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Trauma y Ortopedia PDF
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Las lesiones traumáticas del codo se refieren a todo daño ocasionado por agente
externo de forma aguda al codo. Considerando al codo como una articulación
compleja que consiste en realidad en tres articulaciones, la humerocubital,
humeroradial y la radiocubital que funcionan como una sola.
Entre los traumatismos de la extremidad superior, las luxaciones del codo ocupan
el segundo lugar, solo después de las luxaciones del hombro, con una incidencia
anual de 6 casos por 100,000 habitantes. Las luxaciones del codo pueden ser
simples o complejas (fractura-luxación) y representan el 10 a 30% de todas las
lesiones del codo. Las luxaciones posteriores del codo son el tipo predominante,
representan el 80 a 90 % de los casos. Aproximadamente el 30% de las fracturas
del codo en los adultos ocurren en la cabeza del radio, fracturas de olécranon en el
20% de los casos, mientras que para la fractura de apófisis coronoides representan
de 10 a 15% de las luxaciones del codo. Fracturas menos frecuentes en los
adultos incluyen las fracturas supracondíleas, del capitellum y de la tróclea.
EXPLORACIÓN FÍSICA
Los datos clínicos dependerán del tipo de lesión específica que se este evaluando,
sin embargo en todas las lesiones traumáticas se recomienda investigar acerca de:
SIGNOS DE ALARMA
Los signos de alarma que se recomienda investigar en las lesiones traumáticas del
codo son:
EXAMENES DE IMAGEN
Para complementar el diagnóstico de las fracturas y luxaciones del codo se
recomienda solicitar estudio radiológico. Es recomendable solicitarlo en proyección
anteroposterior (codo en extensión) y lateral (codo a 90 grados de flexión). Se
sugiere realizar los estudios sin férula.
Es recomendable que los pacientes con fracturas o luxaciones abiertas del codo
reciban antimicrobianos, se sugiere iniciarlos dentro de las primeras 6 horas
después de que ocurrió la lesión. El esquema de antimicrobianos que se
recomienda es el siguiente:
Fracturas tipo I
Primera elección: cefalotina
Segunda elección: ciprofloxacina
Estabilización de la fractura:
• Fracturas estables abiertas tipo I: férula braquipalmar a 90 grados de flexión.
• Fracturas inestables tipo I: osteosíntesis con fijación interna.
• Fracturas abiertas inestables tipo I: osteosíntesis con fijación externa.
• Luxación abierta del codo: reducir y estabilizar la luxación abierta de la forma
en que se describe éste método para las luxaciones cerradas.
Cierre de la herida:
• Luxaciones o fracturas del codo abiertas tipo I y II: cierre primario de la
herida y colocación de drenaje.
• Luxaciones o fracturas abiertas del codo tipo III: diferir el cierre de la herida
de acuerdo a cada caso.
Estabilización de la fractura:
• Fracturas estables y no desplazadas: colocar aparato de yeso con la
articulación del codo a 90 grados de flexión durante 4 semanas.
• Fracturas parcialmente desplazadas: realizar reducción cerrada
(manipulación) bajo sedación, inmovilización con aparato de yeso.
• Fracturas desplazadas: la estabilización es quirúrgica y dependerá del tipo
de la fractura.
Estabilización de la luxación:
• Luxación estable: tratamiento conservador con reducción cerrada. Si se
estabilizó la luxación inmovilizar la articulación con férula braquipalmar
durante 2 semanas. Si no se logró la estabilización el tratamiento
recomendable es quirúrgico.
Se recomienda que el paciente con lesiones traumáticas del codo sea atendido por
el médico ortopedista en un segundo o tercer nivel de atención en los siguientes
casos:
• Todos los tipos de luxaciones o fracturas de codo.
• Tendinitis del codo que persista con sintomatología después de 2 semanas
de tratamiento.
• Bursitis traumáticas e infecciosas.
