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Optimismo empresarial contra

viento y marea
Hoy la inflación en México está acotada y el crecimiento económico estancado. La
economía mexicana acumuló nueve meses con crecimiento cero.
En paralelo, la inflación registra dos meses consecutivos muy cerca del objetivo del Banco
de México, de 3 por ciento.
Ayer el Inegi dio a conocer el Índice de Precios al Consumidor para octubre.
La inflación anual fue de 3.02%; converge con el objetivo de inflación del Banxico de 3 por
ciento. La inflación tiene una marcada tendencia a la baja.
Hay que recordar que la inflación general anual en México se ubicó en 2.99% al cierre de
la primera quincena de septiembre, ligeramente por debajo del objetivo del banco central
de 3%, por primera vez en 36 meses.
Con crecimiento económico cero, inflación acotada y, previsiblemente, más recortes de la
Reserva Federal de EU a su tasa de interés, el Banxico tiene el camino trazado como para
realizar un mayor recorte respecto a los que ha venido realizando.
Ante la convergencia con el objetivo de inflación del Banxico y con un tipo de cambio
estable, puede esperarse que el banco, en su próxima decisión de política monetaria,
ajuste a la baja la tasa interbancaria.
Entre los analistas especializados hay una notable división en las opiniones.
Hay quienes se pronostican una rebaja de 50 puntos base, y hay quienes opinan que debe
ser sólo de 25 puntos base.
Incluso al interior de la Junta de Gobierno del Banxico ha sido notoria la diferencia de
opiniones. En la última reunión, dos de los cinco miembros de la junta se pronunciaron
por un recorte de 50 puntos.
Incertidumbre frena inversiones en El
Marqués.
La incertidumbre que ha prevalecido a lo largo del año ha impactado en la toma de
decisiones de la Iniciativa Privada, con respecto a que se detengan proyectos de inversión.
“Tan sólo en El Marqués, municipio metropolitano, se contabilizan entre cinco y seis
inversiones, principalmente del sector automotriz, que están en pausa”, refirió el
secretario de Desarrollo Sustentable municipal, Martín Díaz Pacheco.
“Se han detenido algunas inversiones, espero que no se vayan esas inversiones, que sólo
se hayan detenido y retomen la inversión aquí en el estado (...) Las que se han detenido
son como cinco o seis inversiones, (...) ahorita estamos en una situación en la industria
automotriz en rezago a nivel nacional, entonces nos ha afectado como estado y porque en
El Marqués la mayoría de nuestra industria es automotriz”, abundó.
La inestabilidad que este año ha reflejado la economía nacional es una de las principales
preocupaciones de los inversionistas, refirió el secretario municipal, tras añadir que los
proyectos de inversión que están detenidos corresponden en gran parte a inversionistas
extranjeros.
“Sí les preocupa, porque está en riesgo su capital económico, y sí les preocupa el tema
nacional; tenemos la esperanza de que mejoren las condiciones para que esas inversiones
las retomen y las vuelvan a aterrizar en el municipio”, declaró.
El sector empresarial del estado de Querétaro coincide en que los retrasos para ratificar el
Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), así como el cambio en el gasto
público de la administración federal y el bajo ritmo de crecimiento de la economía
nacional, se enlistan entre los factores que generan inquietud entre los inversores.
¿Cuánto debe subir el salario mínimo?
¿Qué pasa con los otros salarios?
Cómo han cambiado las cosas en materia salarial. Los planetas parecen alinearse ahora
para que el 2020 traiga otro incremento significativo en el salario mínimo. En el 2018 fue
de 10 por ciento. En el 2019, de 16 por ciento. Ahora se da por hecho que, por lo menos,
será de 16 por ciento. Hay voces que hablan hasta de 30 por ciento.
Lo ocurrido a partir de fines del 2017 marca un contraste significativo con los anteriores
35 años, cuando el salario mínimo y los salarios en general se reprimieron. Fueron
utilizados como herramienta para controlar la inflación y como factor de competitividad
para las exportaciones mexicanas.
¿Qué cambiará con un incremento significativo en el 2020? Hacen falta años de aumentos
para revertir el deterioro acumulado desde la década de los 80. El salario mínimo sirve
para adquirir una tercera parte de las cosas que se compraban en 1978. Considerando los
incrementos del 2018 y 2019, tenemos uno de los mínimos más bajos de América Latina,
inferior incluso a los que se pagan en países más pobres, como Nicaragua y Bolivia.
