Una tienda o negocio es un tipo de establecimiento comercial, físico o virtual, donde el
comprador puede adquirir tanto bienes como servicios a cambio de dinero.1 La palabra tienda implica un establecimiento pequeño con atención directa por parte de un vendedor o dependiente; también presupone la existencia de un mostrador o mesa que separa la sala de ventas de los artículos en venta. Esta forma de comercio es opuesta al comercio en régimen de libre servicio, donde el consumidor se acerca a los artículos, los elige y los lleva hasta la línea de cajas registradoras para pagar su compra. Características físicas Las tiendas pueden dedicarse a vender un producto determinado tales como ropa, comida o electrónica, o ampliar su surtido a diversos tipos de artículos. Además de las tiendas independientes que funcionan por sí mismas, existen las galerías comerciales y lugares conocidos como centros comerciales donde varias tiendas (locales comerciales) comparten un recinto cerrado. Particularmente tradicionales han sido en Iberoamérica y en España las «tiendas de barrio», «tienda de la esquina» o «tiendita», conocidas también como «tienda de abarrotes» o «misceláneas». En Venezuela reciben el nombre de «abasto» o «bodega». En Puerto Rico y Miami se les llama «grosería» debido al falso amigo de grocery store (no confundir con el término homónimo que significa una palabra o acción ruin o inconveniente). En países como Colombia, estos establecimientos representan más del 75% del total de las ventas de víveres y productos básicos de consumo de las comunidades.2 En España estas tiendas tradicionales, también llamadas «tiendas de ultramarinos», representan el 13 %3 de las ventas de alimentación y productos básicos de droguería-perfumería. Algunas tiendas ofrecen a sus clientes la posibilidad de créditos. Variantes actuales Artículo principal: Tienda en línea Aunque, por otra parte, y dentro del mundo de la tecnología, existen también tiendas exclusivamente virtuales, muchas suelen expandirse creando un sitio web donde el usuario puede adquirir los productos en línea. Algunas tiendas simplemente ofrecen la posibilidad de visionar su catálogo, restringiendo la compra a la tienda física. Establecimiento comercial Establecimiento comercial relacionado con la apicultura, en Madrid (España). Establecimiento comercial es el espacio físico donde se ofrecen bienes económicos (servicios o mercancías) para su venta al público. También se conoce como local comercial, punto de venta, tienda o comercio (teniendo estos últimos términos otros significados).1 Con algunas excepciones (como ciertas panaderías y pastelerías), en los establecimientos comerciales no se suele realizar la fase de producción de los productos que distribuye, limitándose a ejercer un papel intermediario entre el fabricante y el consumidor. Al ser habitualmente el consumidor final el que acude a los establecimientos comerciales, y ser estos abastecidos por mayoristas, su papel intermediador es el denominado de comercio minorista. Lo mismo ocurre en el caso de los locales comerciales destinados a la prestación de servicios (establecimientos de hostelería, peluquerías, etc.) Excepto en algunos casos en que los puestos de venta son de iniciativa pública, o de organizaciones no gubernamentales e instituciones similares, los establecimientos comerciales son lucrativos, es decir, están orientados a la obtención de beneficios para los empresarios que los regentan. Tales empresarios pueden ser los propietarios del local o bien gestionarlo en régimen de arrendamiento. Igualmente, pueden ser grandes cadenas de distribución, pequeños empresarios o bien un caso mixto que combina ambos: la franquicia. En algunos casos, funcionan en régimen de concesión administrativa (como las farmacias en España). Otras denominaciones Establecimiento mercantil Un establecimiento mercantil es el conjunto de elementos físicos o materiales y personales dirigidos a la consecución de un fin determinado, de natural empresarial o mercantil. Así, «establecimiento mercantil» tiene un sentido más amplio que «establecimiento comercial». El establecimiento mercantil, para el derecho, es una organización particular, fruto de la creación intelectual del empresario. Como organización particular, está integrada por diferentes elementos de carácter material y personal, elementos que tienen su valor, y que todo ellos, integrados, conforman