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AUXILIARES DE LA JUTICIA Y PRETENSIONES

PRESENTADO POR

MARÍA LUISA TORRES HERRERA

DOCENTE

HERNAN DARIO NICHOLLS GARCÍA

UNIVERSIDAD LIBRE: DERECHO SEGUNDO B

CARTAGENA D.T.C, COLOMBIA

28 DE AGOSTO DEL 2019


1. AUXILIARES DE JUSTICIA
1.1 NATURALEZA JURIDICA DE LOS AUXILIARES DE JUSTICIA
Se encuentran descritos en el capítulo II del Código del Procedimiento Civil titulado
“Auxiliares de Justicia”, en el artículo 8, se dice que los cargos de auxiliares de la justicia
son oficios públicos que deben ser desempeñados por personas idóneas, de conducta
intachable, excelente reputación e incuestionable imparcialidad. Para cada oficio se
exigirán versación y experiencia en la respectiva materia y, cuando fuere el caso, título
profesional legalmente expedido.

1.2 QUIENES SON LOS AUXILIARES DE JUSTICIA


Los cargos de auxiliares de la justicia son oficios públicos ocasionales que deben
ser desempeñados por personas idóneas, imparciales, de conducta intachable y
excelente reputación. Para cada oficio se requerirá idoneidad y experiencia en la
respectiva materia y, cuando fuere el caso, garantía de su responsabilidad y
cumplimiento. Se exigirá al auxiliar de la justicia tener vigente la licencia, matrícula o
tarjeta profesional expedida por el órgano competente que la ley disponga, según la
profesión, arte o actividad necesarios en el asunto en que deba actuar, cuando fuere el
caso.

1.3 DESIGNACIÓN DEL AUXILIAR DE JUSTICIA


Para la designación de los auxiliares de la justicia se observarán las siguientes reglas:
1. La de los peritos, secuestres, partidores, liquidadores, curadores ad lítem, contadores,
agrimensores, síndicos, intérpretes y traductores, se hará por el magistrado
sustanciador o por el juez del conocimiento, de la lista oficial de auxiliares de la
justicia. Los testigos de la celebración del matrimonio civil, serán designados por los
contrayentes.
En el auto de designación del curador ad lítem, se incluirán tres nombres escogidos
de la lista de dichos auxiliares de la justicia. El cargo será ejercido por el primero que
concurra a notificarse del auto admisorio o del mandamiento ejecutivo, según sea el
caso, acto que conllevará la aceptación de la designación. Los otros dos auxiliares
incluidos en el auto conservarán el turno de nombramiento en la lista. En el mismo
auto el Juez señalará los gastos de curaduría que debe cancelar la parte interesada.
El pago podrá realizarse mediante consignación a órdenes del juzgado o directamente
al auxiliar y acreditarse en el expediente. Si en el término de cinco (5) días, contados
a partir de la comunicación de su designación, no se ha notificado ninguno de los
curadores nombrados, se procederá a su reemplazo observando el mismo
procedimiento.
2. La designación será rotatoria, de manera que la misma persona no pueda ser
nombrada por segunda vez sino cuando se haya agotado la lista. Empero, si al
iniciarse o proseguirse una diligencia faltaren los auxiliares o colaboradores
nombrados, podrá procederse a su reemplazo en el acto, con cualesquiera de las
personas que figuren en la lista correspondiente, y estén en aptitud para el
desempeño inmediato del cargo. Cuando en el respectivo despacho faltare la lista, se
acudirá a la de otro del mismo lugar, y en su defecto se hará la designación en persona
debidamente calificada para el oficio.
3. Los traductores e intérpretes serán únicos, a menos que se trate de documentos o de
declaraciones en diferentes idiomas y que el auxiliar no sea experto en todos estos.
4. Las partes podrán de consuno, en el curso del proceso, designar peritos y secuestre,
y reemplazar a este.
5. Los secuestres podrán designar bajo su responsabilidad y con autorización judicial,
los dependientes que sean indispensables para el buen desempeño del cargo y
señalar sus funciones. El juez resolverá al respecto y fijará la asignación del
dependiente, en providencia que no admite apelación.
6. El curador ad lítem de los relativamente incapaces será designado por el juez, si no
lo hiciera el interesado.
7. Los partidores y liquidadores podrán ser designados conjuntamente por los
interesados, dentro de la ejecutoria de la providencia que decrete la partición o la
liquidación, teniendo en cuenta lo previsto en el artículo 608.

