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1) Patrón primario

Un patrón primario también llamado estándar primario es una sustancia utilizada en química como referencia al momento de hacer una
valoración o estandarización. Usualmente son sólidos que cumplen con las siguientes características:

1. Tienen composición conocida. Es decir, se ha de conocer la estructura y elementos que lo componen, lo cual servirá para hacer los
cálculos estequiométricos respectivos.
2. Deben tener elevada pureza. Para una correcta estandarización se debe utilizar un patrón que tenga la mínima cantidad de
impurezas que puedan interferir con la titulación. En cualquier caso, más del 98,5% de pureza, preferiblemente un 99,9%. 2
3. Debe ser estable a temperatura ambiente. No se pueden utilizar sustancias que cambien su composición o estructura por efectos
de temperaturas que difieran ligeramente con la temperatura ambiente ya que ese hecho aumentaría el error en las mediciones.
4. Debe ser posible su secado en estufa. Además de los cambios a temperatura ambiente, también debe soportar temperaturas
mayores para que sea posible su secado. Normalmente debe ser estable a temperaturas mayores que la del punto de ebullición del
agua.
5. No debe absorber gases. No debe reaccionar con los componentes del aire. Ya que este hecho generaría posibles errores por
interferencias, así como también degeneración del patrón.
6. Debe reaccionar rápida y estequiométricamente con el titulante. De esta manera se puede visualizar con mayor exactitud el punto
final de las titulaciones por volumetría y además se pueden realizar los cálculos respectivos también de manera más exacta.
7. Debe tener un peso equivalente grande. Ya que este hecho reduce considerablemente el error de la pesada del patrón.

Se debe tomar en cuenta la cantidad de patrón primario que debe pesarse para un análisis. Se recomienda una masa de 100 mg (ó 50 mg
como mínimo) ya que de esta manera se reduce el error relativo de la pesada, veamos:

 Tomando en cuenta el error absoluto de la balanza: 0,0001 g


 Error relativo de la pesada:

 Entonces:

 Asumiendo que un error aceptable es de 0,1% y el error absoluto de la balanza, tenemos:

 De esta manera:

Donde:

 = Error relativo (%)


 = Error absoluto
 = peso del patrón

Ejemplos de patrones primarios[editar]

 Para estandarizar disoluciones de ácido: carbonato de sodio


 Para estandarizar disoluciones de base: ftalato ácido de potasio
 Para estandarizar disoluciones de oxidante: hierro, trióxido de arsénico
 Para estandarizar disoluciones de reductor: dicromato de potasio, yodato de potasio, bromato de potasio.3
Patrón secundario[editar]

El patrón secundario es llamado también disolución valorante o estándar secundario. Su nombre se debe a que en la mayoría de los casos se
necesita del patrón primario para conocer su concentración exacta.

El patrón secundario debe poseer las siguientes características:

1. Debe ser estable mientras se efectúe el período de análisis


2. Debe reaccionar rápidamente con el analito
3. La reacción entre la disolución valorante y el patrón primario debe ser completa, así también la reacción entre la disolución
valorante y el analito.
4. Debe existir un método para eliminar otras sustancias de la muestra que también pudieran reaccionar con la disolución valorante.
5. Debe existir una ecuación ajustada o balanceada que describa la reacción.

2) Punto de equivalencia

Antes de iniciar la valoración se debe elegir un indicador de pH adecuado según el punto de equivalencia previsto de la reacción. El punto de
equivalencia se corresponde con el valor teórico de la valoración, pero en la práctica no es posible saberlo con exactitud. En dicho punto
habrán reaccionado cantidades estequiométricas de ambos reactivos, y el pH de dicho punto depende de la fuerza relativa del ácido y la base
empleados. Para conocer dicho valor se pueden emplear las siguientes reglas:

 Un ácido fuerte reacciona con una base fuerte para formar una disolución neutra (pH = 7).
 Un ácido fuerte reacciona con una base débil para formar una disolución ácida (pH <7).
 Un ácido débil reacciona con una base fuerte para formar una disolución básica (pH> 7).