¿Qué explica el “entusiasmo” para ir por un alza importante el año próximo? La pregunta
tiene sentido porque estamos terminando un año en el que no hubo crecimiento
económico y tenemos razones para augurar que el 2020 será también muy complicado en
términos de actividad económica.
El primer factor que explica la decisión para subir los salarios es la voluntad del gobierno.
Es un tema que le importa mucho al presidente y que ocupa un lugar destacado en su lista
de prioridades. Casi al mismo nivel podemos colocar un cambio de marco mental de los
principales empresarios de México. Hay un consenso entre los hombres y mujeres de
empresa en torno a la necesidad de mejorar los salarios. Se escuchan argumentos éticos,
de estabilidad social y también económica. Mejorar los salarios es hacer lo correcto,
porque contribuye a dignificar el ingreso de quienes menos ganan; reduce la tensión social
y fortalece el mercado interno. En este contexto, vale la pena destacar el compromiso de
100 empresas mexicanas por fijar un piso de 6,500 pesos mensuales en sus nóminas.
Presidencia reconoce que existe
incertidumbre, pero inversiones siguen
El jefe de la Oficina de la Presidencia de la República, Alfonso Romo, reconoció que hoy en
México hay incertidumbre y que hasta el momento hay un nulo crecimiento económico.
Sin embargo, destacó que, en medio de la encrucijada mundial, la fotografía del país es
muy positiva.
En conferencia de prensa en el marco de la Reunión de los Consejeros Consultivos 2019 de
Nacional Financiera (Nafin), el funcionario explicó que México tiene estabilidad
macroeconómica, además de una situación política estable.
Respecto a los hechos de violencia suscitados en días pasados, primero en Culiacán y
luego el ataque a integrantes de la familia LeBarón, en el norte del país a inicios de
semana, señaló que éstos son tristes, pero que no deben magnificarse, además de que se
trabaja en una estrategia en materia de seguridad.
“Estos eventos por supuesto que impactan mucho emocionalmente y también en el
espíritu de inversión. Claro que afectan; sin embargo, nuestra obligación es ubicarlos
donde deben estar, no magnificarlos en el buen sentido de la palabra”, dijo.
De hecho, comentó que en la víspera se reunió, entre otros personajes, con funcionarios
de la Embajada de Estados Unidos, y que no se tocó el tema de la inseguridad, además de
que tampoco se han hecho anuncios de cancelación de inversiones por este tema.
“Hasta ayer (miércoles), la gente que he recibido, tanto inversionistas como fondos, no lo
ven como una cosa generalizada, sino un caso triste; lo mismo que Culiacán pero no lo ven
como una problemática tan seria (...) Estamos tratando de separar lo que es la seguridad y
la violencia de la inversión. La relación con Estados Unidos y Canadá es tan fuerte que uno
o dos casos no pueden empañarla”, enfatizó.
No obstante, reconoció que, “con más paz y seguridad, estaríamos creciendo a tasa del
doble o triple. Eso no lo podemos negar”.
El jefe de la Oficina de la Presidencia hizo énfasis en que debe aprovecharse la estabilidad
macro y política de México, para atraer mayor inversión al país, pero reconoció que para
ello, el gobierno debe generar más confianza y certidumbre.
“Nos sentimos muy optimistas, hay dudas de forma, no de fondo. Hay bastante
entusiasmo dentro de la incertidumbre”, expresó.
¿Qué debe cambiar AMLO para crecer en
el 2020?
El crecimiento económico no va bien; se han hecho algunas cosas correctas, pero existen
factores de riesgo.
El 2019 ha sido un año rico en complicaciones, pero pobre en crecimiento económico. El
pronóstico más optimista proyecta que será 0.5% al final del año. El más pesimista lo sitúa
en menos 0.1 por ciento. Ambas cifras están muy lejos de 2.5% que se auguraba luego del
triunfo de López Obrador.
El año ha sido malo, en términos de crecimiento económico, pero no ha sido
excepcionalmente malo, si lo comparamos con el primer año de cada uno de los últimos
sexenios. En el sexenio de Ernesto Zedillo, la economía pasó de crecer 4.9% en 1994 a una
caída de 6.3% en 1995. Con Vicente Fox, el PIB pasó de 4.6% en el 2000 a -0.4% en el
2001. En la administración de Felipe Calderón, la economía estaba creciendo 4.5% en el
2006 y se de- saceleró hasta 2.3% en el 2007. Enrique Peña Nieto recibió la economía
creciendo 3.6% en el 2012 y pasó a 1.4% en el 2013.
