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LOS PLACERES

DE LA MELANCOLÍA INSULAR

LUIS MARIMÓN, EL POETA


MALDITO DE MATANZAS

BREVE RECORRIDO
#00#
POR EL HAIKU otoño - invierno 2018
SUMARIO
04_ LOS PLACERES DE LA
MELANCOLÍA INSULAR:
LO CUBANO EN LA POESÍA
DE JOSÉ MARÍA HEREDIA
ERIAN PEÑA PUPO

10_ NUEVAMENTE YO
JESSICA PÉREZ QUESADA
DANIELA DÍAZ
AMAYA A. ALVAREZ

18_ PUBLICACIONES DEL SELLO AVANCE


NÁTHALY HERNÁNDEZ CHÁVEZ

23_ EN PROCESO
YANELYS ENCINOSA
REYNA ESPERANZA CRUZ
RAMÓN ELÍAS LAFFITA
ZURELYS LÓPEZ AMAYA
MILHO MONTENEGRO
IRASEMA CRUZ

36_ LUIS MARIMÓN, EL POETA MALDITO DE MATANZAS


LA POÉTICA DE LUIS MARIMÓN
DIANETT QUINTANA SOLÍS

46_ NUEVAMENTE YO
ELENA RIVERO
JULIÁN BRAVO
MARTHA LUISA HERNÁNDEZ

54_ BREVE RECORRIDO POR EL HAIKU


LÁZARO ORIHUELA

60_ DIÁLOGO GENERACIONAL


ALINA B. HERNÁNDEZ LÓPEZ

62_ REPOSICIONES
LUISA ONEIDA LANDÍN
JAMILA MEDINA RÍOS
SOLEDIA RÍOS

REVISTA DIGITAL ARTÍSTICO-LITERARIA NEO DUAL Director: Bill Cordovés Edi-


ción: Karina Edith Diseñador: Alejandro Abella Diseño del logotipo: Gabriela Estrada
Quesada Jefa del Consejo Asesor: Jamila Medina Ríos Consejo Asesor: Roberto Man-
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[…]su poesía resplandece, desmaya o angustia. muestra metafórica de la voluptuosidad ante los ojos euro- complejidad de un vasto paisaje. Jamás descendía al detalle
José Martí peos de las bondades tropicales de la isla. La conocida oda secundario ni a la enumeración fatigosa: su visión era siem-
“A la piña”, de Manuel de Zequeira y Arango (1764–1846) pre sintética y, por lo mismo intensa”5.
José María Heredia y Heredia (Santiago de Cuba, 1803– o “Silva cubana” (“Las frutas de Cuba”) de Manuel Justo Según Ángel Augier: “El impulso afectivo fue asociándose
Toluca, México, 1839) fue un poeta de azares y dolores, de de Rubalcaba (1769–1805) son claros ejemplos de una serie a los elementos físicos del país, y estos a su vez lo acerca-
la trémula y feliz melancolía que antecede al despido y la de poemas bucólicos con cierto toque rococó de “poesía de ron lenta y sutilmente a los espirituales”6. Este es un rasgo
partida: la añoranza como fe de vida. Pero también fue un jardín” en cuya sucesión descubrimos el acercamiento cada característico de su poesía: el paisaje como unidad estética
LOS PLACERES poeta de libertades, del anhelo romántico e independentis- vez más real e íntimo a nuestra flora y fauna, lo que llama- y sentimental creada por el alma, el paso de la naturaleza
ta de una Isla que definió como propia en la hondura de sus ría Cintio Vitier “la silva descriptiva”2 de nuestra génesis al paisaje propiamente dicho, no en el sentido pictórico o
DE LA versos. poética, literatura que “considerada seriamente comienza representativo, sino como estado de ánimo. Mientras para

MELANCOLÍA
Heredia vivió anhelando la Patria ante el destierro: el va- con Heredia”3. Cintio Vitier, esa espiritualización de la naturaleza que sería
gar perpetuo y la mirada errante, pero siempre oblicua, Con José María Heredia la palma desplaza a la piña como característica en su obra, muestra en Heredia dos planos,

INSULAR: LO inclinada, hacia la Isla. Con su poesía comienzan a crista-


lizarse en Cuba los elementos de la Nación y la identidad
símbolo de cubanía: si antes Balboa pone en manos de di-
vinidades griegas y latinas los frutos indígenas, y Zequeira
que en ocasiones se funden en uno solo: el amoroso y el
patriótico 7. Es característico del romanticismo la interpe-

CUBANO EN LA nacional, en las evocaciones al paisaje y la naturaleza insu-


lar, y en el despertar de la conciencia independentista del
describe una especie de apoteosis mitológica de la piña,
erigiendo a la fruta barroca como símbolo tropical, en He-
netración de sentimiento y naturaleza, a tal punto que los
espectáculos naturales resultan misterios asumidos por el

POESÍA DE JOSÉ pueblo cubano. Fue, sobre todo, poeta de acertada cubanía
que “le cantó, con majestad desconocida, a la mujer, al peli-
redia la palma es escala de luz, orgullo nacional, trono libre
y redentor, enseña virginal, símbolo de martirio y dolor de
mundo de las pasiones: el romántico ve en la naturaleza un
espejo de su alma; así lo hizo Heredia en el conocido poema

MARÍA HEREDIA
gro y a las palmas”, escribió José Martí 1. la Patria. Habíamos pasado del cesto barroco y mitológico “Niágara”, y en la poesía inglesa Lord Byron en “Las pere-
Las primeras lumbres de cubanía en nuestras letras se –como las cornucopias griegas– al penacho romántico de la grinaciones de Childe Harold”.
evidencian en la representación de la naturaleza: desde los palma, el árbol que recibe el primero y el último rayo de luz; Vemos en esa “espiritualización de la naturaleza” de la que
Erian Peña Pupo tiempos germinales de la poesía insular es la naturaleza y a la representación ideal y erguida de la Isla como compen- hablaba Vitier, una visión cubanísima de la mujer, que se
su representación la realidad inmediata que inspira al poe- dio de dolor y libertad, de la conciencia independentista evidencia tanto en la lírica amatoria de Heredia, como en
ta. Pero su inmediatez física, en una isla semiparadisíaca que se iba tornando en una intelectualidad burguesa cada sus poemas patrióticos. Los dúos palma-mujer y palma-pa-
como Cuba, no es igual a su inmediatez poética. El poeta no vez menos criolla y más cubana. tria aparecen, aunque separados, como elementos caracte-
puede expresarla todavía sino a través de una concepción Heredia supera lo que Vitier llama “el marco bucólico y rísticos de cubanía en la obra de Heredia. Parejas poéticas
prestada y clásica, a la vez artificial y abstracta, con cier- la visión arcádica” del neoclasicismo insular4 . Su poesía que en José Martí luego se fundirán en un solo concepto:
to aire virgiliano y horaciano evidente del neoclasicismo, proporciona, desde las primeras obras apreciables en su “[...]las palmas son novias que esperan; y hemos de poner
y muchas veces con reminiscencias barrocas de Góngora, temprana juventud, la interiorización de la naturaleza, su la justicia tan alto como las palmas”8. En la obra de Heredia
Quevedo y Calderón de la Barca. expresión cada vez más desnuda y real en la comprensión vemos la relación palma-mujer plasmada en los siguientes
A esa representación de la naturaleza –sobre todo median- de lo cubano como elemento identitario. versos de 1821: El alma mía/ se abrazó a tu mirar: entre la
te la descripción del paisaje como evidencia de las prime- En los versos de “En el Teocalli de Cholula”, uno de sus pompa/ te contemplé del estruendoso baile/ altiva y majes-
ras muestras de “lo cubano” en nuestra lírica– se encamina poemas más conocidos y modelo elocuente de su proce- tuosa descollando/ entre hermosura/ cual palma gallardísi-
la poesía insular desde Espejo de Paciencia (Silvestre de dimiento descriptivo, escrito, además, en plena adolescen- ma y erguida/ de la enlazada selva en la espesura...9
Balboa Troya y Quesada, 1608) como primer monumen- cia, Heredia muestra una naturaleza espiritualizada que Otro ejemplo de naturaleza cubana íntimamente espiritua-
to, tambaleante para muchos, del corpus literario cubano, sutilmente se identifica con un paisaje del alma humana. lizada –“el sentimiento del paisaje”, según Max H. Ureña10 –,
hasta entrado el siglo XIX. Inicialmente fue la piña –fruta Escribe Max Henríquez Ureña en su Panorama histórico a la vez húmeda y trémula como la voz misma del poeta,
primero barroca y luego neoclásica– el símbolo paradisía- de la literatura cubana: “El poeta descriptivo suplantó bien muestra la adjetivación (“el pomposo naranjo, el mango er-
co y vistoso de nuestra primera poesía y a la vez de Cuba, pronto al poeta de amor. Encarcelaba en pocas palabras la guido”) que después del propio Heredia será común y hasta

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cierto punto reiterativa, con sus luces y sombras en mayor dense de las famosas cataratas del Niágara, el joven bardo larga tradición de creadores e “inspiraciones” del exilio y que el de su patria! [...] ¡Oh! ¡Cómo palpitante saludara/ las
o menor grado, en la poesía decimonónica cubana: Morada desterrado escribe su poema más conocido, inspirado en la diáspora. Sin la mirada melancólica del exilio político no dulces costas de la patria mía/ al ver pintada su distante
fría/ de grato horror y oscuridad sombría, / a ti me acojo, y la famosa narración del poeta romántico francés François– habría exaltación poética ni añoranza hacia la tierra natal, sombra/ en el tranquilo mar del mediodía! [...] Hermoso cie-
en tu amigo seno/ mi tierno corazón sentiré lleno/ de agra- René de Chateaubriand, y plasma así “una de sus dos o tres y por tanto tampoco deseos independentistas. Esto marca, lo de mi hermosa patria, ¿no tornaré yo a verte? 20
dable y feliz melancolía 11. obras maestras, y seguramente uno de los poemas más be- como estigma, la obra del poeta santiaguero, a quien Martí En esta primera etapa mexicana surge en Heredia el sen-
El “grato horror” de la noche herediana bajo el asilo de llos en lengua castellana” 15 : Mas ¿qué en ti busca mi anhe- llamó el primer poeta de América. timiento de libertad como suprema aspiración del hombre;
la espesura, ofrece un lugar de ocultamiento al nostálgico lante vista/ con inútil afán? ¿Por qué no miro/ alrededor de Pero en el joven Heredia, la vocación patriótica no surge su poesía comienza a ser muestra de ello. Así comienza a
desamparo del desterrado, la agradable melancolía que tu caverna inmensa/ las palmas, ¡ay! las palmas deliciosas/ de manera espontánea; es, más bien, una especie de evo- fraguar la conformación de su identidad nacional, aquello
marca toda la existencia del poeta, como posteriormente se que en las llanuras de mi ardiente patria/ nacen del sol a la lución que termina siendo cristalización patriótica y revo- que lo aleja un poco de su padre y lo acerca a la isla doliente
evidencia en la obra de Zenea y Casal. De los arrebatos de sonrisa, y crecen/ y al soplo de la brisa del Océano/ bajo un lucionaria en su poesía. “Recién llegado a México –escribe y querida: Cuba como tierra de su nacimiento y estímulo
pasión se liberaba Heredia solo para entregarse a la melan- cielo purísimo se mecen? 16 Ángel Augier en su ensayo La poesía de José María Here- para moldear su emoción patriótica. En la ausencia, el re-
colía o al desencanto. La ardiente y sensual nostalgia viene A propósito, escribe Cintio Vitier sobre la impronta del dia– el concepto de ‘’patria’’ para José María era el mismo cuerdo se enlazaba dulcemente (“la dulce melancolía”) a la
a ser otra contraparte poética de su obra lírica: la deliciosa, poema en generaciones de revolucionarios exilados: “Seña- sustentado por su padre: atribuido a España en el sentido naturaleza insular, el sol tropical y las noches criollas, tes-
necesaria, ardorosa y “feliz melancolía” herediana –entre la la este verso (“las palmas, ¡ay! las palmas deliciosas”) mo- maternal emanado de un mal entendido derecho histórico. tigos de sus días de felicidad, esa que creyó encontrar en
conmoción de los elementos naturales y la paz de las so- mento en nuestra historia y en nuestra sensibilidad, que es- Así como el magistrado [un español liberal de América Cuba, la nostalgia al suelo nativo que bojea en su alma la
ledades– que se evidencia en su poesía: Desde la infancia tará vigente hasta los días de Martí. Para generaciones de que había escrito Memoria de las revoluciones de Venezue- idea y el sentir de la patria.
venturosa mía/ era mi amor. / Aislado, pensativo/ gustába- emigrados y desterrados –la flor del país–, Cuba será eso: la] desde su posición jurídica, propugnaba la avenencia de Heredia se integró así a un magno fenómeno de crista-
me vagar en la ribera/ del ancho mar 12 . “las palmas, ¡ay! las palmas deliciosas”. Pero esta delicia, los patriotas latinoamericanos a un régimen español de lización de la espiritualidad, en el preciso instante en que
El destierro, la emigración con el frío del norte –que pa- que en la visión de Heredia eran los “placeres de la melan- garantías constitucionales, que en la misma España era fu- los sucesos ocurridos en la metrópolis, sus colonias ame-
decerían otros poetas, incluido el propio Martí–, la imagen colía”, se irá saturando cada vez más de dolor y cambiando gaz e ilusorio, su hijo poeta entonaba loas a jefes militares ricanas y en la propia Cuba, estremecían los andamios del
de Cuba como paraíso perdido, se verán retratados en es- la nostalgia por una frenética esperanza” 17. colonialistas –como Barradas y Apodaca– por su aparente sistema español. Era el momento en que en la Isla, a la som-
tos versos de “Placeres de la melancolía”. Aquí la nostalgia Frente al Niágara, le basta a Heredia con reflejar su propia política persuasiva frente a los soldados de la independen- bra del movimiento constitucional, que hizo proliferar, en
de una tierra dulce y paradisíaca, propia del romanticismo, agitación interior para traducir la terrible tempestad de la cia, o a Fernando VII por el transitorio restablecimiento de la Cuba, la imprenta y las publicaciones seriadas, se deba-
parece condensarse en un solo verso, islas de paz y gloria catarata. Dentro, el poeta desfallecía. Aunque, como “ase- la Constitución de 1812” 19 . Ejemplifican esto los poemas tían las cada vez más hondas contradicciones ideológicas
semejaban, y todo el frío implacable del destierro, en una guraría luego Jorge Mañach, es una inspiración de mayor “España libre” y el “Himno patriótico al restablecimiento y de intereses entre criollos y peninsulares. Mientras los
sola imagen sensitiva: y bajo el agudo filo/ del hielo afina- sustancia la que allí le aguarda; una emoción de grandeza de la Constitución”, pero no era su voz la de un separatis- integristas polemizaban con los reformistas, y los consti-
dor centella el cielo 13. desatada, la percepción del poder divino y la sugerencia de ta, sino la de un defensor de la libertad. Incluso ya había tucionalistas con los absolutistas, en la sociedad criolla las
Otro “enfrentamiento” de la poesía de Heredia con los des- la marcha ciega y fatal del destino humano hacia el abismo escrito, a raíz del tratado sobre la abolición del comercio ideas de independencia proliferaban al estímulo de la gesta
bordes de la naturaleza insular lo encontramos en el poema de dolor” 18. de esclavos que impuso Inglaterra a España, su “Canción bolivariana. Para entonces en Heredia, la patria ya no era
“En una tempestad”. El poeta no se queda impávido frente Si bien se evidencian en Heredia las parejas palma-mujer hecha con motivo de la abolición del comercio de negros” España, sino Cuba.
al paso del huracán: admira su potencia, lo saluda en versos y palma-patria como compendio y símbolo de cubanía, a la (o “En la abolición del comercio de negros”), donde su es- Escribiría entonces, luego de enrolarse en Matanzas en
de profunda y profusa mirada descriptiva, que se torna ade- par de la descripción del paisaje cubano como espejo del píritu clama justicia, no sin cierto agradecimiento bisoño al la logia Caballeros Racionales, una de las ramas del movi-
más de ribetes de inspiración sagrada; es cuando su voz, alma del poeta, es la dimisión patriótica de su obra, otro gobierno español por acordar la abolición. miento Soles y Rayos de Bolívar, el poema “A la insurrec-
hermanada al estruendo del huracán, se llena de armonía: rasgo característico y por el que ha sido recordada su figu- Durante su primera estancia en México, donde acompaña ción de Grecia en 1820”, donde vislumbra un futuro de
Huracán, huracán, venir te siento, / y en tu soplo abrasador/ ra lírica. Partamos de un punto necesario para comprender a su padre (la familia de Heredia fue tan trashumante como libertad para su patria en el ejemplo de lucha del pueblo
respiro entusiasmado/ del Señor de los aires el aliento 14. esta faceta de la amplia obra herediana: Heredia inicia lo el propio bardo, moviéndose entre Santo Domingo, Cuba, griego: Por el alma libertad: miro a mi patria/ a la risueña
La palma, que ya la hemos visto convertida en mujer, apa- que llamaremos “iluminación poética de Cuba” desde el Venezuela, México...) con solo dieciséis años y sin aparen- Cuba, que en la frente/ eleva al mar de palmas coronada/
rece en su obra como símbolo de la patria, como ejemplifica destierro, luego de ser acusado de participar en la conspi- te motivación política, escribe al compatriota que regresa por los mares de América tendiendo/ su gloria y su poder…21
un pasaje de la oda “Niágara”. Ante la vertiente estadouni- ración Soles y Rayos de Bolívar, en 1823; así inaugura una a Cuba: ¡Feliz Alpino, el que jamás conoce/ otro cielo ni sol En octubre de 1823, al saber que la conspiración había sido

