Está en la página 1de 6

DEFINICIÓN DE ONCOLOGÍA

Se conoce como oncología a la especialidad médica que se especializa en


el análisis y el tratamiento de tumores tanto benignos como
malignos. El concepto posee su origen en la lengua griega y está compuesto
por los vocablos onkos (traducido como “masa”, “tumor”) y logos (en
español, “estudio”).
La oncología, por lo tanto, se encarga de detectar, combatir y controlar
el cáncer. En el caso del tratamiento, contempla la posibilidad de someter
al paciente a una cirugía y a terapias no quirúrgicas, como lo son la
quimioterapia y la radioterapia.
Por otra parte, la oncología se ocupa de ofrecer cuidados paliativos a quienes
padecen enfermedades terminales, indaga sobre las cuestiones éticas
asociadas a la atención de los individuos con cáncer y aborda los exámenes
genéticos focalizados en la detección de tumores.
Es posible distinguir entre diversos tipos de oncólogos (como se conoce a los
expertos en oncología). De esta manera, podemos mencionar a
los cirujanos oncológicos (especializados en la extracción de tumores),
los oncólogos médicos (quienes emplean fármacos antineoplásicos, como
la quimioterapia y la inmunoterapia) y los oncólogos
radioterápicos (aquellos que proponen tratamientos a base de
radiaciones).
Por otra parte, de acuerdo a los pacientes que atienden, los oncólogos
pueden ser considerados como ginecólogos oncológicos (tratan el cáncer
femenino) u oncólogos pediátricos (quienes se ocupan de atender a niños
con diversas clases de cáncer), entre otros.
A la hora de hacer frente a un cáncer varios son los tratamientos existentes
en la actualidad que se emplean unos u otros en función del tipo de
enfermedad, del estado de la misma y de las características que presente el
paciente en cuestión. Así, por ejemplo, podemos hablar de la cirugía
oncológica que es aquella en la que el médico lleva a cabo la extracción del
cáncer y del tejido que rodea al mismo.

En estos momentos se puede decir que es la modalidad terapéutica más


efectiva para acabar con dicha enfermedad y se puede llevar a cabo con
diversos objetivos tales como el diagnóstico en cuyo caso se llama biopsia, el
preventivo, el estudio del estado del cáncer o el de reducción de la masa
tumoral.

La radioterapia es otro de los tratamientos más útiles y utilizados para hacer


frente a esta grave enfermedad. En concreto consiste en el uso de lo que son
los rayos X de alta energía con el claro fin de reducir los tumores y también
de eliminar las llamadas células cancerosas. Cuando esta alternativa es más
efectiva es para acabar con tumores de pequeño tamaño.

CAM, medicina complementaria y alternativa, es igualmente uno de los


pilares en materia de tratamientos para muchos pacientes. En concreto esta
propuesta consiste en reducir dolores, así como en prevenir o reducir los
síntomas del cáncer o curar el mismo mediante el uso de una serie de
terapias como pueden ser la inmunoterapia, la acupuntura o la homeopatía.

En cuanto a la quimioterapia, es necesario recordar que se trata de uno de


los tratamientos más usados por los oncólogos y que puede definirse como
poliquimioterapia (cuando se basa en la combinación de múltiples
citotóxicos que tienen diversos mecanismos de acción), la quimioterapia
adyuvante (se administra después de un tratamiento principal como la
cirugía), la quimioterapia neoadyuvante o de inducción (se recomienda antes
de someterse a tratamientos quirúrgicos o de radioterapia) y la radio
quimioterapia concomitante (conocida también como quimio radioterapia, la
cual se administra de modo concurrente o junto a la radioterapia).

¿Mecanismo de protección de las células? Nuevas teorías sobre los


orígenes del cáncer
8 de octubre 2014
Pese a los grandes recursos vertidos en la lucha contra el cáncer durante las dos
últimas décadas el impacto ha sido menor al esperado, por lo que tal vez sea el
momento de un nuevo paradigma y reenfocar la investigación del cáncer. Un modelo
de simulación basado en la física postula que el cáncer podría ser un “modo a
prueba de fallos” para células estresadas, y sugiere que el oxígeno y la
inmunoterapia podrían ser la mejor forma de combatir esta enfermedad.

Cáncer: el “modo seguro” de las células.


¿Podría ser el cáncer la forma que tienen nuestras células de ejecutarse “en modo seguro” del
mismo modo que el sistema operativo de un ordenador dañado intenta preservarse contra una
amenaza externa? Tal es la controvertida hipótesis propuesta por el físico Paul Davies de la
Universidad Estatal de Arizona en Tempe en base a las raíces evolutivas del cáncer. De ser
correcto, su modelo apoyaría el estudio de nuevas terapias más eficaces que incluirían el
tratamiento con oxígeno y la infección con agentes víricos o bacterianos.

Investigadores de la Universidad de Arizona en cooperación con científicos británicos y


australianos han desarrollado un modelo “atávico” según el cual un tumor sería la re-expresión
de un antiguo mecanismo “pre programado” que hasta entonces había permanecido inactivo.
En un nuevo artículo publicado en septiembre en BioEssays, argumentan que, dado que el
cáncer está presente en numerosos animales y plantas además de en humanos, debe ser un
rasgo evolutivo muy antiguo que evolucionó hace millones de años, cuando toda la vida de la
tierra compartía un único antepasado unicelular. De hecho, algunos científicos postulan que el
cáncer podría ser tan antiguo como la vida multicelular en la tierra. Al comienzo de la evolución,
las células eran inmortales, es decir, tenían la capacidad de proliferar sin que nada se lo
impidiera, que es justo lo que hace el cáncer. No obstante, cuando se desarrollaron organismos
multicelulares complejos, “la inmortalidad de los genes fue transmitida a los huevos y al
esperma”, con lo que las células no asociadas a la reproducción dejaron de necesitar esta
capacidad. El equipo de investigadores postula que cuando una célula se enfrenta a una
amenaza externa para su salud, como por ejemplo radiación, las células vuelven a activar el
“modo a prueba de fallos” pre programado. Al hacerlo, las células desactivan funciones más
avanzadas y reactivan la capacidad de proliferar de forma indefinida en su intento de sobrevivir.
“El cáncer es a prueba de fallos”, afirma Davies. “Una vez desencadenada la subrutina,
implementa su programa sin que nada se lo impida”.El artículo publicado en BioEssays propone
dianas terapéuticas para combatir el cáncer en base a esta teoría.
Oxígeno y azúcar, el talón de Aquiles del cáncer.

