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Apuntes de Cinetica Quimica PDF
Apuntes de Cinetica Quimica PDF
27 de febrero de 2013
Índice general
2. Técnicas Experimentales 85
2.1. Consideraciones generales . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 87
2.2. Control del medio . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 89
2.2.1. Concentración inicial de los reactantes . . . . . . . . . . . 89
2.2.2. Pureza de los disolventes . . . . . . . . . . . . . . . . . . 91
2.2.3. Mantenimiento del pH . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 91
2.2.4. Mantenimiento de la fuerza iónica . . . . . . . . . . . . . 92
2.3. Técnicas directas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 93
4 ÍNDICE GENERAL
Bibliografía 317
Introducción a la Cinética
Química
1.1 Breve historia 15
Índice
1.1. Breve historia . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 15
1.2. Iniciación de las reacciones químicas . . . . . . . . . . . . 18
1.3. Velocidad de reacción . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 18
1.3.1. Reactores por lotes . . . . . . . . . . . . . . . . . . 20
1.3.2. Reactores CSTR . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 21
1.3.3. Ley de velocidad en reactores tubulares . . . . . . . 24
1.3.4. Otras expresiones de la velocidad de reacción . . . . 26
1.4. La ley de velocidad . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 28
1.5. El Mecanismo de la Reacción . . . . . . . . . . . . . . . . 32
1.5.1. Clasificación de los Mecanismos de Reacción . . . . 34
1.6. Propuesta del Mecanismo de Reacción . . . . . . . . . . . 35
1.7. Mecanismo y ley de velocidad . . . . . . . . . . . . . . . . 37
1.8. Simplificación de las ecuaciones cinéticas . . . . . . . . . 39
1.8.1. Hipótesis de Bodenstein y Chapman . . . . . . . . . 39
1.8.2. Método de equilibrio y etapa determinante de la ve-
locidad de la reacción . . . . . . . . . . . . . . . . . 50
1.9. Principio de Microreversibilidad . . . . . . . . . . . . . . 58
1.10. Factores que influyen en la velocidad . . . . . . . . . . . . 60
1.10.1. Variación con la temperatura . . . . . . . . . . . . . 60
1.10.2. Variación con la presión . . . . . . . . . . . . . . . 72
1.10.3. Variación de k con la fuerza iónica . . . . . . . . . . 73
1.10.4. Variación de k con la constante dieléctrica . . . . . . 77
1.11. Cuestiones . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 81
Los primeros estudios de la acción de las enzimas los llevó a cabo Brown
quien, en 1.902, estudió la inversión de la sacarosa por la invertasa. Los resulta-
dos de Brown fueron generalizados por Michaelis y Menten quienes, en 1.913,
publicaron su famoso mecanismo, el cual fue ampliado por Briggs y Haldane en
1.925. Los mecanismos con dos intermedios fueron descubiertos por Schwert y
Eisenberg en 1.949, y, en 1.956, King y Altman formularon mecanismos genera-
les para las reacciones enzimáticas.
Respecto de las técnicas experimentales, hay que decir que hasta el año 1.923
no había forma de medir reacciones cuyo tiempo de semireacción fuera inferior
a los 15 segundos; en este año, Hartigde y Roughton introdujeron la técnica de
flujo continuo que permitió estudiar reacciones cuyos tiempos de semireacción
estuvieran ente 1 y 2 ms. Los años 1.940-50 vieron la aparición y desarrollo de
la técnica de fotólisis por destellos, la cual fue desarrollada por Norrish y Porter.
En 1.963, el desarrollo de componentes electrónicos fiables permitió el desarrollo
de la técnica de flujo detenido por Chance, lo cual impulsó definitivamente el
estudio de las reacciones enzimáticas. En el último tercio del siglo, la Cinética
Química se benefició del avance tecnológico. La aparición de técnicas electrónicas
automatizadas, el desarrollo de láseres y de nuevos detectores ultrarápidos hizo
posible el establecimiento de leyes de velocidad de reacciones con tiempos de
vida media del orden del nanosegundo.
Figura 1.1: Mecanismo de la hidrólisis del acetato de fenilo catalizada por el imidazol.
descritas tienen una base físico-química común. Si una reacción procede lenta-
mente, es debido a que debe superar una barrera de energética muy alta. Esta
energía es necesaria para vencer la repulsión electrostática que ejercen los cam-
pos eléctricos internos de las moléculas durante su acercamiento, etapa durante la
cual se rompen y forman los nuevos enlaces.
Para superar la barrera hay que suministrar energía en cualquiera de sus for-
mas: calorífica, luminosa o eléctrica, con objeto de activar las moléculas o bien,
alternativamente, se debe rebajar la barrera de activación; en este último caso, se
añade a la mezcla de reacción un catalizador, una especie química que permite
que la reacción proceda por un mecanismo distinto cuya barrera energética sea
menor.
Figura 1.3: Representación del flujo de alimentación del CSTR bajo la hipótesis de que
la degradación del herbicida sea de segundo orden. La pendiente de la representación es:
(0,55 ± 0,01) mL L/(mol s).
demos aplicar la ecuación (1.3) para resolver el problema. Puesto que trabajamos con una
f = cV̄ , R = V rV
V̄ (c0 − c) = −V kcn
m 0,55 L
k= = = 1,1 × 10−3
V 500 mol s
De acuerdo con los datos del problema la ecuación general [1.4] toma la forma particular
Figura 1.4: Representación de la concentración de reactantes (cA (t) y cB (t)) y del pro-
ducto (cC (t)) para los datos del problema.
d
Véase el manual de J.W. Eaton en www.octave.org.
V̄A 0 V̄s
0= cA − c?A − kc?A c?B
V V
V̄B 0 V̄s ?
0= c − cB − kc?A c?B
V B V
V̄s ?
0 = − cC + kc?A c?B
V
c?A =0,0018896 M
c?B =0,0043896 M
c?C =0,0031104 M
Operando:
νi
rV dV
dci = (1.6)
v̄
La resolución de la ecuación 1.6 necesita del conocimiento de la forma mate-
mática de la velocidad de reacción. Como ejemplo calcularemos el perfil de una
k
reacción de primer orden (A−→B).
Ejemplo 1.3. Perfil de concentraciones de un reactor tubular en donde se produce
una reacción de primer orden.
En este caso la velocidad de reacción vendrá dada por la expresión: rV = kcA , por
lo que el sistema de ecuaciones 1.6 tomará la forma:
1
dcA = − kcA dV (1.7)
v̄
1
dcB = + kcA dV (1.8)
v̄
La ecuación diferencial 1.7 es de variables separables:
dcA k
− = dV (1.9)
cA v̄
En la cabeza del reactor (V = 0), la concentración del reactante será igual a su composi-
ción inicial c0A , mientras que a una distancia l de la cabecera, la concentración será igual
a c(l), siendo el volumen en esta posición V (l) = πr2 l. Integrando entre estos límites se
obtiene: Z cA (l) Z πr2
dcA k
− = dV (1.10)
0
cA cA 0 v̄
La expresión 1.11 indica que la fracción remanente del reactante (α = cA /c0A ) es función
de la posición y de del gasto de alimentación.
Expresión Comentarios
Velocidad en base molar. Expresa la variación abso-
dni luta de moles por unidad de tiempo en un reactor por
Ri =
dt lotes. Depende del tamaño del reactor.
Dimensiones S.I.: mol s−1 .
Velocidad en base molar por unidad de volumen.
1 dni Expresa la variación del número de moles por unidad
RV =
νi V dt de tiempo y de volumen de mezcla de reacción. Inde-
pendiente del tamaño del reactor.
Dimensiones S.I.: mol s−1 m−3 .
Velocidad molar. Íd. que en el caso anterior, solo que
1 dci se utiliza para mezclas de reacción líquidas de volu-
rV =
νi dt men constante o de mezclas gaseosas residentes en
reactores de volumen constante. Independiente del ta-
maño del reactor.
Dimensiones S.I.: mol s−1 m−3 .
Velocidad másica. Expresa la variación del número
1 dni de moles convertidos por unidad de tiempo y de masa
RW =
νi W dt de catalizador. Útil para catalizadores cuya superficie
específica se desconozca.
Dimensiones S.I.: mol s−1 kg−1 .
Velocidad superficial. Expresa la variación del nú-
1 dni mero de moles convertidos por unidad de tiempo y
RS =
νi S dt de superficie de catalizador. En el caso de reacciones
electroquímicas, S es la superficie activa del electro-
do.
Dimensiones S.I.: mol s−1 m−2 .
ni − n0i
ζ= > 0 → ni = n0i + νi ζ (1.12)
νi
dni dζ dζ 1 dni
= νi → = =R (1.13)
dt dt dt νi dt
1 d ni 1 dci
rV = = (1.15)
νi dt V νi dt
Para una reacción elemental, coinciden los órdenes de reacción y el valor absoluto
del coeficiente estequiométricos. En esta situación, el orden global de la reacción
recibe el nombre de molecularidad. El significado físico de esta cantidad es el nú-
mero de especies químicas que interaccionan simultáneamente por colisión para
producir los productos.
Así, hablamos de reacciones unimoleculares cuando una molécula se trans-
forma espontáneamente en productos sin colisionar con otras moléculas de su
misma clase. En las reacciones bimoleculares, los productos aparecen como con-
secuencia del choque de dos moléculas de reactantes. Por último, la colisión debe
producirse entre tres moléculas durante una reacción termolecular.
Puesto que la probabilidad de que tres moléculas se encuentren simultánea-
mente en un punto del espacio es muy pequeña, existen muy pocas reacciones
elementales termoleculares. Las reacciones unimoleculares elementales también
son raras debido a la difícil mecanismo de activación de la molécula, por lo que la
mayoría de las reacciones elementales son bimoleculares.
Es obvio que esta definición conduce a una constante cuando la reacción sigue for-
malmente un orden; en efecto, tomando logaritmos en ambos lados de la ecuación
de velocidad (1.19),
X
ln(rV ) = ln(k) + αi ln(ci ) (1.22)
i
y tras derivar se obtiene el orden de reacción, como era de espera una constante:
∂ ln(rV )
= αi (1.23)
∂ ln(ci )
Si la reacción no sigue formalmente un orden, se observa que éste varía a lo largo
de la reacción. La observación de la variación del orden de la reacción es siempre
indicativo de la complejidad de la reacción y de la necesidad de aplicar métodos
de análisis de datos más sofisticados para extraer información cinética. Veamos la
variación del orden de reacción en el siguiente ejemplo.
Ejemplo 1.4. Variación del orden de reacción de una reacción que no sigue formal-
mente un orden.
Supongamos que una determinada reacción entre un componente A y otro B para dar
productos sigue la ley de velocidad que se muestra a continuación:
k1 [A][B]p
rV = (1.24)
1 + k2 [B]q
De acuerdo con la definición de orden de reacción dada en la ecuación (1.21), debemos
tomar logaritmos naturales en ambos miembros de la ley de velocidad, derivar respecto
de la concentración del componente que interese y multiplicar por su concentración. Para
el componente B se cumple que:
∂ ln(rV ) k2 q[B]q
αB = [B] =p− (1.25)
∂[B] 1 + k2 [B]q
y para el componente A:
∂ ln(rV ) 1
αA = [A] = [A] =1 (1.26)
∂[A] [A]
Concluimos que la reacción sigue formalmente un orden respecto del componente A, pero
no respecto de B.
La parte superior de la figura 1.6 muestra la variación de la concentración de B con el
tiempo,i , mientras que la parte inferior ilustra el orden de reacción respecto de B obtenido
tras substituir la concentración de esta especie en la relación (1.25). Se observa que αB
está próximo a −1 al principio de la reacción (pues [B] ≈ [B]0 por lo que k2 [B]20 =
50 >> 1 y αB ≈ p − q = 1 − 2 = −1). Un valor negativo del orden de reacción indica
que la elevada concentración inicial de B inhibe la reacción. En cambio, hacia el final de
la reacción, se cumple que la [B] → 0 y por tanto αB ≈ p = 1 − 0 = 1, por lo que la
velocidad de reacción es proporcional a la concentración del reactante B.
i
La concentración se obtuvo por integración numérica de las ecuaciones diferenciales que rigen
la variación temporal de A y B.
Para entender las ecuaciones de la tabla (1.4) debemos de tener en cuenta que
el rendimiento es igual al grado de avance de la reacción, ζ = (n0i − ni )/νi ,
dividido por el máximo grado de avance que podría alcanzar la reacción si esta
fuera irreversible (ζmáx = n0l /νl ).
k
La mayor parte de las reacciones que ocurren en disolución no pueden considerarse elemen-
tales. No obstante, se han descubierto y estudiado un gran número de reacciones en fase gas que
cumplen con las condiciones anteriormente mencionadas. En la tabla (1.6) se recogen algunas reac-
ciones elementales bimoleculares. Obsérvese que son reacciones muy sencillas en las cuales se
intercambia un átomo o radical entre las moléculas de reactantes.
Los cuatros primeros requisitos los suele cumplir un conjunto de mecanismos más
o menos amplio, por lo que es el quinto requisito el que se utiliza para elegir un
mecanismo frente a otros.
Para poder aplicar este último requisito, debemos entender que es un inter-
medio de reacción “razonable”. En su paso de reactantes a productos, como ya
se mencionó, algunos enlaces se forman y otros se rompen formando especies
intermedias a través de las cuales transcurre la reacción. Debido a la naturaleza
altamente reactiva de estas especies pocas veces será posible aislarlas y caracte-
rizarlas; muchas veces tampoco será posible detectarlas puesto que se encuentran
en muy baja concentración. En estas circunstancias, simplemente se imaginan es-
tructuras plausibles (razonables, probables) del compuesto intermedio.
Para proponer estructuras debemos basarnos en algunos principios:
Medida de alguna señal física transitoria (r.m.n, e.p.r., banda IR, UV. . . )
que permita determinar la estructura del centro de reacción.
r1 = k1 [B][Q]
r2 = k2 [S1 ]
r3 = k3 [B][S1 ]
r4 = k4 [S2 ]
Velocidad Q B S1 S2 P
r1 = k1 [B][Q] –1 –1 1 0 0
r2 = k2 [S1 ] 1 1 –1 0 0
r3 = k3 [B][S1 ] 0 –1 –1 1 0
r4 = k4 [S2 ] 0 0 0 –1 1
m
Recordemos que ésta consiste en un sistema homogéneo de ecuaciones diferenciales ordinarias
cuya solución es la concentración de las especies en función del tiempo.
La tabla tiene tantas filas como reacciones y tantas columnas como especies. En la primera
columna se introducen las velocidades de las reacciones elementales. A continuación se
rellenan las filas introduciendo en cada casilla el coeficiente estequiométrico con que
participa en la reacción i la especie j. La aplicación de la Regla 2 para obtener la derivada
de la concentración de la especie j respecto del tiempo se reduce a multiplicar, casilla
a casilla de la misma fila, la columna primera por la columna j-ésima y a sumar los
productos obtenidos. Por ejemplo, si deseamos obtener la variación de Q con el tiempo
tendremos:
d[Q]
= −1 × r1 + 1 × r2 + 0 × r3 + 0 × r4 = −k1 [B][Q] + k2 [S]1
dt
La metodología permite obtener fácilmente el modelo matemático asociado al mecanis-
mo de reacción propuesto. Obsérvese que éste es un sistema de ecuaciones diferenciales
ordinarias, autónomas y no lineales, tal como se indicó en la ecuación (1.19).
Las reglas expuestas permiten asociar de forma unívoca un modelo matemático a
un modelo químico. Sin embargo, el sistema de ecuaciones resultante, autónomon
n
Un sistema de ecuaciones diferenciales se denomina autónomo cuando la variable indepen-
diente, el tiempo t, no aparece de forma explícita en las ecuaciones diferenciales.
d[A]
= −k1 [A] + k−1 [X] (1.27)
dt
d[X]
= k1 [A] − k−1 [X] − k2 [X] + k−2 [P] (1.28)
dt
d[P]
= k2 [X] + k−2 [P] (1.29)
dt
Incluso, para un sistema tan sencillo cómo éste, la integración del sistema de ecua-
ciones diferenciales presenta cierta complejidad. ¿Se puede reducir ésta? Encon-
traremos respuesta a esta importante cuestión analizando el comportamiento de las
curvas de concentración/tiempo obtenidas de la integración del sistema de ecua-
ciones.
La Figura 1.8 muestra la solución numérica del sistema de ecuaciones diferen-
ciales 1.27-1.29, calculada simulando diferentes condiciones “experimentales”.
En concreto, se ha partido de idénticas concentraciones iniciales de A,P y X, y
se ha variado la ratio κ = k1 /k2 manteniendo constante el valor de k1 . Desde un
punto de vista químico, esto significa que hemos hecho al intermedio de rección
X cada vez más reactivo. Se observan los siguientes fenómenos en las figuras:
Figura 1.8: Solución numérica del sistema de ecuaciones diferenciales 1.27-1.29 bajo las
siguientes condiciones: [A]0 = 10−3 M, [X]0 = [P]0 = 0; k1 = 1 s−1 , k−1 = k−2 = 0,1
s−1 ; a) k2 = 1 s−1 , b) k2 = 5, c) k2 = 10 s−1 s−1 , d) k2 = 100 s−1 .
→ ← dζ1
r1 = r 1 − r 1 = = k1 [A] − k−1 [X] (1.30)
dt
→ ← dζ2
r2 = r 2 − r 2 = = k2 [X] − k−2 [P] (1.31)
dt
De acuerdo con 1.30-1.31, la velocidad de acumulación de las especies A, X y P
vendrá dada por las ecuaciones 1.32-1.34,
d[A]
= −r1 (1.32)
dt
d[X]
= r1 − r2 (1.33)
dt
d[P]
= r2 (1.34)
dt
d[A]
= −r1 = −k1 [A] + k−1 [X] = r (1.35)
dt
d[X]
= k1 [A] − k−1 [X] − k2 [X] + k−2 [P] = 0 (1.36)
dt
d[P]
= r2 = k2 [X] − k−2 [P] = r (1.37)
dt
En palabras:
Ecuaciones diferenciales :
d[A] = fR ([A], [P], [X1 ], . . . [Xn ])
dt (1.38)
d[P] = fP ([A], [P], [X1 ], . . . [Xn ])
dt
Ecuaciones algebraicas :
d[X1 ]
=0
dt
.. (1.39)
.
d[X n]
=0
dt
Para fijar ideas, con objeto de aplicar la simplificación de B-Ch al ejemplo que nos
ocupa, resolveríamos en primer lugar la ecuación 1.36 en [X] (la parte algebraica
del sistema de ecuaciones),
k1 [A] + k−2 [P]
0 = k1 [A] − k−1 [X] − k2 [X] + k−2 → [X] = (1.40)
k−1 + k2
A ↔ X1 ↔ X2 ↔ · · · ↔ Xn−1 ↔ Xn ↔ P
d[X1 ]
= rA − r1 = 0
dt
d[X2 ]
= r1 − r2 = 0
dt
..
.
d[Xn−1 ]
= rn−2 − rn−1 = 0
dt
d[Xn ]
= rn−1 − rP = 0
dt
rA − rP = 0 → r = rA = rP
En otras palabras, la velocidad a la cual transcurren las reacciones, una vez al-
canzado el estado estacionario, es la misma para todas ellas. Desde un punto de
vista formal, todo transcurre como si A se transformara en P en un sólo paso, por
lo que podemos describir la cinética de la reacción mediante una sola ecuación
diferencial, por ejemplo la variación del grado de avance (formal en este caso) de
la reacción (ζ) con el tiempo,
1 d[A] 1 d[P] dζ
r= = =
νA dt νP dt dt
Si el experimento cinético se lleva a cabo en exceso de iluro de forma que [B]0 >> [Q]0 ,
se observará que la reacción cursará una cinética de primer orden cuyo coeficiente cinético
será igual a:
k1 k3 [B]20
kobs =
k2 + k3 [B]0
ri A B P S1 S2 S3
r1 = Ia −1 0 0 1 0 0
r2 = k1ce [S1 ] 1 0 0 −1 0 0
r3 = k cis [S1 ] 0 0 0 −1 1 0
r4 = k2ce [S2 ] 1 0 0 0 −1 0
r5 = k1 [B][S2 ] 0 −1 0 0 −1 1
r6 = k2 [S3 ] 1 1 0 0 0 −1
r7 = k3 [A][S3 ] −1 0 2 0 0 −1
d[S1 ]
= r1 − r2 − r3 = Ia − (k1ce + kcis)[S1 ] = 0 (1.49)
dt
d[S2 ]
= r3 − r4 − r4 = k cis [S1 ] − (k2ce + k1 [B])[S2 ] = 0 (1.50)
dt
d[S3 ]
= r5 − r6 − r7 = k1 [B][S2 ] − (k2 + k3 [A])[S3 ] = 0 (1.51)
dt
o, en forma matricial:
−(k1ce + k cis )
0 0 [S1 ] Ia
k cis −(k2ce + k1 [B]) 0 × [S2 ] = 0
0 k1 [B] −(k2 + k3 [A]) [S3 ] 0
(1.52)
El sistema de ecuaciones [1.52] es lineal, algebraico (no depende de derivada alguna) y
sus variables son las concentraciones de los productos intermedios de reacción. A conti-
nuación, resolvemos el sistema en [S3 ],ñ con el propósito de expresar su concentración en
función de las concentraciones de reactantes y productos:
k1 k cis I0 [B][A]
[S3 ] = (1.53)
(k1ce + k cis )(k2ce + k2 [B])(k2 + k3 [A])
ñ
Utilizamos la relación: Ia ≈ I0 [A].
Por último, substituimos la expresión [1.53] en la ecuación [1.48] para obtener la ley de
velocidad [1.54]:
La ecuación [1.54] muestra que la reacción no sigue un orden formal respecto de la con-
centración de los reactantes. No obstante, la ecuación sugiere que, en algunos casos ex-
tremos, la reacción sigue un orden formal respecto de la trifenilfosfina.
