EL EVANGELIO SEGÚN CLARK KENT

RICHARD VIQUEIRA

Richard Viqueira, el Kamikaze del Teatro, es director, actor y dramaturgo. Creador de sus propios espectáculos como
Vencer al Sensei, Vencer al Sensei Turbo, El evangelio según Clark Kent y Por favor, no mande riñones por
correspondencia. Se hizo acreedor al Premio a la Mejor Obra de Teatro de Búsqueda en 2007. Sus iconoclastas puestas en
escena han sido distinguidas por la Muestra Nacional de Teatro en México, y en festivales internacionales de Miami,
Egipto, Argelia, República Dominicana, Nueva York y España. Recibe estímulos del Fonca en las tres categorías
existentes: Dramaturgo, Director y Actor. Beneficiado por la Fundación para las Letras Mexicanas en dos ocasiones,
publica PsicoEmbutidos (El Milagro, 2009), Veneno a sorbos (Tierra Adentro, 2007) y Vencer al Sensei (Anónimo Drama,
2003). La revista Chilango lo reconoció como Hombre de Teatro 2008 y posteriormente como el Actor de la Década en
Teatro en su recuento de 201 0.

[...] ¿Qué nacerá del derrumbe de las ideologías? ¿Amanece una

era de concordia universal y de libertad para todos o regresarán las
idolatrías tribales y los fanatismos religiosos, con su caudal de
discordias y tiranías?
Octavio Paz

PERSONAJES

LUTHOR (mismo actor que JUDAS)

CLARK
LUISA (mismo travestí que MAGDALENA)
SUPERMÁN
JESUCRISTO
CONCURRENCIA (los que están sobre la escena, pueden ser dos personas o mil)
PÚBLICO (los que acuden a ver la obra)

Obra inspirada por la película Supermán.

PRÓLOGO

Suena un teléfono celular en la sala.

LUTHOR: (Contesta, es su teléfono.) ¿Sí?
No puedo hablar más fuerte porque estoy en el teatro.
¿Con quién?
No, está equivocado.
¡Ya le dije que no soy!
¿Mi nombre?
¿Alguna vez has oído hablar de Lex Luthor?
Cuelga el teléfono.
LUTHOR (Al público:) ¿Saben cómo terminé con los superhéroes? Diversos estudios demuestran que la actividad de éstos al
volar afecta la señal de los teléfonos celulares.
"De cómo un superhéroe corta la recepción de tu teléfono al pasar volando y cómo daña esto al frágil mercado de las
telecomunicaciones" fue el nombre de mi estudio de mercado. Llevé a juicio la controversia. Millones de dólares se
veían afectados por esa eventualidad. También los usuarios apoyaron mi causa; interfería con sus llamadas
personales o de negocios. Y por eso prefirieron su privacidad por encima de la seguridad que podía proporcionarles
un salvador.
La Corte determinó la prohibición: "¡Los superhéroes no podrán sobrevolar metrópolis donde las compañías de
telefonía celular mayoritarias ejerzan, so pena de ser derribados por la fuerza aérea en caso de reincidencia!"
Poco a poco los superhéroes voladores dejaron de planear sobre nuestras cabezas. Todos desaparecieron del
firmamento. Menos él. ¡El insurgente! ¡Supermán! Nunca acató.
 Para la fuerza aérea fue fácil localizarlo, no con radares, sólo revisaban si su celular no tenía buena recepción,
miraban hacia arriba y ahí estaba él, volando con descaro. ¡Y así fue como todo terminó! ¡Supermán murió
derribado por un vulgar avión de caza F-16 de segunda generación, con un misil con cabeza de kriptonita! Quedó
desmembrado en el aire. Durante tres horas llovió su cuerpo sobre la ciudad, como confeti azul y rojo que cae en un
carnaval. ¡Mi carnaval!
¡Supermán murió por oponerse a Movistar!

Pausa.
LUTHOR: Se volvió una víctima más del sistema al que juró defender. Y por favor, señores, no se confundan: esto no es un
cómic, aunque vean hombres musculosos y en calzones, esto más bien es un documento de fe: la fe de los
superhéroes... ¿O los superhéroes de la fe? Por favor, que se dé comienzo a la lectura:

CÓMIC I: SUPERMÁN VS. CRONOS

Viñeta 1

CLARK (Al público:) ¡La caída libre de una máquina de escribir! A veces olvidas pasajes de tu propia vida. ¿Cómo recordar
algo más, siquiera un nombre? Según yo, se llamaba Luisa. No me crean. Los evangelios se construyen a partir de la
memoria, pero a veces falla y hasta confunde personas.
LUISA aparece en forma de recuerdo.
LUISA: ¿Puedo pasar?
CLARK: Claro.
LUISA: (Mira a su alrededor.) ¿Así que éste es tu departamento? Muy industrial tu estilo. Clark, traes desabrochado un
botón, ¡déjame...!
LUISA intenta abotonarle la camisa, pero CLARK cubre la insignia de superhéroe que lleva debajo de ésta.
LUISA: (Algo llama su atención del departamento.) Ah, ¿tienes un ático? ¿Qué hay en él? ¿Puedo abrirlo?
CLARK: ¿Para qué?
LUISA: Quiero saber quién eres.
CLARK: Esa respuesta no está allí. ¿No soy transparente para ti?
LUISA: Eso creí... ya veo que no. Tal vez, si abro tu ático...
CLARK: Bueno. (Al público:) ¿Cuántas veces no me pasó? Esa vez lo olvidé. Ya no le cabía nada al ático, cuando lo abría,
las cosas se me venían encima; el problema era cuáles y a quién le caerían hoy.

Cae una máquina de escribir, golpea la cabeza de LUISA y la mata.

CLARK: ¡Cuidado!
CLARK y SUPERMÁN se desdoblan.
SUPERMÁN: ¡Pero ella es una mortal!
SUPERMÁN acomoda el cuerpo inerte de LUISA sobre sus piernas.
SUPERMÁN: ¡Cuánta sangre! ¡A mí no me puede pasar esto, no soy Clark! ¿Entonces por qué hablo y sollozo como él? Él no
puede hacer nada, ¡yo tengo superpoderes!

CLARK rompe su camisa y bajo ella asoma la "S", no obstante SUPERMÁN ya está a su lado. Ambos quedan
irremediablemente divididos.