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descubierta, escribió en Matanzas el poema “La estrella de y pequeña, con la última luz en los ojos, el poeta que había fera propia del mito de la isla que jugará siempre un papel 1“Heredia” (1889): Letras Cubanas, p. 10. citado en Leonardo
Cuba”, que inauguró la poesía cubana revolucionaria. Es- tenido valor para todo, menos morir sin volver a ver a su decisivo en nuestra sensibilidad. Sin dudas, la primera ilu- Discurso pronun- 7Cintio Vitier, ídem, Padura (2012): “El
cribe así Heredia uno de sus versos más conocidos: Nos madre y a sus palmas” 23. minación lírica de Cuba, se verifica y viene a dar sus luces ciado en Hardman p. 75. Niágara y Heredia”,
combate feroz tiranía/ con aleve traición conjugada/ y la En el “Himno del desterrado” escribe Heredia uno de sus desde el exilio. Pero es con Heredia que la isla añorada se Hall, Nueva York, el 8Discurso en el Liceo en Un hombre en
estrella de Cuba eclipsada/ para un siglo de horror queda poemas de más trágica hondura: ¡Tierra! claman: ansiosos convierte en patria: no solamente en tierra natal, sino en pa- 30 de noviembre de cubano de Tampa, una isla. Crónicas,
ya. / Que si un pueblo de dura cadena/ no se atreve a romper miramos/ al confín del sereno horizonte…/ Es el Pan... En su tria que ilumina, brilla y refleja distante, lejana en el mapa, 1889, en José Martí, 26 de noviembre de ensayos y obsesio-
con sus manos/ bien le es fácil mudar de tiranos/ pero nun- falda respiran/ el amigo más fino y constante/ mis amigas quizá hasta inalcanzable, pero Patria. Para Cintio Vitier: Obras Completas, 1891. Estudiado por nes: Santa Clara
ca ser libre podrá 22. preciosas, mi amante.../ ¡Qué tesoros de amor tengo allí! Y “Con Heredia la isla se vuelve, no solo distante, sino tam- Volumen V, 1976. La Vitier, ídem, p. 76. Ediciones, Sed de
Indignado el poeta, fulmina con sus limpios versos al ti- más lejos, mis dulces hermanas/ y mi madre, mi madre ado- bién lejana, porque ha entrado en su intimidad, en su deseo, Habana: Editorial 9“A..., En el baile”. belleza, p. 275.
rano opresor, pero la estrella que despunta en este poema rada/ de silencio y dolores cercada/ se consume gimiendo en el anhelo de su alma. Cuba empieza a ser esperanza a la de Ciencias Socia- José María Heredia 16Heredia, ídem, p.
quedó fija desde entonces como uno de los símbolos de an- por mí. Cuba, Cuba, que vida me diste, dulce tierra de luz y vez que nostalgia; cielo futuro, que no se gozará nunca, a la les, Instituto Cuba- (2003). Obra poética. 236.
helo de libertad del pueblo cubano, al punto de aparecer hermosura, ¡cuánto sueño de luz ventura/ tengo unido a tu vez que paraíso perdido” 26. no del Libro (ICL). Compilación y prólo- 17Cintio Vitier, ídem,
en el triángulo rojo de la bandera nacional, como se refleja suelo feliz! 24 Heredia fue un poeta desigual. Quizá por eso Max Hen- 2Cintio Vitier (1970): go de Ángel Augier. p. 84.
también en el escudo otro de los símbolos heredianos: la El poeta trasluce la ansiedad, los límites de la insularidad, ríquez Ureña lamente que en la poesía civil de Heredia Lo cubano en la La Habana: Editorial 18Citado en Padura,
palma. Además, ya Heredia formula una decisión que sería esa poderosa palabra que nos turba y vendría a ser tema so- predomine la tónica prosaica y declamatoria. Sin embargo, poesía. La Habana: Letras Cubanas, p. ídem, p. 274.
escrita con sangre en nuestras contiendas independentis- corrido en la siguiente poesía cubana, el mundo que ha deja- para Martí, “el lenguaje de Heredia es otra de sus grande- Editorial Letras 23. (Todas las citas 19Ángel Augier,
tas y se refleja en el Himno Nacional, “morir por la patria do atrás y que anhela rencontrar. La nostalgia del suelo nati- zas, a pesar de esos defectos que no han de excusársele, a Cubanas, Instituto del de la obra de Here- ídem, p. 11.
es vivir”. vo, originada por la novia y la familia, bosqueja en su espíritu no ser porque estaban consentidos en su tiempo, y aún se Libro, p. 43. dia pertenecen a esta 20“A Alpino”, Heredia,
Tiempo después, desterrado y en viaje de Estados Unidos la idea y la intuición de la patria, a la que ansía retornar. El tenían por gala: porque la poesía, que es arte, no vale dis- 3Roberto Méndez edición). ídem, p. 10.
a México –al cual le cantó en muchas ocasiones y hasta poema es, a la vez, claro ejemplo del patriotismo herediano, culparla con que es patriótica o filosófica, sino que ha de Martínez (2008): En 10Max Henríquez 21 ídem, p. 83.
intentó crear para la nación azteca un Himno Nacional–, de su anticolonialismo: la cocción de la palabra patria y las resistir como el bronce y vibrar como la porcelana” 27. la paz de estos de- Ureña, ídem. 22Ídem, p. 100.
vuelve a divisar en el mar la isla lejana que se repite como ideas independentistas del bardo, de un sedimento de país La cambiante situación política de México lo desilusionó. El siertos. Pinar del Río 11“El desamor”, 23José Martí (1976):
un quejo, como un largo acorde doloroso. Heredia divisa y Nación: ¡Cuba! Al fin te verás libre y pura/ como el aire de poeta civil había enmudecido. La fe que aprendió de niño, y Ediciones Almargen, Heredia, p. 35. Obras Completas. La
las alturas del Pan de Matanzas, al que también le cantaría luz que respiras/ cual las ondas hirvientes que miras/ de tus un triste anhelo a Cuba, le inspiraron sus Últimos versos. Mu- Editorial Cauce, p. 18. 12“Placeres de la me- Habana: Editorial de
Plácido, y en donde esperan la madre, los amigos, la novia; playas la arena besar/ Aunque viles traidores te sirvan/ del rió en la ciudad de México, el 12 de mayo de 1839. Sus restos 4Cintio Vitier, ídem, lancolía”, Heredia, p. Ciencias Sociales,
escribe entonces el famoso “Himno del desterrado” (1825). tirano es inútil la saña/ que no en vano entre Cuba y España/ terminaron luego en una tumba común y hoy ni una lápida p. 44. 190. Heredia inaugu- ICL, p. 174-175.
Pero esta isla no es igual a la de otros poemas: es una isla tiende inmenso sus olas el mar 25. identifica el lugar. Tenía treinta y cinco años. 5Max Henríquez ra, además, la poesía 24Heredia, ídem,
doblemente lejana, isla imposible, a la que solo podrá vol- En su poesía Heredia refleja, en medio de la belleza edé- En las cataratas del Niágara una placa de bronce, con el Ureña (2006): Pano- al/del mar. Véase su p. 114.
ver por poco tiempo, enfermo y desilusionado, tildado de nica de la isla, único ámbito en que circunscribía nuestra rostro del poeta y varias estrofas de su conocida oda, re- rama histórico de la canto “Al océano”, 25Ídem, p. 117.
“ángel caído” por Domingo del Monte, acogiéndose a una poesía antes de Heredia, los problemas de la conciencia, los cuerdan la visita que el 15 de julio de 1824 hiciera a ese sitio literatura cubana, que, dado la misma 26Cintio Vitier, ídem,
amnistía vigente y bajando la cabeza ante el Capitán Gene- ideales, la indignación. Al deslumbramiento de la naturale- el primer gran poeta de Cuba y América Latina. Mientras, t. 1, La Habana: Edi- vida trashumante y p. 88.
ral Miguel Tacón. za se antepone la vigilia, la preocupación por el destino del Heredia sigue escuchando, en los placeres de la melancolía torial Félix Varela, hasta cierto punto 27José Martí: Obras
Quizá sea Martí quien mejor defina los días del regreso de país, el sentimiento cada vez más agudo, camino al odio y insular, el precipitar de ese inmenso “trueno de agua” que 2006, p. 131. errante del poeta, es completas, ídem,
Heredia a Cuba: “Y al ver Heredia criminal a la libertad, y la ira del espíritu contra el opresor, la responsabilidad por es el Niágara. Tratando de ver, entre los torrentes, una pal- 6Ángel Augier elemento habitual de p. 137.
ambiciosa como la tiranía, se cubrió el rostro con la capa de la patria y su destino. Heredia, además de los elementos ma cubana erguirse a las alturas. (2003): “La poesía de su lira.
tempestad, y comenzó a morir. [...] Si para vivir era preciso cubanos que define e interioriza, es el primero de nuestros José María Heredia”, 13Ídem.
aceptar con la sonrisa mansa la complicidad con los lison- poetas que le infunde aliento espiritual al paisaje cubano, y en Obra poética, 14Heredia, ídem, p.
jeros, con los hipócritas, con los malignos, con los vanos, él el primero también que valora la isla en función de la dis- José María Heredia, 223.
no quería sonreír ni vivir [...] transparente ya la mano noble tancia, de la lejanía del exilio en que vivió el poeta: atmós- La Habana: Editorial 15Jorge Mañach,

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JESSICA PÉREZ QUESADA

Yo quiero hacer de la fibra del té


frontera en mi mundo
y pondré una trencita verde alrededor de mis piernas
y mi puente será el tuyo de jazmín pautado
Para tus pies y los míos
Para macerar frutos secos en vino
Yo quiero estar cerca y no quemar
Ser de la fibra del té
Papel de china
Lamparita de lienzo
Quebrándose

El cuerpo ambivalente al que solo le ves


la espalda se va
Eternamente se va
A pesar de tus círculos
A pesar de tu oblicuidad y tus piernas rotas
Él tiene la espalda, la nuca, las corvas ambivalentes
Irse es su signo y se va

Sucedió un día

Sucedió el martes aquel y vine desnuda y frágil


más o menos como ahora
Mi madre me amaba y mi desnudez era hermosa
y aún así nadie reparaba en ella
Y lloraba porque eso era estar viva
más o menos como ahora
y estaba bien

Amo el emor de las tardes amarillas


dejar abiertas las ventanas y que se humedezca todo
entonces el corazón es un mendrugo
y las aves que aman mi amor por las tardes amarillas
entran a la humedad y se lo llevan todo
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DANIELA DÍAZ Qué había

Había un grabado colgando del espejo,


un garabato lúdico en la mesa
desde la última vez que nos vimos.
Herejía Una foto sin gusto ni gestos violáceos

I ¿Qué había?
Dios inventó los miércoles. Un montón de cejijuntos papeles,
Construye el sollozar del clarinete, cabalga por las uñas. amontonados en la esquina de la cama.
Había una noche, solo una noche
Quise probar mi inocencia. Escribir sin miedo a las arañas. de amor entre las sábanas.
Voy directo a la cúspide de tus arrugas no existentes.
Había tanto amor,
Si te beso y olvidas los pies, ya no importa… pero no sabías…
¡Ya no importa cuánta vejez se acumula en estos años!

II
Dios inventó el clarinete. La Santa Inquisición y el ángel
La esencia exótica que deambula como mágica bruja,
ansiosa de beber la fragancia de tus óleos.
-¿Qué condena será mi desafío en los años venideros?
¿Mis tobillos…? Humm… Mis tobillos Hoy me prestan la laguna, la tierra blanca que se
están envueltos en esmalte. colma de sombras y fantasmas.
Critica de llagas a punto de extraviarse.
Dios inventó los miércoles como días comunes. La complicidad de los demonios me empaliza. El
Yo, creyéndome Dios, reinventé la flauta canto de los ángeles es la carne con que arman mis
para amarte como Dios ama el clarinete. pedazos; carne desnuda de orgías benditas.
-¿Qué paciencia tendrá Dios ante los escombros?
…y Dios, más presente que la nada, se aprovecha de
mis senos y me erige distinta a su hojarasca, quizás,
para devolverme los orgasmos, las penetraciones
soñolientas, los llantos.
Me asaltan las dudas de los hombres. Temibles, los
caídos como él, los demonios y mis ángeles.
-¿Cuántos escalones subiré esta madrugada?
El frío envejece, no lo escucho.
…y para cada flor los seres, vuelven a nacer.

12 • Neodual Neodual • 13
Amaya A. Alvarez

Yo no he sido (son estos siglos) Verás que no fue mi error.


Si te digo que respeto lo simple
Lo que pensé cuando leí: Porque no hay ética de vida mejor
“¿Así que quieres ser escritor?” Y que ese respeto no significa amor,
Charles Bukowski No te ciegues cuando incluso otros te alerten,
Porque no he sido yo.
Si me buscan en lo que escribo,
Las máculas de la inconstancia,
Tengan por seguro que yo no he sido,
Es más de la fiebre de estos siglos.
Si hallasen en mis cuartillas
Palabras rudas hoy, vacías mañana,
Es porque por mí hechas no han sido. Palíndromos
Si blandiendo las teclas,
Creen que equivocando la posición del alfabeto
Dije magenta donde debí decir deslucido, Impulso de perseguir a un desconocido
O maldije esa vez lo que luego bendije, Que no es lo mismo que seguir
Asegúrense de que lleva mi nombre, Lo que no se conoce.
Pues no es esa mi huella. Impulso realizable,
Si una vez parecí que escribí por ti, Mas juro que este jalón
Que eres todo, que son todos, Lleva un móvil distinto, infinito.
Cuando en realidad solo hablaba de mí, Juro que no me repito, que no soy así de monógama,
Les garantizo: yo no he sido. Que cada día no pienso lo mismo:
Si escribiendo en prosa certifiqué la aurora La misma copa, cualquier vino,
Y luego una canción me dio una nota distinta Similares palabras,
Aseverando que la muerte es definitiva Otra expresión no concibo,
No fui yo quien empuñó la tinta Mas la presión es otra,
Con la que jamás escribí. Si bien se parecen todos los ruidos.
Si mis melodías graves parecieron una vez tortuosas ¡Vaya suerte!
Y después todas mieles,
Cerciórate de que lleven mi estirpe,
De que mi sangre por ellas han corrido
Pues ese estar y no estar
No es lo que usualmente anida en mí.
Si por el cansancio equivoqué
Lo que en cada día pongo por rutina
Y anhelé con fervor lo trascendente,
La huida, el sismo, un apagón,
Y llegado el gran día me arrepentí de la petición,

14 • Neodual Neodual • 15
AMAYA A. ALVAREZ

Para qué o para quién

¿Para qué edad escribo?


Basta la sola pregunta:
Al viejo, al adulto, al chiquillo.
¿Para una era menos abrupta?

A los tiempos calmos o compulsivos,


El de entreguerras quizás,
A un batallón que avanza efusivo,
Al ajedrecista y su pieza,

La última pieza antes de rematar,


Al pasado que acabó de ser,
A las alegrías que me has de dar,
Ese misterio que no quiere ceder,

El misterio del futuro próximo,


Ya que el mediato es sumatoria:
Es pasado reciente más pasado lejano
Más el pasado pretérito de la memoria.

¿A los tiempos, intervalos todos?


Tanto abarcar envejece;
Mejor la edad en sus tiempos diversos:
Tanto oprimir envilece.

Para no ser jamás sabia,


Me pregunto y me respondo,
Sostengo la esencia, la savia,
Me mantengo indiferente o correspondo

Conjugar según nuestro idioma


Afronta límite y desafío:
En el verbo un pretexto, primer axioma;
En la adarga el consuelo que da el hastío.

16 • Neodual Neodual • 17
La Revista de Avance fue un proyecto juvenil en rente que esta fuera la primera publicación del co- la cual Cuba no escapaba en creación o estudio. Boti
aquel lejano 1927. Recientemente cumplió su noven- lectivo de Avance, debido a la labor divulgadora de se centra en un análisis técnico de la poesía que se
ta aniversario y es oportuno resaltar los méritos de la obra de Luis de Góngora que los avancistas asu- instauraba en la época y de sus antecedentes direc-
esa publicación para la literatura cubana. Pero el mieron. Incluso, el primer número de la revista fue tos. Suárez Solis, en cambio, amplía su discurso a la
proyecto avancista no se limitó solo al ámbito de lanzado el 23 de mayo de 1927 al cumplirse el cente- dicotomía entre lo nuevo y lo viejo, lo clásico y la
la revista. Muchos de sus editores y colaboradores nario de la muerte del que muchos consideran como vanguardia; y para ello se sirve de ejemplos en los
se dedicaban a impartir conferencias y desarrollar el mejor poeta del Siglo de Oro español. campos de las artes plásticas y la literatura.
investigaciones que, en su mayoría, buscaban resca- El año 1928 constituyó el más prolífico, con seis Marinello había impartido la conferencia de la que
tar los valores artísticos más puros del siglo ante- nuevos textos apadrinados por el sello Avance. Es- resultó su libro en los salones de la Sociedad Econó-
rior; impulsar la labor tos serían: Indagación del Choteo y Goya, de Jorge mica de Amigos del País, con motivo del 135 aniver-

PUBLICACIONES
de creadores, en es- Mañach; Tres temas sobre la nueva poesía, de Regi- sario de su fundación. En ella, el intelectual reflexio-
pecial de las artes no E. Boti; Molde, imagen, por Rafael Suárez Solís; nó acerca de la labor biológica, histórica y social de
plásticas, adscritos a Juventud y vejez, por Juan Marinello; y Un viaje a los jóvenes; de cómo la Isla se dejaba avejentar por
las corrientes de van- la Rusia Roja por Sergio Carbó. La mayoría de estos la falta de inconformidad y rebeldía que debía carac-

DEL SELLO
guardia; y promover textos fueron originalmente conferencias, pero a la terizar a la juventud y permitir que una civilización
el conocimiento. hora de publicarlos se organizaron a modo de ensa- avanzara.
Para lograr un mayor yos, en los que sus autores abordaron una variedad En Un viaje a la Rusia Roja, Carbó relata sus ex-

AVANCE
alcance y difusión de de criterios donde predominaron las temáticas so- periencias y opiniones derivadas de un viaje que
sus ideas crearon una ciológicas y artísticas. realizara a la Rusia Soviética. Este libro, donde cada
casa editorial que tra- De los seis volúmenes de 1928 se destaca la origi- capítulo es una crónica, también responde a una de