sinergias. En el establecimiento mercantil el valor económico tiene una importancia capital porque dicho valor permite el establecimiento de negocios jurídicos; se puede comprar o vender el establecimiento, arrendarlo, entregarlo en usufructo o hipotecarlo. Punto de venta Un «punto de venta» es el lugar o local en el que se atiende a clientes presencialmente, ya bien sea para vender productos o para prestarles algún servicio. Esta expresión proviene de la traducción literal de point of sale o POS en inglés; aunque en ese idioma, la expresión se refiere al punto físico donde se ejecuta la transacción económica, es decir, la caja o la línea de cajas. Hoy existen software que funcionan como: caja registradora, control de inventarios, vendedores. Evolución El antecedente de los establecimentos comerciales se puede encontrar en las ferias durante la Edad Media, donde agricultores, ganaderos y artesanos intercambiaban su productos. Más adelante, para evitar el desabastecimeitno entre feria y feria, surgen los almacenes o pequeños depósitos, donde un comerciante vende los artículos básicos. Así aparece el comercio minorista. Clasificación Establecimiento comercial de bienes Artículo principal: Minorista Los establecimientos comerciales minoristas pueden clasificarse según diversos criterios, siendo los más comunes los referidos a su carácter individual o colectivo (mercado, centro comercial), a su tamaño (pequeños, medianos y grandes establecimientos), al tipo de productos que comercializa (especializado en alimentación, droguería, confección, juguetes, etc.) y, principalmente, al sistema de venta (tradicional, como las farmacias, de libre servicio, como los supermercados, o mixto, como los grandes almacenes). En caso de venta de productos estos locales suelen tener una o varias zonas de exposición de los artículos que venden, casi siempre una zona abierta al exterior o escaparate para atraer al público y otra interna donde los clientes pueden ver los artículos más de cerca y generalmente tocarlos. Además, cuenta con la zona principal, la de atención a los clientes, donde suele haber una caja registradora o un terminal punto de venta. Por último, dependiendo del tamaño del establecimiento y el tipo de artículos que venda, suelen tener un espacio reservado para almacén. Establecimiento comercial de servicios Además, en el sentido más amplio, dentro de establecimientos comerciales se consideran algunos locales no dedicados al comercio, propiamente dicho, sino a otras actividades lúdicas relacionadas con el ocio, como discotecas, bares, restaurantes, hoteles, alquiler de coches, agencias de viajes, cines... En el caso de servicios, los locales tienen una zona de espera más amplia donde los clientes puede ver o leer en expositores, carteles o pantallas los servicios que presta el negocio, y otra zona principal, normalmente aledaña, donde son atendidos (despacho, oficina... en inglés frontoffice). También, dependiendo de los servicios que presten pueden tener otra zona separada donde preparan o realizan estos servicios que se solicitan (trastienda, en inglés backoffice). Beneficios ·0 Permiten agregar una descripción, precio y cantidad de cada producto que llega a la tienda. ·1 Los informes diarios y periódicos ayudan a la contabilidad de la empresa. ·2 Facilidad para la creación de un punto de venta ya que solo es necesaria una PC y los componentes periféricos como caja de efectivo. ·3 Fácil información que agiliza la toma decisiones. ·4 Manejo de reportes y consultas personalizadas, relación de clientes y cuentas por pagar. Situación en España El establecimiento viene definido en los artículos 3, 85 y 86 del Código de Comercio. Si el comprador es un consumidor final entonces se habla de comercio minorista (en España, código 52 de la Clasificación Nacional de Actividades Económicas —CNAE—). Si los productos que se venden son vehículos de motor y sus accesorios, además de combustible, entonces se clasifica dentro del código CNAE 50. En España existen restricciones jurídicas a la libre apertura de grandes establecimientos comerciales minoristas, variando dicha definición según la Comunidad Autónoma de que se trate, pues esta competencia dejó de pertenecer en exclusiva al Estado desde mediados de los años 90 del siglo XX. En general, se considera gran establecimiento comercial aquel que supera los 2.500 metros cuadrados de superficie de venta.