Se recomienda que los pacientes con bursitis asociada a enfermedades sistémicas
se refieran al segundo o tercer nivel de atención, al servicio que corresponda a la
patología de cada caso.
B i b l i o g r a f í a : h t t p : / / w w w. c e n e t e c . s a l u d . g o b . m x / d e s c a r g a s / g p c / C a t a l o g o M a e s t r o /
429_GPC_Lesiones_tx_codo/GRR_Lesiones_de_codo.pdf
Diagnóstico clínico:
Epicondilitis: investigar la presencia de dolor sobre el epicóndilo (lado externo del
codo) que se exacerba durante la extensión del codo y de la muñeca.
Epitrocleitis: investigar la presencia de dolor sobre la epítróclea (lado interno del
codo) que se exacerba durante la flexión de la muñeca.
Diagnóstico radiográfico:
No se recomienda la realización rutinaria de estudios radiográficos para el
diagnóstico de ésta patología.
Tratamiento en el primer contacto de atención
• Calor local.
• Ferulización nocturna de la articulación.
• Para la epicondilitis evitar la extensión y supinación del antebrazo y de la
mano.
• Para la epitrocleitis evitar la flexión palmar de la muñeca y pronación del
antebrazo.
• Administración de AINES por vía oral.
Exámenes de laboratorio:
Se recomienda que cuando el médico de primer contacto sospeche bursitis de
etiología infecciosa o asociada a enfermedades sistémicas solicite:
• Biometría hemática
• Velocidad de sedimentación globular
• Factor reumatoide
• Determinación de ácido úrico
Trauma y Ortopedia
Esguince de Tobillo.
Las lesiones ligamentarias del tobillo son las más frecuentes que se
presentan en las actividades cotidianas y del deporte; se conocen con los
términos de esguince, torcedura o entorsis del tobillo. Estas lesiones
representan uno de los principales motivos de consulta en los servicios de
urgencia; se estima alrededor de un caso por cada 10 mil personas que son
atendidas por día (Katcherian, 1994). El mecanismo de lesión más común es
la supinación con una combinación de aducción e inversión del pie en flexión
plantar; el cual se produce por medio de un golpe directo, una caída o un
movimiento incorrecto del tobillo.
El esguince de tobillo (ET) se caracteriza por dolor, edema y limitación
durante la marcha. Se calculan entre 318 y 914 dólares americanos por
costo de atención, siendo el gasto anual hasta de 2 billones de dólares
americanos (Morrison, 2007).
Anualmente, en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) alrededor de
275,639 personas con ET son tratadas en los servicios de medicina familiar
(DTIES, 2007); como parte de su tratamiento requieren varios días de
incapacidad para la recuperación de la extremidad lesionada. Esto ocasiona
ausentismo laboral lo que conlleva a consecuencias sociales y económicas.
FACTORES DE RIESGO:
DIAGNÓSTICO.
TRATAMIENTO FARMACOLOGICO.
TRATAMIENTO NO FARMACOLOGICO.
SEGUIMIENTO
Para determinar el tiempo máximo de seguimiento en un paciente con
esguince de tobillo, el médico familiar debe considerar el grado de lesión.
• En esguince grado I se requiere revaloración al 5to día, su resolución
es en un periodo menor de 7 días.
• En esguince grado II, el seguimiento es por medio de consultas
periódicas, hasta 21 días después de la lesión.
Bibliografía: http://www.cenetec.salud.gob.mx/descargas/gpc/CatalogoMaestro/
034_GPC_EsguinceTobillo/IMSS_034_08_GRR.pdf
Trauma y Ortopedia
PREVENCIÓN PRIMARIA
ESTILOS DE VIDA
Condiciones como vivir en ciudades urbanas grandes, inactividad física,
malnutrición y disminución en la ingesta de lácteos son factores que contribuyen a
la desmineralización ósea y al incremento de las fracturas intracapsulares del
extremo proximal del fémur; por ello se recomienda identificar y establecer un
programa para modificar las condiciones de vida.
