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Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires.

Facultad de Ciencias Veterinarias. Departamento de Producción Animal.


Zootecnia
Méd. Vet. Horacio R. Zeballos

Mangas, corrales e instalaciones


complementarias para vacunos.

Mangas.
Cuando se habla de manga se está haciendo
referencia al conjunto de mejoras que incluye:
manga lisa, casilla y el embudo o solamente manga
lisa y su respectivo embudo.
Toda manga tiene un conjunto de corrales para
encierre, apartes y movimientos para el servicio de la
misma que a veces se incluye el todo en el término
de “corrales y manga”.
Diremos como primera medida que se debe
determinar la correcta ubicación de esta mejora
dentro del establecimiento. Lo correcto es poner la
instalación de manga y corrales en el centro del
campo buscando que esté equidistante de todos los
potreros para que los movimientos de haciendas
sean más fáciles.
Ello es posible en un campo parejo donde sierras,
arroyos o caminos no molesten la distribución y el
nivel del terreno también lo permita, dado que debe
ubicarse en un lugar alto con buen desagüe para
evitar encharcamientos.
Por la misma razón deben mirarse las condiciones
de piso, hecho que nos puede obligar a hacer la
instalación en un extremo del campo.
Hay productores que prefieren tener la instalación de corrales y manga cerca del casco, para tener
mayor comodidad para el personal, mejor auxilio en caso de accidentes con el personal o los animales y
también mayor comodidad cuando se producen olvidos de implementos, remedios, etc.
Vale recordar que la mejor forma de trabajar una hacienda en los corrales es encerrarla la tarde anterior
a última hora y comenzar las tareas en la mañana temprano con rodeos descansados, que caminan
bien, con ansias de salir y volver al potrero. Todas las tareas en el rodeo deben hacerse con ritmo, pero
sin apuro, sin fatigar inútilmente el ganado y el personal. Aquí es cuando ocurren accidentes, errores en
el cálculo de dosis de medicamentos, haciendas que saltan, que hay que volver atrás, etc., se gana más
tiempo trabajando a un ritmo pausado y juicioso.
Orientación de la manga: la salida de la manga debe mirar al ESTE, con el estribo o andén de trabajo
al NORTE, la hacienda marcha mejor sin tener el sol de frente hacia la luz. Se mantiene seco el estribo
con sus escaleras facilitando el movimiento de la gente y evitando peligrosos resbalones. En zonas
ventosas el concepto debe variar, procurando ubicar la manga en forma que los operarios trabajen
limpios y no encerrados en una nube de tierra.
Una manga y sus movimientos deben ser ágiles, livianos, que una persona normal pueda accionarlos,
pero lo suficiente fuerte para el tipo de ganado que se trabaja. Cuidar que la parte donde se trabaja no
tenga travesaños, partes salientes, falta de tablas, etc. Recordar que el operario no es un equilibrista,
necesita protección y facilidad para sus movimientos.
Partes de una manga para vacunos.
Consideramos diferentes partes esenciales: embudo, la manga lisa o parte de manga propiamente
dicha, casilla de operar, tambor de aparte.
Manga lisa: como se aprecia en las distintas figuras, esta parte debe ser con sección de cono truncado
con aproximadamente 0,81 m. de ancho en la parte superior y aproximadamente 0,45 m. a nivel del
suelo, construida en madera dura con catres racionalmente distribuidos que no sobrepasan la altura de
la parte entablonada para no molestar el accionar del operador.
Las tablas laterales que deben ser de madera dura con espesor de 1” y ancho variable van abulonadas
a éstos catres dejando un espacio de luz de 0,05 m. entre ellas, detalle a tener en cuenta dado que en
las mangas “oscuras” las animales mezquinan entrar. La altura de entablonado es aproximadamente
1,60 m. Es conveniente que la tabla de arriba sea volcable.
El piso puede ser de adoquines, de cemento, etc. Lo más práctico es colocar piso de madera dura (1
½”) y con sus travesaños antideslizantes para que no resbalen los animales. Entre la última tabla lateral
y el piso debe haber también un espacio para que se mantenga limpio, no mayor de 0,07 m. para que
los animales no metan las pezuñas.

