Adolecer informado. – Zura Guerra.

¿De qué va esto?

INTRODUCCIÓN.

Este texto podría ser muy simple y formalón [como un estirado inglés], sin

embargo tratará de ser lo más ameno posible y será, en vil cristiano, muy

llevado (aunque sea tachado de políticamente incorrecto). Pero, bueno,

comencemos:

En el año de 1904, el psicólogo F. Stanley Hall usó por primera vez el

término adolescente para su obra Adolescense: Its Psychology and its

Relations to Physiology, Anthropology, Sociology, Sex, Crime, Religion and

Education. Los adolescentes son un gran blanco de estudio por eso de que

esta etapa es considerada un segundo nacimiento, pero a la conciencia.

Mucha gente es de la opinión de que los adolescentes son fuertes y por ello

deben trabajar o emplear en demasía las ventajas que tienen sobre el sector

adulto de la población. Mas la adolescencia es una etapa de aprendizaje de

conductas sociales y cosas que serán mucho más útiles a lo largo de su vida

y que irán en un mayor beneficio de la Humanidad.

Pero no todo es tan sencillo como decir “que aprenda el joven y ya”, existen

infinidad de herramientas que es cierto que brindan conocimientos, pero que

también son unos poderosísimos distractores que en nada colaboran con

nuestro objetivo primordial: la mejora de la raza humana.

 Adolecer informado. – Zura Guerra.

O lo que es lo mismo: La Internet, por ejemplo, nos ayuda a descubrir

información a la que no tendríamos acceso a causa de la lejanía de ciertos

puntos, sin embargo a un solo clic podemos acceder a ella. Digamos que

Fulanito va a hacer su tarea o, simplemente, le interesó algo dicho en clase y

quiere ahondar en el tema. El problema radica en que en ese inter de “abriré

el navegador y buscaré” ya vio anuncios, ya revisó su correo, ya entró a

alguna red social o ya se puso a bajar música. ¿Dónde quedó el

conocimiento que hubiese adquirido? Estoy segura de que entres sus

estantes mentales no se archivó.

Esto se lo debemos a la mentadísima Globalización, hija directa de la

Capitalización al por mayor. Es verdad que tiene infinidad de puntos a favor

pero, ¿alguien de verdad vislumbra los contras?

Esta obra tratará de esclarecer muchas cosas acerca de las Tecnologías de

Información [aka Medios de Comunicación] y su relación con nuestra

humana juventud.
 Adolecer informado. – Zura Guerra.

Antecedentes.
MARCO TEÓRICO.

Primero debemos ubicarnos en una mini pseudo línea del tiempo:

1897 – Es inventada la radio.

1884 – Es creada la base de lo que podría ser un televisor [sin embargo, aún

no lo es].

1904 – Nace el término adolescente de la mano de Stanley Hall.

1925 – La televisión como tal es puesta a funcionar por primera vez.

1960 – Se crea Internet y es usado sólo por la élite gubernamental y con

fines más bélicos que informativos.

1973 – Es inventado el primer teléfono celular.

1983 – Aparece Internet para un uso de todos.

2004 – Se declaran los Derechos del Niño y el Adolescente.

Después debemos tener claros los siguientes tres conceptos para poder

entender lo que en esta obra será tratado:

 Adolecer informado. – Zura Guerra.

Adolescente – Proviene del verbo latino adolescere, que significa crecer, en

este caso, aproximarse a la madurez. Por ello se llama así a la etapa de la

vida humana que está entre la "infancia" y la edad "adulta", mentalmente

hablando, por supuesto.

Pubertad – Se refiere a los cambios somáticos [corporales, pa‟ los cuates]

que tienen lugar entre los 10 y 17 años.

Se tiende a usar pubertad y adolescencia como sinónimos, mas no lo son. El

primero se refiere a los cambios físicos y el segundo a los cambios

mentales, resumiendo.

Medios de comunicación - Del latín medĭus, lo que conecta dos cosas) se

refiere a lo que permite un proceso comunicacional [según la sabia

Wikipedia], o sea, algo que permite comunicarnos. Se dividen en masivos

[televisión] e interpersonales [teléfono celular].