Acidimetría obteniendo añadiendo una disolución valorante de NaOH desde una bureta.

Cuando un ácido débil reacciona con una base débil, la disolución en el punto de equivalencia será básica, si la base es más fuerte que el
ácido, y será ácida, si el ácido es más fuerte que la base. Si ambos son de igual fuerza, entonces el pH de equivalencia será neutro. Sin
embargo, los ácidos débiles no se valoran normalmente frente a bases débiles, porque el cambio de color mostrado por el indicador suele
ser rápido, y por lo tanto muy difícil de ver con claridad por el observador.

El punto final es el punto en que se detiene la valoración, por ejemplo, tras el viraje de color del indicador. Este cambio producido en la
disolución permite establecer experimentalmente el punto final de la valoración. 4

El punto final debe coincidir lo más exactamente posible con el punto de equivalencia. La diferencia entre ambos puntos constituye el error
de valoración, que es propio del método (indicador empleado, uso de reactivos impuros, etc), y no debemos confundirlo con los errores
accidentales debidos a manipulaciones o medidas de volumen defectuosas

3) Electrodo de referencia

El electrodo de referencia es un electrodo que tiene un potencial de equilibrio estable y conocido. Es utilizado para medir el potencial contra
otros electrodos en una celda electroquímica. El potencial de unión líquida en estos electrodos es minimizado por el uso de altas
concentraciones de cloruro de potasio como solución de llenado, debido a que la velocidad de difusión de estos iones son muy similares.

En potenciometría es una semicelda que tiene un potencial de electrodo Eref exactamente conocido e independientemente de la
concentración del analito o de los iones contenidos en la solución que se analiza. Aunque este electrodo puede ser un electrodo normal de
hidrógeno, este casi no se usa porque su aplicación y mantenimiento son complicados. Por convención, en las mediciones potenciométricas
siempre se maneja el electrodo de referencia igual que el ánodo (electrodo derecho). Los electrodos que se emplean en potenciometría
tienen una respuesta muy selectiva hacia los analitos.

Electrodo indicador

Electodos indicadores metálicos:


 Electrodos redox: electrodos que responden al potencial redox de una disolución formada por una o más parejas redox.Los más
utilizados son aquellos constituídos por oro, platino, paladio u otros metales inertes. estos electrodos actúan como una fuente o
como un sumidero de los electrones transferidos desde un sistema redox presente en la disolución.

Hay que resaltar que los procesos de transferencia de los electrones en los electrodos inertes no suelen ser reversibles y por lo tanto, lo
electrodos inertes no responden a muchas de las semirreacciones de las tablas de electrodos de una dorma predecible.

 Electrodos de primera clase: están formados por un metal en contacto con una disolución que contiene sus iones. Por ejemplo un
hilo de plata en una disolución de nitrato de plata. El potencial del electrodo responde a la actividad de los iones plata en disolución,
entre otros.

Estos electrodos no son muy utilizados en el análisis potenciométrico porque presentan una serie de inconvenientes tales como:
* No son muy selectivos ya que responden no sólo a sus propios cationes sino también a otros cationes más fácilmente reducibles;
* Algunos de estos electrodos metálicos tan sólo se pueden utilizar en disoluciones básicas o neutras ya que en disoluciones ácidas se
disuelven;
* Algunos metales se oxidan tan fácilmente que su uso queda restringido a disoluciones previamente desaireadas, esto es, disoluciones a las
que previamente se las ha eliminado el oxígeno;
* Ciertos metales, tales como hierro, cromo, cobalto y níquel no proporcionan potenciales reproducibles

 Electrodos de segunda clase: están formados por un metal en contacto con una disolución saturada de una de sus sales poco
solubles. Se basan en la propiedad de que algunos metales no sólo responden hacia sus propios cationes, sino que también son
sensibles a la actividad de aniones que forman precipitados poco solubles o complejos estables con dichos cationes. Por ejemplo, el
potencial de un electrodo de plata será una medida reproducible de la actividad del ión cloruro en una solución saturada de cloruro
de plata. Así, la reacción del electrodo es:

