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Didáctica: Se espera que el docente haga uso de todas sus habilidades para
generar prácticas y situaciones pedagógicas favorables que beneficien y faciliten
el aprendizaje de los niños, acorde a su nivel de desarrollo físico y cognitivo.
Cualquier estrategia metodológica desarrollada por el docente de preescolar tiene
una intencionalidad y una concepción, que están ligadas a un modelo pedagógico
con sustento epistemológico. Estos aspectos son indicadores permanentes de la
competencia docente con relación a la didáctica, que constituyen una posibilidad
de reflexión sobre el quehacer. Hablar de didáctica es poner en juego apuestas
metodológicas que deben ser enmarcadas dentro de un ámbito teórico, cuyo
recorrido histórico implica una reflexión colectiva tan valiosa e importante como los
modelos pedagógicos, la teoría curricular, la innovación pedagógica, las políticas
educativas y la evaluación, entre otros aspectos. Por tanto, es preciso para el
docente validar su experiencia y aproximarse a la consolidación de un discurso
teórico en el campo de la didáctica, que a su vez se refleje en su práctica, cuando:
» Desarrolla y aplica proyectos de aula partiendo de los intereses de los niños. »
Construye rincones en el aula para favorecer el aprendizaje centrado en los
intereses de los niños. » Utiliza diferentes estrategias metodológicas con una
intencionalidad de enseñanza. » Genera aprendizajes en ambientes estructurados
e inestructurados. » Utiliza diferentes tipos de texto para enseñar distintas
intencionalidades comunicativas. » Contextualiza los contenidos para darle sentido
a las actividades de los niños. » Utiliza de manera pertinente los juegos en el aula
de clase. » Elabora y utiliza instrumentos de aprendizajes para las diferentes
dimensiones. » Diseña actividades que se ajusten al desarrollo psicomotor en el
nivel preescolar. » Genera situaciones que permitan a los niños fortalecer sus
habilidades socio –afectivas. Evaluación El docente de preescolar al evaluar debe
ser coherente con el enfoque pedagógico y didáctico utilizado. El proceso se debe
llevar a cabo de manera individual, integral y constante; en el proceso se deben
valorar los progresos, las dificultades y las formas de adquisición del
conocimiento, esto con la intención de fortalecerlo o reorientarlo. Para ello, es
necesario indagar acerca de los saberes previos y conocer el punto de partida,
para planificar y actuar de acuerdo con sus requerimientos. La evaluación en este
nivel está dirigida a que conjuntamente docentes, padres y comunidad identifiquen
cualitativamente los aspectos que facilitan o dificultan los procesos y a generar los
cambios que se requiera. Así lo menciona el artículo 14 del Decreto 2247 respecto
de la Evaluación: ”Artículo 14. La evaluación en el nivel preescolar es un proceso
integral, sistemático, permanente, participativo y cualitativo que tiene, entre otros
propósitos: A. conocer el estado del desarrollo integral del educando y de sus
avances; B. estimular el afianzamiento de valores, actitudes, aptitudes y hábitos;
C. generar en el maestro, en los padres de familia y en el educando, espacios de
reflexión que les permitan reorientar sus procesos pedagógicos y tomar las
medidas necesarias para superar las circunstancias que interfieran en el
aprendizaje“. Como indicadores de esta competencia, el docente: » Conoce las
valoraciones sobre argumentaciones o deducciones que desde su propia lógica
hacen los niños. » Reconoce el valor del error constructivo como posibilitador de
conocimiento. » Realiza observaciones constantes de las fortalezas y dificultades
de los niños. » Respeta los procesos y ritmos individuales de aprendizaje. » Crea
instrumentos de evaluación acordes a las necesidades del grupo. Planeación y
organización académica El docente de preescolar en la planeación busca
desarrollar en los niños una educación por competencias donde aprendan a usar y
aplicar sus saberes en contexto, teniendo en cuenta que esta planeación debe
estar articulada con el currículo de la institución, los estándares y el plan de
estudio. Un docente evidencia la competencia de Planeación cuando: »
Selecciona los contenidos pertinentes para el contexto en el que desarrolla su
práctica pedagógica. » Desarrolla de manera consecuente los contenidos con los
objetivos planteados. » Diseña actividades que articulan el currículo, los
estándares y el plan de estudio. » Maneja adecuadamente los diferentes
instrumentos de planeación. Ejes de contenido temático Componente de
matemáticas El docente de preescolar debe diseñar espacios y ambientes en los
que niñas y niños actúen con los objetos, de manera que puedan desplegar toda
su capacidad mental en términos de hacer representaciones en ausencia de
modelos, descubrir las regularidades propuestas y establecer relaciones en todos
los órdenes. En síntesis, lograr que operen cognitivamente. Lo anterior puede
lograrse si hay propuestas lúdico-pedagógicas a través de las cuales se motive a
los infantes a resolver problemas, generar preguntas, formular hipótesis, dar
explicaciones y experimentar, acompañados por un docente mediador interesado
en ejercitar la atención, la memoria y el pensamiento, es decir, en movilizar las
estructuras cognitivas y desarrollarlas de manera que la compresión emerja como
producto de un proceso consciente, planificado, articulado a las necesidades
cognitivas de las niñas y niños con la realidad actual.
