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Clase Psicologia Social para Imprimir
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Teniendo en cuenta las definiciones de Psicología Social y los principales temas de estudio que aborda esta perspectiva de la
Psicología, lean el artículo referido a las orquestas sociales y completen la siguiente consigna:
El campo de conocimientos de la psicología social no es algo cerrado y “dado”, sino que al estar atravesado por variables socio-
históricas se constituye en un campo de problemáticas complejo en constante cambio, donde la preocupación central es
deconstruir y elucidar los fenómenos psicosociales y los supuestos que dan sentido a la vida en sociedad.
Relación individuo-sociedad: es el estudio de la trama psicosocial; el lugar del individuo dentro de la sociedad; la relación con otros
sujetos; la reproducción de las condiciones sociales de existencia.
Vida cotidiana: son las condiciones concretas de existencia, lo dado, lo que aceptamos como “natural”; el desarrollo de nuestra
vida en la sociedad; el lugar donde satisfacemos nuestras necesidades; el “horizonte de lo posible”.
Instituciones: conjunto de significaciones socialmente sancionadas por un colectivo. Dan orden y sentido a la sociedad (por
ejemplo, escuela, matrimonio, trabajo, etc.); son el contexto y soporte de lo cotidiano.
Socialización: Procesos de interacción que nos permiten insertarnos y formar parte de la sociedad. Se divide en socialización
primaria (familia) y secundaria (escuela, grupos, instituciones). Permite el desarrollo y configuración de la identidad.
Grupos: Lugares donde se configuran vínculos. Permiten la socialización. Satisfacen necesidades. Estructuran el espacio social.
Representaciones sociales: Guían el comportamiento. Son una modalidad de conocimiento que se emplea en la vida cotidiana.
Regulan el campo de las interacciones. Son imágenes que condensan un conjunto de significados que nos permiten interpretar lo
que nos pasa y dar sentido. Son maneras de pensar e interpretar nuestra realidad cotidiana.
Surgió en un asentamiento de Asunción del Paraguay. Niños y jóvenes crean y utilizan instrumentos reciclados de residuos sólidos.
La música redujo la violencia y la exclusión y abrió nuevos horizontes de vida. Tiene fama mundial.
“El mundo nos tira basura, nosotros le devolvemos música”. Ese es el lema de la Orquesta de Instrumentos Reciclados de Cateura,
integrada por niños y jóvenes habitantes cercanos del vertedero de basura más grande de Asunción, de Paraguay, que hace música
con instrumentos fabricados con residuos domiciliarios.
“Ante la carencia de instrumentos y la situación de vulnerabilidad de estos niños donde su casa cuesta menos que un violín o,
dicho de otra manera, donde un violín puede costar más que su casa, era difícil emprender una iniciativa donde les pudiéramos
proveer instrumentos”, cuenta Favio Chávez, director de la orquesta. Chávez, músico e ingeniero en ecología humana, llegó a
Cateura en 2006 a trabajar como técnico ambiental. En los tiempos libres enseñaba música a los hijos de los recicladores.
Cateura es un vecindario de unas 20 mil personas, ubicado entre el basurero y el río Paraguay, de casas precarias, calles atestadas
de aguas derramadas por los camiones que trasladan los residuos y olores nauseabundos.
Allí se gestó la orquesta. Chávez cuenta que cuando la música comenzó a ser una necesidad, los residuos fueron una opción.
“Empezamos a hacer instrumentos muy simples, de distracción para esos niños. No nos imaginamos nunca que esto iba a
trascender de esta manera”, relata. El primero fue un violín hecho con un colador, un plato y tubos de metal.
Se trataba de materiales didácticos para enseñar, inspirados en los instrumentos de los humoristas argentinos Les Luthiers. No
estaban pensados para dar conciertos.
Luego surgieron los que hoy ejecutan y que imitan violines, violas, chelos, contrabajos, guitarras, flautas, saxofones, trompetas,
trombones e instrumentos de percusión, pero construidos con latas de aceite, madera de pallets, caños galvanizados, ollas,
tapones de botellas, llaves fundidas o radiografías. La orquesta arrancó con 10 niños; hoy son 400.
La cultura, una necesidad
El proyecto terminó convirtiéndose en un fenómeno cuando un grupo de cineastas publicó en internet, en 2012, el documental
“Vertedero armónico”.
La difusión de la orquesta fue tal que figuras internacionales de la música pusieron sus ojos en ella y llovieron las invitaciones para
actuar en diversos escenarios, desde Alemania hasta Azerbaiján.
Los chicos mostraron su arte con basura reciclada en más de 45 países. Tocaron con orquestas sinfónicas y filarmónicas de fama
mundial y hasta fueron teloneros de Metallica, durante una de sus giras por Sudamérica.
“Más allá de la curiosidad que genera la orquesta, hay algo más consistente que es reivindicar que la cultura es una necesidad
básica, que la educación puede cambiar la vida de los niños y los jóvenes y les puede dar herramientas para desarrollar su talento”,
plantea Chávez.
La educación hace que los residuos suenen. “Estos instrumentos en la mano de cualquiera serían basura solamente”, apunta.
Además de aprender a tomar un violín o un trombón, la música se convirtió en una alternativa de inclusión social. Muchos ya
están en la universidad y pronto serán instructores de los más pequeños. Crecieron con la orquesta.
Contaminar menos
Evelin Riberos (16) toca un saxofón hecho con caño galvanizado, mangos de cuchara, latas de maíz, de sardinas, de cervezas y
cobre fundido. Hace cuatro años que integra la orquesta. “La orquesta me da muchas cosas. Conocí lugares, personas, me pagan
mis estudios. Todo eso a mí me ayuda mucho”, dice. Y agrega: “El proyecto está superbien. En Paraguay no se reciclan las basuras;
va todo al vertedero”.
Ezequiel (19) es el arpista del grupo. El arpa que toca la construyó su papá junto a un luthier. La caja de resonancia es un tambor
de aceite; la tapa, una caja de repuestos; el brazo del instrumento es del columpio que usaba de niño; y la pata del arpa, una
escoba.
“La orquesta aporta a la cultura, a que los jóvenes no se metan en las drogas o esas cosas y a difundir la música paraguaya con el
arpa, que es un símbolo nacional. Es un proyecto impresionante”, asegura.
Gerardo (20) es parte de la orquesta hace cinco años. Llegó por invitación de un primo; primero con la guitarra y, luego, con el
chelo. El miércoles estrenó el que ejecuta ahora, hecho con un tambor de aceite y cucharones. “Gracias a la orquesta, tengo una
pieza mía y los viajes que, para mí, son experiencias impagables”, cuenta.
Y subraya: “El proyecto es raro y emocionante al mismo tiempo. ¡Quién pensaba que una orquesta con instrumentos reciclados
iba a estar recorriendo el mundo! Sigue siendo muy emocionante tocar conciertos con la orquesta”.
Noelia Ríos (18) ejecuta la imitación de un chelo. Empezó a los 12. Su chelo no parece un chelo, pero suena como uno. Está
construido a partir de una lata que contenía aceite, la terminación de las cuerdas es una cuchara de madera y el mango y las
clavijas, de pallet.
“Empecé primero con la guitarra. Mi papá me inculcó mucho la música, siempre le gustó cantar y tocar, igual que a mi abuela.
Ellos me inspiraron, ya que nosotros somos pobres”, cuenta. Y sigue, sonriente: “La orquesta me abrió puertas. Me da muchos
beneficios, me ayudan en mis estudios y a conocer a personas de otros países, culturas. Me enseña a respetar a los demás. Es
como una disciplina. Por eso me gusta. El reciclado me parece una buena idea, en especial para el planeta. Contaminamos menos
y valoramos más lo que tenemos”.
Tema: Psicología Social
Teniendo en cuenta las definiciones de Psicología Social y los principales temas de estudio que aborda esta perspectiva de la
Psicología, lean el artículo referido a las orquestas sociales y completen la siguiente consigna:
El campo de conocimientos de la psicología social no es algo cerrado y “dado”, sino que al estar atravesado por variables socio-
históricas se constituye en un campo de problemáticas complejo en constante cambio, donde la preocupación central es
deconstruir y elucidar los fenómenos psicosociales y los supuestos que dan sentido a la vida en sociedad.
Relación individuo-sociedad: es el estudio de la trama psicosocial; el lugar del individuo dentro de la sociedad; la relación con otros
sujetos; la reproducción de las condiciones sociales de existencia.
Vida cotidiana: son las condiciones concretas de existencia, lo dado, lo que aceptamos como “natural”; el desarrollo de nuestra
vida en la sociedad; el lugar donde satisfacemos nuestras necesidades; el “horizonte de lo posible”.
Instituciones: conjunto de significaciones socialmente sancionadas por un colectivo. Dan orden y sentido a la sociedad (por
ejemplo, escuela, matrimonio, trabajo, etc.); son el contexto y soporte de lo cotidiano.
Socialización: Procesos de interacción que nos permiten insertarnos y formar parte de la sociedad. Se divide en socialización
primaria (familia) y secundaria (escuela, grupos, instituciones). Permite el desarrollo y configuración de la identidad.
Grupos: Lugares donde se configuran vínculos. Permiten la socialización. Satisfacen necesidades. Estructuran el espacio social.
Representaciones sociales: Guían el comportamiento. Son una modalidad de conocimiento que se emplea en la vida cotidiana.
Regulan el campo de las interacciones. Son imágenes que condensan un conjunto de significados que nos permiten interpretar lo
que nos pasa y dar sentido. Son maneras de pensar e interpretar nuestra realidad cotidiana.
Para hablar de “movimiento orquestal infanto-juvenil” es necesario definir el amplio panorama que abarca en Argentina ya que,
según la propuesta y estructura de trabajo, las orquestas se pueden enmarcar en cuatro grandes grupos. Es importante esta
distinción porque, si bien como premisa las orquestas infanto-juveniles tienen un objetivo en común, la forma y estructura de
funcionamiento presentan grandes diferencias en cuanto a su desarrollo, sin que esto amerite un juicio de valor.
Por un lado, las Orquestas Académicas son espacios de práctica orquestal, de acceso en general por concurso, para instrumentistas
en formación o ya formados por profesores particulares o en institutos terciarios o universitarios, centrados en el desarrollo
técnico individual. Tal es el caso de la “Orquesta Académica Juvenil Teatro Libertador San Martín”, de la Universidad provincial de
Córdoba o la Orquesta Juvenil Municipal de General Roca dependiente de la Dirección de Cultura de la ciudad, que cuenta con 90
músicos menores de 18 años que reciben clases de instrumento y audio aparte de participar de la orquesta.