En efecto, consideremos las velocidades relativas de las etapas 6 y 7. La etapa sexta
debe de ser muy rápida, próxima al límite de difusión, pues implica la destrucción por
colisión del aducto formado por la trifenilfosfina y el oxígeno con un tercer cuerpo (vg.
una molécula de disolvente). Por otra parte, la etapa séptima debe ser más lenta que la
sexta, pues implica una reacción química con una energía de activación superior a la de
flujo viscoso (típica de las reacciones controladas por difusión). En estas condiciones, se
cumplirá que: k2 >> k3 [A], por lo que la ecuación [1.54] podrá simplificarse a la ex-
presión [1.55], donde se ha tenido en cuenta que la concentración del oxígeno permanece
constante:
1 d[B] k1 k3 k cis I0 [B]0
≈ ce [A]2 = kobs [A]2 (1.55)
2 dt (k1 + k cis )(k2ce + k2 [B]0 )k2
Siguiendo un razonamiento similar, se cumplirá que k2ce >> k2 [B]0 , por ser k2ce la cons-
tante de velocidad asociada a un proceso fotofísico primario y k2 una constante relacio-
nada con una reacción química. Podremos simplificar la ecuación [1.55] a la ecuación
[1.56]:
k1 k3 k cis I0
1 d[B] 2 2
≈ [B]0 [A] = kobs [A] (1.56)
2 dt (k1ce + k cis )k2ce k2
k1 k3 k cis
kobs = I0 [B]0 (1.57)
(k1ce + k cis )k2ce k2
Figura 1.10: Representación de α−1 − 1 frente al tiempo para los datos del problema. Se
obtuvo una recta de pendiente k ? = (2,11 ± 0,04) × 10−4 s−1 . La recta confirma que el
orden de reacción respecto de la trifenilfosfina es p = 2.
2,11 × 10−4
kobs = = 0,3 s−1 M−1
7,25 × 10−4
vemos que las diferencias entre las velocidades de la reacción directa e inversa
son iguales en todos los casos, por lo que el diagrama representa a una mezcla
de reacción en estado estacionario. La parte (b) representa otro sistema también
en estado estacionario. Sin embargo, a diferencia de lo representado en la parte
(a), las velocidades de la reacción directa e inversa son muy grandes comparadas
con el valor de la velocidad estacionaria r, excepto para la etapa de formación del
producto P.
Sistema algebraico :
→ ←
r1 − r1 = 0
→ ←
r2 − r2 = 0
.. (1.62)
.
→ ←
r − r =0
n n
Sistema diferencial :
d[P]
=r (1.63)
dt
En este tipo de esquemas aparece, por lo menos, una etapa lenta que es la que da
lugar a la parte diferencial del sistema de ecuaciones. Esta etapa es conocida con
el nobre de paso determinante de la velocidad de la reacción pues, como veremos
a continuación, la reacción procede a la velocidad marcada por esta etapa.p
p
r.l.s. en textos de hable inglesa: rate limiting step.
Ecuación de equilibrio:
Ecuación diferencial:
d[P]
= k2 xO (1.65)
dt
k1 [A] κ1 [A]
xO = θ =θ
k−1 + k1 [A] 1 + κ1 [A]
d[P] k2 κ1 [A]
= θ
dt 1 + κ1 [A]
k+
ν1 A1 + ν2 A2 + · · · + νR AR ν1 B1 + ν2 B2 + · · · + νR Pp
k−
mediante la ecuación [1.67], donde ni son los órdenes de reacción de las especies
involucradas en la reacción:
→ QP ni
k i [Bi ]
κ= ← = QR (1.67)
ni
k i [Ai ]
Para aquellas reacciones en las que coincida el orden de reacción con el coeficiente
estequiométrico se cumplirá que κ = K, y en este caso se podrá determinar la
ratio de constantes de velocidad a partir de datos termodinámicos. Esto ocurre
cuando el mecanismo involucra solamente etapas elementales.
Por último, indicaremos que la velocidad de aparición de los productos se ve
afectada por las razones de equilibrio de las etapas reversibles y por la velocidad
específica del paso determinante de la reacción. A diferencia de lo que ocurre
cuando se aplica la hipótesis de Bodenstein–Chapman, la concentración de los
intermedios de reacción puede ser incluso mayor que la concentración de otras
especies estables, por lo que no se puede despreciar la concentración de éstos en
los balances de concentración. Esta situación ocurre cuando el valor de la razón
de equilibrio (κ) es suficientemente alta.
Un estudio cinético reveló que la reacción era de orden uno en el anhidirido, el naftol
y el cloruro de hidrógeno. La adición de anhidrido acético marcado con 14 C condujo a
una rápida dispersión del radionúclido por todo el disolvente. A partir de la información
aportada, muestre que el agente acilante es el cloruro de acetilo (C H3 C O Cl).
El cloruro de acetilo se debe formar por reacción entre el ahhidrido acético y el clo-
ruro de hidrógeno. A esta reacción, rápida y equilibrada, le sigue una etapa lenta de ace-
tilación del naftol:
K
(C H3 C O)2 O + H Cl C H3 C O Cl + C H3 C O2 H
k
C H3 C O Cl + Naftol −→ Productos
La velocidad de reacción está marcada por la velociad del paso determinante:
r = k[C H3 C O Cl ][Naftol]
y, puesto que la primera reacción es equilibrada, se puede obtener la relación entre la
concentración del intermedio de reacción (el cloruro de acetilo) y los reactantes:q
[C H3 C O Cl ]
K= → [C H3 C O Cl ] = K[(C H3 C O)2 O ][H Cl ]
[(C H3 C O)2 O ][H Cl ]
Tras la substitución de [C H3 C O2 H ] en la ecuación de velocidad se obtiene la relación
buscada:
r = kK[Naftol][(C H3 C O)2 O ][H Cl ]
La última ecuación indica que la ley de velocidad debe ser de orden uno respecto de los
reactantes y catalizador y explica la dispersión del carbono 14 por el disolvente:
K
[(C H3 C O)2 O]∗ + HCl [C H3 C O Cl]∗ + [C H3 C O2 H]∗
[A1 ]
K =
[A0 ][H+ ]
θ = [A1 ] + [A0 ]
θ
[A0 ] =
1 + K[H+ ]
θK[H+ ]
[A1 ] =
1 + K[H+ ]
d[P]
= k[A0 ][A1 ]
dt
Puesto que A1 y A2 están en equilibrio, podemos reescribir la ecuación de velocidad de
la siguiente forma:
d[P] kK[H+ ]
= θ2 = kobs θ2
dt (1 + K[H+ ])2
kK[H+ ]
kobs =
(1 + K[H+ ])2
La última ecuación indica que, si se llevaran a cabo las reacciones en un medio tampona-
do, debería observarse una cinética de segundo orden respecto de la concentración total
de ácido perbenzoico. Además, si se realizaran experiencias donde se variara el pH, la
A1 + A 2 S
S→P
A D
o
∆GAB < 0
B o
∆GCD > 0
o
∆GBC < 0
C
Sin embargo, se concluye que la última reacción debe ser endoenergética, pues el
reactante A es el compuesto de mayor energía libre, y a la vez espontánea, porque
se da, lo cual es imposible, véase la figura 1.13. En consecuencia, cualquier me-
canismo de tipo circular debe de estar formado, necesariamente, por un conjunto
de etapas equilibradas. Una formulación cuantitativa del Principio de Microrever-
sibilidad es es siguiente:
Esta afirmación se demuestra fácilmente con tan sólo considerar que la reacción
es un proceso termodinámico cíclico y por tanto ∆G0 = 0. En efecto:
n
X n
Y
0
∆G = ∆G0i+1,i = −RT ln(Ki+1,i ) = 0 (1.69)
i=1 i=1
llega a:
n
Y
(Ki+1,i ) = 1 (1.70)
i=1
Qn
k
Qni=1 i = 1 (1.71)
k
i=1 −i
por lo tanto:
n
Y n
Y
ki = k−i (1.72)
i=1 i=1
La ecuación (1.72) nos indica que los coeficientes cinéticos de un sistema cíclico
no son cantidades independientes. La ecuación se utiliza para comprobar la con-
sistencia termodinámica de un conjunto de coeficientes cinéticos o incluso para
determinar algún coeficiente desconocido del ciclo.
Temperatura.
Presión.
Viscosidad.
¿Cómo reaccionan las moléculas según esta teoría? En principio, las moléculas
del gas se mueven en el gas constantemente colisionando al azar. Para que haya
reacción, las moléculas han de sufrir una colisión efectiva, es decir las moléculas
interaccionantes han de poseer suficiente energía y el choque ha de producirse
con una orientación espacial adecuada, de forma que se pongan en contacto los
grupos funcionales responsables de la reactividad.
En la ecuación (1.73), el parámetro A es una constante denominada factor
preexponencial o frecuencia de colisión, de acuerdo con la interpretación que dio
Arrhenius basada la Teoría Cinética. El valor de A está relacionado con el núme-
ro de colisiones que sufre un conjunto moléculas por unidad de tiempo y puede
ser calculado a partir de fórmulas teóricas con tan sólo conocer la temperatura
y la masa molecular, véase la ecuación (1.74). El orden de magnitud de A está
comprendido entre 10−12 y 10−15 s−1 .
0,5
2 8RT 1 1
A = π(rA + rb ) + (1.74)
π MA M B
El segundo factor importante para que se produzca una colisión eficaz es la orien-
tación de las moléculas. Puede darse el caso que dos moléculas activadas choquen
pero no se conviertan en productos. Esto es así debido a que las moléculas poseen
una estructura tridimensional y es necesario que los grupos funcionales responsa-
bles de la reactividad entren en contacto para que se produzca la reacción. Para
fijar ideas, estudiemos la siguiente reacción elemental:
N = N O + N O → N2 + O = N = O
Para que se forme dióxido de nitrógeno (N O2 ) debe cederse el átomo terminal de
oxígeno del óxido de dinitrógeno (N2 O) al átomo de nitrógeno del óxido nítrico
(N O), por lo que han de colisionar precisamente estos dos átomos para que haya
reacción. Esta situación se ilustra en la figura 1.15. La parte (a) muestra la colisión
del átomo de oxígeno con el de nitrógeno: la colisión es efectiva y se forman los
productos. El esquema (b) muestra una colisión no eficaz donde chocan los átomos
de nitrógeno, y, por último, el esquema (c) muestra otra orientación de colisión no
eficaz entre un átomo de nitrógeno del N2 O y el átomo de oxígeno de NO.
El parámetro EA de la ecuación (1.73) se denomina energía de activación y
es, según Arrhenius, el umbral de energía que han de poseer las moléculas colisio-
nantes para que produzca un choque eficaz. Este parámetro se puede interpretar
en el marco de la Teoría Cinética pero ésta no permite calcular su valor.
La Teoría Cinética supone que las moléculas son entes puntuales que sólo tie-
nen energía cinética y cuyas velocidades se distribuyen en función de la tempera-
tura de acuerdo con una cierta función de distribución, F (v). En la parte izquierda
de la figura 1.16 se ha representado la función de distribución para las moléculas
de nitrógeno a 300 y 1000 K. El área bajo la curva entre dos velocidades v1 y v2 es
igual a la fracción de moléculas que tiene velocidades comprendidas entre estos
límites. A partir de esta gráfica, es posible determinar la función de distribución
de energía de las partículas con tan sólo considerar que la energía cinética y la ve-
locidad de una partícula están relacionadas por la expresión: E = 1/2mv 2 , véase
la parte derecha de la figura.
Figura 1.15
Siguiendo las ideas de Arrhenius, las moléculas han de tener una cierta energía
mínima EA para que se produzca un choque efectivo, energía que se utiliza para
formar los nuevos enlaces. La figura 1.16 (parte derecha) muestra que el área
comprendida entre EA y ∞ (La fracción de moléculas cuya energía es superior a
EA ) aumenta con la temperatura, por lo que la fracción de moléculas capaces de
colisionar eficazmentes aumenta con esta magnitud. En consecuencia, un aumento
de la temperatura elevará el número de choques eficaces debido al aumento de la
población de moléculas activadas, con el consiguiente aumento de la velocidad de
reacción.
Las energías de activación determinadas experimentalmente se encuentran en
el intervalo de 0 a 80 kJ mol−1 . En la figura 1.17 se muestra una interpretación
gráfica de la energía de activación de una reacción exotérmica y la de una reacción
endotérmica.
Por último, indicaremos que la constante de velocidad que se calcula con la
frecuencia de colisión deada por Teoría de Colisiones no es satisfactoria desde un
punto de vista cuantitativo. Muchas reacciones elementales proceden con veloci-
dades que son órdenes de magnitud inferiores a las predichas por la ecuación de
Arrhenius. Normalmente, una parte de la desviación entre la velocidad calcula-
s
Las moléculas cuya energía es superior a EA se denominan moléculas activadas.
ecuaciones.
Ejemplo 1.10. Isomerización del ciclopropano.
El ciclopropano se convierte en propeno de acuerdo con el siguiente reordenamiento
molecular que sigue una cinética de primer orden:
k
C3 H6 −→ C H3 − C H = C H2
Para resolver el problema basta con aplicar la ecuación (1.75). En ésta, la variable inde-
pendiente (= x) es la inversa de la temperatura absoluta. La variable dependiente (= y) es
el logaritmo natural (o neperianot ) de la constante de velocidad. Generamos la siguiente
tabla:
a = 34,993 ± 0,003
b = −32713 ± 2
t
En honor a John Napier, matemático escocés que los desarrolló por primera vez en 1614.
? d ln(k) d ln(k)
EA (T ) = −R = RT 2 (1.76)
d(1/T ) dT
Tras comparar la última igualdad con la ecuación (1.76) resulta evidente que:
?
EA = EA,2 + ∆H10 (T )
Donde C y U son dos parámetros empíricos, el último de los cuales posee uni-
dades de energía × mol−1 . Obsérvese que la ecuación de Arrhenius es un caso
[X]
K 6= = (1.80)
[A][B]
∆S 6= ∆H 6= 1
k kB
ln = ln κ + − (1.82)
T h R R T
k
H2 C O + OH −→ C O + H2 O + H
∆H 6=
mE = − → ∆H 6= = −mE R = −(−1139,6) × 8,314 = 9475Jmol−1
R
∆S 6=
kB 6= kB
n = ln + → ∆S = R n − ln =
h R T
1,38 × 10−23
=8,414 × (16,5928 − ln ) = −59,6JK−1 mol−1
6,62 × 10−34
∂∆G6=
∂ log(k) 1
=− (1.83)
∂p T RT ∂p T
∂∆G6=
= ∆V 6= (1.84)
∂p T
∆V 6=
∂ log(k)
=− (1.85)
∂p T RT
Puesto que la reacción tiene lugar en disolución y los líquidos son prácticamente
incompresibles podemos considerar que el cambio de volumen de activación no
depende de la presión. Esta propiedad permite integrar la ecuación (1.85) entre la
presión atmosférica y la de trabajo:
∆V 6= ∆V 6=
k
log =− ∆p = − (p − p0 ) (1.86)
k0 RT RT
donde p0 es usualmente la presión atmosférica y k0 la velocidad específica medida
esta presión. La ecuación (1.86) predice una variación lineal del logaritmo de la
velocidad específica con el incremento de la presión.
Obsérvese que aquellas reacciones que procedan con disminución del volu-
men al pasar de los reactantes al estado activado (∆V 6= < 0, la mayoría de las
reacciones bimoleculares entre especies neutras) se acelerarán al aumentar la pre-
sión, mientras que aquellas que procedan con ∆V 6= > 0 (la mayor parte de las
reacciones unimoleculares) se retardarán con un aumento de la presión.
Ejemplo 1.12. Cálculo del volumen de activación.
Calcule, a partir de los datos de la tabla, el volumen de activación a 300K para la
reacción:
C2 H5 Br + CH3 O− → C2 H5 O CH3 + Br−
p/ atm 1.0 3000 15000
k × 105 /s−1 mol−1 dm3 3.8 10.0 332
Ajustamos por mínimos cuadrados los datos de la tabla a la recta definida en la ecuación
(1.86). Del ajuste se obtiene una pendiente m = (3,00 ± 0,03) × 10−4 atm−1 , véase la
figura 1.22, por lo que el volumen de activación valdrá:
kB T 6= kB T a6=
k0 = K0 = = (1.87)
h h aA aB
kB T c6= γ 6= kB T 6= γ 6= γ 6=
= = K =k
h cA cB γA γB h γA γB γA γB
log10 (k) = log10 (k0 ) + log10 (γA ) + log10 (γB ) − log10 (γ 6= ) (1.88)
Ahora bien, si la mezcla de reacción no está muy concentrada (< 10−2 mol
dm−3 ), los coeficientes de actividad pueden estimarse a partir de la teoría de elec-
trólitos de Debye-Hückel. De a cuerdo con estos autores, el coeficiente de activi-
dad de una especie iónica en una disolución diluida está relacionada con la fuerza
iónica a través de la ecuación (1.89) conocida como la ley límite de Debye-Hückel:
√
log10 (γi ) = −zi2 A µ (1.89)
√
Figura 1.23: Representación de log10 (k/k0 ) en función de µ. Las líneas se han trazado
con pendientes proporcionales a zA zB . (A) Co(N H3 )5 Br +Hg2+ ; (B) S2 O2−
2+ −
8 +I ; (C)
− − − + −
C O(O C2 H5 )N : N O2 +O H ; (D) C H3 C O O C2 H5 +O H ; (E) H3 O +Br +H2 O2 ;
(F) Co(N H3 )5 Br2+ + O H− ; (G) Fe2+ + Co(C2 O4 )3− 3 .
se cumplirá que:
k
log10 ( ) = (bA + bB − b6= )µ (1.93)
k0
Figura 1.24: Representación de log10 (k) vs. −1 para la reacción BrCH2 COO− + S2 O2−
3
en mezclas etanol:agua.
Puesto que la magnitud del trabajo depende de la intensidad del campo eléctrico
y éste depende de forma inversa de la constante dieléctrica, el término electros-
tático tendrá cada vez menos importancia al aumentar la constante dieléctrica del
disolvente y se anulará para medios de constante dieléctrica infinita:
6=
lı́m (∆ge.e. )=0 (1.97)
→∞
∆g 6= = ∆gn.e.
6= 6=
+ ∆ge.e. (1.98)
donde: 6=
∞ kB T − ∆g e.e.
k = e kB T (1.101)
h
Para evaluar la constante de velocidad resta calcular la contribución electrostática
al cambio de energía libre o, lo que es lo mismo, el trabajo necesario para formar el
complejo activo en contra de los campos eléctricos moleculares. Este cálculo sólo
puede realizarse si se utiliza algún modelo que simule el proceso de formación y
la estructura del complejo activado.
Puesto que no puede conocerse a priori el radio del complejo activo, es difícil
predecir el signo de la pendiente de la representación del logaritmo de la velo-
cidad específica frente a la inversa de la constante dieléctrica. A falta de otra
información, podemos suponer que el radio r6= tiene un valor similar a rA o rB .
Asumiendo este valor del radio del complejo activo la ecuación (1.103) toma la
siguiente forma:
e 2 zA z B
log(k) = log(k ∞ ) − (1.104)
2kB T r6=
1.11. Cuestiones
Cuestión 1. Defina brevemente los siguientes conceptos: -Velocidad de reacción. -Ley
de velocidad. -Reacción que sigue formalmente un orden. -Mecanismo de reacción. -
Velocidad específica. -Orden global de reacción. -Orden parcial de reacción. -Molecularidad
de una reacción.-Reacción elemental. -Grado de avance de una reacción.
Cuestión 2. Explique claramente en que consiste: -La hipótesis de Bodenstein–Chapman.
-La hipótesis de equilibrio. -El paso determinante de reacción
Cuestión 3. Indique las formas que conozca de expresar la velocidad de una reacción
química.
Cuestión 4. El mecanismo aceptado durante años para la reacción entre H2 y el I2 en
fase gas fue el de una reacción elemental. Sin embargo, la evidencia actual indica que la
reacción se produce en varias etapas. La mayor parte de las investigaciones cinéticas están
de acuerdo con el siguiente mecanismo y diagrama energético:
Mecanismo :
I2 2I (eq. rápido)
I + H 2 H2 I (eq. rápido)
H2 I + I → 2H I (paso determinante)
Se pide que:
T /K 417.9 520.1
k × 10−5 /s−1 L2 mol−2 1.12 4.0
Cuestión 5. La ecuación 1.105 define el tiempo de vida medio de una reacción. Calcule
el tiempo de vida media para el reactante de la reacción: A→B ¿Cuál es el significado
físico de τ para: una reacción de orden 0, de orden 1, y de orden 2?
R∞
tc(t)dt
τ = R0∞ (1.105)
0
c(t)dt
Se pide que:
a) Establezca una expresión para la velocidad de desaparición del óxido nítrico, y
para la formación de radicales alcóxido y alquilnitratos.
b) Calcule el rendimiento (η) de la reacción en alquilnitratos y alcóxidos en base al
número de moles de óxido nítrico desaparecidos,
O3 + M
O2 + O + M
O3 + O → 2O2
Se pide que:
a) Obtenga la ley de velocidad.
b) Simplifique la ley de velocidad utilizando la aproximación del estado estacionario.
c) Demuestre que la aplicación de la hipótesis conduce a la siguiente ley de velocidad:
k1 k2 [O3 ]2
rV =
[O3 ]
k−1 [O2 ] + k2
[M]
Cuestión 8. El V3+ es reducido por el Cr2+ en disolución acuosa ácida según el siguiente
mecanismo de reacción. Obtenga la ley de velocidad asociada al mecanismo. Asuma que
el primer equilibrio se da de forma instantánea y que la especie [V(OH)Cr]4+ es muy
reactiva.
S + H 3 O+ H S+ + H 2 O
k
H S+ + H2 O −→ P
Cuestión 11. Deduzca una expresión que relacione la velocidad específica con la fuerza
iónica en disolución.