Se considera, que para el desarrollo de habilidades del pensamiento, involucradas
en los procesos anteriormente mencionados, es necesaria la apropiación de la
lógica y el conocimiento matemático, con sus conceptos, estructuras y formas de
representación. Por esto, fortalecer la dimensión cognitiva no señala ausencia de
conceptos, existen dominios conceptuales que los niños deben construir en
preescolar, como lo señala Castaño (1991): » Los números, a partir del primer
círculo de los números naturales, con sus relaciones de orden y equivalencia y las
operaciones de tipo aditivo. » La geometría en relación con la ubicación y
representación espacial topológica. » Las medidas que consideran de manera
intuitiva el tiempo, la longitud, la masa y el volumen. » Los datos estadísticos
vistos de manera perceptiva. » La lógica desde un enfoque cuya mirada sea la
totalidad compuesta de elementos, operaciones y relaciones. Estos dominios se
deben entender como sistemas, así mismo, este autor señala una ruta a seguir:
hacer posible la manipulación de los objetos, continuar con las representaciones
concretas y gráficas, y acceder a las simbólicas. En el documento desarrollado por
el Ministerio de Educación Nacional (2010) sobre Diagnóstico de Competencias
Básicas en Transición, la competencia matemática hace referencia a un conjunto
de recursos de funcionamiento cognitivo que permiten a los niños enfrentarse a
situaciones matemáticas cotidianas sobre cuantificación y principios de conteo,
comunicación de cantidades con notaciones, establecimiento de relaciones de
orden y razonamiento aritmético. Componente de identidad y crecimiento del yo
Es importante hacer referencia de como a través del cuerpo los niños y las niñas
se relacionan con su entorno, fortaleciendo su dimensión corporal en edad
preescolar. Esto también se denomina como psicomotricidad, que surge como
respuesta a una concepción que considera el movimiento como una capacidad del
cuerpo físico, en términos de agilidad, fuerza, destreza y, especialmente, como un
medio para hacer evolucionar al niño hacia la disponibilidad espacial, temporal y la
autonomía. En este sentido los lineamientos curriculares de preescolar, en cuanto
a esta dimensión hacen énfasis en: “La expresividad del movimiento se traduce en
la manera integral como el niño actúa y se manifiesta ante el mundo con su cuerpo
“en la acción del niño se articulan toda su afectividad, todos sus deseos, todas sus
representaciones, pero también todas sus posibilidades de comunicación y
conceptualización”. (Martín, 1997). Por tanto, cada niño posee una expresividad
corporal que lo identifica y debe ser respetada en donde sus acciones tienen una
razón de ser”. Para lograr esto en los niños es importante tener en cuenta el
principio de lúdica, mencionado en el Decreto 2247 de 1997 que: “Reconoce el
juego como dinamizador de la vida del educando mediante el cual construye
conocimientos, se encuentra consigo mismo, con el mundo físico y social,
desarrolla iniciativas propias, comparte sus intereses, desarrolla habilidades de
comunicación, construye y se apropia de normas. Asimismo, reconoce que el
gozo, el entusiasmo, el placer de crear, recrear y degenerar significados, afectos,
visiones de futuro y nuevas formas de acción y convivencia, deben constituir el
centro de toda acción realizada por y para el educando, en sus entornos.