Con estos datos a la mano, ¿debemos estar tranquilos, de cara al 2020? Yo pienso que no.
Hay muchos factores de riesgo y también algunas dudas sobre la forma en la que el
presidente está procesando la realidad económica. Cuando AMLO dice que tiene otros
datos, me pregunto: ¿está viendo la misma película que los expertos, de izquierda,
derecha; nacionales o internacionales? Cuando argumenta que no le preocupa el
crecimiento, sino el desarrollo, ¿entiende lo delicado que es el no crecimiento
económico? ¿Comprende que si la economía no crece, también se estanca la recaudación
de impuestos y hay menos recursos para redistribuir?
La economía no va bien. El cero crecimiento del 2019 es reflejo de la incertidumbre, de la
lenta ejecución del gasto público y un efecto no deseado de las altas tasas de interés que
nos brindan estabilidad cambiaria y baja inflación. No crecer es un problema que no
importaría tanto si en el 2020 se hicieran los ajustes necesarios para crecer.
¿Cómo se revertirá la desconfianza del sector empresarial? La reducción de la inversión
fija bruta es prueba irrefutable de que las fotos de los principales empresarios con el
presidente no sirven de gran cosa. El gobierno necesita repensar la estrategia de
promoción de la inversión. Alfonso Romo no puede solo, mucho menos cuando hay otras
áreas del gobierno que ponen cara de guerra a los empresarios. Es lógico y está bien que
la jefa del SAT y el procurador fiscal persigan la evasión fiscal.
Crece cautela en consumidores; índice de
confianza baja 1 punto
En octubre, el Indicador de Confianza del Consumidor (ICC) volvió a registrar una
disminución, luego de la recuperación que presentó en agosto y septiembre, informó el
Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
En el décimo mes del año, la confianza de los mexicanos retrocedió 1 punto en la
medición mensual, con cifras desestacionalizadas, con lo cual se ubicó en 43.9 puntos.
Pesó a la baja un retroceso en el componente de percepción de condiciones actuales y en
el de condiciones esperadas, tanto para el país como para los hogares.
Con el resultado de octubre, en el año han sido seis las ocasiones en las cuales el indicador
se deteriora, aunque no de manera consecutiva. Pese a la caída registrada, es el mejor
nivel del que se tiene registro para un octubre desde el 2006, cuando la confianza de los
mexicanos se ubicó en 45 puntos.
De acuerdo con analistas, el desgaste en la confianza a inicio del cuarto trimestre se debió
a la debilidad del mercado laboral y de algunos efectos negativos temporales que han
ocurrido.
“Esta disminución podría estar explicada por la continua incertidumbre que, a pesar de
mejorías tanto en el frente doméstico —mayor gasto de gobierno y mejor panorama para
el T-MEC— como en el global —menores tensiones comerciales—, continúa elevada”,
refirieron estrategas de Banorte.
El año pasado, tras saberse los resultados de la elección presidencial donde ganó Andrés
Manuel López Obrador, la confianza empezó a aumentar hasta llegar en febrero pasado a
su nivel más alto del cual se tiene registro: 48.6 puntos.
“Aunque la confianza sigue mostrando niveles elevados en comparación con los últimos
años, la falta de catalizadores en los últimos meses muestra las dificultades a las que se
enfrenta el indicador para seguir creciendo”, refirió por su parte Monex.
Analistas ajustan a la baja estimación de
crecimiento del PIB para 2019 y 2020:
Citibanamex.
El Producto Interno Bruto mostraría una expansión del 0.1% en 2019, según la mediana de
las estimaciones de la encuesta quincenal del grupo financiero Citibanamex. El pronóstico
es inferior al 0.3% esperado en el levantamiento anterior.
Una vez más la encuesta de Citibanamex arrojó que el consenso de las entidades
financieras consultadas movieron a la baja su pronóstico de crecimiento del Producto
Interno Bruto (PIB) para 2019, al pasarlo de 0.3% a 0.1 por ciento.
Para el 2020 también movieron ligeramente su expectativa, de 1.3% a 1.2 por ciento.
Esto se da en una ola de caída en los pronósticos del PIB para 2019. El
propio Citibanamex consideró hace unos días que la economía no sólo no crecerá, sino
que decrecerá en -0.1% en todo el 2019. Banorte también redujo recientemente su
expectativa a 0.3% desde 0.8%; mientras que BBVA, de momento, la mantiene en 0.2 por
ciento.