SUPERMÁN: ¡Volaré en dirección contraria a la rotación de la tierra! Así haré retroceder el tiempo hasta antes de que Luisa
muriera y podré evitarlo.

Comienza a volar y a hacer girar el mundo al revés.

SUPERMÁN: ¡Unas cuantas vueltas más y nada de esto habrá ocurrido!
 Viñeta 2

SUPERMÁN en medio de una batalla campal: JESUCRISTO expulsa a los mercaderes del templo. Entre éstos se
encuentra JUDAS, quien roba lo que puede a los mercaderes durante la trifulca, y CIARK, que está todo desorientado.
JESUCRISTO: Está escrito: mi casa será para la oración, ¡pero ustedes la vuelven cueva de ladrones!
SUPERMÁN: ¡Alto! ¿Qué pasa? Eres el villano en turno, ¿no es cierto? Deja a estos pobres... ¿Comerciantes?

Asombrado por el aspecto de JESUCRISTO.

SUPERMÁN: ¿Dónde estamos? ¿Qué fecha es hoy?
JESUCRISTO: ¡La historia del mundo se divide en antes y después de mí!

Pausa.
SUPERMÁN: ¡Déjalos en paz! Creí que habíamos acabado con los comunistas, pero ya veo que no. La única solución es el
libre mercado, ¿no entienden?
JESUCRISTO: ¿De qué hablas? Esta es la casa de mi Padre.
SUPERMÁN: Ve y llámale; seguro que juntos podremos solucionarlo.
JESUCRISTO: ¡Mi padre es Dios!
SUPERMÁN: ¿Dios? ¿Quién eres tú?
JESUCRISTO: ¡Alfa y Omega!
SUPERMÁN: Buen nombre para un supervillano, te felicito.
JESUCRISTO: ¡Soy Hijo de Dios!
SUPERMÁN: ¿De cuál?
JESUCRISTO: Del Único.
SUPERMÁN: De donde vengo, no hay un único.
JESUCRISTO: ¿De dónde vienes, fariseo?
SUPERMÁN: ¡De Kriptón!
JESUCRISTO tumba otro puesto de comerciantes.
SUPERMÁN: ¡Espera! Si vuelves a tocar la mercancía...
JESUCRISTO: ¿Qué harás para evitarlo?
SUPERMÁN: Luchar contra ti.
JESUCRISTO: ¿Y si no me opongo? ¿Si en lugar de luchar contigo pongo mi otra mejilla?
SUPERMÁN: ¡Vaya! ¡Eso es perverso! Ni a Luthor se le ocurrió tan malévolo plan. ¿Qué clase de supervillano eres? Usas
capa como yo, Alfa y Omega te haces llamar, ¿no es cierto? Escúchame bien: déjalos, de ellos depende la estabilidad
macroeconómica.
JESUCRISTO: ¿Es una parábola? ¡No me imites!

A la concurrencia.
JESUCRISTO: En verdad les digo que soy...
SUPERMÁN: ¿Qué dices?
JESUCRISTO: ¡El salvador!
SUPERMÁN: No, soy yo.
JESUCRISTO: ¡No, soy yo!
SUPERMÁN: Jamás soporté mayor atrevimiento, ¡compararse conmigo! Si en verdad lo eres, demuéstralo.
JESUCRISTO: ¿Cómo?
SUPERMÁN: Déjalos tranquilos y los habrás salvado.
JESUCRISTO: ¡No vine a traer paz sino guerra! ¡Llegué para enfrentar a hijos contra padres y a ancianos contra nietos! ¡El
enemigo del hombre será quien viva en su propia casa!
SUPERMÁN: ¡Por fin encontré una Némesis a mi altura!
JESUCRISTO: ¡Demoleré el templo y lo construiré en tres días!
SUPERMÁN: ¿Y qué? También puedo hacerlo. ¿Sabes qué? No seguiré discutiendo, nos miran mujeres y niños, de lo
contrario... y si insistes en ser salvador, te espero mañana a las afueras de... ¿Qué lugar es éste?
JESUCRISTO: ¡Un templo!
SUPERMÁN: ¡Gracias, rival! Te espero mañana a las afueras del "templo" para ver quién es más poderoso.
JESUCRISTO: Amén.
SUPERMÁN: ¡Así sea!
JESUCRISTO: Entonces nos vemos.
SUPERMÁN: ¡Pues nos vemos!
Cada cual sale por su lado con el entrecejo fruncido.

Viñeta 3

CLARK emerge de entre los escombros del desastre anterior.

CLARK (Al público:) Bueno, como dato extra puedo decir que en aquel sitio, todos vestían a la moda de Supermán, la
mayoría llevaba capas, por eso Supermán no desentonó entre el conjunto. Además me dijeron que aquel hombre,
también tenía superpoderes.

Viñeta 4

Exterior del templo.

SUPERMÁN: ¿Qué hago aquí? ¿Será Sudamérica? ¡Oh, Luisa! ¡Voy por ti! (Se detiene.) ¿Pero qué hago? ¡Tengo un deber!
¡Primero detengo al villano! (Mira su reloj de pulso.) Olvidé quitármelo. Ya es tarde. No vino el barbón ese vestido
con falda. Voy a buscarlo con mi supervisión. ¡Allí está! ¡Voy por él!
SUPERMÁN sale volando.

CLARK (Al público:) Después de que me repuse, volví a preguntar por él, el hippie ese. ¡Me dijeron que se había ido al lago
de Tiberiades! Ya sé qué van a decir: estos sucesos ocurrieron tiempo antes del templo y no después. Eso refieren los
evangelistas, ¿no? Bueno, pues no es lo más apegado a la verdad.

Viñeta 5

El lago. JESUCRISTO predica a la concurrencia sobre una barca.