 Adolecer informado. – Zura Guerra.

CAPÍTULO I
¿¡Adolescencia!? ¿Qué es eso, con qué se come?

No, no es una enfermedad ni una cosa nada más. Es la etapa de la vida en

la que el ser humano busca su identidad. Pero eso no es tarea fácil, no es

cosa de levantar una roca y hallarla: hay que forjarla.

Según los señores de la OMS, se es adolescente cuando se está en el

periodo de entre 13 y 19 años de edad, aunque hablando de la psique hay

gente que alcanza su madurez a más temprana edad.

Podríamos perdernos en todos los cambios morfológicos que le ocurren al

cuerpo del adolescente pero mejor haremos énfasis en lo más interesante e

intrincado: su mente.

El adolescente piensa. Eso lo tenemos claro. Pero, ¿qué piensa? A grandes

rasgos se puede decir que sólo piensa en cómo lo verá el mundo. ¡Sí, por

muy pretencioso es verdad! Al adolescente sólo le interesa qué dirán de él y

cómo lo verán. Tenemos a churrocientosmil muchachitos de un lado que

dicen ser emos y del otro lado a otros veintitantosmil que se identifican como

punketos y ¡hasta milochomil que se dicen barneys tenemos! Así fue y nadie

les prestaba mucha atención hasta que a un listillo se le ocurrió bautizar a

esa división como tribus urbanas y estudiarlas.

 Adolecer informado. – Zura Guerra.

Pero todas estas “identidades” no nacieron en tierras aztecas, precisamente.

Por ello la importancia de mencionar la Globalización en este texto. Las

ideas viajaron (no siempre en barco o en avión) por el mundo y se fueron

extendiendo y metamorfoseando de modo que fueron perdiendo la supuesta

“identidad” que pretendían.

Un claro ejemplo son los goths que nacen en los 70s en Inglaterra y de los

cuales tenemos representantes disque-vampiros en México. A mi parecer,

¡todos unos cuervos desgarbados!

Es cierto que todos podemos llegar a un punto de admiración tal en el que

empezamos a plagiar todo lo que hace la doctrina adorada o el ser en

cuestión pero la debilidad de los adolescentes es lo que los hace tan

susceptibles a perder su identidad.

“¿¡Qué hay de malo!? A todos nos agrada la forma de ser de Juan Pérez y

por eso tratamos de ser como él… No es moda, sólo nos gusta”, se me

puede refutar. Es cierto que tienen cosas en común y por ello inician

relaciones -sociales- (para que no haya albur) entre ellos. No habría

problema si preservaran su esencia… ¡Pero no! Son muy necios e

inseguros, por eso imitan a gente “bien recibida” por el clan y acaban

homogeneizándose con el sujeto a seguir.

 Adolecer informado. – Zura Guerra.

“Y de repente todos éramos uno. Éramos muchos Juan Pérez y éramos

geniales… Pero luego fue aburrido”, me dirán en un futuro.

Algo que también es importante para el joven es la originalidad, la

genialidad, el ser único. Aunque, claro, esto mismo entra en lo de ser bien

visto por una criticona-vieja-de-lavadero sociedad.

Conclusión del capítulo: La adolescencia es la etapa en la que se define

quién es cada quien.

 Adolecer informado. – Zura Guerra.

CAPÍTULO II
Cómo usar un medio de comunicación
y no morir en el intento.

Primero tenemos que un medio de comunicación es aquello que nos permite

tener comunicación, desde lejos, con alguien más [por muy redundante que

suene].

Usado de manera inadecuada, un medio de comunicación puede ser

realmente perjudicial. Un claro ejemplo es el mal uso de Internet para

difundir información personal aparte de la que espera el mundo –como un

simple pasarse el clima, pues-. Centrémonos en un viejo conocido, el caso

Martí. A últimas fechas se habla de un blog que mantenía el jovencillo en el

que posteaba sobre viajes, vida, en fin, todo. Pero irradiaba que tenía dinero.

