Está en la página 1de 3

Resumen TRES ENSAYOS SOBRE LA TEORIA SEXUAL (Sigmund Freud)

Este libro consta de tres partes.


Las aberraciones sexuales
La sexualidad infantil
La metamorfosis de la pubertad
POR PARTES
1. Las aberraciones sexuales
Aberración sexual es toda aquella conducta que implique una desviación con respecto al
objeto sexual o con respecto al fin sexual. Por ejemplo: respecto del objeto, encontramos la
inversión y la preferencia por niños o animales; y respecto al fin, encontramos las
transgresiones anatómicas y los fines preliminares. Los invertidos pueden ser absolutos
(homosexuales), bisexuales u ocasionales. Las transgresiones anatómicas son por ejemplo la
sexualidad oral, anal o de objetos (fetichismo). En tales casos, la aberración implica quedarse
en dichas zonas anatómicas, sin pasar al coito genital.
Gracias a dichas indagaciones, llegó a la conclusión siguiente: al comienzo de la vida de toda
persona, no está aún organizada la sexualidad, y lo único que podemos encontrar son
pulsiones parciales dirigidas hacia diversos fines (oral, anal, etc.) y hacia diversos objetos
(padre, madre, etc.). En el curso del desarrollo, todas estas pulsiones se van organizando
'bajo la supremacía genital', o sea, se logra una síntesis que, en la normalidad, tiende hacia
un solo fin (genital) y hacia un solo objeto (el otro sexo exogámico). En los perversos, es
decir, en las aberraciones sexuales, no se logró esta organización bajo la supremacía genital,
y en los neuróticos esta organización quedó reprimida, deaquí que Freud señale que la
neurosis es el 'negativo' de la perversión (el perverso siente el placer, pero el neurótico le da
asco pues lo reprimió)
De manera entonces que en la infancia no se encuentra ni un fin único ni un objeto único:
hay varios instintos parciales orientado cada uno hacia su zona erógena correspondiente
(oral, anal, fálica, etc.), encontrándose también inclinaciones ambivalentes hacia el objeto
(amor y odio tanto hacia el padre como hacia la madre).
2. La sexualidad infantil
Los niños naces con su propio instinto sexual. El acto se refleja en un roce o en los obvios
signos de excitación, caricias en juegos.
El caso es que des de los 0 hasta los 7-8 años se explica que se padece una amnesia infantil,
despertando a la sexualidad y entendiéndola de manera equivocada sin una explicación clara
a esa edad, en la que se despierta al sexo.
Concluimos entonces que en la infancia hay actividad sexual, lo cual se manifiesta por
ejemplo en el chupeteo del pulgar (sexualidad oral), en el autoerotismo, etc. Esto significa
que en el cuerpo infantil existen zonas erógenas, que constituyen fuentes de placer sexual.
Por consiguiente, el fin sexual infantil no es otro que el de hacer surgir placer por
estimulación adecuada de la zona erógena elegida. Por ejemplo, retener la materia fecal en
relación a la zona erógena anal, es una fuente de placer. Cabe observar que hay relación
entre las zonas erógenas y las zonas de actividad fisiológica como el comer (oral), el defecar
(anal) y lamicción (pene y zona clitoridiana).
Se puede hablar entonces de una masturbación infantil, puesto que el niño estimula esas
zonas erógenas. Esta masturbación infantil presenta tres fases. Primero, en la edad de la
lactancia (pecho-boca); la segunda se extiende hasta aproximadamente los 4 años, y tercero,
la masturbación de la pubertad, única que fue estudiada antes de Freud. Importa
especialmente la segunda etapa, porque la represión de los recuerdos en esta fase produce
después cuadros psicosomáticos y neuróticos. En esta edad no es necesario que el niño sea
seducido o corrompido por otros, pues su actividad sexual surge también espontáneamente
por causas interiores.
Hacia el tercer o cuarto año de vida, surge en el niño un instinto de saber o de investigación,
y lo primero que quiere investigar es su sexualidad, quiere buscar una respuesta y para ello
la primera teoría que inventa es que ambos sexos poseen el mismo aparato genital (el pene).
También inventan teorías sobre cómo se hace el acto sexual (por el pecho, por el ombligo,
etc.), y sobre qué hacen los padres cuando llevan a cabo dicho acto (cree que se están
agrediendo, lo que constituye la concepción sádica del acto sexual).
3. La metamorfosis de la pubertad
En la pubertad aparece un nuevo fin sexual, hacia el cual tienden todos los instintos parciales
bajo la supremacía de la zona genital. Lo más singular de la pubertad es el crecimiento de los
genitales externos y el desarrollo de los genitales internos (capacidad para producir semen
ypara recibirlo). Este aparato es puesto en actividad por tres clases de estímulos:
