Los logros alcanzados en el proyecto fueron más de Los esperados,

buscábamos alegrar un poco los días de los adultos mayores y lo logramos, en

todos los lugares, aunque los cuidaban bien y les daban las atenciones
necesarias, es notorio que el entretenimiento lo dejan de lado, en la mayoría de
los lugares por más humildes que fueran las instalaciones, tenían televisión,
pero al parecer era lo único que tenían. Cuando llegamos a cantar , la mayoría
no sólo se ponían felices, sino que se emocionaban a tal grado que cantaban a
todo pulmón y pedían canciones nuevas, tenían cancioneros guardados y nos
pedían canciones que vinieran ahí y que nosotros no conocíamos, así que por
ese lado ellos nos enriquecieron a nosotros, ya que nos comprometimos a
sacar nuevo repertorio para volver con nuevas canciones que a ellos les
gustaban, había personas que lloraban, había personas con demencia senil, no
recordaban ni su nombre ni su edad, había personas que desconozco la
enfermedad mental que padecían pero inventaban todo lo que decían, a pesar
de esas situaciones, lograban recordar la música, y podían cantar la letra y
también el acompañamiento, fue impresionante comprobar cómo es que la
música es realmente importante para las personas no sólo por el aspecto
sentimental o emocional sino también a nivel cerebral. Sabía que la música
hace que el cerebro se desarrolle de manera diferente, de manera más
equilibrada, pero la verdad nunca me había puesto a pensar en los alcances
que tenía. Había personas que por la edad no podían moverse bien pero
escuchaban la música y hacían ritmos con sus manos, y lo hacían al tempo
correcto, para mí fue increíble! Incluso fue muy motivante para mí la forma en
que algunos ven la vida, había personas sin piernas que bromeaban de su
situación y a pesar de eso se veían felices; definitivamente fue el fin de la vida
como la conocía, mi percepción de la misma es diferente ahora.

Las recomendaciones que creo que podría dar, son que, sería de mucha ayuda
que se tuviera un control y/o actualización de los lugares en donde se pueden
prestar los servicios de brigada, ya que al hacerlo por nuestra cuenta nos
percatamos que muchos de los lugares estaban fuera de servicio, las
instalaciones ya no existían. También de los lugares donde fuimos a prestar
nuestros servicios hubieron quienes no nos dieron las constancias, incluso ya
no quisieron atendernos, y fue tardado para nosotros arreglarlo, al final nos
presentamos más de lo requerido para poder completar las constancias. Pienso
que si se tuviera una actualización de los lugares donde requieran este tipo de
servicios y donde sean cumplidos los directivos, se haría el servicio con mucha
mayor eficacia; entiendo que los ancianitos no tienen la culpa de la
irresponsabilidad de los dirigentes de los asilos, tal vez podría idearse otra
forma de comprobar la asistencia a los mismos.