Las formas de crecimiento urbano

Manuel de Solà-Morales i Rubió

Resumen del texto

El programa de urbanismo se crea para introducir a los estudiantes de Arquitectura a un

conocimiento de la ciudad coherente con las herramientas de su profesión: la actitud
proyectiva, la observación y la valoración de las formas. La intención del programa es
buscar un estilo específico de análisis para proyectar la ciudad.
Puede existir una relación entre el crecimiento y las formas físicas donde la influencia
de sus contenidos sociales y económicos es importante.
Las causas de este crecimiento urbano se explican con los temas de las inmigraciones
demográficas y la industrialización. Éstos son los fenómenos clásicos que las ciencias
sociales han determinado como origen de todo proceso moderno de urbanización. Por
lo tanto, se puede afirmar la relación entre industrialización, migración y urbanización.
Otras causas inmediatas del crecimiento urbano de las ciudades se pueden asociar a las
políticas de fomento, el planteamiento y el mercado del suelo.
Las diferentes maneras de organizar calles, solares y casas son formas de urbanización,
parcelación y edificación, que en sus distintas combinaciones dan lugar a las formas
urbanas.
El proyecto urbanístico tiene como finalidad dar forma a un proceso físico,
arquitectónico e ingenieril, que combine parcelación, urbanización y edificación. Pero
estas tres operaciones no son actos simultáneos, sino que de sus múltiples formas de
combinarse en el tiempo y en el espacio, se origina la riqueza morfológica de las
ciudades.
Por lo tanto, proyectar las formas del crecimiento urbano será configurar un ritmo de
tiempo que combine suelo, edificación e infraestructura con formas más sutiles más allá
de los que pueden contemplarse en la construcción arquitectónica o la producción
industrial. La intención es proyectar con el trazado de la ciudad, como referencia entre
lo estable y lo móvil.
El proyecto unitario, monolítico y simultáneo servirá como prototipo de los polígonos
que tienen como forman común del urbanismo moderno, ocupar las periferias de las
ciudades europeas. Como en el caso de Gropius con la proyección de Dammerstock,
donde se utiliza la urbanización, parcelación y edificación de manera simultánea.
Comentarios sobre las ideas principales

Hace unas décadas, la forma de ordenar una ciudad era más liberal y aleatoria, en la que
apenas se tenía en cuenta los distintos factores y se edificaba en superficies vacías, o no
tan vacías, en las que tampoco se esforzaban porque hubiera una relación entre ellas.
Con el programa de urbanismo que se imparte para los arquitectos, se fomenta que haya
un conocimiento apropiado a la hora de proyectar, teniendo en cuenta factores diversos
tales como el aumento de población, factores económicos y sociales, etc.
Por lo tanto, me parece lógico y necesario este programa, ya que los arquitectos saldrán
con una formación urbanística que luego les permitirán organizar la ciudad (aunque
luego añadan su estilo, toque personal), pensando en la parcelación, urbanización y
edificación.
Ilustración gráfica

Ejemplo 1, Hampstead (proyectado por Ejemplo 2, La Haya (proyectado por

Unwin), reparto del suelo pensado. Berlage), reparto del suelo pensado.

Ejemplo 3, Ensanche Barcelona – Cerdà. Ejemplo 4, Ensanche París -Haussmann.