José Luis Romero: Estudio de la mentalidad burguesa.

Mentalidad burguesa por razones metodológicas e históricas comprenden dos aspectos:

contenidos específicos de la mentalidad y el cuadro intelectual en los que se incluyen estos
contenidos.

La mentalidad burguesa se constituye a través de situaciones arraigadas en la experiencia, que

fueron creando esos nuevos contenidos y paralelamente configurando los nuevos marcos de
pensamientos. Comienza así a elaborarse el método experimental y desarrollarse un conocimiento
de tipo científico. Lo que llamamos mentalidad burguesa surgió desde las experiencias
espontaneas iniciales de la burguesía en contra de la mentalidad tradicional y desafiándola.

1) Cambios estructurales y respuestas ideológicas.

Sabemos que la ideología significa la forma de durar, permanecer, reproducirse y transformarse de

la estructura. También constituye el fenómeno más lento en cuanto al ritmo de cambio, ya que
posee una fuerte tendencia a la permanencia, esa peculiaridad se denomina institucionalización,
cuando esto sucede se monta todo un aparato en el cual la estructura ideológica ocupa un lugar
fundamental. El propósito del estudio es establecer cuáles son los procesos de cambio de las
distintas estructuras a partir de uno de sus elementos motores: las imágenes de cambio
construidas por sus protagonistas.

La mentalidad cristiano feudal, contra la cual se constituye la mentalidad burguesa, es ella misma
producto de un vasto proceso histórico, en el que pueden reconocerse tres napas: la mentalidad
baronial, la caballeresca y la cortes. De la última mentalidad nombrada surge la burguesía que
paulatinamente restablece el distingo entre realidad e irrealidad.

2) Las etapas en el desarrollo de la mentalidad burguesa.

Desde el siglo XI formación una nueva estructura socioeconómica que se yuxtapone a la

tradicional, se constituye un tipo de mentalidad. Fijaremos las principales etapas:

Etapa originaria: se prolonga hasta el s, XIV es la etapa de la acción espontánea y la experiencia.

Durante mucho tiempo no hay acto de reflexión en cuanto al nuevo pensar, no se advierte una
conciencia. Se desarrolla en el marco de la vida urbana lo cual no significo un acto de rebeldía, la
ciudad ofrece centros de convivencia, comunicación, y una serie de problemas que fuerzan a la
solidaridad, así se constituyen las opiniones de tipo sociopolítico, que van conformando una
sociedad de tipo contractual, las normas según las cuales eligen vivir. Estas formas de vida se rigen
por cosas que corresponden a la condición humana y no simplemente al alma.

Has tres posiciones que toma la comunidad frente a este fenómeno: una espontánea que advierte
las implicaciones y las asume otra represiva y una última hipócrita la que adoptan las clases altas.

Segunda etapa revolución ideológica del S.XVIII: la de Voltaire, Montesquieu y la enciclopedia.

Entre el siglo XIV Y XVIII entrecruzamiento de los aristocracias y las burguesías que han pasado de
ser urbanas a nacionales. Las burguesías comienzan a ser instrumentos de los Estados modernos.
El conocimiento científico se desarrolla notablemente y repercute en las ideas sociales y
religiosas. Desarrollo de la física y la astronomía, conmueve las creencias tradicionales. Todo
pensamiento burgués es mecanicista, por ello la expresión del pensamiento entre los s. XIX Y XX
como progresista, enfrentado a las creencia tradicionales Curiosamente las clases bajas no
adhirieron a este mentalidad progresista, se mantuvieron fieles a las ideas tradicionales, en verdad
mantenían las viejas creencias pero vivían como si no creyeran en nada.

El Romanticismo del S. XIX es en el fondo una reacción espiritualista y tradicionalista contra una
sociedad que empieza a conmoverse, por los conflictos evidentes y por los impactos
imperceptibles y casi secretos de la Revolución Industrial, más profundos que el propio
surgimiento de las nuevas urbes manufactureras. La Revolución Industrial comenzó a transformar
la estructura de la sociedad, convirtiendo al artesanado en proletariado industrial y a las
burguesías mercantiles en industriales.

3) La mentalidad burguesa se caracteriza por ese pasaje de la experiencia a la teoría. La

acumulación de la experiencia de cambio social sugiere, al cabo de un cierto tiempo.
Produce una teoría de esa concepción dinámica de la historia.

Llega un momento en que la experiencia de la movilidad social suprime el terror final y se formula
una explicación de la historia en la que la movilidad es continua hasta el infinito. (Progreso) el
progreso se manifiesta en el campo de la civilización técnica, del dominio de la naturaleza
(simplismo). Esta teoría de la historia como progreso, es una ideología, se trata de una
interpretación de la historia como proceso de cambio.

4) La experiencia originaria y sus proyecciones:

Mentalidad es un sistema coherente de opiniones, que abarca todos los campos posibles y que
espontáneamente o sistemáticamente se transforma en respuestas acerca de los más diversos
interrogantes.

Este nuevo grupo burgués ha cambiado de vida de una manera sustancial, empieza a operar sobre
la realidad, y simultáneamente a modificar sus opiniones. El recurso literario se usa para enfrentar
otro tipo de valores establecidos, de esta forma la nueva moral puede expresarse bajo esta forma
de una manera frontal todo el sistema de afirmaciones convencionales.

Es en la experiencia donde se elaboran las normas morales, los principios de vida, los principios de
legitimidad de todo lo que en el hombre es material o profano. Esta es la expresión de una ética
no dogmática, racional, cuyo mandato no es un mandato divino sino un principio elaborado por la
razón. Racionalizar es precisamente borrar el origen experiencial, siempre contingente, y afirmar
su valor eterno y universal. ( se institucionaliza luego de haber sido su origen un elemento de
acción espontanea) ( ideologia como sistema de pensamiento que sustenta el aparato político).