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Proceso Sedimentario
Proceso Sedimentario
EL ESTADIO DE CATAGENESIS
La fuente del material de los sedimentarios puede ser no solo la zona de acarreo
continental, sino también los productos de la actividad volcánica de los sectores
litorales y del fondo del depósito de acumulación de sedimento. Según la opinión de
algunos geólogos, dichos productos fueron la base para el surgimiento de yacimientos
vulcanogenos-sedimentarios de jaspes, minerales de óxido de hierro y manganeso,
íritas, asi como, probablemente, de bauxitas y fosforitas.
CONDICIONES GEOLOGICAS DE FORMACION
En la etapa arqueana surgieron las plataformas y los geosinclinales. Las aguas de los
océanos se van neutralizando gradualmente, haciéndose posible la acumulación de
sedimentos carbonatos y ferruginosos-silíceos en ellas.
Factor climático. Los diversos grupos de minerales sedimentarios son propios para
las distintas zonas climáticas de la tierra. N. Strájov destaca tres tipos de litogénesis y
formación de minerales: húmedo, árido y glacial.
Las condiciones húmedas son típicas por un clima donde las precipitaciones
atmosféricas predominan sobre la evaporación a una temperatura que garantiza la
presencia de agua líquida durante la estación calurosa del año. La formación húmeda
de menas fue la más común en las épocas geológicas pasadas. Con ella se halla
relacionada la formación de carbones y esquistos combustibles, bauxitas, minerales de
hierro y manganeso, fosforitas y calizas nodulares.
Las condiciones áridas son propias para un clima donde la evaporación predoina sobre
la masa de precipitaciones meteóricas.
Las condiciones glaciales surgen durante la existencia geológicamente duradera del
manto glacial. Estas conducen a la acumulación de los productos mal clasificados de la
meteorización mecánica. Su importancia como minerales se reduce a la utilización de
las arcillas y arenas arcillosas morrenicas para la construcción.
Factor tectónico. A los distintos elementos de la corteza terrestre, tales como son
los geosinclinales, las depresiones delanteras y las plataformas, les son propias
determinadas variedades de yacimientos minerales sedimentarios. Estos pueden
dividirse en cuatro categorías: 1) yacimientos de rocas carbonatadas, rocas silíceas y
carbones, que se encuentran en los depósitos geosinclinales, las depresiones
delanteras y las plataformas, 2) yacimientos de bauxitas, mineral de hierro y
manganeso, así como de fosforitas, que solo se forman en condiciones de
geosinclinales y plataformas; 3) yacimientos vulcanogeno-sedimentarios que se
originan exclusivamente en los geosinclinales; 4) yacimientos de yeso y sales,
característicos para las depresiones delanteras.
Bario. Este es transportado por las aguas superficiales en forma de cloruro de bario
fácilmente soluble. Al ponerse en contacto con el agua marina que contiene iones de
sulfato, se precipita formando cincreciones, acumulaciones locales y estratos
compactos de baritina entre los sedimentos marinos generalmente carbonatados.
YACIMIENTOS VULCANOGENO-SEDIMENTARIOS
Uno de los parámetros usados para cuantificar las condiciones del movimiento del
fluido es el Numero de Reynolds, que es una proporción dimensioneless que identifica
el flujo
Fig. 2.1 (a) Ilustración esquemática, usando perfiles aerodinámicos de naturaleza laminar y
turbulento del flujo del fluido. (b) Estructura interna de un flujo turbulento de fluido en un canal
natural. τo es el límite de esfuerzo cortante impuesto por el fluido en su lecho y es una función de J
(profundidad del fluido) y S (pendiente del lecho), así como la densidad del fluido.
Procesos Sedimentarios:
Sedimentos alóctonos:
Estos son aquellos depósitos que han sido transportados al ambiente donde han sido
depositados e incluyen a los depósitos clásticos y piroclásticos.
Los depósitos terrestres de arcillas, arenas y gravas acumulados por acción aluvial
pueden ser de uso industrial como materiales de construcción. Sin embargo, el tipo de
depósitos alóctonos más importante son los placeres.
Estos son depósitos terrígenos formados por los procesos sedimentarios normales que
concentran minerales pesados. Generalmente esta es una separación gravimétrica que
se produce en agua en movimiento, aunque la concentración en medios sólidos y
gaseosos también puede ocurrir. Para poder ser concentrados los minerales pesados
primero deben ser liberados de las rocas que los contienen y deben poseer una alta
densidad, resistencia química a la meteorización y durabilidad mecánica.
Aunque los placeres de oro son los más conocidos de este tipo de depósitos, los
minerales de placeres que cumplen en mayor o menor medida con las propiedades
expuestas incluyen: casiterita, cromita, columbita, cobre, diamante, granate, ilmenita,
magnetita, monazita, platino, rubí, rutilo, zafiro, xenotima y circón.
Sedimentos autóctonos:
Las rocas formadas por precipitación química de carbonatos pueden ser de interés
económico como minerales industriales (Ej. calizas y dolomitas): Sin embargo, para los
efectos de este curso es más relevante la formación de depósitos metálicos por
precipitación química tales como las formaciones de hierro bandeado (BIF: "banded
iron formations") del Precámbrico, los depósitos de hierro oolítico fanerozoicos y los
depósitos sedimentarios de manganeso.
El mineral consiste en finas bandas, de 0,5 a 3 cm de potencia, las cuales a su vez están
laminadas a la escala de milímetro o fracción de milímetro. Se alternan bandas silíceas
con bandas de minerales de hierro (hematita, magnetita). El hierro habría precipitado
en condiciones subacuáticas por efectos químicos o bioquímicos, lo cual habría sido
favorecido por las condiciones anóxicas (sin oxígeno) de la atmósfera terrestre en el
Precámbrico.
Existen también depósitos de cobre asociados a rocas sedimentarias, entre ellos los
ejemplos más notables son los del Kupferschiefer de Europa y la Faja Cuprífera de
Zambia.