Si la teoría es correcta, entonces el cáncer evolucionó en una época de la vida geológica de la


tierra en la que el ambiente era más ácido y contenía menos oxígeno. Por lo que los
investigadores predicen que tratar a los pacientes con altos niveles de oxígeno y reducir las
cantidades de azúcar en su dieta para así disminuir la acidez podría limitar el avance del cáncer
y reducir el tamaño de los tumores. El efecto de los niveles de oxígeno sobre el cáncer ya había
sido estudiado de forma independiente y parecen confirmar el modelo de Davies. Investigadores
belgas han demostrado recientemente que niveles de oxígeno ligeramente elevados pueden
inducir apoptosis (muerte celular) en células de leucemia sin causar daños en las células sanas.
Los resultados de los primeros ensayos parecen demostrar que elevar los niveles de oxígeno
una o dos horas al día, en combinación con otras terapias estándar, parece tener efectos
beneficiosos en los pacientes sin efectos secundarios.

Por otro lado, el modelo de Davies y cols., afirma que a medida que el cáncer progresa, los
genes evolutivamente más recientes pierden sus funciones, mientras que los antiguos se
activan. Para comprobar esta hipótesis, los autores del estudio están comparando datos con el
Atlas del genoma del Cáncer para identificar aquellos genes que están implicados en el cáncer
con los de diversas bases de datos que clasifican los genes que compartimos con otras
especies. Estas últimas permiten a los biólogos determinar la edad de los genes. Demostrar que
los genes involucrados en el cáncer son muy antiguos supondría una nueva prueba que
validaría la teoría del origen ancestral del cáncer.

La teoría de Davies y cols. ya había sido comentada en esta misma sección de medicina 21 en
julio de 2013, después de la publicación de su artículo "Exposing cancer’s deep evolutionary
roots"
CAMBIOS QUE PROVOCAN LOS
TRATAMIENTOS DE CÁNCER
Las manifestaciones del cáncer suelen aparecer de acuerdo al tipo de tumor, entre los
principales cambios físicos que pueden detectarse están:

 Pérdida de peso.
 Sangrado vaginal.
 Cambios en los senos.
 Aparición de lunares nuevos
 Tumores y glándulas linfáticas inflamadas.

El cáncer no es una elección y no tienes por qué sentirte


avergonzado.
Pero no solamente se presentan cambios para detectar la enfermedad, una vez que se comienza
con un tratamiento oncológico para combatirlo es común que tu imagen física comience a
transformarse.
> Te recomendamos leer nuestra entrada: Tipos de tratamientos para el cáncer.

¿Cuáles son los cambios físicos que provocan los


tratamientos contra el cáncer?
 Pérdida del cabello.

Si tu tratamiento es la quimioterapia, sabemos que tu mayor miedo será perder tu cabello. Este
efecto suele ser lo más impactante y creará una fuerte repercusión emocional. Para evitar que
veas los mechones de cabello que se caen, se recomienda cortar el pelo muy pequeño o raparlo
por completo.
La radioterapia también puede provocar la pérdida de cabello y dependiendo del daño, puede
que el cabello no se recupere. Sin embargo, existen tratamientos que no implican la caída del
cabello, pero sí lo pueden volver muy débil y deberás tener cuidados especiales.
Una vez que termines con el tratamiento, deberás retirar tu cabello por completo una última
vez, debido a que la matriz del cabello está dañada y debe recuperarse antes de que te dejes
crecer de nuevo el cabello.
 Piel reseca e hipersensible.

Otro de los efectos secundarios que pueden aparecer se encuentran en la piel. La radioterapia
puede provocar enrojecimiento, ardor e inflamación en las primeras semanas de tratamiento,
después puede presentarse resequedad, comezón y la piel se puede pelar.
Los cuidados de tu rostro y el resto del cuerpo son diferentes, pero en cada uno es importante
mantenerlos hidratados y utilizar la protección adecuada si estarás expuesta al sol. Tus labios
también requerirán de un mayor cuidado ya que se resecaran con frecuencia.
Al terminar con el tratamiento deberás darle tiempo a tu piel para recuperarse y continuar
cuidándola, con productos especiales.
 Uñas sensibles

Las uñas, al igual que el cabello, se ven afectadas por la quimioterapia, provocando alteraciones
como uñas engrosadas, delgadas, quebradizas, cambios de color, presencia de líneas o
depresiones.
El mejor cuidado que se le puede dar a las uñas es no cortarlas demasiado, ya que su
crecimiento será mucho más lento a lo normal y mantenerlas hidratadas.

Una buena alimentación y tomar agua constantemente te


ayudará a mantener tu piel, cabello y las uñas en buen estado.
En Cancun Oncology Center nuestros médicos oncólogos están preparador para ofrecerte un
servicio integral contra el cáncer, desde realizar un diagnóstico certero hasta elegir el mejor
tratamiento. También te ofrecemos orientación a ti y a toda tu familia, para superar juntos el
cáncer.

También podría gustarte