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Magia simpatética.
La magia es un sistema falso de leyes naturales así como una guía errónea de
conducta. Es una ciencia falsa y un arte abortado.
La magia establece que las cosas se actúan recíprocamente a distancia
mediante una atracción secreta. Las cosas pueden afectarse entre sí a través de
un espacio vacío.
El mago deduce que puede producir el efecto que desee sin más que imitarlo.
Ley de contagio: las cosas que una vez estuvieron en contacto, se actúan
recíprocamente a distancia, aún después de haber sido cortado todo contacto
físico.
Todo lo que haga un objeto material afectará de igual manera a la persona con quien
este objeto estuvo en contacto.
Presume que las cosas que estuvieron una vez en contacto, siguen estándolo.
Suele pensarse que los animales poseen cualidades que pueden ser útiles al
hombre. Por ej.: llevando como amuleto una parte del animal, acompaña al
hombre la cualidad que tal animal haya tenido.
Los antiguos estimaron cualidades a las piedras preciosas. Por eso se las ha
usado como amuletos mucho antes que como adornos.
Magia contaminante:
El ejemplo más familiar de este tipo de magia es la relación que se cree que
existe entre la persona y su pelo, uñas, etc. Entonces, con estas partes, será
posible actuar sobre la persona. Esta superstición es universal.
Otra parte que comúnmente se cree permanece en simpatética conexión con el
cuerpo, es el cordón umbilical. Si es bien conservado, su suerte será próspera,
sino todo lo contrario. En muchas partes del mundo, el cordón es considerado
como ser viviente.
También existe relación entre un hombre herido y el agente de la herida. Así
todo lo que se haga al o para el agente afectará al paciente para su bien o para
su mal. Por ej.: escupirse la mano golpeadora al arrepentirse de lastimar a otra
persona.
Se puede proyectar la magia por medio de las impresiones o huellas dejadas
por la persona en la arena o tierra. Así, dañando la huella, se dañará el pie.
Que la tribu sea regida por una sola cabeza fuerte y decidida fue favorable al
progreso social, industrial e intelectual.
La sociedad extendió su poderío por la fuerza de las armas y por la sumisión
voluntaria de las tribus más débiles, y así adquirió riquezas y esclavos.
Comenzaron a dedicarse a la sabiduría, que es el más noble y más poderoso
instrumento del mejoramiento del destino humano.
Los progresos intelectuales que se revelan en el crecimiento del arte y la ciencia
y el desarrollo de perspectivas más liberales no podían disociarse de los
progresos económicos o industriales, los que a su vez recibían un impulso de las
conquistas del imperio.
Los primeros grandes saltos a la civilización fueron dados por sociedades donde
el jefe supremo reclamaba y recibía la servil obediencia de sus súbditos en su
doble carácter de rey y dios. Los gobiernos autocráticos ayudaron a la
humanidad, y paradójicamente, a la libertad.
La profesión pública de la magia contribuyó a emancipar a los humanos de la
esclavitud de la tradición, elevándolos a una vida de mayor libertad y dándoles
una visión más amplia del mundo.
Magia y religión.