PREVENCIÓN SECUNDARIA
FACTORES DE RIESGO
Se recomienda identificar y dar indicaciones para modificar cuando sea posible, los
factores de riesgo o condiciones clínicas del paciente que puedan propiciar
fracturas del extremo proximal del fémur, dichos factores son de dos tipos:
DIAGNÓSTICO CLÍNICO
Para realizar el diagnóstico clínico de fractura del extremo proximal del fémur se
recomienda lo siguiente:
EXÁMENES DE LABORATORIO
En todos los pacientes con fracturas intracapsulares del extremo proximal del
fémur se recomienda realizar los siguientes estudios preoperatorios:
• Biometría hemática completa
• Tiempo de protrombina
• Tiempo parcial de tromboplastina
• Grupo y Rh
• Glucosa, urea, creatinina y electrolitos
EXÁMENES DE IMAGEN
Radiografía
Las proyecciones radiográficas requeridas para el diagnóstico de una fractura
intracapsular del extremo proximal del fémur son:
• Antero-posterior con rotación medial de 15 grados de la cadera afectada.
• Axial de la cadera afectada.
TRATAMIENTO FARMACOLÓGICO
Antimicrobianos:
Se recomienda prescribir en todos los pacientes quirúrgicos de fractura proximal de
fémur intracapsular una cefalosporina de primera o segunda generación en tres
dosis, una previa a la cirugía y dos más con intervalos de 8 horas. Se pueden
utilizar cualquiera de los siguientes medicamentos:
• Cefalotina 500 mg. cada 6 horas por vía intravenosa
• Cefotaxima de 1 a 2 gr cada 8 horas
• Cefuroxima 750 mg. a 1.5 g por vía intravenosa o intramuscular cada 8
horas
• Ciprofloxacina 250 mg. cada 12 horas IV
Manejo antitrombótico
Es recomendable para todos los pacientes, se recomienda que la dosis previa a la
cirugía se administre al menos 12 horas antes del evento quirúrgico y reiniciar 12
horas después de la intervención, mantenerla durante el periodo de riesgo (hasta
10 días) al menos, hasta la deambulación. Las dosis que se recomiendan son las
siguientes:
• Enoxaparina: 40 mg. Sc./d (4,000 UI)
• Nadroparina:
- Mayor 70 Kg. 0.3 ml. (2,850 UI) desde el preoperatorio hasta el 3er día y 0.4 ml.
(3,800 UI) a partir del 4º día
Manejo analgésico
En el periodo posoperatorio se consideraran los siguientes fármacos:
• Metamizol sódico 10 a 17 mg./kg./dosis, Ketorolaco trometamina 30 mg/
dosis sin sobrepasar los 60 mg diarios.
• Clorhidrato de buprenorfina 0.4 a 0.8 mg fraccionados en 4 dosis.
• Diclofenaco sódico 75 mg/día por vía IM.
TRATAMIENTO QUIRÚRGICO
Antes de realizar cualquier procedimiento quirúrgico, se recomienda investigar las
condiciones generales de salud del paciente y las características de la fractura,
seleccionar el tipo de tratamiento (conservador o quirúrgico) de acuerdo a las
condiciones clínicas del paciente, la gravedad de la enfermedad concomitante y al
tipo de fractura.
Trauma y Ortopedia
Fracturas no desplazadas:
Los pacientes viejos y jóvenes con fracturas no desplazadas o impactadas y que
son ambulatorios deben recibir fijación interna antes de que ocurra
desplazamiento.
Realizar osteosíntesis con 3 tornillos canulados paralelos en los pacientes viejos y
jóvenes con fracturas no desplazadas o impactadas y que son ambulatorios.
Fracturas desplazadas:
Se recomienda realizar hemiartroplastía primaria en el paciente adulto mayor, con
fractura desplazada del cuello femoral.
Considerar reemplazo total de cadera en pacientes ancianos aparentemente,
sanos con fractura desplazada del cuello de fémur.