——
bajó paralelamente nalidad de Indagación del Choteo, que asumió el las características de la Revista de Avance, la cual
con la revista, y la reto de abordar un tema que parecía intrascendente careció de homogeneidad política, pues sus editores
imitó al mantener en y desarrollarlo con enfoques etimológicos, socioló- y colaboradores principales pertenecieron en esa
Náthaly Hernández Chávez las portadas de los
libros el número del
gicos y culturales. Mañach argumentaría en defensa
del tema: “El concepto de lo serio es en sí sobrema-
época y en épocas posteriores a distintas filiaciones,
que irían desde el Partido Comunista hasta el Parti-
año correspondiente nera difuso”.1 do Ortodoxo y a otras organizaciones como el ABC.
a la publicación. Las temáticas de las catorce pu- En Goya, un breve texto, Mañach afila sus armas como Bajo la insignia de 1929, el sello editorial avancista
blicaciones que llegaron a feliz puerto en los casi futuro biógrafo. Sin embargo, lo que le interesó sobre rompió con su tradición exclusiva de libros de ensa-
cuatro años que duró la casa editorial reflejan los todo del artista español fue la evolución de su obra, de yos, y se aventuró también a la promoción literaria
propósitos de la revista, la heterogeneidad de crite- la que el cubano se muestra un gran conocedor. De ella con el poemario Kodak-ensueño, de Regino E. Boti
rios artísticos, estéticos, económicos, ideológicos y resalta las distintas fases por las cuales atravesó dicha y con la narrativa en El renuevo y otros cuentos, de
sociales de sus editores y colaboradores. pintura y argumenta la influencia que tuvo en las van- Carlos Montenegro. Publicaron además una mono-
En 1927, primer año de la editorial, solo se publicó guardias pictóricas del siglo XX. grafía titulada El latifundismo en la economía cuba-
Góngora y la nueva poesía, que fue una conferencia Por otra parte, Tres temas sobre la nueva poesía y na, de Raúl Maestri, y la conferencia El documento
impartida por Francisco Ichaso en la Asociación de Molde, imagen, se centran en la defensa de la van- y la reconstrucción histórica, de la autoría de José
Pintores y Escultores de La Habana. Resulta cohe- guardia estética que se producía en el mundo, y de María Chacón y Calvo; ambos textos destacaron por

Neodual • 19
la particularidad de sus temas. norteamericanas para apoderarse paulatinamente matográfica, en un inesperado diálogo de voces que vedosas propuestas en comunión con las vanguar-
Kodak-ensueño fue el tercero de los cuatro volúme- de Cuba. se confunden y se oponen, como las lenguas de los dias poéticas de Cuba y el mundo.
nes de poesía que publicara en vida el poeta y en- Para el año 1930 tres nuevos libros salieron a la luz, hombres en el pasaje bíblico al cual remite el título La vigencia del proyecto editorial avancista resulta
sayista cubano Regino E. Boti, y que es muestra del justo antes del cierre de la editorial y la revista: el del poemario. innegable, al analizar que muchas de las problemáti-
dinamismo sensorial del autor y su búsqueda de la ensayo Sobre la inquietud cubana, de Marinello, y Esos fueron los catorce títulos que los editores logra- cas que plantearon siguen sin hallar solución, y que
belleza a través de la descripción y la re-creación del los poemarios Trópico, del escritor hispano-cubano ron publicar junto con su revista durante casi cuatro muchos de los artistas y escritores cuya obra promo-
paisaje en textos de enorme visualidad. Eugenio Florit, y Torre de Babel, del guatemalteco años de esfuerzos y éxitos. Ambas labores se vieron vieron es necesario darlos a conocer aún hoy, con el
El renuevo y otros cuentos, de Montenegro, se di- Luis Cardoza y Aragón. suspendidas luego de los sucesos de la manifestación fin de que las nuevas generaciones no pierdan de
vidió en dos partes: “Cuentos de hombres libres” y La génesis del ensayo de Marinello ocurrió por una universitaria del 30 de septiembre de 1930, en la que vista la necesidad de un desarrollo intelectual y es-
“Cuentos de presidiarios”. Estos relatos giran alre- convocatoria que la revista francesa Les Cahien de se produce la detención de Marinello. piritual para el crecimiento de una nación.
dedor de la tragedia cotidiana de hombres que viven l’Etoile dirigiera a escritores de Europa y América, Resulta curioso que un proyecto con tan poco tiem- Estos catorce textos representan una síntesis del
en ambientes marginales o que se sienten margina- donde solicitaba sus opiniones acerca de las inquie- po de duración y con una producción no tan amplia, pensamiento de esa generación de intelectuales por
les en su ambiente; dígase campesinos pobres, ma- tudes centrales de la época. Marinello respondió la cincuenta números de la revista y catorce libros, los temas que trató y la forma en que lo hizo, no solo
rinos, mineros o presidiarios. Impresionan del texto encuesta a partir de múltiples perspectivas: la políti- como fuera Revista de Avance, anunciara su cierre para manifestar sus propias inquietudes, sino como
el realismo, lo fluido y la sencillez del lenguaje de un ca, la economía, la actividad creadora y el despertar antes de la suspensión de las garantías constitucio- reflejo de los problemas sociales, estéticos y lite-
autor que utiliza más la experiencia que la imagina- de la conciencia social; todos enfocados en la reali- nales y de la instauración de la censura, que sabían rarios de su tiempo. Ellos no pretendían poseer las
ción, ya que su propia vida estuvo llena de aventu- dad cubana. no tardaría. Su postura fue digna hasta en el final, respuestas definitivas a tales problemáticas, pero en
ras que lo llevaron a conocer los lugares y personas Resultó curiosa la publicación en el mismo año de si no podían mantener su revista con la misma li- su accionar buscaron y lograron una contribución
de los cuales relata; incluso, en esos momentos se dos poemarios tan distintos como los mencionados. bertad ideológica y creativa a la que acostumbraron al acervo cultural de la Isla y así lo declararon: “Va-
hallaba cumpliendo una larga condena en prisión. Probablemente la intención de los avancistas fue prefirieron cerrarla. A pesar del fin, la revista y su mos hacia un puerto — ¡mítico!, ¡incierto! — ideal de
Cupo a los editores de Avance el descubrimiento lograr el contraste, y con ello enmarcar su política editorial pueden ser valorados de vital importancia plenitud; hacia un espejismo tal vez de mejor ciu-
de Montenegro para las letras cubanas, a las cuales editorial de apertura a diferentes concepciones y es- para conocer ese período de la historia cultural cu- dadanía, de hombría más cabal. Pero no nos hace-
dará más adelante su Hombres sin mujer, una exce- tilos en materia de creación artística, en especial a la bana; además, ellos lograron un impacto enorme en mos demasiadas ilusiones. Lo inmediato en nuestra
lente novela. vanguardia, siempre que el resultado fueran produc- las publicaciones posteriores de factura similar. conciencia, es un apetito de claridad, de novedad, de
José María Chacón y Calvo muestra en la confe- tos de alta calidad estética. Muchas de las mejores páginas de Mañach, Marine- movimiento”.2
rencia su investigación sobre la historia de la docu- Trópico era una muestra del perfeccionismo formal llo, Ichaso y Lizaso se relacionaron con esta revista
mentación histórica en la mayor de las Antillas, y de su autor, que utilizó en él una técnica llena de y su editorial. Amén de organizar la exposición de
demuestra con sólidos argumentos la relevancia de sutilezas y cadencias musicales, con la que rendía Arte nuevo, por la que se considera oficialmente in-
los escritos a la hora de la reconstrucción histórica. culto directo al gongorismo, corriente de moda en- augurado el vanguardismo en Cuba, ellos promovie-
Con El latifundismo en la economía cubana, Raúl tre los poetas españoles de la Generación del 27. En ron este nuevo arte en las ilustraciones de la revista
Maestri esbozó un análisis crítico del tema, y de- cambio, Torre de Babel rompía con la forma y el con- y en ensayos como Molde, imagen. Destaca el com- 1Jorge Mañach: 2Revista de Avance,
mostró, con ejemplos lúcidos y documentados, la tenido del verso tradicional, al usar una prosa poé- promiso con la poesía de reciente factura, no solo en Indagación del año I, no. I, 15 de
creciente deformación de las relaciones económi- tica de marcado carácter simbolista, que rozaba en los ensayos Góngora y la nueva poesía y Tres temas Choteo, Ediciones marzo de 1927, p. 1.
cas en la Isla. Aquí el autor se abstiene de ofrecer el surrealismo, y donde resaltaban la yuxtaposición sobre la nueva poesía, sino en la publicación de tres 1928. Revista de
soluciones a los problemas señalados, pero es me- de monólogos interiores y el coloquialismo. Aquí se poemarios de gran calidad, de autores que en aquel avance, La Habana,
morable su denuncia de las maniobras latifundistas utiliza el estilo “naturaleza muerta” o visión cine- momento se empezaban a conocer y que traían no- 1928, p. 5.

20 • Neodual Neodual • 21
Vértigo Materia reciclable

Y sin embargo…
Galileo Cuando alguna tarde de mayo se inunde
La espina después del sol persistente de abril
dorsal de la Tierra
pondré la ceniza a humedecer
aguijonea mi planta
YANELYS ENCINOSA palpo su pulso en la palma de mi mano
un temblor la amasaré compacta
el pánico dosificaré
quiebro el talón en oportunas
en el impulso de lanzarme a la carrera fracciones
toda la masa
el eje giratorio que me hinca
la beberé cautelosa
tiende a fijarme a su moldura
a frenar mi atrevimiento y atenta un día tras otro
para reciclar su antiguo ardor
puedo atravesar la planicie con ese vestigio de incendio fértil
correr hacia los bordes de la esfera abonaré el terreno para la próxima cosecha

otros han dictaminado la quietud


dicen plato llano
recipiente estático
peligro en las fronteras
los que ordenan la quietud
dicen pira Fin de página
fuego a la evidencia

me inquietan la inercia y la gravedad


el posible rubor en el roce del abismo Hoy he vuelto a la palabra
la amenaza de arder la redondez y la apetencia ha vuelto
duele que no digan eje giratorio de la Tierra me he devuelto al principio
que clava la espina en el pie
que olviden el diámetro de la esfera heme aquí
de regreso a donde siempre he estado
el rumor del fuego
a donde me he ocultado de mí misma
el eje en el talón
la posible caída hoy he vuelto a pronunciarme
duelen anunciarme
inquietan uncirme
y sin embargo ungirme
me en el silencio.
mue
vo
y

22 • Neodual Neodual • 23
Recato

YANELYS ENCINOSA Por si las moscas vienen a posarse


póngome la cinta
de este lado del cuello
Un nombre resbalándose en mi hondura

A J. A. mientras me anudo el lazo


se escurre sobre el lugar exacto de la abertura
de tal manera
El espacio donde dice que el sugerente comodín
aquí debe estar tu cuerpo funciona como adorno y como tapón
tiene un hueco resbalándose
la elegante textura de la seda
en el borde
se aviene al refinamiento
boca abierta
resecada justo para despistar a los curiosos
quejumbrosa y a quienes pretendan acusar
que intenta vanamente pronunciarte falta de compostura
la meticulosa hechura del nudo
el hueco donde dice se ajusta al torrente con tal precisión
aquí debe estar mi espacio que la sangre no logra salir a borbotones
tiene un cuerpo resbalándose
en la boca
una vez corregida la desmesura del afluente
borde abierto
resecado podría abandonar el artilugio
quebradizo y ventilar sin dilación la herida
que pretende lentamente desbordarme pero descubierta
vulnerable
la boca que no dice quedaría expuesta a la contaminación
aquí está mi cuerpo sin tu cuerpo como las abiertas llagas
tiene un borde resbalándose
de un animal corrompiéndose a la intemperie
en la hondura
hueco seco
espacioso mi sangre amenaza aún con la hemorragia
desbordado he de cuidar mi salud
que no alcanza a retenerte mejor me anudo el lazo
ni a nombrarte por si las moscas

24 • Neodual Neodual • 25
Te presiento esta noche en las ondas del río Constelada palabra llegada desde lejos
que miro sujetando la mano de mi madre. a dónde huyo si me alcanzas siempre,
Eres una presencia que me invento, una voz que me nombra a dónde van las mieles de tu lumbre,
desde el fondo lejano, y no puedo alcanzar porque aún no cómo alcanzar sin pena el horizonte
es tiempo. donde habita el futuro que te nombra.
Pero yo sé que estás, mi amor de monte y brasa, Cómo andar bajo el peso de tu manto
REYNA ESPERANZA CRUZ y que rozas mi mano disfrazado de lluvia, sé que el toque en si apenas soy la niña que llora atardeceres
mi rostro la extraña hija de la anciana pobre
no es el viento, es tu mano, que alguna vez encontraré que mece en una rama del ciruelo
en un sitio que no han visto mis ojos. su tedio inmemorial, su desamparo de paloma.
Pero si has de venir ¿por qué no llegas en esta noche de Cansada de acatar razones tan dispersas,
fulgor y llovizna? de separar, juntar, mezclar trocitos de cordura
¿Por qué no asustas a mi temor de niña, por qué no estoy sentada en medio de la noche antigua
vienes ya, esperando inminentes llegadas, arribos silenciosos
venciendo los destinos, por qué no ahuyentas cualquier del cuerpo que un día será espíritu del mío
Habitante de la niebla que azulea en presencia que yace ahora a un siglo de llovizna,
la línea inalcanzable que no sea la tuya? Es imposible, amor, ya lo he sabido: inmerso en el cantar de los planetas,
rayito de agua mansa que horada las paredes de mi canto, que he de esperar al tiempo, que herirán nuestros nombres en la azarosa luz de su presente.
invasión de luciérnagas y abejas en busca de mi música, con cuchillos de sombra, y que vendrán miradas
en busca de mis ojos para abrirlos al mar de tu presencia. donde creeremos ver nuestra mirada, y que será mentira
Presencia inigualable, ah, invisible arquero de mi flechas cualquier otra verdad. Y hoy que ha crecido el río he llegado
disparadas a ciegas, pretendiendo alcanzar tu lejanía. hasta aquí,
Soldadito de plomo de mis guerras, emisario del cielo prendida de la mano de mi madre que quiso, sin saber,
¡Cuánto tardas! encontrar para mí un cascabel de paz,
¿Se desmayó la luz, o estás dormido, esperando mi beso una campana, emisaria de besos que traerás algún día,
adolescente, mi presentido hombre, mi duende alucinado,
las hormigas hambrientas de mi voz? Di, ¿dónde escondes ángel de mi armonía, guardián de mi inquietud.
Estoy junto a la lumbre de un noviembre las flores de la baría y el almendro, dónde guardas los
que cambia cuchillos de palabras
su esqueleto raído por un traje de arbustos ideales. que me herirán tan dulcemente, donde has dejado el cetro
Estoy hasta los labios aterida de luz, en espera del reino inexistente al que me llevarás
del ángel obcecado por mil voces, que habita allí en brazos de un antiguo relinchar de unicornios?
en las líneas de tus manos, hermanas desde siempre En las almenas del tiempo, en la balaustrada del recuerdo
de mis manos, que buscan frutos para regalarte, que buscan espero tu llegada, recostada al vacío, espero tu llegada,
oquedades y besos en la tierra, en las aguas del tiempo, ambiguo ruiseñor que canta mis secretos,
en la osada manía de tus pasos distantes, césped donde recuesto mi cansancio,
en la siempre cambiante virtud de este espejismo. altarcito en que dejo mi ofrenda de pasión.

26 • Neodual Neodual • 27
Apertura Donde los ojos lavan sus imágenes

I
la vieja ciudad se aísla de la noche bajo la clara luz de marzo he padecido los encantos
noche de alabastro de la infelicidad. me he sometido al desolado placer
sobre el ojo de la noche. que dejan las ciudades
RAMÓN ELÍAS LAFFITA nace un sol filtrado por la sombra al peso del sol sobre mis ojos
y la luz es el polvo como el que va a la guerra sin escudo
margen o espacio de los días. como el que va a morir junto a la tarde.
en su cambiante espíritu he padecido los horrores de una libertad
la ciudad nos contiene que no me pertenece/ de un aislamiento o represión
nos eleva/ como vapor de agua que tampoco me pertenecen. cuando la noche
que el frío oculta. es abatida por el mar/ callo para vivir.
así de elíptica es la ciudad. miento para saberme frágil.
selva que nos castiga y llama. para no languidecer ante la culpa
y el martirio por los que amo.
II bajo ciertos aullidos de realidad
si la ciudad se aísla busco la posible perfección en mis palabras
del ojo de la noche en las manos de quienes alzan su austeridad
los portales se alejan del caminante. pese al silencio atroz que los corroe.
el sepia forma con su rostro expongo la vida como en un gran museo
las columnas las aldabas ante el lavabo y el suburbio.
donde todo sucumbe. ante la casa/ el día y sus salutaciones
desde la inmerecida madrugada con la misma ilusión del que mira una foto
trasgredo y hablo del que busca un sendero para evadirse.
y aunque me baste para salmodiar el tiempo he padecido los encantos de la infelicidad
no basta la memoria allí/ donde los ojos lavan sus imágenes.
si deseas limpiar de musgo el aire
de hollín a las palabras.
el caminante busca el sitio exacto
donde sanar la llaga
donde alistarse para borrar el óxido Abre los ojos el jardín y sobre un colchón de hojas
que la sombra acumula. secas la llama quiere eternizarse y ser solo viento. su anhelo
en los lavabos/ en las alcantarillas es permanecer en el instante de quienes la contemplan.
los bardos también buscan el árbol padecerá en su momento lo que el tiempo no pudo
la demasiada luz/ el opio. retener. será la luz espíritu dañado.
será la llama quien devore al bosque.
será abismo.

