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Es común escuchar frases como: “Hola, vamos, no pasa nada, una sola copa no te hará ningún
mal. Beber es divertido, es para celebrar”. El consumo de alcohol se da por diversos factores: la
busqueda de bienestar, el sentirse aceptados, vencer la timidez, celebrar un triunfo, olvidar un
problema o simplemente por diversión.
Las familias a menudo resultan afectadas cuando alguien en la casa consume alcohol. La violencia
y los conflictos en el hogar son mucho más probables cuando un miembro de la familia está
abusando del alcohol. Los niños que crecen en un hogar donde está presente el consumo excesivo
de alcohol son más propensos a:
- Tener mal rendimiento en la escuela.
- Estar deprimidos y tener problemas de ansiedad y baja autoestima.
- Tener matrimonios que terminan en divorcio.
Beber demasiado alcohol incluso una sola vez puede hacerle daño a usted o a otros y puede llevar
a:
- Accidentes automovilísticos
- Hábitos peligrosos en las relaciones sexuales, lo que puede llevar a embarazos no
planificados o no deseados y infecciones de transmisión sexual (ETS)
- Caídas, ahogamiento y otros accidentes
- .Suicidio
EL ALCOHOLISMO
¿Qué es el alcoholismo?
El alcoholismo se refiere al consumo excesivo de alcohol, de forma prolongada y continúa en
el tiempo, generando por tanto una dependencia a dicha sustancia. El alcoholismo se
contempla como una enfermedad crónica, en la que el paciente no es capaz de controlar la ingesta
de bebidas alcohólicas. Esta adicción afecta a la persona tanto en su salud física como psicológica,
dañando sus relaciones sociales y/o familiares.
• A corto plazo, el alcohol, por su efecto desinhibidor genera una falsa sensación de seguridad y
de control, por lo que aumentan conductas de riesgo como prácticas sexuales sin protección o
conducir bajo los efectos del alcohol.
• A largo plazo el consumo favorece la aparición de trastornos como la depresión; psicosis;
alteraciones del sueño como el insomnio; sus efectos en el sistema neurológico pueden ser
permanentes, apareciendo demencias y trastornos de la memoria; el aumento de la agresividad es
otra de las consecuencias con todas las implicaciones que ello puede tener; síndrome Wernicke-
Korsakoff o demencia alcohólica.
Los jóvenes que beben son 7.5 veces más propensos a utilizar otras drogas ilegales y
cincuenta veces más propensos a utilizar cocaína que los que nunca beben. Una encuesta
demostró que el 32% de las personas mayores de 12 años que bebían en exceso, también
consumían drogas ilegales.
En el 2005, 6.6% de la población de Estados Unidos de 12 años o más, o 16 millones de
personas, reportaron un alto consumo (consumo excesivo de alcohol en al menos cinco días
de los últimos treinta días).
De los 3,9 millones de estadounidenses que recibieron tratamiento por un problema de
abuso de sustancias en 2005, 2,5 millones de ellos fueron tratados por consumo de alcohol.
Las muertes por accidentes de tráfico relacionadas con el alcohol en Estados Unidos fueron
12,998 en el 2007. Esto es de tres veces más que los soldados norteamericanos que
murieron en combate en los primeros seis años de la guerra de Irak.
Hay 1.4 millones de arrestos por conducir ebrio en Estados Unidos cada año.
Un estudio del Departamento de Justicia de Estados Unidos encontró que prácticamente
40% de los crímenes violentos ocurren bajo los efectos del alcohol.
Entre el 2005 y el 2006, hubieron 187.640 admisiones en hospitales del Sistema Nacional
de Salud Ingles relacionadas con el alcohol.
En el 2005, hubieron 6,570 muertes en Inglaterra por causas directamente relacionadas con
el uso del alcohol. En el 2006, las muertes relacionadas con el alcohol en Inglaterra se
elevaron a 8,758. Esto se suma a un incremento anual del 7% con respecto al año anterior.
De acuerdo a un estudio, de los 490 millones de personas que viven en la Unión Europea,
más de 23 millones son alcohólicos.
En Europa, el alcohol contribuye, a casi uno de cada diez casos de enfermedad y muerte
prematura cada año.
En el 2005, el 39% de todas las muertes por accidentes de tránsito se relacionaron con el
alcohol.
El 40% de los crímenes violentos ocurren estando bajo los efectos del alcohol.
TIPOS DE ALCOHOLICOS
En este tipo de bebedores no existe tampoco una verdadera dependencia alcohólica. Se ven
incluidos en esta clasificación los bebedores sociales, que consumen excesivamente cosa que les
puede provocar una lesión somática.
3. Alcoholismo tipo Gamma
Este tipo de individuos presentan una verdadera adicción, manifestando una clara pérdida de
control ante la bebida, craving o deseo desmesurado por acceder a ella, tolerancia al alcohol y
adaptación a sus metabolitos. Dentro de este grupo se encontrarían los sujetos alcohólicos
crónicos.
4. Alcoholismo tipo Delta
Los sujetos incluidos en esta categoría presentan también una adicción al alcohol, presentando
incapacidad para mantener la abstinencia pero sin presentar una pérdida de control ante la bebida.
Dicho de otro modo, necesitan beber de forma asidua, pero sin llegar a estar ebrio.
5. Alcoholismo tipo Epsilon
El llamado alcoholismo periódico se da en los sujetos que presentan pérdida de control ante
la bebida y problemas conductuales, pero consumiendo de forma esporádica, pasando largos
periodos entre toma y toma.
También son conocidos los blackout, o amnesias parciales, que se pueden clasificar en amnesia
dependiente del estado (en que se olvidan acciones realizadas durante la ebriedad que solo se
recuerdan en estado de embriaguez), fragmentaria (amnesia de lo ocurrido durante la embriaguez
con algunos momentos intermedios preservados) o en bloque (olvido total de lo ocurrido durante la
borrachera).
El abuso habitual del alcohol hace que mueran muchas neuronas del hipocampo, y como
consecuencia aparecen problemas a la hora de crear recuerdos sobre lo que ocurre cuando el nivel
de alcohol en sangre es alto. A la vez, los problemas de memoria declarativa pueden permanecer
en el largo plazo.
Componente esencial en los programas de tratamiento. Por sí solo también resulta de una gran
efectividad. Al margen del propio problema, se focaliza en cómo éste afecta a la relación de pareja
y refuerza la comunicación, negociación y actividades que facilitan mantener la relación de forma
correcta.