SEGUIMIENTO Y VIGILANCIA
En los pacientes que han sido tratados por fracturas intracapsulares del extremo
proximal del fémur se recomienda llevar a cabo las siguientes medidas:
Solicitar apoyo de la unidad de rehabilitación cuando se considere oportuno
establecer un programa de mantenimiento muscular.
Movilización temprana dentro de las primeras 48 a 72 horas cuando las
condiciones del paciente lo permiten así como, la fijación de la fractura.
Egresar al paciente cuando realice movilización en cama y sus condiciones clínicas
sean adecuadas.
Trauma y Ortopedia
Bibliografía: http://www.cenetec.salud.gob.mx/descargas/gpc/CatalogoMaestro/
034_GPC_EsguinceTobillo/IMSS_034_08_GRR.pdf
Trauma y Ortopedia
INTERROGATORIO
Investigar el mecanismo de lesión:
Las lesiones de los ligamentos cruzados anteriores (LCA) se relacionan con
actividades deportivas y caídas.
Las lesiones del ligamento cruzado posterior (LCP) aisladas o combinadas (LCA y
LCP) se asocian con accidentes automovilísticos y traumas directos en la rodilla.
Localización del dolor.
EXPLORACIÓN FÍSICA
Se recomienda buscar intencionadamente en los pacientes con traumatismo agudo
en rodilla los siguientes datos clínicos:
Tumefacción
Aumento de volumen
Discapacidad funcional
Hemartrosis (síntoma principal de la lesión en los ligamentos cruzados)
Para determinar los ligamentos lesionados por el trauma en la rodilla se
recomienda realizar las siguientes pruebas (o maniobras clínicas) [ ver cuadro I]:
Lachman y de pívot shift (pivote)
Cajón anterior y
Cajón posterior
Maniobra en varo forzado (bostezo)
Maniobra en valgo forzado (bostezo)
Dial Test
Sospechar lesiones del LCA en pacientes con esguince de rodilla cuando presente
hermatrosis.
Se recomienda buscar de forma intencionada en la maniobra de estrés en varo con
la rodilla en extensión a 0º datos clínicos que hagan sospechar de una lesión de
esquina posterolateral.
EXÁMENES DE GABINETE
Radiografía simple.
Los estudios simples de radiología no son útiles para evaluar las lesiones
ligamentarias; se recomienda solicitarlos cuando se sospechen fracturas
asociadas.
Ultrasonografía
Se recomienda realizar estudios de ultrasonografía en pacientes con:
Lesión ligamentaria en los ligamentos colaterales (colateral medial y lateral).
Lesiones meniscales.
Trauma y Ortopedia
TRATAMIENTO FARMACOLÓGICO
Un control efectivo del dolor permite iniciar de forma temprana la rehabilitación
después de una lesión ligamentaria en la rodilla por lo que se recomiendan la
administración de analgésicos:
TRATAMIENTO CONSERVADOR
Fase aguda
Ante la presencia de hemartrosis en un paciente con lesión ligamentaria, se
recomienda realizar primero, la aspiración por artrocentesis en la rodilla afectada y
posteriormente, ofrecer el tratamiento correspondiente.
El manejo inicial en el paciente con lesión ligamentaria de rodilla, en la fase aguda,
se enfoca a controlar el dolor y el edema perilesional, así como iniciar la
movilización temprana.
Fase subaguda
Aplicar compresa húmeda caliente en la rodilla afectada por 20 a 30 minutos.
Posteriormente llevar a cabo ejercicios de estiramiento para músculos flexores de
rodilla a tolerancia, efectuar 10 repeticiones en 3 sesiones al día.
Realizar ejercicios de movilidad activa libre para la flexión de rodilla (en decúbito
ventral) y de extensión de rodilla (en posición sedente), efectuar 10 repeticiones en
3 sesiones al día.