JESUCRISTO: ¿Por qué siempre me ponen a prueba, hombres de poca fe? Mírenme, todo rasguñado, no puedo caminar sin
que rasguen mis vestidos y supliquen milagros. ¿No pueden simplemente escuchar y creer mi prédica?
CLARK (Al público:) Si fuera evangelista no sabría dónde insertar este pasaje, pero como reportero, sin duda, en la sección
de finanzas. Verán por qué:
JESUCRISTO: Propongo algo, ¡en lugar de pez, les enseño a pescar! ¿Cómo que están muy viejos para pescar? ¿Cómo que
jóvenes para pescar? ¿Cómo que muy hambrientos para pescar?
SUPERMÁN llega volando.
SUPERMÁN: ¿Enseñarles?
JESUCRISTO: ¿Otra vez tú?
SUPERMÁN: ¿Así pagas su idolatría? ¿Ignorando su simple petición? (A la audiencia:) ¡Este hombre no es cool!
JESUCRISTO: ¡Cool!
SUPERMÁN: Sólo hablas, yo en cambio, ¿qué no puedo hacer con mi superfuerza? Escúchenme, él no da lo que piden.
¡Véanme a mí!
CLARK (Al público:) Tomé una red y me sumergí. Cuando salí, casi estalló de la cantidad de peces que me traje.
SUPERMÁN: ¿Qué tal, eh?
JESUCRISTO (A Supermán:) ¡Ah, conque esas tenemos! Está bien, ¡otro milagro! A ver, ustedes, pongan atención: remen
hacia dentro y echen su red. También la concurrencia pesca cardúmenes enteros en el lago.
SUPERMÁN: ¡No!, diste más de lo necesario. ¡Sobreoferta!
JESUCRISTO: ¡Exageras! Desoigan al falso profeta.
JUDAS: ¡Están en el mástil del barco!
JESUCRISTO: Pueblo, escúchenme, dejen las redes, si vienen en pos de mí, ¡los haré pescar hombres!
SUPERMÁN: ¿Cómo? Este hombre promueve... ¡el tráfico de blancas! Si lo siguen tendré que considerarlos delincuentes
también.
JESUCRISTO: Ignórenlo. Levante la mano quien se me quiera unir. ¿Sólo doce? Supongo que los otros tendrán cosas que
hacer. Ustedes doce, acompáñenme pues. ¡A tierra firme!
SUPERMÁN: ¡Llegó al puerto! (A la concurrencia:) Y ustedes, ¿qué hacen? No lo sigan, es subversivo.
 La concurrencia no le hace caso.
SUPERMÁN: Está bien, tendré que acompañarlos para que no corran riesgos. (Al público:) No entienden nada, ¡seguro son
demócratas!
SUPERMÁN y JESUCRISTO salen.
 CÓMIC II: LA LIGA DE LA INJUSTICIA

Viñeta 1
En tierra firme, JESUCRISTO está moliendo a golpes a MAGDALENA.
JESUCRISTO: ¡Te lo advertí!

Todos la rodean.
JESUCRISTO: ¡Acérquense! La capturé en acto indecente.

Rompe el vestido de la mujer y enseña su cuerpo voluptuoso.

JESUCRISTO: ¿Huelen su cuerpo? ¡Es prostituta! ¿A poco no creen? ¡Esta mujer se acuesta con el invasor! ¡Sí, la espié y le
da placer al romano!
SUPERMÁN: ¡Será porque pagan con traveler checks y con el dólar a la alza!
JESUCRISTO (A Magdalena:) ¡Escucha, enemiga de la Ley: no fornicarás, está escrito! (A la concurrencia:) ¡Démosle la lec-
ción final! ¡A matarla! Ayúdenme todos. ¡Tomen una piedra! (Levanta una.) A la una...
CLARK (A Supermán:) ¿Qué te pasa? ¿Por qué no haces nada?
JESUCRISTO: A las dos...
SUPERMÁN (A Clark:) ¡La piedra que sostiene en la mano!
JUDAS: (Idéntico a Luthor.) ¿Qué con ella?
SUPERMÁN: ¡Tú! ¿Aquí?
JUDAS: De qué habla, seguro me confunde...
SUPERMÁN: ¡Esa piedra! ¿Los dos? ¡No puede ser! ¿Aquí?
JUDAS: ¡Es sólo kriptonita!
SUPERMÁN: Pero de donde vengo... Seguro se extinguió con el paso de los años, pero mira a tu alrededor, aquí abunda.
JESUCRISTO: Y a las... (Con la mano en lo alto, a punto de apedrear.) ¿Pero qué hago? ¿No soy yo más culpable? Esperen.

Deja la kriptonita en el suelo.

JESUCRISTO: No estoy libre de pecado, por ello no puedo lanzar la primera piedra. (Se esconde tras la concurrencia a la
espera de que alguien inicie, nadie se atreve. JESUCRISTO se acerca a la prostituta y le da en la mano la kriptonita
con que iba a apedrearla.) Anda. Mejor apedréame tú. (Agacha la cabeza.) ¡No sabes cuántas injusticias cometí,
hermana!
LUTHOR (Al público:) Así pasaron las cosas. ¿No me creen? Recuerden la gran diferencia entre los evangelistas y Clark. El
por lo menos era reportero, tenía una metodología comprobada y un oficio de más de diez años que lo avalaban,
además, él fue un hombre del siglo XXI, ellos no.
SUPERMÁN: ¡Escúchame Luisa, arroja esa piedra y podré salvarte!
JESUCRISTO (Al SUPERMÁN:) ¿Por qué llamas Luisa a Magdalena?
LUTHOR (Al público:) Se parecían, ¿no? ¿Saben por qué? Bueno, para Clark conseguir los datos no fue sencillo, pero nada
que un mediano reportero no sepa hacer. Revisó el Libro de la Genealogía de Magdalena... Luisa era la última
descendiente, y tras muchas generaciones de putas, se llegó a una santa. ¡Su Luisa!
MAGDALENA (A JESUCRISTO:) ¡No me dejes, por favor! ¡Llévame contigo para que no vuelva a caer! Recógeme como una uva
que cayó tarde de la vid.
SUPERMÁN: ¿Por qué hablan tan raro por aquí?
JESUCRISTO (A MAGDALENA:) Ya te dije. ¡Haz lo que te plazca!
JESUCRISTO se aleja.

MAGDALENA: Ah, sí... Entonces, ¡te sigo!

