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Universidad de Carabobo

Facultad de Ciencias Jurídicas y Políticas.


Escuela de Derecho.
Seminario: Criminalística.

Balística

Integrantes:

Maestre, Michelle V-27.117.940

Mayz, José V-21.240.429

Medina, Abraham V-27.157.511

Merchan, Dorys V- 7.268.286

Padrón Dayana V-14.461.970

Rujano, María V-26.391.661

Prof. Abg. Leoncy Landae.

Naguanagua, Junio 2019


Introducción.
Dentro del proceso de investigación criminal, la balística ofrece una serie de análisis
exclusivamente dirigidos hacia el área penal, que permiten esclarecer los hechos donde se
encuentran involucradas armas de fuego, municiones y elementos derivados de la acción del
disparo, para proporcionar los mecanismos de convicción que eventualmente se constituirán
como pruebas en el juicio. La Balística, como disciplina científica que forma parte de la
criminalística, brinda conocimientos indispensables para el esclarecimiento de las conductas
punibles en cuya comisión se han utilizado armas de fuego, permitiendo determinar las
cualidades específicas del arma implicada en el hecho, el tipo de munición utilizada, las
lesiones ocasionadas a la víctima, los daños en objetos, la determinación y reconstrucción de
trayectorias, la uniprocedencia de los proyectiles y vainillas recuperados en la escena del
crimen, durante la investigación o la necropsia, permitiendo obtener una visión clara de la
secuencia de los hechos y el establecer la posible autoría del delito.

Es así pues que se hace necesaria la ayuda de la Balística, para que de esta manera se
pueda determinar y obtener información sobre las características del arma involucrada, la
gravedad de las heridas causadas por los proyectiles en el cuerpo del agraviado”. Esto es
importante pues si existe alguna duda, ésta puede ser utilizada por la defensa del imputado y
podría de hecho probar su inocencia o el cambio en la tipificación del delito y de la pena.
Balística.

El término balística proviene del latín Ballistan, y a su vez del griego bálleiv, que
significa lanzar, arrojar. De acuerdo, al diccionario de la Real Academia Española señala que
“es la ciencia que estudia el movimiento de los proyectiles”. Al respecto, el autor Arburola,
A. (2012), define el término Balística como: “Aquella ciencia que se encarga de estudiar las
armas de fuego, la dirección y los alcances de los proyectiles que disparan, así como los
efectos que producen”. Por su parte, y de una manera más detallada Ruíz, W. (2010), lo
conceptualiza de la siguiente manera:
El estudio relacionado al movimiento, avance y proyección de cuerpos
lanzados al espacio, en esto se incluyen todos los proyectiles, que en efecto,
pudiesen ser proyectiles disparados por armas de fuego, así como municiones,
bombas de gravedad, misiles, cohetes; asimismo la Balística estudia el disparo y
todo los elementos del interés balístico.
De lo anterior, se puede inferir que la balística es el estudio del movimiento y
evolución de los proyectiles disparados por armas de fuego y forma parte de los estudios
forenses. También, la balística es una disciplina científica compleja e íntimamente
relacionada con otras ciencias como las matemáticas, la física y la química, especialmente en
los aspectos de la termodinámica, la metalurgia, la aerodinámica, la óptica y otros, puesto que
se ocupa de todos los fenómenos que relacionan el proyectil con el medio, desde el momento
en que este, partiendo de una situación de inactividad o reposo, inicia su movimiento dentro
del arma, donde adquiere la velocidad necesaria para impulsar su desplazamiento por el aire,
hasta impactar con un cuerpo donde se introduce y al que cede la energía cinética, quedando
nuevamente en reposo.
Por consiguiente, el estudio de la balística se centra en las fuerzas, trayectorias,
rotaciones y comportamientos diversos de los proyectiles en diferentes ambientes de empleo;
además de la forma del proyectil, sustancias, temperaturas, presiones gaseosas, situaciones
que suceden en las diferentes fases del disparo, desplazamiento del proyectil a lo largo del
ánima y salida al exterior, trayectoria e impacto. La balística es una disciplina que forma
parte de la investigación de crímenes y es de gran utilidad para esclarecer acciones delictivas
con armas de fuego.
Clasificación de la Balística.

La balística puede considerarse dividida en tres ramas:

1.-Balística interior: Aquella que estudia el movimiento del proyectil en el interior del
ánima del tubo del arma (en su fase inicial de lanzamiento) desde que empieza su
desplazamiento y hasta que abandona el tubo del arma. Es decir, estudia todos los fenómenos
que impulsan al proyectil, así como el quemado del propelente, la presión gaseosa, el giro y
rozamiento dentro del ánima, etc. Esta parte de la Balística se ocupa también de todo lo
relativo a las armas de fuego, su estructura, mecanismos, funcionamiento, carga y disparo de
la misma.

2.-Balística exterior: Estudia las trayectorias y los efectos perturbadores del medio ambiente
sobre el proyectil. Es el análisis de lo que ocurre con el proyectil desde que abandona la boca
del cañón hasta que hace blanco, o bien agota su impulso y cae. Además de los fenómenos
que lo afectan en concordancia con las particularidades de cada caso, tales como la gravedad,
la resistencia del aire, la influencia de la dirección e intensidad de los vientos y
particularmente los obstáculos que se le interpongan y que en definitiva son productores de
los rebotes que modifican la trayectoria original.

