Sesión: 01

Profesor: Olfis A. Guzmán Méndez

La pobre vida de los Centeno

En este tema a tratar hablaremos de las precariedades de una familia y las

diversas situaciones que vivieron después de la muerte de su padre.

Al ser una familia de escasos recursos vimos como no se podían sustentar

económicamente. Como ya sabemos no tenía ni para comer. Abro cita: “…le di un

pedazo de queso, medio bollo de maíz, y una galleta dulce y sacó para ella de la

bolsa de material plástico una ración igual”. Aquí podemos ver que ya tenía una

escasa cantidad de comida y tampoco tenía dinero para comprar.

Muchas veces las personas pasan por circunstancias difíciles en la vida y nos

vemos obligado hacer cosas que no están bien por necesidad. Abro cita: “…yo le

decía que nunca robara nada que le hiciera falta alguien para comer y él me hacía

caso”.

Es un cuento que se parece mucho a la vida diaria porque muchas personas en

especial jóvenes no tienen la forma de sustentar a su familia, ya sea por el

desempleo u otra situación. A veces hacemos cosas sin pensar en la en la

consecuencia de esta.

Abro cita: “…la señora Rebeca, una vieja solitaria que vivía en una casa llena de

cachivaches, sintió a través del rumor de la llovizna que alguien trataba de forzar

desde afuera de la puerta de la calle, se levantó, buscó a tientas en el ropero un

revólver arcaico que nadie había disparado desde los tiempos del Coronel
Aureliano Buendía, y fue a la sala sin encender las luces. Orientándose no tanto

por el ruido en la cerradura como por un como por un terror desarrollado en ella

por 28 años de soledad, localizó en la imaginación no solo en el sitio donde estaba

la puerta, sino la altura exacta de la cerradura. Agarró el arma con las dos manos,

cerró los ojos y apretó el gatillo.” A veces no tomamos decisiones que no son las

correctas trayendo como consecuencia la cárcel e incluso hasta la muerte.

Yo opino que antes de coger el camino más fácil debemos buscar otras

alternativas u otra solución al problema, como por ejemplo buscar un trabajo

honrado porque, aunque un trabajo honrado sea más difícil y se gane menos, es

más seguro y no tenemos tanto riesgo como robando y haciendo lo mal hecho, ya

que cuando robamos le quitamos lo de otra persona que se lo ganó con esfuerzo y

honradez.
 Bibliografía:

 Madeleine Permuy Leyva y Jorge Luis Zamora Mato. (2018). Lengua

Española 5. Santo Domingo, República Dominicana: Santillana.

 Celinda Fournier Marcos. (2002). Análisis literario. Monterrey, México:

Internacional Thomson Editores.

 Gabriel García Márquez. (1962). La siesta del martes. Xapala, México:

Universidad Veracruzana.