Cuestión 12. Dado el siguiente mecanismo:
A + Z S1 + H2 O
S1 + Z → S2 + H2 O
S2 + B → S3 + P
S3 + B → C + P
DATOS:
T /o C 30.05 40.75 50.20 59.40
k × 104 /s−1 mol−1 dm3 4.17 13.3 34.2 81.4
A+B
C+D
2C → G+H
Técnicas Experimentales
2.1 Consideraciones generales 87
Índice
2.1. Consideraciones generales . . . . . . . . . . . . . . . . . 87
2.2. Control del medio . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 89
2.2.1. Concentración inicial de los reactantes . . . . . . . . 89
2.2.2. Pureza de los disolventes . . . . . . . . . . . . . . . 91
2.2.3. Mantenimiento del pH . . . . . . . . . . . . . . . . 91
2.2.4. Mantenimiento de la fuerza iónica . . . . . . . . . . 92
2.3. Técnicas directas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 93
2.3.1. Métodos Químicos . . . . . . . . . . . . . . . . . . 93
2.3.2. Gravimetría . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 93
2.3.3. Gasometría . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 94
2.4. Métodos indirectos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 95
2.4.1. Densitrometría . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 95
2.4.2. Análisis termométrico . . . . . . . . . . . . . . . . 97
2.4.3. Polarimetría . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 103
2.4.4. Conductividad eléctrica . . . . . . . . . . . . . . . 104
2.5. Reacciones Rápidas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 105
2.5.1. Técnica de flujo interrumpido (“stopped-flow”) . . . 106
2.5.2. Reacciones ultra rápidas. . . . . . . . . . . . . . . . 106
2.6. Detección de los productos intermedios de reacción . . . 107
2.6.1. Productos intermedios y centros de reacción. Definición107
2.7. Técnicas de detección y caracterización de productos in-
termedios . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 110
2.7.1. Escalas de tiempo en Química . . . . . . . . . . . . 110
2.7.2. Técnicas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 111
2.7.3. Técnicas espectroscópicas . . . . . . . . . . . . . . 111
2.7.4. Espectroscopia de masas . . . . . . . . . . . . . . . 118
con gran exactitud. Por ejemplo, cuando se estudia una reacción catalizada por
iones hidronio, se deben seguir cinéticas en disoluciones reguladoras de diverso
pH; en esta situación, da más información medir la constante a varios valores del
pH, pongamos por ejemplo diez valores con una precisión de ±10 %, que invertir
el mismo tiempo en la obtención de cinco valores con una precisión del ±2 %.
Los experimentos orientados a descubrir la influencia de la estructura de los
reactantes en la velocidad de la reacción son frecuentes en Química Física Orgá-
nica. En estos estudios, se modifica la estructura de uno de los reactantes intro-
duciendo substituyentes de diversa electronegatividad (vg. -CH3 , -OH, -NO2 . . . );
se mide entonces la velocidad específica de la reacción, en las mismas condicio-
nes experimentales, entre el reactante modificado y un correactante común. Este
tipo de experimentos nos informa sobre la distribución de carga existente en los
complejos activados y, por tanto, del mecanismo que cursa la reacción. Para que
las experiencias resulten informativas se debe medir la constante de velocidad con
precisiones mayores del ±3 %
Por último, en aquellos experimentos destinados obtener velocidades especí-
ficas exactas y precisas, se sacrifica el coste temporal del experimento en favor
de la precisión de la constante de velocidad. Las velocidades específicas medidas
para su inclusión en bases de datos deben obtenerse con una precisión no inferior
al ±1 %.
Reacción Ejemplo
ácido–base CH3 COOH + H2 O → CH3 C O− 2 + H3 O
+
2+ 2+
Formación de complejos Cu(H2 O)6 + 4N H3 → Cu(N H3 )4 + 6H2 O
Oxidación–reducción 2Ce4+ + H2 O2 + 2H2 O → 2Ce3+ + O2(g) +
2H3 O+
−
Precipitación Ag+(aq) + Br(aq) → Ag Br(s)
Condensación. Dos moléculas for- R1 COOH + R2 N H2 → R1 C O O N H R1 +
man otra de mayor masa molecu- H2 O
lar. Reacciones importantes: la es-
terificación (formación de un és-
ter a partir de un ác. carboxílico y
un alcohol), y la formación de en-
laces peptídicos (condensación de
aminoácidos y ác. carboxílicos pa-
ra formar proteínas.
−
Substitución. Un átomo o grupo RCl + N−
3 → RN3 + Cl
funcional de una molécula es subs-
tituido por otro grupo funcional.
Adición. Una molécula pequeña se RH C = C H R + Br2 → Br RH C · C H RBr
une a una mayor, generalmente a un
enlace múltiple.
Eliminación. Una molécula elimina H C OH · C H2 R → H C = C H R + H2 O
otra más pequeña, generalmente se
forma un enlace múltiple.
H A + H2 O
A− + H3 O+
Los tampones fijan el pH, pero también fijan la fuerza iónica del medio
al ser sus componentes las especies iónicas más abundantes en el medio
de reacción. Si estamos estudiando el cambio de velocidad que sufre una
reacción con el pH y modificamos la concentración total de tampón, la
velocidad podrá variar tanto por la modificación del pH como por la fuerza
iónica.
2.3.2. Gravimetría
Algunas reacciones conducen a sólidos como productos de reacción. Por ejem-
plo, los iones persulfato (S2 O2− 2−
8 ) reaccionan con los iones tiosulfato (S2 O3 ) para
dar sulfatos (S O2−
4 ) de acuerdo con la siguiente reacción:
S2 O2− 2− 2− 2−
8 + 2S2 O3 → 2S O4 + S4 O6
Método Comentarios
Gravimetría Deben aparecer substancias susceptibles de formar pre-
cipitados, vg. Cl−
Volumetrías ácido-base, de precipitación, formación complejos, re-
dox
Cromatografía HPLC para reacciones en disolución; GC para reaccio-
nes en fase gas y en disolución
Titulaciones Amperomé- Oxidación y reducción de iones metálicos
tricas
Polarografía Presencia de productos o reactantes electroactivos
S O2−
4 + Ba
2+
→ Ba S O4 ↓
2.3.3. Gasometría
Ciertas reacciones que ocurren en disolución dan lugar a la formación de gases
poco solubles en el medio de reacción, normalmente N2 , O2 o C O2 . Este tipo de
reacciones pueden seguirse midiendo el volumen de gas producido en función del
tiempo. Para ello, el reactor debe estar conectado a una bureta de gases que con-
siste en un recipiente cilíndrico graduado relleno con algún fluido, normalmente
agua, que es desalojado por el gas. Tanto el matraz de reacción como la bureta de
gases han de estar termostatadas. Para evitar la sobresaturación del líquido con el
gas se debe agitar vigorosamente la mezcla de reacción. Un esquema de la bureta
de gases se muestra en la figura (2.1). El número de moles de gas formado pue-
de calcularse midiendo la altura del líquido en la bureta y aplicando la siguiente
ecuación:
Sl(p0 − ρgh − ps )
n= (2.2)
RT0
donde: S es la sección de la bureta de gases, h la diferencia de altura entre las
superficies del líquido en el interior y exterior de la bureta, l es la altura del cilindro
de líquido desalojado por el gas, p0 la presión del laboratorio, ρ la densidad del
líquido de la bureta, ps la presión de vapor del líquido de la bureta a la temperatura
de trabajo yT0 la temperatura a la cual está la bureta de gases.
Figura 2.1: Representación esquemática de una bureta de gases. El volumen de gas reco-
gido a p0 y T0 es igual al volumen de líquido desalojado V = lS, donde S es la sección
de la bureta.
C 6 H5 · N+
2 + 2H2 O → C6 H5 · OH + N2(g) + H3 O
+
C6 H5 · C H Br · C H2 C O− −
2 → C6 H5 · C H = C H2 + Br + C O2(g)
2.4.1. Densitrometría
Las reacciones químicas en fase condensada proceden con cambio de volu-
men. Para mezclas diluidas, éste cambio es una función lineal de la composición,
por lo que es posible medir la velocidad de reacción a través de densitometrías.
El utensilio más utilizado para medir pequeños cambios de volumen es el pic-
nómetro, aparato que consiste en un bulbo de vidrio, que contiene la mayor parte
Propiedad Comentarios
Absorción de r.e.m (UV- Adecuada para seguir reacciones muy rápidas. Los coefi-
vis., IR, r.m.n, e.p.r) cientes de proporcionalidad entre la señal concentración
son independientes de la concentración y poco sensibles
a la temperatura.
Emisión de luz íd. que la anterior pero más específica y sensible. Permite
determinar concentraciones a nivel de trazas.
Conductividad eléctrica Poco selectiva. Los valores de los coeficientes se ven
afectados por el ambiente iónico, por lo que pueden va-
riar con la composición.
Cambio de volumen Poco selectiva. Especialmente útil en el seguimiento de
reacciones lentas donde varía notablemente la densidad
del medio, vg. las reacciones de polimerización.
Cambio de presión No es selectiva. Su uso se restringe al estudio de reac-
ciones en fase gas.
Rotación óptica Estudio de cinéticas que involucran a especies óptica-
mente activas. Puesto que los coeficientes de rotación
específica son pequeños, se requieren concentraciones
elevadas de los reactantes
Medidas termométricas Poco selectiva. Estudio de reacciones lentas relativamen-
te simples. Quizás la única técnica que permite el estudio
en fase sólida de cinéticas tales como el curado de resi-
nas (reticulación).
Técnicas volta- Estudio de reacciones que involucran transferencia de
amperométricas carga a través de una interfacie. Es una técnica diferen-
cial que mide directamente la velocidad de transferencia
de carga.
Medidas de f.e.m. Seguimiento de variaciones de pH y de otros iones. Se-
lectiva.
Figura 2.3: Termogramas DSC de distintos curados isotermos de una resina epoxídica.
Obsérvese que las reacciones son exotérmicas para las temperaturas estudiadas.
Ahora bien, puesto que la reacción es simple podemos escribir la ecuación [2.13],
Por último, dividiendo [2.14] entre dt se obtiene la relación buscada [2.15], que
permite interpretar los termogramas de los barridos isotermos DSC.
n
!
X
q 0 (t) = h̄∞ ∞
i νi V rV = ∆h V rV (2.15)
i=1
ν1 A1 + ν2 A2 + · · · + νm Am →
νm+1 Am+1 + νm+2 + Am+2 + · · · + νn An
2.4.3. Polarimetría
La polarimetría es una técnica instrumental que permite determinar la concen-
tración de compuestos mediante la medida de la variación del ángulo de polari-
zación que sufre una onda electromagnética cuando atraviesa una disolución de
especies químicas ópticamente activas.Es Quizás una de las técnicas instrumenta-
les más antiguas que se conocen, pues ya la utilizó Wilhelmy en 1850 para seguir
la cinética de hidrólisis de la sacarosa.
Figura 2.5: Desviación dextrógira del ángulo de polarización de la r.e.m. al atravesar una
disolución.
Una onda electromagnética se dice que está polarizada cuando el vector del
campo eléctrico asociado, E, oscila en una única dirección perpendicular a la
dirección de propagación de la onda. Cuando ésta atraviesa un medio ópticamente
activo, el vector eléctrico puede girar un cierto ángulo en el plano perpendicular
al movimiento de la onda luminosa α según (giro dextrógiro) o en contra (giro
levógiro) de las agujas del reloj, véase la figura (2.5).
Si en el reactor hay una única substancia ópticamente activa de concentración
c, y el espesor del medio atravesado es l, la magnitud de ángulo rotado por el
vector eléctrico vendrá dado por la ecuación [2.23], ecuación similar en su forma a
la ley de Lambert-Beer y donde el coeficiente [α]Tλ es la rotación óptica específica
del compuesto y depende del medio, de la temperatura (T ) y de la longitud de onda
de iluminación (λ).
α = [α]Tλ lc (2.23)
A diferencia del coeficiente de extinción, la rotación óptica específica presenta va-
lores pequeños por lo que se debe trabajar con concentraciones de soluto elevadas
para que la variación del ángulo de polarización sea sensible. Además, el espesor
de las celdas de polarimetría suele ser de 10 cm, en contraste con el espesor de 1
cm de las celdas de absorción, para aumentar la sensibilidad de las medidas.
Los polarímetros ordinarios iluminan la muestra con luz cuasi-monocromática
de la transición electrónica D del sodio (doblete a 589.0 y 586.6 nm) o la línea
verde del mercurio (546.1 nm). Los polarímetros más modernos son capaces de
iluminar la muestra con radiación monocromática de diversa longitud de onda y
registrar el ángulo α en función de la longitud de onda. A tal gráfica se la conoce
como espectro de dispersión óptica y su principal utilidad reside en la determina-
ción de la longitud de onda óptima para seguir una cinética.
En general, la polarimetría es una técnica menos sensible y más específica
que la absorción de r.e.m. Su campo principal de aplicación es el seguimiento
de cinéticas de que implican modificaciones de moléculas que tienen átomos de
carbono asimétricos. d
L = κθ (2.25)
La “constante de celda” se ve afectada por muchos factores entre los que destaca-
mos:
Temperatura.
Aunque las medidas de conductividad son rápidas y sencillas, existen algunos pro-
blemas que limitan la utilidad de la técnica. Así, la disolución debe ser conductora
y se deben consumir o producir iones durante su transcurso para que esta propie-
dad física varíe de forma sensible. Por esta razón, no se pueden realizar medidas
de cambios de conductividad en disoluciones tamponadas o de fuerza iónica re-
gulada, pues los componentes del tampón o el electrolito de fondo contribuyen
en tal medida a la conductividad de la mezcla de reacción que es prácticamente
imposible detectar las variaciones de conductividad relacionadas con la reacción
que deseamos seguir.
de flujo continuo.
de flujo segmentado.
Los reactantes.
Los productos.
A ↔ X1 ↔ X2 ↔ · · · ↔ XQ ↔ · · · ↔ Xn ↔ P ≡ A ↔ P
A ↔ X1 ↔ X2 ↔ · · · ↔ Q ↔ · · · ↔ Xn ↔ P ≡ A ↔ Q ↔ P
En este punto hay que mencionar que se puede investigar la plausibilidad y es-
tructura probable de un centro de reacción utilizando el método de la Química-
Cuántica, en particular realizando un análisis exhaustivo de la superficie de ener-
gía potencial de las diversas especies que participan en una reacción química.
Figura 2.7: Escala de tiempos de algunas reacciones químicas comparadas con el tiempo
en que se producen algunos fenómenos a nivel atómico.
2.7.2. Técnicas
Todas las técnicas que permiten seguir una reacción, permiten, en principio
detectar productos intermedios. Sin embargo, no todas son lo suficientemente rá-
pidas para la identificación de productos intermedios. Algunas técnicas frecuen-
temente utilizadas para la detección de intermedios se relacionan a continuación:
EXAFS / SF-EXAFS
La espectroscopia EXAFSg pertenece a la familia de técnicas de absorción de
radiación Röetgen.h En los experimentos de absorción, se mide la atenuación de
la intensidad de los rayos X incidentes sobre una muestra (o prueba) en función
de la energía de la radiación con que se ilumina (E). La atenuación sigue la ley de
Lambert-Beer:
I0
A = ln = µ(E)l
Ie
donde A es la absorbancia, µ el coeficiente de absorción del material, I0 e Ie la
intensidad incidente y emergente y l el espesor de la prueba utilizada. La repre-
g
Extended X ray Absortion Fine Structure
h
También denominadas XAS (X ray Absorption Spectroscopy)
Figura 2.8: Espectro de absorción de rayos X del Rh metálico mostrando los edges L y
K. 43
Técnica Comentarios
EXAFS / SF-EXAFS Absorción rayos X. EXAFS es el acrónimo de Extended X ray Absortion Fine
Structure. Permite caracterización del producto intermedio (en el caso de com-
plejos metálicos) cuando es acoplada a un mezclador rápido de flujo detenido
(SF).
EXAFS Absorción rayos X. Acrónimo de Extended X ray Fine Auger Structure. Permi-
te obtener resultados similares a EXAFS en algunos casos con instrumentación
más sencilla.
Espectroscopia elec- Absorción de r.e.m. en el intervalo ultravioleta-visible (200-1100 nm). Técnica
trónica /SF-DA barata. Permite detección de productos intermedios. Normalmente no es posi-
ble inferir la nat. química a partir de la de absorción a una longitud de onda.
La introducción de matrices de diodos (diode array) permite tomar espectros
completos en menos de 1 ms.
Espectroscopia FT-IR Absorción de r.e.m. en el intervalo infrarrojo. Los espectros se adquieren con
mayor rapidez utilizando la técnica de transformada de Fourier (FT). Permite
identificar grupos funcionales del producto intermedio cuando se adquiere una
porción importante del espectro.
Espectroscopia EPR Absorción de r.e.m en la región de micro-ondas por parte de moléculas con
electrones desapareados. Principal técnica de detección/identificación de pro-
ductos intermedios de reacción con electrones desapareados.Es relativamente
lenta comparada con las anteriores.
Espectroscopia EPR Absorción de r.e.m en la región de rediofrecuencias por parte de moléculas con
núcleos de espín semi-entero. La técnica permite la identificación de productos
intermedios. Es relativamente lenta comparada con las anteriores.
Espectroscopia Ra- Emisión de r.e.m. UV-vis láser originada por la dispersión inelástica de fo-
man tones por moléculas polarizables. Permite obtener una limitada visión de la
estructura y presencia de grupos funcionales.
Espectroscopia de Emisión de r.e.m. UV-vis láser originada por la desactivación de estados exci-
Fluorescencia tados por moléculas polarizables. Rara vez es identificativa. Permite la detec-
ción de intermedios a muy baja concentración ( < 10−7 M). Técnica rápida.
Figura 2.9: Espectro de absorción de rayos X del Rh metálico en la región EXAFS del
edge-K. 43
Figura 2.11: (a) Ánodo rotatorio (fuente RX), (b) Colimador, (c) Celda de flujo detenido,
(d) Detector, (e) Monocromador, (f) Goniómetro, (g) Brazo móvil detector.
Ciclo catalítico
Ciclo análogo
ta técnica. 41
los iones pre-existentes en la mezcla de reacción pasan sin más a la fase gas y
pueden ser detectados. No obstante, pueden observarse otros iones debido a la re-
ducción/oxidación de las moléculas de la muestra, ya que el capilar actúa como
semi-celda electrolítica. Así, se ha observado la reducción de derivados del ferro-
ceno, metaloporfirinas, complejos metálicos de aminoácidos, trisditiolenos neu-
tros de molibdeno y tungsteno, y algunas moléculas orgánicas. Esta propiedad se
explota para la investigación de moléculas sin propiedades ácido/base, reducién-
Esta reacción está catalizada por aminas terciarias; en particular la 1,4 diaza biciclo[2.2.2]octano
(DABCO) ha demostrado ser un excelente catalizador. Se cree que la amina se coordina
con la cetona insaturada activando el C-α, el cual ataca nucleofílicamente al grupo carbo-
nilo produciendo la adición. Tras una trasferencia protónica, se regenera el catalizador y
se libera el el producto de adición.
Santos et al. 38 han demostrado utilizando la técnica MS-ESI que el mecanismo pro-
puesto es correcto. La reacción puede ser estudiada utilizando como reactor una jeringa
accionada por una bomba de perfusión unida directamente al electrocapilar. Los auto-
res hicieron reaccionar metil-acrilato con 4-nitro-benzaldehído y con tioazoil-aldehído en
metanol. Obtuvieron espectros de masas en los cuales se pudo identificar diversos cationes
mediante experimentos MS/MS. Se identificaron (con ambos aldehídos) dos cationes, uno
a m/z=113 y otro a m/z=199 que se asignaron a la DABCO+1H+ y al aducto protonado
DABCO-metilacrilato.
Cuando se utilizó el 4-nitro-benzaldehído, se detectó un nuevo aducto a m/z=350
asignado al producto de adición DABCO-acrilmetilato con el aldehído (+H+ ). Con el
segundo aldehído, se detectó el aducto análogo a m/z=312. Véase la Figura 2.14. Las
observaciones son coherentes con el mecanismo propuesto en el esquema.
Análisis de Datos.
Reacciones Simples
3.1 El análisis cinético 127
Índice
3.1. El análisis cinético . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 127
3.2. Expresión de la concentración en función de una propie-
dad física . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 128
3.3. Reacciones de primer orden . . . . . . . . . . . . . . . . 130
3.3.1. Utilización de la ecuación integrada . . . . . . . . . 130
3.3.2. Método de Guggenheim . . . . . . . . . . . . . . . 135
3.3.3. Método de Mangerlsdorf Y KMS . . . . . . . . . . 138
3.4. Reacciones de cualquier orden . . . . . . . . . . . . . . . 140
3.4.1. Expresión de la ley de velocidad de forma dimensional 140
3.4.2. Determinación del orden global de la reacción . . . . 141
3.4.3. Obtención del orden respecto del reactivo limitante . 145
3.4.4. Método del tiempo de semirreacción . . . . . . . . . 145
3.4.5. Evaluación de la constante de velocidad específica . 148
3.5. Otros métodos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 151
3.5.1. Método de Esson y Harcourt . . . . . . . . . . . . . 152
3.5.2. Métodos Diferenciales . . . . . . . . . . . . . . . . 154
3.6. Cuestiones . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 157
del sistema. En la tabla (??) se expusieron las propiedades físicas más utilizadas
en Cinética Química.