Componente de ética y socialización De acuerdo con los lineamientos curriculares
de preescolar: “El desarrollo socio-afectivo en el niño juega un papel fundamental
en el afianzamiento de su personalidad, autoimagen, autoconcepto y autonomía,
esenciales para la consolidación de su subjetividad, como también en las
relaciones que establece con los padres, hermanos, docentes, niños y adultos
cercanos a él, de esta forma va logrando crear su manera personal de vivir, sentir
y expresar emociones y sentimientos frente a los objetos, animales y personas del
mundo, la manera de actuar, disentir y juzgar sus propias actuaciones y las de los
demás, al igual que la manera de tomar sus propias determinaciones.” (MEN,
1997) Al entender al niño como un ser social, es importante desarrollar las
competencias ciudadanas, de acuerdo con el último documento desarrollado por el
Ministerio de Educación Nacional, sobre Diagnóstico de Competencias Básicas en
Transición (MEN, 2010), donde se refieren a ellas como “los funcionamientos
cognitivos utilizados para la identificación de emociones, el reconocimiento de la
perspectiva del otro y el manejo de reglas en contexto”. Teniendo en cuenta que la
familia es el primer ente socializador, es importante su incidencia en el desarrollo
socioafectivo de los niños desde los modelos de autoridad, lo que ha generado
diferentes investigaciones sobre las consecuencias de éstos en el desarrollo
infantil. A partir de estos modelos, se ha llegado a la comprensión de las
dinámicas familiares, producto de la interrelación de los distintos factores que las
determinan. La teoría de desarrollo moral fue planteada inicialmente por Piaget y
luego fue complementada por su discípulo Kohlberg, ambos comparten que la
moral se desarrolla en etapas. “Estas etapas son las mismas para todos los seres
humanos y se dan en el mismo orden, creando estructuras que permitirán el paso
a etapas posteriores. Sin embargo, no todas las etapas del desarrollo moral
surgen de la maduración biológica como en Piaget, estando las últimas ligadas a
la interacción con el ambiente” (Kohlberg, 1981). Piaget baso su teoría en dos
aspectos: el respeto por las reglas y la idea de justicia de los niños, que se conoce
como teoría cognitiva – evolutiva que busca entender la moral de adentro hacia
afuera, es decir, descubrir los patrones de pensamiento que rigen el entendimiento
de moral que tiene cada persona. El dividió el desarrollo moral en tres etapas:
premoral, heterónoma y autónoma. Para Kohlberg se genera un proceso de
aprendizaje cuando se logra pasar de etapa que adhiere al individuo estructuras
de conocimiento, valoración y acción, pero si estas estructuras se adquieren de un
modo deficiente se producen desajustes y se puede dar la impresión de retroceso.
Presenta su esquema de desarrollo moral en tres etapas preconvencional,
convencional y postconvencional. Rectificando que no todos los adultos alcanzan
las máximas etapas de desarrollo moral. En los últimos años se habla de que la
primera etapa del desarrollo moral es según Cardini (2013) “donde se considera
bueno todo aquello que se quiere y que gusta al individuo por el simple hecho de
que se quiere y de que gusta.” Componente de lenguaje El lenguaje es
considerado como un vehículo ideal para el desarrollo de la imaginación, la
fantasía y la exploración de las múltiples potencialidades del ser humano; es un
camino de expresión por excelencia, es a través de la interacción que el niño logra
desarrollar esta habilidad y establecer las bases del lenguaje. De ahí que la
escuela sea un espacio llamado a diseñar, organizar e implementar situaciones
pedagógicas y didácticas que no solamente privilegien el uso del lenguaje como
herramienta de transformación de los sujetos, sino que además favorezcan el
desarrollo de habilidades escriturales, así como el acceso y la apropiación de las
diversas tipologías textuales que circulan en el entorno sociocultural. A partir de
los aportes conceptuales de algunos investigadores como, Emilia Ferreiro y Ana
Teberosky, (1979) se han hecho avances con el fin de establecer la naturaleza
social de la lectura y la escritura, así como su importante papel en la
estructuración del pensamiento. Esta mirada exige un gran empeño por parte de
diversas organizaciones, entidades e instituciones educativas involucradas en la
labor de enseñar a leer y escribir, con el fin de optimizar y dinamizar estos
procesos. Por esta razón, el docente de preescolar debe generar
permanentemente la construcción de situaciones de habla que faciliten
interacciones entre los niños, las niñas y los adultos; que propicien la
comunicación de necesidades, deseos e ideas al interior de un colectivo;
permitiendo a los niños reconocer las diversas intenciones del lenguaje y que lo
