamo influyen sobre el tipo de respiración que se
presenta en situaciones de ira o miedo.

Lo siguiente para entender mejor cómo funciona la fisiología


respiratoria es entender toda la parte correspondiente al
sistema nervioso. Los músculos respiratorios se encuentran
inervados por un grupo de motoneuronas localizadas a nivel
espinal, las cuales envían una serie de descargas rítmicas, y
como consecuencia se produce la inspiración.

Estas motoneuronas están controladas por un sistema nervioso


que emplea dos tipos de mecanismos separados pero
interdependientes:

Sistema nervioso voluntario


Compuesto por el SN central y el periférico, capaz de controlar
conscientemente el patrón respiratorio (por ejemplo cuando
aguantamos la respiración bajo el agua, o hinchamos un globo)

Sistema nervioso autónomo


Totalmente involuntario, compuesto por un centro respiratorio,
localizado en el tronco encefálico. Este centro es el encargado
de controlar la respiración en función de las necesidades
metabólicas del organismo.

MECANISMOS DE CONTROL DE LA RESPIRACIÓN

Su actividad se lleva a cabo mediante varios tipos de


mecanismos:

 Mecanismo de control químico: el centro respiratorio está


compuesto por un grupo de neuronas localizadas en el bulbo y
protubrerancia que se encargan de regular la respiración
mediante los cambios detectados en las concentraciones
plasmáticas de O2, CO2 e hidrogeniones (H+). A su vez se
encuentra dividido en 3 regiones principales: dorsal, ventral y
neumotáxica.
Indirectamente, el CO2 es el compuesto más importante para la
regulación química de la respiración, pues en el tronco
encefálico están alojados unos quimioreceptores
centrales que detectan eficazmente el incremento de
hidrogeniones, producto de la reacción entre el CO2 y el H2O
que hemos visto anteriormente (de ácido carbónico a
bicarbonato e iones hidrógeno), en el torrente sanguíneo
cuando intentan atravesar la barrera hematoencefálica. El CO2
atraviesa con facilidad dicha barrera y tiene poco poder
estimulante sobre las neuronas del centro respiratorio, por lo
que no es fácil de detectar directamente. El aumento de
hidrogeniones estimula el centro respiratorio, el cual a su vez
activa los músculos para aumentar la frecuencia respiratoria,
expulsar CO2 y así diminuir la cantidad de hidrogeniones
plasmática hasta llegar a condiciones normales.
De igual manera, el O2 también es monitorizado por el
organísmo mediante los quimioreceptores periféricos, pero no
resulta tan útil para la regulación respiratoria ya que su
carencia se detecta sólo en niveles muy avanzados, como por
ejemplo en una enfermedad pulmonar obstructiva crónica. Esto
es debido a que el O2 resulta tan indispensable para nuestro
cuerpo que se conserva siempre una presión de O2 alveolar
más alta de la necesaria para que la Hb quede casi
completamente saturada. Por ello es posible que la ventilación
alveolar varíe sin afectar el transporte de O2 al resto del
organismo.
 Mecanismo de control por propioceptores: son unos
receptores especiales de sensibilidad profunda. Los ubicados
en los pulmones, detectan el estiramiento pulmonar y se
activan para proteger los pulmones de un estiramiento
excesivo. Los que se encuentran en las articulaciones, son
estimulados durante el ejercicio y avisan al centro respiratorio
de que es necesario aumentar la frecuencia respiratoria
 Mecanismos de actividad del centro vasomotor: este
centro es el responsable de la vasoconstricción periférica y la
actividad cardíaca. Si este centro aumenta su actividad del
CVM, paralelamente también aumenta la actividad del
respiratorio, como por ejemplo cuando el organismo sufre una
hipotensión.
 Mecanismo de regulación de la temperatura corporal: si la
temperatura corporal aumenta, también lo hace el metabolismo
celular, aumentando también la concentración de dióxido de
carbono y, en consecuencia, la ventilación alveolar. También
existe un efecto estimulante directo de la temperatura sobre el
centro respiratorio.

Sistema locomotor de la respiración


Músculos Inspiratorios:
Durante la fase de inspiración, el diafragma y los músculos
respiratorios se contraen y la presión intrapulmonar desciende
respecto a la atmosférica, lo que hace que el aire entre en las
vías respiratorias. Los músculos participantes en la inspiración
son:

1. Diafragma
2. Escalenos
3. Trapecio
4. Esternocleidomastoideo
5. Músculos intercostales externos
6. Músculos paraesternales
7. Aletas nasales*

Músculos Espiratorios:
Durante la espiración, los músculos respiratorios se relajan y la
presión intrapulmonar asciende respecto a la atmosférica, por
lo que el aire es expulsado de los pulmones. Los músculos
participantes en la espiración son:

1. Músculos de la pared abdominal (rectos y oblicuos)


2. Triangular del esternón
3. Músculos intercostales internos

A esto se le añade que la presión intrapleural es inferior a la


atmosférica, por lo que nunca se puede equilibrar con la
presión atmosférica ya que la cavidad pleural está cerrada de
manera hermética.

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