Una segunda categoría son las Orquestas de “Educación Musical” en las que sus integrantes realizan esta formación específica
aprendiendo a ejecutar un instrumento en agrupaciones de instituciones públicas o privadas, incluidas las comunitarias. Tal es el
caso de lo que sucede en la provincia de Misiones con el Centro de Educación Musical (CEMu), a cargo del Consejo General de
Educación de la Provincia, junto con la Fundación Grillos, con sedes en distintas ciudades. Se trata de 27 aulas satélites de
Orquestas y / o Coros con una matrícula que fluctúa alrededor de los 2000 alumnos en toda la provincia.
Miguel Brizuela, coordinador de las orquestas, señala que: “Las orquestas comienzan con una base de instrumentos (que por
supuesto nunca es suficiente) y a medida que avanzan los proyectos, a través de la vinculación con las comunidades, se van
acercando recursos para afrontar compras de otros instrumentos, generar cursos, giras, presentaciones y demás. Sin duda, las
acciones del CEMU y de la Fundación Grillos se potencian a sí mismas, generando un fluir de conocimiento, cursos, capacitaciones,
encuentros, festivales en toda la Provincia de Misiones. Todas las acciones se manifiestan claramente en el crecimiento de
vocaciones artísticas, como así también en el acompañamiento de un público que consume conciertos, productos que son
emergentes de toda la actividad pedagógica y artística de los diferentes CEMUs y de la Fundación Grillos”.
Teniendo en cuenta las definiciones de Psicología Social y los principales temas de estudio que aborda esta perspectiva de la
Psicología, lean el artículo referido a las orquestas sociales y completen la siguiente consigna:
El campo de conocimientos de la psicología social no es algo cerrado y “dado”, sino que al estar atravesado por variables socio-
históricas se constituye en un campo de problemáticas complejo en constante cambio, donde la preocupación central es
deconstruir y elucidar los fenómenos psicosociales y los supuestos que dan sentido a la vida en sociedad.
Relación individuo-sociedad: es el estudio de la trama psicosocial; el lugar del individuo dentro de la sociedad; la relación con otros
sujetos; la reproducción de las condiciones sociales de existencia.
Vida cotidiana: son las condiciones concretas de existencia, lo dado, lo que aceptamos como “natural”; el desarrollo de nuestra
vida en la sociedad; el lugar donde satisfacemos nuestras necesidades; el “horizonte de lo posible”.
Instituciones: conjunto de significaciones socialmente sancionadas por un colectivo. Dan orden y sentido a la sociedad (por
ejemplo, escuela, matrimonio, trabajo, etc.); son el contexto y soporte de lo cotidiano.
Socialización: Procesos de interacción que nos permiten insertarnos y formar parte de la sociedad. Se divide en socialización
primaria (familia) y secundaria (escuela, grupos, instituciones). Permite el desarrollo y configuración de la identidad.
Grupos: Lugares donde se configuran vínculos. Permiten la socialización. Satisfacen necesidades. Estructuran el espacio social.
Representaciones sociales: Guían el comportamiento. Son una modalidad de conocimiento que se emplea en la vida cotidiana.
Regulan el campo de las interacciones. Son imágenes que condensan un conjunto de significados que nos permiten interpretar lo
que nos pasa y dar sentido. Son maneras de pensar e interpretar nuestra realidad cotidiana.
La Orquesta Los Benjaminos surgió en la comunidad con seis integrantes. Hoy se expandió a otros barrios y
suma 115 miembros.
La Orquesta Los Benjaminos, agrupación musical que integra a niñas y niños de Villa La Tela, recibió ayer
una ayuda por parte de la Agencia Córdoba Cultura, que preside Nora Esther Bedano.
La ayuda contribuye al sostenimiento de un eficaz proyecto inclusivo, cuya esencia está ligada al trabajo en
equipo por medio de la música. “Quedamos mano a mano con ustedes en el compromiso de seguir
ayudándolos”, sintetizó la funcionaria provincial.
En enero de 2009 nació la Asociación Civil Benjaminos, un espacio cultural y recreativo para vecino
deVilla La Tela, un barrio humilde, pequeño, ubicado en el oeste de la ciudad de Córdoba.
Las primeras acciones de la asociación estuvieron destinadas al apoyo escolar para los más pequeños,
además de talleres de computación y, sobre todo, ofrecer una mano amiga que pudiera ayudar de alguna
manera a quien lo necesitara.
Sucede que la asociación Benjaminos reposa sobre una misión, que sus miembros expresan de la siguiente
manera: “contener, escuchar, acompañar, ayudar y enseñar a todos los niños que se encuentren en alguna
situación de vulnerabilidad”.
A raíz del contacto con las necesidades concretas y los intereses latentes de los niños del barrio Villa La
Tela, la Asociación Benjaminos detectó el potencial que la música tiene como medio de inclusión y
contención social. Y se propuso el desafío de crear una orquesta de cuerdas. Así nació La Orquesta de Villa la
Tela.
Walter Pollo Díaz es el presidente de la Asociación Benjaminos y el coordinador general de la orquesta. “Esta
orquesta, compuesta por pequeños artistas residentes del lugar, nació con el objetivo de construir
ciudadanía desde la música, con el propósito de aprender valores, códigos, ética, hábitos de estudio y por
sobre todo «abrir» las mentes de los niños para que tengan una oportunidad en la vida”.
Díaz cuenta que la orquesta nació en las bases de la comunidad de Villa La Tela, a raíz de una pregunta que
los mayores hicieron a los más chicos del barrio: ¿Qué les gustaría hacer en sus ratos libres? Las repuestas
fueron variadas. Internet, batucadas, deportes y un pequeño porcentaje de niños, que había asistido a una
función didáctica en el Teatro del Libertador San Martín, dijo violines.
Esa última respuesta llamó la atención de Díaz y sus pares, quienes finalmente abrazaron la idea de crear
para la comunidad una orquesta que incluyera a niñas y niños con ciertas condiciones de vulnerabilidad.
En el año 2009, el sueño aterrizó y así nació la orquesta, originalmente integrada por seis miembros. El
proyecto se expandió a otros barrios de la ciudad de Córdoba: Bajo Pueyrredón, Villa Angelelli, Villa El
Libertador y, próximamente, en barrio Las Violetas. Actualmente hay 115 niños y jóvenes incluidos en el
proyecto Los Bejaminos.
A los seis meses, el grupo comenzó a mostrarse en público. En 2016, la agrupación se adoptó la forma de
una orquesta con la incorporación de más instrumentos.
El trayecto en la orquesta abre a sus integrantes la posibilidad de continuar su formación en las instituciones
dedicadas a la enseñanza musical. Actualmente, ocho miembros de esta cantera estudian en
el Conservatorio Provincial de Música Félix Tomás Garzón.
Pertenecer a la orquesta demanda de los chicos no solamente un buen rendimiento en el aspecto musical,
ya que además deben dar muestras de respeto al resto de los compañeros y completar la escuela secundaria.
“Nosotros creemos que el Estado tiene que apoyar este tipo de actividades porque estimula los lazos
familiares, educa en valores y alimenta el surgimiento de nuevos talentos. Detrás de este trabajo hay mucho
esfuerzo”, señala Walter “Pollo” Díaz.
Agustina es una de las integrantes de la orquesta, tiene 15 años de edad y vive en Villa La Tela. “Si no fuera
por la música no sé qué sería de mí ahora, me gustaría anotarme en el conservatorio y convertirme en
profesora de música”, anhela la joven que encontró en el violín un sentido a su vida.
La orquesta Los Benjaminos está rodeada de un grupo de maestros preparadores y personas que asisten al
conjunto. Boris Brow, quien trabaja en la familia de las cuerdas, comenta: “Las ganas y la voluntad de los
chicos contagian al director musical”.
Yamila toca el contrabajo y estudia Trabajo Social en la Universidad Nacional de Córdoba. Su experiencia con
la orquesta resultó liberadora: “Jamás me hubiera imaginado tocar este instrumento, es un instrumento
potente y me encanta. La experiencia en la orquesta me permite liberarme de los problemas de la vida
cotidiana”, cuenta.
Otra integrante, también de la familia de las cuerdas, es Ludmila de 13 años de edad. “En la orquesta podés
hacer muy buenos amigos”, valora la niña que toca el chelo. Su amiga y compañera de fila, Ingrid, entró a la
orquesta a edad de 10 años, hoy tiene 13. Empezó tocando el violín pero cambió por el chelo. “El instrumento
me encanta y me gustaría seguir tocando este instrumento”, dice.
Tema: Psicología Social
Teniendo en cuenta las definiciones de Psicología Social y los principales temas de estudio que aborda esta perspectiva de la
Psicología, lean el artículo referido a las orquestas sociales y completen la siguiente consigna:
El campo de conocimientos de la psicología social no es algo cerrado y “dado”, sino que al estar atravesado por variables socio-
históricas se constituye en un campo de problemáticas complejo en constante cambio, donde la preocupación central es
deconstruir y elucidar los fenómenos psicosociales y los supuestos que dan sentido a la vida en sociedad.
Relación individuo-sociedad: es el estudio de la trama psicosocial; el lugar del individuo dentro de la sociedad; la relación con otros
sujetos; la reproducción de las condiciones sociales de existencia.
Vida cotidiana: son las condiciones concretas de existencia, lo dado, lo que aceptamos como “natural”; el desarrollo de nuestra
vida en la sociedad; el lugar donde satisfacemos nuestras necesidades; el “horizonte de lo posible”.
Instituciones: conjunto de significaciones socialmente sancionadas por un colectivo. Dan orden y sentido a la sociedad (por
ejemplo, escuela, matrimonio, trabajo, etc.); son el contexto y soporte de lo cotidiano.
Socialización: Procesos de interacción que nos permiten insertarnos y formar parte de la sociedad. Se divide en socialización
primaria (familia) y secundaria (escuela, grupos, instituciones). Permite el desarrollo y configuración de la identidad.
Grupos: Lugares donde se configuran vínculos. Permiten la socialización. Satisfacen necesidades. Estructuran el espacio social.
Representaciones sociales: Guían el comportamiento. Son una modalidad de conocimiento que se emplea en la vida cotidiana.
Regulan el campo de las interacciones. Son imágenes que condensan un conjunto de significados que nos permiten interpretar lo
que nos pasa y dar sentido. Son maneras de pensar e interpretar nuestra realidad cotidiana.
“Ensayos de orquestas”
Orquestas conformadas por niñas, niños y adolescentes que pertenecen a los sectores más vulnerables de la sociedad utilizan el
arte como vehículo promotor de derechos y herramienta para poder transformar el futuro.