Para un espía virtual [también llamado stalker] es sencillísimo atar cabos y

descubrir prácticamente un estudio socioeconómico detallado del suejtillo

[rete traumada con „-illo‟].

Sin embargo no estoy tratando de decir que los medios de comunicación son

unos viles vástagos del demonio, sino que se debe tener cuidado en todo lo

que se maneje puesto que todo el mundo, TODO EL MUNDO puede ver lo

que colguemos a Internet-

Regresando al caso Martí y enlazándolo al uso de los blogs, por seguridad

está prohibido utilizar información del tipo de cuántos viajes hemos hecho y
 Adolecer informado. – Zura Guerra.

a dónde [no, los viajes a Texmelucan de San Juan no valen] y del estilo de

cuántos celulares poseemos y modelos y cosas así. Los jóvenes tienden a

quejarse por prohibiciones de este tipo pero a veces no miden el peligro.

Otra de las desventajas de la Globalización es esta, por supuesto.

No estoy diciendo, padres-exagerados-alarmistas [perdón, la verborragia],

que los medios de comunicación, repito, deben ser casi, casi excomulgados,

pero claro que se debe tener cuidado.

“Mejor que los niños no se acerquen a esas máquinas del diablo”. Pues no,

señores, no. La evolución de las costumbres humanas es algo innegable e

irremediable y el uso de las tecnologías para la vida cotidiana es algo que a

la larga nos beneficiará. En todo hay peligro, señores, en todo. Es más, me

atrevo a decir que incluso cuando salgan de su casa pueden encontrarse

con la muerte al caer de unas simples escaleras. ¡La vida es así!

Respecto al stalkeo informático me olvidaba de poner un ejemplo simple que

justo me ocurrió esta mañana [20/06/10]: Charlaba con un amigo por el

susodicho mensajero cuando me puse a googlear [buscar en Google, para

las neófitos en la materia] su nickname [pseudónimo] y descubrí que era

adicto a Yu-Gi-Oh, que le gustaba una chica llamada [censurado], que

reparaba computadoras y… ¡en fin! Sólo faltaba que el chico pusiera qué

desayunó.
 Adolecer informado. – Zura Guerra.

Cosas como la anterior son peligrosas porque cualquiera puede acceder a

ellas. En este caso sólo yo tuve la curia de investigar sobre mon ami pero,

¿y los demás?

Conclusión del capítulo: Los adolescentes, verdaderos imprudentes, deben

tener cuidado con la información que suben a la red, en especial, porque no

sólo se ponen en riesgo a ellos, también a su familia.

 Adolecer informado. – Zura Guerra.

CAPÍTULO III
¿Tienes Facebook o vida social?

Los adolescentes utilizan los medios de comunicación para conocer gente y

es aquí cuando entra el famosísimo Facebook. En estos momentos hasta

puedo decir “hola, soy Zura y soy adicta al Facebook”. Esta es la red social

que mandó a… muy lejos al Messenger y al HI5, sobre todo a esta última

que, según la opinión juvenil, no vale la pena.

Facebook es la primera red social en alcanzar más de 500 millones de

usuarios de todo el mundo más rápidamente y en hacer más poderoso a

alguien [¡o sea, su dueño es millonario y joven!]

La red social Twitter se basa en el microblogging y debido al gran impacto

que ha estado teniendo es usada por gente del medio. Además cuenta con

un sistema de verificación de cuenta para asegurar que alguien es quien

pone realmente.

Twitter maneja también un sistema de seguimiento [Follow the leather,

leather, leather…] con el que recibirás todas las ocurrencias y pormenores

de los susodichos que sigas. En el caso de los políticos [aaaaagh] es común

ver publicadas cosas como “el pollo tratado tiene demasiada testosterona, si

votan por mi prometo blablablabla…” –aunque preferiríamos ver que los

impuestos disminuyen o que dejen de [cof, cof robar] distribuir mal los

bienes.
 Adolecer informado. – Zura Guerra.

