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UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE YUCATÁN

CAMPUS DE CIENCIAS SOCIALES, ECONÓMICAS Y


HUMANIDADES
FACULTAD DE DERECHO

DOCUMENTO DE INVESTIGACIÓN

ASIGNATURA: METODOLOGÍA Y TÉCNICAS DE LA


INVESTIGACIÓN

MAESTRO EN DERECHO: CARLOS ALBERTO ANCONA


SAURI

ALUMNO:
Br. LÓPEZ ESCALANTE MARCOS DAMIÁN

FECHA DE ENTREGA: 5 DE SEPTIEMBRE


MÉRIDA YUCATÁN MÉXICO
2019
IUSNATURALISMO
En la época del renacimiento, ya se estaba considerando al iusnaturalismo como
parte de la naturaleza, solamente qué de otra perspectiva aún inconclusa, se
decía que nos sometamos a la naturaleza para definir lo bueno de lo malo y lo
justo de lo injusto, sentenciaron. El problema, de nuevo, derivó de los modelos a
adoptar. Para Hobbes, el hombre era malo por naturaleza —Homo Hominis
lupus, tomó la sentencia de Plauto— y enumeró diversos acontecimientos que
probaban su tesis. Rousseau hizo lo propio, pero llegó a otra conclusión: los
hombres eran buenos por naturaleza. Eran las instituciones las que los
corrompían. Además, se presenta al iusnaturalismo como una palabra ambigua,
acabó pasando de moda, hasta que los científicos —los etólogos, antes que
otros— lo comenzaron a reivindicar de modo involuntario. La información con la
que contamos en el siglo XXI sobre nuestro ADN y nuestras hormonas, así como
sobre el ADN y las hormonas de otras especies, nos obligan a repensar el tema
del determinismo y a formular nuevas preguntas. Por ejemplo, ¿qué hace que
las abejas produzcan miel y construyan panales con celdas hexagonales?, ¿por
qué los castores edifican auténticos diques en los ríos donde deciden vivir?, ¿qué
provoca que los perros salvajes se organicen con tanta precisión para cazar a
un antílope? El experimento consiste en mantener a cada uno de estos
ejemplares con sus respectivas hembras y su prole durante un tiempo. A
continuación, se les separa de ellas unos días y se les vuelve a juntar.
Invariablemente, el ratón de pradera se aproxima a la hembra y a las crías, las
cuales parecen regocijadas con el regreso del padre. Así lo demuestran en sus
frotamientos y en el intercambio de contactos con el hocico. No es el caso del
ratón de montaña, el cual se muestra tan indiferente con su “familia”, como ésta
con él. ¿Qué ocurrió?, ¿un problema de valores familiares? Ni los de pradera
eligieron estar dotados de más oxitocina, ni los de montaña decidieron contar
con menos oxitocina. ¿Hasta qué grado puede reprochársele a un ratón de
montaña que no sea “cariñoso”? Nuestros patrones para evaluar su conducta,
por ende, tienen que reducirse a lo que las substancias de dichos roedores les
permitan hacer o no hacer. Tampoco los seres humanos elegimos los niveles de
melanina que hay en nuestra piel —la que determina si somos más o menos
more-nos—, ni los de oxitocina. ¿Qué tan libre es, entonces, un individuo que se
desentiende de su familia?, ¿qué tan encomiable es otro que permanece a su
lado a pesar de las dificultades que esto supone?, ¿de verdad se trata de una
decisión personal, como insisten algunos? A los iusnaturalistas medievales les
habría salido el tiro por la culata. EL iusnaturalismo de Hobbes se basa en la
aceptación del derecho natural en base a su relevancia de un ordenamiento
jurídico en su conjunto, con ello también el orden político, lo que le sirve
magníficamente para fundamentar el poder civil, idea que ya se había
desarrollado desde los Elementos del derecho, en cuanto el soberano tiene
derecho inviolable, posee la impunidad, lo que no significa que esté autorizado
a violar las leyes de la naturaleza, lo que en sus propias palabras, volvería a
menospreciar la razón y al mismo tiempo las leyes de Dios. Este racionalismo de
Hobbes, lo hace ver sin duda antidemocrático, pero sería un contrasentido verlo
como algunas corrientes lo hacen como precursor teórico del totalitarismo.
IUSPOSITIVISMO
El Iuspositivismo, corriente que defiende la teoría de que los derechos naturales