3.-Balística terminal o de efectos: Estudia los efectos causados por el choque del proyectil
contra un cuerpo dado o ya definido. La balística terminal o de efecto estudia la forma en que
actúa el proyectil al llegar al blanco, los efectos en general, sus deformaciones o fenómenos
producidos por el proyectil, la manera de transferir su energía cinética al blanco, y el
funcionamiento de ciertos proyectiles concretos, entre otros aspectos. Tiene una importancia
ya que muestra lo degenerativo que son los efectos secundarios en los destrozos dejado por el
impacto, ya sea en algún objeto o en un cuerpo humano; todos estos estudios solo tienen un
fin, poder reconstruir la escena de un crimen.

Esta a su vez de divide en:

 Balística forense: Perteneciente al campo de las ciencias forenses es la parte de la


balística terminal que estudia el efecto de los proyectiles al impactar con un ser vivo y
todos los problemas que ello plantea como la entidad de las lesiones etc. La balística
forense aborda el estudio de las diferentes evidencias producidas a partir de la
ejecución de un disparo producido por un arma de fuego; tales como, residuos de
pólvora y fulminante, conchas, proyectiles; así como las secuelas de los impactos
ocasionados sobre la víctima y/o el entorno de la escena del crimen. Además de la
posición del tirador con respecto a la víctima, mediante la realización de trayectorias
balísticas. Todo ello, con el propósito de evidenciar la forma en que se perpetro un
hecho punible y establecer la responsabilidad de los autores materiales del mismo.

 Balística Policial: Es la parte de la balística terminal que estudia todo lo relacionado


con la investigación policial y complementa a la balística forense.

A su vez de divide en:

 Balística identificativa: Es la parte de la Balística que estudia las lesiones producidas


en las superficies de los proyectiles y vainas por los mecanismos de las armas, al
objeto de poder atribuir los citados elementos balísticos a las armas que los han
disparado, con fines identificativos. La Balística comparativa o Identificativa estudia
las relaciones de identidad existentes entre las marcas o lesiones (características
identificativas) producidas en la concha y proyectil por el arma utilizada y los
elementos o partes de dicha arma que producen las citadas huellas. Esta rama de la
Balística, parte del principio general de que todas las armas imprimen características
propias a los elementos no combustibles integrantes de la munición (proyectil, concha
y fulminante) utilizadas. La Balística Identificativa: lleva a cabo los estudios
necesarios, (realizados por un perito), con el fin de identificar un arma de fuego, su
origen, marca, modelo, calibre, etc.; así como la identificación de todos los elementos
balísticos encontrados o recolectados en el lugar de hechos.

 Balística Operativa: Estudia los tipos de armas, mecanismos de las mismas, es decir
podemos decir que es toda la balística policial salvo lo especifico de la Balística
identificativa.
Armas de Fuego.

El arma de fuego se puede definir como un dispositivo destinado a propulsar uno o


múltiples proyectiles mediante la presión generada por la combustión de un propelente. De
este modo, se excluyen dentro de este término los dispositivos que lanzan proyectiles por
medio de un gas previamente comprimido. Como toda arma, su función original y más
común es provocar la muerte o la incapacitación casi instantánea de un animal o humano.
Según el Proyecto de Ley para el control de Armas, Municiones y Desarme, elaborado
en la Asamblea Nacional de la República Bolivariana de Venezuela del año 2011, el arma de
fuego es un instrumento mecánico que utiliza una materia explosiva que propulsa uno o
múltiples proyectiles por medio de presión de gases, los cuales son lanzados a gran velocidad,
producto de la deflagración de pólvoras, que despiden gas a alta presión tras una reacción
química de combustión.
Por consiguiente podemos decir que las armas de fuego son instrumentos de forma y
dimensiones variadas que proyectan objetos solidos aprovechando la energía que proporciona
la combustión de la pólvora, estos proyectiles son lanzados a gran velocidad y pueden causar
lesiones desde leves hasta gravísimas, e incluso la muerte.
Las armas de fuego se dividen en dos categorías principales:

 Armas de fuego largas: escopeta, fusil de combate, ametralladora, fusil de asalto,


subfusil, carabina, fusil de francotirador, fusil de tirador designado, fusil antimaterial.
 Armas de fuego cortas: pistola, revólver y pistola ametralladora.
Una característica importante en un arma de fuego es también el tipo de ánima, el
interior del cañón. De si un arma es de ánima lisa o ánima rayada dependen muchas
características importantes para su función.

Estructura de las armas de fuego.