La condición de “linealidad” significa que la propiedad se puede expresar me-
diante la ecuación ([3.1]) donde los coeficientes λ y li son constantes indepen-
dientes de la composición y del tiempo. La constante λ es la contribución ines-
pecífica del medio de reacción a la propiedad medida y suele ser conocida con el
nombre de blanco de la reacción. Los coeficientes li , conocidos como constantes
de proporcionalidad entre la señal y la concentración, miden la contribución a la
propiedad de cada una de las especies disueltas en el medio.
n
X
L(t) = λ + li ci (t) (3.1)
i=1
donde:
n
X
L0 =λ + li ci,0 (3.5)
i=1
n
X
∆l = li νi (3.6)
i=1
Puesto que la ley de velocidad de las reacciones que siguen formalmente un orden
dependen concentración relativa del reactivo limitante, α = ci /ci,0 , deduzcamos
el valor de este cociente en función de L(t). Para ello, particularicemos la ecua-
ción ([3.9]) para t = 0 y t = ∞,
t = 0, L(t) = L0
∆l
t → ∞, L∞ = L0 − ci,0
νi
ya que:
L∞ − L(t) L(t) − L∞
α= = (3.16)
L∞ − L0 L0 − L∞
Veamos algunos ejemplos de aplicación de la fórmula ([3.14]) (estudio de la hidró-
lisis del acetato de metilo) y de la ecuación ([3.15]) (Estudio de la descomposición
del ácido monobromosuccínico)
Ejemplo 3.1. Hidrólisis del acetato de metilo.
La reacción de hidrólisis del acetato de metilo catalizada por ácidos puede seguirse
espectrofotométricamente. Tanto los ésteres alifáticos como sus ácidos, muestran un má-
ximo de absorbancia sobre 204 nm, siendo el coeficiente de extinción del éster superior al
del ácido. Se estudió la hidrólisis del acetato de metilo en medio ácido a 295K siguiendo
la variación de absorbancia con el tiempo, obteniéndose los resultados mostrados en la
tabla. Calcule el orden de reacción respecto del éster y la constante de velocidad de la
reacción. Considere que la reacción es irreversible.
DATOS: Se utilizó una célula de 1.0 cm de paso. Coeficiente de absorción molar del éster
a 204 nm = 46.7 cm−1 M−1 . Coeficiente de absorción molar del ácido a 204 nm = 34.0
cm−1 M−1 . Concentración inicial de éster = 0.03 M (inicialmente no existe ácido acético).
Concentración inicial de catalizador (HCl)= 0.15 M.
Podemos esquematizar la reacción de acuerdo con 3.17, donde A representa al éster
metílico y B al ácido acético. Tanto el agua como el metanol constituyen el disolvente,
por lo que su concentración permanecerá constante durante la reacción. Además, podemos
suponer que la reacción es irreversible en gran exceso de ácido mineral y de primer orden
respecto del éster en estas condiciones experimentales.
k
A −→ B (3.17)
Bajo estas hipótesis de trabajo, la ley de velocidad integrada presenta la forma dada por
la ecuación [3.18], donde [A] es la concentración actual del éster y [A]0 su concentración
inicial:
d[A] [A]
− = k[A] → ln = −kt (3.18)
dt [A]0
Figura 3.1: Variación del logaritmo de la fracción remanente del reactivo limitante (α =
(A − A∞ )/(A0 − A∞ )) con el tiempo. De la pendiente se obtuvo la velocidad específica
de hidrólisis: k = 6,10 × 10−5 s−1 .
La figura 3.1 demuestra que, efectivamente, la hidrólisis es de orden uno respecto del ace-
tato de metilo. De la pendiente de la representación se obtuvo una constante de velocidad
igual a:
donde [A] y [A]0 son las concentraciones actual e inicial del ácido carboxílico.
El enunciado del problema explica un procedimiento de análisis químico cuyo ob-
jetivo es determinar la concentración de aniones Br− en el reactor. Para ello se añade
un exceso de iones Ag+ a la disolución de forma que se precipita todo el bromuro de la
misma. El exceso de plata remanante se valora por retroceso con S C N− . El balance de
moles para la plata es el siguiente:
Figura 3.2: Variación de − ln(v − v∞ ) para los datos del problema. De la pendiente se
obtuvo la velocidad específica: k = 2,69 × 10−4 min−1 . De la ordenada en el origen se
dedujo el volumen inicial: v0 ≈ 2,60 mL.
por lo tanto,
[Ag+ ]V0
[A]0 V V
v= −
− + [A] (3.26)
[SCN ] [SCN− ] [SCN− ]
La última ecuación indica que el volumen de sulfocianuro es una propiedad que varía
linealmente con la concentración del reactivo limitante. Puesto que se ha supuesto que
que la reacción es de orden uno respecto del bromosuccínico se deberá cumplir que:
v − v∞
ln = −kt (3.27)
v0 − v∞
y puesto que no se conoce el valor de v0 , también podemos escribir:
log(L(t) − L(t0 )) =
(3.32)
= log((L∞ − L0 )(e−k∆ − 1)) − kt
Las hidrólisis de ésteres suelen ser de orden uno respecto de la base y del éster. Puesto
que el enunciado del problema indica que el pHse mantiene constante utilizando una
disolución amortiguadora, una elección juiciosa de la ley de velocidad será la mostrada
en la ecuación [3.33], donde A representa al cinamato:
d[A]
− = k[A] (3.33)
dt
Figura 3.3: Representación del ln(L − L0 ) frente al tiempo de acuerdo con el método
de Guggenheim. De la pendiente se obtuvo k = 3,39 × 10−3 s−1 . De la ordenada (b =
−1,033) se obtuvo L∞ = 0,357.
Ejemplo 3.4. Hidrólisis del cinamato de fenilo. Resolución por el método KMS.
Resolvamos el problema de la hidrólisis del cinamato de metilo utilizando el método
KMS como alternativa al método de Guggenheim ya utilizado. De acuerdo con la ecua-
ción ([3.41]) basta representar L frente a L0 para obtener la velocidad específica de la
reacción. En efecto, la figura (3.4) muestra la relación lineal esperada.
La velocidad específica puede obtenerse de la pendiente de la recta (m):
ln(m) ln(3,8819)
m = ek∆ → k = = = 3,39 × 10−3 s−1
∆ 400
n −1,03202
n = L∞ (1 − ek∆ ) → L∞ = = = 0,358
1 − ek∆ 1 − e3,39×10−3 ×400
− α̇ = k ? rq αm (3.54)
f m−1 − 1 1−m
τj = α (3.60)
(1 − m)k ? rq j
y tomando logaritmos a ambas partes de la igualdad:
m−1
f −1
log(τj ) = log + (1 − m) log(αj ) (3.61)
(1 − m)k ? rq
La ecuación ([3.61]) nos indica que cuando se representa el logaritmo del intervalo
de tiempo que tarda en disminuir en un factor f la fracción de reactivo limitante en
función del logaritmo de dicha fracción, se debe obtener una recta cuya pendiente
sea, justamente, 1 − m.
Ejemplo 3.5. Determinación del orden global utilizando el método de los tiempos de
reacción parcial.
Se siguió la cinética de una reacción que seguía formalmente un orden y que cursaba
con la siguiente estequiometría:
k
2A + B −→ P
Durante un experimento ([A]0 = 2,0 × 10−5 M, [B]0 = 1,0 × 10−5 M), se midió una
propiedad física aditiva a partir de la cual se calcularon los los valores de α mostrados en
la tabla 3.1. Por otra parte, el análisis de cinéticas en gran exceso estequiométrico de B
permitió concluir que el tiempo de semirreacción era independiente de la concentración
inicial del reactante A. Se pide que calcule el orden global de la reacción, los órdenes
parciales y la velocidad específica con la que cursa la reacción.
Puesto que la reacción sigue formalmente un orden y las concentraciones de los reac-
tantes están en ratio estequiométrica, utilizaremos es método de los tiempos de reacción
parcial para determinar el orden de reacción. Después, calcularemos las constante de ve-
locidad utilizando la ecuación integrada.
Elegimos α0 = 1 y generamos una serie geométrica de valores de α de razón f = 0,7,
véase la columna quinta del cuadro 3.2. A continuación, interpolamos los valores del
tiempo a los cuales ocurre cada una de los valores de los valores de α generados. Para
ello, localizamos en la tabla 3.1 el valor de esta variable inmediatamente superior junto
con su tiempo de ocurrencia (α1 ,t1 ) (columnas primera y segunda) y el inmediatamente
inferior (α2 ,t2 ) (columnas tercera y cuarta); el tiempo interpolado (t) (sexta columna)
para cada valor de α se calcula con la fórmula de interpolación lineal:
t1 − t2
t = t2 + (α − α2 )
α1 − α2
Tras interpolar los tiempos de reacción se procede a calcular los tiempos de reac-
ción parcial (en nuestro caso el tiempo necesario para que la concentración del reactivo
limitante disminuya en una proporción 1 − f = 1 − 0,7 = 0,3 (un 30 %). La tabla 3.2
ilustra los resultados. La columna séptima muestra los tiempos de reacción parcial, τ .
Estos se calculan restando el tiempo interpolado de la fila i-ésima el tiempo de la fila
inmediatamente anterior (fila i − 1) de la columna sexta. Por último, las columnas octava
y novena muestran los logaritmos naturales de α y τ , las variables a representar. La fi-
Figura 3.5: Representación de los valores del ln(τ ) frente a los valores del ln(α) mostra-
dos en la tabla 3.2. El ajuste de la recta condujo a una pendiente igual a b = −0,496 .
Figura 3.6: La figura muestra la representación de f (α) en función del tiempo. Se observa
una buena linea recta que pasa por el origen y de pendiente k ? rq = 0,03162 s−1 .
gura 3.5 muestra la representación de los valores del ln(τ ) frente a los valores del ln(α).
Se obtiene una recta de pendiente b = −0,496 , por lo que el orden global de reacción
será igual a m = 1 − b = 1 − (−0,496 ) = 1,497 . Posiblemente, el orden global sea al
orden semientero más cercano, por lo que podemos admitir en principio un orden global
m = 1,5.
Calculemos la velocidad específica , k. Puesto que la concentración de los reactivos
está en relación estequiométrica, tendremos que:
dα 1
= k ? r q αm → α1−m − 1 = k ? rq t
dt m−1
f (α) = 2 α−0,5 − 1 = k ? rq t
La figura 3.6 muestra que, efectivamente, la representación de f (α) frente al tiempo con-
duce a una buena recta de pendiente b = k ? rq = 0,03162 s−1 . Puesto que el enunciado
indica que el tiempo de semirreacción es independiente de la concentración inicial del
reactante A cuando el reactante B está en gran exceso, es evidente que el orden respecto
de A es la unidad (p = 1); por lo tanto el orden respecto del correactante será igual a:
q = m − p = 1,5 − 1 = 0,5. Conocidos los valores de p y q estamos en condiciones de
− α̇ ≈ k ? I q αp (3.62)
2m−1 − 1 2m−1 − 1
t1 = = [A]1−m , m 6= 1 (3.63)
2 (m − 1)k ? rq (m − 1)krq 0
log(2)
t1 = ? q , m = 1 (3.64)
2 k r
De acuerdo con la ecuación [3.64], si no se observa cambio en el tiempo de semi-
reacción al aumentar la velocidad, la reacción estudiada será de orden uno. Por el
contrario, si se observa variación, el orden de reacción se obtendrá de la pendien-
te de la representación del logaritmo natural del tiempo de semirreacción frente
al logaritmo de la concentración inicial del reactivo limitante, véase la ecuación
[3.65], m−1
2 −1
log t 1 = log + (1 − m) log([A]0 ) (3.65)
2 (m − 1)krq
b = 1 − m → m = 1 − b = 1 − (−1,03) = 2,03 ≈ 2
Una variante que permite calcular el orden de reacción respecto del correactante
consiste en medir el tiempo de semireacción de dos cinéticas que partan de la
misma concentración inicial de reactivo limitante, pero de diferentes excesos de
correactante. En este caso, el tiempo de semirreacción toma la forma:
(2p−1 − 1)[A]01−p 1
t1 = (3.67)
2 k(p − 1) [B]q0
Es obvio que el cociente de dos tiempos de semirreacción medidos de cinéticas
que partan de la misma concentración inicial de reactivo limitante será:
(1) !q (1) (2)
t1 [B]0
(2) ln(t 1 /t 1 )
2 2 2
(2)
= (1)
→q= (2) (1)
(3.68)
t1 [B]0 ln([B]0 /[B]0 )
2
Figura 3.7: Representación del ln(t 12 ) frente a ln([C H3 ]0 ) de acuerdo con el método de
los tiempos de semirreacción. De la ordenada (b = −1,03)por lo que la reacción fue de
orden global m = 2.
Se pide que calcule los órdenes parciales de reacción respecto a cada reactivo y la cons-
tante de velocidad de la reacción. Para ello considere que ambos gases muestran compor-
tamiento ideal y que los órdenes de reacción respecto de ambos reactivos son números
enteros.
El compuesto A se encuentra en gran exceso estequiométrico respecto del reactante
B, por lo tanto podemos suponer que durante la reacción su concentración permanecerá
aproximadamente constante: [A] ≈ [A]0 . En estas condiciones, la ley de velocidad tomará
d[B]
− = (k[A]n0 )[B]m = k 0 [B]m (3.69)
dt
La integración entre [B]0 y [B]0 /2 de la ecuación [3.69] permite relacionar las condiciones
iniciales de la reacción con el tiempo de semireacción,
1 − 2m−1 1 − 2m−1
t1/2 = [B]1−m
0 = 0 P 1−m (3.70)
0
k (1 − m) k (1 − m)(RT )1−m A,0
El valor de m puede calcularse particularizando la ecuación [3.70] para los valores que
aparecen en las columnas tercera y cuarta,
(3) (3)
!1−m 1−m
t1/2 PB,0
80 20
(4)
= (4)
→ = →m=2
t1/2 PB,0 40 40
El valor de n puede calcularse utilizando los valores de las columnas primera y segunda,
pues la presión del reactante B permanece constante,
(1) !n n
t1/2 (2)
k 0(2)
[A]0 40 1000
(2)
= 0(1) = (1)
→ = →n=1
t1/2 k [A]0 80 2000
Por último la constante de velocidad puede calcularse a partir de los datos de la columna
cuarta:
(RT )2 (0,082 × 273,15)2
k= = = 181,1 s−1 M−1
t1/2 PA,0 PB,0 500 20
160
760 760
d[A]
Cuadro 3.3: Ecuaciones integradas utilizadas frecuentemente. − = k[A]p [B]q
dt
1 1 1
3/2 1/2 c 6= 0 α+c
− (1 + c) 2 = k2 cθr 2 (t − t0 )
2
α
1
c=0 α−1 − 1 = kθr 2 (t − t0 )
1+c
0 1 ln α+c = kr(t − t0 )
1 1 1 1
c>0 tan−1 1
c
2
− tan−1 α
c
2
= k2 c 2 θ 2 r(t − t0 )
1 1
1/2 1 c=0 α− 2 − 1 = k2 θ 2 r(t − t0 )
1 1 1
(1+c) 2 (α 2 +(−c) 2 ) 1 1
c<0 ln 1 1 = k2 (−c) 2 θ 2 r(t − t0 )
(α+c) 2 (1+(−c) 2 )
α+c
1 1 c 6= 0 ln α(1+c) = kcθr(t − t0 )
c=0 α−1 − 1 = kθr(t − t0 )
1 1 1 3
0 3/2 (α + c)− 2 − (1 + c)− 2 = k2 θ 2 r 2 (t − t0 )
1 1 1 3
1/2 3/2 c 6= 0 (1 + c)− 2 − α2
1 = k2 cθ 2 r 2 (t − t0 )
(α+c) 2
3
c=0 α−1 − 1 = kθr 2 (t − t0 )
0 2 (α + c)−1 − (1 + c)−1 = kθr2 (t − t0 )
Figura 3.8: Representación de la función f (α), ecuación ([3.73]), para los datos del pro-
blema.
d[A]
− = f ([B])[A]p ≈ f ([B]0 )[A]p = kap [A]p (3.76)
dt
Se puede utilizar cualquiera de los métodos ya descritos para averiguar el orden
de la reacción global de la reacción, sólo que ahora el orden global coincidirá con
el orden parcial respecto del reactante limitante. A continuación se determina el
valor de la constante de velocidad aparente utilizando la ecuación de velocidad in-
tegrada. Se obtendrá de las cinéticas un conjunto de constantes cinéticas aparentes
{kap,1 , kap,2 ...kap,n } las cuales representaremos en función de la concentración
inicial de reactivo en exceso, [B]0 .
La forma de la curva nos dará información acerca de la dependencia de la
ley cinética respecto del reactante en exceso y del mecanismo que sigue la reac-
ción. No existen procedimientos sistemáticos para averiguar la dependencia de la
constante aparente respecto de la concentración inicial de reactante. Generalmen-
te, se propone un conjunto de mecanismos para la reacción basándonos en otros
tipos de información como puede ser la estructura de los productos de reacción,
la reactividad de los grupos funcionales implicados, etc. Se averigua entonces la
a
En 1865, los ingleses Harcourt y Esson analizaron las reacciones entre el peróxido de hidró-
geno (H2 O2 ) y el ácido iodhídrico (HI) y entre el permanganato (KMnO4 ) y el ácido oxálico
((CO2 H)2 ). Estos químicos escribieron las correspondientes ecuaciones diferenciales, las integra-
ron y determinaron la relación entre el tiempo y las concentraciones. También propusieron una ecua-
ción para la dependencia de la constante de velocidad con la temperatura de la forma: k = AT c .
condujo a buenas rectas cuyas pendientes (kap ) se recogen en la tabla. Determine la ley
cinética de velocidad y la velocidad específica de la reacción.
Puesto que se observa que las cinéticas son de primer orden respecto del producto, p, está
claro que podremos proponer la siguiente ley de velocidad para la reacción:
d[P]
= kap [A], kap = f ([B]0 )
dt
Al representar kap en función de la concentración inicial de iluro se obtiene una recta que
pasa por el origen, véase la figura 3.9, lo cual indica que:
kap = k[B]0
d[P]
= k[A][B]
dt
que es la ecuación buscada. La reacción es de orden uno tanto para el iluro como para
la quinona, el orden global de la reacción es dos y la velocidad específica de la reacción,
obtenida de la pendiente de la representación anterior es k = 7,06 × 104 s−1 M−1
Figura 3.9: Representación de kap vs. [iluro]0 . Se obtuvo una pendiente k = (7,1±0,4)×
104 s−1 M−1 .
Una ventaja de este tipo de métodos radica en que no hay que integrar ecua-
ción diferencial alguna, ya que la velocidad se relaciona con la composición a
través de un sistema de ecuaciones algebraicas.
3.6. Cuestiones
Cuestión 1. Demuestre que para una reacción irreversible se cumple que:
c(t) L∞ − L(t)
α= =
c0 L∞ − L0
Donde L(t) es una propiedad física aditiva y lineal. ¿Para qué tipo de reacciones es válida
la ecuación anterior?.
Cuestión 2. Indique las propiedades físicas aditivas y lineales que conozca que permitan
seguir la cinética de una reacción.
Cuestión 3. Escriba un diagrama de flujo que contemple todos los casos posibles de la
obtención de la velocidad específica para el caso de las reacciones de primer orden.
Cuestión 4. Deduzca la ecuación de Guggenheim para las reacciones de primer orden.
Cuestión 5. Dada la siguiente reacción:
νA A + νB B → productos
1 d[A]
− = k[A]p [B]q
νA dt
exprese tal ecuación diferencial en función del parámetro adimensional α.
Cuestión 6. La reacción entre el V+3 y el Cr+2 sigue una ley cinética de segundo or-
den respecto de los reactantes. La velocidad específica se midió para diversas mezclas
de reacción a 25o C y fuerza iónica 0.500 M que diferían solamente en su pH. Se pide
que obtenga una relación matemática entre la concentración de protones y la velocidad
específica aparente medida.
DATOS:
d[i − PrBr]
r1 =
dt
d[i − PrOH]
r2 =
dt
d[C3 H6 ]
r3 =
dt
[C3 H6 ]∞
R=
[i − PrOH]∞
b) Demuestre que las constantes cinéticas pueden ser calculadas a partir de los si-
guientes datos:
De la pendiente y ordenada de las representaciones del log([i − PrBr]) vs. t
para diversas concentraciones de hidróxido.
De la pendiente y ordenada de la representación de [i − PrOH]/[C3 H6 ] vs.
[OH]−1 .
Mecanismo 1.
RX
(R+ , X− )
k
(R+ , X− ) + 2H2 O −→
1
ROH + H3 O+ + X−
k
(R+ , X− ) + N− 2
3 −→ RN3 + X
−
Mecanismo 2.
k
1
RX + 2H2 O −→ ROH + H3 O+ + X−
k
RX + N− 2
3 −→ RN3 + X
−
[N−
3 ]0 /M kobs × 104 /s−1 [RN3 ]∞ /[ROH]∞
0.00 2.21 0.00
0.076 3.02 0.63
0.156 3.64 1.28
0.237 4.11 1.95
Análisis de Datos.
