ANTROPOLOGIA DEL MATRIMONIO

FENOMENOLOGIA DEL AMOR

Prof. Ángela María Sierra G
P. José Martinez Vega Cjm

El dialogo lo hago con Nora y Luis, los conozco hace 8 años y comparto mucho con ellos.
La primera pregunta que les hago es cuantos años llevan de casado, Nora se adelanta y
afirme:”28 años dos meses y catorce días” Lucho y yo soltamos la riza, él dice, yo solo se
que eran 28 larguitos…Se conocieron en Barranquilla, aunque ambos son de Cali. Ella
estudiaba derecho y a la ves hacia un proceso de discernimiento vocacional con las hermanas
de la presentación; Lucho llega Barranquilla por asunto de trabajo y la familia de Nora tenia
un restaurant de comida caleña y por eso Lucho llega a esta ese lugar buscando el sabor
caleño en la rumbera Barranquilla. Nora dice que apenas lo ve siente atracción que “el gordo”
como ella lo llama, rompía el patrón de las chicas de la época, que miraban a sus galanes bien
vestidos poro este hombre, era mal vestido pantalón botas anchas, calcetines blanco y zapatos
anaranjado, todos nos reímos por que le dije que tenia buena memoria, prosigue y cuenta que
era muy mal hablado, ella dice que eso le pareció tierno, mientras que a su madre la enervo.
Al año comenzaron sus amores, ella afirma que dese el principio se sentía atraída por él ya
no pensaba en ser religiosa sino en casarse y que ese sería el hombre de su vida; vio en ella
a una mujer seria, y comenzó a pensar en el matrimonio, Nora tenia bien claro que si se
casaba era para toda la vida. El ya había tenido un matrimonio canónico que después de
mucha lucha lo logro que se le declarara nulo, cuenta con gran emoción, cuando en esa época
en el Tribunal de Segunda Instancia de Bogotá le confirmaron la nulidad de su matrimonio.
Se cansan y a los 10 meses tienen su primera hija y a los 20 meses sale nuevamente
embarazada, sus vidas cambian rotundamente, están otra ciudad, ella debió dejar su trabajo.
Sienten que eso 4 años de amores fueron cruciales en sus vidas y que lo que han logrado
hasta hoy, ha sido porque desde que se conocieron fueron preparando su matrimonio que
seria para toda la vida, los alimentaba la esperanza de llegar al matrimonio. Ella agradece la
paciencia que este “hombre de mundo” tuvo con ella, por sus principios que no eran
negociable ella se “se conservaba” para después de su matrimonio, la supo comprender y
respetar. Tuvieron muchos inconvenientes, Nora dice que su fe y el amor a la Virgen María,
e ir hablar con algún sacerdote le dieron fuerza y decisión para lograr tener la familia que
hoy son, sus tres hijos, ya profesionales, ella sigue trabajando como abogada y Lucho la
acompaña ya que está jubilado, hubo momentos difíciles como cuando ella es investigada
por un asunto en su oficina de abogados, él fue su apoyo incondicional.
Les pregunte que si alguno de los dos, en algún momento se han sentido desilusionado, si la
personan que idealizaron no es, después de tantos años…
Nora: no, el me saca canas, me hace enojar, pero ha corregido hábitos, como por ejemplo, de
aseo, en cuanto al orden no nos ponemos de acuerdo, tuvo una época que le marco la
adolescencia de la hija mayor y el llegar a la andropausia, se puso de muy mal humorado, yo
me iba donde el padre y él en broma me decía: y como te lo aguantas Nora; pero me
aconsejaba y salía con fuerzas para seguir adelante, si fueron momentos muy difíciles, debo
reconocerlo, porque yo también caí en el error de poner primero que todo a mis hijos y era
superprotetora, el gordo dormía y yo estaba haciendo las tareas de los niños, llegue a sentirme
sola en la tarea de mamá. Pero es lo normal de la relación, el gordo es tal como el debe ser,
así lo amo y lo seguiré amando, el confirma todo y dice que en una relación de pareja hay
que hacer concesiones, algunas cosas se negocian, como el hecho de que el Colgate se usa
así, que el jabón de tal manera, que se aprende a convivir con esas cositas. Se siguen
dedicando canciones, ella le dedica una del Binomio de oro, que se “lleno de ti" y el le dedica
uno de los hermanos Arriagada que se llama “Un mundo diferente”. El dice que en estos
momentos se están “reenamorandose” de nuevo, los hijos se van y tienen tiempo para ellos,
hay caricias picos y se van a otros lugares para no estar en la rutina de la casa.
Les pregunto ¿que para ellos que es el amor de pareja? En principio como una renuncia
amorosa, lo personal pasa a un segundo plano (ciertos gustos y placeres), para compartir la
vida con el otro, también es renunciar a la parte externa, de la “parte mundana” de grupo de
farras de los amigos, tener mucha convicción de que es una fidelidad absoluta,
complementarse, dedicarse el uno al otro y en función de los hijos. Hay que tenerse mucha
confianza como amigos que son “pareceros”, confianza en darse espacios los unos con los
otros.
¿Si muere uno de los dos que? Dice ella: “lo abonado alcanza” hay que seguir adelante, no
me echaría a la derrota, al dolor, segaría, claro que con el vacío y el dolor. El me dice, yo en
la iglesia le he dicho a Dios: “yo creo que la labor la tengo ya avanzadita, cuando el lo estime
creo estar listo” pero si ella se va primero hay que terminar la tarea con los hijos, pero seguir
solo, yo no buscaría a otra persona, porque no la necesitaría, ni tendría con quien
remplazarla…

Fue una conversación muy enriquecedora y he tratado de sintetizarla. Mientras dialogaba les
hacia pregunta recordando todo el material leído y analizado, de esta unidad 3.
Veo y confirmo que antes del matrimonio debe haber una seria preparación de parte de los
futuros contrayentes, donde se van conociéndose, donde van contándose sus sueños, temores
sin olvidar el respecto del uno por el otro.
El amor no es simplemente una experiencia de fe, implica al hombre y mujer en su ser
ontológico, que no hay un único amor, sino que lo cultural, lo psicológico, lo espiritual,
ayudan a la construcción de un amor que llega hacer único dependiendo de la madures del
individuo y su aceptación con persona.
En esta pareja con la que he conversado se hace evidente lo que Joan Garriga, dice en su
entrevista al presentar el libro: “El buen Amor en la Pareja” no hay modelos ideales de pareja,
cada una es única y como tal hay que tratarlas. Dice Joan Garriga “hay un buen amor que se
reconoce porque conduce hacia el bienestar, hacia la felicidad, hacia la expansión, hacia la
nutrición… ese buen amor se reconoce, porque el vinculo es fácil, se trata de verdaderos
compañeros hay un sentimiento natural y espontaneo de confianza. Se trata de dos
naturalezas no demasiadas incompatibles porque el amor no es la fuerza más grande que
existe, el amor se encausa y se dirige mejor si se respeta un cierto orden… desear
espontáneamente la felicidad del otro y no únicamente la propia” En Lucho y Nora he visto
y detallado esta gran verada, siguen haciendo camino de pareja y cada uno se descubre como
al amigo del otro, el animador y compañero que es necesario mas no fundamental, que se
complementan pero no se asfixian, que se reconocen finitos y limitados, pero como pareja
fuertes y vencedores.