El joven que durante el día interpreta a Mozart por la noche no sale a romper vidrieras”, es la frase que repite como lema Luis
Szaran, el compositor, musicólogo, director de la Orquesta Sinfónica de la Ciudad de Asunción (Osca) y creador hace 13 años del
programa Sonidos de la Tierra, un ambicioso plan de integración sociocultural y desarrollo comunitario a través de orquestas
sinfónicas en territorio paraguayo. Con más de 15 mil integrantes, el proyecto contempla también la formación de escuelas
ambulantes de música, talleres de luthería y becas de estudio y viajes. Paraguay, Bolivia y Venezuela fueron pioneros en América
latina de esas orquestas que hoy suenan como emblemas de lo posible.
Otra orquesta infanto-juvenil reconocida dentro del espectro de agrupaciones que toman el arte como medio de transformación
social es la denominada Sicor (Sistema de Coros y Orquestas), nacida en Urubicha, un pequeño pueblo ubicado en la región más
pobre de la provincia de Guarayos, en Bolivia.
En 1996, esta agrupación deslumbró a la concurrencia que asistió al Primer Festival Internacional de Música Renacentista y
Barroca, en sintonía con la denominación de Patrimonio Cultural de la Humanidad que Unesco hizo en los pueblos que formaron
parte de las “Misiones de Chiquitos”.
Los jóvenes violinistas aborígenes de Urubicha, dirigidos por Rubén Darío Suárez Arana, son referentes internacionales en música
barroca, la misma que recuperan del olvido en las comunidades integrantes de las misiones jesuíticas. Superaron las barreras de
la exclusión y carencias llevando por el mundo las melodías de los antepasados resignificadas por sus nuevos talentos.
Sicor fue una semilla que germinó en toda la región de Santa Cruz de la Sierra, donde nacieron orquestas infantiles similares, cuyos
integrantes son becados por el Ministerio de Educación de Bolivia.
La pionera entre todas estas agrupaciones artístico-sociales este año cumple 40 años y se constituye en una experiencia inédita
adoptada en numerosos países del mundo. Es el Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles (Soijar), fundado por
el maestro y músico venezolano José Antonio Abreu, quien se propuso rescatar mediante un sistema pedagógico, ético y estético
a muchas generaciones de jóvenes en condiciones adversas de vida.
El Sistema Abreu propone adquirir conocimiento de instrumentos musicales para orquestas sociales con profundo desarrollo
humanístico, en las que se formen ciudadanos participativos, que crezcan entre valores que reaseguren la realización personal y
promuevan el desarrollo del contexto social de sus existencias.
Entre las consignas de Abreu y tantos otros maestros propulsores de orquestas, está la de exigir políticas públicas que sostengan
e impulsen estas energías colectivas transformadoras. “El arte también es una necesidad básica”, asegura.
En el año 2008 se creó una de las pioneras en Córdoba ciudad, la Orquesta de la Escuela Arzobispo Castellano, de barrio Suárez,
incluida en el proyecto nacional de orquestas sociales y el Programa Coros, Orquestas y Ensambles del Ministerio de Educación de
la Provincia.
Muchas orquestas con principios fundantes similares a las enunciadas suenan en el territorio cordobés en diferentes escuelas,
barrios y villas.
- ¿Quiere que le diga la verdad? Bueno, yo estaba medio al pedo y me invitaron a incorporarme a la orquesta. ¡Ni idea del tango!
Me dieron un chelo y no sabía agarrarlo, pero cuando aprendí me gustó mucho. Ahora soy chelo principal”, cuenta Franco, muy
sinceramente, mientras desenfundan los instrumentos para empezar un improvisado ensayo, en las escalinatas de la escuela Ipem
351 del barrio El Chingolo II. Sucedió que estaba recién desinfectada y no quisieron posponer nuestra cita.
“Acá nadie tenía noción de este ritmo”, acota Ángeles. “Pero nos reenganchamos todos y lo mejor es que el tango nos mete en
otros ámbitos, y le digo que cuando escucho un tango por ahí yo me imagino tocándolo. ¿Mi preferido? Gallo ciego, de Agustín
Bardi”.
“¡Aquí, miren todos! Escuchen... es un ensayo especial. Micaela y Natanael vinieron de Casa Macuca a acompañarnos con
bandoneón y acordeón... ¿Largamos?”, interpela a todos el profe Guillermo Zurita, también dirigiendo esta orquesta que forma
parte del programa de coros del Ministerio de Educación de la Provincia de Córdoba.
“¡Paaa pa paaaan! La viola aparece después... mejor sin soltar la nota y un poco con bronca... ¡Vamos ya!”. Y suena La viruta como
nunca, en ese entramado sutil de sonidos y silencios.
El profe Zurita explica en palabras simples el fenómeno que es esta orquesta. “Aquí ponemos negro sobre blanco que los jóvenes
necesitan pautas claras de los modelos a seguir. Son demandantes de afecto y valores, y siempre nos están pidiendo límites, por
eso integrar una orquesta sirve, entre otras cosas, para tener orden, disciplina y amor a uno mismo y al otro, ¿se entiende? La
música hecha entre todos crea un marco de referencia y refugio a muchos adolescentes que están muy desamparados, víctimas
de la endemia de la desigualdad... Entonces, una orquesta forma parte de una estrategia para gozar de un bien cultural en
hermosas ceremonias donde se celebra el arte”.
Tema: Psicología Social
Teniendo en cuenta las definiciones de Psicología Social y los principales temas de estudio que aborda esta perspectiva de la
Psicología, lean el artículo referido a las orquestas sociales y completen la siguiente consigna:
El campo de conocimientos de la psicología social no es algo cerrado y “dado”, sino que al estar atravesado por variables socio-
históricas se constituye en un campo de problemáticas complejo en constante cambio, donde la preocupación central es
deconstruir y elucidar los fenómenos psicosociales y los supuestos que dan sentido a la vida en sociedad.
Relación individuo-sociedad: es el estudio de la trama psicosocial; el lugar del individuo dentro de la sociedad; la relación con otros
sujetos; la reproducción de las condiciones sociales de existencia.
Vida cotidiana: son las condiciones concretas de existencia, lo dado, lo que aceptamos como “natural”; el desarrollo de nuestra
vida en la sociedad; el lugar donde satisfacemos nuestras necesidades; el “horizonte de lo posible”.
Instituciones: conjunto de significaciones socialmente sancionadas por un colectivo. Dan orden y sentido a la sociedad (por
ejemplo, escuela, matrimonio, trabajo, etc.); son el contexto y soporte de lo cotidiano.
Socialización: Procesos de interacción que nos permiten insertarnos y formar parte de la sociedad. Se divide en socialización
primaria (familia) y secundaria (escuela, grupos, instituciones). Permite el desarrollo y configuración de la identidad.
Grupos: Lugares donde se configuran vínculos. Permiten la socialización. Satisfacen necesidades. Estructuran el espacio social.
Representaciones sociales: Guían el comportamiento. Son una modalidad de conocimiento que se emplea en la vida cotidiana.
Regulan el campo de las interacciones. Son imágenes que condensan un conjunto de significados que nos permiten interpretar lo
que nos pasa y dar sentido. Son maneras de pensar e interpretar nuestra realidad cotidiana.
“Ensayos de orquestas”
Orquestas conformadas por niñas, niños y adolescentes que pertenecen a los sectores más vulnerables de la sociedad utilizan el
arte como vehículo promotor de derechos y herramienta para poder transformar el futuro.
El joven que durante el día interpreta a Mozart por la noche no sale a romper vidrieras”, es la frase que repite como lema Luis
Szaran, el compositor, musicólogo, director de la Orquesta Sinfónica de la Ciudad de Asunción (Osca) y creador hace 13 años del
programa Sonidos de la Tierra, un ambicioso plan de integración sociocultural y desarrollo comunitario a través de orquestas
sinfónicas en territorio paraguayo. Con más de 15 mil integrantes, el proyecto contempla también la formación de escuelas
ambulantes de música, talleres de luthería y becas de estudio y viajes. Paraguay, Bolivia y Venezuela fueron pioneros en América
latina de esas orquestas que hoy suenan como emblemas de lo posible.
Otra orquesta infanto-juvenil reconocida dentro del espectro de agrupaciones que toman el arte como medio de transformación
social es la denominada Sicor (Sistema de Coros y Orquestas), nacida en Urubicha, un pequeño pueblo ubicado en la región más
pobre de la provincia de Guarayos, en Bolivia.
En 1996, esta agrupación deslumbró a la concurrencia que asistió al Primer Festival Internacional de Música Renacentista y
Barroca, en sintonía con la denominación de Patrimonio Cultural de la Humanidad que Unesco hizo en los pueblos que formaron
parte de las “Misiones de Chiquitos”.
Los jóvenes violinistas aborígenes de Urubicha, dirigidos por Rubén Darío Suárez Arana, son referentes internacionales en música
barroca, la misma que recuperan del olvido en las comunidades integrantes de las misiones jesuíticas. Superaron las barreras de
la exclusión y carencias llevando por el mundo las melodías de los antepasados resignificadas por sus nuevos talentos.
Sicor fue una semilla que germinó en toda la región de Santa Cruz de la Sierra, donde nacieron orquestas infantiles similares, cuyos
integrantes son becados por el Ministerio de Educación de Bolivia.
La pionera entre todas estas agrupaciones artístico-sociales este año cumple 40 años y se constituye en una experiencia inédita
adoptada en numerosos países del mundo. Es el Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles (Soijar), fundado por
el maestro y músico venezolano José Antonio Abreu, quien se propuso rescatar mediante un sistema pedagógico, ético y estético
a muchas generaciones de jóvenes en condiciones adversas de vida.
El Sistema Abreu propone adquirir conocimiento de instrumentos musicales para orquestas sociales con profundo desarrollo
humanístico, en las que se formen ciudadanos participativos, que crezcan entre valores que reaseguren la realización personal y
promuevan el desarrollo del contexto social de sus existencias.
Entre las consignas de Abreu y tantos otros maestros propulsores de orquestas, está la de exigir políticas públicas que sostengan
e impulsen estas energías colectivas transformadoras. “El arte también es una necesidad básica”, asegura.
En el año 2008 se creó una de las pioneras en Córdoba ciudad, la Orquesta de la Escuela Arzobispo Castellano, de barrio Suárez,
incluida en el proyecto nacional de orquestas sociales y el Programa Coros, Orquestas y Ensambles del Ministerio de Educación de
la Provincia.
Muchas orquestas con principios fundantes similares a las enunciadas suenan en el territorio cordobés en diferentes escuelas,
barrios y villas.