Dentro de la encuesta, los que tienen la proyección del PIB más bajo para el 2019, además
de Citibanamex, es Multiva también con un estimado de -0.1%; mientras que en 0.0% lo
proyectan Prognosis, Evercore ISI México y Bank of America.
El pronóstico más alto para el 2019 lo tiene Monex con 0.5%; Banorte con 0.3%, lo mismo
que Itaú BBA y Pro Asset Management, también con 0.3% cada uno.
No obstante, ninguna entidad financiera de las consultadas tiene este pronóstico, hasta
ahora, por debajo del -0.1%; pero tampoco por arriba del 0.5 por ciento.
Altos funcionarios bancarios consideraron en días recientes que para que haya un repunte
de la economía local, deben reactivarse temas como la infraestructura tanto pública como
privada; además de que se debe generar certidumbre para los inversionistas.
Por debilidad económica del país, CDMX
debe redoblar esfuerzos
La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) de la Ciudad de México
manifestó que debido al estancamiento económico que se vive a nivel nacional, la capital
del país debe redoblar esfuerzos para poder crecer.
El PIB nacional cayó 0.4% a tasa anual desestacionalizada en el tercer trimestre del 2019,
la primera disminución desde el cuarto trimestre del 2009 (1.8%); en el acumulado de los
primeros nueve meses se muestra un descenso de 0.01% de la economía mexicana.
En rueda de prensa, el presidente local de la Coparmex, Jesús Padilla Zenteno, propuso
una estrategia constituida por varios puntos: para el 2020 se debe apostar por la inversión
pública y no caer en subejercicios; acatar lo sugerido por el Instituto Mexicano para la
Competitividad para mejorar la transparencia presupuestal (el organismo tiene catalogada
a la capital como de las entidades menos claras en información financiera).
“Le proponemos al gobierno de la ciudad se ejerza aceleradamente el gasto en inversión y
no caer en subejercicios para el 2020”, dijo.
“Le solicitamos a la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, la presentación de un proyecto
de presupuesto para el 2020, que sea responsable y con énfasis en la inversión,
específicamente en áreas de infraestructura urbana, agua y movilidad”, acentuó.
Otra de las propuestas que detalló Padilla Zenteno es que se debe aprovechar la llegada
del nuevo secretario de Desarrollo Económico, Fadlala Akabani Hneide, para crear un
nuevo programa que impulse una colaboración más activa entre los sectores privado y
público.
“También hay que generar proyectos específicos de inversión y atracción de inversiones
para la Ciudad de México”, indicó.
El líder empresarial explicó cuál es la importancia de facilitar la llegada de inversiones y la
creación de empresas, donde destaca la posibilidad de aumentar la recaudación. “La
fórmula es sencilla, entre más empresas hay, más inversión; entre más inversión hay más
empleo. Si hay más empresas y más empleo habrá más recursos fiscales”.
En 2019, ha entrado inversión de cartera
por 20,100 millones de dólares al país: IIF
En los primeros nueve meses del año han ingresado al mercado mexicano 20,100 millones
de dólares en inversión de cartera, según información preliminar del Instituto de Finanzas
Internacionales (IIF).
Previo a la divulgación del reporte mensual de Flujos de Portafolio hacia Mercados
Emergentes, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dijo en su
conferencia matutina del 5 de noviembre que no se ha presentado fuga de capitales del
país. “Al contrario, está muy bien la economía; ha llegado inversión extranjera y lo hemos
informado”, indicó.
Sin embargo, la información del IIF muestra que en el segundo trimestre del año, esto es
entre abril y junio, los inversionistas extranjeros sí deshicieron posiciones en títulos
mexicanos por un valor de 1,000 millones de dólares.
Este comportamiento no afectó al acumulado, pero, en cambio, sí se presentaron
entradas de capital no residente en el primer trimestre del año, de 13,200 millones de
dólares, y 7,900 millones que captaron bonos y mercado accionario en el tercer trimestre.
De acuerdo con Jonathan Fortun, economista senior en el IIF, este comportamiento en el
flujo de capitales hacia México no tiene un origen particularmente doméstico y en cambio
sí está evidenciando la volatilidad internacional y la búsqueda de rendimientos entre los
inversionistas.
Entrevistado en Washington, detalló que sí se están tomando en cuenta eventos
domésticos del mercado para definir las inversiones de portafolio. Sin embargo, considera
que han pesado más los factores externos.

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