utilicen con pertinencia para comentar, narrar, justificar, proponer, negociar,
ordenar, solicitar, excusar, explicar, crear, etc., es decir, entrar en relación con el
mundo, como lo plantea Piaget pasar del lenguaje egocéntrico a un lenguaje
socializado y comunicativo, es aquí donde el juego simbólico del niño juega un
papel fundamental, pues en esa interacción es donde el lenguaje se desarrolla
como una forma de expresarse y socializarse. De acuerdo con lo anterior, es
necesario que el maestro indague por las elaboraciones y predicciones que los
niños traen frente al lenguaje y se disponga a categorizar dichos saberes, además
de potenciar en ellos su capacidad para integrar y estructurar estos conocimientos
que nacen en su entorno inmediato. A partir de esto, se puede permitir el
descubrimiento de las normas que regulan el código oral y escrito, es importante
que el docente reconozca el material que tiene a su disposición, para crear
propuestas metodológicas que acerquen a los niños a un uso social del lenguaje y
al aprovechamiento del habla y la escucha, la lectura y la escritura como fuentes
inagotables de comunicación. En este sentido, los docentes deben reconocer
métodos que pueden utilizar de acuerdo con las necesidades y características de
los grupos a los cuales van dirigidos. De igual manera, es importante que utilicen
alternativas que permitan a los niños ir más allá de las habilidades motrices en la
escritura y de las habilidades del deletreo en la lectura, donde el niño encuentra un
sentido a sus producciones orales y escritas. En el último documento desarrollado
por el Ministerio de Educación Nacional, sobre Diagnóstico de Competencias
Básicas en Transición (2010), la competencia comunicativa hace referencia a los
funcionamientos cognitivos utilizados para la anticipación, la elaboración del
discurso, la expresión de las ideas sobre el texto, la textualización y la constitución
de reglas del sistema notacional; es desde un planteamiento vigotskiano, que
existe una relación dinámica entre lenguaje y pensamiento, que va evolucionando
e interrelaciona aspectos psicoevolutivos, afectivos, sociales y motrices. Desde el
inicio el niño tiene una intención comunicativa clara, empezando por una
comunicación prelingüística a través del llanto, la sonrisa, el balbuceo hasta llegar
a un habla convencional y comprensible “hablar es una actitud social desde su
origen que progresivamente y a partir de la comunicación se interioriza y se
convierte en pensamiento. El proceso cultural es comunicación y todo el
comportamiento social es comunicativo. La conducta es comunicación” (Vigotsky,
2004) En definitiva el desarrollo del lenguaje y el pensamiento, es el resultado de
la suma de relaciones que el individuo establece con el entorno, mediado por la
sociedad de la cual hace parte, el lenguaje contribuye a configurar la estructura
cognitiva. Desde el enfoque de Bruner el lenguaje es un instrumento que lleva al
desarrollo cognitivo. “El lenguaje es una herramienta mental que facilita la
representación del mundo” (Brunner, 2003) teniendo en cuenta tres aspectos
esenciales: el lenguaje del niño tiene un propósito, los niños utilizan diferentes
recursos lingüísticos para referirse a las cosas y da significado a sus
producciones, poniendo al lenguaje dentro de un marco funcional.
Un niño sirve té en el centro de juego dramático durante The Ninja Project, una exploración de los
sentidos.
Un mármol rueda por una rampa, y los niños aplauden cuando alcanza el
objetivo que han ajustado en numerosas ocasiones. Después de una
lectura en grupos pequeños de Frog and Toad , los niños se reúnen en
una comunidad de investigación para analizar la naturaleza de tener
miedo y ser valientes al mismo tiempo. En un área adyacente, dos niños
completan su construcción de cofres del tesoro. Comienzan a clasificar
las rocas como gemas o geodas, ordenándolas en los compartimentos
de sus creaciones de madera. Un niño conserva flores usando papel
encerado y libros pesados en el centro de ciencias.
Un estudiante de kinder rodó sushi en el centro de juego dramático durante The Ninja Project, una
exploración de los sentidos.
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Un espacio de fabricación de aulas, que incluye materiales para trabajar la madera, productos
electrónicos, costura y hágalo usted mismo.
Una casa fuerte debe construirse sobre una base sólida. Debemos nutrir
las mentes de los niños en el aprendizaje temprano a través del juego, la
maravilla, la imaginación y la exploración para asegurar el éxito a medida
que avanzan en sus carreras de aprendizaje. Usted tiene el poder de
hacer un cambio en su escuela o aula. ¡Te animo a dar los primeros
pasos!
