Está en la página 1de 6

LOS PROCESOS DE ACULTURACIÓN DEL SER HUMANO

(MEXICANO) Y SU PSICOLOGÍA PROFUNDA.

Resumen:
El ser humano siempre ha
buscado crecer y trascender,
pero en ese proceso siempre se Summary:
The human being has always sought
ha encontrado muchas veces
to grow and transcend, but in that
renegando de si, de su cultura, process he has always found himself
de sus tradiciones y raíces, el denying himself, of his culture, of his
proceso de globalización ha traditions and roots, the process of
cerrado la brecha para que este globalization has closed the gap so
proceso de aculturación sea that this acculturation process be
increasingly diluted by breaking the
cada vez más diluido al romper
borders between countries, but at the
las fronteras entre los países, same time paradoxically we all yearn
pero a la vez paradójicamente to return to our own traditions so much
todos anhelamos volver a that we have come to make a mix
nuestras propias tradiciones between cultures, traditions and
tanto que hemos llegado a hacer customs.
una mezcla entre culturas,
tradiciones y costumbres.

LOS PROCESOS DE ACULTURACIÓN DEL SER HUMANO


(Mexicano)

Durante el periodo de oro que se vivó en México antes de la conquista,


muchos indígenas gozaban de una buena vida y salud, sin imaginarse
que pronto habrían de llegar hombres de “piel cruda”, “maíz blanco” con
esclavos de piel obscura o “maíz negro” a invadirlos y a reclamar la tierra
azteca como suya, despojándolos de sus mujeres, tradiciones, cultura
y ritos ancestrales.

Llegaron con cruz de oro y una mujer blanca que se proclama como la
madre de los españoles y a partir de ese momento también
madre de los indígenas, así comenzó el proceso de conquista, 1
con una nueva religión, donde por mandato divino “el negro, el indio y
el español” tendrían que vivir en armonía para que Dios y su madre
estuvieran contentos de ver como se aleccionaba a esos nativos en la
religión que los salvaría de seguir con sus actos barbaros y llenos de
sangre ofrecida en rituales paganos a dioses profanos y que no llevan
a la salvación del hombre sino más bien a su total perdición por el
pecado de carne y sangre a favor de tonantzin.

Durante el proceso de crueldad, de destrucción de todo el pasado


azteca se viene el sufrimiento y pesar del mexicano, una herida que
hasta el día de hoy no se ha podido curar ya que después de todo
aceptamos nuestra historia como mexicanos conquistados,
conservamos tradiciones indígenas, adoptamos cosas de la cultura
española e incluso ahora hacemos mezcla de las tradiciones netamente
mexicanas con otras totalmente americanas.

Parece que al mexicano le gusta ser conquistado, no es de extrañar que


nos llamen “agachones”, “dejados”, y hasta “rajados”, al mexicano le
gusta que “lo chinguen” los demás, tal como lo escribe Octavio Paz1:

Toda la angustiosa tensión que nos habita se expresa en una frase que nos viene
a la boca cuando la cólera, la alegría o el entusiasmo nos llevan a exaltar nuestra
condición de mexicanos: ¡Viva México, hijos de la “Chingada!” Verdadero grito de
guerra, cargado de una electricidad particular, esta frase es un reto y una afirmación,
un disparo, dirigido contra un enemigo imaginario, y una explosión en el aire…
¿Quién es la Chingada? Ante todo, es la Madre. No una Madre de carne y hueso,
sino una figura mítica. La Chingada es una de las representaciones mexicanas de
la Maternidad… la “sufrida madre mexicana” que festejamos el diez de mayo. La
Chingada es la madre que ha sufrido, metafórica o realmente, la acción corrosiva e
infamante implícita en el verbo que le da nombre.

Celebramos incluso que ahora el americano nos invada con todas sus
costumbres y tradiciones como si no hubiese sido suficiente el que el
español nos destruyera parte de nuestra identidad, nos dejamos ahora
“chingar” por el neocolonialismo y esta vez en lugar de armas e
imposición nosotros aceptamos gustosos por esa traición a nosotros
mismos, por esa herida que nos dejaron cuando nos vinieron a
“chingar”.

