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I.E.P.

SANTO TORIBIO DE MOGROVEJO


Chiclayo - Perú

HALLOWEEN O DÍA DE TODOS LOS SANTOS


¿Qué debemos celebrar?

Todas las fiestas importantes tienen a la vez un origen estacional y pagano, aunque casi siempre
llega hasta nosotros a través de Roma y una gran reinvención comercial contemporánea.

La celebración cristiana de Todos los Santos, de donde deriva “All-Hallows-Evening” (víspera de


todos los santos) o “All-Hallows” (todos los santos), hoy en día llamado “Halloween”, es una fiesta
cristiana que se celebra desde el siglo VIII. No obstante, hoy en día, la fiesta de Halloween es una
fiesta con elementos que en nada remiten ya a la fiesta cristiana de Todos los Santos, sino que toma
elementos paganos y ligados a los muertos y lo monstruoso, muy contrarios al culto del verdadero
y único Dios, Señor de vivos y muertos, verdadero Señor de la naturaleza y de toda la creación.

Se dice también, que Halloween procede de la fiesta pagana de Samhain, una vieja tradición celta
que, en la noche del 31 octubre al 1 de noviembre, conmemoraba el final de la temporada de cosechas
y el principio del largo invierno en las regiones nórdicas. Son tantas versiones que han llegado hasta
nuestros días y la hemos experimentado tras ver el modo paganizado como se vive hoy la fiesta de
Halloween, que nos queda preguntarnos: ¿es malo celebrarla?

La mayoría de quienes viven esta fiesta lo hacen por influjo grupal, social, por el peso de los medios
televisivos, en definitiva, por la cultura del momento, alentada por el consumismo y sus métodos de
marketing. Ante esto, debemos ser conscientes de qué celebramos y en qué participamos, pues todo
acto en el ser humano es importante, también nuestro ocio y nuestros momentos celebrativos, no
olvidemos que estamos llamados para la gloria de Dios.

En tu interior respóndete a estas preguntas: ¿Qué experiencia moral o religiosa deja el usar disfraces
de diablos, brujas, muertos, monstruos, vampiros y demás personajes relacionados principalmente
con el mal, sobre todo cuando la televisión y el cine identifican estos disfraces con personajes
contrarios a la sana moral y los valores del evangelio como paz, justicia, amor, lealtad, bondad? ¿No
es ésta otra forma de relativismo religioso con la cual vamos permitiendo que nuestra fe y nuestra
vida cristiana se vean debilitadas?

Si somos sinceros con nosotros mismos y buscamos ser fieles a nuestra fe y a los valores del
Evangelio, tendríamos que concluir que la actual fiesta del "Halloween" no sólo no tiene nada que
ver con la celebración que le dio origen, sino que incluso es nociva y contraria a la fe y la vida
cristiana; entonces, ¿Qué podemos hacer?: ¿Taparnos los ojos para no ver la realidad? ¿Buscar
buenas excusas para justificar su presencia? ¿Prohibirnos de participar en ella mientras muchos otros
ese día estarán en las calles recolectando dulces y disfrazados o celebrando en locales?

La respuesta no es sencilla, sin embargo Jesús nos dijo: "Sean mansos como la paloma y astutos
como la serpiente". En estos tiempos de crisis, Jesús nos exige comprometernos con él y con su
evangelio. No permitamos que la comercialización y las fuerzas contrarias a nuestra fe nos lleven a
vivir cosas que, lejos de ayudarnos, ponen en riesgo nuestra felicidad y la de nuestra familia.
Recobremos nuestros valores para ser cristianos auténticos, aunque para ello tengamos que ir en
contra del mundo y sus ideas.

1 “Lo que hay que hacer, se hace”

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