INTRODUCCIÓN

La vida que nuestra hermana Elena de White tuvo es especial por varios motivos por ejemplo su
vida al servicio del señor, las enseñanzas que nos dejó para el bien del ser humano ya sea en la
Fe, alimenticios, etc. Su vida nos dejó grandes esfuerzos que hizo por luchar contra lo que no
era correcto en este mundo y su legado perdurara por siempre para futuras generaciones.

Elena menciono “Hay modos de recreación que son altamente beneficiosos para la mente y el
cuerpo. Una mente ilustrada, discernidora, hallará abundantes medios de entretenerse y
divertirse, en fuentes que no sean solamente inocentes, sino instructivas. La recreación al aire
libre, la contemplación de las obras de Dios en la naturaleza, serán del más alto beneficio".

En este ensayo mencionamos una pequeña comparación sobre la vida y legado de Elena de
White con las nuestras. De este modo los estudiantes adventistas y, especialmente no
adventistas, tendrán la oportunidad de compartir sus experiencias y la diferencia que hay entre
sus vidas y la que le espera con Dios.

La integración de los valores juega un rol muy importante en este tipo de actividades, puesto
que la naturaleza nos invita a respetarla, conservarla, protegerla, cuidarla, y sobre todo nos
motiva a reconocer a Dios como el creador y sustentador de la vida. En este sentido, cuando
docentes y alumnos logran integrar la fe en el aprendizaje y se cumplen los objetivos trazados,
se producirá un aprendizaje significativo en dos planos: en el conocimiento y en la espiritualidad.
 VIDA Y LEGADO DE ELENA G. DE WHITE
Hoy el legado de Elena de White más concreto son los libros que ella dejó y que poseen una
profunda influencia en la vida de muchas personas. En una rápida investigación por Facebook,
en solo una noche se pudieron identificar varias historias de personas que tuvieron un contacto
especial con los textos de Elena de White.

Elena Gould Harmon y su hermana gemela Elisabeth nacieron el 26 de noviembre de 1827 en

una granja. La salud de Elena cuando era niña fue muy precaria, esto debido a un accidente que
sufrió en 1836, al volver de la escuela donde estudiaba. Ella misma describe sobre esta
experiencia “Mis maestras me aconsejaron que dejase de asistir a la escuela y no prosiguiese los
estudios hasta mejorar de salud. La más terrible lucha de mi niñez fue el verme obligada a ceder a mi
flaqueza corporal y decidir que era preciso dejar el estudio y renunciar a toda esperanza de
educación”.

En un viaje a Orrington, Maine, conoció a un joven ministro adventista, llamado James Springer
White con quien se casó el 30 de agosto de 1846. El hogar de los Harmon en Gorham, fue su
primer lugar de residencia.

Un año después de su matrimonio, nace Henry Nichols White, su primer hijo. Para 1849
nace James Edson White, y en 1854 nace su tercer hijo William Clarence White. En 1860 nace el
cuarto hijo de la familia John Herbert White, quien fallece a los tres meses de edad.

La señora White enviuda en 1881. Su esposo James White muere a la edad de 60 años.

Elena G. White fue una figura controvertida en su tiempo, y aún genera muchas discusiones,
especialmente entre los otros grupos cristianos, así como de los no religiosos. Afirmó haber
recibido visiones después de no cumplirse el segundo regreso de Jesús, fijado para el 22 de
octubre de 1844, señalado por William Miller, de quien ella era seguidora. Sus visiones dieron
base para que el movimiento adventista considerara que en ella se manifestó el «don de
profecía», lo cual dotó a sus escritos de gran importancia para los creyentes de esta
denominación.

La figura de la señora Elena en el desarrollo de las doctrinas de la Iglesia Adventista del Séptimo
día es innegable. Su esfuerzo en la publicación de libros, revistas, y de establecer un sistema
educativo y médico denominacional ayudaron a que esta iglesia creciera y saliera de los Estados
Unidos.