1. El cañón: Se trata de un tubo de acero especial, de paredes resistentes, de forma
cilíndrica hueca, de conveniente diámetro y tamaño elaborado, capaz de resistir
temperaturas elevadas sea por fricción y calor, destinado a que por su interior discurra
el proyectil impulsado por los gases producidos por la deflagración de la pólvora, de
manera de dirigir el proyectil hacia el objeto que se apunta.
2. Cajón de los mecanismos: Es la parte de las armas de fuego que engloba todo el
mecanismo móvil que se encuentra en el armazón, la cual permite el accionamiento de
la misma para efectuar el disparo. En efecto, este compartimiento en el que se
introducen y sujetan las piezas de que se componen las armas de fuego, posibilita su
manipulación y coadyuva con el sistema general del arma. Al respecto, constituye la
parte de conexión entre las piezas para cumplir con la función del disparo. En este
sentido esta es la estructura más importante de su funcionamiento, la cual comprende
a los componentes como el muelle de percusión, martillo, aguja percutora, disparador,
guardamonte, resorte, pernos, entre otras piezas inclusive el cilindro giratorio o nuez
volcable en las armas de fuego tipo revolver.
3. Empuñadura: Es el punto de agarre o sujeción del arma de fuego y está constituida
por la prolongación metálica de la caja de los mecanismos, la cual puede estar
cubierta por una o dos tapas confeccionadas en cualquier tipo de material. Al
respecto, en las armas de fuego de tipo corto se le denomina empuñadura y por el
contrario a las armas de fuego de tipo largo se le denomina culata, las cuales pueden
ser plegables o fijas.
4. Corredera: Es el carro o conjunto móvil que se desplaza sobre las guías o carriles del
armazón, permitiendo el disparo. En la gran mayoría sirve de emplazamiento a los
aparatos de puntería, (alza y guion) en otros, porta solamente el alza. También aloja el
extractor (de las vainillas), la aguja percutora y en algunos casos los dispositivos del
seguro automático de aguja, indicador de mecanismo montador, indicador de cartucho
en recámara y seguro de aleta, cuando este se encuentra en la corredera.
5. Cargador Es el dispositivo que aloja los cartuchos con que alimentaremos la pistola
durante su funcionamiento. Puede estar situado en la empuñadura (la mayoría) o por
delante del guardamonte, y ser separable o fijo. Existen cargadores de doble fila y
mono filares.
6. Cilindro o nuez volcable: Esta pieza, fundamentalmente la utiliza el revólver. La
misma está compuesta por un conjunto de orificios o alveolos donde se alojan las
balas, dependiendo de su marca, modelo y calibre; cada vez que se efectúa un disparo,
el tambor gira alrededor de un eje o pasador para preparar el arma de fuego de cara
siguiente al disparo. Sobre el giro del cilindro o nuez volcable, este lo puede hacer a la
derecha o a la izquierda, cuando se mueve o da vueltas hacia la derechas en el sentido
de las agujas del reloj se denomina dextrorso, por el contrario, cuando gira a la
izquierda se denomina sinistrorso.
El Cartucho.

Etimológicamente, cartucho deriva de la palabra italiana cartoccio (cucurucho de


papel), carga de un arma de fuego encerrada dentro de una envoltura, que puede contener
solamente la pólvora o estar junto con los demás componentes del fenómeno del disparo.
Un cartucho es un recipiente metálico que contiene la bala o proyectil, la pólvora
y el fulminante. Es del tamaño apropiado para ajustarse a la cámara de ignición de un
arma de fuego. El fulminante es una pequeña carga de un elemento químico sensible a los
impactos que se puede encontrar en el centro o en el borde de la parte posterior del
cartucho. Un cartucho sin bala es un cartucho de fogueo. La función de un cartucho es el
conseguir que uno de los elementos que lo integran (la bala), pueda ser lanzada, en
conjunción con el arma, a una cierta distancia, con precisión y con una energía remanente
determinada. Componen el cartucho la vaina, en donde se encuentra la pólvora y la
cápsula iniciadora, y la bala.

Los cartuchos utilizados en las armas de fuego se clasifican según el siguiente criterio:
Por la cantidad de proyectiles que portan
 De proyectil único: Cada cartucho posee un solo proyectil y responde a los
cartuchos utilizados por la gran mayoría de las armas disponibles en el mercado.