“Buenas tardes... Che, pongan más onda. ¡Buenas tardes!”, dice Marcos Sahade blandiendo su batuta de director ante una
cincuentena de niñas y niños reunidos en la Vecinal de barrio Las Palmas. Cuando ven el ceño fruncido “del dire”, los pequeños
músicos dejan los juegos de manos, toman asiento, colocan violines, violas y contrabajos en posición de arranque y quedan como
estatuas mirando al frente.
–¿Todos tienen partituras?– pregunta Sahade–. A ver... a ver... largamos con La donna è mobile... vaaaamooos... chelos y
contrabajos ¿qué nota es esta?.
–Reeee.
–¿Y cuántos silencios?
–Doooos, contestan los pequeños músicos sin duda alguna.
–Para que sea más fácil, miren mi mano, que con ella cambio el compás: uno, dos, tres... ¡Mucho barullo! Empecemos de nuevo,
primero La, La, La...
Y ahí largan todos juntos y sin chistar hasta el fin del ensayo.
Milagros Gayraud es trabajadora social y se desempeña como preceptora de la Orquesta Escuela Mediterránea. Recibe con afecto
a cada uno de los chicos que asisten los sábados al centro comunitario de Las Palmas. Se mueve casi como un ángel de la guarda
detrás de ellos, cuidando que cada uno tenga su lugar. “Sucede que no nos alcanzan todos los instrumentos y tengo que armar
grupitos de tres para que puedan pasarlo un rato cada uno”, cuenta con cierto pesar. “Vienen muy contentos todos los sábados y
ensayan tres horas, las que se suman a las dos semanales de la escuela. Entre las tareas que llevo a cabo está la de hacerle a cada
chico una hoja de vida, es decir conocer de dónde viene, sus problemas, vivencias, estar cerca, digamos... Este ensayo también es
un espacio de encuentro y proyección a futuro”.
Marta Torres y Mercedes Charras aparecen mate en mano y bizcochuelo a convidarnos, presentarse y preguntar nerviosas cuándo
sale la nota. “Nosotras somos mamás que acompañamos y nos gustaría que usted ponga que desde que nuestros hijos están en
esta orquesta notamos un cambio total y las maestras también. Dicen que casi no quedan chicos terribles... En el barrio, muchos
dejaron de ser ‘violeteros fuma porro’... Parece mentira, pero en vez de estar callejeando se quedan en la pieza tocando La flauta
mágica”.
“Los logros fueron tan rápidos... Empezamos en agosto del año pasado con el sistema Soijar, semejante al que en Venezuela
cumplió 40 años, y en diciembre ya estábamos dando un concierto en el teatro San Martín”, explica María José Patiño, responsable
de la Orquesta Escuela Mediterránea, mientras observa a cada pequeño más con los oídos que con la vista.
“Tenemos unos 150 integrantes de 8 a 13 años en dos núcleos: el norte, que agrupa a alumnos de las escuelas Eduardo Pérez
Bulnes y Manuel Esteban Pizarro, y el sur, Roberto Echegoyen, Almafuerte y Carlos Majoán. Por ahora, somos orquesta de cuerdas,
pero pensamos ir agregando vientos, maderas y bronce a nuestro repertorio clásico y popular. La predisposición de los chicos es
enorme, el vínculo con los profesores, muy estrecho, y los cambios de la comunidad escolar donde se inserta este proyecto, más
que notorios.” afirma.
Tema: Psicología Social
Teniendo en cuenta las definiciones de Psicología Social y los principales temas de estudio que aborda esta perspectiva de la
Psicología, lean el artículo referido a las orquestas sociales y completen la siguiente consigna:
El campo de conocimientos de la psicología social no es algo cerrado y “dado”, sino que al estar atravesado por variables socio-
históricas se constituye en un campo de problemáticas complejo en constante cambio, donde la preocupación central es
deconstruir y elucidar los fenómenos psicosociales y los supuestos que dan sentido a la vida en sociedad.
Relación individuo-sociedad: es el estudio de la trama psicosocial; el lugar del individuo dentro de la sociedad; la relación con otros
sujetos; la reproducción de las condiciones sociales de existencia.
Vida cotidiana: son las condiciones concretas de existencia, lo dado, lo que aceptamos como “natural”; el desarrollo de nuestra
vida en la sociedad; el lugar donde satisfacemos nuestras necesidades; el “horizonte de lo posible”.
Instituciones: conjunto de significaciones socialmente sancionadas por un colectivo. Dan orden y sentido a la sociedad (por
ejemplo, escuela, matrimonio, trabajo, etc.); son el contexto y soporte de lo cotidiano.
Socialización: Procesos de interacción que nos permiten insertarnos y formar parte de la sociedad. Se divide en socialización
primaria (familia) y secundaria (escuela, grupos, instituciones). Permite el desarrollo y configuración de la identidad.
Grupos: Lugares donde se configuran vínculos. Permiten la socialización. Satisfacen necesidades. Estructuran el espacio social.
Representaciones sociales: Guían el comportamiento. Son una modalidad de conocimiento que se emplea en la vida cotidiana.
Regulan el campo de las interacciones. Son imágenes que condensan un conjunto de significados que nos permiten interpretar lo
que nos pasa y dar sentido. Son maneras de pensar e interpretar nuestra realidad cotidiana.
“Ensayos de orquestas”
Orquestas conformadas por niñas, niños y adolescentes que pertenecen a los sectores más vulnerables de la sociedad utilizan el
arte como vehículo promotor de derechos y herramienta para poder transformar el futuro.
El joven que durante el día interpreta a Mozart por la noche no sale a romper vidrieras”, es la frase que repite como lema Luis
Szaran, el compositor, musicólogo, director de la Orquesta Sinfónica de la Ciudad de Asunción (Osca) y creador hace 13 años del
programa Sonidos de la Tierra, un ambicioso plan de integración sociocultural y desarrollo comunitario a través de orquestas
sinfónicas en territorio paraguayo. Con más de 15 mil integrantes, el proyecto contempla también la formación de escuelas
ambulantes de música, talleres de luthería y becas de estudio y viajes. Paraguay, Bolivia y Venezuela fueron pioneros en América
latina de esas orquestas que hoy suenan como emblemas de lo posible.
Otra orquesta infanto-juvenil reconocida dentro del espectro de agrupaciones que toman el arte como medio de transformación
social es la denominada Sicor (Sistema de Coros y Orquestas), nacida en Urubicha, un pequeño pueblo ubicado en la región más
pobre de la provincia de Guarayos, en Bolivia.
En 1996, esta agrupación deslumbró a la concurrencia que asistió al Primer Festival Internacional de Música Renacentista y
Barroca, en sintonía con la denominación de Patrimonio Cultural de la Humanidad que Unesco hizo en los pueblos que formaron
parte de las “Misiones de Chiquitos”.
Los jóvenes violinistas aborígenes de Urubicha, dirigidos por Rubén Darío Suárez Arana, son referentes internacionales en música
barroca, la misma que recuperan del olvido en las comunidades integrantes de las misiones jesuíticas. Superaron las barreras de
la exclusión y carencias llevando por el mundo las melodías de los antepasados resignificadas por sus nuevos talentos.
Sicor fue una semilla que germinó en toda la región de Santa Cruz de la Sierra, donde nacieron orquestas infantiles similares, cuyos
integrantes son becados por el Ministerio de Educación de Bolivia.
La pionera entre todas estas agrupaciones artístico-sociales este año cumple 40 años y se constituye en una experiencia inédita
adoptada en numerosos países del mundo. Es el Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles (Soijar), fundado por
el maestro y músico venezolano José Antonio Abreu, quien se propuso rescatar mediante un sistema pedagógico, ético y estético
a muchas generaciones de jóvenes en condiciones adversas de vida.
El Sistema Abreu propone adquirir conocimiento de instrumentos musicales para orquestas sociales con profundo desarrollo
humanístico, en las que se formen ciudadanos participativos, que crezcan entre valores que reaseguren la realización personal y
promuevan el desarrollo del contexto social de sus existencias.
Entre las consignas de Abreu y tantos otros maestros propulsores de orquestas, está la de exigir políticas públicas que sostengan
e impulsen estas energías colectivas transformadoras. “El arte también es una necesidad básica”, asegura.
En el año 2008 se creó una de las pioneras en Córdoba ciudad, la Orquesta de la Escuela Arzobispo Castellano, de barrio Suárez,
incluida en el proyecto nacional de orquestas sociales y el Programa Coros, Orquestas y Ensambles del Ministerio de Educación de
la Provincia.
Muchas orquestas con principios fundantes similares a las enunciadas suenan en el territorio cordobés en diferentes escuelas,
barrios y villas.
“Holaaaa... despacio, despacio van sacando los violines de los estuches... ¡Despacio dije, che! ¿Qué le pasó a esta cuerda tan
tensada? Posición de descanso; violines a la izquierda y pido Re Re Re ¡Ya!”, son la palabras iniciales de Guillermo Zurita, director
y violinista, pionero en gestar orquestas sociales, al comenzar el ensayo en Casa Macuca, un oasis de solidaridad en barrio El
Chingolo III.
“¡Muy bien! quiero ahora actitud musical ¿se entiende? Digo que no pueden estar apoyados sobre la pared o medio tirados por
ahí... recuerden que la música se siente adentro y no sólo se escucha sino que también se ve. ¡Vamos con el Himno a la alegría!”,
dice Zurita, y todos los pequeños músicos arrancan con mucha alegría, obviamente como si fuera su himno.
Tinti Llorens es la madre incansable de todos en Casa Macuca. Es directora del lugar que ella misma creó como asociación civil
para continuar en 2001 con su labor solidaria iniciada como docente de la Villa Kilómetro 8.
“Nada más alejada está Casa Macuca de lo que sería un merendero. Nosotros tenemos como misión transformar y empoderar
mediante la valoración personal y la autosuperación. Ayudamos a construir autoestima, de las mamás y sus hijos”, explica Tinti en
su oficina sin puertas donde siempre alguien pide algo.
“Así es acá, las demandas no cesan... Trabajamos con unos 200 chicos de 8 a 14 años en riesgo social, junto a sus mamás, a los
que brindamos provisión de alimentos y útiles escolares, ayuda psicopedagógica, rehabilitación. Pero, particularmente a través
del arte y el deporte, damos una posibilidad de vivir mejor”.
La orquesta empezó hace dos años y son 65 niñas, niños y jóvenes los integrantes que sienten verdadera pasión por tocar algún
instrumento y participar de este hecho cultural colectivo.
“Disfrutan verdaderamente al conquistar estos espacios de los que están enamorados y sienten propios. Con el violín hemos
logrado integrar a todos. Hay una niña ciega y un chico hipoacúsico que forman parte de la orquesta... soñamos hacer de la plaza
de enfrente un centro cultural a cielo abierto, siempre abierto”, suspira Tinti.