28 • Neodual Neodual • 29
Muerte en la madrugada

Mi madre ha muerto en la madrugada. Ella y su cuer-


po giran tranquilos sobre el mío que llora sin descanso;
martillea mi sien el pensamiento. Mi cabeza escapa de
ZURELYS LÓPEZ AMAYA Sabía del polvo y la ceniza lo real y se esconde inevitable como una hormiga que
huye detrás de las tablas. Comer hormigas también re-
A Alberto R. Tosca quiere de la quietud. Analizan huecos, el vértigo de la
corriente hacia el estómago lleno de antenas rojas que
He escuchado tu música, ya no volverán a verse. Mi madre es esa luz. Huyo y
Muchacha en India el lamento cotidiano y la añoranza. muero junto a ella. Desaparezco por momentos en su
He sido la ceniza para ver cómo juegas a la muerte, nube infantil, en sus ojos dormidos. Ojos que tra-
A Verónica Aranda para sanar tu cuerpo antes de la ventisca y sus árboles to de abrir, de despertar como se despierta la
caídos. mañana en el desierto. Piel fría y sudorosa
Nada pude escuchar entre las adicciones de tu calle, que no entiendo. Viene a decirme que ha
Supe del miedo y la hoguera alucinante de los solo un suspiro amargo me detuvo en la hojarasca. escapado hacia arriba, que flota como
mendigos, La Candelaria espera, la pluma del ángel y vuela intranqui-
de sus pies quemados por el sol, Monserrate nos alberga en el invierno. la mirando los ojos de mi hija, el grito
del cuerpo ausente y leproso en las calles del silencio. Escuché tus lamentos, de su esófago, mudo grito, raro grito
Amé el cítrico distante de la cúspide, los escuché y no quise escucharlos. que se expande con temor hacia la
las paredes de los templos y su río Ganges. nada. La muerte es eso: mortaja, corte
Divisé en la espesura inválidos y mustios vendedores, trasversal del equilibrio para avisar
cronistas de la noche. que ya no está, que ha muerto como
Adiviné el cúmulo de aves que atraviesan la frontera Tocando fondo una flor, como una estrella, como el
y percibí el miedo a la muerte en la adivinación. ave sin miedo de no vernos. Rezo aún
El sendero y su trampa huelen a restos de animal en tu sonrisa, en tus manos jugando “el
nauseabundo. Sigo hacia los mares que envuelven el paseo, solitario” con tu olor a violetas, ese olor
Mujer que camina con ladrillos en la cabeza, la cúspide feliz del horizonte. que trasmite la pureza del espíritu. ¿Cómo
ropa sucia y henchida que se aleja. Toco fondo hacia un mejor lugar. no me llamaste para cruzar las calles de
Percibí el hedor y la cortina de humo que disipa La nieve cubre mis zapatos, mi Habana? No me silbaste para que supié-
los sueños, pisan las huellas de un pasado de reyes, ramos la llegada del invierno. Madre viene. Su
la chicha y la hierba que se pasan como ritos crepúsculo infantil. abrazo es mi despegue nocturno, aire y luz. Agua
sin nombre No se fíen del vagabundo en las esquinas, libre y tranquila en la marea.
para enajenarse del paseo a la muerte. soy mi vagabundo,
He podido vivir esos intensos caminos hacia el ocio, mi estola no cubre el espacio que sangra.
la lluvia en Katmandú y el invierno en Nueva Delhi. Soy el viajero que no se explica hacia dónde hay que huir,
En mi isla hay apagones de verano. ¿cómo han sido las calles y sus nombres?

30 • Neodual Neodual • 31
Consejo a Antonin Artaud Cuerpos

nos creamos un mundo denso de materia


No busques la cordura/ Artaud/ más allá del comienzo que va desviando nuestra razón de la caída
ni en los recovecos de la memoria: la realidad patea con de la soledad irremediable que nos ronda.
fuerza/ empuja hacia lindes que no creemos auténticos/ Yanira Marimón
MILHO MONTENEGRO cuando vemos nuestras manos manchadas del fango de
la culpa/ y el aire trae a cuestas el cuerpo podrido de los Llegan cada noche/ caen en mi lecho como insectos en
sueños/ que nada valieron en los intentos/ No persigas la trampa de la luz/ Los deslumbro con rituales de se-
el hilo de la razón/ una huella de discernimiento/ poco ducción/ posturas para deshilar el tedio de la madru-
has de descubrir en el charco donde fenecen las pala- gada/ aparentar la vida/ Sobre sus pieles trazo poemas
bras/ a pesar de los gestos con que procuramos engañar (algunos valen la pena a pesar del simulacro)/ confieso
la pupila incansable de la muerte/ y las apariencias que realidades y alabanzas que solo conducen a las formas
Infancia se ofrecen en cada acto para escapar del vaho de la con- Fragmento del diario apócrifo de Verlaine del placer/ un sabor escurridizo que nunca he logrado
ciencia/ Los dioses bostezan sobre nuestras espaldas/ guardar en mis sentidos —aún en las tardes más áspe-
¿Si el vacío empuja nuestra espalda hacia dónde corremos? sus tímpanos desandan eriales lejos de los corazones ras de nostalgia y dejadez—/ Muchachos que beben de
Zurelys López Amaya que aclaman una porción de fe/ No persistas/ Artaud: Desando las calles más lóbregas de París/ la herrumbre mi vientre el veneno tibio de la soledad/ y se desmoro-
esas voces que aúllan dentro/ los escenarios que habitan y pestilencia de estos páramos hacen lazos en mi alma/ nan como estatuas de arena/ ignorando la levedad de
tus desvelos son la única circunstancia donde es posible para sujetar la culpa que no alcanzo a disipar/ en cada sus prodigios ante la apatía que me rige/ Cuerpos persi-
Observo un álbum de fotos/ hurgo en las llagas de mi una fracción del ser/ Tu dolor es solo lo que han queri- trago de absenta con que calcino las entrañas/ El desti- guiendo un espejismo/ una quimera: soy como un fantas-
memoria y todo trasmuta en lastre (dolor que cae al do contarte como una insólita certeza/ pero la verdad no arrastra hacia la soledad/ allí donde esta conciencia ma/ no dejo huellas/ no empaño el cristal con el vaho de
fondo de estas sienes como piedras en un pozo)/ Vuelvo de los hombres es tan efímera como sus propias existen- solo atina a perpetuar el olor del arma usada en tu con- mi respiración/ Solo entre sus sexos me irrigo de calor y
a descubrir el rostro de entonces/ criatura que no ima- cias: entre los muros del delirio permanecerás a salvo/ tra/ la herida de tu muñeca izquierda/ aquellas noches pujanza (fugacidad de un momento)/ Cuando se alejan
ginó la muerte de su Padre/ dejando dolor esparcido sin estigmas sobre la índole que te ampara/ Si cruzas el en la cárcel de Mons/ en que fui confinado a pesar de regresa mi circunstancia de espectro/ cadáver acechan-
igual que arena/ promesas que murieron tras el silencio umbral el caos de la lógica golpeará los ojos/ acabarás los ruegos/ No fue mi culpa/ Rimbaud/ había voces que do la existencia: dádiva que conceden aquellos en cada
de sus ojos/ el adiós negado/ Ninguna plegaria ofreció despertando en la miseria de vivir. confesaban tus traiciones/ cuerpos a los que te entrega- ilusión con que logro engañarlos.
regreso/ el abrazo/ Tanto distanciamiento quebrantó bas/ aún cuando oscuros demonios engullían la paz que
excusas que inventé ante la ausencia/ bajo mis pies se ofrecí a cambio de tu afecto/ Por eso disparé dos veces/
hicieron lodo artificios/ evocaciones/ Hundí mis manos Rimbaud/ me regocijé de la sangre —como vindicación—/
en el fango de la espera (tentativa de asir algo sustan- abjurando mi libertad/ Hoy vago por las calles más su-
cial)/ pero solo develé vástagos del vacío/ la nada como cias de París: sólo me acompañan lémures de la prisión
pradera enorme ante el temblor de mis huesos/ Hoy miro de Mons/ el estrépito del arma/ el olor de la sangre/ y
al infante de la fotografía/ su sonrisa (maldición de algo contemplo de lejos el esplendor de tu vida/ mientras la
que no acaba/ existiendo siempre) y comprendo el sig- pobreza y la muerte disputan mi nombre.
nificado/ circunstancias que moldean: el mundo es una
pared en que restalla la inocencia/ ruleta rusa donde la
felicidad terminó perdiendo todo/ La infancia es un sitio
lejano/ sin regreso/ donde me creí a salvo/ como en esas
fotos que el tiempo ha comenzado —inexorablemente— a
corromper.

32 • Neodual Neodual • 33
Subterráneo Libélula LLuvia de oscuridad

Siempre lluvia… Relámpagos ya no matan… Es una casa En la Habana todavía no coronan travestis ni sobredo- I
linda, sin recuerdos… Miguel y yo… Omar y yo dibujando sis. Hay ríos y hambres… Serpientes que fuman en las Esta soledad ya sucedió. A cuántos salvaré. Existe pa-
lo más parecido a gente. Siendo niña era mujer. Conti- ojivas de los rectángulos. En La Habana, Madre se es- rir? Soy la hembra más común del hemisferio. Nada me
IRASEMA CRUZ núo aferrada al orden de un cuerpo que has imaginado claviza con el sueño que no tuvo. importa. Un oscuro dolor bordea mi espinazo. Algo
distinto. Omar es mi última primera vez, lo engendraron Nací en tiempos de ruleta. El camino es una yerba más, sucede...
mis ganas de tener un semejante. Amar es duro. Cuando un pueblo que alumbra a ratas con smoking. Si marcho, es decir, quedándome sin ausencia, cuántos
llega, entiendes que no hay libertad. Me la roban. Antes era mujer, una materia distinta a los no me salvarán. De quién vivirían los murciélagos, son
He sido feliz, nunca dejé de creérmelo… Omar tiene car- andamios. Un día rompió las hojas y vomitó la noche. animales-humanos.
ne de soldado… No hay mejor libertad que ser el sueño Debajo de sus piernas habita el cazador hundido en los No me salvarán. Escondí sombras rivales. Fui caudillo
que soñaste, el dolor que supera las clausuras del insom- altares de sí misma. de mercaderes. Me aplastaron la cabeza. Dirán que soy
nio, porque las manos son el principio de la muerte y la Está rota. Vuelta al mutismo que Madre bebe en la boca libre, que huyo para ser atrapada.
muerte es el retorno de la memoria. de Dios. Su final es de tormentas y payasos. La acuso de
existencialista. No escucha… ni a los perros. II
Qué mitad de grito me toca. Corro. Extrañamente hay
lágrimas. Corro. Los diarios transmiten conciertos de
Tras el pájaro sutil de la memoria Transición jazz. Corro. Un niño sin piernas sube el puente de Man-
hattan. Corro… Si el mar conversara me hundiría en sus
vértebras.
El agua esparce la suciedad del viento. Su maloliente fi- Me gusta el camino del agua: vida o silencio del árbol. Si En los parques no hay hojas. Grito? La culpa entiende?
gura consume los pasos del peregrino que llega a la ciu- alguien me observa se dará cuenta de que mi estructura Las piedras son hombres. El hombre, manicomio. Mani-
dad ensartado por agujas de fuego. está muy lejos de aquí... Cuando una mujer tiene los ojos comio, familia. Familia?, hotel sin olores humanos. Los
Con el mismo andar de mariposa, La Habana abre sus del agua y el agua traduce los significados de la luz, es- humanos, estatuas de algodón, amantes sin ojos. Mis
muslos. Mujer que pocos entienden, salitre demoníaco tar desnuda oscila entre la sombra y el ojo perpetuo del ojos?, necesidad de estar muerta. Morir?, donante de llu-
ardiendo sobre la noche que vuela tras el pájaro sutil de hambre. vias. Y la lluvia tributa luz al vacío.
la inocencia. Los caminantes la poseen desde el Cristo De todas las mujeres del universo, el agua es la única
más alto de su vientre hasta su infernal atrevimiento con que poseyéndote, logra un contraste de luz. En las playas
las sombras. La secuestran en copas de nieve, prisione- del mundo ninguna mujer le miente al agua. La memoria
ros de la Atlántida y sonámbulos drogadictos de la es- de una mujer es su sentido de lejanía.
pera. Los océanos tienen menos agua que una mujer, pero no-
La Habana tiene el oscuro olor del cíclope y cansancio sotras vamos a ellos porque hay demasiado desorden en
de siglos en indolencias. Cómo le duelen las manos. El el carácter. Una mujer seca se despide del mundo cuan-
cordón de las olas atraviesa el ojo del navegante al cha- do el mar fue la primera interpretación de un hombre.
potear el círculo de su angustia, aún así lo contagia la Muchas veces el agua me ha dolido. Las estaciones del
pereza y escombros mecidos como gota de alma en el tiempo corresponden a una transición de culpas. Una
Partenón de la Bahía. mujer es noventa por ciento agua.

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LA POÉTICA DE hacia el dibujo y la escritura, inmortalizado por esto
último en la ciudad de los puentes. Su trayectoria edi-

LUIS
__ MARIMÓN
torial estuvo limitada a la publicación de solo dos li-
bros: La decisión de Ulises (1988) y El bibliotecario
del infierno (1992), ambos por Ediciones Matanzas.
Dianett Quintana Solís Estos ejemplares rápidamente agotados en su mo-
mento junto a más de diez títulos inéditos conforman
su obra literaria. Póstumamente se publicaron Heren-
cia de la Soledad (Ediciones Matanzas, 2005) y Cro-
nología del vértigo y del naufragio (Ediciones Unión,
2007). En 1991 obtuvo el Premio José Jacinto Milanés
de la UNEAC en su ciudad.
Solo basta una aproximación a su poética para que
devenga en autor de cabecera. Asumió un estilo de
vida bohemio y se le veía transitar las calles de la
Marina con el alcohol como amigo y los ojos impreg-
nados en llanto. Pero qué se le puede reprochar al
que se convertiría en un ícono de la poesía matance-
ra. La muerte lo abrazó un año después de su partida
De una tímida lectora a el poeta a Las Vegas, que como le dijera a un amigo: si me
más enigmático de mi ciudad voy de Cuba me muero. En entornos desconocidos y
ebrio expiró su vida; sus restos no han sido hallados,
pero como todo un enigma de la ciudad su alma si-
La palabra por sí sola no puede desentrañar un mun- gue rondando entre las calles y los ríos.
do interior, a no ser, que se trate de la de un poeta. La Marimón es el poeta de la generación del 80 que
subjetividad materializada es la conversión en imáge- junto a otros como Raúl Hernández Novás y Ángel
nes hechas para desprender sentido e inquietar a todo Escobar completa el grupo de autores malditos. Las
el que en sus líneas indague. No ancla directamente imágenes que con el verbo recrea constituyen el le-
a una realidad mas abre las posibilidades expresivas gado de una subjetividad que pervive en el fragmen-
y convoca a la introspección, a un análisis individual to más profundo del autor, pero con un alcance ecu-
de cada lector que por sí tendrá una visión diferente ménico y un sentido identificable para todo el que se
de la vida. Universalizar las imágenes devenidas de aproxime a sus líneas.
lo entrañable y que los receptores las hagan suyas es
síntoma del talento de un poeta. Plataformas espaciales de sus
Luis Marimón, hijo venerable de las letras matan-
ceras de la segunda mitad del siglo XX, nació en La
personajes
Habana en 1951. Antes de cumplir un año de edad se El entorno que recrea Marimón se aparta de cual-
trasladó a Matanzas y ahí escribió casi la totalidad quier fineza idealista. Sus escenarios son ambientes
de su obra conocida. De forma autodidacta se inclinó oscuros, y no solo por la estructura física de ellos

Neodual • 37
sino por la soledad que someten al individuo. Situa- un hombre muy culto, transmitió sus saberes sobre imagen que pudiera provocar miedo pero es conmo- Desde sus variantes como ser vivo o como fenecido
ciones extremas representadas en estos espacios mitología, cultura grecolatina y personajes universa- vedora. No lo dudes, estamos vivos y vivir es el más es una fascinación del autor. Si se produjera un re-
aportan la idea no solo de la lobreguez del sujeto, les. Se embebió de los vastos libros de su magnífica grande milagro, / un silogismo que inventaron para el cuento de la mítica vida del poeta habría que iden-
sino la imposibilidad de escapatoria como en los ce- biblioteca, la que con los años fue descuidando y per- sacrilegio. /Ya tenemos adentro esa mosca que irrum- tificar el manantial, con los abundantes peces, que
menterios. Proyecta una preferencia por las funera- diendo, y adquirió conocimientos que se visibilizan pe de los muertos, / ¿no la oyes?, /ese raro insecto que ocupaba (y ocupa todavía) un espacio considerable
rias, morgues, prisiones, hospitales, tabernas, ruinas en su manera de escribir. Esta constituía un lugar de ni los eruditos saben de dónde sale, /la que revolotea de su patio. Pero sin ser reduccionista habría que
y cavernas. En su juego con estos territorios ingenia espiritualidad y atendía sus tesoros como si de per- dentro de los ataúdes cerrados. remontarse a la importancia simbólica del animal
representaciones que codean con la putrefacción, no sonas se tratara, resaltando la valía del conocimien- Los murciélagos y las ratas de igual modo son sig- acuático.
solo del lugar, sino de la esencia del ser humano. to. Es por ello que la biblioteca devino en espacio nos vertebrales de su obra. En el cristianismo, religión
El hospital más allá de constituir el espacio de sal- importante para él, creando así El bibliotecario del Se aleja de cualquier temor que de alguna forma inci-
vación se convierte en el sitio de expiración, lo que infierno. En ese momento sobrevienen sentimientos frente a la creación de imá- dió en Luis Marimón, es una
ahí llega simplemente no puede evadirse; pero aun encontrados, es el regocijo del hombre y a la vez una genes abyectas, en las cua- fuente importante. Acaece
así es la salida a una situación cuya mejor opción fuente de locura. Se siente dominante frente al saber les estos elementos sígnicos como identificación de Cris-
es la muerte. En el poema Cuerpo de guardia recrea y se atribuye su protección. más que denotar los signifi- to aludido en el bautizo o la
un hospital desde la óptica pesimista: la enferme- cados ya convencionalizados búsqueda de la verdad pro-
ra anuncia la tragedia con un rostro blanco cual un Signos asiduos en su obra están expresando lo corroído funda que se alberga bajo
espíritu y el cirujano considera que no salvarse se- de su alma. En Memorias del el agua. En Shalom Shabat
ría una ayuda de Dios. Estas situaciones refieren la Los espacios que dominan su poética son portado- bufón justamente combina le concede un sentido es-
consternación del poeta en el momento de la crea- res de signos que, por su reiteración, se le atribuyen estos íconos resaltando los peranzador al plasmar: No
ción, donde el hospital actúa como metáfora de una una importancia sustancial en su imaginario. Hormi- objetos usualmente emplea- perdamos, amor, las espe-
realidad convulsa y decepcionante. gas, alacranes, murciélagos, gaviotas, moscas, etc., se dos por él, pues no existe ranzas /Mira cuánta hierba
El gusto por lo sombrío y fusto, lo ancló al cemente- insertan en las imágenes devenidas de la pluma del una negación ni un interés crece en los altares, /toda-
rio con una funcionalidad que trascendía, la coloca- autor. Estos animales o insectos en su mayoría enfa- por rebatirlos sino son exal- vía en los mares, aunque no
ción de los cadáveres hasta convertirse en el territo- tizan la inmundicia de los contextos creados. tados como parte de su vida. lo creas, /hay peces[...]. Es la
rio donde desaparecen los anhelos. En Los visitantes Las moscas constituyen uno de los signos más em- Este fragmento alerta sobre representación metonímica
concreta esta idea: O estoy edificando un cementerio pelados. Deviene en metáfora de la muerte del cual una situación en la que algo del agua como espacio vital
para sepultar tanta esperanza, / aunque sé que todo emana la impresión de descomposición del cuerpo. mundano pueda ser asimila- del mundo que junto al aire
cementerio se construye solo. En esta instancia su- Un fragmento del poema 100 años se apoya de este do como idea de contempla- confeccionan dos espacios
cumbió la esperanza y su mención subrayó el desen- significante para enunciar la paciencia frente al ad- ción y comodidad. imprescindibles para la vida humana. “Soy el trunco,
cantamiento del autor. venimiento de la misma: y después se duermen en los […]cazar las moscas que vienen atraídas por los colérico ser que despertó en el mundo/ siendo hombre
Las tabernas donde gastó gran parte de su vida y parques esperando las moscas. cuerpos,/triturar y extraerles el tuétano/a los mági- y pez con corazón de ave.” 1
posiblemente se dio fin, fue motivo de inspiración El autor las emplea como metonimia no solo de la cos huesecillos de los murciélagos y ratas;/ amputar- Si otro símbolo identificara la producción del ilus-
en su obra. Y no refleja solamente sus vivencias sino muerte sino de lo abyecto en general. En el poema se los dedos y beber ávidamente de su sangre./Esas tre matancero sería el perro. Más allá de la reconoci-
los momentos de reflexión y de encuentros consigo Historia clínica comenta que en el interior, sucio des- visiones llegan a reconfortar mi espíritu, /pues com- da representación del animal como compañero fiel
mismo que estos le propiciaron. En la embriaguez de que nacimos, habitan las moscas inciertas desde prendo que, dentro de mi infortunio,/soy bastante fe- del hombre, se trata de una vertiente más apegada
parloteó con los brujos y codeó con las prostitutas, su propia procedencia. Asociativo a la desgracia, no liz... a la inmundicia. De manera reiterativa se incorpora
es sin dudas un fragmento de su existencia. solo por el fin de la vida sino por la reafirmación de Sin tener la intencionalidad de obviar otros signos en espacios de suciedad para elaborar una imagen
Marimón más allá de su forma peculiar de vivir fue la imperfección de los seres humanos, articula una es menester reconocer uno muy inquietante: el pez. que asiente ese concepto. El perro magullado resulta