Sus énfasis doctrinales hacen diferente al adventismo de otras corrientes cristianas, y muchas
de las críticas de otros grupos protestantes y católicos se hacen con frecuencia por estos. Dentro
de los énfasis doctrinales de la señora White están:

 La pronta venida de Jesús.

 La historia es un escenario bélico.
 El sábado es el sello de Dios.
 Los muertos no van al cielo ni al infierno.
 Las normas pro-salud hacen parte de la moral cristiana.
El Gran Chasco del 22 de octubre de 1844 sorprendió a Elena con solo diecisiete años, pero a
pesar de su juventud su espiritualidad no disminuyó. Esta experiencia fue muy crítica y muchos
que habían participado en el movimiento millerista, estaban dudando acerca de su experiencia
o estaban abandonándola. Ella escribe lo siguiente al respecto: “La pérdida de todos los amigos
terrenales no se hubiera comparado con lo que sentimos entonces. Lloramos y lloramos hasta
que el día amaneció”.

Elena G. White promovió el vegetarianismo, así como la evangelización y difusión del

adventismo en diferentes lugares del mundo. Durante su vida escribió más de 5.000 artículos de
periódicos y 40 libros; actualmente, incluyendo las compilaciones de sus 100.000 páginas de
manuscritos, se han publicado cerca de 100 libros, los cuales han sido traducidos a los principales
idiomas del mundo. Además, estableció mediante sus escritos los principios adventistas
respecto a la salud y el cuidado del cuerpo, como el vegetarianismo y la abstinencia de sustancias
como el alcohol, el café.

En 1872 la iglesia recibió por parte de la señora White, instrucciones para establecer una
institución educacional donde la juventud adventista pudiera obtener educación de acuerdo a
sus principios, y jóvenes de ambos sexos se prepararan para servir en el adventismo y sus
instituciones. El Colegio de Battle Creek se inició en 1874, más tarde se establecieron colegios
en el este y el oeste del país, y en otros países alrededor del mundo. Posteriormente se fundaron
escuelas primarias y secundarias. Artículos aparecidos en Testimony, así como algunos folletos
especiales, contenían instrucciones suyas con respecto a cómo Dios establecía que estas
instituciones fueran dirigidas.

COMPARACIÓN DE CON EL ACTUAL ESTILO DE VIDA Y VALORES:

Existen demasiadas diferencias, principalmente en nuestras vidas ya que la hermana Elena vivió
al servicio del señor a muy temprana edad en cambio muchos de nosotros no por diferentes
motivos ya sea de la religión que provenimos u otros factores que no pueden pasar
desapercibidos. Nosotros podemos elegir el futuro que nos espera haciendo varios cambios en
nuestra vida ya sean buenos o malos.

Nuestras vidas no serán las mismas pero siempre estarán conectadas con Dios, en mi caso
principalmente reconozco a Dios como único creador del universo y el dueño de nuestras vidas
ya que El siempre querrá lo mejor para nosotros y que elijamos la opción correcta, muchas
personas desviaron sus caminos alejándose de Dios, pero sabemos que los milagros existen y
aún pueden regresar al camino correcto, todos podemos hacer grandes cambios en el mundo
actual también merecemos una vida lleno de felicidad y la hermana Elena lo experimento hasta
cierta parte al servicio del Señor.

El legado que nos dejó nos ensañó varias cosas de cómo vivir feliz con Dios y con nosotros
mismos, sobre todo saludable.

Los valores que hoy en día vemos han empeorado considerablemente debido a diversos factores
como los que aprendemos en casa, en los centros de estudio o trabajo. Todos podemos elegir
de la persona que somos y cambiar si algo está mal, anteriormente los valores eran importantes
dependiendo al estilo de vida que teníamos pero siempre ha existido todo lo contrario respecto
a esto pero a mayor medida.

Los valores siempre están primeros, ya que esta determina la calidad de persona que eres y lo
importante que serás.