MAGDALENA se abre paso ante la concurrencia, que se lo piensan un poco, pero después siguen a ambos.
SUPERMÁN (A todos:) ¡Aumentan! Hasta que no sepa sus planes debo permanecer a su lado. ¡Este lugar es la pesadilla de
cualquier superhéroe!
SUPERMÁN sale.
 Viñeta 2

SUPERMÁN y CLARK, cansados de tanto caminar, descansan un poco al lado del camino. CLARK sufre un dolor en el
pecho.
SUPERMÁN: ¿Y ahora qué te pasa?
CLARK: ¡Siento una opresión aquí, me duele el brazo!
SUPERMÁN: ¿Qué dices?
CLARK: ¡Sufro una paro! (Se doblega.)
SUPERMÁN: ¿Estás loco? No puede ser. ¡Tú eres yo! A Supermán nada puede matarlo.
CLARK: ¡En serio, me está dando! ¡Ayúdame, por favor!
SUPERMÁN: ¡Levántate, patético! Deja de comportarte como humano. ¡No padeces sus afecciones! Te sugestionaste. No
puedes morir, ¿entiendes? Y menos así.
CLARK: (Recupera aire.) Tienes razón. Discúlpame, tanto fingí ser como ellos que quizás me lo creí. Lo humano se
contagia.
SUPERMÁN: ¡Péinate!
CLARK lo hace.
SUPERMÁN: No, ¡te peinaste como yo!
CLARK: Perdón. (Se echa para atrás el típico rulo que Supermán lleva en la frente.) ¿Así? ¿Vamos a seguir contando la
historia? Nadie nos va a creer. (Al público:) La gente sólo cree en cuatro Evangelios... y éstos fueron escritos en dos
lenguas, hebreo y griego con fragmentos en arameo, después traducidos al latín y luego a cada idioma natal. Yo, en
cambio, les traje el original, hablado en inglés.
SUPERMÁN: ¡Pero hablas español, Clark!

Silencio.
CLARK: ¿Qué diría Freud de nosotros? ¿Quién es el Yo y quién el Superyó en esta relación?
SUPERMÁN: Pues yo. Soy Supermán, yo debo ser el Superyó.
CLARK: No, yo.
SUPERMÁN: No, tú eres el Yo nada más. Imposible que seas Superyó.
CLARK: Tú siempre quieres ser el Súper en todo, hasta en materia del Yo, ¡no es justo!

Berrinche y pataleta.
CLARK: Te estaba diciendo que aunque hable español, eso no prueba nada. Es doblaje, para exportarlo a otros mercados.
Pero que nadie dude, mi Evangelio fue anunciado en inglés y no pudo ser de otro modo. ¿Crees ilógico que no
asociara la imagen de Cristo con él y no lo reconociera? Pues no, no me pueden reclamar, no sé casi nada acerca de
la historia de su planeta primitivo. Nosotros no somos de aquí, vivimos foráneos. (Al público:) A ver, ¿cuántos de
ustedes nos pueden decir siquiera una anécdota sobre nuestro planeta? ¿Ninguno?

Viñeta 3

Dentro del cenáculo, JESUCRISTO pasa lista a sus discípulos.

JESUCRISTO: Bartolomé.
CLARK: Allí está.
JESUCRISTO: Andrés.
CLARK: Allá.
JESUCRISTO: Jacobo.
CLARK: Por allá. (Al público:) Este pasaje estaría seguramente en la sección de sociales.
JESUCRISTO: Juan.
CLARK: Hasta allá.
JESUCRISTO: Judas.
CLARK: El que se parece a Luthor.
JESUCRISTO: Mateo.
CLARK: No vino.
JESUCRISTO: ¿Cómo que no vino?
CLARK: Tuvo otro compromiso.
JESUCRISTO: (Decepcionado.) Ni hablar. Siéntense todos. Supermán, si quieres ocupa el lugar de Mateo.
SUPERMÁN: ¿Cómo? ¿No había asiento para mí?
JESUCRISTO: Es una cena privada, no lo tomes a mal.
SUPERMÁN: Sólo porque tengo hambre. Pero no quiero a Judas a mi lado, come como jabalí. ¡Y se parece a Luthor!
JESUCRISTO: (Ceremonioso.) ¡Ay, hermanos! ¡Cuánto he deseado comer con ustedes antes de padecer!

MAGDALENA llega.
JESUCRISTO: ¿Qué haces aquí, mujer? La reunión es para hombres.
MAGDALENA: Así son todas.
JESUCRISTO: Métete al cuarto mientras cenamos.
JESUCRISTO se acerca a SUPERMÁN y le habla al oído.
JESUCRISTO: Impídeme llegar hasta ella esta noche. ¿Ves cómo me mira? Siempre nos hemos gustado. Mañana moriré y no
sé si pueda soportar no haberla tentoneado.
SUPERMÁN: ¿Morirás?
JESUCRISTO: Luego te explico.
SUPERMÁN: ¿Estás seguro?
JESUCRISTO: Sí.
SUPERMÁN: Una vez que me des la orden, no hay marcha atrás, Jesús.
JESUCRISTO: Así sea.
SUPERMÁN: Conste.
MAGDALENA se acerca a LUTHOR y le habla al oído.
JESUCRISTO (A MAGDALENA:) ¿Y qué esperas? Se me hace tarde para empezar.

Antes de salir, MAGDALENA se acerca a SUPERMÁN.

MAGDALENA: No dejes que se me acerque, va bien en su misión.
SUPERMÁN: ¿Y tú qué sabes?
MAGDALENA: La mujer ve el futuro mejor que el profeta.
JESUCRISTO (A todos:) ¿En qué estaba? ¡Ah, ya recuerdo! (Toma la copa.) Tomen y repártanlo entre ustedes. ¡Mi sangre que
será derramada por los hombres!
SUPERMÁN: ¿Sangre? ¿Oyeron del sida?
CLARK: (Bebe de su copa.) No sabe a sangre, sabe a vino. ¡Está sabroso!
JESUCRISTO: Todavía no acabo.
SUPERMÁN (A CLARK:) A ver, deja probar. (Toma la copa y paladea.) ¡Hummm! ¡Nada mal!

Entra MAGDALENA de nuevo.

JESUCRISTO: ¡Otra vez! ¿Y ahora tú?
MAGDALENA: ¡Maestro, necesito que vengas! ¡Un hombre murió!
JESUCRISTO: ¿Y ahora quién?
MAGDALENA: Lázaro.
JESUCRISTO: Mujer, ¡es que estoy en una reunión importante!
MAGDALENA: ¡Por favor! ¡Te lo suplico!
SUPERMÁN: ¿Queda lejos?
MAGDALENA En...
JESUCRISTO (A SUPERMÁN:) ¿Y si me llevas volando para no tardar?
SUPERMÁN: ¡Imagina si todos me usan como su transporte colectivo!
MAGDALENA: ¡Es muy importante!
JESUCRISTO: Bueno.
MAGDALENA: Acompáñame.
JESUCRISTO (A SUPERMÁN:) ¡Accede! Sólo esta vez, para que sea rápido.
SUPERMÁN: Bueno. (A JESUCRISTO:) Vayamos pues. Después de ti, ¡amigo!
JESUCRISTO: No, después de ti, ¡hermano!
JESUCRISTO se monta arriba de SUPERMÁN.
JESUCRISTO: (A la concurrencia:) Ahora vuelvo. No olviden lo que estaba diciendo. Acuérdense de que este aposento no es
nuestro, sino prestado.
MAGDALENA se trepa también sobre SUPERMÁN y los tres salen volando.