La manga lisa debe ser provista por lo menos de dos trancas a rodillo, una a la entrada y otra a la salida
o sobre la entrada a la casilla. Estas dos trancas deben ser colocadas para que puedan ser accionadas
desde tierra o desde el estribo. Para mangas lisas largas es conveniente instalar una o dos trancas
intermedias.
El estribo o anden ubicado sobre el lado que se trabaja, debe tener un ancho mínimo de 0,60 m. con
una altura de 0,80 a 0,90 m., provisto de una o dos escaleras para subir, aunque es más práctico un
ante anden todo a lo largo de la manga lisa que facilita movimientos de los operadores.
Teniendo en cuenta lo habitual que es la práctica del tacto rectal y otras revisaciones, es necesario que
toda manga lisa lleve la llamada puerta para tacto que se ubica sobre el lado opuesto al andén
inmediata a la casilla. Esta puerta es de forma tronco cónica que al abrirse y con su respectivo pasador
opera como tranca dejando espacio al profesional que se sitúa cómodamente detrás del animal que
debe estar sujeto al cepo de la casilla. Lo mismo puede ubicarse una puerta que abra hacia fuera para
salida de comunicación a una balanza.
El largo de la manga lisa depende de la magnitud de la explotación, pero dada la importancia y valor de
la mejora, las medidas más convenientes es de 10 metros, siendo 7 a 8 metros lo habitual y no menos
de 5,20 metros.
En los trabajos de vacunaciones, tratamientos antiparasitarios, etc., se gana tiempo utilizando el
contenido total de las jeringas en cada ”embretada” y entre cada embretada se aprovecha llenar o
completar las mismas. También se ordena mejor el tiempo con la tarea del personal, al dividir el trabajo
entre los operarios.
No tiene sentido para tareas corrientes gastar en casilla, embudo, corrales, etc., y disponer luego de
una manga lisa con capacidad para uno o dos animales; excepto las mangas instaladas en tambos para
inseminación artificial.
Las mangas lisas cuyos catres llevan travesaños en la parte superior son muy peligrosos,
especialmente en los trabajos con yeguarizos; en tales casos son corrientes las pérdidas por animales
desnucados y aún accidentes con operarios cuando los animales vuelven, desplazándose para adelante
y para atrás.
Casilla de operar: se coloca al finalizar la parte denominada manga lisa y tiene por fin permitir
trabajar individualmente cada animal.
La parte de sujeción se hace con el cepo o yugo, que inmoviliza la cabeza y cuello del animal apretando
el tren trasero del mismo con lo que se denomina “apretador de vacío”. El cepo y el apretador son
regulables con clavijeros y quedan fijos mientras se trabaja.
Embudo: pasaje de forma especial como su nombre lo indica, al facilitar la entrada a la manga lisa de
los animales; trabajo que en el ámbito bonaerense se denomina “embretar”. Al estar bien diseñado
facilita el acceso a la manga lisa, dando dinamismo a esta fase que puede ser atendida por 1 o 2
personas, evitando de esta manera “tiempos muertos”.
El tipo más corriente de embudo lleva los costados con 5 tablas de madera dura de 2” x 6” abulonadas
sobre postes de madera dura de 3 m. de altura, tranquera de cierre reforzada preferentemente con
pasadores, colocados para que hagan tope. El largo del embudo también es variable acorde a la
importancia de la explotación.
El lado N, que sigue a continuación del estribo, presenta dos segmentos, formando un ángulo cerrado
para conformar, casualmente, el embudo. El lado opuesto del embudo es recto.
En cuanto al número de corrales que deben servir a una instalación de manga, varía en cantidad y
tamaño acorde a la magnitud de la explotación. Se necesita siempre un corral de encierre que abastece
de animales al embudo, y por lo menos dos corrales de aparte a la salida de la manga; en realidad con
cinco corrales se puede trabajar cómodamente.
Además de los corrales, en toda instalación de manga pueden ayudar a los movimientos, las llamadas
“ensenadas”, que son potreros chicos con aguadas; juegos de calles circundantes a la manga que
evitan disparadas de animales y sirven para encierre previo del rodeo, etc.
Conviene recordar que facilita mucho la tarea el encerrar las haciendas con anticipación, por ejemplo,
última hora del día anterior. Nunca trabajar con animales cansados y en horas pico calor. Para los
trabajos en corrales y mangas separar previamente los toros de los rodeos, limitando su encierre al
tiempo mínimo de trabajo, ya que siempre son proclives a pelear entre sí, causando roturas y las
propias lastimaduras de los toros.
También, debe separarse las vacas de
los terneros, quedando éstos en un corral
delante de la manga, siendo la vaca la
que primero pase por la manga. Al estar
separada de su cría, y escuchar el balido
de los mismos se mostrará ansiosa por
reunirse a su hijo.
Esta actitud de la vaca, permitirá un
rápido encierre en el embudo y su ingreso
en la manga lisa.