Realizar ejercicios de fortalecimiento para músculos flexores de rodilla (en decúbito
ventral, con resistencia manual o con peso) y para músculos extensores de rodilla
(en posición sedente, con resistencia manual o con peso), efectuar 10 repeticiones
en 3 sesiones al día.
Reeducación de la marcha tanto en terreno regular como irregular en aquellos
pacientes que presenten alteración de la misma.
Se debe indicar un programa de ejercicios en domicilio para complementar la
rehabilitación intramuros, haciéndole énfasis al paciente que éstos deben
realizarse como se señala en el programa.
TRATAMIENTO QUIRÚRGICO
Las lesiones de LCP que se asocian a una lesión compleja se manejaran mediante
cirugía de plastia ligamentaria.
Las lesiones de LCP que se asocian a una lesión compleja se manejaran mediante
cirugía de plastia ligamentaria.
Las lesiones del LCA de la rodilla deben ser tratadas quirúrgicamente; al respecto
se realizan las siguientes recomendaciones.
Trauma y Ortopedia
En caso de lesiones completas debe realizarse plastia total y cuando se trata de
una lesión parcial, debe substituirse exclusivamente el haz lesionado.
Es preferible utilizar autoinjerto sobre aloinjerto.
Se recomienda utilizar técnica de doble fascículo y doble túnel en lugar de
fascículo y túnel único.
Utilizar técnica de fijación del injerto a cortical e inclusive con reforzamiento
mediante la introducción de una clavija ósea en el túnel.
Es recomendable en lesiones de la esquina posterolateral antes de realizar la
reparación quirúrgica abierta, realizar un procedimiento artroscopico exploratorio y
terapéutico para identificar y reparar en la medida posible, las lesiones asociadas.
Se recomienda en los pacientes con lesiones de la esquina lateral asociadas a
fractura, estabilizar la fractura y después efectuar la reparación quirúrgica de la
esquina lateral.
Cuando existen lesiones de esquina posterolateral y del LCP se puede realizar la
reparación de ambas estructuras en el mismo procedimiento quirúrgico.
El tipo de tratamiento quirúrgico se determinará con base a la magnitud de la lesión
de los tejidos blandos.
Se recomienda referencia al segundo nivel de atención en los siguientes casos:
Paciente con antecedente de traumatismo agudo de rodilla con hemartrosis
(después de inmovilizar la extremidad lesionada).
Paciente con diagnóstico de lesión ligamentaria que requiera tratamiento quirúrgico
siempre y cuando se cuente con la infraestructura y los recursos necesarios. En
caso contrario, enviarlo al tercer nivel de atención.
Se recomienda que los siguientes casos sean referidos al tercer nivel de atención:
Paciente con lesión traumática de rodilla y datos de lesión neurocirculatoria
(después de ser estabilizado en la unidad de atención [primero o segundo nivel]).
Pacientes de lesiones ligamentarias con hemartrosis, cuando no se cuente en las
unidades de segundo nivel con servicio de ortopedia.
Pacientes posoperados: enviar al servicio de medicina física y rehabilitación; el
programa de ejercicios dependerá del tipo de procedimiento realizado.
Paciente operado de lesión ligamentaria colateral-medial aislada, referir a los 21
días al servicio de terapia física y rehabilitación con indicaciones de movilización,
fortalecimiento muscular, re-educación de la marcha y tratamiento para el edema
residual.
SEGUIMIENTO Y VIGILANCIA
Posterior al tratamiento inicial el médico ortopedista realizará una nueva valoración
para:
Determinar el grado de mejoría clínica.
Evaluar la realización de otro estudio de gabinete (RMN).
Reorientar la modalidad del tratamiento.
Establecer el momento y el tipo de tratamiento quirúrgico (en caso que lo amerite
el paciente).
Determinar el momento de inicio del programa de terapia física y de rehabilitación.