Viñeta 4

CLARK escribe en su libreta de apuntes.

CLARK: Hecho 1: Jesucristo resucitó a aquel hombre con su superpoder, me consta. Tan sólo dijo: "¡Levántate y anda!". Y
entonces el muerto abrió los ojos como despertando de un ligero sueño. Hecho 2: Como fue un milagro agotador, a
Jesucristo le entró el hambre y dijo que mejor nos regresáramos a cenar, pero lo que encontramos a nuestro regreso
no puede ser reseñado en la Biblia, ni en el Daily Planet, ni siquiera en los DC Cómics. Parecería más un mal manga
que otra cosa.

Viñeta 5

JESUCRISTO y SUPERMÁN entran al cenáculo. Todos están ebrios.

JESUCRISTO: ¿Pero qué pasó aquí?
CLARK: ¡Nos bebimos casi toda tu sangre! ¡Hip!
JESUCRISTO: ¿Qué? Les dije que se comportaran. (A la concurrencia:) Ustedes dos: ¡quietos!
JUDAS: ¡Tenemos ganas de nadar desnudos!
JESUCRISTO: ¿Cómo creen? Están borrachos. Cálmense.
CLARK: ¡Ya sé! Hay que llevarnos más sangre del Maestro. (Alza la copa.)
JESUCRISTO: ¡Esa sangre no sale de aquí, se los advierto! (Toma un trozo de pan.) ¿Se acuerdan en qué estábamos?
JUDAS: Algo así de que íbamos a derramar tu sangre, pero no fue así. (Manotea al hablar y tira su copa.) ¡Chin, ya la tiré!
JESUCRISTO: Cállense. Pongan atención.

Levanta el trozo de pan.

JESUCRISTO: ¡Este es mi cuerpo...!
CLARK: ¿Oyeron? ¡Dice que es su cuerpo! ¡Ja, ja, ja!
JESUCRISTO: Si no te callas... Continúo: ¡mi cuerpo entregado para el perdón de sus pecados, hagan esto para recordarme!
JUDAS: De que te recordamos, te recordamos, Maestro.
JESUCRISTO: Esperen, todavía no acaba la ceremonia. Ven acá, siéntate.
JESUCRISTO comienza a lavarle los pies a alguien del público.
JUDAS: ¡Mira, le lava los pies!
SUPERMÁN: (Quien también bebe.) Es para que se le baje la peda. ¡Entendí la moraleja! Los superhéroes ni jubilación te-
nemos, terminamos lavando pies al final de nuestra vida. ¡Me iluminaste, Jesús, a partir de ahora también serás mi
Maestro! (Bajo el influjo del alcohol:) Ah, ya decía yo que en algún lado te había visto, te me hacías conocido, pero
no recordaba dónde. El de los dibujitos: ¡No eres Jesús, eres Cristo! No te pareces a las caricaturas que hacen de ti.

Viñeta 6

LUTHOR (Al público:) Alrededor del año 1492, Leonardo da Vinci realiza el famoso dibujo de El Hombre de Vitruvio, en
donde asienta las proporciones ideales de la figura humana. Ahora bien, ¿por qué siendo la sociedad anglosajona tan
racista dibuja a sus superhéroes de cabello y ojos oscuros —como Supermán, Batman, Punisher, la Mujer Maravilla
—y, por el contrario, siendo Jesucristo árabe se le pinta rubio y de ojos claros? Esto es una verdadera paradoja
pictórica que une el renacimiento con el posmodernismo.

Viñeta 7

CLARK entra al cenáculo vestido de mujer.

JESUCRISTO: ¿Y tú de dónde sacaste ese vestuario?
CLARK: Se lo quité a Magdalena mientras dormía.
JESUCRISTO: ¿Duerme desnuda?
CLARK asiente.
JESUCRISTO: Bueno, señores, yo ya me voy a dormir. Mañana tengo un día muy duro: tres caídas, cargar la crucecita, cruci-
fixión, todo eso es muy agotador. Así que, por favor, ayúdenme a recoger. Y mientras tanto, ¡buenas noches a todos!

Alboroto, nadie le presta atención. Se encamina rumbo a la habitación.

SUPERMÁN: (Le cierra el paso.) ¿A dónde?
JESUCRISTO: (En confidencia.) Mañana moriré. Nunca lo he hecho. Ten piedad. ¡Déjame pasar! ¡Sólo un ratito!
SUPERMÁN: ¿Qué me pediste?
JESUCRISTO: Me equivoqué.
SUPERMÁN: Nos toca salvar al mundo. No hay tiempo para apetitos.
JESUCRISTO: ¡No aguanto las ganas! ¿La has visto bien? ¡Tiene un cuerpo como para pecar! (De su túnica sobresale una
"casa de campaña" en salva sea la parte.)
SUPERMÁN: Aún tienes demasiado apego a lo humano. A mí me pasaba al principio, pero ignoraré tu petición y eso te hará
más fuerte. Confía en mí.
JESUCRISTO: Abusado porque soy inmortal y si es necesario pasaré... (Adopta una posición de lucha cristiana.)
SUPERMÁN: ¿Así que esas tenemos? (Se arremanga el supertraje.) No será la primera vez que las cosas se solucionen a
golpes.

CLARK interviene entre ellos como réferi.

CLARK: ¡Jesucristo y Supermán están listos!

Viñeta 8

SUPERMÁN y JESUCRISTO como en la lucha libre, se dan con todo lo que tienen a la mano y los golpes más bajos posibles, pero
nadie gana.
SUPERMÁN: (Resopla.) ¿Cuánto tiempo vamos a seguir así? ¡Ninguno puede vencer al otro! ¡Mejor ríndete!
JESUCRISTO realiza a SUPERMÁN una llave a la muñeca y le zafa su reloj.