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símbolo alusivo al cansancio y la desolación. Ese ani- tina se le revirará. Como presagio de una desapari- Estructura y personajes cuando se concibe como médico que detecta el cua-
mal común de la ciudad se vincula constreñidamente ción así aconteció, autodestructivamente se puso fin dro clínico de un paciente mental y termina por iden-
con la muerte, cuyos cadáveres penden de ellos para quien fuera uno de los hijos más insignes de la Ate- La estructura de sus poemas es tan curiosa como tificarse con el enfermo.
ser recogidos. nas de Cuba. su vida misma. Elementos que aparentan constituir A los bufones y los enanos, personajes rechazados
Es curioso la manera en la que concibe al diablo. una ruptura con la idea anterior simulan una esqui- socialmente, les dedicó extensas y poderosas pala-
Lenguaje metafórico Alegóricamente le atribuye las cualidades de la im- zofrenia, que si bien no patológica, es privativa de la bras. Memorias del bufón es una de las piezas con
perfección, y por ende, encuentra en él la esencia del posmodernidad. Las ideas se fragmentan como alu- las que más fuerza trata el tema. El bufón se torna
Muchos valores presenta su obra pero la manera de hombre. En la vida solo es eterno aquello que nace siones a una realidad tan compleja, permeadas por protagonista y describe sin reparos su situación. Se
configurar imágenes lo hace resaltar. No es un poe- para olvidarse. /Por eso el Diablo, desde la eternidad, el carácter del autor y los avatares que pudo haber reconoce aborrecido por la realidad tediosa que la
ta al que se le pueda atribuir el sello de solitario o ha sido el único/que ha querido que el hombre sea/ tenido en su camino. Un niño en el vientre casi es un sociedad le otorgó y se siente prepotente al no po-
existencialista, como tampoco se le puede denomi- realmente humano... Desde los Saturnales ecos del vampiro. /El alcohol que extraen del aire y los peces der cambiarla, llegando a odiarse a sí mismo por no
nar como un enamorado empedernido. Es ante todo silencio, el autor está reconociendo mayor relación podridos de La Marina. Fracturas semánticas como poder salir de su destino. Y en caso de una alteración
un lírico que ni sublima ni traiciona sus estados es- del hombre con este ser del Infierno, y de este modo esta son reiterativas. Los poemas estructuralmente de orden social, las bases están tan sólidas, que no
pirituales. Las metáforas se adueñan de gran parte expresa, con marcada original la imposibilidad del manifiestan las elipsis como otro recurso explicativo sabría que hacerse con tanta libertad. Un fragmento
de sus versos y en ese arte es un genio. A través del hombre para la perfección. Está colmado de errores de los repetidos quebrantamientos. expone este pesimismo del protagonista: Vivimos en
lenguaje despliega todo un universo de contradiccio- y de ello no escapará nunca, de ese modo está huma- Adentrarse en las obras maestras del poeta requie- un mundo, un infierno al que tanto/nos hemos acos-
nes interiores. nizando a la representación máxima del pecado: el re desembarazarse de todo prejuicio y ofuscación. El tumbrado/que si algún día, como en Jericó, / las mu-
Sentimientos esperanzadores o pesimistas se tradu- Diablo. Y es que Marimón notaba su propia vida co- sujeto lírico trasgrede la mera ocupación de autor rallas que nos cercan cayeran, / seguiríamos llevando
jeron en metáforas hechas imagen. Fui la eternidad rroída por culpas, tropezones, errores que no solo de- alejado de la diégesis y transita por varios espectros las cadenas tan adentro, / que si las perdiéramos, /
de un pez profundo que siempre deseó tener alas re- pendían de él sino del entorno en general. Un buen de personajes. Asume la voz del ser humano común, no sabríamos qué hacer con la libertad, / con los ca-
crea en el receptor un sentido de extrañamiento, al camino para comenzar es reconocer las debilidades y ebrio y toxicómano de alucinógenos y de la vida. minos...
intentar equilibrar, a un ser humano con propieda- las fallas inmanentes del ser Emerge de un espacio atemporal y profesa el sentir Sería reduccionista asociar al autor con temáticas
des que no les son ajenas. Pero su discurso es porta- humano. de lo más intrínseco del alma. En sus versos cobran únicamente nihilistas. Por un lado vemos a un poeta
dor de un insondable sentido; se reconoce parte de vida disímiles personajes que por la predilección del decepcionado con un modo de vida al límite y oscuro
un mundo incognoscible mas la ilusión de una mejor autor se codean, con lo marginal y abyecto desde lo si se quiere2; por otro existe un Marimón enamorado,
forma de vida (y no precisamente económica) no lo físico y lo social. La enfermedad, la suciedad, el poe- con dos grandes pasiones: su ciudad y su mujer. La
abandonó. Simbólicamente es el escape a través de ta fracasado, la imperfección o desde el niño, cuya constancia de estos dos enigmas se extiende a lo lar-
unas alas que denotan la procedencia de un ave, lo ingenuidad solapa la crudeza de los comentarios, se go de su obra mediante leves insinuaciones o alusio-
cual asume una intención de independencia espiri- visten de protagonistas y exponen sin ataduras sus nes directas a los que dedica poemas enteros.
tual, un dominio desde la parte más elevada que lo complejos y miserias. El poeta en su intento de sal- El tratamiento que le hace a Matanzas se aleja de
controla todo, que se deja guiar por el viento y lo var el mundo llega al punto de anagnórisis y descu- paradigmas idealizados, en los que se exaltan la her-
coloca en un espacio inaccesible a su forma física. bre con pesimismo que no hay nada que hacer frente mosura de sus parajes. Radiografiada desde los re-
He de continuar por la misma ruta que los cazado- a los designios del destino. cónditos espacios es, un acercamiento más intimista
res hasta que mi hocico tropiece con sus escopetas La afición a la bebida no lo exime de poseer una en el que el autor se identifica con la ciudad. Sus ver-
es un camino perspicaz para anunciar la muerte que mente genial y se auxilia de marineros históricamen- sos se convierten en oda a los paisajes citadinos, sus
siempre llega. Se trata de un sujeto que vive su vida te reconocidos por estas cualidades, para identificar- ríos, su gente y hasta sus perros.
como quiere, retando al propio destino y viviendo al se a sí mismo. Los enfermos mentales protagonizan Dentro de toda esa fascinación hacia Matanzas por
límite cada día. Sigue un camino que no es el más poemas, al ser la locura una salida a la cotidianidad. el río Yumurí siente una afición especial. Sus orillas
indicado pero es el elegido hasta que su propia ru- Cuando reconoce “Debo estar loco, sigo creyendo”; o albergan todo tipo de podredumbre, sin embargo, ha-

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lla en esas imágenes una belleza originaria. El río es nen la misma cara? En este fragmento se conjugan Animales pudriéndose en la orilla del Yumurí Miriam
signo de la ciudad y los animales pudriéndose en las sus dos pasiones: la ciudad y su mujer, equiparando
orillas es metáfora de la ciudad que, sin hacer nada a esta última con la muerte. Es encontrar la perdición
se está durmiendo. en el ser amado. Ideas aparentemente antagónicas En la mojada tarde los cangrejos irrumpen En los páramos donde alguna vez florecieron
entre el fango sangroso de la orilla del río. Babilonia, Nínive y Nipur,
Todas esas parafernalias alusivas a las aguas y a la para Marimón cobran sentido.
Otros animales son como diosecillos los arqueólogos han desenterrado tablillas de barro
vida que alrededor de él se desenvuelven no eximen El amor sublimado se halla en el poema que lleva que se pudren silenciosamente al viento. cocidas por el sol de aquel tiempo,
el sentido de belleza. En su recreación del acontecer propiamente su nombre: Miriam. Para cualquier lec- A un hombre le aterraban los espacios infinitos; inscripciones que los eruditos han traducido
frecuente de la ciudad no exonera las cosas banales. tor puede ser entendido como el testimonio de la pa- a mí la vida y este mínimo sendero resultando en muchos casos ser juramentos
Muerte del Yumurí y Animales pudriéndose a la orilla sión verdadera. Una lucha contra lo efímero del amor, que va de mi casa a la cervecera y cartas de amor...
del Yumurí son algunos de los títulos que encierran el cual no pasa aunque hayan transcurrido muchos y de La Marina hasta el puente. Yo quería decirte, Miriam,
esa pasión. Es interesante la manera en que descri- años y donde el recuerdo es capaz de mantener vivo Pero yo solo creo en el amor que el nombre de esta ciudad es sangriento,
y en esas breves espinas que ninguna ha tenido un nombre más perverso.
be esos espacios y pudiera ser hasta contradictorio cualquier sentimiento. Para este hombre enamorado
y en los peces que se prolongan en sus márgenes Es posible, cuando hayan pasado cien
el matiz de redención y optimismo que le atribuye. de la vida y de las mujeres una carta puede ser tan con sus vientres hinchados. Verdes moscas metálicas o hasta un número incontable de años,
Reconocer que de la podredumbre nacerá la vida es valiosa como la experiencia propiamente vivida. (cantáridas) de esto que hoy ves
una manera de creer en lo venidero, con el conven- Pintor expresionista de imágenes, posmoderno en y negras. En las profetisas revoloteando y en un insecto no quede otra cosa que algunas estatuas,
cimiento de que la destrucción es precursora de la su estructura y universal por su lenguaje, es Luis traslúcido que guía mis pasos a contrasombra. escombros, ratas que se adaptarán a la destrucción
rencarnación. Y ese hálito de sosiego, teniendo en Marimón uno de los poetas más influyentes de su Brota la vida de sus humildes cuevas y comerán arena.
cuenta su forma de vida, es hallado en los fragmen- generación. Artista identificado con su tiempo y se- y me saludan. Pero esta noche es bella y pasan muchas gentes.
Me agrada ser el que se borra sin creer en nada. Déjalas continuar su camino.
tos de su ciudad querida. dicioso por convicción no traicionó su sensibilidad.
El universo es este caminito, Esos rostros nunca se volverán
De este dibujante de la palabra emana un senti- Cualidad que lo ha hecho trascender y que ha provo- el que me fortifica y me amplía a este animal extraño que corre
miento noble hacia las personas que ama. Sus hijos, cado una manía compulsiva por recuperar sus textos el que me aparta de los hombres malos y llama por sus nombres a los desconocidos.
que constantemente son enunciados, constituyen y llevarlos a todos los que por desconocimiento no el que me justifica ante esos perros, esos gallos, Tú también partirás
esos seres, que por solo el hecho de llegar al mundo se han acercado a su obra. Matancero, cubano y ante esos corderos que se inflaman y dejan que brote el sol y no veré ya más tus ojos de asustada bestezuela.
indultan al hombre de sus pecados. Miriam, la ma- todo ecuménico porque no es universal solo el que de sus entrañas, Quien piensa en el futuro
dre de ellos, es otra de las fuentes inspiradoras de trasciende fronteras espaciales sino el que es capaz esos hermanos míos que se marchan... no está muerto.
fieles, quejumbrosos y únicos compañeros en esta travesía. Cuando hayan trascurrido mil o un millón de años
las que bebe; cotejando su amor desde la constante de llevar a dimensiones significativas lo que en su
Y yo no creo en Dios, pero de toda esta podredumbre es posible que vuelvas
referencialidad. espacio sensitivo acontece. renacerá la vida... y es posible también
Fue Miriam varias cosas para Marimón, su compa- solo encuentres esa niebla misteriosa y azul
ñera de vida, su amor y hasta un mal presagio. Es que sube todas las madrugadas desde el mar
aludida en muchos poemas como la persona a la que y cubre las casas y los toros.
el autor le dirige las conversaciones. La libertad, Mi- Busca bien y no olvides
riam, comienza en uno mismo, / por eso yo la vida la 1Luis Marimón. Los asesinato de una 3 Luis Marimón. que tú fuiste mi río,
vivo como magia3 o No permitas, mi amor, que me mi río amado al que me lanzaba desnudo
insomnes logogri- niña de tres años Shalom Shabat IV. Poemas de Luis Marimón
sin importarme la vida ni la muerte.
atrapen, / no lo permitas, Miriam, no lo permitas4. fos XII. (Formato (Cecilia Dalcourt) (Formato digital) La Habana 1951 - Las Vegas 1995 Busca bajo los antiguos ladrillos
E íbamos caminando por esta ciudad enceguecida, digital) por brujos en junio 4 Luis Marimón. en las hojas de hierba
/la que en cada recorrido se inventaba un nuevo nom- 2 Dedicó un poe- de 1919. Poema Los visitantes XI. entre las escamas de los reptiles,
bre. /Y tu cuerpo indefenso reflejándose en la luna de ma a una historia titulado Coro de (Formato digital) que en algún lugar yo habré dejado para ti
insaciable hojarasca. / ¿Cómo se llamará mi muerte popular matancera Ángeles (Formato para ti sola
sino Miriam, / y cómo he de nombrarla si las dos tie- relacionada con el digital). una carta
de amor...

