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Tri Folio
Tri Folio
Para empezar a diferenciar, el “suicida” es aquella persona que ya ha puesto fin a su vida, mientras
que “aquellos que tienen intención suicida” no lo han hecho, pero están empezando a elaborar
planes e ideas para llevarlo a cabo.
Qué hacer
Escuchar, mostrar empatía y mantener la calma
Mostrar apoyo y preocupación
Tomar en serio la situación y evaluar el riesgo
Preguntar acerca de los intentos previos
Explorar posibilidades diferentes al suicidio
Preguntar acerca del plan de suicidio
Identificar otros apoyos
Quitar y controlar los medios, si es posible
Tomar acciones, contar a otras personas, obtener ayuda
Si el riesgo es alto, permanecer con la persona
Qué no hacer
Ignorar la situación
Mostrarse consternado o en pánico
Decir que todo estará bien
Retar a la persona a seguir adelante
Hacer parecer el problema como algo trivial
Dar falsas garantías
Jurar guardar secreto
Dejar a la persona sola
Comentarios negativos sobre sí mismo, su vida o sobre el futuro: no valgo para nada, soy un
inútil, estaríais mejor sin mí, estoy cansado de luchar, soy una carga para todos, las cosas no van
a mejorar nunca.
Comentarios o verbalizaciones relacionadas con el acto suicida o la muerte: me gustaría
desaparecer, quiero descansar, no quiero seguir viviendo, me pregunto cómo sería la vida si
estuviera muerto, nadie me quiere y es preferible morir…
Despedidas verbales o escritas: “quiero que sepas que, en todo este tiempo, me has ayudado
mucho”
En caso que reciba tratamiento psiquiátrico, ponerse en contacto inmediato con su especialista de
referencia.
Informar a las personas más cercanas de la situación que está atravesando su familiar y de la
importancia de darle apoyo.
No dejarle solo: Si se mantiene contacto con amigos y familiares, puede desahogarse y expresar
su malestar, y ellos devolverle una visión más realista y optimista de la situación.
Hablar, no juzgarle.
No entrar en pánico: