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Es bien sabido que las abejas tienen una gran importancia ecológica tanto como
socioeconómica, haciendo grandes aportes, primero con los productos que nos proveen
y que se pueden transformar como lo son: la miel, el propóleo, el polen, la cera, la jalea
real, entre otros; y segundo el gran impacto de la polinización y la formación de nuevas
plantas.
La apicultura urbana ha sido una tendencia desarrollada hacia los finales del siglo xx, la
cual ha generado controversia en los diferentes productores como citados. Sin embargo,
se menciona que resulta ser un acercamiento reciente a una actividad agrícola ancestral
en la que muchos países desarrollados ya empiezan a hacer uso, teniendo como principal
referente mundial a Londres, seguid de ciudades como París, Chicago y Nueva York.
Durante los últimos años las poblaciones de abejas se han visto drásticamente reducidas
sin una causa principal identificada, aunque hay una relación estrecha entre los
pesticidas, los monocultivos y las superficies cerradas que restar espacio y posibilidades
alimenticias a las abejas en el campo.
Las consecuencias que nos trae este deterioro de la especie son graves, conociendo
principalmente que las abejas no solo son insustituibles en la producción de miel, sino
también en el proceso de reproducción de las plantas, encargadas del 80% de la
polinización de estas.
Suele ser un poco contradictorio la posición en cuanto al uso de pesticidas en el campo
y el beneficio que traen las abejas para los cultivos frutales, de arbóreas, gramíneas,
entres otras especies de plantas. Sin embargo, es un tema que en Colombia no se ha
podido complementar ni concientizar a los productores rurales.
Por estos motivos aparece la apicultura urbana donde se pretende rescatar las colonias
que han sido disminuidas y llevar a producciones las colmenas de azotea, de jardín y de
patio.
Tiene numerosas ventajas de las que nos podemos beneficiar como lo es la producción
de abejas más sanas, teniendo en cuenta que en la ciudad no es están a exposiciones
constantes de pesticidas, por lo tanto, no sufren de problemas de envenenamiento.
Además de que las abejas se desarrollen más fuertes por la variedad de plantas que se
pueden encontrar dentro de una ciudad, en contraste con la moda de los monocultivos
que se vive en el campo.
El beneficio que traen para la salud de los humanos por el consumo de la miel es
abundante, ya que contiene vitaminas, antioxidantes, carbohidratos, es un buen ayudante
frente a las alergias el colesterol, entre otros. Además del aporte de nutrientes que nos
refleja, también la cultura y el comercio se ve influenciado por su producción tan cercana
a las grandes capitales, donde las personas sienten mayor curiosidad de los productos,
de sus aportes en la salud y no menos importante, de la ecología, de lo que cada vez
somos más conscientes.