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[…]lo de Marimón no había sido juego, dislate de ocasión, pose o desplante, La poesía del poeta cubano Luis Marimón es una construcción subjetiva válida.
sino poesía de la real, como la de todo hombre que se juega la vida a las pala- Esto puede ser afirmado porque es obra clausa, cuyo cerrado inventario posee
bras. Aquellos versos libres, en su eficaz servidumbre al significado, denotaban cantidad y calidad definitivas, y que examinada globalmente arroja una organi-
la elevación de lo clásico y, al mismo tiempo, la reflexión de lo intuido sin ago- zada visión con un lenguaje específico altamente elaborado. Aunque al poeta
bio desde una cultura ya decantada, secular, de aristocrática espiritualidad. El lo ha rodeado y rodea activamente la leyenda de su vida y muerte, la construc-
pasado no como había sido, sino como es. El pasado como respuesta al presen- ción subjetiva que alcanzó a ejecutar es susceptible de ser aprehendida como
te, era lo que aquel grito de edades, cual vociferación de algas, quería desatar, una añadidura objetiva. El tamaño de los valores alcanzados podrá discutirse,
para despoblar de sí tanta sordidez e iluminación de vitrina, y desperezar tanto pero su existencia es ya un documento. [...]En su poesía hubo muchas avenidas

JORGE R. y tanto aliento rendido sobre túmulos playeros. [...]Era su triunfo sobre el hastío
y la inmovilidad. El triunfo del amor a la mujer, en cuyas entrañas se hundía
entrando y fluyendo hacia sus íntimas necesidades de plasmación. Algunas de
ellas se le convirtieron en segunda naturaleza, y ya no importan sus proceden-
ROBERTO
BERMÚDEZ
__
tantas veces como frustraciones se le ofrecían… que alentaron el curso de
tamaña historia, hasta hacerla poesía de civilizaciones. [...]Marimón nos dio
cias ni irradiaciones, pues constituyen propiedades de lo mejor logrado en su
lenguaje y visión. [...]Pero la autenticidad es la ética de su estética, y cada una MANZANO
__
su justa dimensión, hasta entonces solo intuida por aquellos que lo conoci- de sus piezas, y el sistema de piezas que elaboró durante años, fue maduran-
Escritor, poeta mos, al ubicar su condición de poeta en la mejor poesía de todos los tiem- do hacia las direcciones más soterradas de su destino sobre la tierra. [...]Evolu- Escritor, editor
pos. […]Marimón se impone a partir del desborde de una línea metafórica de cionó en su representación, bajo estos principios constructivos, hasta ofrecer
y crítico de arte itinerario trashumante. [...]De resonancias asonantadas, yámbicas, sus ondas piezas donde las imágenes particulares tributan eficazmente a las de mayor
y diseñador gráfico
poéticas tienen alcances diferentes, según el peso y la pasión de las imágenes dominio de su vertiginoso y complejo mundo interior. [...]La originalidad de su
desplegadas; mientras la intuición atisba el final de la izada del verbo en el ver- elocución es evidente, y se encuentra en correspondencia con sus propósitos
so, cual si fuera la premisa primera de su iniciación inconsulta. […]inquietantes comunicativos y la naturaleza onírica de su sistema simbólico. [...]La riqueza
y originalísimos sus arranques poéticos, a veces, en apariencia incontrolables, de su sujeto es viva, a pesar de la homogeneidad y fijeza de las células comu-
como si no pareciera alcanzarle los extremos dictados por la lógica del lengua- nicativas de su psiquis. A veces es una voz que habla desde el Vacío, podero-
je, explayándose hasta más allá de un sentir sin palabras, que luego las palabras sos instantes en que puede llamarse Nadie. O se coloca una máscara de otros
dicen. Poesía a ráfagas, con algún que otro francotirador emboscado detrás de tiempos, o escamotea su inmediatez en otros espacios, o se confunde con ani-
las rosas; verso rotundo, tajante, a veces, sin ilación aparente con el contexto males inquietantes, o es el agredido, el desengañado, el provocador, el nonato,
argumental donde se inserta. Creciente del espíritu. el fracasado, el vidente, el anunciador, el enfermo, el naufragado. [...]Flota sobre
La heredad del poeta tiene una sola militancia: la totalidad. El uno indivisi- muchas estrofas una sensación dolorosa y aguda de límite y amputación. Se
ble e inclusivo. Su diversidad fluye del mundo, va y viene de él. …la bahía de yuxtaponen los tiempos y culturas, y es realmente asombroso el palimpsesto
Matanzas: dimensión de lo inmenso en la inmovilidad, con la ciudad y sus que erigen sus poemas, donde no solo en las asociaciones se alcanza lo simul-
ríos y puentes y valles; ubicación de la sensibilidad en el paisaje marino… táneo, sino que la liquidez de los tiempos y los espacios amalgama la triste
En él echó sus anzuelos y redes de ensueños… Y creyó ver en el ojo inmóvil experiencia humana. [...]En la poesía cubana hay notables maestros del dolor,
del pescado, el de Dios. Y cuando nada le quedaba por hacer, hace como que de la noche, del viento, del polvo, de la arena, de la angustia ascendiendo como
vuelve al mar… Y se salva. Y lo hace no solo a través de la poesía, la nativa y un humo sobre las quebraduras de la sangre, que examinan la insondable y
la extranjera, la de ayer y la de hoy, sino a través de sí mismo, al adentrarse punzante realidad y suelen descubrir en los pozos más hondos estrellas sueltas:
en dimensiones telúricas y existenciales de tal empaque cognitivo, que de en esos fucilazos de espuma ven a la enigmática ballena deslizándose en su
continuo se convierten —las convierte— en aportes que tributan a una más motín de amor, como describió el poeta en una de sus bellas piezas. La poesía
consciente madurez de su escritura. [...]No otra es su herencia, no de otra del cubano Luis Marimón ha entrado en ese caudal con todo derecho, como un
compañía está hecha esta soledad, esta poesía. triunfo especial de la expresión humana.

44 • Neodual Neodual • 45
ELENA RIVERO

Cuando la vida habita en el cuerpo de una mujer Presencia

Clavas tus ojos en este cuerpo deshabitado no tiene por qué estar impresa
Dios parece caer para descansar en mi pecho. ni ser preocupación para los gorriones
Es difícil querer vivir después de invernar en tus montañas aunque quise sus cabellos rizos enredados en mis aretes
no volverán a besarme los tulipanes con las mismas ganas a ella
que pasen los salmones la inocencia las golondrinas los hombres
pero no pases tú… le germinaban del vientre

Memorizo cada resguardo de tu cuerpo para regresar


aunque solo serás un espejismo en mi evocación.
Este solo será un día nuestro día ya no existirán más días. Bésame Safo
No mueras con el alba
sálvame de morir pobre
tu aliento es mío tuya mis tetas Dejemos que Leda observe nuestras mañas
mi vientre y este cuerpo bañado de sudor y escuche el arpa en mi pecho cuando tus pezones me rocen
no durmamos hunde tu mano en el vacío de mi vagina
hagámonos eternas. llénalo de húmedos besos
No dejes que la luz llegue desbórdame con los rayos de la mañana
no dejes que ellos lleguen… haz que el domingo no sea trágico
abre mis piernas y desata los nudos
deja que tu lengua sea acróbata
y yo me desplome
a la hierba seca.

46 • Neodual Neodual • 47
JULIÁN BRAVO RODRÍGUEZ

Teína

I II
Un gato pasea tenso por mis párpados Siento el terror de dormir siempre acostado
y cualquier gato raudo es un fantasma Empiezo a evitar la noche hasta cegarla
Traquea mi lengua como un pez sediento Nazco
Croo dentro. Algún delfín inquieto trastea
aquí y allá, oleando con su lomo bajo mi piel III
Me zumba el corazón Hace dos días que no vivo aquí
El silencio engrillece, o es la noche de mara- Ya hozo descalzo en mi oficio
cas silenciosas leve humedad en que esplenden
No me paran de temblar los versos frescos de un blanco anfibio mis pies.
La hoja al fin se hace misterio que taño
Y no puedo dormir, y ya no quiero Aquí no me pueden ver
Mis estiletes hundidos
Duro en la carne que trasunto

Y vivo la mirada y la sonrisa de quien vivo Taño el dolor. Espasmos pulso.


Tiendo en la luz frescos hilos.
Y no me levanto
Salto
He cruzado

Ya no vivo aquí donde he vivido

Verdad son los espasmos que profeso


Si muevo soy

El resto es tiempo tejido de respiros

Hilachas de ser

Ya llego a ser de mí
Pacté

48 • Neodual Neodual • 49
JULIÁN BRAVO RODRÍGUEZ

Corset Silicona

trépate a Corset Cuál no fuera su sorpresa,


el corcel de la lengua ni la bota sin alcanzar su humanidad,
y lánzate cuando el más guapo de todos,
y enlázalo luego de refocilarse un tanto con la escena
y vuélvete a lanzar que ahora él
entre apacible y sonrojado le entregara
no mantengas a raya a Corset –aún sabiéndose víctima inminente,
si Corset malentiende tus tobillos persistiendo en cubrir los contornos con depu-
trota fuerte rada languidez–
te borra el rostro corriera la voz de paredón entre lances e in-
sultos.
me lanzo de Corset todo el tiempo Ya al instante fugaz del desayuno,
lo trepo y me lanzo aún con la práctica habitual de asir
porque Corset es fuerte / los ardientes vasos de aluminio
no podrá domarme con los panes abiertos;
solo él bebía lánguido la leche,
así me extraigo los gestículos cuando hablo sin quemarse los labios.
arrecio riendas con palabras
cruzadas
y nudos de garganta

asperjo hilos de voz entrecortada

hablo cáscara

porque Corset es fuerte


muy fuerte

50 • Neodual Neodual • 51
MARTHA LUISA HERNÁNDEZ

¿un cuerno?
Pensé volver al tejido utópico de mis huesos de ternera ¿un decreto?
Bien temprano el hueso deforme fue estudiado ¿una poética de la destrucción?
Bien temprano fue objeto quirúrgico ¿un perro mirando radiografías?
Deforme la pezuña ¿las actividades se organizan en los cuartos enrojecidos
Tercer hueso Huesuda la muñeca y clausurados?
Nadie dio lugar a la tatarabuela del Congo ¿un Krak prometiendo ser malo hasta con los diarios de
Mamá lloró mi tatarabuela negra del Congo?
Células óseas tengo Papá escribió
y guardo en ellas el sudor de mi tatarabuela del Congo Doctores analizaron mi caso Huesos tengo
Células óseas trazan Un serrucho es necesario articulados y huesos para lanzar en un tablero del Con-
el amasijo articulado de sensaciones rituales El bisturí para modelar sobre lo amorfo go que predice el futuro y predice la extinción.
heredadas de mi tatarabuela del Congo. A ti te muestro esta utopía de ternera. A ti: pensé fracturar tu clavícula y hablarte del amor
Quiero hablarte de ti en mis herencias Pensé montar una luz de cristales y poner a bailar a mi
a ti y a nadie más quiero mostrarte mi radiografía He visto agujerearse el asfalto con mi “huesito de tatarabuela
es tan imprecisa su definición la alegría” Mi tatarabuela toma tu mano izquierda
los huesos de mi mano Y a ti también te he visto escribir un diario A ti: De donde sea que vengas
al estrujarla de esta ciudad Cuatro yesos
componen una música rota Y de sus perros Acción vitamínica
casi ritual Que saben más del hueso Mucho sol
acerca de la extinción. Que de la carne o del futuro Amores locales
A ti: pensé abrir una por una las capas de tu piel Y de sus perros Serpentinas
Pensé trocear mi dentadura hasta chupar tu calcio Que saben más del llanto Repetirás por once generaciones el mismo delirio por la
Huesos largos
Pensé en esos gestos rituales de insana tataranieta del Que de la lava o el poder. melanina
Huesos cortos
Congo Y de tu destino no te vas a librar.
Huesos planos
Pensé en todo eso que me gusta de la palabra TEATRO ¿Por qué bailamos?
Huesos irregulares
porque si ahora mis nudos gelatinosos se han quebrado ¿Por qué meneamos?
Leí que existen toda esa clase de huesos
Es porque este hueso habla y habla de ti y habla de una ¿Por qué lirismo de pavimento hirviente?
Huesos mimbre
palabra que no nos pertenece. ¿Por qué vaivén de nevada caliente?
Huesos tiempla
De ti que instalas un Krak en mi memoria ¿lava?
Huesos gravilla
un ideolecto del Congo que habla de lo malo ¿sana?
Huesos tímpano
Porque también fuimos brujas mi tatarabuela y yo ¿Por qué la fiesta es innombrable?
Leí que existen toda esa clase de huesos
e iniciamos una danza en la ciudad patrimonio ¿Por qué la estética milagrosa es hotelera?
Liso
La ciudad de los crímenes por pasión ¿sana?
Hueco
Sangrientos ¿lava?
Metálico
Que involucran huesos ¿un huesito de la alegría es un hueso místico?
Mecánico
Todo tipo de huesos ¿una cola?
Leí que existen dentro de mí toda esa clase de huesos.
Rotos y escachados en las carreteras nocturnas.

52 • Neodual Neodual • 53
Y en muchos ejemplos utiliza un Kire: corte realiza-
do por una partícula que en japonés se le llama Kireji
y que en español no existe pero es sustituida por un
punto y aparte, situado al final del primer o segundo
verso. El Kire delimita los dos polos o centros de aten-

BREVE RECORRIDO POR EL HAIKU


ción del Haiku.
En cuanto a su contenido posee dos leyes o «secre-
tos» inviolables: El Haimi y el Nai- inritsu. El primero,
es el sabor a Haiku. Es una cierta habilidad alcanzada
por el haijin para mezclar en el poema los elementos
de la Naturaleza, como los sazones en la cocción de un
Lázaro Orihuela Martínez alimento.
El segundo, es el Ritmo Interior del Haiku. Se centra
primeramente en el hecho de eludir el ritmo monóto-
no, predominante en la estructura del 5-7-5 (aunque
dentro de esta forma puede haber diversidad rítmica),
El Haiku es una selva que nunca se termina de recorrer, a la hora de componer el Haiku. Este «secreto» puede
en extensión, en profundidad… Cuando has acabado la apreciarse en su totalidad cuando se degusta un cua-
selva de fuera, te queda la selva de dentro. derno de Haikus, en la variabilidad de la composición
Vicente Haya de los poemas.
El Haiku es la expresión de la espiritualidad japone-
sa, siendo esta, patrimonio de los sentidos y NO de
la razón. Por eso dice Blyth: es una sensación percibi-
Conceptos y «secretos» da poéticamente1. Es también una amalgama de sen-
timientos producidos por el poeta, que se afecta des-
pués de fundirse con la naturaleza de las cosas. De ahí
El Haiku es un género o forma de expresión poética que Vicente Haya lo defina como una impresión natu-
tradicional japonesa. En cuanto a su estructura, está ral que se hace poesía2.
compuesto generalmente por tres versos que varían la El haijin (poeta de Haiku) tendrá como finalidad con-
cantidad de sílabas, pero que en todos los casos siem- servar un instante de la Realidad, de lo que está suce-
pre tienen un total de menos de 23. Al contrario de la diendo en este lugar, en este momento3. Realizará un
idea que se ha generalizado de que en la mayoría de esbozo para que el lector, que de cierta forma se ha
los casos tiene 5-7-5 sílabas respectivamente, más de la convertido en haijin, logre completar la escena y así
mitad del Haiku clásico y la totalidad del Haiku libre «degustar» todos los matices del poema.
NO está escrito en 5-7-5. Y dentro del 5-7-5, además se Dentro de la unidad fundamental de la imagen puede
presenta toda una sarta de variaciones rítmicas. Por haber uno o más objetos, pero la razón de la presencia
tanto, escribir Haiku en 5-7-5 es aceptable, pero NO in- de dichos objetos en el haiku, está en la función cons-
dispensable. También está compuesto por un Kigo: pa- tructiva desempeñada por los mismos respecto a la
labra que enmarca al poema en una estación del año. unidad imagen-sensación.4

Neodual • 55
Su Historia Más tarde, a principios del siglo XVIII y con el sur- gohaiku) y el «senryu de estación» que alude a temas los mejores ejemplos de Zappai publicados como
gimiento del Senryu como género literario, el Haiku de la naturaleza. Haiku, es el libro Rincón de Haikus, de Mario Be-
pierde popularidad, siendo retomada después por El escritor Richard Wright fue un buen cultivador nedetti. De dicha publicación afirma rotundamen-
El Haiku no es una estrofa creada por el ingenio de la figura de Taniguchi Buson (1715-1783), de ahí que del «senryu de estación»; de su obra, apunta Jorge te Vicente Haya: La ignorancia occidental respecto
un poeta. Es un producto artístico o literario que se Basho y Buson se consideren «los dos pilares del Hai- Braulio Rodríguez, quien ha realizado algunos de los al Haiku hace que no sepan que además del Haiku
va formando junto con la sensibilidad del pueblo de ku»5. Luego de la muerte de Buson el Haiku vuelve más profundos estudios del género: “la ingerencia existe el Senryū y el Zappai.[...]Benedetti escribe Za-
Japón, por tanto, además de responder a determi- a caer en un estancamiento, aliviado posteriormente del yo poético, la personificación de los elementos ppai13.
nados códigos de las religiones y filosofías de ese por Tsuneki Masaoka Shiki (1867-1902), quien gra- naturales y otros recursos expresivos a los que recu- La mayoría de los poetas que comienzan a escribir
país (Shinto, Budismo, Zen), su surgimiento se va a cias a su renovación viene a enmarcar una última rre ocasionalmente, le distancian del haiku, pero lo “haikus” lo hacen sin el mínimo de conocimiento.
remontar a la más antigua de estas: el Shinto. etapa en la historia del género: el «Haiku Moderno». acercan al senryu”.7 Para ejemplificar, algunos publi- Y han acabado inventándoselo14. Por ese motivo ha
Las primeras luces de ese «sentir japonés» pudieron cados en la obra Haiku. Este otro mundo: sido muy escrito en Occidente. Para ejemplificar:
verse en el periodo Heian (600-1185 N.E.) por los es-
critos del Manyoshu, una antología de Waka (poesía Otros géneros
japonesa) compuesta por Chokas (poemas largos) Ondula el río
y Tankas (poemas cortos). De la parte inicial de los Desde las cariciosas Por si las moscas
Tankas surge el Haiku, llamado en aquel momento Además del Haiku, en Japón existen otros géneros sombras del sauce.8 hay profetas que callan
como Hokku. de poesía breve que se diferencian principalmente su profecía15
Luego del Manyoshu, en antologías como el Kokin por su contenido: Gritan y gritan
Wakashu o Kokinshu, la poesía japonesa casi en su hileras de gansos
totalidad asume el estilo de la poesía china: el uso Senryu pasando un cementerio.9
de la personificación de los seres de la naturaleza, la Forma poética japonesa compuesta por tres versos El Haiku en Cuba
utilización de la metáfora, la inclusión del humor, el de 5-7-5 sílabas. También tiene sus antecedentes en Todo el día agitado,
alejamiento de la observación de la naturaleza para el Manyoshu y proviene del Waki, segunda sección El frío mar duerme ahora
expresar necesidades y sentimientos, la excesiva ela- del Renga (encadenamiento de Tankas). Su nombre en una cama de estrellas.10 Poquísimo es lo que conocemos en Cuba sobre la
boración de los poemas y la utilización de juegos de se denomina por el primer mejor compilador de es- literatura japonesa y específicamente sobre uno de
palabras. tos poemas: Karai Senryu (1718-1790), quien empieza los Géneros más cultivado: el Haiku. Las causas, ex-
Los haikus salidos en esta etapa, se clasifican como a cultivarlo aproximadamente por el año 1760. Tiene puestas algunas por escritores cubanos como Este-
«Haikus Arcaicos». Posteriormente y con la figu- como característica que en vez de centrarse en la na- Zappai ban Llorach Ramos o Yordan Rey, van desde la di-
ra de Matsuo Basho (1644-1694), comienza la etapa turaleza, aborda temas humanos y humorísticos, en Género literario poco cultivado en Japón, desarro- ficultad de la traducción de textos, pasando por la
de los «Haikus Clásicos». Basho, utilizando la idea ocasiones críticos, contra determinados puntos de la llado fundamentalmente después de la apertura al inexistencia de ejemplares relativos a la materia, la
del Hokku como poema autónomo e independiente, religión budista. Le atribuye cualidades y sentimien- occidente en la era Meiji, finales del siglo XIX prin- falta de promoción del trabajo creador y de enseñan-
desarrolla una nueva poética que lleva al Haiku a la tos humanos a los elementos de la Naturaleza. Suele cipios del XX. Está compuesto por tres versos de 5-7- za de los (escasos) especialistas en Haiku con los
cúspide de género literario. aparecer cuando las acciones humanas intervienen 5 sílabas respectivamente y no posee ninguna de las que cuenta el país en la actualidad, la inadecuada se-
Pero lo que realmente hace que Basho llegue a ser en el poema y surge una doble lectura, un juicio sutil leyes internas del Haiku. Muchas de las publicacio- lección de referentes a la hora de realizar investiga-
una personalidad seguida por multitudes de discípu- o irónico como trasfondo de la mera sensación. nes nacionales y extranjeras, que están bajo el título ciones, hasta la publicación por parte de editoriales
los y el pilar fundamental de su escuela, la de Sho- Se ha dicho que el haiku es “conmoción por un su- de “Haiku”, realmente tendrían que ser clasificadas cubanas, de poemas bajo el título de “haikus” cuando
mon, es el hecho de asumir el Haiku como un camino ceso” y el senryû “diversión por un suceso”6. En mu- como Zappai. en realidad no lo son.
(Do) de ascesis espiritual, de entrenamiento de los chas ocasiones se tiende a confundir haiku y senryu, El zappai es ocurrencia sin suceso11… un juego del A esto habría que sumarle el empeño de una parte
sentidos. puesto que también existe el Haiku sin Kigo (Mu-ki- “yo” que se aprovecha del metro del haiku.12 Uno de de los japoneses, por desvirtuar la esencia del Hai-

