“Perú necesitó apenas dos décadas para lograr una situación al menos semejante a la

existente antes de la guerra, pero lo que más pesaba era el sentimiento de vejación
profunda que dio lugar a un desosiego moral (Zavaleta, p. 46)
1.2.- El imaginario social de “Chile”
Para Zavaleta, la guerra del pacifico es el momento constitutivo de Chile, una categoría que
se refiere al acto originario en el que se articulan y definen las estructuras económica y la
forma en que van a servir para procesar la producción y reproducción del orden social,
político, cultural por un tiempo prolongado, p. 91 sea, el modo de ser de una sociedad.
A diferencia de lo que históricamente ocurrió en Europa, donde el Esta la nación es la
materialización del Estado, en América Latina fue el Estado el que asumió el rol de
constructor de la nación. El momento hegemónico de una sociedad, es superior cuando se
produce una fuerte relación de correspondencia entre el estado y la sociedad.. “El estado
nacional es lo que ocurre cuando la sociedad se ha convertido en una nación o sea cuando
el estado quiere en nombre de la nación lo que esta quiere que se quiera por ella. El estado
puede ser la condición de la nación, su previedad y es lo que ha ocurrido casi siempre pero
también la inversa, que la nación preexiste al estado (Zavaleta, 1986, 1649
Para Zavaleta el esta historia del estado capitalista es la de la producción, distribución y
aplicación del excedente (Zavaleta, 1986, 47), donde el excedente y disponibilidad estatal
establecen una ecuación u optimo social, o sea “la relación exitosa o frustránea, entre el
estado como súmmun de todas las cuestiones del poder y la sociedad civil como el conjunto
de las condiciones materiales en las que se gesta ese poder. Para chile, la ecuación social
fue simetría, el Estado chileno se mostró….
Bajo una burguesía hegemónica que logro convocar al pueblo a sentirse parte del yo
colectivo, el acto de la guerra como momento hegemónico.
La oligarquía chilena pudo producir un territorio verdaderamente nacional el interés que
representó el ocupar y explotar la región de atacama en busca de la ganancia permitió
integrar al territorio nacional mediante la consolidación de un mercado interno a base de
la extracción del salitre., siendo el principal recurso por cual el aparato estatal obtenía sus
recursos. Sin mercado interno y sin un territorio orgánicamente articulado no puede existir
una nación en el sentido moderno capitalista del término.

1
Marxismo y nación en la obra de René Zavaleta Mercado, Diego Giller, IX Jornadas de Sociología. Facultad
de Ciencias Sociales, Universidad de Buenos Aires, Argentina, 2011.
Sin embargo, estas referencias teóricas no son del todo útiles para entender la complejidad
que resulto la construcción del estado nación en américa latina. En el intento de aplicar y
deducir la realidad latinoamericana desde la óptica colonial
“Un análisis concreto de una situación concreta” Mariátegui
La historia nacional es una historia de la clase gobernante. Hablar de cómo se narra chile.
El nacionalismo como esencia de la ideología burguesa, dentro de un contexto donde el país
transita hacia la inserción del sistema mundial capitalista.
El discurso, como acto político e intelectual, donde se juega la obtención del poder y sobre
el significado de las cosas
Chile inserto en el sistema mundial capitalista.
El nacionalismo como ideología busca el legitimar y homogeneizar a la sociedad, dentro de
un contexto donde se cruzan y tensionan distintas identidades
A su vez por imaginarios comprendemos que corresponde a un conjunto articulado de
representaciones colectivas así como ideas-imágenes que sirven de substitución y de apoyo
a las otras formas ideológicas de las sociedades, como por ejemplo los mitos políticos donde
ideas sobre Estado-nación se vuelven universales y generales gracias a la función
instauradora de lo imaginario.
Este aparataje simbólico tiene como función la exaltación y legitimación del estado frente
a los ciudadanos los cuales construyen y asumen características y lealtades frente a él.
El territorio es un elemento fundamental dentro de la ideología, ya que en él se materializa
la manera en la que el pueblo se ve a sí mismo2.
Sobre la guerra: “un país concurre a la guerra con lo que es pero también con lo que no es
(Zavaleta, p. 26) para que una sociedad concurra al hecho militar tiene que existir un corpus
social que se sienta uno, que sienta el objeto de la guerra como algo central, vital e
irrenunciable: “Donde no existe nación, no se puede pedir a los hombres asistir
nacionalmente a la guerra ni tener una sensibilidad nacional del territorio”.
La consolidación del estado tiene varios momentos constitutivos, la Guerra del Pacifico
sería un segundo momento constitutivo: “hay acontecimientos profundos, ciertos
procesos indefectibles, incluso ciertas instancias de psicología común que fundan el modo
de ser de una sociedad por un largo periodo (p. 37)
Las circunstancias que acompañan el momento constitutivo y sirven a su desarrollo
influyen sobre todo el resto de su vida.

