Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Con la Anunciación y la Encarnación, María entrara en la historia por la puerta más grande pues,
por medio del Ángel Gabriel, recibió la mejor noticia de todos los siglos: que Dios Había decidido
poner fin al dominio del pecado y de la muerte por medio de la Encarnación del verbo
San Andrés de Creta, canta Las glorias de María, la hija de Ana, también digna de alabanza por
ser la madre de la virgen y la abuela divina.
¡Oh Purísima madre de Dios! te reconocemos como nube, huerto, puerta de la luz, mesa
y vellocino; vasija que contiene el Maná y dulzura para el mundo.
San Juan damasceno, afirma que si algo nuevo bajo el sol: lo nunca visto, la virgen madre, en
quién la Santísima Trinidad ha puesto sus ojos.
Santo y poderoso el hijo de Dios y Dios unigénito que hoy te hacen nacer como
primogénita de una madre estéril; para que el mismo, el unigénito del padre y primogénito
de toda creatura, naciese también como unigénito de ti, su madre Virgen, primogénito de
entre muchos hermanos, semejante a nosotros, que de ti participa en la carne y en la
sangre. Sin embargo él no te hizo nacer o de sólo un padre, o de sólo una madre, para
que sólo unigénito quedarse reservado el ser unigénito entre todos: porque sólo él ha
nacido unigénito del padre y único unigénito de madre.
Era conveniente que naciera como primogénita aquella de la que había de nacer el
primogénito de toda criatura, en quién subsisten todas las cosas.
Oh felices entrañas de Joaquín, de las que salió una descendencia absolutamente sin
mancha !Oh seno glorioso de Ana, en el que poco a poco fue creciendo y desarrollándose
una niña completamente pura, y después que estuvo formada, fue dada a luz.
Vosotros, observando la castidad que prescribe la ley natural, habéis sido agraciados con
unos dones que están muy por encima de la naturaleza ya que habéis puesto en el
mundo aquella que sin obra de varón fue madre de Dios.
San Ambrosio y San Epifanio, nos hablan del nombre de María y ambos coinciden en que sin
el apelativo de “la Virgen” el nombre no está completo.
Abraham se le dio el título de amigo de Dios y jamás se le fue quitado. A Jacob llamado
Israel, nombre que nunca ha sido cambiado.A unos Apóstoles se les dio el nombre de
Boanerges, o sea, hijos del trueno, y este nombre no se les retirara nunca. Así también
Santa María recibió el nombre de virgen, nombre que jamás será cambiado. La santa
virgen, en efecto permaneció incorrupta.(San Epifanio)
San Basilio alude la misión de San José de ser testigo de La pureza virginal de María: una
virgen, pero entregada como esposa a un hombre, fue concebida idónea para la realización de
este misterio, a fin de que así fuese honrada la virginidad y no fuese despreciado el matrimonio.
María, además, tuvo así un esposo Custodio de manera que él fuese un testimonio doméstico de
su pureza y no se diera ocasión a las calumnias para acusarla de que hubiese violado la
virginidad.
San Juan Crisóstomo y San Agustín aclaran que se trata de un matrimonio virginal en el que
San José ejercería de Padre de Jesús, es más el obispo de Hipona afirma que María y José son
padres de Jesús
Cómo es que era padre? Porque su paternidad era tanto más auténtica cuando más
casta.Ciertamente era considerado como padre de nuestro señor Jesucristo, pero de otra
manera es decir como los demás padres que engendran en la carne y reciben hijos por
cauce distinto al solo efecto espiritual.
María y José por su fiel matrimonio merecieron ser llamados padres de Cristo, y no sólo
ella mereció ser llamada madre, sino también el padre, como cónyuge de su madre; uno y
otro por el efecto, no por la carne; es decir: él es padre solamente por el afecto; ella lo es
también por la carne; los dos, son sin embargo, son padres.
Si no me equivoco la razón es esta: el Salvador debía nacer de una virgen que no sólo
estuviera desposada, sino que, como dice (Mateo 1, 25) había ya ha sido entregada al
varón, si bien aquel varón no la conociera. Esto fue así con la finalidad de evitar la
deshonra en que habría incurrido la virgen al ponerse de manifiesto que estaba
encinta.