Corrales.
Definición: Los corrales son espacios de terreno de superficie reducida y con límites bien definidos,
construidos de diferentes formas y materiales, pero en general de acuerdo a las normas usuales para la
construcción de alambrados, con la sola diferencia del uso de elementos reforzados.
Los corrales pueden ser construidos con diversos elementos como piedra (pircas), palo “a pique”,
maderas o con alambrados. Estos últimos son los más usados en la actualidad.
El alambrado que rodea a los corrales puede ser construido con “postes reforzados” de quebracho
colorado que emergen alrededor de 1,80 m. del suelo, colocados a una distancia de 3 m. entre sí y con
8 a 10 hilos separados de 15 a 20 cm. uno del otro.
Cuando en los alambrados de los corrales se emplean alambres de alta resistencia comunes (17/15),
los tres hilos “atadores”, o sea, aquellos en los que se “manean” las varillas, suelen ser dobles. En
muchos casos se construyen directamente con alambres de mayor sección y resistencia.
Como elementos para tensar el alambrado se usan las “torniquetas”, que pueden ser de diferentes tipos
y funciones: golondrina, cajón, doble. Las mismas deben ser reforzadas en el uso en corrales.
Las varillas que se utilizan, generalmente son de lapacho de 2” x 2”, y se colocan de 0,70 a 1 metro de
distancia una de otra. En las esquinas de los corrales o al lado de las tranqueras se construyen
“remates” o esquineros dobles, también llamados orientales, a fin de darle solidez al conjunto.
Los pisos de los corrales, si su uso lo justifica, pueden ser entoscados, empedrados o pavimentados
con bloques de cemento especialmente diseñados para esta función.
Función: los corrales reciben diferentes denominaciones según la función que cumplan, existiendo
corrales de “encierre”, de “depósito” y de “aparte”. Los primeros o de “encierre” son aquellos donde se
coloca o encierra la hacienda que esta lista para entrar a la manga, a fin de efectuarle algún tratamiento
u operación de manejo.
El corral de “depósito” es aquel donde otro lote de hacienda, espera su turno para pasar al de encierre,
o donde un lote ya pasado por la manga espera para ser llevado nuevamente a los potreros.
Los corrales de “aparte” son por lo menos dos y reciben a la hacienda que ha pasado por la manga y
que por distintas razones debe ser separada en diferentes lotes. Tal el caso de vacas “vacías” y de
vacas “preñadas”, animales “sin terminar” y animales “terminados”, etc.
Diseño y dimensiones: la construcción de los corrales redondos permitiría facilitar el desplazamiento
de los animales, pero en la práctica resultan muy costosos. La alternativa más adecuada en la
diagramación de los corrales es aquella que evita las formas cuadradas y mantiene figuras
rectangulares cuyas proporciones largo – ancho deberían ser 2:1. Esto facilita el movimiento de la
hacienda, evitando que la misma se “embolse” en las esquinas. Para impedir que esto ocurra se pueden
“recortar” los esquineros mediante diversos sistemas: construyendo ochavas con el sistema
denominado oriental (doble poste con tranca), colocando tablas en diagonal entre dos postes.
Las dimensiones de los corrales estarán relacionadas con el tamaño del lote de hacienda más grande
que se lleve a la manga para efectuar un trabajo. Para realizar un cálculo aproximado de su superficie,
resultaría conveniente adjudicar dos metros cuadrados (2 m2) por animal bovino.
Por otra parte debe considerarse en la planificación un número no menor de seis corrales para agilizar
el desplazamiento del rodeo.
Ubicación: la ubicación de los corrales y manga propiamente dicha se debe planificar en una parte alta
del campo (para impedir anegamientos), y en un punto relativamente céntrico del mismo.
La superficie ocupada por el conjunto corrales-manga suele tener forma rectangular, en cuya parte
media central y siguiendo el eje mayor del rectángulo se ubica la manga propiamente dicha.
También es recomendable que haya acceso a la manga por distintos lados, en vez de uno solo, que
obligaría a tener un único potrero destinado a pre-encierre.
Se recomienda que en el complejo corrales-manga se cuente con abrigo para el viento y el sol. Se
pueden plantar, ubicándolos estratégicamente, árboles de hojas caducas, lo que evitará sombra y falta
de secado en el invierno.
Diseño para establecimientos de cría,
pequeños a medianos:
Stock de hacienda: 300 – 500.
N Bajo requerimiento de operarios: 2 – 3.
Posibilidad de trabajar “de a pie”.

