Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
INICIO:
Amén
Hermanos, estamos aquí reunidos esta noche para recordar el camino de María y José a Belén.
Así como Dios preparó al pueblos de Israel para recibir al Salvador, hoy nosotros en esta
posada nos vamos a preparar para celebrar la fiesta de Navidad, que es la fiesta de la venida
de Dios entre nosotros.
CANTO
RITO PENITENCIAL
Hermanos, pidámosle perdón a Dios por nuestros pecados. Especialmente, cuando hemos sido
egoístas y no atendemos con caridad las necesidades de los demás Digamos todos:
Yo confieso ante Dios todopoderoso y ante vosotros hermanos que he pecado mucho de
pensamiento, palabra y omisión, por mi culpa, por mi culpa, por mi grande culpa. Por eso
ruego a Santa María siempre Virgen, a los ángeles y a vosotros hermanos que intercedan por
mí ante Dios nuestro Señor.
LITURGIA DE LA PALABRA
ORACIÓN UNIVERSAL
( Durante la procesión se reza un misterio del Santo Rosario y después se cantan las letanías
Vaticanas o Lauretanas).
(No hace falta cantar las Letanías enteras. Se cantan lo que dure la procesión. Al llegar a la
puerta del lugar que dará posada a los peregrinos se dice la antífona final del Rosario).
ANTÍFONA
Bajo tu amparo nos acogemos Santa Madre de Dios. No deseches las súplicas que te dirigimos
en Nuestras necesidades, antes bien líbranos de todos los peligros, oh Virgen gloriosa y
bendita. Ruega por nosotros Santa Madre de Dios.
ORACIÓN FINAL:
Oremos. Infunde tu gracia en nuestros corazones, para que habiendo conocido por el anuncio
del ángel la encarnación de tu Hijo, seamos llevados , por su Pasión y su muerte, a la gloria de
la resurrección. Por Cristo Nuestro Señor. Amén.
PETICIÓN DE POSADA:
Afuera
os pido posada,
mi esposa amada.
2. Venimos rendidos
desde Nazaret;
yo soy carpintero
de nombre José.
3. Posada te pide,
amado casero,
4. Mi esposa es María,
y Madre va a ser
su gran caridad
de felicidad.
Adentro
1. Aquí no es mesón
sigan adelante
yo no puedo abrir
2. No me importa el nombre
déjenme dormir
quien lo solicita
¿ Tu esposa es María?
Entren peregrinos,
no los conocía.
5. Dichosa la casa
a la Virgen Pura
la hermosa María.
Todos
os la doy de corazón.
(Terminada la petición de Posada, una vez que han sido admitidos los peregrinos, se puede
continuar con una sencilla convivencia.)
PRIMERA POSADA
LECTURA
1:26 En el sexto mes, el Ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea, llamada
Nazaret,
1:27 a una virgen que estaba comprometida con un hombre perteneciente a la familia de
David, llamado José. El nombre de la virgen era María.
1:28 El Ángel entró en su casa y la saludó, diciendo: "¡Alégrate!, llena de gracia, el Señor está
contigo".
1:29 Al oír estas palabras, ella quedó desconcertada y se preguntaba qué podía significar ese
saludo.
1:30 Pero el Ángel le dijo: "No temas, María, porque Dios te ha favorecido.
1:31 Concebirás y darás a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús;
1:32 él será grande y será llamado Hijo del Altísimo. El Señor Dios le dará el trono de David, su
padre,
1:33 reinará sobre la casa de Jacob para siempre y su reino no tendrá fin".
REFLEXIÓN
Os anunciamos la venida de Cristo, y no sólo una sino también una segunda que será sin duda
mucho más gloriosa que la primera. La primera se realizó en el sufrimiento, la segunda traerá
consigo la corona del reino. Porque en nuestro Señor Jesucristo casi todo presenta una doble
dimensión. Doble fue su nacimiento: uno, de Dios, antes de todos los siglos; otro, de la Virgen,
en la plenitud de los tiempos. Doble su venida: una en la oscuridad y calladamente, como lluvia
sobre el césped; la segunda, en el esplendor de su gloria, que se realizará en el futuro.
Por lo tanto, no nos detengamos sólo en la primera venida, sino esperemos ansiosamente la
segunda. Y así como en la primera dijimos: bendito el que viene en el nombre del Señor, en la
segunda repetiremos lo mismo cuando, junto con los ángeles, salgamos a su encuentro y lo
aclamemos adorándolo y diciendo de nuevo: bendito el que viene en el nombre del Señor.