son naturales en atención a que devienen del hombre, pero derivan de la
racionalidad y la adecuación en el contexto espacio-épocal en el que se
desarrollan y requieren, invariablemente, su admisión en los cuerpos normativos
del Estado. El iuspositivismo sostiene que el único derecho válido es aquel que
dicta el Estado. Por eso en primera instancia genera reacciones encontradas; a
diferencia del iusnaturalismo, que en seguida se gana la aceptación de todos
aquellos que lo consideran superior por apelar a una moral que trasciende la
contingencia del derecho positivo (pues este último se supone en muchas
ocasiones injusto). Sin embargo, como veremos en lo que sigue, muchos juristas
han advertido que esa confianza en la supuesta bondad del iusnaturalismo
puede tener un efecto bumerán: el iusnaturalismo puede llegar a ser mucho más
peligroso que el iuspositivismo en caso de que ambos constituyan el fundamento
de un orden injusto; si el fundamento de ese pacto estatal es iuspositivista, los
individuos sabrán que de ellos, y de nadie más, depende que este orden persista
por lo que, si les resulta insoportable, no tendrán ningún impedimento moral para
intentar cambiarlo; en cambio, si el fundamento del pacto estatal es
iusnaturalista, los individuos que pretendan modificar ese orden no sólo se
encontrarán con los impedimentos legales, sino sobre todo con un gran
impedimento moral (que son los supuestos dictados de la naturaleza, de la razón,
de la historia o de Dios). El iuspositivismo parte del supuesto de que el derecho
no es más que la expresión positiva de un conjunto de normas dictadas por el
poder soberano. Estas normas, que constituyen el derecho positivo, son válidas
por el simple hecho de que emanan del soberano, no por su eventual
correspondencia con un orden justo, trascendental, como pretendía el
iusnaturalismo. Según García Maynez "el derecho positivo, por el simple hecho
de su positividad, esto es, de emanar de una voluntad soberana, es justo"
(García Maynez, 1968: 12). Dicho en otras palabras, para el iuspositivismo las
normas que emanan de un Estado fundan su validez en este hecho y no en
valores éticos trascendentales o en fines "socialmente valiosos" que
supuestamente deben perseguir las normas (como podría ser el bien común, por
ejemplo). El iuspositivismo (o positivismo jurídico) se considera una doctrina libre
de valores que establece lo justo y lo injusto con base, única y exclusivamente,
en los dictados del poder soberano, y no en un derecho que se pretende superior
por fundarse supuestamente en la naturaleza, en la razón, o en Dios. Para el
positivismo jurídico, el derecho (que no es otro más que el derecho positivo) no
persigue ningún fin inmanente y, por ende, ni se refiere ni está sujeto a ningún
contenido preestablecido. El derecho positivo funda su validez únicamente en
las reglas y procedimientos establecidos por el Estado. Por eso para el
iuspositivismo, el derecho positivo es formal, porque no se define ni por las
acciones que regula, ni por el contenido de tal regulación, ni por los fines que
esta acción persigue; se define únicamente con relación a la autoridad que
establece las normas, o sea, con respecto al poder soberano. En pocas palabras,
para el iuspositivismo, detrás de la ley no hay nada más que la voluntad
soberana: autoritas non veritas facit legem.
IUSREALISMO
Para los iusrealistas, el derecho no consiste exclusivamente en normas. El
derecho no se identifica con un deber ser sino con un ser; este ser puede
identificarse con la norma, pero también con el hecho. De este modo, podemos
distinguir entre el derecho como norma estatal y el derecho como hecho social;
el derecho no se puede reducir al Estado, sino que debe incluir a la sociedad. La
ciencia del derecho se debe ocupar fundamentalmente del ser de la conducta
humana entendida como un conjunto de fenómenos o hechos eficaces o reales,
y no de las normas formales o vigentes ni de los valores justos o naturales. Por
tanto, para el iusrealismo el derecho como objeto de estudio no son las normas