Bibliografía: http://www.cenetec.salud.gob.mx/descargas/gpc/CatalogoMaestro/
388_IMSS_10_Lesiones_Ligamentarias_Rodilla/GRR_IMSS_388_10.pdf
Trauma y Ortopedia
INTERROGATORIO
Los factores de riesgo ocupacional que han demostrado estar asociados con el
hombro doloroso son los siguientes:
EXPLORACIÓN FÍSICA
A pesar de las limitaciones que tiene la exploración física es un herramienta
potencial para identificar las lesiones del hombro.
La exploración física debe ser completa: inspección palpación, evaluar movilidad
activa/pasiva y rangos de movimiento.
Se recomienda realizar el examen físico para evaluar signos específicos, como se
indica en la tabla de exploración física de hombro.
ESTUDIOS DE IMAGEN
El diagnóstico de hombro doloroso es inicialmente clínico. No se requieren
imágenes, a menos que existan signos que demuestren la presencia de
condiciones serias que pongan en peligro la vida o la integridad del individuo.
Los estudios de gabinete como Rx, Ultrasonido y resonancia magnética no estan
indicados para dolor agudo.
Si ya se ha determinado que el hombro doloroso es de origen mecánico y no existe
respuesta al tratamiento conservador después de 4 semanas, considere la
posibilidad de solicitar estudios especiales como Rayos X, TAC, RMN.
Ante sospecha de rupturas totales del tendón del manguito rotador está indicada la
realización de ecografía de hombro o la RMN.
El Ultrasonido y la resonancia magnética, serán solicitadas a criterio del médico
especialista en Ortopedia y Traumatología de 2do o tercer nivel de atención.
Trauma y Ortopedia
TRATAMIENTO FARMACOLÓGICO
Los analgésicos simples son efectivos en el tratamiento a corto plazo del dolor y
constituyen la primera alternativa de tratamiento, debido a un menor riesgo de
efectos indeseables.
Se recomienda la administración de analgésicos simples y AINES como se indica
en el cuadro VIII.
No se recomienda la administración de corticosteroides orales para el manejo de
hombro doloroso por qué no ha demostrado disminución del dolor.
En procesos inflamatorios, síndrome de pinzamiento y pequeñas rupturas del
mango se recomienda la filtración intra articular (subacromiales) con anestésico
local y cortisona en dos o tres ocasiones.
La infiltración la realizara el medico especialista en traumatología y ortopedia, para
lo cual se enviara al paciente al segundo nivel de atención.
Posteriormente se deberán integrar a un programa de rehabilitación.
TRATAMIENTO NO FARMACOLÓGICO
Un programa de ejercicio supervisado en general mejora el dolor de hombro a
corto y largo plazo.
Excepto en casos de fracturas inestables, luxaciones agudas, inestabilidad o
hipermobilidad, los pacientes pueden ser aconsejados sobre la realización de
ejercicio terapéutico supervisado o un programa hecho en casa para el alivio del
dolor.
Manejo fisioterapéutico:
Se debe indicar ejercicio supervisado o en casa para el tratamiento de dolor de
hombro. El manejo fisioterapéutico con su amplio rango de intervenciones origina
mejoría a corto plazo, disminuyendo el dolor, promoviendo cicatrización,
reduciendo espasmo muscular, incrementando el rango de movilidad articular,
fortalecimiento muscular y previniendo el deterioro funcional.
Educación e Información:
Al trabajador se le deberá informar acerca de la naturaleza de su condición, los
factores de riesgo relacionados, medidas de prevención y metas de la terapéutica
inicial. Se enfatizará en la responsabilidad del paciente en el plan de tratamiento.
En primer nivel de atención los ejercicios recomendados para programa de
rehabilitación en casa serán de acuerdo a la patología diagnosticada basándose en
el VI y VII
Es imprescindible para lograr la remisión del dolor y mejoría de la función, evitar
la(s) actividad(es), que lo producen. Por lo que el médico requiere hacer énfasis al
respecto con el paciente y si el motivo del dolor es la actividad laboral, se
recomienda envío inmediato a medicina del trabajo.