 De proyectiles múltiples: Estos cartuchos poseen en su interior una cantidad


variable de proyectiles, generalmente de forma esférica, llamados vulgarmente
“perdigones” o “postas”, las que pueden ser fabricadas en aleación de plomo,
goma o material plástico. Son generalmente disparados por armas de ánima lisa
(escopetas), aunque también existen cartuchos diseñados para otras armas,
conociéndose estos últimos con el nombre genérico de “cartuchos de
supervivencia”, ya que están destinados a la caza de animales menores,
particularmente pequeñas aves.
Por el tipo de proyectil
 De proyectil desnudo: El proyectil está constituido por una pieza de aleación de
plomo, antimonio y estaño, el que en algunas oportunidades puede presentar un
baño electrolítico de cobre. Posee la característica de presentar una serie de
muescas dispuestas en una línea alrededor del cuerpo cilíndrico del proyectil, en
las que se aplica un lubricante graficado especial, razón por la cual se la conoce
como “cintura de engrase”.
 De proyectil encamisado: Este proyectil posee un núcleo de aleación de plomo
recubierto por una placa o “camisa” de latón (aleación de cobre y zinc), la que le
suministra mayor dureza y por lo tanto un mayor poder perforante.
 De proyectil semi-encamisado o punta blanda: Al igual que el anterior este
proyectil consta de un núcleo de aleación de plomo recubierto parcialmente con
una funda o “camisa” de latón, la que en este caso deja al descubierto el sector
correspondiente a la ojiva o “punta” del proyectil que al ser de material más
blando, se deforma al impactar sobre el blanco expandiéndose, con lo que
aumenta su diámetro, adoptando contornos irregulares, todo lo cual, unido al
movimiento rotacional de que está provisto el proyectil, suministrado por el
estriado del cañón, produce lesiones de elevada consideración y alto poder de
parada o choque.
Por la forma de la ojiva
 De ojiva aguzada: Son proyectiles de punta aguda, recomendados por la
Convención de Ginebra para su utilización en las guerras convencionales. Poseen
alto poder de penetración y generalmente son del tipo “encamisado” lo que le
permite perforar y atravesar los tejidos blandos manteniendo energía remanente
que se pierde con el proyectil luego de atravesar el blanco. Responden a los
denominados “proyectiles perforantes”.
 De ojiva redondeada o semi-esférica: Como su nombre lo indica el extremo
distal de estos proyectiles presenta una forma redondeada o semi-esférica razón
por la cual la superficie de contacto entre el proyectil y el blanco al momento del
impacto es mayor que en el caso anterior y por ende, más rápidamente se efectúa
la transferencia de energía entre ambos cuerpos, a la vez que provoca un mayor
efecto de shock hidrodinámico aumentando el poder de volteo. (Pistolas 11,25 mm
y 9 mm, revólveres .38, .357 magnum, .44-40, etc.).
 De ojiva troncocónica o “punta plana”: En estos proyectiles la ojiva
propiamente dicha no existe ya que su diseño responde a un formato de cono
truncado, presentando su punta un plano perpendicular a su eje de simetría con lo
que se logra incrementar los efectos descriptos en el punto anterior. Este tipo de
ojiva generalmente se combina con proyectiles del tipo “semi-encamisado” o
“punta blanda”, lográndose incrementar aún más su poder de volteo y la gravedad
de las lesiones que provoca. (Revólveres 38 Especial, .357 magnum, 44-40 y .44
magnum.).
 De ojiva perforada o “Punta Hueca”: En estos casos los proyectiles presentan
una perforación en el centro de la ojiva, la que responde al subtipo de “Ojiva
redondeada”, combinándose generalmente con proyectiles del tipo “semi-
encamisado” o “Punta blanda”. Estos proyectiles, conocidos vulgarmente con el
nombre de “Bala Dum-Dum”, poseen la particularidad de expandirse al entrar en
contacto con el blanco, por los que también se los conoce con el nombre de
“munición expansiva”, siendo los de mayor poder de volteo de todos los
descriptos. Se usa generalmente en revólveres .38 Especial, .357 magnum, .44-40
y .44 magnum, como así también en rifles y carabinas de caza mayor del tipo 30-
30, 30-03, etc., aunque también se los fabrica en calibre .22.
Por la ubicación del fulminante en la vaina
 Cartuchos de fuego central: Son los que poseen su fulminante incluido en una
pequeña cápsula ubicado en la zona central del culote de la vaina, comunicándose
con su interior a través de orificios (generalmente dos) llamados “oídos” entre
medio de los cuales existe un resalto del fondo de la vaina que recibe el nombre de
“yunque”. Este tipo de ubicación del fulminante es el utilizado en la gran mayoría
de los cartuchos, conociéndose hoy en día como única excepción a los cartuchos
de todo tipo de armas perteneciente al calibre .22.
 De fuego anular: Son los que poseen su fulminante dispuesto en forma de anillo
siguiendo la periferia de la base o culote de la vaina. Este tipo de cartuchos es el
utilizado por todas las armas correspondientes al calibre .22.
 De espiga o sistema “Lefaucheux”: Se menciona en la actualidad solo a título
ilustrativo ya que corresponde a los primeros modelos de cartucho con fulminante
incorporado. En ellos el fulminante se coloca en un pequeño cilindro o “espiga”
que va insertado en el sector inferior del lateral de la vaina, lugar donde golpeado
directamente por el martillo de percusión ya que este modelo de armas carece de
aguja de percusión. En nuestro país este tipo de armas se utilizó hasta mediados
del siglo pasado.
Partes del cartucho.

1-El Proyectil (bala): Es el elemento principal de la munición, desde el punto de vista físico,
es el agente aerodinámico que se proyecta en el espacio, destinado para ser expelido
violentamente desde el arma de fuego, alcanzar un objetivo y ocasionar un efecto previsto. Se
compone de base, cuerpo y ojiva o punta. Por lo general está constituido de plomo y
antimonio (éste último en proporciones muy pequeñas), es el que se conoce como raso de
plomo, pero también los hay blindados, también conocidos como encamisados o
enchaquetados, que se componen de una envoltura metálica que cubre el núcleo, compuesta
por cobre y zinc (latón).

2-La Concha (vaina o casquillo): Es un receptáculo de forma cilíndrica y metálico que


tiene por finalidad contener en su interior la pólvora y servir de pieza de ensamblaje para el
resto de los componentes. Permite mantener en un solo bloque unidos al resto de los
componentes de la munición. En su boca está el proyectil, en la parte inferior interna se haya
la pólvora y en la parte trasera está la capsula del fulminante. Ella sirve de obturador. Se
compone de una aleación de cobre y zinc (latón), y con menor frecuencia, de acero. Sus
partes son: manto del cilindro, reborde, garganta y culote. Pueden ser de forma cilíndrica,
tronco-cónica y abotellada; y por la forma de su base pueden ser: con reborde, garganta y lisa.
3-Capsula Iniciadora: (pistón) es la parte del cartucho donde se aloja la sustancia iniciadora
encargada de comenzar la ignición. Esta especie de bomba diminuta contiene un fulminante
(mezcla química altamente explosiva) que produce una deflagración al ser golpeada. Esta
pequeña explosión provoca una llamarada que comunica el fuego a la carga de pólvora
iniciando una reacción química que la convierte en gas. Debido a la expansión de los gases,
esta reacción, produce un aumento de volumen que se traduce en presión que impulsará a la
bala. En los cartuchos de percusión anular la misma vaina hace de cápsula dado que aloja la
sustancia iniciadora en el interior del anillo que forma el reborde o pestaña del culote de la
vaina. Por el contrario, en los cartuchos de percusión central la cápsula (pistón) es una parte
independiente que se embute en un orificio practicado en el centro de la base del culote. En lo
referente a la percusión central debemos diferenciar el tipo de cápsulas empleadas en la
munición metálica de la semimetálica (escopetas). Las cápsulas iniciadoras empleadas en la
munición metálica son de dos tipos: sistemas Berdan o Boxer. La cápsula Berdan carece de
yunque necesitando que la vaina lo contenga. Por el contrario la cápsula Boxer, a diferencia
de la anterior, contiene un yunque incorporado. En lo concerniente a los cartuchos de
escopeta, actualmente se emplean principalmente dos variantes del sistema Boxer. A estos
pistones se les denomina de aparato abierto y de aparato cerrado. La diferencia radica en que
el segundo de ellos el pistón está cerrado.
4-Pólvora: Agente Propulsor. Constituye una carga propulsora, ya que realiza un proceso
químico que transforma una masa física en energía. Para el lanzamiento del proyectil se
aprovecha la energía resultante de la combustión, cuando es iniciada por la explosión del
fulminante en el momento, o que la aguja percutora del arma golpea la capsula de fulminante.
Son sustancias químicas que al quemarse generan grandes cantidades de gases, a
temperaturas extremadamente altas, en un tiempo relativamente corto. La pólvora utilizada
para la carga de las balas arde y libera gases provocando la expulsión del proyectil, este
fenómeno se conoce como “deflagración”, donde puede señalarse que la pólvora en estos
casos no explota, sino se deflagra. Por lo tanto, la carga de las balas no es explosiva. Las
pólvoras hasta fines del siglo XIX eran mezclas de carbón, azufre y nitrato de potasio
(salitre) que constituían la llamada pólvora negra (pólvora con humo) La pólvora moderna
conocida como pólvora sin humo, pólvora blanca o pólvora piroxilada, pueden ser de una,
doble o triple base, siendo de una base o base simple, la compuesta por nitrocelulosa o
algodón pólvora; de doble base, la compuesta por nitroglicerina (dinamita) y nitrocelulosa; y
de triple base, la basada en la composición integrada entre la nitrocelulosa, nitroglicerina y
compuestos nitrados como la nitroguanidina, dinitrogocol, pentrita, etc.

