Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
y crisis humanitaria*
Felipe Medina Gutiérrez**
* Solamente las palabras y nombres en árabe (excepto de países) usan la transliteración del Diccionario de árabe
culto moderno, de Julio Cortés (1996).
** Maestro en Estudios de Asia y África, especialidad en Medio Oriente, El Colegio de México. Investigador
independiente, Colombia. [fmedina@colmex.mx].
Recibido: 15 de junio de 2017 / Modificado: 1 de noviembre de 2017 / Aceptado: 15 de noviembre de 2017
Para citar este artículo:
Medina Gutiérrez, F. (2018). Yemen: un escenario de guerra y crisis humanitaria. OASIS, 27, 91-111.
DOI: https://doi.org/10.18601/16577558.n27.06
por los países del Consejo de Cooperación del importante de la guerra a partir de 2014. La
Golfo (CCG) para la transferencia del poder y el segunda parte pretende identificar y describir,
establecimiento de un nuevo Gobierno, como de manera general, a los actores más destaca-
el “Diálogo Nacional”, que se estaba llevando dos en el presente conflicto. Por último, la
a cabo entre los diferentes sectores de la so- tercera parte busca reseñar los intentos de las
ciedad yemení, fracasaron por la ineficiencia mesas de negociación que ha habido, además
del presidente interino ‘Abd Rabbuh Manṣūr de exponer, a partir de algunos testimonios
Hādī, y por la toma de la capital Ṣan‘āʾ a ma- de yemenís y de informes de ONG, la grave
nos del movimiento Ḥūṯi (o también llamado y preocupante situación humanitaria. Sin
Anṣār Allāh)1 el 24 de septiembre de 2014, duda, el futuro del país dependerá de cómo
que obligó al mandatario a abandonar el país. se resuelvan las controversias en la mesa de
La crisis política empeoraría con la in- negociaciones, pues de lo contrario estaremos
tervención militar de la coalición de países en un escenario parecido al de países como
liderada por Arabia Saudita en marzo de 2015, Siria, donde no se vislumbra ningún acuerdo.
con la intención de restablecer la “legitimi-
dad” de Hādī y de aplastar el levantamiento ¿QUÉ PASÓ CON YEMEN DESPUÉS
Ḥūṯi. Lejos de esto, además de agudizar la DE LAS REVUELTAS DE 2011?
crisis humanitaria, lo que se ha generado es
una fuerte inestabilidad política –a partir de El Gobierno de Yemen en la era Ṣāliḥ estuvo
la creación de dos gobiernos paralelos–, una caracterizado por un fuerte centralismo, dic-
profunda crisis económica, y una lucha en- tadura, y un robusto sistema de patronazgo
tre diferentes grupos –algunos armados– por que le ayudó a mantenerse en el poder por
el poder, donde la población civil ha sido la más de treinta años2. Fruto de ello es que el
más afectada. principal frente de oposición, el Encuentro
El artículo pretende analizar de manera Común (EC), un bloque surgido en 2003,
general, a partir de una mirada crítica, los que agrupa a diferentes partidos políticos de
acontecimientos relativos a este periodo. diversas tendencias, se encontró por muchos
En la primera parte se hace un resumen del años en el marco de la oposición “aceptada”
contexto político y social previo y posterior dentro del régimen, a cuyos miembros, al-
a las revueltas de 2011, como antecedente gunos cooptados, si bien se les permitía un
1
Tanto Anṣār Allāh, su nombre en fuentes oficiales, como Ḥūṯi, frecuente en medios de comunicación a partir
de 2004, son términos correctos para referirse a este movimiento. Sin embargo, el presente texto usará este último
al ser el más próximo al lector. Para el origen del uso del término Ḥūṯi para referirse al movimiento véase Winter
(2011, pp. 102-120).
2
Para el caso de Yemen este sistema de patronazgo consistía en el fuerte poder que tenía el partido político de
Ṣāliḥ, el Congreso General del Pueblo (CGP), fundado en 1982, que combinaba la cooptación de militares, políticos,
extensas redes clientelares y afiliaciones tribales.
ESTUDIO DE CASOS
3
Para un recuento de las fuerzas “islamistas” que se encontraban en las revueltas en Yemen véase Bonnefoy
(2012).