Reacciones Complejas
163
Índice
4.1. Introducción . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 164
4.1.1. Mecanismos de primer orden . . . . . . . . . . . . . 164
4.1.2. Mecanismos de Primer Orden y Teoría de Grafos . . 166
4.1.3. Campo de aplicación de los Mecanismos de Primer
Orden . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 167
4.1.4. Integración del sistema de ecuaciones diferenciales . 168
4.1.5. Método de las transformadas de Laplace . . . . . . . 168
4.1.6. Algoritmo de integración . . . . . . . . . . . . . . . 170
4.2. Las reacciones consecutivas . . . . . . . . . . . . . . . . . 171
4.2.1. Definición e integración del modelo matemático . . 171
4.2.2. Análisis de datos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 174
4.3. Las Reacciones Concurrentes . . . . . . . . . . . . . . . . 177
4.3.1. Definición e integración del modelo matemático . . 177
4.3.2. Tratamiento de Datos . . . . . . . . . . . . . . . . . 179
4.4. Las reacciones paralelas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 182
4.4.1. Definición e integración del modelo matemático . . 182
4.4.2. Tratamiento de datos . . . . . . . . . . . . . . . . . 183
4.5. Reacciones equilibradas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 185
4.5.1. Definición del modelo matemático . . . . . . . . . . 185
4.5.2. Integración del modelo matemático . . . . . . . . . 186
4.5.3. Tratamiento de los datos . . . . . . . . . . . . . . . 187
4.6. Reacciones reversibles de primer orden . . . . . . . . . . 190
4.6.1. Solución general . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 191
4.6.2. Simetrización de la matriz de reacción . . . . . . . . 192
4.6.3. Vectores y autovalores de A . . . . . . . . . . . . . 194
4.6.4. Recapitulación y ejemplos . . . . . . . . . . . . . . 194
4.7. Cinéticas de Relajación . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 198
4.7.1. Integración del sistema de ecuaciones diferenciales . 200
4.8. Ecuaciones estacionarias lineales . . . . . . . . . . . . . . 205
4.8.1. Introducción . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 205
4.8.2. Ecuaciones estacionarias. Caso general . . . . . . . 208
4.8.3. Ecuaciones estacionarias. Sistemas consecutivos . . 209
4.8.4. Ecuaciones estacionarias. Redes . . . . . . . . . . . 212
4.1. Introducción
En este capítulo, vamos a estudiar aquellos mecanismos en los que no es po-
sible identificar un sólo paso limitante de la velocidad. En estos sistemas, las
ecuaciones diferenciales que describen la cinética son función de más de un grado
de avance debido a que coexisten varias reacciones que proceden con velocidades
comparables. Por esta razón, se conoce a este tipo de reacciones como complejas
o compuestas (el término técnico inglés es “multi-step reactions”).
A diferencia del tratamiento expuesto para las reacciones que siguen formal-
mente un orden, no es posible obtener una expresión general de la ley de veloci-
dad. Por otra parte, el tratamiento unificado de los modelos matemáticos asociados
a estas reacciones excede del nivel introductorio del curso.
No obstante, si el mecanismo está compuesto por reacciones de primer or-
den es posible seguir una metodología común para la integración de la ley de
velocidad. En consecuencia, analizaremos aquellos mecanismos de primer orden
que se encuentran con mayor frecuencia en el trabajo experimental. En concreto,
estudiaremos en las próximas secciones las reacciones conocidas como:
consecutivas,
concurrentes,
paralelas,
y las reacciones equilibradas.
o, en forma matricial,
ċ = Ac (4.2)
donde A es una matriz cuadrada de dimensiones n × n cuyos elementos, aij , son
independientes del tiempo. Veamos cuál es su significado físico.
Para centrar ideas supongamos un sistema con n = 3 especies que se intercon-
vierten entre sí mediante reacciones de primer orden. Como ejemplo, proponemos
la isomerización del 1-buteno sobre un catalizador, véase la figura 4.1. Vemos que
el 1-buteno (A1 ) y sus isómeros el cis-2-buteno (A2 ) y el trans-2-buteno (A3 ) se
interconvierten entre sí mediante un conjunto de reacciones de primer orden.
k31 k32 0
La ley de velocidad para este sistema vendrá dado por la ecuación diferencial
([4.4]). Las ecuaciones diferenciales se han construido teniendo en cuenta las
fuentes de generación de la y los caminos de su desaparición de las tres especies
implicadas en la reacción.
ċ1 −(k12 + k13 ) k21 k31 c1
ċ2 = k12 −(k21 + k23 ) k32 c2 (4.4)
1 1 0
Obsérvese que se puede formar la matriz de coeficientes cinéticos (K) con tan
sólo substituir cada elemento no nulo de la matriz T por el coeficiente cinético
(kij ) que relaciona la conversión de la especie i en la j.
La Teoría de Grafos deriva muchas propiedades de los sistemas que pueden
ser representados por un grafo a partir de la estructura de la matriz topológica (es
decir a partir de la distribución de los elementos 1 en la misma). Esto quiere decir
que la variación de la concentración de las especies con el tiempo depende funda-
mentalmente de la estructura de la matriz T y K. Como vamos a ver en próximas
secciones, el primer paso para deducir el valor de ci (t) es plantear correctamente
el valor de K.
Ambas reacciones son de orden uno respecto de cada reactante por lo que el
mecanismo no es de primer orden. Sin embargo, podemos conseguir cinéticas de
primer orden con tan sólo llevar a cabo la reacción en exceso de la base. En efecto,
denominemos A1 al di-éster metílico , A2 al mono-éster , A3 al oxalato y B a los
iones hidróxido. El mecanismo se puede representar de la siguiente forma:
1 k
A1 + B −→ A2 rV,1 = k1 [B][A1 ]
k2
A2 + B −→ A3 rV,2 = k2 [B][A2 ]
donde ki? son dos constantes aparentes que dependen de la concentración de anio-
nes hidróxido. Puesto que este compuesto está en gran exceso, el valor de ki?
no variará de forma apreciable durante el experimento. Obsérvese que la dege-
neración del orden de reacción respecto de correactante común a ambas etapas
conduce a una ley de velocidad de primer orden.e
La ley de velocidad que se podrá deducir del siguiente mecanismo formal:
k?
1
A1 −→ A2 rV,1 = k1? [A1 ]
k?
2
A2 −→ A3 rV,2 = k2? [A2 ]
ẋ = −kx
Φ(ẋ) =sφ(s) − θ
Φ(−kx) = −kφ(s)
por lo tanto:
θ
sφ(s) − θ = −kφ(s) → φ(s) =
s+k
donde x(0) = θ. Obsérvese que la ecuación diferencial en t es algebraica en s y que no
se necesita realizar la integral ([4.8]) para obtener la transformada. Aplicamos ahora el
operador transformada inversa que debe buscarse en la tabla (4.1). Esta indica que:
−1 θ −1 1
Φ = θΦ = θe−kt
s+k s − (−k)
donde se ha hecho uso de la linealidad de operador transformada inversa.
ċ4 0 k 0 c3
La aplicación del operador transformada de Laplace a ambos miembros de la igualdad
conduce a:
sφ1 − θ −k 0 0 φ1
=
sφ2 k −k 0 φ2
sφ3 0 k 0 φ3
Reordenamos el sistema anterior:
−k − s 0 0 φ1 −θ
k −k − s 0 φ2 = 0
0 k −s φ3 0
0 0 0
por lo que tras aplicar las ecuaciones ([4.5]) y ([4.6]) a la matriz K se llega a la
siguiente ley de velocidad:
ċ1 −k12 0 0 c1
ċ2 = k12 −k23 0 c2 (4.15)
ċ3 0 k23 0 c3
En el caso k12 = k21 las soluciones de la ecuación diferencial vienen dadas por
las ecuaciones ([4.11]), ([4.12]) y ([4.13]).
ln(k23 /k12 )
t? = (4.21)
k23 − k12
k23
c?2
k23 k12 − k23
= (4.22)
θ k12
L(t) = λ + l1 c1 + l2 c2 + l3 c3 (4.23)
c3 = θ − c1 − c2 (4.24)
donde:
(l2 − l1 )k12 + (l1 − l3 )k23
α1 = θ (4.29)
k23 − k12
(l3 − l2 )k1
α2 = θ (4.30)
k23 − k12
Las ecuaciones ([4.29]) y ([4.30]) son la base del tratamiento de datos. Para de-
terminar los valores de los coeficientes cinéticos hay que representar el valor de
log(∆) frente al tiempo. Tal representación consistirá en una curva que presen-
tará un tramo recto a tiempos grandes, suponiendo que los coeficientes cinéticos
tengan valores suficientemente diferentes.
Si suponemos que k12 > k23 , el segmento que aparece a tiempos de reacción
grandes estará relacionado con la segunda exponencial; en efecto si el tiempo es
grande se cumplirá que:
e−k12 t << e−k23 t (4.31)
y por lo tanto se cumplirá que:
∆2 = ∆ − α2 e−k23 t (4.33)
log(∆2 ) = log(α1 e−k12 t ) = log(α1 ) − k12 t (4.34)
Figura 4.5: (a) Representación y ajuste lineal de ln(∆2 ) vs t: k12 = −1,06 s−1 , ln(α1 ) =
0,3341479708. (b) Representación y ajuste lineal de ln(∆) vs t: k23 = 9,989 × 10−2 s−1 ,
ln(α2 ) = 0,454816534.
obtener su logaritmo y representar esta cantidad frente al tiempo, véase la figura 4.5 (a).
Tal como se observa en la figura (4.5) (a), se obtiene una recta cuya pendiente es posible
obtener k12 y cuya ordenada es log(α1 ). Los resultados de los ajustes son:
Obsérvese que los datos fueron simulados utilizando k12 = 1,0000 s−1 y k23 = 0,1000 s−1 .
como era de esperar, la ecuación [4.41] indica que el decaimiento de cada uno de
los reactantes es exponencial.
La concentración de producto común formado se calcula a partir del balance
de concentración. Si denominamos θ a la suma de las concentraciones iniciales de
cada uno de los reactantes, es decir:
n
X
θ= θi (4.42)
i=1
Las ecuaciones [4.28], véase la página p.175, y [4.46] son formalmente análogas
–tienen la misma forma matemática– por lo que los métodos estudiados para cal-
cular las constantes de velocidad de las reacciones consecutivas son válidos para
el cálculo de las velocidades específicas de las reacciones concurrentes.
Ejemplo 4.4. Reacciones concurrentes. Hidrólisis de haluros de alquilo.
Determine las constantes de velocidad de las reacciones de hidrólisis que sufre la
siguiente mezcla de haluros de alquilo y la concentración inicial de cada uno de ellos.
Datos:
Los haluros de alquilo se hidrolizan para dar el alcohol correspondiente y HCl acuoso.
Conforme progresa la reacción aumenta la acidez de la disolución y se aprovecha esta
propiedad para seguir la cinética.
En el problema que nos ocupa, se cumple que n = 2. Denominemos A1 al haluro que
se hidroliza más rápidamente y A2 al que lo hace con más lentitud. La particularización de
la ecuación [4.44] permite expresar la concentración de protones en función del tiempo,
véase la siguiente expresión:
Puesto que cada haluro hidrolizado introduce un protón en el medio, se cumplirá que:
[H3 O+ ]∞ = [A1 ]0 + [A2 ]0 por lo que la concentración de protones actual vendrá dada
por la ecuación [4.47]:
ln([H3 O+ ]∞ −[H3 O+ ]−[A2 ]0 e−k23 t ). Los puntos se ajustan bien a una recta hasta los 10
s de reacción. El valor del coeficiente cinético estimado resultó ser: k13 = 3,25×10−4 s−1
y de la ordenada en el origen se obtuvo una concentración del haluro A1 igual a ≈ 0,035
M. La suma de las concentraciones iniciales fue por tanto: [A1 ]0 + [A2 ]0 = 0,053 M
(experimental: [H3 O+ ]∞ = 0,058). No obstante, en este caso, tenemos muy pocos puntos
Figura 4.6: (a) Variación del ln([H3 O+ ]∞ − [H3 O+ ] − c) respecto del tiempo: 1 c = 0,
proceso lento; del ajuste se obtuvo una constante igual a k23 = 1,02 × 10−4 s−1 . 2
c = α2 e−k23 t , proceso rápido. Del ajuste se obtuvo una constante cinética igual a k13 =
3,25 × 10−4 s−1 .(b) Variación de la concentración de protones con el tiempo. Del ajuste
no lineal (línea continua) se obtuvo: k13 = 7,35 × 10−4 s−1 ;k23 = 1,17 × 10−4 s−1 ;
[A1 ] = 0,016 M; [A2 ] = 0,042 M.
para realizar los ajustes, por lo que los resultados son poco exactos. En la parte (b) de la
figura se han representado la concentración de protones frente al tiempo y los resultados
del ajuste por mínimos cuadrados no lineal de estos datos a la ecuación [4.47]. Se obtuvo
un ajuste es satisfactorio cuando: k13 = 7,35×10−4 s−1 , k23 = 1,17×10−4 s−1 , [A1 ]0 =
0,016 M y [A2 ]0 = 0,042 ([A1 ]0 + [A2 ]0 = 0,058, experimental: [H3 O+ ]∞ = 0,058). Se
observa que no existe gran discrepancia en el valor de la constante cinética del proceso
lento, pero la constante de velocidad del proceso rápido presenta una discrepancia de casi
el 50 %. Por último, obsérvese que, en ausencia de otra información, no se puede asignar
de forma unívoca los valores de las constantes de velocidad a ninguna de las reacciones
de hidrólisis mostradas en el enunciado del problema.
por lo que tras aplicar las ecuaciones [4.5] y [4.6] a la matriz K se llega a la
siguiente ley de velocidad:
ċ1 −k 0 0 ··· 0 c1
ċ2 k12 0 0 ··· 0 c2
ċ3 = k13 0 0 ··· 0 c3
(4.49)
.. .. .. .. . . .. ..
. . . . . . .
ċn k1n 0 0 ··· 0 cn
donde:
j=n
X
k= k1j (4.50)
j=2
θ
φ1 = (4.53)
s+k
θk1j
φj = (4.54)
s(s + k)
θk1j
cj (t) = 1 − e−kt (4.57)
k
Las reacciones paralelas puras son poco comunes pues implican una fragmen-
tación del reactante de diversas formas para producir productos diferentes. No
obstante se conocen algunas de estas reacciones, véase el ejemplo presentado en
esta sección.
Sin embargo, las reacciones paralelas formales donde un reactante, que pre-
senta más de un punto de ataque, reacciona con un correactante-reactante en ex-
ceso son muy comunes. Podemos citar como ejemplos de reacciones paralelas
de interés industrial algunas isomerizaciones, las reacciones de substitución sobre
anillos aromáticos, o las reacciones de hidroxiformilación.
c∞
j k1j
= (4.58)
θ k
En primer lugar calcularemos k = k12 + k13 . Para ello basta con representar log(c1 ) vs.
t. La concentración del reactante vendrá dada por:
c1 = θ − c2 − c3
En la figura 4.8 se muestra el ajuste. La pendiente de la recta es k = 0,084min−1 . Ahora
obtenemos el valor de la ratio de estas dos constantes representando la concentración de
ciclopropano frente a la concentración de eteno. Del nuevo ajuste, véase la figura 4.8 se
deduce que r = k13 /k12 = 8,67 × 10−3 . El valor de las constantes cinéticas será por lo
tanto:
k
k12 = = 8,33 × 10−2 min−1
1+r
k13 = k − k12 = 7,2 × 10−4 min−1
R · C O2 CH3 + H2 O
RC O2 H + CH3 OH
R · C O2 CH3
RC O2 H
L(t) − L∞ = ∆l(c1 − c∞
1 ) (4.72)
L(t) − L∞ = ∆lc∞
1 κe
−kt
= ∆lc∞
2 e
−kt
(4.73)
puesto que c∞ ∞
2 = κc1 . Si tomamos logaritmos naturales en ambas partes de la
igualdad ([4.73]) se llega finalmente a la expresión ([4.74]) que permite el análisis
de los datos experimentales,
ln (L(t) − L∞ ) = ln(∆lc∞
2 ) − kt (4.74)
k12 eh
eh = ∆lc∞
1 κ→κ= = (4.75)
k21 ∆lc∞
1
Puesto que la reacción se seguirá midiendo una propiedad física L(t) y no rea-
lizando análisis químicos periódicos, rara vez se conocerá el valor de c∞
1 . No
obstante, la ecuación ([4.72]) indica que, cuando t = 0, se cumple que,
∆L = L(0) − L∞ = ∆l(θ1 − c∞
1 )
∆L (4.76)
→ c∞
1 = θ1 −
∆l
Finalmente, los valores de k12 y k21 se obtienen de la resolución del siguiente
sistema de ecuaciones algebraicas,
k = k12 + k21
k (4.77)
κ = 12
k21
H C O2 H + C2 H5 OH
H C O2 C2 H5 + H2 O
En las condiciones experimentales en las que se llevó a cabo la esterificación pudo con-
siderarse que tanto el etanol y el agua estaban en exceso respecto del ácido fórmico y
formiato. Si representamos como A1 al ácido y como A2 al éster, la reacción podrá repre-
sentarse de la siguiente forma:
A1
A2
y en consecuencia, la ley de velocidad será:
−c˙1 = k1 c1 − k2 c2
2θv = VA h + VA c1
2θ
c1 = v−h
VA
Donde VA es el volumen de la alícuota, θ la concentración del agua de barita y h la
concentración de ácido clorhídrico. De la ecuación anterior se deduce inmediatamente
que:
2θ
c1 − c∞1 = (v − v∞ )
VA
y por último puesto que:
c1 − c∞ ∞ −kt
1 = c2 e
En la figura (4.9) se muestra la recta obtenida. Del ajuste por mínimos cuadrados se ob-
tuvieron los siguientes valores para la pendiente, k, y la ordenada en el origen, n:
∞
c VA
n = log 2 = 2,9574
2θ
k = k12 + k21 = 3,59 × 10−3 min−1
Las ecuaciones anteriores indican que es necesario conocer el valor de VA /(2θ) para
poder determinar el valor de c∞ 2 a partir de la ordenada en el origen. Este valor se calcula
a partir de los datos de la valoración a t = 0. En efecto:
2θ 2θ c1 (0) + h
c1 (0) = v0 − h → =
VA VA v0
y,
2θ 67,7 + 26,1
= = 2,1553mol L−2
VA 43,52
En consecuencia, la concentración del éster a tiempo infinito valdrá:
VA en −3
c∞
2 = = 2,1553e2,9574−log(10 ) = 0,04148 molL−1
2θ
donde se ha introducido el factor log(103 ) para la conversión a litros de la concentración
del éster. Conocida ésta, podemos calcular la relación k12 /k21 :
k12 c∞
2 0,04148
= ∞ = = 1,58
k21 θ1 − c2 0,0677 − 0,04148
Por último, conocida la suma y relación de los coeficientes cinéticos, es posible conocer
el valor de los coeficientes:
k 3,59 × 10−3
k21 = = = 1,4 × 10−3 min−1
1+κ 1 + 1,58
k12 = k21 κ = 1,4 × 10−3 × 1,58 = 2,2 × 10−3 min−1
Puesto que la ecuación [4.78] se cumple para cada una de las columnas de X será
cierta la ecuación matricial [4.79]:
AX = XΛ (4.79)
A = X(ΛX−1 ) (4.80)
ċ = Ac (4.81)
ẏ = Λy (4.84)
ẏn 0 0 · · · λn yn
cuyas n soluciones tienen la siguiente forma:
Nuestro objetivo es pues encontrar una matriz P que, a través de una transforma-
ción de semejanza, nos conduzca a una matriz A0 simétrica. Supongamos que las
componentes del vector c? = {c?1 , c?2 . . . c?n } son las concentraciones de equilibrio
y que la matriz D, diagonal, tiene por elementos las componentes del vector c? .
1
Vamos a demostrar que la matriz P = D 2 simetriza a la matriz A a través de una
transformación de semejanza.
Para ello, substituyamos el valor de P en la ec. [4.87]:
1 1
A0 = D− 2 (AD 2 ) (4.88)
n q q
1 X
AD 2 = aik δkj c?j = aij c?j (4.89)
ij
k=1
1
y a continuación multiplicamos por D 2 :
s s
n
δ q c?j c?j
pik? akj c?j = aij
X
a0ij = = kji (4.90)
ci c?i c?i
k=1
Con lo que queda demostrado que la matriz A0 es simétrica y por tanto tiene un
conjunto de autovectores completo.
Es importante recalcar que el álgebra matricial asegura que todos los auto-
valores de una matriz real simétrica son negativos o nulos. Como corolario de la
afirmación, podemos asegurar que la concentración de todas las especies conver-
ge a su valor de equilibrio de forma monótona, es decir, un mecanismo de primer
orden no puede presentar un comportamiento oscilante.
1
Por último, obsérvese que la matriz D 2 tiene elementos finitos siempre que
las concentraciones de las especies en el equilibrio tengan valor distinto de ce-
ro. Basta con que una de las reacciones sea irreversible para que alguna de las
concentraciones en equilibrio se anule y no se pueda aplicar el método.
1,0 3,4 0
0,5332
+2,0454
i
Obsérvese que el autovector asociado al autovalor nulo es idéntico al vector c? (composición
en el equilibrio). Esto es así porque en el equilibrio la derivada respecto del tiempo de todas las
especies debe de ser nula, ya que la velocidad de reacción es nula en el equilibrio. Se cumplirá:
c? = Ac? = 0 → Ac? = 0c?
con lo que queda demostrado que es el autovector asociado al autovalor nulo.
Figura 4.10: Variación de la concentración de los tres isómeros del 1-buteno de acuerdo
con las constantes de velocidad reportadas por Lago y Haage.
Se pide que:
1. Derive la expresión para el tiempo de relajación asumiendo que el tiempo de relaja-
ción del equilibrio protolítico (τH ) es mucho más pequeño que el de complejación
con el ion magnesio divalente (τ ).
2. Se midió el tiempo de relajación de un conjunto de mezclas de reacción preparadas
en medio taponado a partir de concentraciones diferentes de ATP y de iones Mg2+ .
Calcule, a partir de los datos de la tabla, el valor de k1 y k−1 .
d[ATP4− ] d[Mg2+ ]
= −k1 [ATP4− ][Mg2+ ] + k−1 [MgATP2− ] = (4.115)
dt dt
Resulta obvio que la cinética del sistema podrá expresarse con tan sólo una ecuación
diferencial, pues las tres ecuaciones diferenciales [4.111]-[4.113] están ligadas por dos
relaciones independientes entre sus variables: ([4.118]-[4.119]).
