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Alguna vez nos hemos preguntado a qué reino pertenecen los virus, ya que existen

enfermedades causadas por estos, por esto nos preguntamos si los virus están ¿vivos o
muertos? Para empezar, ¿qué es lo que conocemos como ser vivo? un ser vivo es lo que
nace, crece, se reproduce y muere, pero, ¿cómo definimos vida a nivel microbiológico? la
vida representa un complejo conjunto de procesos que resultan de las proteínas con los
ácidos nucleicos, ya que estas siempre están en actividad en las células vivas. No existe
una definición precisa que separe a los seres vivos de los que no la tienen.

En la primera publicación de este blog describimos los virus como “una entidad infecciosa
acelular compuesta de componentes genómicos”. Estamos seguros de las siguientes
afirmaciones:

Los virus no respiran


no muestran irritabilidad
no se mueven
no crecen
Y sin embargo los !virus son capaces de replicarse!
(Nótese que las palabras en negrita corresponden a características que asociamos con los
seres vivos).

Un ser vivo está compuesto por células, las cuales poseen organelos con funciones
propias, los únicos “organismos” que no poseen células son los virus, estos solamente
están constituidos por ADN o ARN (material genético necesario para la duplicación). Los
virus son más pequeños que las células, podemos decir que existe un debate sobre si
estos se encuentran vivos o no: son capaces de replicarse, pero sólo si se encuentran
dentro de una célula, son dependientes de la misma, ya que sin esta no son capaces de
crecer, reproducirse ni alimentarse. Existen virus que pueden cristalizarse y así sobrevivir
durante años hasta que infectan a una célula. Por lo que hemos mencionado los científicos
afirman que no son seres vivos, pero tampoco son materia muerta…

Los seres vivos cumplen con todas las siete características de la vida.

1. Complejidad y organización

Un ser vivo consiste en una o más células que trabajan de una forma
ordenada. La célula en sí está compuesta por partes individuales que
funcionan en coordinación.

Varias células se pueden organizar para formar tejidos; un conjunto de


tejidos que cumple una función específica es un órgano; los órganos
pueden formar sistemas de órganos, etc. Esta estructuración de menos a
más complejo se conoce como los niveles jerárquicos de organización. La
tendencia a la auto-organización es una característica importante de la
vida.

2. Metabolismo

Los seres vivos necesitan energía para crecer, reproducirse y mantener su


complejidad frente a las fuerzas de entropía. Para esto, transforman los
materiales químicos y orgánicos por medio de un proceso de síntesis o
degradación. Este proceso se conoce como el metabolismo y permite el
crecimiento, reparación y conservación del ser vivo. El metabolismo puede
ser anabólico o catabólico.

3. Homeostasis

Los seres vivos necesitan resistir las fuerzas de entropía (la tendencia
natural hacia la desorganización). Para mantener la constancia del medio
interno de su cuerpo (temperatura corporal, equilibrio de electrolitos, etc.),
necesitan gastar energía.

4. Crecimiento

Todos los seres vivos crecen en algún momento. El crecimiento depende


de la habilidad de metabolizar, o cambiar material externo a energía. Los
seres vivos crecen de la manera estructurada descrita en el número uno
(complejidad y organización).

5. Reproducción

Todos los seres vivos tienen la habilidad de reproducirse de alguna forma.

La reproducción puede ser sexual o asexual. La reproducción asexual


normalmente se realiza en organismos más simples y es una extensión
del proceso de crecimiento. Por ejemplo, las bacterias crecen hasta cierto
punto y luego se dividen, produciendo una copia exacta de la bacteria
original. La reproducción sexual generalmente requiere de dos individuos
que combinan su material genético para crear un tercer individuo con
rasgos diferentes.

6. Irritabilidad

Un ser vivo detecta y reacciona a estímulos como la luz, presión,


temperatura y/o composición del suelo, aire, agua, etc. Esta reacción es
activa (requiere energía), no es pasiva. Por ejemplo, la reacción de una
planta al sol es diferente que una piedra que rueda hacia abajo. La planta
produce energía para poder crecer hacia el sol (una reacción activa),
mientras la piedra no produce ni requiere de energía para rodar, sino que
se mueve por la fuerza física de la gravedad.

7. Evolución

Los seres vivos cambian a través de las generaciones; esto pasa a la


escala de una población, no de un individuo. La evolución permite la
adaptación de las poblaciones a su ambiente. La Teoría de Evolución es
una teoría científica, no una teoría común. Una teoría científica es una
explicación de un fenómeno que está apoyada por observaciones
científicas.
En la ciencia siempre existe la posibilidad de cambiar nuestro
entendimiento de nuestro entorno con observaciones futuras y tecnologías
que todavía no existen; por eso se llama una teoría. Sin embargo, en
palabras comunes una teoría científica es un hecho: es algo que se ha
comprobado con las tecnologías actuales y que está aceptado por la
comunidad científica.

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