CORPORACION UNIVERSITARIA MINUTO DE DIOS

FACULTAD DE CIENCIAS HUMANAS Y SOCIALES

DEPARTAMENTO DE FILOSOFIA
SEMINARIO DE SPINOZA
DIRECTOR: Nelson Arango
PRESENTADO POR: Nicolás Otero Rubiano
Correlatoría 6

EL PODER POLITICO

Sabemos que las supremas potestades son como el alma del estado y por esta alma
todos deben ser guiados, además de ser guiados podeos decir que a esta es quien le
corresponde el dictar leyes, decir que es bueno y que es malo, ¿pero a quien van a ser
impuestas estas leyes? Se puede ver o entender que las leyes constantemente van a
estar dirigidas a una sociedad aun ser social y de esta manera podemos acotar diciendo
que las supremas potestades le concierne solo al estado por ende a la cosa política (cf.
TP. Pág. 121, [292], 10) que es la forma de expresar la implicación de las supremas
potestades en el estado ya que se habla de una totalidad de cuerpo estructural.

Ahora bien se puede ver o decir que a estas supremas potestades les corresponde el
juzgar, el hacer dictámenes, el exonerar, etc., los hechos individuales y/o los colectivos,
como quien dice todos esos hechos que ocurren en la sociedad, ya que como se veía
anteriormente estas (las supremas potestades) son las que tienen el poder como tal y así
pueden velar por que las leyes se cumplan a cabalidad, pero como vemos en el TP., ellas
(las supremas potestades) siempre va a tener el derecho de administrar los asuntos
públicos y de esta forma podrán establecer los cargos públicos para establecer un
gobierno que vele por hacer cumplir las leyes del estado.

Si esta era la forma adecuada de gobernar los estados cabe aquí la pregunta que el
mismo Spinoza se hace “Es frecuente, no obstante, preguntar si la suprema potestad está
sujeta a las leyes y si, en consecuencia, puede pecar.) (cf. TP. Pág. 121, [292], 20). Pero
¿porqué hacer esta pregunta en este punto? Si de lo que venimos hablando es de la
sociedad y como en esta están inmersas una cantidad de leyes que han sido impuestas
por el estado o mejor aun por las supremas potestades, veíamos que estas(las supremas
potestades) son las que se encargar de impartir juicios y dictámenes entonces quien es el
encargado de juzgarlas a ellas, ¿será que estas no tienen quien las juzgue? O mejor aun
como ellas son las que tienen el mando del estado puede hacer lo que quieran de tal
forma que solo de vean beneficiadas ellas, si esa es el alma del estado que se puede
esperar del cuerpo.

Pero sabemos que el estado está regido por unas leyes naturales que le impiden salirse
de ciertos parámetros impuestos por la naturaleza, por eso dice Spinoza que la sociedad
peca cuando hace algo contrario al dictamen de la razón (cf. TP. Pág. 122, [293], 30).

Entonces bien nos encontramos en un punto donde podemos hacer una relación de
Spinoza con Nicolás Maquiavelo quien decía que el gobernante debía hacer que sus
súbditos lo amasen o que le temiesen ya que de esta forma de mandato podría hacer de
su estado un gobierno monárquico con lo cual Spinoza está en desacuerdo puesto que el
dice que la mejor forma es la democracia aun cuando dice que para que la sociedad sea
autónoma tiene que mantener los motivos del miedo y del respeto (cf. TP. Pág. 85, [274],
30). Aquí es donde podemos ver que el miedo y el respeto no se refieren a las leyes
civiles sino a las leyes de la naturaleza es decir, a todo lo que concierne a las pasiones
las cuales le impiden al hombre ser libre por lo tanto no puede ser autónomo en sus
decisiones y tiene que ser regido por algo aun mayor la razón la cual está inmersa en el
poder político.

De esto podemos decir que es un punto a favor del gobierno, ya que si logra el gobierno
hacer un empalme entre la razón y la pasión el gobernante no solo va a ser querido por el
estado, sino que además, va a conseguir la obediencia del mismo y de esta forma lograra
mantenerse en el poder hasta que empiece a regir uno de los dos la pasión o la razón lo
cual puede llevar a que lo odien y asi lo destituyan de alguna forma.

Por esto decimos que el único que tiene el poder de decidir sobre el bien del estado es la
suprema potestad ya que esta es el lama del estado.

BIBLIOGRAFIA

BARUCH SPINOZA, TRATADO POLITICO.

EDITORIAL ALIANZA

AÑO 1986