Reduzcamos la dimensión del sistema de ecuaciones utilizando los balances de con-
centración. En primer lugar, tenemos en cuenta que, en todo momento, la concentración
de ATP4− y HATP3− es la marcada por la constante de protólisis (Ka ):
[HATP3− ] [HATP3− ]e
Ka = 4− = = (4.120)
[ATP ][H+ ]0 [ATP4− ]e [H+ ]0
Donde [H+ ]0 es la concentración de iones hidronio impuesta por el tampón (una constan-
te). De acuerdo con las ecuaciones [4.118], [4.119] y [4.120], la concentración de ATP en
forma de complejo y la concentración de magnesio divalente libre son:
(4.122)
Tras substituir las ecuaciones [4.121] y [4.122] en la ecuación diferencial [4.111] se ob-
tiene una expresión cuya única variable es la [ATP4− ]:
d[ATP4− ]
= −k1 [ATP4− ]([1 + Ka [H+ ]0 ][ATP4− ] − [ATP4− ]e − [HATP3− ]e + [Mg2+ ]e )+
dt
+ k−1 ([ATP4− ]e + [HATP3− ]e + [Mg2+ ]e − [1 + Ka [H+ ]0 ][ATP4− ])
(4.123)
Sobre la ecuación [4.123] realizamos el cambio de variable:
Figura 4.11: Representación del inverso del tiempo de relajación (τ ) frente a la concen-
tración en el equilibrio θ a pH=7.11. Se obtuvo una recta de pendiente k1 = 1,18 × 107
s−1 M−1 , y ordenada a = 950,23 de donde se obtuvo un valor de la constante de velocidad
de la reacción inversa k−1 = 763 s−1 .
Por último, si consideramos que δ 2 << δ debido a que la perturbación es pequeña, llega-
mos a la ecuación buscada:
dδ 1
= − k−1 [1 + Ka [H+ ]0 ] + k1 θ δ = − δ
(4.127)
dt τ
donde τ es el tiempo de relajación:
1
= k−1 (1 + Ka [H+ ]0 ) + k1 θ (4.128)
τ
La ecuación [4.128] indica que la representación del inverso del tiempo de relajación
frente a la concentración de equilibrio θ, a pH constante, debe de conducir a una recta
cuya ordenada informe sobre k−1 y cuya pendiente sobre k1 . La figura 4.11 refleja esta
situación.
De la pendiente de la representación se obtuvo un valor de la constante directa igual
a:
k1 = 1,18 × 107 s−1 M−1
De la ordenada (a = 950,2 s−1 ), se obtuvo la constante de la reacción inversa a partir de
las siguientes relaciones:
a
a = k−1 1 + Ka [H+ ]0 → k−1 =
1 + Ka [H+ ]0
[HATP3− ]e
Ka =
[ATP4− ]e [H+ ]0
pH [ATP4− ]e × 104 /M [HATP3− ]e × 105 /M Ka × 10−6 /M−1
7.11 1.03 2.52 3.15
7.48 1.12 1.17 3.15
7.11 0.64 1.57 3.16
7.11 1.60 3.92 3.16
7.11 2.78 6.82 3.36
K̄ = 3.16
por lo que:
950,23
k−1 = = 763 s−1
1 + 3,16 × 106 × 10−7,11
pues las cinéticas se realizaron a pH = 7.11. El valor de Ka utilizado es la media de las
constantes de acidez obtenidas a partir de las concentraciones de equilibrio mostradas en
la tabla 4.4.
Por último, el valor de la constante de estabilidad del complejo entre el ATP y el
magnesio divalente es:
k1 1,18 × 107
K1 = = = 1,54 × 104 M−1
k−1 763
k
l
Xi + Cr −→ Cs , rl = (kl [Cr ])[Xi ] = λl [Xi ] (4.129)
l k
Xi + Xj −→ Ck , rl = kl [Xi ][Xj ] (4.130)
k
l
2Xi −→ Ck , rl = kl [Xi ]2 (4.131)
k1
A + B X1 (4.132)
k2
k3
X1 X2 (4.133)
k4
k5
X2 + C X3 (4.134)
k6
k7
X3 P (4.135)
k8
(4.136)
El esquema puede reescribirse como una red cinética de primer orden con el si-
guiente grafo asociado,
0 λ01 0 0 ··· 0 0 0
λ10 0 λ12 λ13 ··· λ1,n−1 λ1,n 0
···
0 λ21 0 λ23 λ2,n−1 λ2,n 0
0 λ31 λ32 0 ··· λ3,n−1 λ3,n 0
K= (4.137)
.. .. .. .. .. .. .. ..
. . . . . . . .
0 λn−1,1 λn−1,2 λn−1,3 ··· 0 λn−1,n 0
0 λn,1 λn,2 λn,3 ··· λn,n−1 0 λn,n+1
0 0 0 0 ··· 0 λn+1,n 0
−λ01 λ10 0 0 ··· 0 0 0
λ01 −β1 λ21 λ31 ··· λn−1,1 λn,1 0
−β2 ···
0 λ12 λ32 λn−1,2 λn,2 0
0 λ13 λ23 −β3 ··· λn−1,3 λn,3 0
A=
.. .. .. .. .. .. .. ..
. . . . . . . .
0 λ1,n−1 λ2,n−1 λ3,n−1 · · · −βn−1 λn,n−1 0
0 λ1,n λ2,n λ3,n · · · λn−1,n −βn λn+1,n
0 0 0 0 ··· 0 λn,n+1 −λn+1,n
(4.138)
donde:
n+1
X
βi = λi,j (4.139)
j=1
[A] [A]
[X1 ] [X1 ]
[X2 ]
[X2 ]
d [X3 ] [X3 ]
=A× (4.140)
dt
.. ..
.
.
[Xn−1 ] [Xn−1 ]
[Xn ] [Xn ]
[P] [P]
d[A]
= −λ01 [A] + λ10 [X1 ] (4.141)
dt
d[P]
= λn,n+1 [Xn ] − λn+1,n [P] (4.142)
dt
d[Xi ]
= 0, ∀i ∈ {1..n} (4.143)
dt
El siguiente paso es resolver en [X1 ] y [Xn ] el sistema algebraico [4.143] y substi-
tuir las soluciones en [4.141] y [4.142]. La forma general del sistema lineal[4.143]
es,
−λ10 [A]
0
0
.. =
.
0
−λn+1,n [P]
−β1 λ21 λ31 ··· λn−1,1 λn,1 [X1 ]
λ
12 −β 2 λ32 ··· λn−1,2 λn,2
[X2 ]
λ13 λ23 −β3 ··· λn−1,3 λn,3 [X3 ]
= .. .. .. .. .. × .. =
..
.
. . . . . .
λ1,n−1 λ2,n−1 λ3,n−1 ··· −βn−1 λn,n−1 [Xn−1 ]
λ1,n λ2,n λ3,n ··· λn−1,n −βn [Xn ]
= A0 x (4.144)
donde:
n n
1 Y 1 Y
Λ0,n+1 = λi,i+1 , Λn+1,0 = λi+1,i (4.149)
D0,n+1 D0,n+1
i=0 i=0
X j−1
n+1 Y n
Y
D0,n+1 = λi,i−1 λi,i+1 (4.150)
j=1 i=1 i=j
Obsérvese que desde el punto de vista formal, todo ocurre como si A se trans-
formara directamente en P a una velocidad específica Λ0,n+1 y P en A a una
velocidad Λn+1,0 . Estos coeficientes cinéticos son de pseudo-primer orden y sus
dimensiones en el SI son de s−1 .
Examinemos algunas propiedades de la ecuación [4.148]:
La ecuación es consistente desde el punto de vista termodinámico. En efec-
to, cuando se alcanza el equilibrio se cumple que rA = rP , o lo que es lo
mismo:
Yn
n n
λi,i+1
Y Y [P]e i=0
λi,i+1 [A]e = λi+1,i [P]e → = n (4.151)
[A]e Y
i=0 i=0 λi+1,i
i=0
En efecto, si desarrollamos los valores de los coeficientes λij y separamos
las concentraciones de reactantes y correactantes se obtiene finalmente la
expresión [4.152], la conocida ley de acción de masas,
n
Y
ki,i+1
i=0 [P]νp [Q]νq · · ·
K= n = (4.152)
Y [A]νa [B]νb · · ·
ki+1,i
i=0
Podemos ver que los mecanismos pueden ser muy complejos. No obstante, las
fórmulas obtenidas para los caminos lineales van a ser de de gran utilidad, pues
permitirán simplificar notablemente la obtención de las ecuaciones de velocidad.
En la sección anterior, definimos dos coeficientes de pseudo-primer orden
Λ0,n+1 como la constante aparente de conversión de A en P, y Λn+1,0 como el
coeficiente de conversión de P en A. En general, podemos definir un coeficiente
aparente para un segmento de la redj entre los nodos R y S de forma que existan
n centros de reacción entre ellos utilizando las mismas ecuaciones. Emplearemos
la siguiente notación para el coeficiente de pseudo-primer orden que relaciona dos
nodos de la red, R y S, que se transforman uno en el otro a través de n centros de
reacción: Λrs . Para aplicar las fórmulas, asignaremos el índice 0 al nodo R y el
índice n + 1 al nodo S. Tanto R como S pueden ser reactantes, productos o centros
de reacción.
El punto importante es el siguiente:
asociado al segmento i → j.
j
Un segmento es cualquier camino lineal que podamos escribir entre dos nodos que no contenga
ni ciclos ni bifurcaciones.
[4.154],
0 ΛAj 0 0 0 0
ΛjA 0 Λjk 0 ΛjQ 0
0 Λkj 0 ΛkP 0 ΛkR
K= (4.154)
0 0 ΛP k 0 0 0
0 ΛQj 0 0 0 0
0 0 ΛRk 0 0 0
mientras que la matriz A se muestra en la ecuación [4.155],
−ΛAj ΛjA 0 0 0 0
ΛAj −(ΛjA + Λjk + ΛjQ ) Λkj 0 ΛQj 0
0 Λjk −(Λkj + ΛkP + ΛkR ) ΛP k 0 ΛRk
A=
0 0 ΛkP −ΛP k 0 0
0 ΛjQ 0 0 −ΛQj 0
0 0 ΛkR 0 0 −ΛRk
(4.155)
y a partir de A podemos plantear el sistema de ecuaciones lineales estacionarias:
! ! !
(ΛjA + Λjk + ΛjQ ) −Λkj [Xj ] ΛAj [A] + ΛQj [Q]
× =
−Λjk (Λkj + ΛkP + ΛkR ) [Xk ] ΛP k [P] + ΛRk [R]
(4.156)
Cuyas soluciones son:
[A]ΛAj (Λkj + ΛkP + ΛkR ) + [P]Λkj ΛP k + [Q](Λkj + ΛkP + ΛkR )ΛQj + [R]Λkj ΛRk
[Xj ] =
Λjk (ΛkP + ΛkR ) + ΛjA (Λkj + ΛkP + ΛkR ) + ΛjQ (Λkj + ΛkP + ΛkR )
(4.157)
[A]ΛAj Λjk + [P](ΛjA + Λjk + ΛjQ )ΛP k + [Q]Λjk ΛQj + [R](ΛjA ΛRk + Λjk ΛRk + ΛjQ ΛRk )
[Xk ] =
Λjk (ΛkP + ΛkR ) + ΛjA (Λkj + ΛkP + ΛkR ) + ΛjQ (Λkj + ΛkP + ΛkR )
(4.158)
Figura 4.15: Esquema formal simplificado obtenido de la reducción del mecanismo mos-
trado en la Figura 4.13
De forma general, si ambos nodos estuvieran unidos por más de un camino lineal,
el coeficiente cinético tendría la forma indicada en la ecuación [4.160],
C C
(i) (i)
X X
Λjk = Λjk , Λkj = Λkj (4.160)
i=1 i=1
El primer grafo se obtiene del esquema cinético original con tan sólo conside-
rar que:
Por su parte, el grafo cíclico puede reducirse a uno lineal si se tiene en cuenta que:
[B] [B]
La parte inferior de la figura muestra los resultados obtenidos tras aplicar la hipótesis de
Bodenstein-Chapman. El cálculo se realizó integrando el sistema de ecuaciones diferen-
ciales [4.168]. Una vez obtenidas las concentraciones de reactantes ([A] y [B]) y productos
([P] y [Q]) se substituyeron estas cantidades en las ecuaciones algebraicas [4.167] para
calcular la concentración de los centros de reacción, [X1 ] y [X2 ], en función del tiempo.
Se observa buen acuerdo entre las soluciones exactas y estacionarias para reactantes
y productos. Sin embargo, el acuerdo es meramente cualitativo para las concentraciones
de los centros de reacción, véase la comparación mostrada en la Figura 4.18.
k1
S + E ES
k−1
k2
ES −→ P
Análisis de Datos.
Reacciones Complejas de
Orden Superior
5.1 Introducción 223
Índice
5.1. Introducción . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 223
5.2. Reacciones consecutivas competitivas . . . . . . . . . . . 223
5.2.1. Definición y modelo matemático . . . . . . . . . . . 223
5.2.2. Balances de concentración . . . . . . . . . . . . . . 224
5.2.3. Relación entre α1 y α2 . . . . . . . . . . . . . . . . 225
5.2.4. Obtención de la variación de α1 con el tiempo . . . 227
5.2.5. Evaluación de las constantes cinéticas . . . . . . . . 228
5.3. Reacciones equilibradas de orden superior . . . . . . . . 232
5.3.1. Definición del modelo matemático . . . . . . . . . . 232
5.3.2. Integración del modelo matemático utilizando de los
grados de avance . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 233
5.3.3. Integración del modelo matemático. Uso de la des-
viación desde el equilibrio, u . . . . . . . . . . . . . 236
5.3.4. Tratamiento de los datos . . . . . . . . . . . . . . . 238
5.4. Las reacciones paralelas de orden superior . . . . . . . . 242
5.4.1. Definición e integración del modelo matemático . . 242
5.4.2. Tratamiento de datos . . . . . . . . . . . . . . . . . 245
5.1. Introducción
Aquellos mecanismos descritos por más de una ecuación diferencial, se deno-
minan mecanismos compuestos de orden superior. A diferencia de lo que ocurre
con los mecanismos de primer orden, no siempre es posible integrar de forma ana-
lítica el sistema de ecuaciones diferenciales asociado, especialmente si éste no es
lineal. No obstante, existen casos sencillos que tienen solución analítica para los
que se pueden establecer establecer métodos de análisis de datos ad hoc. El obje-
tivo de esta lección es presentar tres modelos compuestos sencillos que aparecen
frecuentemente en el análisis cinético, a saber:
Las reacciones consecutivas competitivas,
Las reacciones equilibradas de primer orden.
Las reacciones paralelas de oeden superior.
A1 + pB → A2
A2 + qB → A3
Velocidad A1 A2 A3 B
k1 [A1 ]n1 [B]m1 −1 1 0 −p
k2 [A2 ]n2 [B]m2 0 −1 1 −q
[Ai ]
αi = (5.9)
θA
[B]
β = (5.10)
θA
θB
r = (5.11)
θA
k2
κ = (5.12)
k1
∆β = β−r (5.13)
Por último, dividimos las ecuaciones ([5.7]) y ([5.8]) por θA para expresar los
balances de concentraciones de forma adimensional:
α1 + α2 + α3 = 1 (5.14)
p+q p + q ∆β
α2 = − α1 + − (5.15)
q q q
dα2 α2
=κ −1 (5.16)
dα1 α1
La ecuación ([5.16]) es lineal y homogénea, por lo que puede resolverse realizan-
do el siguiente cambio de variable:
α2
u= (5.17)
α1
dα2 = udα1 + α1 du (5.18)
1.0
κ = 0,01
0.8
κ = 0,1
0.6
β = 0,5 β=1 β=2
α2
κ = 0,5
0.4
κ = 1,1
0.2 κ=2
κ=5
0.0
0 0.2 0.4 0.6 0.8 1
α1
dα1 du
= (5.20)
α1 (κ − 1)u − 1
Sobre las rectas se indica el valor de la ordenada en el origen dado por la ecuación
([5.15]); la intersección de las rectas con las curvas α2 (α1 ) da el valor de α1 y α2
compatible con la existencia de una cierta cantidad β del reactante B. Por ejemplo,
si se escoge la recta con ordenada 1.0 y la curva de κ = 0,1, obtenemos el punto
de corte (α1 = 0,1, α2 = 0,76); el valor de β en ese punto viene dado por la
siguiente ecuación:
p + q ∆β
1,0 = + = 2 + (2 − β) = β (5.31)
q 2
La última ecuación indica que, en el momento que α1 alcanza el valor 0.1, el valor
de α2 es igual a 0.76 y el valor de β es justamente 1. Dado que se ha supuesto que
r = 2, si hubiéramos partido de un mol de A1 aún quedaría, en este punto, 1 mol
de B sin reaccionar.
Ejemplo 5.1. Variación de la concentración relativa de las especies en una reacción
consecutiva-competitiva.
Calcúlese la concentración en función del tiempo para un par de reacciones conse-
cutivas competitivas dadas las siguientes condiciones: k1 = 150s−1 M−1 , k2 = 375s−1
M−1 , [A1 ] = 10−3 mol L−1 , p = q = 1, y r = 2.
Obsérvese que r = 2, por lo que la reacción transcurre en condiciones estequiométri-
cas. En primer lugar calculamos κ1 y κ:
α1 F (α1 ) t/s α2 α3 β
0.1 3.51684628 23.4456419 0.06455848 0.83544152 0.26455848
0.2 1.61692931 10.7795287 0.12140764 0.67859236 0.52140764
0.3 0.97247854 6.48319027 0.16713665 0.53286335 0.76713665
0.4 0.64322536 4.28816907 0.19920474 0.40079526 0.99920474
0.5 0.44058668 2.93724453 0.21548220 0.28451780 1.21548220
0.6 0.30149593 2.00997287 0.21409680 0.18590320 1.41409680
0.7 0.19881907 1.32546047 0.19335772 0.10664228 1.59335772
0.8 0.11892346 0.79282307 0.15171107 0.04828893 1.75171107
0.9 0.05418784 0.36125227 0.08771102 0.01228898 1.88771102
1.0 0.00000000 0.00000000 0.00000000 0.000000000 2.000000000
θ = κ1 t = F (α1 ; κ, p, q, r) (5.32)
Se dibuja el diagrama log10 (α1 ) vs. log10 (θ) para la estequiometría del pro-
blema.
2u
δ = −58mm × = −0,8u
142,5mm
10δ 10−0,8
k1 = = = 158s−1 M−1
θA 10−3
y k2 valdrá:
k2 = κk1 = 2,5 × 158 = 395s−1 M−1
En la ecuación [5.40], los órdenes de reacción (ni ) pueden tomar cualquier valor,
por lo que no puede dar una solución general de la ecuación integrada. No obstan-
te, éstos suelen ser números enteros que toman los valores: 0, 1 ó 2. También es
usual encontrar, como máximo, dos reactantes (R ∈ [1.,2]) en equilibrio con dos
productos (P ∈ [1.,2]). Si éste es el caso, se puede integrar la expresión [5.40] de
forma sencilla.
La integración de [5.40] siempre se lleva a cabo realizando algún cambio de
variable. Abordaremos el problema de la integración de dos formas:
Utilizando el grado de avance de la reacción (ζ). Esta variable ha sido de-
finida previamente. Permite integrar fácilmente la ecuación diferencial en
el caso de que la cinética se realice partiendo exclusivamente de los reac-
tantes. No obstante, este método conduce a expresiones complicadas que
varían en función de las concentraciones iniciales.
Utilizando la distancia al equilibrio (u). Esta variable se define como la di-
ferencia entre el grado de avance a tiempo infinito (ζ∞ ) y el actual (u =
ζ∞ − ζ), por lo que u mide la desviación respecto de la posición de equili-
brio.
R P
dζ Y Y
= k1 ([Aj ]0 + νj ζ)nj − k2 ([Aj ]0 + νj ζ)nj (5.43)
dt
j=1 j=1
R
Y P
Y
k1 ([Aj ]0 + νj ζ∞ )nj − k2 ([Aj ]0 + νj ζ∞ )nj = 0 (5.47)
j=1 j=1
Por lo tanto, ζ∞ , el grado de avance a tiempo infinito, es una raíz del polinomio
[5.44]. Por otra parte definiremos la constante κa mediante la ecuación [5.48]:
QR nj
k1 j=1 ([Aj ]0 + νj ζ∞ )
κ= = QP (5.48)
k2 j=1 ([Aj ]0 + νj ζ∞ )
nj
Las relaciones [5.47] y [5.48] permiten expresar las raíces ri en función del grado
de avance a tiempo infinito. Apliquemos la metodología a algunos casos represen-
tativos.
Ejemplo 5.3. Ley de velocidad de reacciones opuestas de primer orden.
Consideremos el caso más sencillo de reacciones opuestas: R = P = 1 y n1 =
n2 = 1. Este esquema cinético no es un ejemplo de reacciones de orden superior, sino
que es un caso de reacciones compuestas de primer orden que ya se analizó en el tema 4.
No obstante, el sistema permite ilustrar la aplicación de la metodología expuesta en las
secciones anteriores de forma sencilla. De paso, propondremos una técnica de integración
alternativa a la transformada de Laplace.