56 • Neodual Neodual • 57
ku. El recelo les ha llevado incluso a plantear que los capacitados para enseñar haiku.18 1 Reginald Horace www.elrincondel- cada por Editorial LESTER FLORES JORGE BRAULIO
occidentales no podemos cultivar el género, les ha El primer y único (hasta el momento) cuaderno de Blyth. A History of haiku.org/foros/ Hiperión.
llevado también, como en el caso de Haruo Shirane, Haikus (como lo propuesto por Basho, retomado Haiku, vol. 1, p. 214. viewtopic.php?t=22 17 Javier Sancho. El Dos caminantes. Agua cayendo
a declarar que está bien el hecho de que acá se con- luego por Shiki, asumido por la tradición nipona, 2 Vicente Haya. El 12 Vicente Haya. El Jaiku japonés en la El sol parece luna en el agua: la noche,
funda el Haiku con el Senryu e incluso con el Zappai. profundizado por Fernando Rodríguez Izquierdo y corazón del Haiku. espacio interior del era Meiji, Gaceta tras nubarrones. menos oscura
Cuestión que ha sido reforzada por la mayoría de finalmente refinado por Vicente Haya) que se ha pu- La expresión de lo haiku, Shinden Edi- trimestral de haiku
los poetas occidentales que intentan incursionar en blicado por una editorial cubana y que da las prime- sagrado, Editorial ciones, (comentario Hojas En La Acera,
el breve género con toda «libertad» e irreverencia y ras luces como una verdadera introducción del gé- Alquitara, p. 13. 27), p. 30. No. 35, Vol. II, p.8.
desde el desconocimiento, quienes también alegan, nero en la isla, viene a ser “Todo en Tres líneas” del 3 Definición de 13 Conferencia so- 18 Vicente Haya.
en nombre de una supuesta «evolución» (aunque en Maestro Jorge Braulio, publicado por Gente Nueva, Matsuo Basho, pu- bre Haiku en Sofía. Prólogo del libro Nubes de ocaso. Rallo en silencio
muchos ejemplos sus “haikus” se apeguen al caído en 2013. Fuera de esta publicación, todo es parte de blicada por Antonio Vicente Haya 12. de A la intemperie, El viejo aparta latas el par de zanahorias
en desuso «Haiku Arcaico»), que el Haiku que se ese ya mencionado «acercamiento», en los mejores Cabezas, en Jaikus, Noviembre de 2010. Editorial Juan de de la basura. Relampaguea
hace hoy en el occidente no tiene por qué ser igual casos. Editorial Mondado- 14 Blog Crece joven Mairena, Colección
que el escrito en Japón siglos atrás. Y de este Maestro, de quien por su labor formativa ri, 1998. (http://crecejoven. Haibooks, Barcelo-
Por estas razones, los cubanos que han tenido la di- han salido, directa o indirectamente todos o casi to- 4 Fernando Rodrí- com/espirituali- na, Noviembre, p.
cha de llegar a comprender realmente de qué se tra- dos los haijines cubanos; algunos Haikus para cerrar guez-Izquierdo. El dad--el-haiku) 14, 2006.
Patio escolar: Vino la luz
ta el Haiku, se pudieran contar literalmente con los este breve recorrido: haiku japonés. His- 15 Mario Benedetti. 19 Jorge Braulio
las hojas del almendro Un ebrio cruza el barrio
dedos de las manos, a pesar de que algunos de ellos toria y traducción, El rincón de haikus, Rodríguez. Todo en
cubrieron todo. entre ladridos
(Jorge Braulio Quintana Rodríguez, Lester Flores Editorial Hiperión, Editorial Alfaguara, tres líneas, Editorial
y Sinecio Verdecia) realizan una labor meritoria en p. 28. México, 1999 Gente Nueva, p. 9,
cuanto a la difusión del género en la isla. Dos lagartijas 5 Ibídem, p. 87. 16 La primera tra- 2013.
Desde José Martí, que según Eduardo Benet y Cas- Luchan por una mosca 6 Entrevista a ducción al español 20 Ibídem, p. 19.
tellón, tenía fuertes vínculos con la literatura con- que ya escapó19 Vicente Haya en del diario de viaje 21 Tercer movimien-
La tarde yéndose. Portal a oscuras
templativa oriental, pasando por Regino Pedroso, ERDH: http://www. de Basho “Oku no to: SER TIERRA Dicen que es olor Se volvió solo ruido
Eugenio Florit, Samuel Feijóo, hasta Jesús Orta Ruiz, Afuera llueve. elrincondelhaiku. hosomichi” fue rea- - Concierto de a ají quemado. la mariposa
lo que tuvimos fue un «acercamiento» al Haiku. Los Trepa la salamandra org/foros/viewto- lizada por Octavio haiku “Los cuatro
intentos que realizaron estos poetas fueron sobre la por el tabique20 pic.php?t=22 Paz y Eikichi Haya- elementos”, primera
base de lectura de las pocas traducciones del japonés 7 Jorge Braulio chiya, en 1957 con el creación colectiva
que había hasta el momento. Y con esto suceden dos Surco recién abierto Rodríguez Quinta- nombre de “Sendas iberoamericana de
cosas: la primera, relativa a los mismos traductores. Retorciéndose na. Haiku. Este otro de Oku”, publicada haiku. Sello Edito- Pollo sin cabeza: Jazmines húmedos
Muchas veces las soluciones son insuficientes y erra- brilla la lombriz21 mundo. Richard primeramente por rial: Fundación Zen atado a sus patas Una abeja zumbando
das, motivo por lo cual se necesitan nuevas traduc- Wright, p. 18. la UNAM y luego Montaña de Silen- un lazo rojo. junto al ataúd
ciones. Véase como ejemplo la nueva traducción rea- Otra libélula 8 Ibídem, p. 49 por Barral Editores. cio, p. 22, 2018.
lizada por Antonio Cabezas de Oku No Hosomichi, atrapada en la artesa 9 bídem En 1993, Antonio 22 Ibídem, p. 30
Sendas de Oku16. La segunda cuestión es la expuesta del alfarero22 10 Ibídem, p. 83. Cabezas hace una
por Masaoka Shiki: Lee autores antiguos y recuerda 11 Foro El rincón del nueva traducción y
que en ellos encontrarás jaikus buenos y malos.17 Esto Haiku. Encuentro la titula Senda hacia Nochebuena. Plaza a oscuras
sucede también con los no tan antiguos, ya decía Vi- con Vicente Haya. tierras hondas. Oku En el techito dos gatos De las tres banderolas,
cente Haya: Borges, Benedetti, Octavio Paz no están (05.12.2006): http:// no hosomichi, publi- se dan la espalda. solo una ondea

58 • Neodual Neodual • 59
el ámbito de las comunicaciones modificó muchos factores de la ecuación gene-
racional. En diversos medios digitales se promueven hoy ideas interesantes y
valiosas de jóvenes cubanos sobre nuestra sociedad. Paradójicamente, cualquier
intento de exteriorizar una visión crítica y diferente sobre ese tema es descalifi-
cado, invisibilizado y catalogado con un amplio menú de etiquetas. ¿Es posible
que con tales actitudes convoquemos a un diálogo generacional? ¿O se piensa
Alina B. López Las generaciones que han trascendido en la historia literaria o política, son
ingenuamente que la generación joven está forma-
da solamente por los líderes de organizaciones ju-
Hernández aquellas que se percatan de que sus aspiraciones, intereses y necesidades son
veniles que se muestran combativos y eufóricos al
diferentes a los de las generaciones precedentes; y actúan en consecuencia.
hablar en nombre de todos?
La frase diálogo generacional dibuja a los jóvenes cubanos como pasivos co-
Decía Berthold Brecht que la juventud tiene un
rredores de relevo que reciben, en lugar de un batón, la encomienda de salva-
ímpetu a prueba de balas, pero un optimismo que
guardar un estado de cosas.
no tolera desengaños; y las voces jóvenes de hoy no
Una generación se visibiliza precisamente cuando trasgrede ese estado de
son las que en los ochenta pedían órdenes y solici-
cosas; en el momento en que deja de ser convocada para convocar, en que no
taban que les dijeran qué hacer. Tras tantas déca-
permite que se le fundamente para ser ella la que logre fundamentar. Cuando
das de experimentos y retrocesos, en medio de un
Martí se separó del plan Gómez-Maceo y se convirtió en el blanco de tantas
proceso que se considera de cambios, y a través de
críticas, estaba dando la espalda al modo de hacer de dos grandes revolucio-
medios que ya no pueden ser controlados; ha emer-
narios y estableciendo otro estilo de organizar la guerra, a tono con la gene-
gido una generación que está proponiendo qué ha-
ración que había sido testigo del fracaso que costó una década de vidas y
cer, pero debe ser escuchada, sin prejuicios, en pie
esfuerzos. En el instante en que Rubén Martínez Villena interrumpía un acto
de igualdad, de lo contrario será un monólogo y no
oficial para protestar contra la corrupción del gobierno de Zayas nacía otra
un diálogo lo que presenciaremos. Los que no so-
generación literaria y política. La Generación del Centenario avizoró una ma-
mos cronológicamente sus coetáneos pero concor-
nera muy diferente de recepcionar a Martí y rescatar una república secuestra-
damos con sus ideas debemos apoyarlos.
da por el golpe de estado de Fulgencio Batista. En esos ejemplos primó más la
No existen generaciones históricas, existen gene-
ruptura que el diálogo, eso les confirió un carácter revolucionario.
raciones que hacen historia. El movimiento de una
Según el viejo diccionario Aristos, diálogo es: “Plática entre dos o más perso-
sociedad no está únicamente en las continuidades,
nas, que alternativamente manifiestan sus ideas”. Entonces esa conversación
también está en los cambios, y las generaciones nue-
debería ser en condiciones de igualdad que permitiera a los interlocutores ser
vas son las encargadas de eso. Junto a ellas debemos
capaces de exteriorizar y difundir sus puntos de vista.
estar. O mejor, debemos ser parte de ellas.
Las generaciones que mencionamos tuvieron condiciones para esto: todas
fundaron organizaciones formales o informales; gestaron órganos o medios
para propagar sus concepciones; mantuvieron una actitud muy crítica respec-
to a las generaciones que les antecedieron y encabezaron proyectos de cambio.
De acuerdo a lo anterior, la última generación visible en Cuba sería la que
se nucleó alrededor de la revista Pensamiento Crítico, un grupo de jóvenes
revolucionarios que alertaba sobre las vías para encauzar un socialismo dife-
rente al soviético. Su clausura interrumpió por muchos años la expresión de
varias generaciones que, llenas de inquietudes, quedaron sin medios viables
para demostrarlas. Pero el tiempo ha pasado, y la revolución tecnológica en
IV cristales enfurecidos.
LUISA ONEIDA LANDÍN para qué quiero ahora la gloria
somos hormigas en reino… si tú me faltas para echarte en cara
a veces nos golpean que puedes levantarte y hacer lo mismo.
grietas que el amor deja hija que desciendes
Ritual de la Hormiga patadas inevitables quién no tranquila
fue aplastado alguna vez. con un silencio distinto rondándote el cuerpo.
I envidio a las calladas emisarias
de la humildad. hija de mi corazón no temas
el agujero es un distante abismo. yo arribo en tu sueño y te guardo.
el pan un lento soborno del cuerpo. apuesto otros misterios perdona este tiempo en que nos separa
padecemos la gula si negociamos el instante la necesidad de probarnos
traemos costumbres en el hombro el retorno del caos con piel de insecto. si alguna vez el destino puede ser vencido.
y un maremoto de palabras asfixiantes en la garganta. no sé por qué digo estas cosas
giramos en redondo como astros Padre Nuestro, que estás en los cielos… te busco en el leve sonido de mi cuerpo
hilamos el destino en tensas cuerdas. cuando cruje el viento en su letanía.
V te busco en el arete que pierdo cuando
II me equivoco.
no sé por qué compramos mentiras te busco en la cicatriz de mi oreja izquierda.
las hormigas no ceden su espacio por qué vendemos promesas
nosotros defendemos el nuestro con las manos en no sé por qué vaciamos el tiempo
hija mía que está en la flor
la tierra en bolsillos huecos.
en la mariposa que escolta mi ventana
el cielo nos pertenece quién lo divide. deberíamos aprender de la gota
viva en la angustia de la noche.
pero la tierra arde en nuestras manos que cae
nutre la misma sangre que por ella se derrama impecablemente exacta.
callada
la tierra es vida y hacia ella vamos… tan callada.
por la tierra andamos cada día más egoístas. VI
otro día doliéndome
tanto desigual abismo y nada nos salva. con su pie cruzado
son las tres de la tarde en La Habana
impaciente
III y en algún sitio del mundo ahora es de noche
yo escucho ruidos ajenos mientras medito frente otra puesta
son las tres de la tarde y debo cambiar de sol.
tengo miedo y poros como ventanas qué lluvia vendrá a dejarme
una pequeña pluma un reloj roto en el pulso ciento ochenta grados
un giro total al de ayer... más gris que en esta tarde.
pocos zapatos y mucho camino.

VII camino –nadie sabe cómo–


tengo libros no escritos sobre el teclado incierto. hija mía que estás en todas partes.
miraba al mismo sitio
me van a perdonar los hijos de mis hijos
con mi ritual de hormigas
los hijos de los hijos de mis hijos
y no hallaba respuesta.
qué será mañana el porvenir
entre la hierba del fondo
si no guardo esta foto
palitos de tendederas
sin el vidrio que la hiere.
muñecos rotos

62 • Neodual Neodual • 63
(pie en el muro-cabeza engominada-pantalón de galones con elegancia nunca
Finca de San Antonio (Carrusel)
JAMILA MEDINA RÍOS y un rojo de rasillas y un verde deslavado (ni en volanta)
sobre el cuerpo y los pinos cabezabajo y concentrada en lo mínimo:
que toca adivinar): el pelo contra el rostro
Donde se encabritaban ayer las bestias de Santiago Abreu
así te erguiste. y-entre-mechones vigilar los cascos
(yegua y lucero
potro en que te caíste: paticas delanteras resentidas como si entre la yerba trasquilada
Donde los puercos hoy por el palmar con mis propios pies fuera
caballos blancos manchados
(por el palmiche) hallando posa-dura entre las conchas
no negros/ no alazanes
y lagartijas coroneles por donde menos hieran.
alguno domado de ti
entre las piedras como de playa amontonadas
y carrusel de caballitos dorados
desde el potrero/ todavía Vástagos
yegua de oreja en dos puntas
saltando la cortina de algarrobos casi todos con jota/ sin par caballería
camino a tus clases de inglés
se ve el mar (de Caibarién). arrejuntada a veces dispareja:
camino de buscar gofio…)
¿Sería que en la terraza podías ver retratos no desmienten nuestro paso.
allí la casa
su giratorio salto? Sin herrajes
(no la misma
¿O eran los campos de maíz del cementerio silbando por las piedras resbalonas
alzada un poco hacia el costado
«Eloísa Carrillo» viniendo de la noche al día
y dentro, sí: la Singer/ la coqueta/ las sábanas de boda
con su bomba de agua (salvados de humedad
el piso de damero/ el orinal
para esponjear las flores/ de Juan y Margarita también erguidos donde prende la ribera mamey)
y fuera, sí: batea y abrevadero limoso).
(emplumados canarios)? papiros-paragüitas-clavellinas
Allí la finca/ suspensa en tres horcones
allí cafetos/ queso-cuajado en vientre de puerco así flotábamos:
Hubo un tiempo en que dijiste (o soslayaste): abrequecierra círculos
pozo ciego
Atrás Infierno/ finca bailando remolinos
carneros-casco endurecido por sulfato de cobre
atrás rumiando en verde
y un trío de ocas sordas ladradoras
la nata de nenúfares/ lechosa (tijereta/ torniquete/ escarbadura)
(José Benito/ Jorge Nemesio/ Juan Eduardo).
de la Poceta de la Media Legua… el marco terracota de otras fotos.
Allí los partos de bestias
Después no Y allí donde se limpia por sembrar
que si no levantan cabeza (es literal/ es una lápida)
enseguida o después en claros a que llaman tumbas
no sobreviven.
bajamos a las pozas y al sudor de(l) membrillo a veces ensillábamos
después nos empinábamos en ubre (poniéndole corral) al dienteperro
A ti te amamantaron
y como en tiovivos nos trajiste y otras nos íbamos nadando
(vía Infierno/ vía La Caridad) llegaste a San Antonio
a embadurnarnos verde que te quiero ver (trote/ marcha/ galucha) en cabalgata
por fin
la entrepierna en que ahorcajábamos caballo. por el potrero
como una anunciación
(j/alado por duras manos). rumbito a Caibarién.
Jineta/ no fue/ precisamente
Quizás no mayorazgos pero esp/cuela sí:
mi expresa voluntad
del banco en predios de la casa
(o no lo supe procurar
a Yaguajay/ a ese instituto en las (afueras de) Matanzas
o se me hizo que no correspondía).
errando entre paisajes gemelares
Bailoteaban mis huesos la montura
abrequecierra círculos