del mismo partido y miembro de los HM, Bajo este contexto, Ṣāliḥ terminó por
sumado a las deserciones y dimisiones masi- ceder a las demandas populares y aceptó en-
vas en todas las instituciones del Gobierno, tregar el poder, no al bloque revolucionario,
representaron un fuerte golpe para el enton- sino a su vicepresidente ‘Abd Rabbuh Manṣūr
ces presidente. Sin embargo, al interior del Hādī, en una elección de candidato único,
bloque revolucionario, la presencia de estos por presión de la iniciativa de transición de
líderes, por muchos años en el establishment, poder del CCG, apoyada por la Resolución
creaba un profundo malestar, pues advertía 2014 de 2011 (R2014/11) de la ONU. En ella
de la posible cooptación, como en otros pro- se les garantizaba inmunidad jurídica a él y
cesos de la región, de la oposición partidista a su partido CGP, hecho que difería de otros
al movimiento de protesta, marginando a procesos donde la justicia transicional siempre
estudiantes y profesionales. exigió un juicio al dictador y la disolución de
Las mujeres también fueron parte esen- su partido de Gobierno. Significaba, además,
cial de este movimiento, siendo el caso de la intervención formal en el conflicto de acto-
Tawakkul Karmān, miembro del Iṣlāḥ, de los res externos, como la ONU y Arabia Saudita,
HM y Premio Nobel de Paz en octubre de quien venía de ayudar a apagar la revuelta
2011, el más reconocido. Sin embargo, es im- popular en Baréin.
portante advertir que otras mujeres tuvieron La elección de este personaje fue bastante
gran participación como, por ejemplo, Amal polémica, debido a que fue el único candidato,
al-Bāšā, Farīda Ṣaliḥ al-Ŷ arimy, Ŷ amila Raŷ āʾ, pero además porque había hecho parte del ré-
Arwa ‘Abdo ‘Uṯ mān, entre otras4. gimen tradicional, a pesar de su alineamiento
El caso de Yemen fue destacado como el con la oposición a partir de 2011 (De Terán,
único escenario donde hubo una transición 2017, p. 185). Ello demostró, primero, que
“pacífica” del poder. En efecto, los actos de no hubo participación de las fuerzas del país
protesta fueron protagonizados por cientos que demandaban un cambio real, reflejado
de yemenís que, en un movimiento antigu- en el boicot a su elección por sectores como
bernamental pacífico, trataban de expresar su los Ḥūṯi y al-Ḥirāk y, segundo, que este per-
descontento ante la crisis institucional, política sonaje representaba la carta de Arabia Saudita
y económica que Yemen arrastra desde hace y Estados Unidos, dispuesto a seguir el plan
más de media década (Zahonero, 2011). Si que tenían estas potencias para el país. Des-
bien ello se originó así, el resultado no fue de este momento se empezó a cuestionar por
tan “pacífico”, pues muchas de las protestas muchos sectores la “legitimidad” del presi-
llevaron a la represión y detención arbitraria dente interino.
por parte de las fuerzas de seguridad, dejando
varios muertos y heridos.
4
Para un estudio sobre el papel de la mujer yemení en las revueltas véase Strzelecka (2015).
ESTUDIO DE CASOS
El plan de transición y la conferencia para Afrāḥ Nāṣir, el poder político de los hom-
el “Diálogo Nacional” bres era mayor al de las mujeres, y a pesar del
porcentaje que ganaron en esta conferencia,
En marzo de 2013, Yemen entró a una nueva en la etapa de transición el papel de la mujer
fase política de transición conocida como la siempre fue secundario6.
conferencia para el “Diálogo Nacional” (al- Dicho intento terminaría sin consenso
Ḥiwār al-Waṭanī), auspiciada por Hādī, el en- en enero de 2014, dejando un panorama de
viado especial de la ONU Ŷ amāl Ben‘Omar, con polarización, desestabilización, y sin debatir
apoyo de Estados Unidos y la Unión Europea. los temas profundos de la realidad política
Compuesta por 565 miembros, agrupaba a yemení, en un contexto rodeado de pobreza,
fuerzas tradicionales de oposición, islamistas, hambre, escasez de agua, desempleo, y bajo la
socialistas, nacionalistas árabes, entre otros, continua política de bombardeos y ejecucio-
y tenía como antecedente un proceso similar nes extrajudiciales por drones del presidente
durante los años de 1993 y 19945. Obama.
La principal propuesta que surgió en este
diálogo fue la del federalismo, que implicaba El avance Ḥūṯi y la intervención militar
la división indiscriminada del territorio en liderada por Arabia Saudita
seis regiones, como forma de solucionar la
crisis. Esta idea, que ya había sido debatida Los detonantes más próximos para la guerra
en el caso Iraquí (2005), basada en el modelo que estallaría en el país suceden cuando, a pe-
aplicado por los franceses en Líbano, y ahora sar de que el proceso político estaba en curso,
propuesta por algunos sectores para solucionar los Ḥūṯi, en medio de confrontaciones violen-
cuestiones como la de Afganistán y Siria, fue tas con grupos que se les oponían, demandan
rechazada en Yemen por respuestas populares la formación de un Gobierno diferente al
debido a que no resultaba adecuado para tratar de Hādī. La oportunidad para lanzar dicha
la necesidad real de un cambio de régimen o propuesta fueron las protestas organizadas
para acabar la disputa por el poder en Ṣan‘āʾ en medio del anuncio del retiro del subsidio
(Carapico, 2016, p. 280), siendo los Ḥūṯi y a la gasolina, que generó gran descontento
al-Ḥirāk sus mayores opositores. entre la población. Sin embargo, la acción
Sumado a lo anterior, la falta de represen- más contundente fue cuando tomaron la
tatividad de los diferentes sectores y grupos de sorpresiva decisión, en septiembre de 2014,
la sociedad civil y política marcaba la fragilidad de capturar por la fuerza la capital Ṣan‘āʾ,
de este diálogo. Por ejemplo, como expresó para muchos un “golpe de Estado”, en medio
la reconocida periodista y bloguera yemení, de fuertes críticas a las fuerzas armadas por
5
Para un resumen de la experiencia del Diálogo Nacional durante los años 1993-1994, véase Carapico (1998).