Otro problema, al que nos hemos enfocado en este capítulo, es el de la

distracción que representan los diversos medios de comunicación para el

adolescente. ¡Nos es posible que 20 minutos de tarea se conviertan en dos

eternidades de horas de chat!

Lo mismo que mencionaba antes, no estoy diciendo que debemos maldecir y

satanizar feamente a estos medios, sino exprimirlos hasta sacarles el mayor

provecho posible.

Los padres, que sabemos no están acostumbrados a estas tecnologías –

perdón si alguien se siente ofendido [y ruquillo]-, deberían también

interesarse por ellas para su mismo avance y para que, con su madurez y

protección hacia los hijos, sepan a qué se enfrentan por el uso inadecuado

de ellas. Que un adolescente no sepa usar correctamente las tecnologías es

considerado un crimen imperdonable en esta era.

Conclusión del capítulo: Los adolescentes deben medir sus tiempos de uso

de los medios de comunicación y recordar que también tienen labores en su

escuela, su casa y con sus mismos amigos.

 Adolecer informado. – Zura Guerra.

CAPÍTULO IV
¿¡Y a mí qué si se murió Monsiváis!?

El último capítulo ya… ¡Qué tristeza! [snif, snif…] Este pretenderá informar

de algo que es terrible, horroroso, espantoso [¡ay, nanita!]… pero

lamentablemente verdadero. A los adolescentes no les interesa ni un

reverendo cacahuate lo que acontezca ni política ni económicamente.

Muchos grupos juveniles adoptan pareceres del estilo “malditos capitalistas”,

“ese gobierno canijo” o “con el PAN estamos mejor” pero son réplicas

exactas de sus padres o de gente a la que admiran imitándola para sentirse

aceptados en algún grupo en específico [lo que decía en el capítulo I].

Afrontémoslo. Cuando un adolescente ve televisión no lo hace por las

noticias, cuando revisa su celular no es para revisar algún contenido

pedagógico que no entienda –y el colmo-, cuando un adolescente entra a

Internet para nada, ¡ni en broma! lo hará para buscar conocimientos que le

puedan servir a futuro. Busca implacablemente ser aceptado por los demás,

ese –a mi parecer- es el único motor del adolescente.

Conclusión del capítulo: El manejo de los medios de comunicación en manos

adolescentes no es precisamente el deseado y, la verdad, es muy difícil que

llegue a transformarse esta conducta en la apropiada.

 Adolecer informado. – Zura Guerra.

¡Pero podemos cambiar!

PROPUESTAS.

† Que autoridades y padres trabajen juntos para formar al adolescente

en los menesteres propios de los medios de comunicación de una

forma responsable.

† Que el adolescente esté dispuesto a cambiar su conducta –y la de

todas las generaciones venideras, hablando ya del adolescente-

futuro-adulto- en pro de un mayor beneficio.

† Que las autoridades incentiven campañas juveniles de temas un poco

más serios, de modo que mayores sectores poblacionales se

interesen en ellos.

† Que las autoridades persigan con mayor rigor el espionaje digital de

manera que nuestros adolescentes estén más seguros.

† Que desde pequeños los niños sean cultivados en el arte que es el

uso de la tecnología, puesto que es una puerta enorme a

oportunidades magníficas para la Humanidad.

 Adolecer informado. – Zura Guerra.

The End.
CONCLUSIÓN.

Los medios de comunicación son herramientas utilísimas que no

sabiéndose utilizar son un verdadero desperdicio. Lamentablemente muchos

adolescentes no saben discernir el mal que hacen al simplemente perderse

en el limbo que representan atractivos servicios de estos medios. ¡El futuro

de nuestro mundo corre peligro!

Por ello es que incentivo con esta pequeñina obra a mis compañeros y

demás gente que lo lea para que tome conciencia del daño que produce

mantenerse ignorarse y no ponerle límites a lo que se está volviendo una

peligrosa adicción que nos amenaza a todos.

Las propuestas ya están hechas, sólo falta que sean tomadas en cuenta y

puestas en práctica.