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Bordeando el muro de la Escuela de Artes y Oficios puedes Trueno, relámpago. como en un florecimiento
SOLEDIA RÍOS
llegar a la Casa. Ellos han de estar allí: la Madre sobre todo. Fuerza dispar. Cae al revés
Es mi salida. Pero… en mi mano entra y se pierde
¿Será posible cruzar ese mar muerto? el iruke. Oyá en mi cabeza engullido
¿Dónde está el mar azul iridiscente? trompo (arcoíris) por el cuerpo del hombre…
triple espiral
Arrecia la sequedad, llega hasta la garganta, amenaza la zumbando… Este hombre que ya se deja ver
S/T glotis. todo majestad, sentado
Te han dicho acariciar en cruz (¿verbo?) la base del ester- Y momentáneamente ni cielo ni nubes ni espigas ni verdor. a la derecha del portón
nón… Ahí Tajos. piel sanguínea, traje
Siete pasos a la derecha, siete a la izquierda… la Vida. Encrucijada. crudo
Camino camino camino. Ahí el Conocimiento. blanco
Y lentamente, la calma. Lentamente… de pies
El barrio, las manzanas, como desde el aire, alineadas, per- Siete pasos a la derecha, siete a la izquierda. a cabeza.
fectas. Siete pasos al frente, siete pasos… A la vista, se abre una línea oscura, brusca, sobre el hoyo
Yerba baja. practicado en la tierra. 26 de noviembre, 2003
Jardines bajos. ¡Un portón de madera…! Dos hojas, forma decantada. Línea cortada en zigzag… de la que brotan pies y brazos y en
¿Será aquí El Lugar? Sin ruido. el lugar de la cabeza un gorro rojo sobre otro gorro rojo. Un
Toqué, empujé ligeramente, con cautela. gorro frigio sin estrella.
Recuerdo el augurio: «Soledad, ¿tú ves dónde estás ahora? Sale una voz que al parecer ya estaba tras el portón. Y la Mujer (línea, anomalía) convulsiona.
Pues vivirás en un barrio de grandes casas con ventanales, Esperando. Reinicia la trasmutación. Una aceleración que no te deja
jardines, fuentes, arboledas…» Pero solo voz, no hay cuerpo. ver: brazos tragados por el tronco, piernas tragadas… El
¿Será este El Lugar…? La Voz dice que ya se están dando consultas. tronco mismo (línea deshecha) reduciéndose…
El gorro frigio
Camino y camino y camino. _ ¿Consultas…? supurante
Y tanto he caminado que ya no sé… resto informe.
El mar está a mi izquierda. Mar sucio, sin oleaje. Yo solo quiero cruzar, alejarme de ese mar, esa abomina-
Seguir camino, ¿es posible? ción. Busco salida, mi salida. Una sacudida y otra y otra
¿Cómo es que no había visto el mar…? ¿Cómo es que no me y
percaté…? Pero detrás de la Voz, inmediatamente, está la Consultante.
Cruzarlo, ahora, ¿es posible? Mujer normal diríase: cabeza, tronco, extremidades.
No obstante, cuerpo cerrado, sin emisión.
Empieza así la desesperación, esa resequedad en la boca
que inmoviliza la lengua. La mujer, de pronto, cae al suelo, revuelve la tierra, se revuel-
Empieza el nudo (dolor: el hueso de la cabeza del corazón), ca ella misma, semidesnuda, en giro anti-reloj. Repta como
empieza el salto…, la culebra interior a sacudirse. un ofidio hasta donde es visible. Desaparecerá... ¿Se disuel-
ve?
A lo lejos había visto, tal como es, la Loma del Chivo. Era Y entonces, tajante, el REMOLINO.
una guía. (¿Oyá?)

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colaboradores
ERIAN PEÑA PUPO (Holguín, 1992). Poeta, narrador y ensayista. Licenciado en Periodismo por la Juan, Puerto Rico, 2015) y (Des)equilibrios y una cuerda para asirse (EDP University, Puerto Rico,
Universidad de Holguín, en 2016. Egresado del Centro de Formación Literario Onelio Jorge Cardoso. 2015). Poemas suyos pueden leerse en antologías como El manto de mi virtud. Poesía cubana y uru-
Ganador de disímiles premios nacionales, entre los que se destacan: XXI Premio Nuevas Voces de la guaya del siglo XXI (Editorial Universidad del Trabajo de Uruguay – Editorial Letras Cubanas, 2011),
Poesía y Premio Juegos Florales Santiago de Cuba, en 2014; Primer premio del Concurso Nacional La Isla en versos. Cien poetas cubanos (Ediciones La Luz, 2011), Barcos sobre el agua natal. Antología
de Periodismo Manolito Carbonell 2016, II Premio del XV Concurso de Ensayo “Viña Joven”, de San- de poesía hispanoamericana desde el siglo XXI (Proyecto Literal y Ediciones Leteo, México-España,
tiago de Cuba, en 2017, y Premio III Concurso Cuentos Fríos, de Matanzas, en 2018. Tiene publicado 2012), entre otras publicadas dentro y fuera de la Isla.
el poemario Puertas para huir de la casa (Ediciones Santiago, 2015) y varios artículos suyos aparecen
en la compilación Leer seduce (Ediciones La Luz, 2015). Actualmente labora como periodista en el
Centro de Comunicación Cultural La Luz, de Holguín. REYNA ESPERANZA CRUZ (Puerto Padre, 1956). Poeta y promotora cultural. Miembro de la
UNEAC, del Grupo Iberoamericano de la Décima Espinela Cucalambé, de la Agrupación de Mujeres
Décima al filo y la Agrupación A la Décima. Tiene publicados siete cuadernos de poesía, tanto para
JESSICA PÉREZ QUESADA (La Habana, 1989). Poeta. Ha merecido el Premio Nacional de Poesía adultos como para niños. Sus obras aparecen en diversas antologías nacionales e internacionales.
Reina del Mar 2016 con su cuaderno Cirquísima. Poemas suyos han sido publicados dentro y fuera
de Cuba en revistas literarias e incluidos en las antologías como Un solo mare y la parola (Grupo
GRECAM, 2016, Italia) y Devenir Isla (Cinosargo Ediciones, 2018, Chile). Labora actualmente como RAMÓN ELÍAS LAFFITA (Baracoa, 1968). Escritor y editor. Ha publicado los libros de poesía: Las
agente literaria en la Agencia Literaria Latinoamericana. tribulaciones de Adán (1991), Contaminados por la sombra (1998), Sueño mágico (poesía infanto-
juvenil, 2002), Palabras hacia la noche (2005), Sótanos con olor a brea (Editorial Letras Cubanas,
2015, Editorial Unos & Otros, EUA, 2016) e Historias para despertar (2017). Ha sido compilador de la
DANIELA DÍAZ (La Habana, 1994) Escritora, artista visual, fotógrafa y curadora de arte. Graduada antología poética Espacio mínimo (2008). Su obra ha sido reseñada y publicada en revistas de países
de Artes Plásticas del Centro Experimental de las Artes Visuales José Antonio Díaz Peláez y Diseño como Rusia, Brasil, Dinamarca, España, Venezuela, Estados Unidos, Alemania, México y Canadá.
Editorial de Ed. Letras Cubanas, Instituto Cubano del Libro, en 2015. Sus obras, tanto pinturas como
fotografías, se encuentran en México, Italia, España, Estados Unidos y Cuba.
ZURELYS LÓPEZ AMAYA (La Habana, 1967). Poeta, narradora y periodista. Entre sus libros publica-
dos se destacan Pactos con la sombra (Editorial Unicornio, Cuba, 2009), Rebaños (Editorial Extramu-
AMAYA A. ALVAREZ (La Habana, 1988). Poeta y narradora. Licenciada en Derecho de la Universi- ros, Cuba, 2010), ambos reditados por la Editorial Atom Press, de Estados Unidos, en 2010; Minúscu-
dad de la Habana. Egresada del Centro de Formación Literaria Onelio Jorge Cardoso. Es parte del los espejos (Editorial Latin Heritage Foundation, EE.UU, 2011), La señora solitaria (Ediciones Unión,
taller literario que tiene lugar en la Galería César Leal del municipio Regla, así como de la Revista Cuba, 2014), Lanzar la piedra (Editorial Corazón de Mango, Colombia, 2015), Levitaciones (Ediciones
literaria Confluencias, un torbellino de la luz en el caos. Matanzas, 2016), La vela y el náufrago (Editorial Polibea, España, 2016), La carpa infinita (Editorial
Mantiseditores, México, 2017) y A la llegada del invierno (en prensa Editorial Letras Cubanas, 2018).
Tiene en proceso de publicación El barco elegido por Ediciones Unión.
NÁTHALY HERNÁNDEZ CHÁVEZ (Matanzas, 1994). Escritora y ensayista. Ganadora del Premio
Provincial Bonifacio Byrne, Encuentro Debate Provincial de Talleres Literarios y Premio Nacional de
Microrrelato Abriendo Puertas, en 2016. Han sido publicados poemas y ensayos suyos en revistas MILHO MONTENEGRO (La Habana, 1982). Poeta, narrador y periodista. Egresado del Centro de
literarias como Matanzas y Furman 217. Recientemente ha sido incluida en las antologías Gotas y Formación Literaria Onelio Jorge Cardoso. Ganador de diversos premios y reconocimientos nacio-
Hachazos, de España, y en Versos en el horizonte de la Isla, de Chile. nales e internacionales, entre los que destacan: Premio Nacional de Poesía Pinos Nuevos (2017), Pre-
mio Beca de Creación Prometeo en el XXII Premio de Poesía La Gaceta de Cuba, 1er Premio en el
III Concurso Internacional de Haikus Ueshima Unitsura (2018), Toledo, España. Ha publicado los
YANELYS ENCINOSA (Bejucal, 1983). Poeta y ensayista. Tiene publicado los cuadernos Del diario cuadernos Rostros de ciudad (poesía, Editorial Montecallado, 2015), Muchachos que no merecí (poe-
de Eva y otras prehistorias (Ediciones Unión, 2008, Premio David de Poesía, y EDP University, San sía, Editorial Espiral Publishing, EE.UU, 2017) y Erosiones (poesía, Editorial Letras Cubanas, 2017).
colaboradores
Su obra poética y sus cuentos han sido recogidos en diversas antologías y revistas, en países como LÁZARO ORIHUELA MARTÍNEZ (Batabanó, 1988). Poeta y ensayista. Licenciado en Estudios So-
Estados Unidos, Uruguay, Italia, Guatemala, España y Cuba, así como traducida al inglés e italiano. cioculturales. Es parte del Proyecto de Haiku Senda del Sur. Ha publicado en la Gaceta trimestral
HELA Hojas en la Acera y la Revista Haiku & Haibun Magazine. Mantiene activo, junto a los de Jor-
ge Braulio y Lester Flores, uno de los tres blogs cubanos dedicados al Haiku: “Decir la Nada”.
IRASEMA CRUZ (La Habana, 1971). Poeta y actriz. Ha obtenido una docena de distinciones litera-
rias, entre ellas el Premio Abdala de la Unión Árabe de Cuba, en 2008; el Premio Nacional de Talleres
Literarios, en 2007, y el Premio Farraluque, de poesía erótica, en 2010. Integra varias asociaciones de LESTER FLORES (La Habana, 1981). Escritor.
poetas: A la Décima y el Grupo de Creación Poética de la Fundación Nicolás Guillén. Poemas suyos
han sido publicados en revistas y antologías en Cuba, Italia y España.
JORGE BRAULIO RODRÍGUEZ (La Habana, 1950). Profesor de la Facultad de Artes Visuales del
Instituto Superior de Artes (ISA). Master en Educación por Arte y Animación Sociocultural. Pro-
DIANETT QUINTANA SOLÍS (Matanzas, 1996). Ensayista. Actualmente cursa el quinto de la ca- motor del estudio y la escritura del Haiku en Cuba. Miembro del equipo de redacción de la Revista
rrera de Historia del Arte, en la Facultad de Arte y Letras, de la Universidad de la Habana, y dirige el Internacional de Haiku Hojas sobre la Acera (HELA). Premio al Mejor Haiku (ex-aequo) en el IV
proyecto de Revistas de Cabeceras. Concurso Internacional de la Facultad de Derecho de Albacete, Universidad de Castilla-La Mancha,
en 2012. Sus haikus han aparecido en antologías de Canadá, Colombia, España, Estados Unidos de
América, Francia y Rumania. Ha publicado como antologador y traductor Haiku: Este Otro Mundo,
ELENA RIVERO (La Habana, 1992). Escritora. Presidenta de la Asociación Hermanos Saíz de Ma- del escritor norteamericano Richard Wright (Editorial Arte y Literatura, 2007), y Todo en tres líneas
yabeque y coordinadora general de la Jornada de Poesía Ítaca. Poemas y cuentos suyos han sido (Editorial Gente Nueva, 2013).
publicados en revistas españolas como Oriflama, Aguamarina e Inamar. Su obra puede leerse en las
selecciones Antología de poesía cubana (Editorial Costella Felina, 2014) y De Mayabeque te cuento
(Editorial Montecallado, 2016). ALINA B. LÓPEZ HERNÁNDEZ (Matanzas, 1965). Profesora, ensayista y editora. Doctora en Cien-
cias Filosóficas. Autora del libro de ensayo Segundas lecturas: Intelectualidad, política y cultura en la
República burguesa (Ediciones Matanzas, 2013 y 2015). Galardonada con el Premio Anual de Inves-
JULIÁN BRAVO RODRÍGUEZ (La Habana, 1990). Filólogo y editor. Bachiller en Humanidades por tigación Cultural, del Instituto de Investigación Cultural Juan Marinello, y Premio Puertas de Papel,
el Instituto Superior de Estudios Eclesiásticos Padre Félix Varela. Es coeditor de la revista literaria Instituto Cubano del Libro, en 2014. Actualmente labora como editora en Ediciones Matanzas.
Confluencias, un torbellino de luz en el caos. Ha obtenido Mención en El vuelo de Samandar y Tercer
lugar de Kukai-HELA, en 2015.
LUISA ONEIDA LANDÍN (La Habana, 1951). Poeta y promotora cultural. Licenciada en Estudios
Socioculturales. Miembro de la UNEAC. Entre sus poemarios publicados se encuentran Poemas (La
MARTHA LUISA HERNÁNDEZ / MARTICA MINIPUNTO (Guantánamo, 1992). Poeta, teatrológa Tinta del Alcatraz, México, 2000), La Habana tiene más de un jueves (Editorial Extramuros, Cuba,
y artista performance. Coordinadora del Laboratorio Escénico de Experimentación Social (LEES), 2005), Marcas de Agua (Editorial El Mar y La Montaña, Cuba, 2006), Muchacha que baila sobre mis
Espacios Ibsen, Residencia de Creación Zona Ibsen e Inservi. Creadora del proyecto Castillos en el papeles I (Amarillo Editores, México, 2007) y Paisaje en azul (La Tinta del Alcatraz, México, 2011). Es
aire. Ha dirigido varias puestas en escena como La que nunca conocí y Charlotte Corday y el animal, autora de la compilación poética del sector azucarero Verde ramo en el aire sin dueño (Pub. Azucare-
en coautoría con Rogelio Orizondo. Ha obtenido importantes galardones literarios como Premio ras, Cuba, 2005). Aparece incluida en antologías de poesía realizadas en Cuba, Italia, México, España,
David de Poesía 2017, con su poemario Días de hormigas (puesta en escena), y el Premio Pinos Nue- Estados Unidos, Chile, Guatemala, Canadá y Siria.
vos 2018, con su libro Pezuñas (trilogía del nacimiento). Actualmente labora como dramaturgista de
Teatro El Público, de Carlos Díaz.
colaboradores

JAMILA MEDINA RÍOS (Holguín, 1981). Filóloga, escritora, ensayista y editora. Ha publicado
el ensayo Diseminaciones de Calvert Casey (Premio Alejo Carpentier de Ensayo 2012; Editorial
Letras Cubanas, La Habana, 2012); los libros de poesía Huecos de araña (Premio David 2008;
Ediciones Unión, La Habana, 2009), Primaveras cortadas (Proyecto Literal, México D.F., 2012),
Del corazón de la col y otras mentiras (Colección Sureditores, La Habana, 2013), Anémona (Sed
de Belleza, Santa Clara, 2013), País de la siguaraya (Premio Nicolás Guillén 2017; Editorial Letras
Cubanas, 2017), así como las antologías Para empinar un papalote (Casa de Poesía, San José,
2015) y Traffic Jam (Atarraya Cartonera, San Juan, 2015). En narrativa es autora de Ratas en la
alta noche (Malpaís Ediciones, México D.F., 2011) y Escritos en servilleta de papel (Ediciones La
luz, Holguín, 2011).

SOLEIDA RÍOS (Santiago de Cuba, 1950). Poeta. Entre sus libros de poesía se destacan El libro
roto (Ediciones Unión, Cuba, 1995 y La Palma, Madrid, 2002), El texto sucio (Ediciones Unión,
1999 y Kenning Editions, EE.UU, 2018), Libro cero (Editorial Letras Cubanas, 1998), Fuga (Antolo- Este #00# de Neo Dual está ilustrado con obras de:
gía personal, Ediciones Unión, 2004), Secadero (Ediciones Unión, 2009), Escritos al revés (Edito-
rial Letras Cubanas, 2009 y 2011, Premio de la Crítica Literaria), Estrías (Editorial Letras Cubanas, LUIS MIGUEL RIVERO (pp. 8, 9, 10, 11, 12, 13, 15, 44,
2013 y 2015, Premio Nacional de Poesía Nicolás Guillén y Premio de la Crítica Literaria) y A wa 45, 46, 47, 48, 49, 50 y 51)
nilé (Editorial Letras Cubanas, 2017). Es ideadora de la antología El retrato ovalado (libro experi-
mental, con 34 autoras, Editorial Thesaurus, Brasil, 2012, Ediciones Unión, Cuba, 2015 y Winngs JORGE BRAULIO RODRÍGUEZ (pp. 20, 21, 22, 23,
Press, EEUU, 2018). 24, 25, 26, 27, 29, 30, 31 y 32)

LEONEL COBO IMAS (pp. 61, 62 y 65)

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