ni los valores sino los hechos. Es cierto que las normas jurídicas son
trascendentales para conocer el derecho, pero su importancia no radica en sí
mismas por ser normas formales ni en su contenido justo, sino en las actitudes
y conductas humanas que derivan de dichas normas y valores. En cierta forma,
esta corriente subordina a la ciencia del derecho a una rama de las ciencias
sociales. Lo cual ha constituido una de las principales críticas a esta doctrina,
por reducir el derecho a los hechos sociales que derivan de las conductas
humanas, y a la ciencia jurídica a una simple rama de la sociología positivista. El
iusrealismo reduce a la ciencia del derecho a una ciencia social empírica, pero
acepta que es una ciencia normativa no por estar compuesta de normas vigentes
sino porque los hechos sociales se refieren forzosamente a esas normas; es
decir, todas las proposiciones normativas acerca del derecho se refieren en
última instancia a los fenómenos sociales que le dan sustento. Asimismo, cabe
señalar que para esta escuela la ciencia del derecho forma parte de una rama
más amplia del conocimiento que la comprende -ciencias sociales- sin sostener
que se le pueda confundir con ella, porque el derecho no hace referencia a los
meros hechos sociales, ya que siempre deben tomar en cuenta su carácter
normativo. Kirchman , jurista que en el siglo XX impulso el Ius Realismo; por
medio de un análisis critico público: La utilidad de la jurisprudencia como
ciencia en 1848. Para llegar al conocimiento y movimiento real en la evolución
del Derecho y la Moral, opina que es el método de la inducción, para desprender
las categorías jurídicas. Sus características se basan en Conceptúa al Derecho:
como hechos de la vida social. (Intima relación, entre Derecho y sociedad). Así
como Utiliza diversos métodos; el criticismo es el más usual. (Criticismo:
"Sistema filosófico de Kant que procura determinar los límites entre los cuales
puede ejercerse legítimamente el entendimiento humano). El iusrealismo señala
a la noción del Derecho como actos sociales, es decir, parte de las normas
jurídicas. Se define al Derecho como un fenómeno social, hecha a través de una
observancia deducida por el método empírico auxilio de la psicología social. El
Ius realismo no pretende interpretar al Derecho de manera abstracta sino en
concreto. Sus objetivos del iusrealismo son resolver el concepto de naturaleza y
concepto del Derecho, al mismo tiempo que su propósito, después se trata de
dar ese motivo de relación con la sociedad.
Referencias
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humanos a la luz del principio lógico de razón suficiente (págs. 12-17).
Ciudad de México: Barra Interamericana de abogados AC.
2. Marcone, J. (2019). 2019.vlex.com. En J. Marcone, Andamios. Revista
de Investigación Social (págs. 123-148). Ciudad de México: Colegio de
humanidades y ciencias sociales de Universidad autonóma de la ciudad
de México.
3. Martínez, J. Á. (17 de Julio de 2015). 2019.vlex.com. En J. Á. Martínez,
Jurípolis (págs. 3-9). Tecnológico de Monterrey: Vicente Fernández
Fernández. Obtenido de Jurípolis:
https://2019.vlex.com/#/search/jurisdiction:MX/iusnaturalismo/p4/WW/vid
/222159771
4. México, U. a. (2018). https://revistas.juridicas.unam.mx. Obtenido de LA
CONCEPCIÓN DEL DERECHO EN LAS CORRIENTES DE LA
FILOSOFÍA JURIDÍCA:
https://revistas.juridicas.unam.mx/index.php/derecho-
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5. Torres, R. S. (4 de Abril de 2012). blogspot.com. Obtenido de Filosofia
del Derecho Ius Realismo: http://fildelderecho.blogspot.com/2012/04/ius-
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6. Velázquez, J. O. (2018). 2019.vlex.com. En J. O. Velázquez, Teoría y
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Nacional de Ciencias Penales. Obtenido de Teoría y ciencia de la
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https://2019.vlex.com/#/search/jurisdiction:MX/iusnaturalismo/p4/WW/vid
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