1 Paz, Octavio. “Los hijos de la Malinche.” Cap. 4 en El laberinto de la Soledad. 2


1947.
Tenemos sin duda una identidad pero a la vez deseamos tener identidad
diferente, mientras compramos el producto industrializado hecho en
China o Taiwán e incluso Norteamérica, despreciamos el trabajo de
manos artesanales mexicanas, así en lugar de tomar un café en algún
puesto local por la calle preferimos ir por un Starbucks que cuesta tres
veces más caro pero nos hace sentir importantes al poder consumir lo
mismo que consume el americano, incluso al grado de que para que un
mexicano no se sienta mal consigo mismo al consumir el producto
gringo se le muestra que el café mexicano es utilizado para la
elaboración de su deliciosa bebida.

Fuimos “castrados” desde hace mucho tiempo, el mexicano es visto


como una cultura que es susceptible de ser invadida y modificada por
todo el mundo, bien cantaba Ricardo Arjona “si el norte Fuera el sur” y
es que realmente este proceso de aculturación ha afectado la forma en
como los mexicanos nos percibimos a nosotros mismos, tenemos una
dependencia a prácticamente cualquier cosa que se nos ponga en
frente, odiamos al español y también odiamos al americano pero
aceptamos en su momento todas las influencias que quisieron verter en
nuestro molde.

Parece que no nos queda de otra más que aceptar que la dominación
llegue de manos de la globalización, incluso dentro de nuestro folklor
musical mexicano tenemos al grupo de Panteón Rococó cantando la
frase “En este mundo globalizado, la gente pobre no tiene lugar”

NUESTRA PSICOLOGIA PROFUNDA


Sin duda alguna el mexicano se siente de todo menos mexicano,
cuando queremos ofendernos usamos términos como los mencionados
anteriormente e incluso con otros más despectivos como “indio”, “naco”,
“chacalon”, como si fuésemos europeos o de algún otro lugar del
planeta menos mexicanos.

Por otro lado el mexicano dentro de su psicología es un chingón, pues


a pesar de las heridas el humor mexicano tan colorado que hasta de la
muerte se ríe, tenemos héroes nacionales dentro del futbol, a
pesar de obedecer las reglas de la religiosidad española puede 3
obtener lo que quiera “haciéndole una manda a la virgencita” y así poder
salirse con la suya y para muestra un botón, el narco que trae en la
cacha de su pistola a la Virgen de Guadalupe para que “le vaya bien en
su chamba”.

Somos supersticiosos, creemos en la magia, aun católicos vamos de


repente a “conectarnos con lo ancestral azteca” yéndonos a un temazcal
para resucitar nuestras tradiciones aztecas mientras tenemos en la
punta de la lengua la pronunciación de “La Morenita del Tepeyac”, y es
que el mexicano todo lo combina para tomar a su convenir lo que le sea
de provecho llegando al extremo de decir “soy creyente” para no
sentirse tan mal por traicionar a su catolicismo impuesto y que lo acogió
como una “madre amorosa” cuando fue conquistado.

En fin el mexicano es tan chingón que toma lo que sirve a sus intereses
y desprecia todo aquello que no puede sacar ventaja, así nos
encontramos en el país del todo se puede, viene la mordida, el soborno,
la evasión fiscal, infidelidad conyugal, fraudes, extorsión, transgresión a
los reglamentos total el país del “¡No pasa nada!”.

También así como es chingón es sumiso “como mande usted”, tal


parece que nuestro ser es solo una apariencia para ocultar esta
sumisión de la cual de cuando en cuando le sacamos el colmillo o el
cobre a las situaciones para demostrar que el mexicano también puede
y que no solo sabe dejar que otros lo dominen.