Ley cinética se deriva, formalmente, del siguiente mecanismo:
k1
ν1 A1 ν3 A3
k2
d[A1 ]
= ν1 k1 [A1 ] − ν1 k2 [A2 ][A3 ] (5.56)
dt
Supongamos también que las condiciones iniciales para integrar son: [A1 ]0 6= 0 y [A2 ]0 =
[A3 ]0 = 0. La substitución del grado de avance por la concentración en [5.56] conduce a:
dζ
= k1 ([A1 ]0 + ν1 ζ) − k2 ν2 ν3 ζ 2 (5.57)
dt
La ecuación [5.57] puede expresarse en la forma dada por [5.58] tras descomponer el
polinomio de la parte derecha de [5.57] en factores:
dζ ζ∞
= −k2 ν2 ν3 (ζ − ζ∞ )(ζ + [A1]0 ) (5.58)
dt [A1]0 + ν1 ζ∞
y
2
k1 ν2 ν3 ζ∞
= (5.60)
k2 [A1 ]0 + ν1 ζ∞
La ecuación [5.58] es de variables separables que se puede integrar por el método de las
fracciones simples y cuya solución es:
ζ∞ ζ∞ 2[A1 ]0 + ν1 ζ
ln = k1 t (5.61)
2[A1 ]0 + ν1 ζ∞ [A1 ]0 ζ∞ − ζ
A1 2A2
d[A1 ]
= −k1 [A1 ] + 2k2 [A2 ]2 (5.62)
dt
Substituimos las concentraciones por sus valores en función del grado de avance:
dζ
= k1 ([A1 ]0 − ζ) − 4k2 ζ 2 (5.63)
dt
Tal como se explicó, se factoriza en primer lugar el polinomio:
k1 [A1 ]k1 [A1 ]0 ζ∞
4k2 ζ 2 + ζ− = −4k2 (ζ − ζ∞ ) ζ + (5.64)
4k2 4k2 [A1 ]0 − ζ∞
Por último, la integración de [5.64] mediante el método de las fracciones simples conduce
a la solución buscada:
ζ∞ ζ∞ ζ − 2[A1 ]0
ln − 1 = k1 t (5.67)
ζ∞ − 2[A1 ]0 [A1 ]0 ζ − ζ∞
u = ζ∞ − ζ (5.68)
n4 = 1). En este caso, la ley de velocidad [5.40] toma la siguiente forma particu-
lar:
d[A1 ]
= ν1 k1 [A1 ][A2 ] − ν1 k2 [A3 ][A4 ] (5.70)
dt
Expresamos ahora [5.70] en función de u. La substitución de [5.69] en [5.70] con-
duce a la ecuación [5.71], que depende exclusivamente de la variable dependiente
u:
du
= k1 ([A1 ]∞ + ν1 u)([A2 ]∞ + ν2 u) − k2 ([A3 ]∞ + ν3 u)([A4 ]∞ + ν4 u) (5.71)
dt
El primer paso para integrar [5.71] es el desarrollo de la parte derecha de esta
igualdad. Se obtiene el polinomio [5.72]:
du
= k1 [A1 ]∞ [A2 ]∞ − k2 [A3 ]∞ [A4 ]∞ +
dt
+ (k1 ([A1 ]∞ ν2 + [A2 ]∞ ν1 ) − k2 ([A3 ]∞ ν4 + [A4 ]∞ ν3 ))u+ (5.72)
+ (ν2 ν1 k1 − ν4 ν3 k2 )u2
du
= (k1 [[A1 ]∞ ν2 + [A2 ]∞ ν1 ] − k2 [[A3 ]∞ ν4 + [A4 ]∞ ν3 ])u+
dt (5.74)
+ (ν2 ν1 k1 − ν4 ν3 k2 )u2
Para seguir con la integración se debe factorizar el polinomio [5.73]. Para ello,
debemos calcular sus raíces. Este cálculo es inmediato pues, al no existir término
independiente, una de ellas es idénticamente nula y la otra se obtiene sacando u
factor común:
1 du
=
ν2 ν1 k1 − ν4 ν3 k2 dt
(5.75)
k1 [[A1 ]∞ ν2 + [A2 ]∞ ν1 ] − k2 [[A3 ]∞ ν4 + [A4 ]∞ ν3 ]
=u u+
ν2 ν1 k1 − ν4 ν3 k2
Con objeto de evaluar el valor de la segunda raíz (r) a partir de datos experimenta-
les, es mejor expresar esta magnitud de acuerdo con la ecuación [5.76]. Para ello,
basta dividir el numerador y denominador de [5.75] entre k2 . Aparece un nuevo
parámetro, κ, que es el cociente entre las constantes de velocidad directa e inversa
( κ = k1 /k2 ).
d[A1 ] [A1 ]∞ 1
ν1 A 1 ν2 A 2 = ν1 k1 [A1 ]2 − ν1 k2 [A2 ] 2 − k1 ν12
dt ν1 κν2
A continuación representamos F (u) en función del tiempo. Se obtiene una recta que
pasa por el origen. De ajuste por mínimos cuadrados se obtiene el siguiente valor de la
pendiente:
m −5,89868 × 10−3
m = µr → µ = = = 1,8813 × 10−4 = k1 − 4k2
r −31,354
k1 5,96252
κ= = = 5,6660
k2 2,5049 × 2,5049
Figura 5.3: Variación de −F (u) con el tiempo para los datos del problema. De la repre-
sentación se obtuvo una pendiente m = −5,89868 × 103 min−1 .
k1
−→ ν1 P1
k2
−→ ν2 P2
νA,i A + νB,i B 3 k
−→ ν3 P3
..
.
n k
−→ νn Pn
Figura 5.4: El nitrobenceno (A) reacciona con el ion N O+ 2 (B, producido en una mezcla
sulfonítrica) para dar los isómeros dinitrados orto-(P1 ), meta- (P2 ) y para- (P3 ).
5.4.1.1. Integración
La integración de los sistemas de ecuaciones diferenciales ([5.82]-[5.83]) y
([5.84]-[5.85]) depende de los valores que tomen los órdenes de reacción. Existen
b
Por simplicidad de la notación, definimos la constante global de desaparición de los reactantes,
k, como:
Xn
k= ki
i=1
dos casos muy comunes: Las reacciones paralelas de primer orden, caracteriza-
das por tener n = 1, m = 0c y, por otra parte, las paralelas de orden superior
propiamente dichas, donde n ≥ 1 y m ≥ 1. Por simplicidad de la exposición,
restringiremos la discusión a reacciones cuyos órdenes sean iguales: ni = n,
mi = m.
La estrategia para integrar las ecuaciones ([5.84]-[5.85]) es la siguiente:
Obtener una expresión en función del tiempo para A o B.
Obtener la concentración de los productos a partir de la relación existente
entre las concentraciones de A y Pi .
En primer lugar expresamos la concentración de A en función del grado de
avance de las reacciones paralelas; por simplicidad (y por ser el caso experimen-
tal más común), supondremos que el coeficiente estequiométrico de A y B es el
mismo para todas las reacciones (νA,i = νA , νB,i = νB ):
n
X
[A] = [A]0 + νA ζi (5.86)
i
n
X
[B] = [B]0 + νB ζi (5.87)
i
Derivemos las expresiones [5.86] y [5.87] respecto del tiempo y combinemos los
resultados obtenidos:
n
1 d[A] 1 d[B] X dζi
= = (5.88)
νA dt νB dt dt
i
donde:
[B]0 µkt
R(t) = e (5.96)
[A]0
νB [A]0 − νA [B]0
µ= (5.97)
νA νB
por lo que las concentraciones de los reactantes vendrán dadas por:
d[Pi ] νi ki νi ki
= → [Pi ] = ([A] − [A]0 ) (5.100)
d[A] νA k νA k
[Pi ]∞ νi ki
=− (5.101)
[A]0 νA k
Índice
6.1. Introducción . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 249
6.2. Modelo matemático de la propiedad física . . . . . . . . . 249
6.3. La función de mínimos cuadrados . . . . . . . . . . . . . 250
6.3.1. Método de Box . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 251
6.4. Minimización de φ y caracterización del punto estacionario 253
6.5. Coeficientes de sensibilidad . . . . . . . . . . . . . . . . . 254
6.5.1. Definición . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 254
6.6. Gradiente y hessiano de la función objetivo . . . . . . . . 256
6.6.1. Gradiente de la función de mínimos cuadrados . . . 256
6.6.2. Gradiente de la función de Box . . . . . . . . . . . 258
6.7. Derivada numérica . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 259
6.8. Hessiano de la función de mínimos cuadrados . . . . . . . 260
6.9. Hessiano derivado de la ecuación de Box . . . . . . . . . 262
6.1. Introducción
En Cinética Formal, las soluciones del sistema de ecuaciones diferenciales
definidas en el modelo matemático se suelen utilizar para la estimación de los
coeficientes de velocidad. Veamos muy brevemente como se puede estimar coefi-
cientes a partir de datos experimentales.
L(t) = CS + l (6.1)
R R T
X
(k) (k) 1 XX 2
φ=σ r̃ r = 2 rik (6.6)
σ
k k i
De forma análoga, cuando sólo se tiene una respuesta (R = 1), las ecuaciones
[6.2],5,6] se reducen a:
φ =r̃Wr (6.7)
T
−1 X 1 2
φ =r̃ Iŝ2 r= r (6.8)
i
ŝ2i i
T
1 1 X 2
φ = 2 r̃r = 2 ri (6.9)
σ σ
i
3. Si todos los valores propios son positivos nos encontramos, en efecto, ante
la presencia de un mínimo. Si todos son negativos ante un máximo, y en
caso de encontrar valores positivos y negativos ante un punto de silla.
Por otra parte, la magnitud de los coeficientes de sensibilidad nos dan una
idea de la “importancia” de un determinado parámetro de la función mo-
delo en el ajuste. Si el coeficiente de sensibilidad es grande el parámetro
será importante en la localización del mínimo y podrá determinarse el pará-
metro con gran precisión; en caso contrario, prácticamente no influirá en la
posición de éste y su determinación estará sujeta a una gran incertidumbre.
Por último, pensemos que el valor de los coeficientes varía con el tiempo.
Esta variación permite diseñar experimentos en los que se escogen interva-
los de tiempo óptimos para la óptima determinación de las variables de la
función de mínimos cuadrados
(r) ∂ L̂ij
βij = (6.16)
∂pr
o, en forma matricial:
(r) ∂ζij
β 0(r) = ν̃y(r) , y/yij = (6.21)
∂qr
Estudiemos la forma matemática del gradiente para cada una de las funciones
de mínimos cuadrados expuestas en la sección ??. Comenzaremos analizando la
función de mínimos cuadrados multirespuesta dada por la ecuación [6.2] que es
el caso más general.
Derivemos la expresión [6.2] respecto de una variable de φ, genérica, que
denominaremos pr :
#
R
T X
T
" (k) (k)
∂φ (k) ∂ri (k) (k) ∂ri
X X
=− wij r + ri =
∂pr ∂pr j ∂pr
k i j
R T X
T h i
(k) (k) (k) (k) (k)
X X
=− w J r +r J ij =
ir j i jr
k i j
R T X
T T X
T
(k) (k) (k) (k) (k)
X X X
=− J˜ w r + ir J˜ w̃ji r =
ij j rj i
k i j i j
R T X
T h i
(k) (k) (k) (k)
X X
=− J˜ w + w̃
ri r ij ij j (6.26)
k i j
si además las desviaciones típicas son las mismas para todas las observaciones, la
función objetivo y su derivada toman una forma particularmente sencilla:
R
2 X (k) (k)
∇φ = − J̃ r (6.29)
σ
k
∂ ∂φ
hrs = =
∂ps ∂pr
R T X T
"
2 (k) (k) (k) (k) (k) 2 (k) #
X X (k) ∂ ri (k) ∂r ∂rj ∂r ∂rj (k) ∂ rj
= wij rj + i + i + ri
∂ps ∂pr ∂pr ∂ps ∂ps ∂pr ∂ps ∂pr
k i j
(6.40)
La ecuación anterior puede ser descompuesta en dos sumas, una en la que sólo
aparecen los elementos matriciales del Jacobiano y otra suma que implica a las
derivadas segundas de los residuos:
hrs =
R T X
T h i
(k) (k) (k) (k) (k)
X X
= w ijJ J +J J
ir js +
is jr
k i j
#
R T X
T
" (k)
∂ 2 ri ∂ 2 r (k)
(k) (k)
X X
i
+ w ij (k)
+ ri (6.41)
∂ps ∂pr ri ∂pr ∂ps
k i j
hrs ≈ h(0)
rs =
R T X
T R T X
T
(k) (k) (k) (k)
X X X X
= J˜ri w J +
ij J˜rj w̃ J =
js ij is
k i j k i j
R T X
T h i
(k) (k) (k) (k)
X X
= J˜ w + w̃
ri J ij ij js (6.42)
k i j
(lm)
En la ec. [6.49] las matrices Vkj se forman substituyendo las filas k y j de V por
sus derivadas respecto de los varibles ql y qm . Estas derivadas fueron calculadas en
la sección ?? con la excepción del caso en que los índices k y j coincidan. Si esto
ocurriera, los elementos matriciales de la columna afectada serían las derivadas
segundas de los elementos de la matriz V. Estas derivadas segundas tienen la
forma dada por la ec.[6.49], que se puede deducir derivando por segunda vez la
ec.[6.34],
T T
∂ril0 ∂rim
0 ∂r0 ∂r0
∂ ∂vlm X X (l) (m) (l) (m)
≈ + il im = Jir Jis + Jis Jir
∂qs ∂rr ∂qr ∂qs ∂qs ∂qr
i i
(6.50)
Catálisis Homogénea
7.1 Introducción 267
Índice
7.1. Introducción . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 267
7.1.1. Breve Historia . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 267
7.1.2. Concepto de catalizador . . . . . . . . . . . . . . . 270
7.1.3. Mecanismos generales de la catálisis . . . . . . . . . 274
7.1.4. Clasificación de los procesos catalíticos . . . . . . . 276
7.2. Catálisis por ácidos y por bases . . . . . . . . . . . . . . . 276
7.2.1. Mecanismos de la catálisis . . . . . . . . . . . . . . 280
7.2.2. Cinética formal . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 283
7.2.3. Dependencia de las constantes catalíticas respecto del
pH . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 289
7.3. Biocatálisis . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 295
7.3.1. Introducción . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 295
7.3.2. Clasificación y nomenclatura de las enzimas . . . . . 296
7.3.3. Características de la catálisis por enzimas . . . . . . 297
7.3.4. Cinética Formal de la Biocatálisis . . . . . . . . . . 298
7.3.5. Inhibición enzimática . . . . . . . . . . . . . . . . . 304
7.4. Las reacciones autocatalíticas . . . . . . . . . . . . . . . . 309
7.5. Cuestiones . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 313
7.1. Introducción
7.1.1. Breve Historia
El objetivo de la Industria Química es transformar los compuestos que se en-
cuentran en la Naturaleza, las materias primas, en compuestos derivados que po-
sean alguna nueva característica o utilidad y, por tanto, un mayor valor económico
añadido .
Como hemos visto, estas transformaciones no son más que un conjunto de
reacciones que debieran llevarse a cabo con el menor costo posible. En el análisis
de los costos, siempre destacan dos factores: el tiempo y la cantidad de energía
empleados en alcanzar un cierto grado de conversión. Es deseable que estas dos
variables sean mínimas: las reacciones de interés industrial deberían ser rápidas y
llevarse a cabo con una aportación energética pequeña.
De acuerdo con lo expuesto en la sección 1.10.1, la velocidad a la cual trans-
curre una reacción está ligada a la temperatura por la ecuación de Arrhenius; en
general, aumentar la velocidad de reacción implica aumentar la temperatura y,
por lo tanto, el gasto energético. La energía calorífica suministrada se utiliza pa-
ra aumentar la energía cinética de los reactantes lo cual aumenta el número de
moléculas activadas, moléculas cuyo contenido energético supera un cierto um-
bral –la energía de activación (EA ). Estas moléculas colisionan de forma eficaz
reorganizando sus enlaces transformarse en productos.
a
La saponificación es la hidrólisis alcalina de las grasas para formar glicerina (propanotriol) y
la sal alcalina de los ácidos grasos correspondientes.
La primera definición, que aparece en todos los libros de Química Física general,
tiene su origen en los primeros trabajos sobre catálisis realizados por Berzelius
en el siglo XIX. Es una definición “ideal”, pues el catalizador, en los sistemas
reales, siempre sufre algún tipo de interacción que, a la larga, lo destruye o hace
disminuir su actividad.
La segunda definición identifica qué compuestos catalizan la reacción a partir
de la ley de velocidad. Para ilustrar el significado de la definición, citaremos la
hidrólisis de ésteres catalizada por ácidos minerales. La estequiometría de esta
reacción es:
R1 C O2 R2 + H2 O
R1 C O2 H + R2 OH
cuya ley de velocidad para la reacción directa es:
d[R1 C O2 R2 ]
− = k1 [H+ ][R1 C O2 R2 ][H2 O]
dt
Observamos que los protones no aparecen en la ecuación estequiométrica, (νH + =
0), sin embargo, aparece su concentración en la ley cinética con un orden de reac-
ción nH + = 1. Puesto que nH + > νH + se considera que los protones catalizan
de la reacción.
La tercera es la definición más amplia de catalizador. En ella pueden incluir-
se todas aquellas substancias que inician una la reacción se consuman o no. Por
ejemplo, pequeñas cantidades de peróxidos orgánicos (R-O-O-R) añadidos a una
disolución bencénica de estireno inician su polimerización tras calentar suave-
mente la disolución, véase la figura 7.1. Vemos que los peróxidos inician la po-
limerización pero se consumen del todo durante las primeras fases de la misma.
7.1.2.1. Actividad
La actividad mide la rapidez con que procede una reacción en presencia de un
catalizador. Puesto que la velocidad de reacción aumenta la disminuir su energía
de activación, el empleo de catalizadores activos disminuye el gasto energético y
el consumo de tiempo, lo cual conduce a menores costos económicos por unidad
de masa de substrato transformado.
Los estudios de la actividad catalítica tienen diversos objetivos y, en conse-
cuencia, se utilizan diversos métodos para cuantificar esta magnitud. Así, los es-
tudios que se realizan durante la fase de diseño del catalizador requieren métodos
que midan la actividad relativa de forma rápida, aunque esta medida no sea preci-
sa.
Típicamente, en estos experimentos se varía un parámetro (tamaño de partí-
cula del soporte catalítico, naturaleza del mismo, concentración de centros acti-
vos. . . ) y se mide la actividad para diversos valores del parámetro manteniendo el
resto de variables constante. Es este caso, basta la utilización del grado de con-
versión del substrato (XS ) para cuantificar la actividad relativa de un mismo ca-
talizador en diversas condiciones experimentales, véase la ecuación [7.1], donde
n0S y nS son el número de moles de substrato a tiempo inicial y tras un lapso de
tiempo, común a todos los experimentos, ∆t:
n0S − ns ∆nS
XS = 0 =− 0 (7.1)
nS nS
∆nS
r̄ = mol kg−1 s−1 (7.2)
WC × ∆t
∆nS
TOF = − s−1 (7.4)
nC × ∆t
Los valores del TOF para las reacciones industriales de mayor relevancia están
comprendidos entre 10−2 a 102 s−1 .
El número de recambio (turnover number o TON) se define como el número
de moles de substrato que que puede convertir un mol de catalizador antes de
desactivarse.c El valor del TON se determina midiendo la el número total de moles
de substrato (nTS ) que se necesitan para desactivar nC moles de catalizador:d
nTS
TON = (7.6)
nC
No obstante, esta es una manera tediosa de medir la magnitud, pues la desactiva-
ción de catalizadores poco activos, pero robustos, acontece en intervalos de tiem-
po grandes (días, semanas). Una forma práctica de determinar el TON consiste en
medir el valor del TOF y seguir la cinética de destrucción del catalizador con el
objeto de determinar su tiempo de vida medio (τ ). Se evalúa el TON mediante la
siguiente relación:
TON = TOF × τ (7.7)
Los catalizadores reales presentan números de recambio que van desde 102 a va-
lores mayores de 106 .
7.1.2.2. Selectividad
La selectividad es una magnitud relacionada con el rendimiento. Mide la ca-
pacidad que tiene el catalizador para acelerar un tipo de reacciones y no otras. Esta
propiedad es tan importante como la actividad, pues siempre interesa obtener la
mayor cantidad de aquel producto que tenga mayor valor añadido. Por esta razón,
muchas veces se emplean catalizadores que, aunque sean poco activos, aumentan
del rendimiento del producto con interés económico.
Cuando no se emplean catalizadores, las reacciones homogéneas producen
mezclas de isómeros y otros productos debido a que ocurren, junto con la reac-
ción de interés, otras reacciones laterales. El empleo de un catalizador favorece la
formación de uno de los isómeros ya que, sobre los centros activos, se adsorben
las moléculas de substrato con una orientación espacial bien definida. Tras la ad-
sorción, las moléculas de substrato orientadas adecuadamente reaccionan para dar
un único producto. Si el catalizador es además activo, el aumento de la velocidad
de la reacción principal (la catalizada) hace disminuir la concentración relativa de
los productos laterales.
La selectividad cuantifica midiendo la ratio entre el número de moles de pro-
ducto formado y el de moles de substrato consumidos:
nP /νP nP νS
S̄P = = (7.8)
∆nS /νS ∆nS νP
c
Obviamente, un catalizador ideal tiene un número de recambio infinito, pues, en principio, no
se consume.
d
Obsérvese que el TON es una magnitud adimensional.
La magnitud S̄P se conoce como selectividad media del producto P. Tanto el nu-
merador como el denominador de de [7.8] son funciones del tiempo, por lo que es
más adecuado definir la selectividad instantánea, SP , como:
rP νS dnP
SP = = (7.9)
rS νP dnS
7.1.2.3. Estabilidad
Por último, el catalizador debe de ser estable. Esta propiedad mide la capaci-
dad del catalizador para perdurar en el reactor en forma activa durante largos pe
riodos de tiempo. El catalizador debe de ser mecánica, térmica y químicamente
estable.
Los catalizadores se utilizan en entornos agresivos. Muchas síntesis indus-
triales se realizan a presiones y temperaturas elevadas. En estas condiciones, el
catalizador debe de ser mecánicamente y térmicamente estable.
Las estabilidad mecánica de las particulas del catalizador rquiere que estas no
se colapsen cuando son sometidas a grandes presiones. El colapso o rotura de las
partículas conduce a partículas más pequeñas sin aumentar significativamente la ,
lo cual dificulta los procesos de transferencia de masa
A+B
M+N
A+X
C
C + B −→ M + N + X
Esquema 1.
A+X
C+M
C + B −→ M + N + X
Esquema 2.
Figura 7.2: Variación de la energía libre de Gibbs para un proceso catalizado (∆Gc ), no
catalizado (∆Gu ) y para la reacción (∆GR ).
catalizada.
