El caso que nos atañe es un claro caso de falta de ética profesional por parte de
la organización. Las cuentas de Gowex fueron falseadas durante años,
maquillándose los datos de los estados financieros y las cuentas que componían
su balance, ocultando la realidad económica de la empresa. La empresa
manipuló y ocultó sus estados financieros reales con la complicidad y ayuda de
su propia auditoría, no reportándose ingresos que en realidad percibía, con la
finalidad de conseguir la evasión fiscal, viendo cómo se destinaba el dinero de
otras cuentas para compensar estos impuestos, ya que la compañía debía pagar
estos impuestos con los beneficios derivados pero que nunca se produjeron.