Como conclusión, el mexicano vive para según su propio código moral,


y bajo sus propios estándares “ni tan poco que no alumbre la santo, pero
ni tanto que lo queme” estamos tan hartados de la delincuencia pero a
la vez somos tan cínicos para promover la corrupción, estamos hartos
de una religión que nos impusieron pero buscamos desesperadamente
parecernos a los conquistadores o a los yanquis para que no se nos
llame indios aztecas, en fin encontrar ese punto intermedio como si
fuera la mejor forma de descubrirnos de nuevo bajo tanto escombro
cultural.

4
CONCLUSION
Sin duda como mexicanos somos algo raro, queremos a nuestra patria
pero a la vez la detestamos, nos gustan nuestras tradiciones pero nos
da pena que nos llamen indios, no hemos llegado a ese punto de
entender que todo aquello que hemos mezclado y entremezclado con
nuestras tradiciones más profundas es lo que nos hace tan únicos, al
grado de ser objeto de estudio y de que el mundo ponga la vista cada
vez más en México, parece como si tuviésemos un “pudor nacional” y
decimos al mundo “no me veas que pena”, sin pensar que tenemos de
todo para ser sobrevivientes o la última raza en pie en el mundo si se
viniera un desastre natural masivo, pero creo que esto se debe al
resguardo que siempre hemos buscado de otros pueblos y culturas,
antes era el patriarcado azteca, después el conquistador español,
después la virgen de Guadalupe, más tarde la protección del americano,
parece ser que nosotros como mexicanos buscamos
desesperadamente ser gobernados, como si no hubiésemos sido
hechos para trascender por nuestra propia cuenta, seguimos buscando
quien nos haga o deshaga las cosas, quien venga a invertir en nuestro
país a cambio de hacer cosas que el mexicano podría hacer mejor, pero
creo que perdimos la fe en nosotros mismos cuando perdimos la primer
batalla contra el conquistador.

PROPUESTA
El mexicano sufre humillaciones obreros para estar bajo la
y busca ser un peón de un protección de un sindicato, de un
sistema más grande porque el patrón, un jefe, alguien que nos
mexicano no cree en sí mismo, dé para poder sobrevivir.
mientras que aquí en México
tenemos solo dos millonarios por Por ello es que empresas como
mérito propio, en otros países Starbucks, Wal-Mart, Chevrolet,
tienen muchos multimillonarios y etc., americanas, asiáticas y de
esto se debe en gran parte a que muchos lugares del mundo
como mexicanos preferimos vienen a buscar la fuerza laboral
seguir agachados, desde del mexicano a cambio de
pequeños se nos enseña no a un salario miserable y 5
ser emprendedores sino a ser horas de trabajo
exageradas, mientras se En fin si lográsemos enseñar
enriquecen a costa del sacrificio emprendedurismo a los
de otros, ¿Por qué? Porque al mexicanos cada vez más habría
mexicano se le enseña la menos americano, japonés,
filosofía de “Estudia para que alemán, etc., para consumir ya
tengas un buen empleo”, ¿un que crearíamos nuestras propias
buen empleo? ¿Para qué? para empresas y toda nuestra riqueza
“sobrevivir”, no se enseña a se quedaría aquí sin irse a otros
“Estudia para que emprendas un países. Pienso yo que es la
negocio propio” porque para el mejor forma de sanar esa herida,
mexicano emprender es esa “chinga” que le dieron a
sinónimo de “morirse de hambre” nuestra autoestima, es la forma
ya que el mexicano está de llenar “El profundo cráter” a
acostumbrado a consumir lo nuestra inculturación hacia lo
extranjero y si emprendes españolado y americanizado.
creando algo “nadie consume lo
hecho en México”.

Como propuesta a esta situación


seria bueno enseñar a los niños
desde edad primaria la materia
de economía, con términos de
fondo de ahorro, inversión,
negocios y a la vez inculcar en el
consumir productos hechos en
México, mostrando la riqueza y
calidad de los productos de aquí,
mucha gente piensa que el
mexicano solo hace zarapes y
sombreros de paja, pero no,
México es el exportador número
uno de pantallas planas y
componentes para las mismas
en todo el mundo, además a un
mexicano emprendedor
(Rodríguez Camarena) se le
debe la creación de la televisión
a color.
6

También podría gustarte