JESUCRISTO: (Lo recoge.) ¿Y esto?

SUPERMÁN: ¡Déjalo! Es mi Casio.
JESUCRISTO: ¿Tú qué?
SUPERMÁN: Reloj de pulso... ¡Devuélvemelo!
JESUCRISTO: (Suena la alarma.) ¿Por qué hace así?
SUPERMÁN: A ver, enséñamelo.
JESUCRISTO se lo muestra a la distancia.
SUPERMÁN: Cuarto para la seis, Clark ya tendría que irse a trabajar. Va a amanecer.
JUDAS (Al público:) ¡Ridículo! ¡Quiere hacernos creer que eso se anticipa al canto del gallo!
JESUCRISTO: ¡Imposible! ¡Sería Dios si pudiera anticipar un nuevo día!

Los rayos del sol se infiltran por la ventana.

JESUCRISTO: ¡No puede ser! ¡Es verdad! ¡Esta cosa da órdenes al mismo sol! (Arroja el reloj y sale.)
CLARK (Al público:) Jesucristo perdió momentáneamente la razón. ¡La única manera en que Supermán lo venció!
SUPERMÁN recoge su reloj y se lo ajusta a la muñeca. Sale tras de él.

Viñeta 9

SUPERMÁN sigue a JESUCRISTO hasta el jardín de Getsemaní y se le acerca, JESUCRISTO oculta que está chillando.
JESUCRISTO: ¿Dónde está Magdalena?
SUPERMÁN: No estuvo bien lo que hiciste.
JESUCRISTO: ¿Por qué te pones así?
SUPERMÁN: Es que la extraño. Se le parece mucho.
JESUCRISTO: ¿A la de mi profecía? ¿Por quién estás aquí?
SUPERMÁN: Sí, Luisa. Casi juraría que es ella. ¿Dices que Magdalena es criminal?
JESUCRISTO: Por desgracia. Desobedece los mandamientos.
SUPERMÁN: ¿Cuáles?
JESUCRISTO: Los de Moisés. Nos permiten discernir el bien del mal en nuestros actos.
SUPERMÁN: ¿Y para qué si me tienen a mí?
JESUCRISTO: No entiendes, ¡el mal es un conflicto espiritual!
SUPERMÁN: ¡Es el enemigo quien encarna al mal! El que no piense como tú. Bueno, y además ya todo acabó, eres cómplice
de varios crímenes y debes acompañarme. (Intenta atrapar a JESUCRISTO.)
JESUCRISTO: ¡Pero si te caes de borracho! Y a todo esto, ¿quién eres para juzgarme?
SUPERMÁN: El justiciero.
JESUCRISTO: Bah, ¿de qué sirve un justiciero si no puede cambiar el origen del mal? ¿Si no pudo impedir que Caín matara a
Abel?
SUPERMÁN queda perplejo.
JESUCRISTO: ¿Por qué te quedas pasmado? ¿Oíste de ellos?
SUPERMÁN: No, lo que dijiste... La ausencia de justicia primera. Tienes razón, ¿qué caso tiene corregir sin solucionar?
JESUCRISTO: Ya no puedo perder el tiempo contigo, tengo que salvar a Israel, ¡el pueblo elegido por Dios!
SUPERMÁN: ¿Es Norteamérica? Revisa nuestros billetes: ¡In God We Trust!
JESUCRISTO: ¿Y qué tal que tu pueblo es la nueva Sodoma o Gomorra? ¿Y si Dios quiere purificar el mundo y destruye tu
aldea?
SUPERMÁN: Me le opongo.
JESUCRISTO: Contra Él no puedes.
SUPERMÁN: ¡Soy de acero!
JESUCRISTO: ¡Y yo de polvo!
SUPERMÁN: (Carraspea.) Oye, como buen enemigo te recomiendo: no digas eso, el polvo no pone a temblar a nadie.
JESUCRISTO: No te preocupes, mi plan está en marcha.
SUPERMÁN: Te advierto: si tu reunión planea atentados a la ONU, ¡mejor piénsalo dos veces! Estoy aquí, ¿me escuchas?,
pisándote los talones.
JESUCRISTO: Supermán, es que debo confesarte algo. No sé si se cumpla la profecía.
SUPERMÁN: ¿Cuál?
JESUCRISTO: Seré crucificado y resucitaré al tercer día. ¡Es un milagro fundamental para mi carrera artística!
SUPERMÁN: ¡Ya no tomes! Y no te preocupes. No creo estar aquí y ahora en balde.
JESUCRISTO: Supermán, dime la verdad, ¿cómo será el mundo después de mí?
SUPERMÁN: No me preguntes todavía, hoy y ayer se me confunden.

Algo se mueve entre los arbustos.

SUPERMÁN: ¿Qué pasa allí?
Se acercan.

Viñeta 10

Detrás de uno de los arbustos, JUDAS y MAGDALENA fornican.

JESUCRISTO: Pero, ¿y esto?
JUDAS: (Se cubre.) ¡Perdón, Jesús! No fue mi intención.
JESUCRISTO: Tú…
MAGDALENA (A JESUCRISTO:) Si en algo te consuela, no lo hice por dinero.
JESUCRISTO: ¿Entonces por qué?
MAGDALENA: Por piedad. Nunca se había acostado con mujer.
JESUCRISTO: Ni yo tampoco.
SUPERMÁN: ¡Ni yo!
JESUCRISTO (A MAGDALENA:) ¡Me traicionaste!
SUPERMÁN: ¡A mí también!
JESUCRISTO: ¡Hasta creí que nos íbamos a casar!
SUPERMÁN: ¡Yo también, Luisa!
MAGDALENA: ¡Suéltame, no soy Luisa!
SUPERMÁN: No me dejes... ¡Por ti hasta abandono mi carrera de superhéroe!
MAGDALENA: Jesús, ¡quítame este loco de encima!

JESUCRISTO y JUDAS le ayudan a zafarse a SUPERMÁN.