Tema: Psicología Social
Teniendo en cuenta las definiciones de Psicología Social y los principales temas de estudio que aborda esta perspectiva de la
Psicología, lean el artículo referido a las orquestas sociales y completen la siguiente consigna:
El campo de conocimientos de la psicología social no es algo cerrado y “dado”, sino que al estar atravesado por variables socio-
históricas se constituye en un campo de problemáticas complejo en constante cambio, donde la preocupación central es
deconstruir y elucidar los fenómenos psicosociales y los supuestos que dan sentido a la vida en sociedad.
Relación individuo-sociedad: es el estudio de la trama psicosocial; el lugar del individuo dentro de la sociedad; la relación con otros
sujetos; la reproducción de las condiciones sociales de existencia.
Vida cotidiana: son las condiciones concretas de existencia, lo dado, lo que aceptamos como “natural”; el desarrollo de nuestra
vida en la sociedad; el lugar donde satisfacemos nuestras necesidades; el “horizonte de lo posible”.
Instituciones: conjunto de significaciones socialmente sancionadas por un colectivo. Dan orden y sentido a la sociedad (por
ejemplo, escuela, matrimonio, trabajo, etc.); son el contexto y soporte de lo cotidiano.
Socialización: Procesos de interacción que nos permiten insertarnos y formar parte de la sociedad. Se divide en socialización
primaria (familia) y secundaria (escuela, grupos, instituciones). Permite el desarrollo y configuración de la identidad.
Grupos: Lugares donde se configuran vínculos. Permiten la socialización. Satisfacen necesidades. Estructuran el espacio social.
Representaciones sociales: Guían el comportamiento. Son una modalidad de conocimiento que se emplea en la vida cotidiana.
Regulan el campo de las interacciones. Son imágenes que condensan un conjunto de significados que nos permiten interpretar lo
que nos pasa y dar sentido. Son maneras de pensar e interpretar nuestra realidad cotidiana.
Surgió en un asentamiento de Asunción del Paraguay. Niños y jóvenes crean y utilizan instrumentos reciclados de residuos sólidos.
La música redujo la violencia y la exclusión y abrió nuevos horizontes de vida. Tiene fama mundial.
“El mundo nos tira basura, nosotros le devolvemos música”. Ese es el lema de la Orquesta de Instrumentos Reciclados de Cateura,
integrada por niños y jóvenes habitantes cercanos del vertedero de basura más grande de Asunción, de Paraguay, que hace música
con instrumentos fabricados con residuos domiciliarios.
“Ante la carencia de instrumentos y la situación de vulnerabilidad de estos niños donde su casa cuesta menos que un violín o,
dicho de otra manera, donde un violín puede costar más que su casa, era difícil emprender una iniciativa donde les pudiéramos
proveer instrumentos”, cuenta Favio Chávez, director de la orquesta. Chávez, músico e ingeniero en ecología humana, llegó a
Cateura en 2006 a trabajar como técnico ambiental. En los tiempos libres enseñaba música a los hijos de los recicladores.
Cateura es un vecindario de unas 20 mil personas, ubicado entre el basurero y el río Paraguay, de casas precarias, calles atestadas
de aguas derramadas por los camiones que trasladan los residuos y olores nauseabundos.
Allí se gestó la orquesta. Chávez cuenta que cuando la música comenzó a ser una necesidad, los residuos fueron una opción.
“Empezamos a hacer instrumentos muy simples, de distracción para esos niños. No nos imaginamos nunca que esto iba a
trascender de esta manera”, relata. El primero fue un violín hecho con un colador, un plato y tubos de metal.
Se trataba de materiales didácticos para enseñar, inspirados en los instrumentos de los humoristas argentinos Les Luthiers. No
estaban pensados para dar conciertos.
Luego surgieron los que hoy ejecutan y que imitan violines, violas, chelos, contrabajos, guitarras, flautas, saxofones, trompetas,
trombones e instrumentos de percusión, pero construidos con latas de aceite, madera de pallets, caños galvanizados, ollas,
tapones de botellas, llaves fundidas o radiografías. La orquesta arrancó con 10 niños; hoy son 400.
La cultura, una necesidad
El proyecto terminó convirtiéndose en un fenómeno cuando un grupo de cineastas publicó en internet, en 2012, el documental
“Vertedero armónico”.
La difusión de la orquesta fue tal que figuras internacionales de la música pusieron sus ojos en ella y llovieron las invitaciones para
actuar en diversos escenarios, desde Alemania hasta Azerbaiján.
Los chicos mostraron su arte con basura reciclada en más de 45 países. Tocaron con orquestas sinfónicas y filarmónicas de fama
mundial y hasta fueron teloneros de Metallica, durante una de sus giras por Sudamérica.
“Más allá de la curiosidad que genera la orquesta, hay algo más consistente que es reivindicar que la cultura es una necesidad
básica, que la educación puede cambiar la vida de los niños y los jóvenes y les puede dar herramientas para desarrollar su talento”,
plantea Chávez.
La educación hace que los residuos suenen. “Estos instrumentos en la mano de cualquiera serían basura solamente”, apunta.
Además de aprender a tomar un violín o un trombón, la música se convirtió en una alternativa de inclusión social. Muchos ya
están en la universidad y pronto serán instructores de los más pequeños. Crecieron con la orquesta.
Contaminar menos
Evelin Riberos (16) toca un saxofón hecho con caño galvanizado, mangos de cuchara, latas de maíz, de sardinas, de cervezas y
cobre fundido. Hace cuatro años que integra la orquesta. “La orquesta me da muchas cosas. Conocí lugares, personas, me pagan
mis estudios. Todo eso a mí me ayuda mucho”, dice. Y agrega: “El proyecto está superbien. En Paraguay no se reciclan las basuras;
va todo al vertedero”.
Ezequiel (19) es el arpista del grupo. El arpa que toca la construyó su papá junto a un luthier. La caja de resonancia es un tambor
de aceite; la tapa, una caja de repuestos; el brazo del instrumento es del columpio que usaba de niño; y la pata del arpa, una
escoba.
“La orquesta aporta a la cultura, a que los jóvenes no se metan en las drogas o esas cosas y a difundir la música paraguaya con el
arpa, que es un símbolo nacional. Es un proyecto impresionante”, asegura.
Gerardo (20) es parte de la orquesta hace cinco años. Llegó por invitación de un primo; primero con la guitarra y, luego, con el
chelo. El miércoles estrenó el que ejecuta ahora, hecho con un tambor de aceite y cucharones. “Gracias a la orquesta, tengo una
pieza mía y los viajes que, para mí, son experiencias impagables”, cuenta.
Y subraya: “El proyecto es raro y emocionante al mismo tiempo. ¡Quién pensaba que una orquesta con instrumentos reciclados
iba a estar recorriendo el mundo! Sigue siendo muy emocionante tocar conciertos con la orquesta”.
Noelia Ríos (18) ejecuta la imitación de un chelo. Empezó a los 12. Su chelo no parece un chelo, pero suena como uno. Está
construido a partir de una lata que contenía aceite, la terminación de las cuerdas es una cuchara de madera y el mango y las
clavijas, de pallet.
“Empecé primero con la guitarra. Mi papá me inculcó mucho la música, siempre le gustó cantar y tocar, igual que a mi abuela.
Ellos me inspiraron, ya que nosotros somos pobres”, cuenta. Y sigue, sonriente: “La orquesta me abrió puertas. Me da muchos
beneficios, me ayudan en mis estudios y a conocer a personas de otros países, culturas. Me enseña a respetar a los demás. Es
como una disciplina. Por eso me gusta. El reciclado me parece una buena idea, en especial para el planeta. Contaminamos menos
y valoramos más lo que tenemos”.
Tema: Psicología Social
Teniendo en cuenta las definiciones de Psicología Social y los principales temas de estudio que aborda esta perspectiva de la
Psicología, lean el artículo referido a las orquestas sociales y completen la siguiente consigna:
El campo de conocimientos de la psicología social no es algo cerrado y “dado”, sino que al estar atravesado por variables socio-
históricas se constituye en un campo de problemáticas complejo en constante cambio, donde la preocupación central es
deconstruir y elucidar los fenómenos psicosociales y los supuestos que dan sentido a la vida en sociedad.
Relación individuo-sociedad: es el estudio de la trama psicosocial; el lugar del individuo dentro de la sociedad; la relación con otros
sujetos; la reproducción de las condiciones sociales de existencia.
Vida cotidiana: son las condiciones concretas de existencia, lo dado, lo que aceptamos como “natural”; el desarrollo de nuestra
vida en la sociedad; el lugar donde satisfacemos nuestras necesidades; el “horizonte de lo posible”.
Instituciones: conjunto de significaciones socialmente sancionadas por un colectivo. Dan orden y sentido a la sociedad (por
ejemplo, escuela, matrimonio, trabajo, etc.); son el contexto y soporte de lo cotidiano.
Socialización: Procesos de interacción que nos permiten insertarnos y formar parte de la sociedad. Se divide en socialización
primaria (familia) y secundaria (escuela, grupos, instituciones). Permite el desarrollo y configuración de la identidad.
Grupos: Lugares donde se configuran vínculos. Permiten la socialización. Satisfacen necesidades. Estructuran el espacio social.
Representaciones sociales: Guían el comportamiento. Son una modalidad de conocimiento que se emplea en la vida cotidiana.
Regulan el campo de las interacciones. Son imágenes que condensan un conjunto de significados que nos permiten interpretar lo
que nos pasa y dar sentido. Son maneras de pensar e interpretar nuestra realidad cotidiana.
Para hablar de “movimiento orquestal infanto-juvenil” es necesario definir el amplio panorama que abarca en Argentina ya que,
según la propuesta y estructura de trabajo, las orquestas se pueden enmarcar en cuatro grandes grupos. Es importante esta
distinción porque, si bien como premisa las orquestas infanto-juveniles tienen un objetivo en común, la forma y estructura de
funcionamiento presentan grandes diferencias en cuanto a su desarrollo, sin que esto amerite un juicio de valor.
Por un lado, las Orquestas Académicas son espacios de práctica orquestal, de acceso en general por concurso, para instrumentistas
en formación o ya formados por profesores particulares o en institutos terciarios o universitarios, centrados en el desarrollo
técnico individual. Tal es el caso de la “Orquesta Académica Juvenil Teatro Libertador San Martín”, de la Universidad provincial de
Córdoba o la Orquesta Juvenil Municipal de General Roca dependiente de la Dirección de Cultura de la ciudad, que cuenta con 90
músicos menores de 18 años que reciben clases de instrumento y audio aparte de participar de la orquesta.