Analisis del lugar de los hechos donde se encuentren elementos balisticos

La Inspección del Lugar del Suceso en los delitos cometidos con la


participación de Armas de Fuego
Durante la Inspección del Lugar del Suceso los actuantes deberán extremarse en el
cumplimiento de cuatro tareas fundamentales:

1. Búsqueda y detección de los elementos vinculados al caso en cuestión.

2. Fijación de los mismos (tanto desde el punto de vista gráfico como legal)

3. Investigación preliminar e interpretación de las huellas y evidencias detectadas, lo


cual incluye la solución pericial de cuestiones diagnóstico criminalísticas
encaminadas al direccionamiento de la investigación durante el “primer ataque”

4. Ocupación del Corpus Delictis


Para los delitos que se cometen mediante disparos o con el concurso de armas de fuego, este
Corpus Delictis puede estar constituido por:

 Casquillos percutidos

 Proyectiles (elementos aislados de ellos o sus fragmentos)

 Cartuchos completos percutidos o sin percutir

 Tacos

 Separadores

 Contenedores de munición

 Armas de fuego (o elementos aislados, o sus fragmentos)

 Barreras impactadas por proyectiles (incluye a las víctimas)

 Otros elementos circunstanciales ligados al empleo de un arma de fuego en la


comisión de un hecho delictivo

 Otras huellas que constituyan objeto de estudio de especialidades diversas de la


Técnica Criminalística

Todo lo cual define como tipos de inspección particulares de la Balística Criminalística a:

1. La Inspección del Lugar del Suceso.

Al realizar la Inspección del Lugar del Suceso debera estar asistido de un perito, es
recomendable que en todos los casos en que se produzcan disparos, el Instructor se haga
acompañar de un especializado en lo que será menester realizar en el Lugar del Suceso.

En los casos de disparos de armas de fuego o de la comisión de delitos con la


intervención de armas de fuego, la Inspección del Lugar del Suceso persigue los siguientes
objetivos:

 Detección del arma de fuego, sus cartuchos, casquillos percutidos, proyectiles


disparados y huellas del disparo (brechas, hollín, granos de pólvora deflagrados o no,
etc.) sobre diferentes barreras.

 Realización de determinaciones de diagnóstico vinculadas al mecanismo del hecho, la


ubicación e interrelación entre la víctima, el victimario y el arma.

 Fijación de la ubicación y posición de las diferentes huellas detectadas

 Fijación de las características y el estado de estas huellas.

La elección de la forma de inspección dependerá en primer orden de las características del


Lugar del Crimen y del comportamiento del disparo. De esta manera en los lugares abiertos,
una vez establecida la línea de tiro, la inspección con el objetivo de detectar el proyectil se
realizará en forma lineal, en esos mismos lugares abiertos la inspección dirigida a localizar
los casquillos percutidos debe llevarse a cabo por sectores, mientras que en los lugares
cerrados, en los que se hayan realizado varios disparos la inspección se llevará a cabo de
forma concéntrica.

Deberá centrarse la atención en la detección de elementos que aclaren el mecanismo del


hecho y la identificación del arma empleada. Para ello es preciso, además de obtener las
huellas típicas de la Balística Criminalística, determinar:

 Ubicación y posición de la víctima al producirse el (o los) disparos.

 Ubicación y posición del tirador.

 Número de disparos realizados, consecutividad y trayectoria de los mismos.

2. La inspección de armas de fuego.

Antes de proceder a la inspección de las armas de fuego en el Lugar del Suceso, es


preciso establecer con exactitud su ubicación con precisión de hasta 1 cm, en relación con
puntos de orientación inmóviles y fácilmente identificables como paredes, marcos de puertas
y ventanas, árboles, postes del tendido eléctrico o telefónico, etc., y también en relación con
otros elementos, que aunque posean movilidad relativa, guardan singular importancia con el
hecho que nos ocupa (el cadáver, casquillos percutidos, manchas de sangre, otras barreras
menores impactadas, etc.)

Sólo después de describir estos particulares y de fijarlos debidamente tanto en el Acta


como en el croquis y mediante fotografías, el arma podrá ser levantada del sitio donde se
encontró, lo que responderá a la necesidad de estudiarla más profundamente y realizar su
ocupación.