JESUCRISTO: (Siente a Judas al lado.) ¡Ah! Ya sé quién quiero que me traicione.
JUDAS: Tú lo que quieres es separarme de Magdalena, ¿no es cierto?
SUPERMÁN: ¿Cuál Magdalena? ¿De qué hablan? ¡Luisa me fue infiel!
TODOS: ¡Luisa está muerta!
SUPERMÁN: ¡No es verdad!
JUDAS (A JESUCRISTO:) ¡Está bien, te traiciono! (Al público:) Después yo fui con los primeros romanos que me encontré en
una esquina y lo traicioné por treinta monedas de plata.
 CÓMIC III: DOOMSDAY

Viñeta 1

Amanece. CLARK está dormido Junto a SUPERMÁN y se cubre con su capa como si fuera cobija. SUPERMÁN despierta al
fin.
SUPERMÁN: ¿Qué pasó aquí? ¿Dónde diablos están todos? ¡Ay, este maldito dolor! (Se toca la cabeza.) ¿Cuánto tiempo me
quedé dormido? ¿Ya pasó todo?
CLARK: (Despierta.) ¡No puede ser! ¿Nos perdimos lo mejor? ¡La crucifixión! ¡Ya debió de haber empezado! Es el horario
estelar.

Viñeta 2

CLARK y SUPERMÁN llegan al Gólgota.

CLARK (A SUPERMÁN:) ¡No lo puedo creer! ¡Por tu culpa llegamos tarde al evento más importante de la Historia Universal!
¿Y por qué demonios estoy vestido de mujer?
CLARK es interceptado por JUDAS.
JUDAS: ¡Tú, enlístate en el ejército romano!
CLARK: ¿Qué? ¿Quién, yo?
JUDAS: ¿Cuál es tu nombre, soldado?
CLARK: Clark.
JUDAS: ¿Cuánto mides?
CLARK: Uno noventa. ¿Oye, pero qué no eras judío, Judas?
JUDAS: Ahora soy romano. ¡Y a ti también te conviene! ¿Estás dispuesto a servir a tu país y a imponer el latín como lengua
oficial del mundo?
CLARK: ¡Pero hablas español, Juditas!
JUDAS: Tú únete. ¡Vamos a invadir el mundo, y de paso le damos una lección a este maldito musulmán!
JUDAS arrastra a JESUCRISTO hasta el sitio.

CLARK: ¡Bueno, total, hoy no tengo nada mejor que hacer! Además tengo una confusión de identidades tremenda: ya no sé
si soy hombre o mujer, superhéroe o álter ego, americano o romano, joto o quimera. ¡Mira cómo estoy vestido!
¡Total, todo qué más da por estos rumbos!
CLARK y JUDAS se le van a golpes a JESUCRISTO y le propinan el calvario.

Viñeta 3

JESUCRISTO está en la cruz y a punto de expirar. SUPERMÁN, CIARK y JUDAS a su lado.

SUPERMÁN (Al público:) Ah, ¡ya vi esto en el National Geographic! Los confundí por prietitos, pero no estamos en Jerusalén,
¡seguro esto es la Pasión de Iztapalapa!
JESUCRISTO: ¿Pero qué esperas para matarlos, Padre? (Mira al cielo.) ¡Soy yo, Júnior!
CLARK (Al público:) Este acontecimiento queda perfecto en la sección de nota roja. ¡Lástima que no haya traído la cámara
conmigo!
SUPERMÁN (A JESUCRISTO:) Me decepcionas. ¡Ahora debes ocupar tus superpoderes! (Buscando entre la concurrencia:)
¿Alguien tiene agua? ¡No aguanto esta cruda!
JESUCRISTO: Te grité, pero no respondiste.
SUPERMÁN: Me quedé dormido.
JESUCRISTO: ¿Tan tarde? No tienes derecho a soñar ni a comer. Te necesitamos, ¡somos frágiles!
SUPERMÁN: ¿A quién le hablas? (Voltea a ver tras de sí.) ¿A mí o a tu Dios? Entiende que no basta un Mesías para todo el
mundo.
JESUCRISTO: ¡Ay, cómo duele! Supermán, ¿por qué me has abandonado?
Confusión en el Gólgota.
 Viñeta 4

CLARK, afuera del sepulcro de Jesucristo.

CLARK: Hecho 6: ningún humano pudo remover la roca del sepulcro.
SUPERMÁN llega volando hasta el sepulcro. Es de noche.
CLARK: ¡Sólo Supermán! ¡Con su superfuerza la echó a un lado y entró!

Viñeta 5

La cueva se llena de luz de luna. Adentro, el cuerpo amortajado del Mesías.

SUPERMÁN: (Mira su reloj y el cadáver de JESUCRISTO.) ¿Qué esperas? Ya pronto se va a cumplir el plazo. Salgamos juntos
de aquí antes de que alguien nos vea. ¡Casi he llegado a creer en ti!
CLARK: El plazo llega a su límite en 10...
SUPERMÁN: Dijiste resucitar al tercer día y ya estamos en vísperas.
CLARK: 5, 4, 3...
SUPERMÁN: (Con el cronómetro de su reloj.) 4, 3, 2...
CLARK: Nunca te has equivocado respecto a tus profecías... Mucho menos lo vas a hacer esta vez. ¡Es tu acto principal!
SUPERMÁN: 2, 1...
SUPERMÁN: Bien, Jesucristo... ¡Es hora! ¡Levántate y anda!
La alarma del reloj suena.
SUPERMÁN (Al cadáver de JESUCRISTO:) ¿Por qué no te pones de pie de una buena vez?
CLARK: Algo debe de estar mal. ¡No funciona Jesucristo! ¡A lo mejor se descompuso de repente!
SUPERMÁN: ¡Dale una patada, como a la tele! A lo mejor así se arregla. ¿Estará atrasado mi reloj? ¿A poco la resurrección no
sucedió?
CLARK: Si Jesucristo no resucita, la historia del mundo dejará de ser igual. (A SUPERMÁN:) Viste cómo se comportaron los
apóstoles. Estafas, usura, intentos de guerrilla, terrorismo. Así el mundo. Un intento de revolución tras otra. ¡Ya
estás viejo para repetir la cruzada, Supermán!
SUPERMÁN: (Al cadáver de JESUCRISTO:) ¡Ah, ya entiendo la influencia que tendrás!
CLARK (A SUPERMÁN:) La historia está a punto de tomar su cauce de nuevo. (Al público:) Pero entonces recordé la frase que
dijo Jesucristo aquella vez...
JESUCRISTO: (Resucita, pero sólo para decir su parlamento.) Bah, ¿de qué sirve un justiciero si no puede cambiar el origen
del mal? (Se vuelve a morir.)
SUPERMÁN: ¿Cambiar el origen?
CLARK: ¿Cómo no lo pensé antes?
SUPERMÁN: Si Dios es el responsable de cada acto, como decías, El me puso ante esta situación con algún propósito.
CLARK Y SUPERMÁN: ¿Qué querrá Dios de Supermán?

