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Paso 1

Conceptualización y reflexión
Justicia social.

Luisa romero castro


Código: 1102585922
Grupo: 50011_21

Kevis Jesús García


Tutor

Universidad Nacional Abierta y a Distancia UNAD


Escuela de ciencias en la educación ECEDU
Educación inclusiva en ambientes de aprendizaje
Cead corozal- sucre
2020
Ainscow, Booth, y Dyson, 2006). El propósito de la educación inclusiva y, en
particular, de una educación inclusiva para la justicia social, debe ser el de eliminar
todo indicio de exclusión, ya sea por la pertenencia a determinada clase social,
etnia, religión, género, o bien por la orientación sexual, la lengua materna, la cultura
de origen o la manifestación de ciertas habilidades (Kugelmass, 2003).
El respeto a ser diferente tiende las bases para eliminar todo tipo de discriminación
y barreras del aprendizaje. El verdadero cambio en el pensamiento será reflejado
en el cambio de actitud. Este será el compromiso de la educación y del compromiso
social: dar respuesta a las necesidades, y reducir o eliminar los problemas sociales
mediante el acceso a una educación para todas las personas. El respeto a la
diversidad empieza por comprenderla, aceptarla como cotidiano y comprender sus
orígenes. La educación es el puente que “añade” a la tolerancia, a la solidaridad y
a la participación de las personas en el quehacer humano, especialmente para los
alumnos, el vigor requerido para extraer de la diversidad cultural, toda la riqueza
que en ella subyace. Se requiere de una educación democrática e intercultural que
fomente el respeto por la diversidad, formando personas que la valoren y mediante
ello, permita conformar la propia identidad. Es por ello que las escuelas se
convierten en agentes de cambio social para incul-car el valor de la diversidad en
las políticas, los programas educativos, el currículo, las estrategias de enseñanza-
aprendizaje, es decir, se requiere un cambio de paradigma educativo y filosófico
La Educación Inclusiva no es un concepto singular, sino que supone la
consideración de una serie de indicadores o descriptores en torno al mismo, los
cuales deben desembocar en prácticas y proyectos orientados a conseguir escuelas
con carácter inclusivo. Por ello quizás sería más adecuado hablar de perspectivas
sobre la inclusión y la Educación Inclusiva. Para lograr escuelas inclusivas se
requiere de un cambio en el paradigma educativo, desde integración hacia la
inclusión; enmarcado en el derecho a la educación, a la igualdad de oportunidades
y a la participación. Es habilitar escuelas para que atiendan a toda la comunidad
como parte de un sistema inclusivo, desde las políticas en general, hasta la
reestructuración educativa y el contexto sociocultural. La inclusión es entonces, una
manera distinta de entender la educación, implica pensar en una nueva filosofía,
con nuevas formas de analizar la cotidianidad escolar, de trabajar y de convivir, es
decir, requiere un conjunto de acciones escolares, sociales y de la comunidad que
eliminen las barreras que impiden la participación de los estudiantes en el
aprendizaje, aceptando y valorando las diferencias individuales.
La escuela inclusiva implica que todos los niños/as de una comunidad aprendan
juntos en un mismo entorno, independientemente de sus características personales,
socio-económicas o culturales. Esta es la base para educar personas tolerantes,
respetuosas y empáticas donde unas aprenden de otras.

Todas las prácticas docentes que quieran dirigir su mirada hacia la inclusión, deben
en primer lugar partir de las necesidades de las familias y las necesidades del
niño/a, y en segundo lugar, tener en cuenta las tres dimensiones que definen la
escuela inclusiva; la presencia, la participación y el aprendizaje.

1. a escuela inclusiva se basa en la visión del niño/a capaz.

2. En la escuela inclusiva no existen requisitos de acceso ni mecanismos de


selección para la entrada de sus alumnos/as.

3. La escuela inclusiva persigue la mejora de la calidad de vida de los niños/as


y sus familias.

4. En la escuela inclusiva establece una relación positiva de colaboración con


las familias; regida por el respeto, actitudes reflexivas, empáticas, de escucha
activa y proactivas.

5. En la escuela inclusiva, los maestros/as se convierten en un recurso y apoyo


que guía a los alumnos/as en su proceso de aprendizaje.

6. La escuela inclusiva tiene como objetivo formar a personas con sentido


democrático, desarrollar un espíritu crítico y de cooperación.

7. En la escuela inclusiva se parte del respeto al alumno/a, planteando el


proceso de enseñanza-aprendizaje desde sus motivaciones.

8. En la escuela inclusiva los aprendizajes tienen un carácter comprensivo,


crítico y multidisciplinar.

9. La escuela inclusiva evalúa el progreso de los alumnos/as de forma global,


teniendo en cuenta sus capacidades de forma individualizada.

10. La escuela inclusiva tiene sitio para TODOS los alumnos/as.


BIBLIOGRAFIA

 Murillo, F., Krichesky, G., Castro, A., Hernández, R.


(2010). Liderazgo para la inclusión Escolar y la Justicia
Social. Revista Latinoamericana de Patología, 4, 169-
187. Universidad Autónoma de Madrid. Recuperado
de http://ctescolaresmich.gob.mx/documentos/LIDERAZGO_
PARA_LA_INCLUSION.pdf
 Muntaner J.J. (2014). Prácticas Inclusivas en el Aula
Ordinaria. Revista de Educación Inclusiva, 7 (1), 63-
79. Re4d de universidades y educación
Inclusiva. Recuperado
de https://www.revistaeducacioninclusiva.es/index.php/REI/a
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