Tal como se ha dibujado el diagrama, ∆G del primer complejo es mayor que la
del segundo y por tanto determina la velocidad de reacción. No obstante, podría
ocurrir que la barrera de energía libre del segundo complejo fuera superior y,
en este caso, la descomposición del complejo catalizador-substrato controlaría la
velocidad de la reacción. Volveremos sobre este punto cuando abordemos el tema
de la catálisis por ácidos o bases.
analítico están catalizadas por ácidos y bases. En la tabla (7.6) se citan algunos
ejemplos.
Las reacciones catalizadas por ácidos o bases de Bronsted siempre comienzan
por la protonación (o desprotonación) del substrato. En general, las reacciones
de transferencia de protones entre bases de Bronsted (moléculas electronegativas
que tienen un par de electrones solitarios) son muy rápidas y, normalmente, no
constituyen el paso determinante de la reacción. Por lo tanto, la reacción de trans-
ferencia protónica debe de considerarse, desde el punto de vista cinético-formal,
como un pre-equilibrio rápido cuyas constantes de velocidad están controladas
por difusión.
No obstante, existen excepciones a esta norma y se conocen situaciones donde
la transferencia protónica puede determinar la velocidad:
e
Las reacciones de enolización convierten un grupo carbonilo en un tautómero denominado
enol que es un alcohol conjugado con un doble enlace; el equilibrio se alcanza muy lentamente
en medios apróticos, pero la velocidad aumenta en presencia de ácidos o de bases. Obsérvese que
tanto la reacción directa, la enolización como la reacción inversa, la cetonización, son reacciones
catalizadas por ácidos (B) o bases (A), véase la figura al pie de página.
Caso II: El substrato se protona con dificultad y tan pronto como se forma,
se descompone en los productos.
Está claro que, en el primer caso, el substrato es muy básico por lo que la ley de
velocidad se deducirá a partir de la hipótesis de equilibrio:
d[P] k1 [HB]
≈ k2 [H2 O][S1 ] (7.10)
dt k−1 [B]
A partir de la constante de disociación ácida de HB,Ka , tendremos:
[B− ] [H+ ]
= (7.11)
[HB] Ka [H2 O]
Ahora, tras substituir la ecuación ([7.11]) en ([7.10]) se llega a:
d[P] k1 k2
≈ [H2 O][HS+ ] (7.12)
dt k−1 Ka
H B + + S
H S+ + B
H S+ + B 0 −→ P + H B 0+
donde B’ puede ser la base conjugada del ácido HB+ . Como en el caso anterior,
el substrato se puede protonar y descomponerse lentamente o bien puede ser muy
reactivo. Por lo tanto, se puede aplicar la hipótesis de equilibrio o del estado es-
tacionario a estos casos extremos. Veamos a que resultados se llega en ambos
casos.
Figura 7.3: Diagramas energéticos de: (a) el complejo de Van’t Hoff y (b) el complejo
de Arrhenius.
d[S0 ]
− = (k0 + k1 [H+ ] + k2 [O H− ]+
dt (7.21)
+ ka [HB] + kb [B− ])[S0 ]
donde:
Obsérvese que los valores de ki son distintos de los valores ki0 que aparecen en el
mecanismo propuesto. Las primeras constantes son las que se determinan experi-
mentalmente, o constantes cinéticas macroscópicas, mientras que las segundas son
las constantes microscópicas del mecanismo de reacción. La relación que existe
entre ambos conjuntos de constantes puede establecerse fácilmente aplicando la
hipótesis del estado estacionario o la de equilibrio, según proceda,a cada etapa del
mecanismo mostrado.
El objetivo de un estudio cinético formal es establecer de forma cuantitativa
la ley cinética que rige la reacción. Supuesto el mecanismo dado en el esquema,
el objetivo del plan de experimentación será la determinación del conjunto de
constantes macroscópicas.
Observemos que si se fija el pHde la mezcla de reacción mediante la utiliza-
ción de un tampón concentrado, se observará que el término:
permanecerá constante. Hay que hacer notar, que los términos ka y kb no pueden
ser eliminados de la ecuación ([7.22]) cuando se trabaja a valores del pHcomprendidos
entre 5 y 8, pues la única forma de fijar el pHen estas condiciones es mediante la
adición de una disolución reguladora que contiene, precisamente, las especies B
y HB+ ; estas especies pueden presentar actividad catalítica ácido-base general.
El primer lugar, se debe investigar la catálisis ácida y básica específica; para
ello, se debe estudiar la variación de kap en medios muy ácido y muy alcalinos en
ausencia de cualquier disolución reguladora ([B] = [BH+ ] = 0). Para valores del
pHfrancamente ácidos ([OH− ] ≈ 0) se cumplirá que:
0
kap = k0 + k1 [H+ ] + k2 [O H− ] (7.25)
tendremos que:
0
kap − kap = ka [HB] + kb [B− ] (7.26)
Las expresiones anteriores forman un sistema de dos ecuaciones con dos incógni-
tas, [B− ] y [HB], cuyas soluciones son:
[HB] β1 [H+ ]
FHB = = (7.29)
θB 1 + β1 [H+ ]
−
[B ] 1
FB = = (7.30)
θB 1 + β1 [H+ ]
nótese que FHB y FB son funciones del pHpor lo que pueden calcularse tras medir
esta propiedad. Finalmente, substituyendo las ecuaciones ([7.29]) y ([7.30]) en la
ecuación ([7.26]) se obtiene:
0
kap − kap = (ka FHB + kb FB )θB (7.31)
Puesto que a pHfijo, los valores de FB y FHB son constantes, la ecuación ([7.31])
puede reordenarse, teniendo en cuenta que FHB +FB = 1, de la siguiente manera:
0
kap − kap
= ka + (kb − ka )FB (7.32)
θB
Cuadro 7.7: Variación de la constante aparente de hidrólisis del anhídrido cinámico (kap )
con el pH y la concentración total de tampón carbonato (θ)
0
pH FB kap × 102 /s−1 M−1
10.06 0.42006 1.87
9.76 0.26630 0.81
9.14 0.08001 0.20
Debemos representar ahora los datos de acuerdo con la ecuación ([7.32]), para ello, se
debe calcular, en primer lugar, el valor de FB . Puesto que el carbonato puede aceptar dos
protones, la expresión para esta función de distribución es:
[C O3−2 ] 1
FB = =
θ 1 + β1 [H ] + β2 [H+ ]2
+
donde:
β1 = 10pKa,2
β2 = 10pKa,2 +pKa,1
Los valores calculados de FB se dieron en la última tabla. Ahora sólo resta evaluar los
0
valores de (kap − kap )/θ para cada uno de los valores de pH. Los resultados se recogen
en la siguiente tabla:
0
(kap − kap )/θ
pH= 10.06 pH= 9.76 pH= 9.14
0.13895 0.12103 0.02583
0.14821 0.12306 0.02645
0.14184 0.12986 0.03029
– 0.12117 0.02648
Media
0.14300 0.12378 0.02726
0
Por último, representamos (kap − kap )/θ
frente a los valores de FB , ecuación ([7.32]).
Se obtiene una relación aproximadamente lineal. Del ajuste se obtiene una pendiente
m = 0,375 y una ordenada en el origen prácticamente nula. De estos valores deduci-
mos inmediatamente que ka ≈ 0 y kb = 0,375s−1 M−1
d[S]
− = kap ([H+ ])[S]n (7.33)
dt
Para llevar a cabo correctamente el estudio cinético, se debe asegurar que kap no
varíe por otras razones distintas del pH. Las fuentes de variación más importan-
tes que se deben controlar son la fuerza iónica y la acción catalítica del propio
tampón. La fuerza iónica se puede fijar utilizando la concentración adecuada de
una sal inerte. Ésta debe de ser un electrolito fuerte cuyo anión y catión no sean
hidrolizables. Por otra parte, el efecto catalítico del tampón puede comprobarse
mediante el procedimiento descrito en el último ejemplo. Si existiera catálisis por
parte del tampón se observaría la variación de kap con la concentración de éste a
0 que es el valor de k extrapola-
pHfijo; si éste fuera el caso, interesa conocer kap ap
do a concentración del tampón nula.
Una vez determinado el orden respecto de la concentración de substrato se
debe determinar la dependencia de la constante aparente kap respecto del pHpara
obtener información del mecanismo de reacción. Obsérvese que estamos utilizan-
do el método de Esson y Harcourt para el estudio de la ley cinética. Para ello,
se debe de representar, como ya vimos, la variación de kap con [H+ ]. No obstan-
te, para el caso de las reacciones catalizadas por ácidos y bases es conveniente
realizar una gráfica doble logarítmica log10 (kap ) vs. pH. Esta gráfica permite la
visualización de un intervalo de kap más amplio que la gráfica convencional (no
logarítmica). Además, la simple inspección visual permite conocer rápidamente
el orden de la reacción respecto de [H+ ] o [O H− ] en las porciones de la curva que
pueden aproximarse a una recta.
Una vez establecido el perfil de kap (pH) en función del pH, se deben proponer
modelos que expliquen la forma de la curva obtenida. A partir de estos modelos
es posible establecer, por regresiones no lineales, los valores de las constantes
catalíticas y muchas veces constantes termodinámicas de acidez o transferencia
de protones de las especies presentes en disolución. En estos casos, las constan-
tes termodinámicas se deben medir (o obtener en la bibliografía) con objeto de
contrastar aún más el modelo propuesto.
En las secciones siguientes, estudiaremos los perfiles de la curva kap (pH)
que se obtienen con mayor frecuencia y establecer a los modelos a los cuales
responden.
Figura 7.6: Variación de log10 (kap ) con el pH para la hidrólisis del acetato de
p−nitrofenilo. Del ajuste de los se obtuvo: k0 = 5,50 × 10−7 s−1 M−1 , k1 = 5,34 × 10−5
s−1 M−1 y k2 = 19,97 s−1 M−1 .
1 k1
pHmin = log10 + pKw (7.40)
2 k2
θ = [S− ] + [H S] (7.41)
Ahora bien, de acuerdo con el esquema de reacción, la variación con el tiempo del
substrato protonado y sin protonar vendrá dado por las siguientes expresiones:
d[S− ] k 00 + k2 [O H− ]
− = (k000 + k2 [O H− ])[S− ] = 0 θ (7.46)
dt 1 + β1 [H+ ]
La ecuación ([7.48]) indica que la desaparición total del substrato debe de seguir
una cinética de primer orden, siempre que la reacción se lleve a cabo en un medio
tamponado, con una constante de velocidad aparente igual a:
vs. pHde trabajo. En la gráfica se muestran tres zonas bien diferenciadas: A pHmuy ácido
los puntos se alinean a una recta cuya pendiente está próxima a +1. Este comportamiento
tiene su explicación en la ecuación ([7.49]). En efecto, en estas condiciones se cumplirá
que:
kap ≈ k00 + k1 [H+ ] (7.50)
ya que [O H− ] ≈ 0 y β1 [H+ ] >> 1, condición que implica que [H S] ≈ θ, por lo que todo
el substrato se encontrará en su forma no ionizada. Además, si la hidrólisis espontánea de
la forma protonada transcurre a una velocidad más pequeña que la catalizada tendremos
que:
log10 (kap ) ≈ log10 (k1 ) − pH (7.51)
ecuación cuyo cumplimiento se observa sólo a pHfrancamente ácido.
A pHmuy básico, se cumplirá que [H+ ] ≈ 0 y β1 [H+ ] << 1; ahora todo el substrato
se encuentra en su forma ionizada, y la ecuación ([36]) se simplifica de la siguiente forma:
Kw
kap ≈ k000 + k2 (7.52)
[H+ ]
Si ahora, la hidrólisis espontánea de la forma ionizada transcurre lentamente comparada
con la catalizada se cumplirá,
Figura 7.8: Representación de log10 (kap ) vs. pHpara la hidrólisis del ácido trimetil ace-
til salicílico. La línea sólida se obtuvo por ajuste por mínimos cuadrados de los puntos
experimentales; los valores de las constantes catalíticas se dan en el texto.
7.3. Biocatálisis
7.3.1. Introducción
Se denomina biocatálisis a los fenómenos catalíticos que tienen lugar en los
seres vivos o por acción de los mismos. Las reacciones que tienen lugar en las
células vivas se producen de forma organizada a baja temperatura (37o C en el ser
humano) y a pHcercano a la neutralidad debido a la acción de unos catalizadores
especiales denominados enzimas.
Las enzimas son, en su mayor parte, proteínas f globulares solubles en agua
cuyo peso molecular se encuentra entre los 104 y 107 daltons. Para ilustrar es-
ta disparidad de masa molecular, indicaremos que la ribonucleasa, una pequeña
enzima que cataliza la hidrólisis de los nucleótidos que contienen ribosa, tiene
un peso molecular de 13700 daltons y está conformada por una cadena de 124
aminoácidos, mientras que la piruvato deshidrogenasa, una enzima gigante que
cataliza la conversión del piruvato a acetil coenzima A, está formada por la unión
de 42 cadenas proteicas individuales y su masa molecular está en torno a los 107
daltons. Generalmente, las enzimas proteicas no son simples proteínas sino que
pueden presentar una estructura compleja integrada por varios elementos. Si al-
guno de esto elementos falta, la enzima perderá su actividad catalítica. Para las
enzimas proteicas, los elementos estructurales más importantes son:
f
En la actualidad se conocen enzimas cuya estructura se corresponde con la de un ARN (ácido
ribonucleico).
donde los residuos de los aminoácidos de la cadena proteínica adquieren una si-
tuación espacial muy precisa. Los substratos sobre los que actúa la enzima suelen
ser moléculas orgánicas que tienen una forma definida. Durante la reacción, el
substrato alcanza el centro activo y debe introducirse en la cavidad; se produce
entonces una reordenación de la geometría del substrato y de la cavidad de forma
que todos los residuos con actividad catalítica interaccionan con las zonas ade-
cuadas del substrato. Se entiende pues, que un substrato con los mismos grupos
funcionales pero de distinta geometría, no encaje en la cavidad del centro activo
y, por lo tanto, no se produzca la reacción. En este caso, se dice que la enzima no
reconoce al substrato.
La elevada actividad de las enzimas sólo puede entenderse si se admite que
reducen grandemente el valor de ∆G6= . Como ya sabemos, esta cantidad se com-
pone de dos sumandos, ∆H 6= , relacionado con las interacciones energéticas entre
la enzima y el substrato, y ∆S 6= relacionado con la variación del “orden” mole-
cular.
Puesto que ambas variables se relacionan mediante la ecuación ∆G6= = ∆H 6= −
T ∆S 6= , la reacción procederá tanto más rápida cuanto más pequeño sea el valor
de ∆H 6= o por un aumento en ∆S 6= . El análisis de los valores típicos de ∆H 6=
indica que son similares a los encontrados para otras reacciones orgánicas por lo
que la elevada actividad debe buscarse en el cambio de entropía de activación.
En efecto, los cambios de entropía medidos en las reacciones enzimáticas son
grandes y positivos, acordes con un un aumento del desorden molecular durante
la formación del complejo activo. El aumento de entropía tiene su origen en que
la enzima y el substrato están hidratados pero, debido a su interacción de tipo hi-
drofóbico, se elimina durante la reacción una gran cantidad de moléculas de agua
del centro activo y de la primera capa de solvatación del substrato. La liberación
de las moléculas de agua es la responsable del incremento de entropía y por tanto
de la disminución de la barrera de activación.
Por último, indicaremos que las enzimas son catalizadores poco robustos. De-
bido a la naturaleza proteica del apoenzima las enzimas son muy sensibles a los
cambios de temperatura, del pHy de la concentración salina del medio. Peque-
ños cambios en estas magnitudes modifican la estructura terciaria del apoenzima,
lo cual conlleva la modificación de la geometría del centro activo que pierde su
actividad catalítica; se dice que la enzima se ha desnaturalizado.
k1 k
2
S + E C −→ P +E
k−1
rV = k2 [C] (7.54)
Dado que el complejo C es muy reactivo, aplicaremos la hipótesis del estado es-
tacionario:
d[C]
= k1 [S][E] − (k−1 + k2 )[C] ≈ 0 (7.55)
dt
Puesto que interesa obtener la ley de velocidad exclusivamente en función de la
concentración de substrato, eliminamos la concentración de enzima de la ecuación
([7.55]) haciendo uso del balance de concentración de la enzima:
Haldane:
k2 θ[S] k−1 + k2
rV = , Km = (7.58)
[S] + Km k1
En la ecuación, Km es la denominada constante de Michaelis y mide de la afinidad
del enzima frente al substrato. Si la constante es alta, la enzima se muestra poca
afinidad; en caso contrario, la enzima es afín y la conversión procede con rapidez.
Efectivamente, puesto que se ha supuesto que la etapa determinante es la des-
composición del complejo en productos, se puede considerar que k2 << k−1 y
en consecuencia:
k−1 + k2 k−1 1
Km = ≈ = (7.59)
k1 k1 Keq
donde Keq es la constante de equilibrio para la formación del complejo enzima-
substrato. La constante de Michaelis es pues, en muchos casos, la inversa de la
constante de equilibrio de la reacción de formación del complejo.
Michaelis y Menten supusieron que la formación de del complejo C era una
etapa de equilibrio y dedujeron la ecuación de velocidad bajo esta hipótesis. La
formulación de Briggs y de Haldane, expuesta en esta sección, difiere de Michae-
lis y Menten en que la ecuación de velocidad se deriva la hipótesis del estado es-
tacionario; la constante de Michaelis es considerada entonces como un parámetro
relacionado con el cociente entre las velocidades de destrucción y de formación
del complejo enzima-substrato.
El otro parámetro que aparece en la ecuación de velocidad se denomina velo-
cidad máxima debido a que, cuando la concentración de substrato es muy elevada,
se cumple que [S] >> Km y:
rV ≈ k2 θ = rmax (7.60)
En otras palabras, cuando la concentración de enzima es muy alta todo el enzima
está en forma de complejo, por lo que a un aumento de concentración de subs-
trato no le corresponde un aumento de la velocidad de reacción. En cierta forma
el substrato tiene que “esperar” a que exista enzima disponible para efectuar la
conversión.
Enzima k2 /s−1
Papaína 101
Ribonucleasa 102
Tripsina 103
Anhidrasa carbónica 106
Catalasa 107
mecanismo es:
S + E
C −→ P + E
I + E
C0
g
En la ecuación [7.66], KC 0 es la constante de estabilidad del complejo enzima-inhibidor:
[C0 ]
KC 0 =
[E][I]
se observa que esta constante es tanto mayor cuanto mayor sea la estabilidad del
complejo formado entre el enzima y el inhibidor. Por otra parte,la velocidad má-
xima no se ve afectada por la presencia del inhibidor.
La linealización de Linewaver-Burk aplicada a la ecuación ([7.68]) conduce a
la siguiente expresión:
1 1 K0 1
= + m (7.70)
rV rmax rmax [S]
La figura 7.11 muestra la representación de la ecuación [7.70]. En la gráfica, ca-
da una de las rectas se ha calculado utilizando una concentración de inhibidor
diferente. Se observa que todas las rectas presentan la misma ordenada en el ori-
gen, lo cual es coherente con una velocidad máxima de reacción independiente de
la concentración de inhibidor. También se observa diferente abscisa en el origen
0
(= −Km−1 ), siendo ésta cada vez más pequeña conforme aumenta la concentra-
ción de inhibidor (pues aumenta Km 0 , véase la ecuación [7.69]). Puesto que la
[C0 ] es idéntico al sistema ([7.64]-[7.66]) salvo que ahora la ecuación [7.66] debe
subtituirse por:
θ[S]
[C]? = (7.73)
[S](1 + KC 0 [I]) + Km
S + E
C −→ P + E
I + E
C0
I +C
C 00
Figura 7.13: Gráfico de Linewaver-Burk típico de la inhibición mixta. Las rectas fueron
simuladas con rmax = 1, Km = 1, KC 0 = KC 00 = 10. 1 [I] = 0,4, 2 [I] = 0,3, 3
[I] = 0,2 y 4 [I] = 0,1; se indica la cinética sin inhibidor.
La ecuación [7.82] indica que ahora variará tanto la pendiente de la recta como la
ordenada en el origen al variar la concentración del inhibidor. Ambos parámetros
se incrementarán al aumentar la concentración de este compuesto. La figura 7.13
ilustra este fenómeno.
2A + B → 2P
h
Recuérdese que la velocidad de las reacciones que siguen formalmente un orden siempre de-
crece con el tiempo
Figura 7.14: Variación de la velocidad de reacción en función del grado de avance (ζ)
para diversos órdenes de reacción (n = 1, 2, 3). (A) Reacciones autocatalíticas. (B) Reac-
ciones normales.
Figura 7.15: Curvas de concentración tiempo para el mecanismo descrito en los párrafos
anteriores. Se ha mostrado también el balance de concentraciones asociado al sistema
de ecuaciones diferenciales. Se utilizaron los siguientes parámetros para la simulación:
k 0 = 1,0 s−1 M−1 , k = 15,0 s−1 M−1 , [A]0 = 10−2 M, [B]0 = 10−3 M, [P]0 = 0 M.
sentan un punto de inflexión que marca el tiempo al cual la velocidad del proceso
es máxima.
7.5. Cuestiones
Cuestión 1. Indique y explique los métodos que conozca para iniciar una reacción quími-
ca.
a) Mecanismo protolítico.
b) Mecanismo prototópico.
a) Enzima.
b) Apoenzima.
c) Coenzima.
d) Grupo prostético.
e) Cofactor.
Cuestión 5. Indique cuáles son las características más importantes de la acción catalítica
de las enzimas.
Cuestión 6. Explique por qué razón los enzimas disminuyen en gran medida el valor de
∆G6= .
Cuestión 7. Deduzca la ecuación de Michaelis-Menten. ¿Qué diferencia existe entre este
modelo y el de Briggs-Haldane?. Defina los siguientes conceptos:
a) Constante de Michaelis
b) Número de “turn-over”.
c) Constante catalítica.
d) Velocidad máxima.
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