- Medio externo (excitación de las zonas erógenas)
- Medio interno (factores orgánicos)
- Vida anímica (como almacén de impresiones exteriores y estación receptora de estímulos
internos).
La excitación sexual se expresa bajo dos formas: somática (erección y lubricación), y anímica
(tensión apremiante). El hecho de que el aumento de la tensión sexual sea placentero (y no
displacentero como cabría esperar de un aumento de tensión) se explica por el placer
preliminar y el placer final. En el placer preliminar hay mínimo placer y máxima tensión, y
luego se pasa al placer final (orgasmo) para maximizar el placer y minimizar o descargar la
tensión. La nueva función de las zonas erógenas es hacer posible la aparición de mayor
placer por medio del placer preliminar.
El peligro del placer preliminar es que implique un máximo placer y una mínima tensión. De
esta forma, no podría pasarse al placer final cuyo fin -el coito- es la procreación: el placer
preparatorio sustituye al fin sexual normal, lo que suele originar perversiones. Esto es
debido a un excesivo aprovechamiento de una determinada zona erógena (y del
correspondiente instinto parcial) para la obtención del placer, durante la infancia. La mejor
garantía para evitar esta supremacía del placer preliminar estaría en la preformación infantil
de la primacía de la zona genital.
El problema de la excitación sexual.- La acumulación de materia sexual (semen)
provocaneurológicamente la tensión sexual. A su vez, la excitación de las zonas erógenas
eleva la tensión (debido a una previa conexión anatómica entre ellas y los centros
nerviosos). Las excepciones a esta hipótesis son la mujer, el niño y los castrados masculinos,
en donde a pesar de no haber acumulación de semen, sí existe excitación sexual. Según se
ve en los castrados masculinos, se deduce que la excitación sexual puede ser en forma
importante algo independiente de la acumulación de productos sexuales.
Teoría de la libido.- La libido es una fuerza cuantitativamente variable que permite medir los
procesos y las transformaciones de la excitación sexual. La libido tiene también un carácter
cualitativo, pues se trata de una energía diferente a otras, como por ejemplo la que dirige la
nutrición. La excitación sexual no es sólo producida por los órganos sexuales sino por todo el
cuerpo: esta es la llamada libido - quantum o quantum de libido, cuya representación
psíquica se llama libido del yo, la que puede visualizarse o es más asequible al analista
cuando se transforma en libido objetal. Esta libido ligada a objetos puede a su vez retirarse
de estos, quedar flotante y volver al yo (libido narcisista). La distribución de la libido en el yo
o en los distintos objetos según el principio económico explicaría muchos desórdenes
neuróticos y psicóticos.
Diferenciación de los sexos.- En la mujer la zona erógena directiva es el clítoris, y en el
hombre, el glande. En el caso de la mujer, ella deberá cambiarposteriormente la zona
erógena del clítoris a la vagina, mientras que en el hombre no ocurre ningún cambio.
Hallazgo de objeto.- Si al principio el instinto es autoerótico, en la pubertad surge un nuevo
fin sexual que toma como modelo un momento anterior, incluso al autoerotismo, que
corresponde a la succión del pecho, donde éste es un objeto exterior al niño. Así, la elección
de objeto adolescente sigue este modelo de relación objetal, y sería entonces un retorno a
lo reprimido, o sea, al objeto sexual de la lactancia. Según este último modelo, el niño
aprende a amar al objeto satisfactor, lo que también ocurría cuando la madre al higienizarlo
estimulaba sus genitales. Todo esto debe ser estimulado por la madre. El miedo infantil
proviene de no ver a la persona amada, en presencia de desconocidos. Cuando su libido no
es satisfecha, la transforma en angustia. La tarea de los padres se ve felizmente cumplida
cuando su ternura hacia el niño evitó un desarrollo prematuro del instinto sexual.
Luego, más tarde, será lo más fácil o habitual para el niño elegir como objeto sexual aquellas
personas que ha amado desde su niñez, por lo que se alzan los diques contra el incesto. La
elección de objeto se hace imaginativamente, sin consumación real. Luego viene la repulsa a
estas fantasías claramente incestuosas, junto con la liberación del individuo de la autoridad
de sus padres. Sin embargo, los que abandonaron la fijación infantil incestuosa nunca
escapan totalmente a esta influencia.
Cabe recordar, porúltimo, que uno de los requisitos de la elección normal de objeto es que
recaiga sobre el sexo contrario. El otro requisito es que este objeto sea, además, exogámico.

También podría gustarte