1.4 HONORARIOS DEL AUXILIAR DE JUSTICIA


Los honorarios respectivos constituyen una equitativa retribución del servicio, y no podrán
gravar en exceso a quienes solicitan que se les dispense justicia por parte del Poder
Público. Hace parte de las causales de exclusión de la lista de auxiliares de justicia la
siguiente: “Al auxiliar de la justicia que haya convenido honorarios con las partes o haya
solicitado o recibido pago de ellas con anterioridad a la fijación judicial o por encima del
valor de esta”. Las autoridades judiciales excluirán de las listas de auxiliares de la justicia,
e impondrán multas hasta de diez (10) salarios mínimos legales vigentes.

2. PRETENSIONES
2.1 NATURALEZA JURIDICA DE LAS PRETENSIONES
La pretensión procesal es una declaración de voluntad por la que se solicita una actuación
de un órgano jurisdiccional frente a esa persona determinada y distinta del autor de la
declaración.
La verdadera naturaleza jurídica de la pretensión; a diferencia de la que ordinariamente
suele atribuirse a la acción, la pretensión es un acto y no un derecho, algo que se hace,
pero no que se tiene, lo que no quiere decir que tal acto no pueda configurarse como la
manifestación de un poder atribuido a una persona; pero este poder, como se ha repetido
ya, se desenvuelve en todo fuera del ámbito del proceso y es diferente para éste.
2.2 CLASES DE PRETENSIONES
Diversos son los criterios empleados para clasificar las pretensiones: se las agrupa
según la rama del derecho a que pertenecen, o de acuerdo con el derecho material en
que se apoyan, o de conformidad con la clase de proceso, o con el contenido de la
sentencia que se pide sea dictada por el Estado, o, aún más, con arreglo a la pretensión
misma. Veámoslo:
a) En atención a la rama del derecho a que pertenece, se clasifica la pretensión en
penal, laboral, civil, contencioso-administrativa, etc.
b) De conformidad con el derecho material en que se apoya la pretensión, se habla
de pretensiones reales, personales y mixtas, según esté basada en un derecho
real, personal o en ambos.
c) Siguiendo el criterio de clasificación orientado por la clase de proceso en que se
tramita la pretensión, se habla de pretensiones ordinarias, abreviadas, de
jurisdicción voluntaria, etc., si el proceso es ejecutivo, abreviado, etc. Esta división
no es técnica, pues más que clasificación de pretensiones, es de procesos.
d) De conformidad con el contenido de la sentencia que se pide al Estado, se tiene
la más conocida y técnica de las clasificaciones de pretensiones: la que las divide
en pretensiones declarativas, constitutivas, de condena y cautelares, de las cuales
las tres primeras reciben el nombre genérico de pretensiones de conocimiento.
PRETENSIONES DE CONOCIMIENTO
 Pretensión declarativa: La pretensión declarativa no busca crear un derecho sino,
fundamentalmente, dar por concluido un estado de incertidumbre, reconociendo una
relación existente o negando definitivamente la misma. Así, los efectos de la decisión
que declara que una persona es hija extramatrimonial no se surten sólo a partir de la
ejecutoria de la sentencia, porque tal calidad se tuvo desde el momento del
nacimiento, sólo que a partir de la ejecutoria de la sentencia desapareció toda duda.
Es requisito esencial para poder adelantar un proceso con base en una pretensión
declarativa, que exista una relación jurídica incierta que, se origine en una incertidumbre
ha de ser objetiva.
Dadas las características de la pretensión declarativa, los procesos que se adelantan
con base en ella no exigen de la parte demandada determinada conducta, no exigen una
contraprestación; únicamente se trata de obtener precisión sobre determinada relación
jurídica. De ahí que sea requisito esencial para su ejercicio el que no exista otro medio
legal para hacer cesar el estado de incertidumbre, pues si los fines perseguidos pueden
lograrse por otras vías, se debe acudir a ellas.
Así, por ejemplo, si tengo incertidumbre acerca de quién es propietario de un
inmueble, es obvio que no debo acudir al juez para que la defina, en primer lugar porque
