Tarea sesión 7.

Caso

Anthony Daniel Zamora Farías.

Diciembre 2019.
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1. Luego de analizar el caso se puede inferir que la conducta que presentada es

disruptiva, ya que es poco apropiada y perturbadora, altera la armonía en el aula,
esto puede generar consecuencias o mejor dicho dificultades en el proceso de
enseñanza y aprendizaje.

2. Yo considero que todos son afectados por dicha conducta, primero el niño objeto
del abuso porque es humillado y de cierta forma es víctima de acoso escolar, por
otro lado el niño “agresor” también es afectado por dicho comportamiento ya que
eso lo puede llevar al aislamiento y rechazo de los otros niños (esto puede
incrementar su mal comportamiento). También los niños espectadores son
afectados por esta conducta debido a que la disciplina, la armonía, el respeto y
otros factores importantes en el grupo se ven perjudicados. No se permite el buen
funcionamiento del aula.

3. Una conducta disruptiva en la mayoría de las ocasiones constituye un desajuste en

el desarrollo de los niños, porque no da espacio para el florecimiento de buenas y
saludables relaciones sociales con sus coetáneos y con los adultos. Detrás de
dicho comportamiento existen factores psicológicos desencadenados por ejemplo
por sentimiento de abandono, poca autoestima, familia disfuncional, falta de
establecimiento de reglas de convivencia en el hogar, violencia intrafamiliar,
frustración, necesidad de ser el protagonista, entre otros. Para el niño utiliza el
mal comportamiento como una estrategia, tal vez desesperada, para llamar la
atención de alguna persona adulta (en este caso el docente). Considero que lo más
importante es identificar el origen de la conducta y ofrecer la atención y el
tratamiento adecuado al niño.

4. Primero de todo actuaría con asertividad no mostraría mi enfado. Apartaría un

momento al alumno actor de la conducta disruptiva para poder conversar con el.
Entablaría una conversación con un tono de voz cordial y respetuoso.
Manteniendo la mirada sobre el estudiante le expresaría mi sentir sobre lo
acontecido y le explicaría las consecuencias de sus actos, al mismo tiempo
escucharía activamente lo que tiene que decir al respecto el estudiante. Trataría de
entender cuál es el origen de la mala conducta para poder actuar en consecuencia.
Lo más importante al momento de actuar es no perder el control. Adicionalmente
también como refuerzo positivo marcaría el comportamiento que yo espero que el
niño tenga.
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5. Mi plan de acción es el siguiente para evitar que el “juego” siga teniendo lugar en
el aula:
 Construir en conjunto con los estudiantes las reglas de convivencia en el
aula.
 Premiar el buen comportamiento públicamente (en el aula).
 Corregir el mal comportamiento en privado.
 Proyectar las expectativas del comportamiento que como docente desearía
de los estudiantes.
 En el momento en el que surja de nuevo el problema escuchar todas las
partes implicadas manteniendo una postura neutral. Ser mediador y
sobretodo inculcar la empatía en los estudiantes.
 Al surgir un problema no actuar solo sobre el problema (la mala
conducta), se debe profundizar la investigación, encontrar la causa del
problema, de tal forma se facilita el proceso de resolución del conflicto.
 En todo momento generar un clima positivo y motivador.
 Trabajar en conjunto con la familia.

Bibliografía
Cuentos para crecer. (s.f.). 6 ideas para crear un clima positivo en el aula.

Díde.(s.f). Conductas disruptivas. El asertividad, una competencia docente

primordial.

Martínez, C. (2019). Claves para manejar las conductas disruptivas en el aula.