Una segunda categoría son las Orquestas de “Educación Musical” en las que sus integrantes realizan esta formación específica
aprendiendo a ejecutar un instrumento en agrupaciones de instituciones públicas o privadas, incluidas las comunitarias. Tal es el
caso de lo que sucede en la provincia de Misiones con el Centro de Educación Musical (CEMu), a cargo del Consejo General de
Educación de la Provincia, junto con la Fundación Grillos, con sedes en distintas ciudades. Se trata de 27 aulas satélites de
Orquestas y / o Coros con una matrícula que fluctúa alrededor de los 2000 alumnos en toda la provincia.
Miguel Brizuela, coordinador de las orquestas, señala que: “Las orquestas comienzan con una base de instrumentos (que por
supuesto nunca es suficiente) y a medida que avanzan los proyectos, a través de la vinculación con las comunidades, se van
acercando recursos para afrontar compras de otros instrumentos, generar cursos, giras, presentaciones y demás. Sin duda, las
acciones del CEMU y de la Fundación Grillos se potencian a sí mismas, generando un fluir de conocimiento, cursos, capacitaciones,
encuentros, festivales en toda la Provincia de Misiones. Todas las acciones se manifiestan claramente en el crecimiento de
vocaciones artísticas, como así también en el acompañamiento de un público que consume conciertos, productos que son
emergentes de toda la actividad pedagógica y artística de los diferentes CEMUs y de la Fundación Grillos”.
Teniendo en cuenta las definiciones de Psicología Social y los principales temas de estudio que aborda esta perspectiva de la
Psicología, lean el artículo referido a las orquestas sociales y completen la siguiente consigna:
El campo de conocimientos de la psicología social no es algo cerrado y “dado”, sino que al estar atravesado por variables socio-
históricas se constituye en un campo de problemáticas complejo en constante cambio, donde la preocupación central es
deconstruir y elucidar los fenómenos psicosociales y los supuestos que dan sentido a la vida en sociedad.
Relación individuo-sociedad: es el estudio de la trama psicosocial; el lugar del individuo dentro de la sociedad; la relación con otros
sujetos; la reproducción de las condiciones sociales de existencia.
Vida cotidiana: son las condiciones concretas de existencia, lo dado, lo que aceptamos como “natural”; el desarrollo de nuestra
vida en la sociedad; el lugar donde satisfacemos nuestras necesidades; el “horizonte de lo posible”.
Instituciones: conjunto de significaciones socialmente sancionadas por un colectivo. Dan orden y sentido a la sociedad (por
ejemplo, escuela, matrimonio, trabajo, etc.); son el contexto y soporte de lo cotidiano.
Socialización: Procesos de interacción que nos permiten insertarnos y formar parte de la sociedad. Se divide en socialización
primaria (familia) y secundaria (escuela, grupos, instituciones). Permite el desarrollo y configuración de la identidad.
Grupos: Lugares donde se configuran vínculos. Permiten la socialización. Satisfacen necesidades. Estructuran el espacio social.
Representaciones sociales: Guían el comportamiento. Son una modalidad de conocimiento que se emplea en la vida cotidiana.
Regulan el campo de las interacciones. Son imágenes que condensan un conjunto de significados que nos permiten interpretar lo
que nos pasa y dar sentido. Son maneras de pensar e interpretar nuestra realidad cotidiana.
La Orquesta Los Benjaminos surgió en la comunidad con seis integrantes. Hoy se expandió a otros barrios y
suma 115 miembros.
La Orquesta Los Benjaminos, agrupación musical que integra a niñas y niños de Villa La Tela, recibió ayer
una ayuda por parte de la Agencia Córdoba Cultura, que preside Nora Esther Bedano.
La ayuda contribuye al sostenimiento de un eficaz proyecto inclusivo, cuya esencia está ligada al trabajo en
equipo por medio de la música. “Quedamos mano a mano con ustedes en el compromiso de seguir
ayudándolos”, sintetizó la funcionaria provincial.
En enero de 2009 nació la Asociación Civil Benjaminos, un espacio cultural y recreativo para vecino
deVilla La Tela, un barrio humilde, pequeño, ubicado en el oeste de la ciudad de Córdoba.
Las primeras acciones de la asociación estuvieron destinadas al apoyo escolar para los más pequeños,
además de talleres de computación y, sobre todo, ofrecer una mano amiga que pudiera ayudar de alguna
manera a quien lo necesitara.
Sucede que la asociación Benjaminos reposa sobre una misión, que sus miembros expresan de la siguiente
manera: “contener, escuchar, acompañar, ayudar y enseñar a todos los niños que se encuentren en alguna
situación de vulnerabilidad”.
A raíz del contacto con las necesidades concretas y los intereses latentes de los niños del barrio Villa La
Tela, la Asociación Benjaminos detectó el potencial que la música tiene como medio de inclusión y
contención social. Y se propuso el desafío de crear una orquesta de cuerdas. Así nació La Orquesta de Villa la
Tela.
Walter Pollo Díaz es el presidente de la Asociación Benjaminos y el coordinador general de la orquesta. “Esta
orquesta, compuesta por pequeños artistas residentes del lugar, nació con el objetivo de construir
ciudadanía desde la música, con el propósito de aprender valores, códigos, ética, hábitos de estudio y por
sobre todo «abrir» las mentes de los niños para que tengan una oportunidad en la vida”.
Díaz cuenta que la orquesta nació en las bases de la comunidad de Villa La Tela, a raíz de una pregunta que
los mayores hicieron a los más chicos del barrio: ¿Qué les gustaría hacer en sus ratos libres? Las repuestas
fueron variadas. Internet, batucadas, deportes y un pequeño porcentaje de niños, que había asistido a una
función didáctica en el Teatro del Libertador San Martín, dijo violines.
Esa última respuesta llamó la atención de Díaz y sus pares, quienes finalmente abrazaron la idea de crear
para la comunidad una orquesta que incluyera a niñas y niños con ciertas condiciones de vulnerabilidad.
En el año 2009, el sueño aterrizó y así nació la orquesta, originalmente integrada por seis miembros. El
proyecto se expandió a otros barrios de la ciudad de Córdoba: Bajo Pueyrredón, Villa Angelelli, Villa El
Libertador y, próximamente, en barrio Las Violetas. Actualmente hay 115 niños y jóvenes incluidos en el
proyecto Los Bejaminos.
A los seis meses, el grupo comenzó a mostrarse en público. En 2016, la agrupación se adoptó la forma de
una orquesta con la incorporación de más instrumentos.
El trayecto en la orquesta abre a sus integrantes la posibilidad de continuar su formación en las instituciones
dedicadas a la enseñanza musical. Actualmente, ocho miembros de esta cantera estudian en
el Conservatorio Provincial de Música Félix Tomás Garzón.
Pertenecer a la orquesta demanda de los chicos no solamente un buen rendimiento en el aspecto musical,
ya que además deben dar muestras de respeto al resto de los compañeros y completar la escuela secundaria.
“Nosotros creemos que el Estado tiene que apoyar este tipo de actividades porque estimula los lazos
familiares, educa en valores y alimenta el surgimiento de nuevos talentos. Detrás de este trabajo hay mucho
esfuerzo”, señala Walter “Pollo” Díaz.
Agustina es una de las integrantes de la orquesta, tiene 15 años de edad y vive en Villa La Tela. “Si no fuera
por la música no sé qué sería de mí ahora, me gustaría anotarme en el conservatorio y convertirme en
profesora de música”, anhela la joven que encontró en el violín un sentido a su vida.
La orquesta Los Benjaminos está rodeada de un grupo de maestros preparadores y personas que asisten al
conjunto. Boris Brow, quien trabaja en la familia de las cuerdas, comenta: “Las ganas y la voluntad de los
chicos contagian al director musical”.
Yamila toca el contrabajo y estudia Trabajo Social en la Universidad Nacional de Córdoba. Su experiencia con
la orquesta resultó liberadora: “Jamás me hubiera imaginado tocar este instrumento, es un instrumento
potente y me encanta. La experiencia en la orquesta me permite liberarme de los problemas de la vida
cotidiana”, cuenta.
Otra integrante, también de la familia de las cuerdas, es Ludmila de 13 años de edad. “En la orquesta podés
hacer muy buenos amigos”, valora la niña que toca el chelo. Su amiga y compañera de fila, Ingrid, entró a la
orquesta a edad de 10 años, hoy tiene 13. Empezó tocando el violín pero cambió por el chelo. “El instrumento
me encanta y me gustaría seguir tocando este instrumento”, dice.
Tema: Psicología Social
Teniendo en cuenta las definiciones de Psicología Social y los principales temas de estudio que aborda esta perspectiva de la
Psicología, lean el artículo referido a las orquestas sociales y completen la siguiente consigna:
El campo de conocimientos de la psicología social no es algo cerrado y “dado”, sino que al estar atravesado por variables socio-
históricas se constituye en un campo de problemáticas complejo en constante cambio, donde la preocupación central es
deconstruir y elucidar los fenómenos psicosociales y los supuestos que dan sentido a la vida en sociedad.
Relación individuo-sociedad: es el estudio de la trama psicosocial; el lugar del individuo dentro de la sociedad; la relación con otros
sujetos; la reproducción de las condiciones sociales de existencia.
Vida cotidiana: son las condiciones concretas de existencia, lo dado, lo que aceptamos como “natural”; el desarrollo de nuestra
vida en la sociedad; el lugar donde satisfacemos nuestras necesidades; el “horizonte de lo posible”.
Instituciones: conjunto de significaciones socialmente sancionadas por un colectivo. Dan orden y sentido a la sociedad (por
ejemplo, escuela, matrimonio, trabajo, etc.); son el contexto y soporte de lo cotidiano.
Socialización: Procesos de interacción que nos permiten insertarnos y formar parte de la sociedad. Se divide en socialización
primaria (familia) y secundaria (escuela, grupos, instituciones). Permite el desarrollo y configuración de la identidad.
Grupos: Lugares donde se configuran vínculos. Permiten la socialización. Satisfacen necesidades. Estructuran el espacio social.
Representaciones sociales: Guían el comportamiento. Son una modalidad de conocimiento que se emplea en la vida cotidiana.
Regulan el campo de las interacciones. Son imágenes que condensan un conjunto de significados que nos permiten interpretar lo
que nos pasa y dar sentido. Son maneras de pensar e interpretar nuestra realidad cotidiana.
“Ensayos de orquestas”
Orquestas conformadas por niñas, niños y adolescentes que pertenecen a los sectores más vulnerables de la sociedad utilizan el
arte como vehículo promotor de derechos y herramienta para poder transformar el futuro.