la duda es subjetiva, no es general y, además, porque la autoridad administrativa
encargada del registro de la propiedad inmueble, es la llamada a dar claridad sobre el
punto.
Las pretensiones declarativas de certeza, o puras como también se les llama, son a
todas luces las más escasas, pero importantes son los procesos donde ellas se ejercitan.
 Pretensión constitutiva: Esta pretensión, lo mismo que la anterior, busca la
declaración de determinada relación jurídica, declaración que, y en esto estriba la
diferencia, tiene "por objeto obtener la constitución, modificación o extinción de una
relación de derecho por sentencia judicial".
Distintivo básico de la pretensión constitutiva es el buscar mediante la sentencia un
nuevo estado jurídico, anteriormente inexistente, cambio jurídico que se opera por la
declaración contenida en la sentencia, por manera que, si no existe esa declaración,
ninguna modificación tiene efecto. Así, la sentencia que declara la nulidad de un
matrimonio, tiene como base una pretensión eminentemente constitutiva, por cuanto su
alcance no se limita a declarar esa nulidad, sino que, de inmediato, da origen a una serie
de modificaciones: los contrayentes dejan de ser casados y toman nuevamente la calidad
de solteros; el matrimonio queda disuelto; cesan las obligaciones entre los cónyuges, la
sociedad conyugal, si existe, termina, etc.
 Pretensiones de condena: Se persigue a través de la pretensión de condena que se
declare a cargo de la parte demandada la existencia de una determinada obligación
o, en otros términos, que se le condene al cumplimiento de una prestación de dar, de
hacer o de no hacer.
Los ejemplos que ilustran este tipo de pretensión abundan. Así, la demanda para que
se condene al pago de una indemnización proveniente de responsabilidad civil
contractual o extracontractual.
 Las pretensiones ejecutivas: Tienen por objeto que se imponga en la sentencia el
cumplimiento de una obligación, para así dar efectividad a la prestación que ya fue
declarada en un fallo judicial o surgió de una declaración de voluntad del asociado,
de manera tal que cuando se ejercitan no se busca una declaración o condena; tan
solo su cumplimiento, Io que evidencia el carácter diferente que ellas tienen, pues en
estos casos no se le pide al juez que imponga, sino que ordene cumplir.
 Pretensiones preservativas o cautelares: Por sí misma, la pretensión cautelar no
tiene razón de ser; pero, conjuntamente, con otra pretensión, cumple una importante
finalidad garantista: da a las resoluciones judiciales el respeto que merecen al permitir
que se puedan cumplir puesto que, de no existir este tipo de pretensión, serían
nugatorios los efectos de muchas de las sentencias proferidas.
Son medidas de aseguramiento, cuya existencia está condicionada a la de la
pretensión principal, de modo que, si la pretensión principal es desestimada o negada
por el juez, deja, consecuentemente, de tener efecto la pretensión cautelar.
Las pretensiones cautelares son de muy diversa índole y pueden versar bien sobre
las personas o sobre las cosas. Así, se podrá solicitar medidas cautelares sobre las
personas cuando se trata de un proceso de interdicción y se teme por la vida del presunto
demente a fin de que se le restrinja su derecho de locomoción y se le interne en una
institución adecuada para su tratamiento y recuperación. La autorización de residencia
separada de los cónyuges en los procesos de separación de cuerpos también es una
pretensión cautelar. Pretensiones cautelares respecto de los bienes, son el embargo, el
secuestro y el registro de la demanda, entre otras.
PRETENSIONES SEGÚN SU CONTENIDO
Por último, existe una clasificación de pretensiones que se hace según la naturaleza
de la pretensión misma, de Io que en concreto se solicita al juez. Se habla entonces de
pretensión de divorcio, de lanzamiento, de nulidad del contrato, reivindicatoria, de
separación de bienes, etc. En este caso el nombre de la pretensión implica su contenido,
pues Io que se pide al Estado es que decrete el divorcio, la nulidad del contrato, el
lanzamiento, la restitución de la posesión etc.