Reiteramos que el arma debe ser tomada con las manos enguantadas y plenamente
seguros de si mismos, nunca se tomará el arma por el cañón, ni por sitios cercanos al
disparador o al martillo, siempre se tratará (en lo posible) de tomar el arma por las áreas
rugosas o irregulares y sólo después de levantar las huellas existentes en sus superficies se
procederá a descargarla; una vez eliminado el peligro que constituye manipular un arma
cargada, no se manipularán sus mecanismos ni se accionarán el disparador o el martillo, ya
que estas operaciones pueden alterar el estado de sus mecanismos y piezas, con lo que se
influirá en la objetividad de investigaciones periciales posteriores.

El perito deberá fijar:

 Posición del martillo.

 Posición del seguro.


 Existencia de cartuchos en la recámara o la cámara ubicada frente a la boca de carga
del cañón (para el caso de los revólveres).

 Existencia de cargador en el nicho y cuantos cartuchos contiene, si alguno de ellos


está percutido y cuales son las marcas que en su culote identifican la procedencia de
los mismos.

3. La inspección de casquillos.

Los casquillos constituyen un elemento muy importante que permite establecer el


tipo, marca, modelo y calibre del arma utilizada para percutirlo, así como identificarla a partir
de las huellas particulares que contiene, La búsqueda y detección de los casquillos no siempre
resulta una tarea sencilla, primeramente como señalamos, es necesario ubicar en el Lugar del
Suceso el sitio desde donde se produjo el disparo y partiendo del conocimiento de cómo se
realiza la eyección de los casquillos en los diferentes tipos de armas de fuego, teniendo el
cuenta el tipo de terreno el casquillo pudo rebotar y alejarse del sitio de su probable hallazgo,
o caer en los sitios menos esperados, una vez detectado el casquillo, lo constituye la fijación
de la ubicación topográfica del mismo, tanto en el acta de inspección como en el croquis del
Lugar del Suceso, esta necesidad crece cuando se detecten varios casquillos percutidos, ya
que a partir de su ubicación se podrá conocer el mecanismo del hecho, la consecutividad de
los disparos y el comportamiento del tirador en el Lugar del Suceso.

Cada casquillo encontrado debe ser identificado con números consecutivos, para lo
cual se consignarán sus características generales y si se encuentra o no percutido. Las
características que deben describirse son las siguientes:

o Inscripciones en el culote

o Forma

o Material con el cual está constituido

o Color

o Largo total

o Diámetro máximo

4. La inspección de proyectiles.

Son tal vez, los portadores de huellas balísticas que requieren de un tratamiento más
delicado, estos elementos pueden encontrarse libremente al final de su trayectoria de vuelo
libre o de rebote, o empotrados en alguna barrera, De encontrarse libremente sobre cualquier
superficie, una vez fijada su ubicación, el proyectil se tomará directamente con las manos a
fin de estudiarlo, si se encontrara en el fondo del canal ciego ubicado en el interior de una
barrera (incluido el cuerpo humano), se accederá al mismo ampliando el diámetro de la
brecha inicialmente y del canal después con un instrumento apropiado.

En el Lugar del Suceso se describirán las siguientes características del proyectil:

 Forma

 Material con el cual está confeccionado

 Color

 Largo total

 Diámetro máximo

 Número de huellas de rayados que se aprecian

 Dirección de las huellas del rayado.

5. La inspección de brechas motivadas por el paso o el rebote de los proyectiles


(incluidas las brechas sobre cadáveres).

Las brechas causadas por los proyectiles en diferentes barreras, permiten determinar la
dirección, sentido y distancia del disparo, si se trata de disparos a “boca tocante”, en algunos
casos se puede conocer el tipo de arma empleada a partir de la imagen que como resultado
del fogonazo y la humareda imprimen los compensadores, La descripción metrológica de
estas brechas sin embargo deberá incluir no sólo los elementos lineales de la misma (largo y
ancho), si no también su profundidad y si esta excede dos veces la longitud promedio de los
proyectiles conocidos, también se fijará la inclinación del canal resultante respecto a los
planos horizontal y vertical de la barrera en cuestión.

Si se tratara de una brecha ubicada en una barrera que no puede ser extraída del Lugar
del Suceso para su posterior estudio en condiciones de laboratorio, la misma deberá ser
filmada fotográficamente con el procedimiento apropiado, de manera tal que en la vista
fotográfica se aprecien las características tanto de la brecha como de las superficies
circundantes de la barrera.

Si la brecha objeto de investigación se tratara de una prenda de vestir de la víctima u


otra afectada ocasionalmente por los proyectiles, la misma una vez fijada convenientemente
se ocupará para su estudio posterior, debe tenerse especial cuidado en el embalaje de estas
prendas, ya que cualquier descuido puede provocar la desaparición de elementos de mucho
valor a la hora de determinar por procedimientos químico físicos la distancia del disparo, las
prendas de vestir deberán embalarse por separado, incluidas las prendas interiores (aun
cuando ya se hubiera ocupado la correspondiente prenda exterior.
6. La inspección de personas.

Las personas son objeto de inspección pericial en dos condiciones fundamentales, en


caso de que se tratare de una víctima viva sobre la que pudieran aparecer disímiles elementos
vinculados a la producción sobre ella de los disparos objetos de investigación y en el caso de
los victimarios, a fin de obtener elementos materiales que demuestren el empleo por el de
armas de fuego en la producción de disparos.

Identificación Del Arma De Fuego Utilizada.