Viñeta 6

SUPERMÁN, con su supervisión, mira al cielo en busca de Dios.

SUPERMÁN: ¿Acaso es eso? ¿Por eso me pusiste en este momento, Dios mío... digo, Dios de Jesucristo?
CLARK: ¿Eres el indicado para cambiar la historia, Supermán?
SUPERMÁN: (Ensimismado.) Claro, si Jesucristo no resucitó, haré que así parezca y el mundo se conserve tal cual lo conocí,
¡Luisa incluida!
CLARK: ¡Sí! ¡Buena idea! ¡Magnífica solución! (Al público:) Así como sólo Supermán pudo abrir el sepulcro, sólo él pudo
desaparecer el cuerpo.
SUPERMÁN (Al cadáver de JESUCRISTO:) Ya sé... ¡Utilizo mi visión calorífica para calcinarte! ¡Y así nadie te vuelve a
encontrar!
CLARK (Al público:) Dato: La visión calorífica de Supermán calcina un cuerpo humano en siete segundos sin dejar rastro.
La radiación producida por éste dejó impresa la silueta en la Sábana Santa. Misterio que hasta la fecha los científicos
no pueden descifrar, ¿saben por qué? Porque no consideraron a Supermán como parte de su hipótesis.
SUPERMÁN: ¡Listo!
CLARK (Al público:) ¡Detengan la imprenta! Noticia de última hora: ¡Supermán calcinó el cuerpo de Cristo! La evidencia.
"Y la profecía fue cumplida..." O al menos, se le parece.
SUPERMÁN: ¡Esto fue el pasado, a partir de ahora, el transcurso de la historia! ¡Volví a salvar al mundo!
CLARK: ¡Al menos durante...! (Mira su reloj:) ¡Los próximos dos mil años!
SUPERMÁN: ¡Demos gracias a Dios!
CLARK: ¡Y a Supermán!
SUPERMÁN (Al lugar vacío del sepulcro:) ¡Bienvenida Norteamérica!
CLARK: ¡Quiero escribir su biografía! Digo, ¡su autobiografía!
SUPERMÁN (Triunfal:) ¡Falsifiqué el milagro de la resurrección! ¡Yo hice a Occidente!
CLARK (Al público:) Ya casi pueden ir en paz, la ceremonia está a punto de acabar.
SUPERMÁN: Sólo falta regresar al presente. ¡Regresar a mi suburbio, vivir entre mis conciudadanos, admirar mi bandera!
Salen.

Viñeta 7

SUPERMÁN está afuera del sepulcro y CLARK lo cubre para que no sea visto.
CLARK: ¡Escóndete! Veo venir cuatro hombres.
SUPERMÁN: (Escondido.) Dime... ¿quiénes son?
CLARK: Mateo, Juan, Lucas y Marcos, o por lo menos se les parecen.
SUPERMÁN: ¡Qué bueno que llegan! ¡Son los chismosos del grupo! De no ser amarillistas, seguro serían buenos paparazzis.
CLARK: O reporteros. Y nos dejarían sin trabajo.
SUPERMÁN: A ti, ¡porque el mundo necesita quien le cuente la historia!
CLARK: Querrás decir: que la corrija.
SUPERMÁN: ¡Bah!, da lo mismo... Salgamos.
CLARK (Al público:) Y Supermán reacomodó la roca de la entrada, como si nada hubiera pasado, con excepción de que
adentro no quedó prueba alguna. ¡El crimen perfecto!
SUPERMÁN: ¡Listo! (Sacude palmas.)
CLARK: (Cansado.) ¡Uff!
SUPERMÁN: ¿Qué dijiste?
CLARK: No fui yo...
SUPERMÁN: ¿Entonces quién?
CLARK: ¡Mi Yo rebelde! ¡O mi Superyó! ¡O mis chacras! Y es que ya no sé ni en qué creer: ¡Si en Marx, la Virgen de
Guadalupe, la Santa Muerte, Santo "El Enmascarado de Plata"...!

SUPERMÁN comienza a estrangular a CLARK.

CLARK: ¿Por qué lo haces?
SUPERMÁN: ¿Cómo que por qué? ¡Sabes demasiado!
SUPERMÁN mata a CLARK.
SUPERMÁN: Esto queda entre tú y yo.

Adopta su clásica postura de superhéroe.

SUPERMÁN: "Así mi reino no tendrá fin."

SUPERMÁN sale volando del escenario y con su superfuerza... CIERRA EL TELÓN
México 2004 d. C.-2008 d. S.

Notas de autor
La dualidad del mini-héroe: ¿Qué es lo primordial? ¿Qué Clark Kent, acorde a su profesión de reportero, realice una
investigación seria sobre la desigualdad económica y a partir de eso publique un artículo que contribuya a aminorar los
problemas sociales en el mundo... o que, a través de su identidad secreta y usando sus superpoderes, Supermán salve al
mundo de algún enemigo extraterrestre que esté al acecho? Dilema superegocentrista (1999)
Bertolt Brecht creó su Teatro Épico para cambiar al mundo y lo más que consiguió cambiar fue al teatro mismo. ¿A poco no
se puede salvar a nadie ni a nada por completo? ¿Tenemos que conformarnos con las revoluciones infinitesimales o ni
siquiera con eso? (2007)
El evangelio según Clark Kent es una crítica a toda forma de "historia oficial" que sirva para perpetuar en el poder a grupos
hegemónicos, tanto del ámbito ideológico, como del económico y religioso. Sanarnos a carcajadas es la única religión que
nos queda. Sólo eso o creer en superhéroes o dioses. ¡Dios está muerto, pero también Supermán y Marx!, ¿entonces en
quién creer? (2008)
Desde su estreno, el día 2 de julio de 2008, en el Teatro Helénico, El evangelio según Clark Kent no ha cesado de dar
funciones en la República Mexicana y Estados Unidos, sin conocer todavía la palabra The End ni toparse con su muy
particular kriptonita. Al teatro le sientan bien los superhéroes, así como antaño le sentaban bien los héroes mitológicos. En
la escena, el actor debe ser del tamaño del Sol. (2010)