2.2.1 PRETENSIONES PRINCIPALES Y SUBSIDIARIAS


ACUMULACIÓN DE PRETENSIONES
La explicación separada que se ha hecho de los anteriores tipos de pretensiones no
significa, en modo alguno, que ellas no se puedan presentar en forma acumulada dentro
de un mismo proceso, pues, como Io veremos al estudiar este fenómeno procesal,
siempre que se reúnan los requisitos que la ley establece (art.82) es procedente
presentarlas en forma acumulada; así, por ejemplo, si demanda para que se declare una
filiación extramatrimonial, además se solicita la petición de herencia y se pide el registro
de la demanda bien se observa el simultáneo empleo de pretensiones declarativas pura,
de condena y cautelar.

PRINCIPALES
En este tipo de acumulación el demandante formula una o más pretensiones principales
con o sin pretensiones consecuenciales y una o más pretensiones subsidiarias para que
el juez resuelva sobre estas últimas en el caso de que las principales no sean acogidas
por el juez. Es la forma correcta de acumular pretensiones principales que sean
contradictorias entre sí. Ejemplo: Cuando en una demanda se solicita como pretensión
principal la resolución de un contrato con la consecuente indemnización de perjuicios o
que, en subsidio, o sea, para el evento en que no se estime dicha pretensión, se ordene
el cumplimiento del contrato con la consecuente indemnización.

SUBSIDIARIAS
Es subordinada cuando la pretensión queda sujeta a la eventualidad de que la propuesta
como principal sea desestimada; es alternativa cuando el demandado elige cuál de las
pretensiones va a cumplir; y es accesoria cuando habiendo varias pretensiones, al
declararse fundada la principal, se amparan también las demás.

2.3 LITIS CONSORTES


Se tiene establecido que únicamente pueden existir dentro del proceso dos partes,
la demandante y la demandada, pero acontece que ellas pueden estar integradas por un
número plural de sujetos de derecho. Cuando tal característica se presenta surge el
fenómeno procesal conocido universalmente como litisconsorcio, el cual se denomina
activo, pasivo o mixto, según la diversidad de sujetos de derecho se presente en la
posición de demandantes, demandados o en ambas.
Ahora bien, cuando esos varios sujetos de derecho deben obligatoriamente, so
pena de invalidez de la actuación surtida a partir del fallo de primera instancia, estar
vinculados al proceso, la figura se denomina litisconsorcio necesario; si esa pluralidad se
da por razones de economía procesal y comparecen voluntariamente varios en
cualquiera de las dos posiciones mencionadas, encontramos el litisconsorcio facultativo
y, cuando la diversidad de sujetos obedece a que, no obstante que no es obligatoria la
vinculación de algunos de ellos al proceso dadas las características de determinadas
relaciones sustanciales, la sentencia les es igualmente oponible y por eso
voluntariamente se pueden hacer presentes dentro del mismo, se estructura el
denominado litisconsorcio cuasinecesario.
Cualquiera que sea la forma que adopte el litisconsorcio siempre sus integrantes
serán considerados como parte, así intervengan después de establecida la relación
jurídico-procesal, porque el sujeto procesal que en tal calidad interviene, siempre se ubica
como integrante o de la parte demandante o de la parte demandada, sin que interese en
cuál de las tres calidades analizadas lo haga.
Procede ahora el análisis de cada una de las tres modalidades de litisconsorcio
mencionadas.
2.3.1 LITISCONSORCIO NECESARIO
Tiene lugar cuando la presencia de los sujetos que lo integran no es requisito para
la debida integración del contradictorio, porque ostentan relaciones jurídicas
independientes respecto de la otra parte procesal y solo por razones de conveniencia o
de economía concurren a un mismo proceso.
La conformación de este tipo de litisconsorcio depende de la voluntad de cada una
de las personas que lo integran y su ausencia no vicia la validez del proceso. El
litisconsorcio necesario se presenta cuando la cuestión litigiosa tiene por objeto una
relación jurídica material, única e indivisible, que debe resolverse de manera uniforme
para todos los sujetos que integran la parte correspondiente, lo cual impone su
comparecencia obligatoria al proceso por ser un requisito imprescindible para adelantarlo
válidamente.
El litisconsorcio necesario tiene su fundamento en la naturaleza de la relación
sustancial objeto del litigio definida expresamente por la ley o determinada mediante la
interpretación de los hechos y derechos materia del proceso.
En el primer evento basta estarse a lo dispuesto por la ley, pero cuando se trata
de establecerlo con fundamento en la relación objeto del litigio, se impone un análisis
cuidadoso para establecer la naturaleza del asunto y la imposibilidad de proferir un
pronunciamiento de fondo, sin la comparecencia de un número plural de sujetos.
La característica esencial del litisconsorcio necesario es el supuesto de que la
sentencia haya de ser única y de idéntico contenido para la pluralidad de partes en la
relación jurídico-procesal por ser única la relación material que en ella se controvierte;
unicidad ésta que impide hacerle modificaciones que no puedan operar conjuntamente
frente a los varios sujetos. En el litisconsorcio facultativo, en cambio, como a la pluralidad
de partes, corresponde también una pluralidad de relaciones sustanciales controvertidas,
es posible entonces que en cierto momento las causas reunidas se separen y cada uno
vuelva a ser objeto de proceso separado; y aunque el juicio continúa siendo único hasta
el fin, nada impide que a las distintas causas se les dé decisión diferente.

