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Filosofía
de
habla
hispana
La
importancia
de
José
Ortega
y
Gasset
Entrevista
a
Jorge
Acevedo
Guerra
Es
en
Meditaciones
del
Quijote,
su
primer
libro
publicado
en
1914,
donde
se
encuentra
por
primera
vez
su
famosa
frase
que
condensa
su
pensamiento
y
que
será
el
camino
central
de
su
filosofía:
«Yo
soy
yo
y
mi
circunstancia,
y
si
no
la
salvo
a
ella
no
me
salvo
yo»,
que
le
valdrá
el
reconocimiento
de
ser
uno
de
los
pilares
de
la
filosofía
del
siglo
XX.
Después
de
Martin
Heidegger,
José
Ortega
y
Gasset
es
considerado
por
varios
eruditos
como
uno
de
los
tejedores
de
la
filosofía
contemporánea.
Su
vocación
fue
el
pensamiento,
el
afán
de
claridad
sobre
las
cosas.
Incluso,
en
el
«Prólogo
a
una
Edición
de
sus
Obras»
señaló:
«acaso
este
fervor
congénito
me
hizo
ver
muy
pronto
que
uno
de
los
rasgos
característicos
de
mi
circunstancia
española
era
la
deficiencia
de
eso
mismo
que
yo
tenía
que
ser
por
íntima
necesidad.
Y
desde
luego
se
fundieron
en
mí
la
inclinación
personal
hacia
el
ejercicio
pensativo
y
la
convicción
de
que
era
ello,
además,
un
servicio
a
mi
país.
Por
eso
toda
mi
vida
ha
sido
en
servicio
de
España».
Esta
aseveración
de
Ortega
y
Gasset
estuvo
Prof.
Jorge
Acevedo
Guerra
enmarcada
por
las
circunstancias
políticas
inestables
de
España
en
la
primera
parte
del
siglo
pasado,
en
que
nada
tenía
efecto
social,
ni
las
cátedras
ni
los
libros.
«Nuestro
pueblo
no
admite
lo
distanciado
y
solemne.
Reina
en
él
puramente
lo
cotidiano...
He
aquí
por
qué,
dócil
a
la
circunstancia,
he
hecho
que
mi
obra
brote
en
la
plazuela
intelectual
que
es
el
periódico».
1
Practicó,
entonces,
Ortega
y
Gasset,
la
noble
y
a
la
vez
titánica
tarea
del
pensamiento.
Escribió
numerosos
artículos
y
libros
de
filosofía
como
España
Invertebrada
(1921),
«La
interpretación
bélica
de
la
historia»
(1925),
«Hegel
y
América»
(1928),
En
torno
a
Galileo
(1933),
Historia
como
Sistema
(1935),
y
tratados
como
La
idea
de
principio
en
Leibniz
y
la
evolución
de
la
teoría
deductiva,
entre
otras
tantas
publicaciones.
Fue
docente
de
la
misma
disciplina
y
fue
un
activo
incentivador
de
cultura,
la
que
ejercitó
por
medio
de
revistas,
editoriales
y
ensayos.
Para
el
Director
del
Departamento
de
Filosofía
de
la
Facultad
de
Filosofía
y
Humanidades,
Prof.
Jorge
Acevedo,
José
Ortega
y
Gasset
es
importante
porque
ofrece
una
reflexión
pensada
primero
en
español.
«No
es
lo
mismo
acceder
a
una
filosofía
nacida
desde
el
propio
idioma
que
otra
traducida,
o
mediante
un
idioma
que
no
es
la
lengua
materna»,
dice.
La
importancia
de
Ortega
y
Gasset
consistió,
además
de
su
filosofía,
en
que
situó
a
España
en
un
nivel
intelectual
similar
a
los
grandes
focos
del
conocimiento
europeo,
como
Alemania.
Asimismo,
según
lo
señala
el
docente,
el
filósofo
se
mantenía
actualizado
con
lo
que
acontecía
en
Alemania
y
Francia;
incluso
mucho
de
su
filosofía
fue
coincidente
con
Heidegger,
el
filósofo
más
importante
del
siglo
XX.
Ortega
y
Gasset,
con
su
metafísica
de
la
vida
humana,
según
lo
explica
el
Prof.
Acevedo,
creó
la
Escuela
de
Madrid,
donde
se
cultivaron
sus
discípulos
renombrados,
como
Julián
Marías,
José
Ferrater
y
José
Gaos
—el
traductor
de
Ser
y
Tiempo,
de
Martin
Heidegger—
quienes
también
influyeron
para
que
la
filosofía
de
Ortega
se
expandiera
por
toda
Latinoamérica.
«Quizás,
si
Ortega
y
Gasset
no
hubiera
sido
español
habría
estado
mucho
más
distante
de
nuestra
realidad,
como
ha
ocurrido
con
franceses,
ingleses
y
alemanes,
que
sólo
han
echado
un
vistazo
a
América
Latina,
pero
nada
más.
Por
el
contrario
Ortega
tiene
Meditación
del
Pueblo
Joven,
libro
que
está
dedicado
a
varios
países
latinos;
entre
ellos,
Chile,
por
su
visita
en
1928
a
nuestro
parlamento»,
señala
el
académico.