En las armas de fuego, para el estudio de la balística forense, debemos tomar en cuenta las
siguientes características:
 Tipo de arma. Pistola, revólver, fusil, escopeta, entre otras.
 Marca. Es la casa fabricante del arma de fuego, aquí en las armas encontraremos la
utilización de un signo o logo para la identificación de la marca o fabricante.
 Modelo. Es la representación que sigue como pauta las características de un arma de
fuego.
 Serial. Es el numero identificativo. Puede ser alfanumérico.
 Lugar de fabricación. Tiene que ver con el país donde se encuentra la fábrica del
arma. Cada marca de arma de fuego es emblema de su país.
 Longitud del cañón. Viene a determinar el tamaño del cañón y se mide en pulgadas.
En las armas cortas, las longitudes más comunes son las de 2, 4, 6 y hasta 8 pulgadas
y en las armas largas encontramos hasta de 20pulgadas.
 Calibre. Es el que corresponde de medir, por cualquier medio adecuado, el diámetro
del proyectil de estría a estría.
 Giro helicoidal. Esto se aprecia por el rayado interno o ánima, que se aprecia en la
parte interna del cañón. Este le da al proyectil mayor alcance y precisión, y a la vez
mantiene los residuos del disparo, aunado a que deja impresa la marca del anima en el
proyectil.
 Acabado o color superficial. Aquí encontramos el color del arma, por lo general
vienen en color negro satinado o plateado o comúnmente este último llamado
niquelado.
 Empuñadura. Parte del arma que sirve para colocar la mano. Esta puede ser de
material sintético o de madera.
 Detalle identificativo. Cualquier inscripción que posea o marca personal.
 Ausencia de piezas o fracturas que presente. Aquí nos referimos que como
características, a un arma de fuego objeto de experticia, le falte algún componente que
sirva para individualizarla, siempre y cuando se señale que esta pieza o piezas
faltantes alteren o no su funcionamiento.

Principales Estudios que se efectúan en Balística

A-Experticia de Reconocimiento, Mecánica y Diseño: Está dirigida hacia la identificación del


arma de proyección balística convencional o no, es decir, orientada hacia las armas de: fuego,
neumáticas, fabricación casera, etc., describiendo las siguientes características: tipo, marca,
calibre, número de campos y estrías, dirección del rayado, ángulo de inclinación del rayado,
anchura del rayado, etc. Asimismo, se encarga de la identificación de la bala, la concha, el
proyectil y los implementos que se articulan o forman parte complementaria de la misma.

B-Experticia de Comparación Balística: Dado que la mayoría de las armas de fuego poseen
en su ánima un microrrayado (rayado helicoidal) único y diferente que las individualiza, el
paso de un proyectil por el interior de la misma traerá consigo la impresión de los elementos
que componen este microrrayado (campos y estrías) producto de las fuerzas de rozamiento o
fricción ocasionadas por este desplazamiento, lo que permitirá, a través de la experticia de
comparación balística identificar e individualizar el arma de fuego que haya sido disparada en
un hecho delictivo.

C-Restauración de Seriales: Es una prueba balística de certeza y de identificación,


fundamentada en la aplicación de reactivos químicos indispensables sobre la superficie del
arma de fuego, con la finalidad de restituir la numeración de los seriales de la misma, que
fueron limados, adulterados o modificados con el fin de evitar identificar a la misma. La
aplicación de los reactivos dependerá del acabo y/o superficie del arma de fuego, ejemplo:
reactivo Fray, empleado para el hierro, reactivos Hume-Rothery y Villella, empleados para el
aluminio; reactivo Spencer, empleado para la plata, níquel, etc.

D- Determinación de Presencia del Disparo: Analiza las áreas del arma de fuego (boca e
interior del ánima del cañón, recámaras, etc), para establecer la presencia de iones oxidantes
nitratos y nitritos producto de la deflagración de la pólvora provocada por el disparo, a través
de la aplicación de procedimientos químicos y comprobar que al arma de fuego fue
disparada. Determina la presencia principalmente de iones oxidantes nitratos y nitritos,
hallándose igualmente, residuos de sulfatos, cloratos y potasio, sobre la superficie del cañón y
de la recámara del arma de fuego, a consecuencia del disparo. Esta prueba no determina la
data, es decir, el tiempo transcurrido desde la ejecución del disparo, solamente establece que
el arma fue disparada. El reactivo químico comúnmente utilizado para la aplicación de este
procedimiento, es el de Lunge, que arroja una reacción de color azul, que indica la reacción
positiva.

E-Informe de Rastreo y Seguimiento: Su función es individualizante, y consiste en registrar,


reconocer, identificar y recopilar, todas las informaciones tendientes a perseguir y desarrollar
la movilización y traslado de un arma de fuego, comprometida en la comisión de dos o más
hechos punibles, es decir, permite obtener información, de que un arma de fuego sometida a
experticia de reconocimiento y codificada con el correspondiente registro balístico, se
sometió a la prueba de rastreo y seguimiento y se determina que la misma participó en tres
(3) hechos delictivos diferentes.

F-Análisis de Trazas de Disparo (A.T.D.): Determina con certeza que una persona haya
disparado, mediante el análisis cualitativo y cuantitativo de las trazas de disparos producidas
por el choque de la aguja percutora contra el fulminante de la bala. Es una prueba balística
que se realiza en un área especial por el uso del Microscopio Electrónico de Barrido, que
tiene la particularidad de poseer un equipo analizador de energía dispersiva de rayos X. La
prueba del A.T.D., consiste en recolectar y recabar, en unas piezas (pines), con bases
circulares y adherentes, trazas, residuos y vestigios de sustancias localizadas, en ambos lados
de las manos (palmar y dorsal), de una persona, y que procesados técnica y científicamente
arrojen resultados positivos, con la presencia simultánea del plomo, bario y antimonio. Es una
prueba de certeza, cuando se obtiene como resultado la presencia simultánea de los elementos
químicos del Plomo (Pb), Bario (Ba) y Antimonio (Sb); indicador de que la persona sometida
a estudio, análisis y evaluación, disparó un arma de fuego.
Comparación del Estriado
Ánima.
Es la superficie cilíndrica interior del cañón. Balísticamente existen dos clases de
ánimas: Ánima Lisa y Ánima Estriada.