2.3.2 LITISCONSORCIO FACULTATIVO


El elemento diferenciador de este litisconsorcio con el facultativo es el carácter
imperioso de la relación sustancial materia del litigio: mientras que en el litisconsorcio
facultativo los sujetos tienen relaciones jurídicas independientes, en el necesario existe
una unidad inescindible respecto del derecho sustancial en debate.
Cuando la presencia de pluralidad de personas demandantes o demandadas no
es requisito necesario para la debida integración del contradictorio por tratarse de
relaciones jurídicas diferentes e independientes, pero por razones de conveniencia o
economía procesal se autoriza la definición de ellas en un solo proceso estamos frente
al litisconsorcio facultativo que, como su nombre lo indica se integra de acuerdo con el
querer del sujeto de derecho autorizado para hacerlo porque al juez no le está permitido
hacerlo.
Múltiples son los casos en que puede tener lugar este litisconsorcio, por ejemplo,
en los procesos por responsabilidad civil extracontractual, cuando los perjuicios han sido
ocasionados a varias personas con un mismo hecho, éstas pueden demandar por
separado, o unirse para adelantar un solo proceso.
Según el artículo 50 los actos de cada uno de los litisconsortes facultativos no
redundan sino en provecho o perjuicio de quien los realizó, y cada uno puede realizar
autónomamente los actos de disposición sobre los derechos en litigio. Así, cuatro
personas pueden demandar a una compañía aérea por los perjuicios sufridos con ocasión
de un accidente, integrando con ello un litisconsorcio facultativo; en esta hipótesis,
cualquiera de esas personas puede, separadamente, desistir, transigir o realizar
cualquier otra manifestación que implique disposición de sus derechos, sin afectar los de
los otros litisconsortes.
La sentencia que se dicte en el proceso puede ser de contenido diverso, aun
contrario para los distintos litisconsortes facultativos. Así, es viable que se acojan las
pretensiones de uno de los demandantes y se rechacen las de otros por cuanto a
diferencia de lo que ocurre en el litisconsorcio necesario, no existe comunidad de suerte
entre estos intervinientes debido a la citada independencia de las relaciones jurídicas en
debate.
En relación con los recursos existe igualmente autonomía frente a los efectos de
los mismos, especialmente cuando sc trata de los procedentes contra las sentencias. Si
se dicta una sentencia en la cual, por ejemplo, se nieguen las pretensiones de los
litisconsortes, y solo uno de ellos apela, el superior debe limitarse a resolver lo
concerniente al apelante y si considera que es del caso revocar la determinación, lo hará
únicamente para aquel, pues se entiende que los otros, al guardar silencio y no haber
apelado, aceptaron el fallo del juez de primera instancia el que para ellos quedó
ejecutoriado. De similar modo sucede si se interpone tan solo por uno de ellos el recurso
de casación o el de revisión.

2.3.3 LITISCONSORCIO CUASINECESARIO


El litisconsorcio cuasinecesario se caracteriza porque no es obligatoria la
comparecencia del otro sujeto y aunque no participe o no haya sido citado, los efectos de
la sentencia lo cobijan.
El litisconsorcio eventual es aquel en el que varias personas están legitimadas
pasiva o activamente, pero el ordenamiento no exige que actúen conjuntamente, aunque
podrían hacerlo en un único procedimiento (que, evidentemente, concluiría con una única
sentencia). Sería por ejemplo el caso de la impugnación de los acuerdos sociales nulos.
Aquí estaría legitimados todos los accionistas, administradores y cualquier tercero con
interés legítimo, pero la Ley no impone que tengan que actuar conjuntamente, es decir,
no tienen necesidad legal de actuar conjuntamente, pero la necesidad de evitar
sentencias contradictorias impone que solo exista un proceso sobre aquellas
impugnaciones sobre el acuerdo societario.
Acorde con el artículo 62 del Código General del Proceso, afirmó que pueden
intervenir como litisconsortes cuasinecesario de un extremo procesal y con las mismas
facultades “quienes sean titulares de una determinada relación sustancial a la cual se
extiendan los efectos jurídicos de la sentencia, y que por ello estaban legitimados para
demandar o ser demandados en el proceso”.
Acorde con lo precedente, se concluye que la persona que pueda verse afectada
de manera favorable o desfavorable con los efectos de la sentencia está facultada para
acudir al proceso por medio de esta figura jurídica.

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