6
Entrevista realizada por el autor el 28 de junio de 2017.
no hacer frente real a esta ofensiva. Muchos escapar, se dirigió a ‘Aden, y estableció un go-
apoyaron esta iniciativa como una forma de bierno paralelo. A partir de aquí se formaron
corregir los errores de la transición, celebrando dos polos de poder, uno radicado en la capital
la voluntad del movimiento de enfrentar a la del sur y otro en la capital del norte, ambos
corrupción, combatir a al-Qā‘ida, y llenar el con problemas de legitimidad.
vacío de seguridad dejado por un gobierno El vecino más importante del país, Arabia
ineficaz, mientras que, para otra gran parte de Saudita, miraba con preocupación los hechos
la población, esta ofensiva Ḥūṯi representaba la en Yemen, y era claro que había que tomar
expansión de su agenda discriminatoria, con una serie de medidas. Más allá de suspender
el objetivo de imponer su dominio político la ayuda económica, decidió darle refugio a
(Alley, 2014). Hādī, quien había huido a raíz de una incur-
Contando en sus manos con el centro sión Ḥūṯi en ‘Aden, en el mes de marzo de
de poder, y en medio de fuertes tensiones y 2015. Lo cierto es que en Riyāḍ se decidió
enfrentamientos, se consigue que los Ḥūṯi que la solución era una intervención militar
firmen un acuerdo con la administración para para restablecer la “legitimidad” y el orden
la formación de un “gobierno de unidad” más institucional en Yemen.
inclusivo, el Peace and National Partnership En ese momento el reino pasaba por una
Agreement (PNPA) que, apoyado por la ONU, coyuntura política importante, pues Salmān
le garantizaba más participación a este mo- ibn ‘Abd al-‘Aziz fue nombrado nuevo rey, tras
vimiento y al-Ḥirāk, además de una serie de la muerte de su hermano ‘Abdula bin ‘Abd al-
reformas económicas y sociales. Sin embargo, ‘Aziz. Una vez en el poder, designó a su hijo
al mismo tiempo, este movimiento se expandía Muḥammad bin Salmān, de 31 años, como
territorialmente, tomando incluso el principal ministro de Defensa y secretario general de la
puerto marítimo del país, al-Ḥudeida. Corte Real. El primer gran reto de su gobierno
A pesar de esto, los profundos desacuer- fue enfrentar al levantamiento Ḥūṯi.
dos con la administración Hādī hicieron que De esa manera, una coalición se edificó
dicho acuerdo con el Gobierno se rompiera, a partir del liderazgo de Riyāḍ, que incluía
lo que terminaría por confirmar la sorpresiva fuerzas de Emiratos Árabes, Qatar, Baréin,
alianza con el expresidente Ṣāliḥ, para confor- Kuwait, Jordania, Egipto, Sudán del Norte
mar un nuevo bloque de Gobierno. Aunque la y Marruecos, con apoyo logístico de Estados
ONU impuso sanciones al exmandatario y a dos Unidos y algunos países de Europa, iniciando
de sus comandantes, la nueva coalición adqui- así las denominadas operaciones “Tormenta
rió mucho más poder, por ejemplo, tomando decisiva” y “Restaurar la esperanza”, que oca-
control de la televisión estatal y anunciando sionarían la renuncia de Ŷ amāl Ben‘Omar y
en Ṣan‘āʾ el Consejo de cinco miembros para traerían resultados nefastos para la población
reemplazar a Hādī. Si bien todo este contexto civil yemení desde 2015.
forzó la renuncia y detención domiciliaria del De momento, el balance de la guerra es
presidente interino y de su gabinete, este logró que, contrariamente a los objetivos trazados,
ESTUDIO DE CASOS
estas operaciones e intervencionismo no han donde murió Ḥusein, y ‘Abd al-Malik al-Ḥūṯi
acabado con los Ḥūṯi ni con fuerzas leales a se convirtió en el nuevo líder.