Ag Cl (s) + e - <===> Ag (s) + Cl - (ac) E0 = 0,222 V


Cuya ecuación de Nerst está dada por:

Eind = E0Ag Cl - 0,0592 log aCl - = E0AgCl/Ag+ 0,0592 pCl

Esta ecuación muestra que el potencial de un electrodo de plata es proporcinal a pCl, el logaritmo negativo de la actividad del ión
cloruro, por lo que en una solución saturada de cloruro de plata, el electrodo de plata sería un buen indicador de segunda especie para los
iones cloruro.

Por las mismas razones, el mercurio tambien sería un buen indicador de segunda especie para el indicador Y - del AEDT.

 Electrodos de tercera clase: un electrodo de tercera clase implica dos equilibrios que afectan a la pareja redox M n+ / M. Por ejemplo,
un electrodo de tercera clase que responda al ión Ca 2+ se puede obtener utilizando AEDT como ligando común para el Ca 2+ y Hg 2+.
La reacción de intercambio electrónico implica a la pareja redox Hg2+ / Hg.

Un electrodo metálico se convierte en un electrodo de tercera clase cuando se hace que responda a un catión diferente. Por ejemplo:
Sea el electrodo de mercurio utilizado para la determinación del pCa de disoluciones que contienen calcio. Se introduce en la disolución una
pequeña concentración de AEDT con Hg (II). Si además introducimos una disolución del AEDT que contenga calcio, se establece un nuevo
equilibrio:

CaY2- <====> Ca2+ + Y4-

Combinando ambos equilibrios (el del Hg (II) con el del calcio en la disolución de AEDT, se consigue que el electrodo de mercurio se
transforme en un electrodo de tercera clase para el ión calcio.
Mantenimiento

El electrodo de vidrio es relativamente inmune a las interferencias del color, turbidez, material coloidal, cloro libre, oxidante y reductor.

La medida se afecta cuando la superficie de la membrana de vidrio está sucia con grasa o material orgánico insoluble en agua, que le impide
hacer contacto con la muestra, por lo tanto, se recomienda la limpieza escrupulosa de los electrodos.

Los electrodos tienen que ser enjuagados con agua destilada entre muestras. No se tienen que secar con un trapo, porque se podrían cargar
electrostáticamente. Luego se deben colocar suavemente sobre un papel, sin pelusa, para quitar el exceso de agua.

Calibrado

Como los electrodos de vidrio de pH mesuran la concentración de H+ relativa a sus referencias, tienen que ser calibrados periódicamente
para asegurar la precisión. Por eso se utilizan buffers de calibraje (disoluciones reguladoras de pH conocido). que sirve para leer sustancias

Precauciones

 El electrodo debe mantenerse humedo siempre para evitar daños al mismo.


 Se recomienda que se guarde en una solución de 4M KCl; o en un buffer de solución de pH 4 ó 7.
 No se debe guardar el electrodo en agua destilada, porque eso causaría que los iones resbalaran por el bulbo de vidrio y el
electrodo se volvería inútil; se calibra mediante soluciones estandarizadas.

6) DETERMINACIÓN DE NITRÓGENO POR EL MÉTODO KJELDAHL

El método más comúnmente utilizado para la determinación de nitrógeno orgánico es el llamado método Kjeldahl, que se basa en una
volumetría ácido-base. El procedimiento es directo, el material necesario es muy simple (aparato de destilación Kjeldahl), y es fácilmente
adaptable al análisis rutinario de un gran número de muestras. Es el método estándar para la determinación del contenido proteico en
grano, harinas, carnes, y en general, en materiales biológicos.