Anima Rayada o Estriada: Son muescas, surcos o espirales grabados en el interior


del cañón de las armas de fuego, y sirve para que el proyectil durante su recorrido por el
cañón, adquiera un giro alrededor de su eje, permite darle presión y estabilización al proyectil
disparado, logrando un mayor alcance. Este rayado puede ser de izquierda a derecha, a la
inversa, o poligonal, el cual es impreso por la casa fabricante. Permite a través de la
experticia de comparación balística identificar e individualizar el arma de fuego que haya
sido disparada en un hecho delictivo. Son armas de ánima estriada los fusiles, rifles, la
mayoría de revólveres y pistolas.

El ánima del cañón de las armas de fuego (a excepción de la escopeta, cuya ánima es
lisa), tiene rayas (surcos) helicoidales o poligonales que generan en el proyectil un
movimiento alrededor de su eje longitudinal cuyo giro se puede observar macroscópicamente
de acuerdo a la orientación de los surcos que conforman los “campos y las estrías”, cuyo
sentido viene dado:

1. Hacia la Derecha (Dextrógiro)


2. Hacia la Izquierda (Levógiro)
3. Poligonal, cuando presenta la ausencia de la demarcación de los campos-
estrías.

Como ejemplo de las armas de rotación derecha (más común), están: el revólver
Smith Wesson, subametralladora Uzi, fusil Galili, etc. Y entre las armas de rotación
izquierda: pistola Astra, pistola Colt, rifle Remington, entre otras.
El número de campos y estrías es proporcional, es decir, el ánima del cañón que tenga
diez (10) surcos, tiene el equivalente a cinco campos y cinco estrías; si posee doce (12)
surcos, posee seis campos y proporcionalmente seis estrías, y así sucesivamente.
Dependiendo del tipo de arma, bien sea corta o larga, el número de estrías puede ser desde
tres (03) hasta dieciséis (16) estrías en la actualidad.
Anima Lisa: Cuando el interior del cañón es liso, no presentan ningún tipo de rayado,
como por ejemplo en las escopetas. Los proyectiles disparados por estas armas de ánima lisa
son de poco alcance, a mayor distancia tienden a regarse los proyectiles. Son armas de ánima
lisa las escopetas de caza, escopetas de cañón corto, armas de salón y algunos revólveres y
pistolas,

Además del estriado existen otras características específicas de cada ánima, que
consisten en pequeñas partículas de metal o excoriaciones dejadas al momento de fabricarse
el cañón. Por tanto, en cada surco existen varias protuberancias a las que van amoldándose a
la broca a medida que pasa y cambian a cada operación del taladro al pasar de uno a otro
surco. Estas características son propias de cada arma en particular, que las hacen ser ellas
mismas (únicas).
Conclusión

La balística, como ciencia coadyuva en gran manera para el estudio científico forense
de las armas de fuego. Esto ha permitido conocer, por ejemplo el alcance y dirección de los
proyectiles y sus efectos. Con ello se ha logrado responsabilizar a los delincuentes, ya que
además, se puede identificar cual ha sido la distancia y la posición de quien dispara, en
relación a la víctima. Uno de los elementos esenciales en la identificación de ojivas y
casquillos son las marcas características de clase con las que a través de este estudio se puede
determinar tanto el tipo, clase, marca como modelo del arma de fuego que se utilizó para la
realización del hecho criminal. De la infinidad de armas que existen ninguna es igual, ya que
son particularmente únicas, aun cuando sean de su mismo tipo y estilo, lo que las hace
diferentes es su huella balística, es decir la marca inconfundible e ineludible que dejan las
armas de fuego al momento de ser disparadas, al igual que las huellas digitales de una
persona.

Así pues, la Balística comprende un conjunto de conocimientos técnicos científicos y


criminalísticos, de los movimientos, alcance, efectos y dirección de los proyectiles; de la
misma forma trata de establecer en las lesiones o muertes causadas por proyectiles, cuanto
detalle resulte posible acerca de las mismas y demás circunstancias que ayuden u orienten la
investigación policial y/o judicial, contribuyendo con los elementos probatorios para llegar a
establecer un hecho delictivo.
De aquí la importancia del estudio de la Balística y sus ramas ya que se funda en la
demostración de la identidad balística que se establece entre una arma de fuego y sus
proyectiles; por lo tanto, capacita a los profesionales de la ciencia forense, es decir a los
criminalistas, quienes como expertos coadyuvan en la investigación penal apoyando al
órgano investigador y por ende auxiliando al Ministerio Público para fundamentar la
acusación. Asimismo, en el aspecto judicial es importante, ya que los jueces y abogados
requieren conocimientos técnicos balísticos para resolver los casos o litigios donde se
encuentran involucradas las armas de fuego. Por ende es importante decir que la
participación del experto o perito en Balística es conveniente en la reconstrucción de los
hechos, ya que su presencia permite obtener una apreciación más objetiva de las condiciones
y sucesos. De esta manera, proporcionará mayores elementos para poder efectuar la
elaboración del dictamen judicial.
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