Ṣāliḥ, y, en su lugar, han creado resentimien- Sin embargo, su popularidad ascendió a
to en gran parte de la población, reflejado en raíz del levantamiento en 2014. A menudo se
multitudinarias protestas (principalmente en suele plantear que la toma de la capital en este
el norte), y en la incorporación a bloques de año fue una continuación de las Guerras de
resistencia. De hecho, los Ḥūṯi han contraa- Ṣa‘da, sin embargo, es más pertinente darle a
tacado, reportándose enfrentamientos en la cada escenario un contexto, pues si bien hay
frontera sur de Arabia Saudita (las vastas regio- una base común, tanto los motivos como los
nes montañosas fronterizas de ‘Asīr y Naŷrān), actores o protagonistas son muy diferentes.
y no sería para nada extraño que se extendieran Lo importante es entender que ambos en-
a otras zonas del reino. No hay duda de que la frentamientos hicieron de este movimiento
solución militar ha mostrado ser la estrategia un actor importante de cara al futuro en la
equivocada para tratar el levantamiento. política yemení.
En cuanto a su dimensión religiosa, los
¿QUIÉN ES QUIÉN EN LA GUERRA Ḥūṯi son musulmanes chiís, vinculados a la
EN YEMEN? ESTUDIO GENERAL DE vertiente Zaydí, llamada así en razón a Zayd b.
LOS ACTORES DESTACADOS Ḥusein b. ‘Alī b. Abi Talib (m. 740), nieto del
mártir chií de Kerbalāʾ ‘Alī, e hijo del cuarto
El movimiento Ḥūṯi (o Anṣār Allāh) imām Zaynuʾl-‘Ābidīn. Es importante anotar,
que se diferencia de la corriente duodecimana
Históricamente, los orígenes de este grupo se (Iṯnā-‘Ašarīya), mayoritaria en la región y que
sitúan en Huṯ, en la gobernación de ‘Amrān prevalece en Irán, y que, de hecho, su base
en el norte del país, aunque el hogar ancestral teórica es muy próxima a la Šāfi‘ī sunní7, que
de la familia es Ḍaḥyan, lugar donde nació prevalece en zonas del medio y bajo Yemen.
Badr ad-Din al-Ḥūṯi en 1922 (Salmoni et al., Durante muchos años el norte de Yemen
2010, p. 103). Hijo de un importante erudito fue gobernado por los Aʾima zaydís, y es por
Zaydí y guía espiritual y político de la familia, esto que a menudo, al movimiento Ḥūṯi se
hasta su muerte en el año de 2010, es gracias le suele relacionar como continuadores de la
a su liderazgo y la influencia de muchos de monarquía del Imām Yaḥia (1918-1948) cuyo
sus hijos, como Ḥusein al-Ḥūṯi, que a sus se- reinado representó el establecimiento del Ye-
guidores se les conocería como los Ḥūṯi, sobre men moderno (Dresch, 2000)8. Sin bien hay
todo a partir de las Guerras de Ṣa‘da, conflicto un espacio de tiempo donde los seguidores de
7
Es una de las cuatro corrientes jurídicas (maḏāhib) del islam sunní, cuyo nombre deriva de su fundador el
Imām aš-Šāfi‘ī.
8
Los Aʾima (sing. Imām) gobernaban bajo un régimen de estilo monárquico, y fueron los dirigentes de Yemen
desde el final del siglo noveno hasta la revolución republicana de 1962.
9
El Wahābismo, llamado así en razón a su fundador, Muḥammad ibn ‘Abd al-Wahāb (1703-1792), es un mo-
vimiento proselitista, reformista e “islamista”, caracterizado por su sectarismo, intolerancia hacia otras tendencias
al interior del islam (sobre todo chiís) y por su interpretación literal de los textos del islam.
10
Para un resumen del origen y desarrollo del zaydismo en Yemen véase Medina Gutiérrez (2017a).
ESTUDIO DE CASOS
miembros Ḥūṯi murieron en un incidente en Pero sobre todo con lo acaecido con Qa-
un puesto de seguridad Ḥūṯi. No hay duda tar en junio de 2017, cuando Arabia Saudita,
de que la rivalidad entre ellos, y viejas cuen- Emiratos Árabes, Baréin y Egipto decidieron
tas pendientes, serán un elemento latente, lo cortar relaciones diplomáticas y sancionar a
que hace probable que esta alianza no tenga Doha, acusándola de “albergar a grupos te-
mucho futuro11. rroristas y sectarios que amenazan la estabili-
dad de la región”, lo que es bastante irónico,
El presidente interino Hādī y la coalición pues es precisamente Arabia Saudita quien
promueve el sectarismo y el wahābismo no
‘Abd Rabbuh Manṣūr Hādī, oriundo del sur solo en la región sino en el mundo. Lo cierto
de Yemen, reconocido político y exmiembro es que Qatar fue expulsado de la coalición, y
de las fuerzas armadas, ejerció como vicepre- el gobierno de Hādī, sumándose al llamado
sidente durante la era Ṣāliḥ, y, como adver- de Riyāḍ, lo acusó de “tener relación con la
timos, fue elegido para dirigir el periodo de alianza Irán-Ḥūṯi”.