El joven que durante el día interpreta a Mozart por la noche no sale a romper vidrieras”, es la frase que repite como lema Luis
Szaran, el compositor, musicólogo, director de la Orquesta Sinfónica de la Ciudad de Asunción (Osca) y creador hace 13 años del
programa Sonidos de la Tierra, un ambicioso plan de integración sociocultural y desarrollo comunitario a través de orquestas
sinfónicas en territorio paraguayo. Con más de 15 mil integrantes, el proyecto contempla también la formación de escuelas
ambulantes de música, talleres de luthería y becas de estudio y viajes. Paraguay, Bolivia y Venezuela fueron pioneros en América
latina de esas orquestas que hoy suenan como emblemas de lo posible.
Otra orquesta infanto-juvenil reconocida dentro del espectro de agrupaciones que toman el arte como medio de transformación
social es la denominada Sicor (Sistema de Coros y Orquestas), nacida en Urubicha, un pequeño pueblo ubicado en la región más
pobre de la provincia de Guarayos, en Bolivia.
En 1996, esta agrupación deslumbró a la concurrencia que asistió al Primer Festival Internacional de Música Renacentista y
Barroca, en sintonía con la denominación de Patrimonio Cultural de la Humanidad que Unesco hizo en los pueblos que formaron
parte de las “Misiones de Chiquitos”.
Los jóvenes violinistas aborígenes de Urubicha, dirigidos por Rubén Darío Suárez Arana, son referentes internacionales en música
barroca, la misma que recuperan del olvido en las comunidades integrantes de las misiones jesuíticas. Superaron las barreras de
la exclusión y carencias llevando por el mundo las melodías de los antepasados resignificadas por sus nuevos talentos.
Sicor fue una semilla que germinó en toda la región de Santa Cruz de la Sierra, donde nacieron orquestas infantiles similares, cuyos
integrantes son becados por el Ministerio de Educación de Bolivia.
La pionera entre todas estas agrupaciones artístico-sociales este año cumple 40 años y se constituye en una experiencia inédita
adoptada en numerosos países del mundo. Es el Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles (Soijar), fundado por
el maestro y músico venezolano José Antonio Abreu, quien se propuso rescatar mediante un sistema pedagógico, ético y estético
a muchas generaciones de jóvenes en condiciones adversas de vida.
El Sistema Abreu propone adquirir conocimiento de instrumentos musicales para orquestas sociales con profundo desarrollo
humanístico, en las que se formen ciudadanos participativos, que crezcan entre valores que reaseguren la realización personal y
promuevan el desarrollo del contexto social de sus existencias.
Entre las consignas de Abreu y tantos otros maestros propulsores de orquestas, está la de exigir políticas públicas que sostengan
e impulsen estas energías colectivas transformadoras. “El arte también es una necesidad básica”, asegura.
En el año 2008 se creó una de las pioneras en Córdoba ciudad, la Orquesta de la Escuela Arzobispo Castellano, de barrio Suárez,
incluida en el proyecto nacional de orquestas sociales y el Programa Coros, Orquestas y Ensambles del Ministerio de Educación de
la Provincia.
Muchas orquestas con principios fundantes similares a las enunciadas suenan en el territorio cordobés en diferentes escuelas,
barrios y villas.
- ¿Quiere que le diga la verdad? Bueno, yo estaba medio al pedo y me invitaron a incorporarme a la orquesta. ¡Ni idea del tango!
Me dieron un chelo y no sabía agarrarlo, pero cuando aprendí me gustó mucho. Ahora soy chelo principal”, cuenta Franco, muy
sinceramente, mientras desenfundan los instrumentos para empezar un improvisado ensayo, en las escalinatas de la escuela Ipem
351 del barrio El Chingolo II. Sucedió que estaba recién desinfectada y no quisieron posponer nuestra cita.
“Acá nadie tenía noción de este ritmo”, acota Ángeles. “Pero nos reenganchamos todos y lo mejor es que el tango nos mete en
otros ámbitos, y le digo que cuando escucho un tango por ahí yo me imagino tocándolo. ¿Mi preferido? Gallo ciego, de Agustín
Bardi”.
“¡Aquí, miren todos! Escuchen... es un ensayo especial. Micaela y Natanael vinieron de Casa Macuca a acompañarnos con
bandoneón y acordeón... ¿Largamos?”, interpela a todos el profe Guillermo Zurita, también dirigiendo esta orquesta que forma
parte del programa de coros del Ministerio de Educación de la Provincia de Córdoba.
“¡Paaa pa paaaan! La viola aparece después... mejor sin soltar la nota y un poco con bronca... ¡Vamos ya!”. Y suena La viruta como
nunca, en ese entramado sutil de sonidos y silencios.
El profe Zurita explica en palabras simples el fenómeno que es esta orquesta. “Aquí ponemos negro sobre blanco que los jóvenes
necesitan pautas claras de los modelos a seguir. Son demandantes de afecto y valores, y siempre nos están pidiendo límites, por
eso integrar una orquesta sirve, entre otras cosas, para tener orden, disciplina y amor a uno mismo y al otro, ¿se entiende? La
música hecha entre todos crea un marco de referencia y refugio a muchos adolescentes que están muy desamparados, víctimas
de la endemia de la desigualdad... Entonces, una orquesta forma parte de una estrategia para gozar de un bien cultural en
hermosas ceremonias donde se celebra el arte”.
Tema: Psicología Social
Teniendo en cuenta las definiciones de Psicología Social y los principales temas de estudio que aborda esta perspectiva de la
Psicología, lean el artículo referido a las orquestas sociales y completen la siguiente consigna:
El campo de conocimientos de la psicología social no es algo cerrado y “dado”, sino que al estar atravesado por variables socio-
históricas se constituye en un campo de problemáticas complejo en constante cambio, donde la preocupación central es
deconstruir y elucidar los fenómenos psicosociales y los supuestos que dan sentido a la vida en sociedad.
Relación individuo-sociedad: es el estudio de la trama psicosocial; el lugar del individuo dentro de la sociedad; la relación con otros
sujetos; la reproducción de las condiciones sociales de existencia.
Vida cotidiana: son las condiciones concretas de existencia, lo dado, lo que aceptamos como “natural”; el desarrollo de nuestra
vida en la sociedad; el lugar donde satisfacemos nuestras necesidades; el “horizonte de lo posible”.
Instituciones: conjunto de significaciones socialmente sancionadas por un colectivo. Dan orden y sentido a la sociedad (por
ejemplo, escuela, matrimonio, trabajo, etc.); son el contexto y soporte de lo cotidiano.
Socialización: Procesos de interacción que nos permiten insertarnos y formar parte de la sociedad. Se divide en socialización
primaria (familia) y secundaria (escuela, grupos, instituciones). Permite el desarrollo y configuración de la identidad.
Grupos: Lugares donde se configuran vínculos. Permiten la socialización. Satisfacen necesidades. Estructuran el espacio social.
Representaciones sociales: Guían el comportamiento. Son una modalidad de conocimiento que se emplea en la vida cotidiana.
Regulan el campo de las interacciones. Son imágenes que condensan un conjunto de significados que nos permiten interpretar lo
que nos pasa y dar sentido. Son maneras de pensar e interpretar nuestra realidad cotidiana.
“Ensayos de orquestas”
Orquestas conformadas por niñas, niños y adolescentes que pertenecen a los sectores más vulnerables de la sociedad utilizan el
arte como vehículo promotor de derechos y herramienta para poder transformar el futuro.
El joven que durante el día interpreta a Mozart por la noche no sale a romper vidrieras”, es la frase que repite como lema Luis
Szaran, el compositor, musicólogo, director de la Orquesta Sinfónica de la Ciudad de Asunción (Osca) y creador hace 13 años del
programa Sonidos de la Tierra, un ambicioso plan de integración sociocultural y desarrollo comunitario a través de orquestas
sinfónicas en territorio paraguayo. Con más de 15 mil integrantes, el proyecto contempla también la formación de escuelas
ambulantes de música, talleres de luthería y becas de estudio y viajes. Paraguay, Bolivia y Venezuela fueron pioneros en América
latina de esas orquestas que hoy suenan como emblemas de lo posible.
Otra orquesta infanto-juvenil reconocida dentro del espectro de agrupaciones que toman el arte como medio de transformación
social es la denominada Sicor (Sistema de Coros y Orquestas), nacida en Urubicha, un pequeño pueblo ubicado en la región más
pobre de la provincia de Guarayos, en Bolivia.
En 1996, esta agrupación deslumbró a la concurrencia que asistió al Primer Festival Internacional de Música Renacentista y
Barroca, en sintonía con la denominación de Patrimonio Cultural de la Humanidad que Unesco hizo en los pueblos que formaron
parte de las “Misiones de Chiquitos”.
Los jóvenes violinistas aborígenes de Urubicha, dirigidos por Rubén Darío Suárez Arana, son referentes internacionales en música
barroca, la misma que recuperan del olvido en las comunidades integrantes de las misiones jesuíticas. Superaron las barreras de
la exclusión y carencias llevando por el mundo las melodías de los antepasados resignificadas por sus nuevos talentos.
Sicor fue una semilla que germinó en toda la región de Santa Cruz de la Sierra, donde nacieron orquestas infantiles similares, cuyos
integrantes son becados por el Ministerio de Educación de Bolivia.
La pionera entre todas estas agrupaciones artístico-sociales este año cumple 40 años y se constituye en una experiencia inédita
adoptada en numerosos países del mundo. Es el Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles (Soijar), fundado por
el maestro y músico venezolano José Antonio Abreu, quien se propuso rescatar mediante un sistema pedagógico, ético y estético
a muchas generaciones de jóvenes en condiciones adversas de vida.
El Sistema Abreu propone adquirir conocimiento de instrumentos musicales para orquestas sociales con profundo desarrollo
humanístico, en las que se formen ciudadanos participativos, que crezcan entre valores que reaseguren la realización personal y
promuevan el desarrollo del contexto social de sus existencias.
Entre las consignas de Abreu y tantos otros maestros propulsores de orquestas, está la de exigir políticas públicas que sostengan
e impulsen estas energías colectivas transformadoras. “El arte también es una necesidad básica”, asegura.
En el año 2008 se creó una de las pioneras en Córdoba ciudad, la Orquesta de la Escuela Arzobispo Castellano, de barrio Suárez,
incluida en el proyecto nacional de orquestas sociales y el Programa Coros, Orquestas y Ensambles del Ministerio de Educación de
la Provincia.
Muchas orquestas con principios fundantes similares a las enunciadas suenan en el territorio cordobés en diferentes escuelas,
barrios y villas.