ORACIÓN UNIVERSAL
Oremos:
Para que recorriendo junto a María y José el camino a Belén abramos sin miedo nuestro
corazón a Cristo.
Para que por medio de los Sacramentos y la Vida de Gracia preparemos nuestro corazón para
recibir a Cristo.
SEGUNDA POSADA
LECTURA
1:34 María dijo al Ángel: "¿Cómo puede ser eso, si yo no tengo relaciones con ningún
hombre?"
1:35 El Ángel le respondió: "El Espíritu Santo descenderá sobre ti y el poder del Altísimo te
cubrirá con su sombra. Por eso el niño será Santo y será llamado Hijo de Dios.
1:36 También tu parienta Isabel concibió un hijo a pesar de su vejez, y la que era considerada
estéril, ya se encuentra en su sexto mes,
1:37 porque no hay nada imposible para Dios".
1:38 María dijo entonces: "Yo soy la servidora del Señor, que se cumpla en mí lo que has
dicho". Y el Ángel se alejó.
REFLEXIÓN
María fue fiel ante todo cuanto, con amor se puso a buscar el sentido profundo del designio de
Dios en ella y para el mundo.
Juan Pablo II
ORACIÓN UNIVERSAL
Oremos:
Para que al igual que María, tengamos una alma llena de gracia para escuchar el llamado de
Dios.
Te rogamos Señor.
Para que por medio de la oración, como lo hacía María, descubramos nuestra vocación.
Te rogamos Señor.
Te rogamos Señor.
(Regresar al Esquema general para pedir Posada...)
TERCERA POSADA
LECTURA
1:18 Este fue el origen de Jesucristo: María, su madre, estaba comprometida con José y,
cuando todavía no habían vivido juntos, concibió un hijo por obra del Espíritu Santo.
1:19 José, su esposo, que era un hombre justo y no quería denunciarla públicamente, resolvió
abandonarla en secreto.
1:20 Mientras pensaba en esto, el Ángel del Señor se le apareció en sueños y le dijo: "José, hijo
de David, no temas recibir a María, tu esposa, porque lo que ha sido engendrado en ella
proviene del Espíritu Santo.
1:21 Ella dará a luz un hijo, a quien pondrás el nombre de Jesús, porque él salvará a su Pueblo
de todos sus pecados".
REFLEXIÓN
San Atanasio.
ORACIÓN UNIVERSAL
Oremos:
Te rogamos Señor.
Para que por medio de nuestros actos diarios demos testimonio de la presencia de Dios entre
nosotros.
Te rogamos Señor.
Para que al igual que José y María sepamos llevar a Cristo todas las almas.
Te rogamos Señor.
CUARTA POSADA
LECTURA
Leer Evangelio según San Lucas 1, 39-45
1:39 En aquellos días, María partió y fue sin demora a un pueblo de la montaña de Judá.
1:40 Entró en la casa de Zacarías y saludó a Isabel.
1:41 Apenas esta oyó el saludo de María, el niño saltó de alegría en su seno, e Isabel, llena del
Espíritu Santo,
1:42 exclamó: "¡Tú eres bendita entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre!
1:43 ¿Quién soy yo, para que la madre de mi Señor venga a visitarme?
1:44 Apenas oí tu saludo, el niño saltó de alegría en mi seno.
1:45 Feliz de ti por haber creído que se cumplirá lo que te fue anunciado de parte del Señor".
REFLEXIÓN
Y así se explica la belleza. Es una belleza divina que se refleja en la Virgen y no solamente en su
persona sino en todo cuanto ella cumple por designio de Dios.
María será la madre de Dios; y estará vinculada al misterio más grande que la historia humana
pueda comprender.
Paulo VI
ORACIÓN UNIVERSAL
Oremos:
Escúchanos Señor.
Para que al igual que María seamos caritativos con los que nos rodean.
Escúchanos Señor.
Para que así como Juan el Bautista, saltemos de gozo por la presencia del Señor entre
nosotros.
Escúchanos Señor.
QUINTA POSADA
LECTURA
Leer Evangelio según San Mateo 1, 22-25
1:22 Todo esto sucedió para que se cumpliera lo que el Señor había anunciado por el Profeta:
1:23 La Virgen concebirá y dará a luz un hijo a quien pondrán el nombre de Emmanuel, que
traducido significa: "Dios con nosotros".
1:24 Al despertar, José hizo lo que el Ángel del Señor le había ordenado: llevó a María a su
casa,
1:25 y sin que hubieran hecho vida en común, ella dio a luz un hijo, y él le puso el nombre de
Jesús.