2
Rene Zavaleta, p. 23
Sobre el excedente, lo importante no es él en sí mismo, sino quién lo capta y para qué, por
ejemplo el guano a pesar de ser un excedente para Perú no generó una nación.
La historia del Estado capitalista es la de la producción, distribución y aplicación del
excedente.
La guerra del salitre seria lucha por el excedente, pero la historia de las naciones
latinoamericanas dan cuenta que no importa su mera existencia, sino que lo importante
es quién lo capta y para qué. Perú, por ejemplo, a pesar de poseer como excedente al
guano, su posesión no había servido para construir una nación (p.41)
Para Zavaleta, el excedente es un principio transmisor de la ideología, el cual no existiría si
no hubiera receptividad.
La superioridad militar, y por consiguiente su existo en la guerra habría sido producto de
su estabilidad política, una estabilidad debida a su optimo social, el cual era superior a sus
rivales. Chile tuvo la capacidad de desarrollar una política propia, a pesar de ser un estado
dependiente, pero que logro desarrollar cierto grado de autodeterminación fijando el
objetivo, logrando esbozar una “política de Estado”, o sea una relación eficiente entre el
poder y la sociedad” (p. 43-44)
“Nunca se vence sin consecuencias; no se vence impunemente” (p. 46) y es que la victoria
de Chile en el pacifico reconfiguro la autoconciencia. Llevando a una corroboración de la
hegemonía de la clase oligarca en chile. Consolidando la presencia de un Estado
autoritario, el cual pasó a ser carácter configurativo de la identidad nacional.
“Cuando ocurre una guerra, se concurre a ella no sólo con lo que uno es en lo actual, sino
con toda la historia que uno trae”, p. 47
La guerra, como las crisis, devela aquello que está oculto, supone una tensión en la que se
enfrenta todo aquello que es capaz de reunir y potenciar casa sociedad en ese momento.
(p.47)
El hecho de que Chile halla podido movilizar a la sociedad, a diferencia de Perú y Bolivia,
reveló el triunfo de una forma de estado al movilizar nacionalmente a cientos de personas
a pelear en las trincheras o a apoyar masivamente a los batallones en cada pelea.
La guerra del pacifico se enfrentaron tres formas de Estado diferentes. Una guerra de
carácter estatal, pero que logró penetrar en las conciencias de la sociedad para pasar de
ser una guerra de carácter estatal a ser una guerra nacional, unificando a la sociedad en
una acción consciente del Estado, el cual demostrara su capacidad de convocar a la
sociedad, demostrando la funcionalidad de su optimo social (p. 48). El estado chileno
demostró que tenía la capacidad y aptitud de movilizar psicológicamente y
administrativamente a la sociedad (p. 48)
Chile disponía de una ecuación social superior a la de sus adversarios. La comparación del
producto nacional, si daba alguna ventaja a chile, no era significativa. Al menos
militarmente no. Siendo países poblacionalmente más grande, Perú y Bolivia.
“Chile tuvo la capacidad de construir una política de Estado que movilizara a la sociedad
completa con el propósito de la guerra. p. 53, aquí radica la importancia de la ideología:
en los Estados como en los individuos se suele atribuir al propio arbitrio las decisiones que
en verdad han sido impuestas por las circunstancias o determinaciones externas; en
algunos casos, el propio soporte de la decisión puede creer que está resolviendo algo que
en realidad ha sido dado por las cosas, una autodeterminación ilusoria (p. 53)
La guerra es una forma nefasta de relación entre las sociedades, pero no parece dejar de
ser una forma de relación (p.43)
La autodeterminación, o sea el control ejercido por la clase dirigente respecto a su
relación y dependencia hacia economías centrales, permitió generar objetivos y
movimientos a largo plazo. “Si no se tiene arbitrio económico en alguna medida no se
tiene arbitrio político.
Zavaleta propone que Chile se constituyó en imagen al Perú. “Nadie se funda con relación
a sí mismo. El alter para Chile fue siempre el Perú. Chile, un Estado constituido contra los
indios, a pesar de los indios y con exclusión de los indios. P. 56
“un estado, en realidad, sólo puede postular una política en el ámbito de su alcance
ideológico o factual al menos, por cuanto éste es el acto de algo que existe como potencia
o virtualidad en el aparato administrativo y en el represivo porque el Estado es él y el
radio de su validez o irresistibilidad, p. 56.
“Un Estado que no tiene conciencia de sí y certeza de sí, no es en verdad un Estado, sino
una consecuencia factual de los enfrentamientos, las agresiones y los pactos entre las
agrupaciones anómicas de la sociedad civil. P. 57
“El Estado sabe lo que quiere y lo sabe en su universalidad como algo pensado: el Estado
obra y actúa según fines, principios y leyes sabidos que no son solamente en sí mismo
para la conciencia” (Hegel, 1975, 255, citado por Zavaleta, p. 57)
“La validez del concepto mismo de momento constitutivo se refiere a la formación del
discurso esencial”. P. 59
“aquí se requiere algo que tenga la fuerza necesaria como para interpelar a todo el pueblo
o al menos a las zonas estratégicas de él porque ha de producirse un relevo de creencias,
una sustitución universal de lealtades, en fin, un nuevo horizonte de visibilidad del mundo,
p. 59
“la ideología constitutiva suele atravesar los propios modos de producción y las épocas.
P.60