transición desde 2012. Criticado por muchos
sectores por representar los intereses tradicio- Los comités populares (al-Liŷ ana aš-Ša‘bia)
nales, y por haber huido a Arabia Saudita tras
la incursión Ḥūṯi, Hādī regresaría al país y En los enfrentamientos se detectó la presencia
restablecería un tímido gobierno en el sur de de los llamados comités populares (al-Liŷ ana
Yemen, a partir del traslado del Banco Cen- aš-Ša‘bia), actores armados no estatales que
tral de Ṣan‘āʾ a ‘Aden. No obstante, muchos consisten en alianzas de tribus que incluyen
en el sur lo rechazan y no hay duda que este militantes tribales presentes en diferentes
personaje es una ficha descartable tanto para frentes de la guerra, siendo los más conocidos
Arabia Saudita como para los demás países los leales a los Ḥūṯi y los aliados al gobierno
del golfo y para Estados Unidos. de Hādī, a la coalición, y, sobre todo a Arabia
En cuanto a la coalición liderada por Saudita. Sin embargo, este es un fenómeno
Riyāḍ, se trata de una alianza débil en razón que no es nuevo en la historia de Yemen, pues
de la pluralidad de intereses y pugnas a su ya el gobierno de Ṣāliḥ se había valido de es-
interior. Por ejemplo, la polémica por las tas agrupaciones en la década de 1990 en su
prisiones secretas establecidas por Emiratos ofensiva contra territorios del sur, contra AQPA
Árabes y fuerzas de seguridad aliadas, donde en la década del 2000 y, más recientemente, en
abusan y torturan a prisioneros en el sur de Ye- las Guerras de Ṣa‘da en 2004.
men (Maggie, 2017; Amnistía Internacional, De un lado, además de ser parte activa en
2017) demuestran la diversidad de intereses acciones de combate, pues ya en la toma de
que tienen Dubái y Riyāḍ en esta zona. Ṣan‘āʾ en 2014 ayudaron a los Ḥūṯi a ocupar
11
‘Alī ‘Abdullāh Ṣāliḥ fue asesinado el 4 de diciembre de 2017, para un análisis de su muerte ver Medina Gutiérrez
(2017b).
los edificios del gobierno, han conformado Ello habla de la presencia de un grupo
un cuerpo especial que se dedica principal- especializado compuesto principalmente por
mente a la vigilancia de las calles en diferentes latinoamericanos y eritreos, donde se destacan
puestos de control establecidos en carreteras los miembros colombianos, reclutados más
y ciudades, e incluso impartiendo justicia y o menos a mediados de 2010 para servir en
labores judiciales. Emiratos Árabes, por una convocatoria que
De otro lado, Arabia Saudita, valiéndose vio, en el final de la guerra con las FARC en
de relaciones de cooptación de vieja data con Colombia, una oportunidad para reclutar
distintas confederaciones y hombres tribales, militares experimentados que ya no tendrían
decidió conformar y reactivar “comités popu- un escenario de guerra dónde servir. A mu-
lares”, creados recientemente en zonas del sur, chos, aunque no sea la única razón, se les
quienes participaron también en combate, sedujo ofreciéndoles salarios en dólares, que
sobre todo a raíz de los intentos de los Ḥūṯi claramente superaban las cantidades ofrecidas
de someter ‘Aden. en Colombia. La mayoría de estos personajes
No hay duda que la presencia de estos son oficiales retirados y expertos antiguerrilla,
“comités populares” hace más complejo el que ya han estado en el contexto de la gue-
presente conflicto. Más allá de la presencia de rra (Medina, 2017a, p. 119), aunque no se
las tribus, si bien pueden seguir directrices descartan mercenarios que van de guerra en
de uno u otro grupo, controlarlos e identifi- guerra prestando sus “servicios”.
carlos es todo un reto y, al estar involucrados Si bien su labor principal es enfrentar a los
en acciones de combate, hace que los civiles Ḥūṯi y aliados de Ṣāliḥ, han tenido que com-
se vean más involucrados. batir a componentes de AQPA en el sur, zona
de especial interés económico y estratégico de
Presencia de mercenarios y contratistas Dubái, ocasionando según diferentes reportes
(Donaghy, 2015; Hager y Mazzetti, 2015) las
Se trata de la presencia de fuerzas de com- primeras bajas en ciudades como Ta‘iz.
bate extranjeras, generalmente conocidas Allí se enfrentan a un contexto complejo
como contratistas o mercenarios, que ya se y a un territorio desconocido, cuyos rivales,
conocían en la región, sobre todo a partir de a diferencia de ellos, están dispuestos a dar la
la experiencia de la invasión estadounidense vida por la batalla. La presencia de estas fuerzas
a Iraq. Dentro del contexto de la guerra en foráneas agrega otro componente a la compleja
Yemen, si bien la coalición oficialmente solo lucha que involucra a tribus, militares, grupos
incluía fuerzas armadas (más que todo fuerza islamistas y fuerzas internacionales. Sin duda,
aérea), reportes sobre incursiones terrestres, no les depara nada bueno en Yemen y están
en especial de fuerzas con uniforme y signos destinadas al fracaso.
de distinción de Emiratos Árabes en las zonas
del sur del país, han desatado gran controver-
sia y debate.