REFLEXIÓN
Si relacionas a San José con la Iglesia universal de Cristo, ¿no es este el hombre privilegiado y
providencial, por medio del cual la entrada de Cristo en el mundo se desarrolló de una manera
ordenada y sin escándalos?. Si es verdad que la Iglesia entera es deudora a la Virgen Madre
por cuyo medio recibió a Cristo, después de María es San José a quien debe agradecimiento y
una veneración singular.
José viene a hacer el broche del Antiguo Testamento, broche en el que fructifica la promesa
hecha a los Patriarcas y a los Profetas. Sólo él poseyó de una manera corporal lo que para ellos
había sido mera promesa.
No cabe duda de que Cristo no sólo se ha desdicho de la familiaridad y respeto que tuvo con él
durante su vida mortal como si fuera su padre, sino que la habrá completado y perfeccionado
en el cielo.
ORACIÓN UNIVERSAL
Oremos:
Padre escúchanos.
Para que como San José nuestros actos cotidianos sirvan al Plan de Salvación de Dios.
Padre escúchanos.
Padre escúchanos.
SEXTA POSADA
LECTURA
El nacimiento de Jesús
2:1 En aquella época apareció un decreto del emperador Augusto, ordenando que se realizara
un censo en todo el mundo.
2:2 Este primer censo tuvo lugar cuando Quirino gobernaba la Siria.
2:3 Y cada uno iba a inscribirse a su ciudad de origen.
2:4 José, que pertenecía a la familia de David, salió de Nazaret, ciudad de Galilea, y se dirigió a
Belén de Judea, la ciudad de David,
2:5 para inscribirse con María, su esposa, que estaba embarazada.
2:6 Mientras se encontraban en Belén, le llegó el tiempo de ser madre;
2:7 y María dio a luz a su Hijo primogénito, lo envolvió en pañales y lo acostó en un pesebre,
porque no había lugar para ellos en el albergue.
REFLEXIÓN
Despierta, hombre: por ti Dios se hizo hombre. Despierta, tú que duermes, surge de entre los
muertos; y Cristo con su luz te alumbrará. Te lo repito: por ti Dios se hizo hombre.
ORACIÓN UNIVERSAL
Oremos:
Para que por nuestro testimonio, el mundo sepa que Cristo ha nacido entre nosotros.
SÉPTIMA POSADA
LECTURA
2:8 En esa región acampaban unos pastores, que vigilaban por turno sus rebaños durante la
noche.
2:9 De pronto, se les apareció el Ángel del Señor y la gloria del Señor los envolvió con su luz.
Ellos sintieron un gran temor,
2:10 pero el Ángel les dijo: "No teman, porque les traigo una buena noticia, una gran alegría
para todo el pueblo:
2:11 Hoy, en la ciudad de David, les ha nacido un Salvador, que es el Mesías, el Señor.
2:12 Y esto les servirá de señal: encontrarán a un niño recién nacido envuelto en pañales y
acostado en un pesebre".
2:13 Y junto con el Ángel, apareció de pronto una multitud del ejército celestial, que alababa a
Dios, diciendo:
2:14 "¡Gloria a Dios en las alturas,
y en la tierra, paz a los hombres amados por él!"
2:15 Después que los ángeles volvieron al cielo, los pastores se decían unos a otros: "Vayamos
a Belén, y veamos lo que ha sucedido y que el Señor nos ha anunciado".
2:16 Fueron rápidamente y encontraron a María, a José, y al recién nacido acostado en el
pesebre.
2:17 Al verlo, contaron lo que habían oído decir sobre este niño,
2:18 y todos los que los escuchaban quedaron admirados de lo que decían los pastores.
2:19 Mientras tanto, María conservaba estas cosas y las meditaba en su corazón.
2:20 Y los pastores volvieron, alabando y glorificando a Dios por todo lo que habían visto y
oído, conforme al anuncio que habían recibido.
REFLEXIÓN
En la Navidad hay que pensar una y otra vez. Así lo hicieron los pastores que fueron los
primeros testigos del nacimiento de Jesús, a ser convocados por el ángel para comprobar el
hecho acaecido. Fueron a Belén, encontraron a Jesús, con María y José, y a la vuelta, contaron
lo que se les había dicho acerca del Niño. Y cuantos los oían se maravillaban de los que les
decían los pastores. Así podemos decir, el Evangelio comienza a ser noticia, a difundirse
discreta y secretamente, y a contribuir a la formación de esa conciencia popular mesiánica que
cogerá, luego, la predicación de Juan el Bautista, el Precursor, y después el mismo Jesús.