“Buenas tardes... Che, pongan más onda. ¡Buenas tardes!”, dice Marcos Sahade blandiendo su batuta de director ante una
cincuentena de niñas y niños reunidos en la Vecinal de barrio Las Palmas. Cuando ven el ceño fruncido “del dire”, los pequeños
músicos dejan los juegos de manos, toman asiento, colocan violines, violas y contrabajos en posición de arranque y quedan como
estatuas mirando al frente.
–¿Todos tienen partituras?– pregunta Sahade–. A ver... a ver... largamos con La donna è mobile... vaaaamooos... chelos y
contrabajos ¿qué nota es esta?.
–Reeee.
–¿Y cuántos silencios?
–Doooos, contestan los pequeños músicos sin duda alguna.
–Para que sea más fácil, miren mi mano, que con ella cambio el compás: uno, dos, tres... ¡Mucho barullo! Empecemos de nuevo,
primero La, La, La...
Y ahí largan todos juntos y sin chistar hasta el fin del ensayo.
Milagros Gayraud es trabajadora social y se desempeña como preceptora de la Orquesta Escuela Mediterránea. Recibe con afecto
a cada uno de los chicos que asisten los sábados al centro comunitario de Las Palmas. Se mueve casi como un ángel de la guarda
detrás de ellos, cuidando que cada uno tenga su lugar. “Sucede que no nos alcanzan todos los instrumentos y tengo que armar
grupitos de tres para que puedan pasarlo un rato cada uno”, cuenta con cierto pesar. “Vienen muy contentos todos los sábados y
ensayan tres horas, las que se suman a las dos semanales de la escuela. Entre las tareas que llevo a cabo está la de hacerle a cada
chico una hoja de vida, es decir conocer de dónde viene, sus problemas, vivencias, estar cerca, digamos... Este ensayo también es
un espacio de encuentro y proyección a futuro”.
Marta Torres y Mercedes Charras aparecen mate en mano y bizcochuelo a convidarnos, presentarse y preguntar nerviosas cuándo
sale la nota. “Nosotras somos mamás que acompañamos y nos gustaría que usted ponga que desde que nuestros hijos están en
esta orquesta notamos un cambio total y las maestras también. Dicen que casi no quedan chicos terribles... En el barrio, muchos
dejaron de ser ‘violeteros fuma porro’... Parece mentira, pero en vez de estar callejeando se quedan en la pieza tocando La flauta
mágica”.
“Los logros fueron tan rápidos... Empezamos en agosto del año pasado con el sistema Soijar, semejante al que en Venezuela
cumplió 40 años, y en diciembre ya estábamos dando un concierto en el teatro San Martín”, explica María José Patiño, responsable
de la Orquesta Escuela Mediterránea, mientras observa a cada pequeño más con los oídos que con la vista.
“Tenemos unos 150 integrantes de 8 a 13 años en dos núcleos: el norte, que agrupa a alumnos de las escuelas Eduardo Pérez
Bulnes y Manuel Esteban Pizarro, y el sur, Roberto Echegoyen, Almafuerte y Carlos Majoán. Por ahora, somos orquesta de cuerdas,
pero pensamos ir agregando vientos, maderas y bronce a nuestro repertorio clásico y popular. La predisposición de los chicos es
enorme, el vínculo con los profesores, muy estrecho, y los cambios de la comunidad escolar donde se inserta este proyecto, más
que notorios.” afirma.
Tema: Psicología Social
Teniendo en cuenta las definiciones de Psicología Social y los principales temas de estudio que aborda esta perspectiva de la
Psicología, lean el artículo referido a las orquestas sociales y completen la siguiente consigna:
El campo de conocimientos de la psicología social no es algo cerrado y “dado”, sino que al estar atravesado por variables socio-
históricas se constituye en un campo de problemáticas complejo en constante cambio, donde la preocupación central es
deconstruir y elucidar los fenómenos psicosociales y los supuestos que dan sentido a la vida en sociedad.
Relación individuo-sociedad: es el estudio de la trama psicosocial; el lugar del individuo dentro de la sociedad; la relación con otros
sujetos; la reproducción de las condiciones sociales de existencia.
Vida cotidiana: son las condiciones concretas de existencia, lo dado, lo que aceptamos como “natural”; el desarrollo de nuestra
vida en la sociedad; el lugar donde satisfacemos nuestras necesidades; el “horizonte de lo posible”.
Instituciones: conjunto de significaciones socialmente sancionadas por un colectivo. Dan orden y sentido a la sociedad (por
ejemplo, escuela, matrimonio, trabajo, etc.); son el contexto y soporte de lo cotidiano.
Socialización: Procesos de interacción que nos permiten insertarnos y formar parte de la sociedad. Se divide en socialización
primaria (familia) y secundaria (escuela, grupos, instituciones). Permite el desarrollo y configuración de la identidad.
Grupos: Lugares donde se configuran vínculos. Permiten la socialización. Satisfacen necesidades. Estructuran el espacio social.
Representaciones sociales: Guían el comportamiento. Son una modalidad de conocimiento que se emplea en la vida cotidiana.
Regulan el campo de las interacciones. Son imágenes que condensan un conjunto de significados que nos permiten interpretar lo
que nos pasa y dar sentido. Son maneras de pensar e interpretar nuestra realidad cotidiana.
“Ensayos de orquestas”
Orquestas conformadas por niñas, niños y adolescentes que pertenecen a los sectores más vulnerables de la sociedad utilizan el
arte como vehículo promotor de derechos y herramienta para poder transformar el futuro.
El joven que durante el día interpreta a Mozart por la noche no sale a romper vidrieras”, es la frase que repite como lema Luis
Szaran, el compositor, musicólogo, director de la Orquesta Sinfónica de la Ciudad de Asunción (Osca) y creador hace 13 años del
programa Sonidos de la Tierra, un ambicioso plan de integración sociocultural y desarrollo comunitario a través de orquestas
sinfónicas en territorio paraguayo. Con más de 15 mil integrantes, el proyecto contempla también la formación de escuelas
ambulantes de música, talleres de luthería y becas de estudio y viajes. Paraguay, Bolivia y Venezuela fueron pioneros en América
latina de esas orquestas que hoy suenan como emblemas de lo posible.
Otra orquesta infanto-juvenil reconocida dentro del espectro de agrupaciones que toman el arte como medio de transformación
social es la denominada Sicor (Sistema de Coros y Orquestas), nacida en Urubicha, un pequeño pueblo ubicado en la región más
pobre de la provincia de Guarayos, en Bolivia.
En 1996, esta agrupación deslumbró a la concurrencia que asistió al Primer Festival Internacional de Música Renacentista y
Barroca, en sintonía con la denominación de Patrimonio Cultural de la Humanidad que Unesco hizo en los pueblos que formaron
parte de las “Misiones de Chiquitos”.
Los jóvenes violinistas aborígenes de Urubicha, dirigidos por Rubén Darío Suárez Arana, son referentes internacionales en música
barroca, la misma que recuperan del olvido en las comunidades integrantes de las misiones jesuíticas. Superaron las barreras de
la exclusión y carencias llevando por el mundo las melodías de los antepasados resignificadas por sus nuevos talentos.
Sicor fue una semilla que germinó en toda la región de Santa Cruz de la Sierra, donde nacieron orquestas infantiles similares, cuyos
integrantes son becados por el Ministerio de Educación de Bolivia.
La pionera entre todas estas agrupaciones artístico-sociales este año cumple 40 años y se constituye en una experiencia inédita
adoptada en numerosos países del mundo. Es el Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles (Soijar), fundado por
el maestro y músico venezolano José Antonio Abreu, quien se propuso rescatar mediante un sistema pedagógico, ético y estético
a muchas generaciones de jóvenes en condiciones adversas de vida.
El Sistema Abreu propone adquirir conocimiento de instrumentos musicales para orquestas sociales con profundo desarrollo
humanístico, en las que se formen ciudadanos participativos, que crezcan entre valores que reaseguren la realización personal y
promuevan el desarrollo del contexto social de sus existencias.
Entre las consignas de Abreu y tantos otros maestros propulsores de orquestas, está la de exigir políticas públicas que sostengan
e impulsen estas energías colectivas transformadoras. “El arte también es una necesidad básica”, asegura.
En el año 2008 se creó una de las pioneras en Córdoba ciudad, la Orquesta de la Escuela Arzobispo Castellano, de barrio Suárez,
incluida en el proyecto nacional de orquestas sociales y el Programa Coros, Orquestas y Ensambles del Ministerio de Educación de
la Provincia.
Muchas orquestas con principios fundantes similares a las enunciadas suenan en el territorio cordobés en diferentes escuelas,
barrios y villas.
“Holaaaa... despacio, despacio van sacando los violines de los estuches... ¡Despacio dije, che! ¿Qué le pasó a esta cuerda tan
tensada? Posición de descanso; violines a la izquierda y pido Re Re Re ¡Ya!”, son la palabras iniciales de Guillermo Zurita, director
y violinista, pionero en gestar orquestas sociales, al comenzar el ensayo en Casa Macuca, un oasis de solidaridad en barrio El
Chingolo III.
“¡Muy bien! quiero ahora actitud musical ¿se entiende? Digo que no pueden estar apoyados sobre la pared o medio tirados por
ahí... recuerden que la música se siente adentro y no sólo se escucha sino que también se ve. ¡Vamos con el Himno a la alegría!”,
dice Zurita, y todos los pequeños músicos arrancan con mucha alegría, obviamente como si fuera su himno.
Tinti Llorens es la madre incansable de todos en Casa Macuca. Es directora del lugar que ella misma creó como asociación civil
para continuar en 2001 con su labor solidaria iniciada como docente de la Villa Kilómetro 8.
“Nada más alejada está Casa Macuca de lo que sería un merendero. Nosotros tenemos como misión transformar y empoderar
mediante la valoración personal y la autosuperación. Ayudamos a construir autoestima, de las mamás y sus hijos”, explica Tinti en
su oficina sin puertas donde siempre alguien pide algo.
“Así es acá, las demandas no cesan... Trabajamos con unos 200 chicos de 8 a 14 años en riesgo social, junto a sus mamás, a los
que brindamos provisión de alimentos y útiles escolares, ayuda psicopedagógica, rehabilitación. Pero, particularmente a través
del arte y el deporte, damos una posibilidad de vivir mejor”.
La orquesta empezó hace dos años y son 65 niñas, niños y jóvenes los integrantes que sienten verdadera pasión por tocar algún
instrumento y participar de este hecho cultural colectivo.
“Disfrutan verdaderamente al conquistar estos espacios de los que están enamorados y sienten propios. Con el violín hemos
logrado integrar a todos. Hay una niña ciega y un chico hipoacúsico que forman parte de la orquesta... soñamos hacer de la plaza
de enfrente un centro cultural a cielo abierto, siempre abierto”, suspira Tinti.