Instalaciones accesorias.
Se entiende por instalaciones accesorias aquellas que sin ser estrictamente necesarias para la
explotación del ganado, ayudan en gran medida a las tareas y a la racionalización del manejo de los
animales. Entre estas instalaciones se pueden mencionar a la balanza y el embarcadero.
Balanza: la balanza a instalar tiene por objetivo un mejor control del crecimiento y engorde de los
animales. Su uso permite obtener información más o menos frecuente y objetiva sobre el peso de los
animales.
Existen numerosos tipos y marcas de balanzas para peso individual de los animales y que funcionan
tanto en forma mecánica como electrónica.
Balanza mecánica: consiste en una plataforma, montada adentro de una casilla, donde se encierra el
animal. Esta casilla se complementa con el sistema de pesaje propiamente dicho y los brazos a
contrapesos graduados. El brazo inferior posee graduaciones cada 100 kg. Y el superior cada kg.
Existen balanzas de mayor aproximación y otras que son de pesaje automático.
La casilla de encierre, sobre la plataforma de madera de lapacho, lleva dos paredes laterales paralelas y
de una altura aproximada de 2 m. En ambos extremos tiene puertas corredizas que permiten la apertura
y cierre para la entrada y salida del animal. En un costado de la casilla se halla, protegida por una caja
de madera, la sección de los brazos a contrapesas donde el operario realiza el deslizamiento de éstas
hasta lograr el equilibrio del fiel. Los modelos para pesaje individual de animales tienen una capacidad
de 1000 a 2000 kg., según marcas y tipos.
Previo a cualquier pesada se debe regular la balanza, operación que se repetirá sistemáticamente
durante el pesaje a fin de corregir los errores que se pudieran cometer por una falta de regulación a
medida que pasan los animales, ya que éstos por el movimiento y el caminar sobre ella por una parte y
por bosteo y orina por otra, pueden hacer variar la posición de equilibrio cuando la balanza está vacía.
Existen modelos de balanzas mecánicas montadas sobre ruedas lo que les permite su traslado por
medio de una camioneta con enganche.
Báscula para 1 – 2 animales. Capacidad 1500 Kg.

Balanza electrónica: esta báscula consta esencialmente de una plataforma que se coloca dentro de la
manga lisa, ya que es extrachata y por lo tanto no necesita rampas de acceso.
La pesada de los animales se realiza al paso de los mismos y se registra en un indicador digital
colocado en el lugar que se considere más cómodo unido por medio de un cable a la plataforma.
Este tipo de básculas permite una pesada más rápida al no tener que mover pesas y esperar el
equilibrio de la barra, indica directamente en números el peso del animal y tienen aproximaciones de
0,500 a 1 kg. Se alimentan tanto a batería de 12 voltios como con corriente de línea (220 voltios).
Poseen entre sus ventajas el poder llevar en forma automática a cero, suministrar el peso individual de
cada animal, contando y totalizando el número de pesadas, así como el peso promedio del lote, etc.
Algunas poseen opciones que permiten unirlas a computadoras e impresoras.
Embarcaderos: son construcciones que permiten el ascenso y descenso de los animales a los
camiones de transporte.
El embarcadero, al igual que la manga, tiene una sección trapezoidal isósceles, cuyos lados iguales
están formados por dos paredes laterales generalmente de madera separadas 0,50 m. en su base y
0,90 m. en su parte superior (aproximadamente a 1,60 m. de altura).
Ambas paredes forman un pasaje para los animales, que parte de la superficie del suelo y termina a la
altura del piso del chasis o acoplado de un camión. Las paredes están sujetas por parantes de madera
dura que en algunos casos van en forma creciente enterrados en el suelo. En otros casos se hace un
terraplén de tierra sobre el que se monta el embarcadero.
El extremo que queda a nivel del suelo desemboca en la parte estrecha de un embudo construido de
alambre, para facilitar el embretado y el ascenso de los animales de uno en fondo. En el extremo
elevado pueden tener una puerta, en otros casos, la puerta se pone entre el embudo y el embarcadero.
La cargada o embarque debe realizarse con sumo cuidado y con suavidad a fin de que los animales no
se asusten ni pongan nerviosos. El llenado del camión debe ser de modo que los animales se
encuentren cómodos dentro de él, ya que si se carga animales en exceso, seguramente el más débil o
pequeño sufrirá golpes e incluso puede caer y ser pisoteado. Tampoco es conveniente colocar muy
pocos animales, pues al tener mucho espacio y con el movimiento del camión los animales se
desplazan y amontonan en uno u otro extremo de las jaulas.

Existen modelos de embarcaderos portátiles, construidos en madera y montados sobre un chasis con
dos ruedas, que permiten su traslado y colocación en cualquier tranquera o lugar apto para el
embretado.
Estos cargaderos portátiles se enganchan a la jaula levantando el extremo que queda a nivel del suelo
cuando está en posición de embarque.
Cargadores fijos

Cargador portátil
de 3,5 mts. con eje.

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