Trauma y Ortopedia
Envío a Traumatología:
- Indicación quirúrgica
- Hombro congelado
- Ruptura total del mango de los rotadores o del tendón del bíceps en pacientes
jóvenes.
- Ruptura o tendinitis que no responden a tratamiento conservador.
- Bursitis subacromiales crónicas después de tres meses de tratamiento
conservador sin respuesta a este.
- Inestabilidad glenohumeral grave (luxación recidivante).
- Tendinitis calcificada que no responde a tratamiento (gota y cristales).
- Osteoartrosis que no responden a tratamiento inicial de primer nivel.
Envío a Reumatología:
- Pacientes con antecedentes reumáticos
- No mejoría con tratamiento inicial ni a las técnicas de infiltración
Envío a Rehabilitación:
- Tendinitis del manguito de los rotadores.
- Tendinitis de la porción larga del bíceps.
- Rupturas parciales tendinosas en edad avanzada (55 años o más) no quirúrgicas.
- Bursitis de hombro I y II no infecciosas.
- Lesión de manguito rotador estadio I y II menor de 3 meses.
- Osteoartrosis de articulación glenohumeral y acromioclavicular de hombro.
- Lesión neurológica de hombro.
- Luxaciones reducidas.
- Hombro doloroso por afección reumática en estadios tempranos.
Vigilancia y seguimiento.
El dolor de hombro puede recurrir, aun en presencia de recuperación de síntomas
en corto plazo.
El dolor de hombro puede recurrir, aun en presencia de recuperación de síntomas
en corto plazo.
En la patología no quirúrgica la recuperación depende de la etiología y factores
asociados, siendo generalmente entre 14 y 60 días.
La recuperación de pacientes post operados es en promedio de 6 meses.
Bibliografia: http://www.cenetec.salud.gob.mx/descargas/gpc/CatalogoMaestro/
085_GPC_SxHombdoloroso1NA/GPC_SHD_RR.pdf
Trauma y Ortopedia
Trauma y Ortopedia
Cervicalgia.
EVALUACIÓN DIAGNÓSTICA
Anamnesis
Antecedentes personales (neoplasias, enfermedades reumáticas: artritis
reumatoide, espondilitis anquilopoyética…)
Descripción del dolor, localización, tiempo de evolución, mecanismos que lo alivian
o lo exacerban, diferentes tratamientos que ha llevado. Existencia de fiebre o
traumatismo previo.
Anamnesis general por aparatos.
Trauma y Ortopedia
Exploración física
Examen ocular (descartar síndrome de Horner: miosis, ptosis, anhidrosis).
Movilidad cervical, si hemos descartado lesiones inestables, valorando limitación
para la flexoextensión, rotaciones o lateralizaciones.
Fuerza por grupos musculares de las cuatro extremidades comparando con la
extremidad contralateral.
Sensibilidad completa.
ROT generales.
Exploración física general.
Tratamiento
En la mayoría de las ocasiones, el paciente puede ser dado de alta con tratamiento
conservador, siempre que no exista focalidad neurológica ni lesiones traumáticas:
Reposo con collarín blando 1-2 semanas (no es necesario llevarlo las 24 horas, se
puede quitar a la noche).
Calor local.
AINES vía oral: ibuprofeno, diclofenaco, ketorolaco…
Analgésicos: paracetamol, metamizol, tramadol…
Miorrelajantes, cuando comprobamos contractura muscular.
No olvidar protección gástrica en los casos en que pueda estar indicada (pacientes
mayores de 65 años, con antecedentes de úlcera, fumadores, con dos o
másantiinflamatorios, asociación de AINES y corticoides…)
Bibliografía. http://www.cenetec.salud.gob.mx/descargas/gpc/CatalogoMaestro/
008_GPC_EsguinceCervical/SSA_008_08_GRR.pdf
Trauma y Ortopedia
Osteosarcoma.