1) TECNOLOGÍA INTEGRADA
Los jóvenes de hoy nacieron en la era de Internet. Muchos son más conocedores
tecnológicamente que los adultos a quienes se les asignó la tarea de enseñarlos. Para
conectarse con estos niños, los maestros deben aprender a hablar su idioma y familiarizarse
con la tecnología que resulta tan natural para los jóvenes. La integración de la tecnología
significa aprovechar los intereses de los estudiantes y fortalecer sus habilidades técnicas, al
tiempo que ofrece oportunidades de aprendizaje enriquecedoras. Al igual que con cualquier
nuevo desarrollo, muchos profesores, deseosos de mantenerse al día con la última moda,
simplemente hacen los movimientos de integración de tecnología. Sin embargo, para que
tengan éxito, necesitan algo más que las mociones: necesitan una comprensión profunda de
las herramientas disponibles, así como una reflexión significativa sobre cómo usarlas para
mejorar el aprendizaje. En adición,NetSmartzKids , un sitio web interactivo del Centro Nacional
para Niños Desaparecidos y Explotados, les enseña a los niños a usar Internet de manera
responsable. Además, asegúrese de consultar ECE Technology: 10 herramientas de tendencias
para maestros , que describe muchas herramientas innovadoras que pueden mejorar el
aprendizaje de los estudiantes.
3) INSTRUCCIÓN DIFERENCIADA
Los maestros pueden adaptar las experiencias de aprendizaje para diferenciar entre las
necesidades individuales de los estudiantes en el aula. Hay tres estilos principales de
aprendizaje: visual, auditivo y cinestésico. Los Estilos de Aprendizaje Cognitivo de los
Niños describen las características de estos estudiantes, así como los tipos de actividades en
las que prosperan, con la advertencia de que solo se describen los estilos de aprendizaje , para
distinguirlos de los estilos cognitivos.(holístico, analítico, dependiente del campo, etc.). Los
maestros también pueden diferenciar asignando tareas a niveles de preparación, ofreciendo la
intervención apropiada o actividades de extensión según sea necesario. Permitir que los niños
seleccionen actividades basadas en áreas de interés es otra gran manera de
diferenciar. Ofrecer opciones es un excelente motivador para los niños. El trabajo en grupos
pequeños es una de las maneras más efectivas de satisfacer las necesidades de los alumnos
diversos en entornos de clases grandes. Differentiation Central ofrece información perspicaz,
así como un breve video de la educadora, autora y conferencista Carol Ann Tomlinson, que
comparte sus experiencias y puntos de vista sobre la diferenciación en el aula.
4) ESTABLECIMIENTO DE METAS
Involucrar a los niños en el proceso de establecer metas es una excelente manera de
alentarlos a que se apropien de su aprendizaje. En las primeras etapas, la fijación de objetivos
debe hacerse de una manera muy clara y simplista, por ejemplo, frecuentes conversaciones
bidireccionales con niños sobre su progreso en áreas específicas. Los docentes pueden
facilitar aún más el establecimiento de objetivos a través del uso de organizadores, tablas de
anclaje y ayudas similares. Los Gráficos de Comportamiento Imprimibles gratuitos brindan
modelos de gráficos personales para los estudiantes de educación temprana. Teaching and
Tapas comparte las tablas de objetivos de la clase orientadas específicamente hacia la lectura
y la escritura. Recursos de enseñanza de matemáticas K-5muestra una selección de tablas de
objetivos para la instrucción de matemáticas. En general, ayudar a los niños a alcanzar sus
metas exige que los maestros brinden retroalimentación específica y frecuente, así como
tiempo suficiente para reflexionar sobre sí mismos.
motivacion
El juego
La literatura
Las niñas y los niños son especialmente sensibles a las
sonoridades de las palabras y a sus múltiples sentidos.
Necesitan jugar con ellas, ser nutridos, envueltos,
arrullados y descifrados con palabras y símbolos
portadores de emoción y afecto. Por ello la literatura es
también una de las actividades rectoras de la infancia.
Las personas que están cerca de los más pequeños
constatan cotidianamente que jugar con las palabras -
descomponerlas, cantarlas, pronunciarlas, repetirlas,
explorarlas- es una manera de apropiarse de la lengua.
Quizás por ello suele decirse que las niñas y los niños se
parecen a los poetas en su forma de "estrenar" y de
asombrarse con las palabras, y de conectarlas con su
experiencia vital.
El arte