En el método Kjeldahl, la muestra se descompone en caliente medio sulfúrico, en presencia de un agente reductor catalizador (mercurio,
cobre o selenio). También suele adicionarse una sal neutra para aumentar el punto de ebullición de la disolución de ácido sulfúrico. De esta
forma que aumenta temperatura de trabajo, con lo cual se favorece la descomposición. El tratamiento transforma el nitrógeno de la muestra
en NH4+. La posterior adición de una base fuerte libera el NH3, que es arrastrado hasta un frasco colector por destilación en corriente de
vapor.

El frasco colector contiene un volumen medido de una disolución estándar de ácido, de forma que una fracción de ácido es neutralizada por
el NH3. El ácido es parcialmente Al finalizar la destilación se procede a valorar el ácido no consumido con una disolución de base patrón. El
volumen de disolución básica consumido hasta llegar al punto de equivalencia permite conocer la cantidad de NH3, y de esta forma, la
cantidad de nitrógeno en la muestra, que puede transformarse en contenido proteico en función del tipo de muestra ya que la mayoría de
las proteínas contienen aproximadamente el mismo porcentaje de nitrógeno.

Valoración culombimétrica[editar]

El compartimento principal de la celda de valoración contiene en el ánodo el valorante (reactivo de Karl Fischer) más la solución del analito.
El reactivo de Karl Fischer es un tipo de disolución estándar de iodo para la determinación de agua.2 Este reactivo está constituido por I2, una
base (B) normalmente imidazol o piridina y SO2 en proporción 1:3:10, disueltos en un alcohol (ROH), el más utilizado suele ser el metanol
anhidro.

La celda de valoración consta también de un pequeño compartimento con un (ánodo) sumergido en la solución del ánodo del
compartimento principal. Los dos compartimentos están separados por una membrana permeable a los iones. La fuerza del reactivo está
determinada por su contenido de iodo.
El ánodo de platino genera I2 cuando se proporciona corriente eléctrica al circuito. La reacción neta como se muestra a continuación es la
oxidación de un mol de SO2 por cada mol de I2 consumido. Un mol de I2 se consume por cada mol de H2O. En otras palabras, se consumen 2
moles de electrones por cada mol de agua.

B·I2 + B·SO2 + B + H2O → 2BH+I− + BSO3

BSO3 + ROH → BH+ROSO3−

Si utilizamos piridina (C5H5N) y metanol (CH3OH), la reacción global quedaría de la forma:

I2 + SO2 + CH3OH + 3 C5H5N + H2O → 2 C5H5NH+I- + C5H5NH+SO4CH3-

El iodo se reduce a ion ioduro y el dióxido de azufre se oxida al complejo de ion sulfato. Para que tenga lugar la reacción es imprescindible la
presencia de agua.

El punto final se detecta la mayoría de las veces mediante un método bipotenciométrico. Un segundo par de electrodos de Pt están
sumergidos en la solución de ánodo. El circuito detector mantiene una corriente constante entre los dos electrodos del detector durante la
valoración. Antes del punto de equivalencia, la solución contiene I- pero poco I2. En el punto de equivalencia, aparece un exceso de I 2 y una
abrupta caída del potencial marca el punto final. La cantidad de corriente necesaria para generar el I 2 a fin de alcanzar el punto final puede
utilizarse para calcular la cantidad de agua en la muestra original.

Valoración volumétrica

La valoración volumétrica se basa en los mismos principios que la valoración culombimétrica, salvo que la solución del ánodo anterior ahora
se utiliza como solución valorante. El valorante se compone igualmente de un alcohol (ROH), una base (B), SO2 y de I2 en concentración
conocida.

Se consume un mol de I2 por cada mol de H2O. La reacción de valoración procede como anteriormente, y el punto final puede establecerse
visualmente por el color café dado por el exceso de reactivo, pero es más común que se determine por un método electroanalítico como el
descrito anteriormente. El reactivo se valora periódicamente mediante la titulación de soluciones estándar de agua en metanol o bien un
estándar de tartrato de sodio dihidratado

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