ESTUDIO DE CASOS
12
Entrevista realizada por el autor el 30 de junio de 2017.
en el país, perpetraron sus primeros ataques la situación. Algunos de estos grupos, islamis-
en ciudades como ‘Aden. Con la actividad tas y de clara tendencia wahābi, fueron finan-
de AQPA y EI, la narrativa sectaria ha ganado ciados por países como Arabia Saudita, Qatar
terreno, en un país donde históricamente y Emiratos Árabes. Al ver que la correlación
había convivencia pacífica entre las diferentes de fuerzas no le favorecía al Gobierno sirio,
comunidades. Irán decide intervenir con ayuda logística y
militar, enviando a la Guardia Revoluciona-
¿Un escenario de guerra proxy? ria en cabeza del general Qasem Soleimani,
Implicaciones regionales e internacionales y además contando con la ayuda del partido
libanés Ḥizb Allah, quien intervino activamen-
Para muchos analistas el presente conflicto en te en combates decisivos que le permitieron a
Yemen configura un típico escenario de guerra al-ʾAsad permanecer en el poder.
proxy, o guerra indirecta, entre Irán y Arabia En Irak, el Gobierno iraní ha p
articipado
Saudita, junto a otros escenarios como Siria, activamente en la reorganización del país y de
Irak y Baréin, en los que hay una disputa por las comunidades chií a partir de 2003. Por su
el poder regional, en el marco de la “rivalidad lado, Arabia Saudita desea expandir su influen-
sunní/chií”. Al ser un tema que desborda el cia, sobre todo a partir de la última reunión
objeto del presente escrito, solo plantearemos con el líder iraquí Muqtada aṣ-Ṣadr. En este
algunos puntos que sirven para la discusión. escenario, parece que sus intereses no chocan
En el primer lugar, acerca de la “rivalidad demasiado, pues para muchos es clara la inten-
sunní/chií” es claro que hay diferencias teóri- ción de dividir a Irak entre varias potencias.
cas y ritualistas entre estos dos. Sin embargo, Baréin, otro escenario propio de las re-
es un discurso que intenta poner los diversos vueltas de 2011, fue un caso donde se sacri-
conflictos en el plano religioso cuando no lo ficaron las legítimas demandas populares de
son, y va de la mano de una idea sectaria que cambio en aras de mantener la estabilidad
intenta dividir a las dos comunidades. Ni monárquica (Delmonte, 2012). Allí, muy
Arabia Saudita es el representante del sunnis- similar a lo que pasó en Yemen, por petición
mo, ni Irán del chiísmo. A pesar de esto, no formal del rey al-Jalifa, en nombre del CCG,
se puede negar que las geopolíticas de poder Riyāḍ, con ayuda de Dubái, fue el protagonis-
hegemónico tanto de Arabia Saudita como ta central del envío de fuerzas de seguridad a
de Irán están enfrentadas, tal como sucede en Baréin, lo que impulsó a las fuerzas bareiníes
algunos de los escenarios descritos. a optar por la represión total del movimiento
En Siria, por ejemplo, si bien hubo en el opositor (Delmonte, 2012). La paranoia de
inicio una revuelta popular pacífica en contra la amenaza para la seguridad nacional y del
del dictador Bašar al-ʾAsad, lo cierto es que efecto dominó, reflejado en la intervención
rápidamente grupos de oposición, y volunta- directa de Arabia Saudita y del golfo, no se
rios provenientes de otros países de la región, vio del lado de Irán, pues a pesar de haber si-
iniciaron un alzamiento armado, agudizando do acusado por la monarquía de estar detrás
ESTUDIO DE CASOS
de un complot, su influencia no fue tal que evolución. De hecho, si bien es probable que
permitiera identificar a algún grupo o sector Irán haya enviado armas a los Ḥūṯi, nunca se
como un proxy de Teherán. habla de las provisiones que consiguen gracias
Finalmente, en Yemen la intervención al sector del ejército que está con su causa, de
de Riyāḍ en la crisis es palpable, lo que no es los contactos de Ṣāliḥ, de mercados como Suq
nuevo si se tiene presente la historia entre am- aṭ-Ṭalḥ, y del contrabando de armas prove-
bos países. Sin embargo, respecto a Teherán, niente de áfrica, además del botín de guerra
más allá de diferentes hipótesis, no se tiene en enfrentamientos contra soldados saudís.