Al
revisar
el
siglo
XX,
y
al
constatar
numerosas
corrientes
filosóficas,
el
Prof.
Acevedo
asegura
que
el
pensamiento
que
hay
detrás
de
“Yo
soy
yo
y
mi
circunstancia”
sigue
totalmente
vigente
ya
que,
por
ejemplo,
cuando
hoy
se
habla
de
proyecto
de
país,
se
habla
de
una
idea
que
Ortega
sacó
a
la
luz
muchas
décadas
atrás
y
que
incluso
el
mismo
Prof.
Acevedo
la
trata
en
uno
de
sus
libros,
La
Sociedad
como
Proyecto
(1994),
de
la
Editorial
Universitaria.
2
«Varias
de
las
ideas
de
Ortega
y
Gasset
siguen
teniendo
mucha
validez
y
son
utilizadas
por
las
personas,
sabiendo
o
no
que
tienen
su
origen
en
este
filósofo».
Según
el
docente,
muchas
de
estas
ideas
entran
en
el
imaginario
social
de
manera
indirecta
y
no
se
sabe
su
fuente
última.
La
época
histórica
en
que
vivió
Ortega
y
Gasset
fue
determinante
para
su
visión
del
mundo.
El
seguimiento
a
la
distancia
de
las
imborrables
guerras
mundiales
y
la
guerra
civil
española
de
alguna
manera
están
presente
en
su
filosofía,
como,
por
ejemplo,
en
el
caso
de
los
temas
«consenso»
y
«discordia
radical»,
que
fueron
tratados
en
su
obra
Del
Imperio
Romano.
El
acercamiento
del
Prof.
Jorge
Acevedo
al
mundo
de
Ortega
y
Gasset
se
debió
principalmente
a
que
su
maestro
en
filosofía,
don
Francisco
Soler,
fue
discípulo
del
filósofo
español
y
formó
parte
del
Instituto
de
Humanidades
que
fundaron
Julián
Marías
y
José
Ortega
y
Gasset.
«Cuando
don
Francisco
se
vino
a
Chile
trajo
la
doctrina
de
sus
maestros,
Ortega
y
Gasset
y
Marías».
Sus
reflexiones
son
accesibles
para
todos;
su
estilo
escritural
ameno,
cuidado
y
atractivo
fue
otra
de
las
razones
del
académico
para
estudiar
meticulosamente
la
obra
del
filósofo
español.
Según
el
profesor
Acevedo,
Ortega
es
en
la
actualidad
muy
leído
por
los
alemanes
pero,
paradójicamente,
no
muy
apetecido
en
América
Latina,
aunque
sí
lo
fue
hace
un
tiempo.
«Pareciera
que
pasó
de
moda,
aunque
las
modas
son
muchas
veces
superficiales».
Para
el
Director
del
Departamento
de
Filosofía,
la
labor
de
filósofo
español
dejó
una
impronta
en
Latinoamérica
que
no
puede
borrarse,
ya
que
su
mensaje
fue
difundido
por
sus
discípulos
como
Juan
David
García
Bacca,
Francisco
Soler
u
Octavio
Paz
y
éstos,
a
su
vez,
a
otros
discípulos,
como
en
el
caso
del
Prof.
Acevedo.
José
Ortega
y
Gasset,
aunque
fue
reconocido
en
su
época,
contó
también
con
la
oposición
de
algunas
personas,
ya
que
su
planteamiento
era
tan
innovador
que,
como
en
la
mayoría
de
los
casos,
fue
imposible
evitar
reacciones
encontradas.
Sin
embargo,
ya
a
los
25
años
de
edad
obtuvo
la
cátedra
de
Metafísica
en
la
que
hoy
es
la
Universidad
Complutense
de
Madrid,
lo
que
no
fue
menor,
y
dio
prueba
fehaciente
de
sus
capacidades
académicas.
«Al
menos
los
grupos
intelectuales
que
decidían
estos
cargos
sí
le
otorgaron
un
reconocimiento»,
subraya
el
profesor.
La
labor
filosófica
de
Ortega
es
inmensa.
Su
obra
completa
consta
de
12
volúmenes,
de
700
páginas
cada
uno;
su
epistolario,
cursos
que
dio
en
la
Universidad
y
varios
3
fragmentos
de
obras
inacabadas.
“Hay
un
artículo
de
Vargas
Llosa
que
dice
que
todos
los
días
al
despertarse
leía
a
Ortega,
hasta
que
leyó
todos
sus
tomos;
y
se
lamentaba
de
que
fuera
español
porque
si
él
hubiera
nacido
en
Inglaterra,
en
Francia
o
en
Alemania,
tendría
un
reconocimiento
mundial
total;
pero
como
es
español
tiene
un
reconocimiento
silencioso”,
recuerda
el
Prof.
Acevedo.
José
Ortega
y
Gasset
murió
en
1955
a
la
edad
72
años
en
la
ciudad
de
Madrid,
la
misma
que
lo
vio
nacer
en
1883.
http://www.uchile.cl/www/mayo/gasset.htm
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