Pero otra circunstancia muy clara nos exhorta a pensar nuevamente en el hecho de la Navidad,
evocado por la fiesta litúrgica para descubrir en Él el sentido, el significado trascendente que
esconde y manifiesta. La Navidad tiene un contenido propio, secreto que se descubre sólo a
quien lo busca.
Pensemos en la misma Virgen María, en el éxtasis de su alma limpísima, ya bien consciente del
misterio de su divina maternidad y absorta totalmente en la meditación de cuanto sucedió en
ella y a su alrededor.
Pablo VI
ORACIÓN UNIVERSAL
Oremos:
Para que al igual que los pastores seamos testigos del nacimiento de Cristo. Te rogamos Señor.
Para que así como los pastores manifestaron el nacimiento de Cristo, nosotros llevemos la
Buena Nueva a todos los confines del mundo.
Te rogamos Señor.
OCTAVA POSADA
LECTURA
2:1 Cuando nació Jesús, en Belén de Judea, bajo el reinado de Herodes, unos magos de Oriente
se presentaron en Jerusalén
2:2 y preguntaron: "¿Dónde está el rey de los judíos que acaba de nacer? Porque vimos su
estrella en Oriente y hemos venido a adorarlo".
2:3 Al enterarse, el rey Herodes quedó desconcertado y con él toda Jerusalén.
2:4 Entonces reunió a todos los sumos sacerdotes y a los escribas del pueblo, para
preguntarles en qué lugar debía nacer el Mesías.
2:5 "En Belén de Judea, le respondieron, porque así está escrito por el Profeta:
2:6 Y tú, Belén, tierra de Judá, ciertamente no eres la meno entre las principales ciudades de
Judá, porque de ti surgirá un jefe que será el Pastor de mi pueblo, Israel".
2:7 Herodes mandó llamar secretamente a los magos y después de averiguar con precisión la
fecha en que había aparecido la estrella,
2:8 los envió a Belén, diciéndoles: "Vayan e infórmense cuidadosamente acerca del niño, y
cuando lo hayan encontrado, avísenme para que yo también vaya a rendirle homenaje".
2:9 Después de oír al rey, ellos partieron. La estrella que habían visto en Oriente los precedía,
hasta que se detuvo en el lugar donde estaba el niño.
2:10 Cuando vieron la estrella se llenaron de alegría,
2:11 y al entrar en la casa, encontraron al niño con María, su madre, y postrándose, le
rindieron homenaje. Luego, abriendo sus cofres, le ofrecieron dones: oro, incienso y mirra.
2:12 Y como recibieron en sueños la advertencia de no regresar al palacio de Herodes,
volvieron a su tierra por otro camino.
REFLEXIÓN
Es necesario que estos esforzados buscadores del Rey de los judíos salgan del palacio de
Herodes y se dejen de las interminables discusiones; es necesario que abandonen la Ciudad
Santa y confíen en la Estrella (es decir en el signo que Dios mismo ofrece para que puedan
descubrir el nuevo lugar santo donde ha decidido encontrar al hombre que lo busca).
El signo ha sido espectacular. La realidad, por el contrario, aparece modesta, ordinaria, casi me
atrevería a decir, desilusionante.
Una casa cualquiera. Una escena muy común y personas sin importancia.
Habiendo entrado en la casa, vieron al Niño con María, su Madre. No hay más, aquí está todo.
Es mucho más fácil ver una estrella y quedarse extasiados por su aparición que "ver " un
cuadro tan familiar. Esta señal grandiosa, en este caso, nos lleva a una realidad pequeña,
insignificante.
Y postrados lo adoraron.
La estrella no tiene ya ninguna función. Ahora entra en juego la fe. Solamente la fe permite el
ver más haya de las apariencias e incita a adorar.
A. Pronzato
ORACIÓN UNIVERSAL
Oremos:
Para que nuestros corazones estén abiertos a recibir todos aquellos signos que nos
manifiestan la voluntad de Dios.
Para que al igual que los Reyes Magos sigamos esos signos que nos llevan a Cristo.
Ven Señor no tardes.
Para que al final del camino de nuestras vidas, habiendo seguido los signos que Dios nos da
lleguemos a adorar a nuestro Señor Jesucristo en la vida eterna.
NOVENA POSADA
LECTURA
REFLEXIÓN
Paulo VI
ORACIÓN UNIVERSAL
Oremos:
Escúchanos Padre.
Escúchanos Señor.
Para que la luz de Cristo ilumine siempre nuestras vidas, y seamos testigos vivos de su
presencia entre nosotros.
Escúchanos Padre.