certeza en qué medida esté interviniendo en el Finalmente, en cuanto al posible escena-
conflicto, pues a diferencia de la dependencia rio de enfrentamiento sunní/chií al interior de
política y económica de Hādī del actual rey Yemen, hay decir que el presente conflicto no
Salmān, ello no es tan palpable entre los Ḥūṯi se reduce a la lógica de blanco y negro, sino
y el líder supremo Ali Khamenei (Medina, que es mucho más complejo. Por ejemplo, no
2017a, p. 111). todos los zaydís apoyan a los Ḥūṯi ni a Ṣāliḥ,
Las acusaciones de Arabia Saudita de que ni todos los sunnís apoyan a Hādī y Arabia
este levantamiento hace parte del proyecto Saudita. De hecho, hay sunnís con los Ḥūṯi,
de expansión de la revolución islámica para y hay zaydís con Hādī. Hay personas que se
“iranizar” a Yemen y destruir al reino son al- oponen a la intervención de la coalición, pero
tamente debatibles, y llama la atención que no quiere decir que apoyen a ninguno de estos
coincidan con posturas como la de Israel. Si bandos. De ahí que la narrativa del sectarismo
bien no basta con recordar que los Ḥūṯi son confunda el contexto político de la crisis en
zaydís, diferentes de los duodecimanos en Yemen, en vez de ayudar a esclarecerla (Willis,
Irán, es fundamental considerar la apuesta y 2016), y la de guerra proxy resulta, de nuevo,
el proyecto político de cada bando. De no ser poco fiable y bastante reduccionista.
así, se correría el riesgo de no reconocer que
hay una agenda y dinámica local en Yemen La postura de Estados Unidos, Rusia y otras
a la que responden los Ḥūṯi. Más que ser el potencias
provocador, la cuestión aquí es que Irán ha
sabido capitalizar dichas acusaciones, donde Las potencias fuera de la región también son
ve con buenos ojos un posible debilitamiento actores en este conflicto, y su política roza con
de su rival geopolítico. la doble moral. Oficialmente, Estados Unidos
De hecho, al catalogar a los Ḥūṯi como ha manejado un discurso de apoyo económico,
un proxy de Irán, algo que ya se había hecho de reformas al sector de seguridad, de apoyo a
durante las Guerras de Ṣa‘da, se pretende des- los diálogos para encontrar una solución a las
pojar a este movimiento de sus raíces yemenís crisis, y de transición a partir de las revueltas
y poner el conflicto al nivel de las tensiones de 2011 exigiendo a Ṣāliḥ ceder el poder. Sin
internacionales, además de ignorar todo el embargo, Yemen es uno de los teatros de ope-
contexto histórico que rodea su formación y raciones en la “Guerra contra el terrorismo”,
ESTUDIO DE CASOS
13
Entrevista realizada por el autor el 25 de junio de 2017.
(se calcula que 14,4 millones de personas no del país para poder, en el mejor de los casos,
tienen acceso a este), se espera que la epidemia recuperar la infraestructura pública y privada.
se expanda rápidamente a distintas gober- Finalmente, más allá de los miles de re-
naciones. Ello se ve empeorado debido a los fugiados y casos de desplazamiento forzado,
bombardeos de la coalición que han destruido que ascienden a 3 millones de personas, con la
redes locales y dañado algunos generadores administración Trump vino una nueva medida
(HRW, 2017). La escasez de combustible juega firmada a inicios de 2017 que empeoraría la si-
en contra, pues muchas bombas de agua no tuación de los ciudadanos yemenís. Se trata de
funcionan sin este recurso. la prohibición de ingreso a los Estados Unidos
Infecciones como la diarrea y brotes de de los nacionales de Siria, Irán, Libia, Somalia,
dengue se han diseminado con gran velocidad, Sudán, Yemen y anteriormente Irak, sacado
lo que se complementa con que 17 millones de la lista en marzo de 2017. Hacia finales de
de personas sufren de inseguridad alimenta- junio de 2017, la Corte Suprema de Estados
ria y casi 2 millones de malnutrición aguda, Unidos ratificó parte de la orden de Trump, la
sobre todo, la población infantil (Amnistía cual, puesta en práctica o no, de igual manera
Internacional, 2017). Ello empeora fruto de significa una grave afectación a los derechos
los bloqueos de la coalición a los principales de las personas de estas nacionalidades, más
puntos de acceso y salida del país, princi- allá de que todas sean de mayoría musulmana.
palmente aeropuertos y puertos marítimos, Así lo siente Maha Senān, oriunda de Ta‘iz y
lo que impide la llegada y distribución de parte de la comunidad de yemenís que viven
la ayuda humanitaria. Como afirma Nāṣir, en Estados Unidos afectados por la medida:
el mantenimiento del bloqueo hace que los
yemenís pasen de una muerte lenta a una Llegué a los Estados Unidos hace un año, invi-
muerte rápida. tada para participar en la exhibición del Consejo de
Por su parte, la falta de electricidad en Derechos Humanos de Michigan. Sin embargo, con
Yemen recuerda escenarios ya conocidos como ocasión de la guerra en mi ciudad, decidí permane-
el de la franja de Gaza en Palestina, sometida al cer aquí. Todo en Ta‘iz está destruido es una ciudad
bloqueo israelí. Con recortes de casi 18 horas muerta. Mi familia se fue a otras ciudades, algunos a
al día, y buscando adquirir paneles solares de Ṣan‘āʾ. Con este tipo de medidas migratorias, todos
excesivo costo, los yemenís intentan sobrevivir. nos sentimos inseguros y a la vez, frustrados sin es-
Sin luz, a muchos niños se les viola el derecho peranza. A mis padres se les negó la entrada al país,
a la educación, pues incluso sus colegios han sabiendo que mi hermana es ciudadana estadouniden-
sido bombardeados. A ello, si finaliza la guerra, se. No sabemos qué pueda pasar con nuestro futuro14.
debe agregarse el tema de la reconstrucción
14
Entrevista realizada por el autor el 2 de junio de 2017.
ESTUDIO DE CASOS
A pesar de todo esto, no todo son malas primer levantamiento significativo conocido
noticias, pues en septiembre de 2017, bajo la como las Guerras de Ṣa‘da (2004-2010). Si
nueva administración en la ONU, se autorizó bien ambos están relacionados, es producto
la creación de una comisión independiente de este nuevo y diverso contexto de transición
para investigar crímenes de guerra y de lesa donde se convierten en un actor importante de
humanidad, siendo uno de sus objetivos de- peso para tener en cuenta en el futuro del país.
terminar la responsabilidad de Arabia Saudita Es relevante comprender que, si bien
y de la coalición en estos delitos. Después del el conflicto Ḥūṯi se mueve dentro de un en-
tropiezo de Ban Ki-moon, quien tras presio- torno mayor, entre rivalidades geopolíticas
nes tuvo que retirar a Arabia Saudita de la regionales e internacionales, no es del todo
lista negra de grupos que asesinan y afectan adecuado catalogarlo como un escenario de
a menores de edad, hacia finales de 2017, la “guerra proxy”, ni de una “rivalidad sunní/
ONU finalmente lo incluyó en la lista anual, chií”, pues expresarlo así resulta insuficiente
atribuyéndole un total de 683 víctimas. Tanto por las múltiples variables que están presentes
el trabajo de las comisiones independientes, al interior del contexto propio de Yemen. Más
como estos listados son esfuerzos importantes allá, aunque no de menos importancia, de las
que deben continuar y esclarecer la verdad, diferencias religiosas entre los Ḥūṯi e Irán, hay
pero la guerra en Yemen corre el peligro de una serie de diferencias políticas e intereses lo-
verse como un caso más en la agenda huma- cales dentro de Yemen que ayudan a entender
nitaria, cuando en realidad es un conflicto de las complejidades de este escenario.
naturaleza y de solución política. Asimismo, la situación que vive Yemen
no solo se explica en términos de las rivali-
CONCLUSIONES dades y los enfrentamientos entre los Ḥūṯi,
partidarios de Ṣāliḥ, y la coalición liderada
La guerra que se desarrolla en Yemen deriva por Arabia Saudita, sino que también, temas
no solo de años de dictadura durante la pre- como el secesionismo en las regiones del sur,
sidencia de ‘Abdullaḥ Ṣāliḥ, sino también, de siempre presente pero exacerbado con la
una mala transición política y del fracaso del guerra; la expansión de grupos como AQPA
“Diálogo Nacional” después de las revueltas de y el Estado Islámico, que ve dificultades en
2011, donde fuerzas tradicionales mantuvie- Siria e Irak, hacen parte de la realidad y de la
ron el poder, el ejército se fracturó, el sistema guerra en el país.
de patronazgo de Ṣāliḥ se mantuvo, y las aspi- Lo que pasa en Yemen no se debe enten-
raciones populares se vieron secuestradas por der como la pugna entre el “norte” y el “sur”,
la iniciativa impositiva del CCG, apoyada por la categorías artificiales. Ello no implica que no
ONU, Estados Unidos y la Unión Europea. deba reconocerse la infortunada historia de en-
De la misma manera, es importante frentamientos, y la profunda desconfianza que
entender que el nuevo levantamiento Ḥūṯi hay entre sectores de la población en diferentes
se enmarca en dicho contexto, y difiere del ciudades. Lo importante aquí es entender que
ESTUDIO DE CASOS
and the Gulf. US: Middle East Research and In- donald-trump-latest-saudi-arabia-billions-arms-
formation Project (MERIP). deal-military-sales-a7746601.html.
Wilts, A. (2017). Donald Trump signs $110bn arms Winter, L. (2011). Conflict in Yemen: Simple people,
deal hours after landing in Saudi Arabia. En complicated circumstances. Middle East Policy,
Independent. Recuperado de http://www.inde- XVIII (1), 102-120.
pendent.co.uk/news/world/americas/us-politics/
ESTUDIO DE CASOS