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"4Textos + 2 Melodías = varias incógnitas"

Documentos del
Romancero Judeo-español *
Eleonora Noga Alberti-Kleinbort

Después de la Expulsión de España en 1492, los sefardíes se dis-


persaron hacia todos los países de la Cuenca Mediterránea. Lo hicieron
especialmente hacia los Balcanes, Turquía, Grecia, Palestina y al Norte
de Africa, Marruecos, Argelia y Túnez. En todos estos países algunas ciu-
dades se destacaron como polos culturales y económicos, por ejemplo Sa-
lónica y Constantinopla en el Mediterráneo Oriental y Tánger y Tetuán
en el Occidental, y formaron 10 que se dio en llamar la Diáspora Sefara-
dí. Esto no significa, sin embargo, dejar de lado a las pequeñas poblacio-
nes o ciudades donde se asentaron, sino más bien destacar la envergadu-
ra de aquellas urbes de gran concentración humanay específicamente del
grupo que nos ocupa.
Gran parte de los habitantes de esas regiones emigraron de allí du-
rante el siglo que corre en el período de entre guerras. Un número impor-
tante llego a la Argentina y principalmente a Buenos Aires.
En 1968 comenzamos un trabajo de recopilación sistemática del
patrimonio poético-musical tradicional sefardí. Nuestro primer objetivo
fue documentar los romances que pudiesen recordar los judíos españoles
residentes en Buenos Aires. Muy poco tiempo después notamos que el Ro-
mancero era apenas una pequeña parte dentro del total del Cancionero
Tradicional Judeo-español, que podíamos llegar a descubrir.
De ese archivo documental integrado por Romances, Cantos Líri-
cos, Cantos de Cuna, Coplas, Cantos Sinagogales o Para-litúrgico s, creí
oportuno presentar aquí algunos ejemplos.
Fueron grabados en Buenos Aires a dos informantes a las que les

(*) Trabajo presentado en las Sextas Jornadas Argentinas de Musicologta y la V Conferen-


cias Anual de la AA.M. (1991)
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gustaba cantar y 10 hacían de manera habitual en las reuniones familia-
res o en las ceremonias religiosas. Tenían 70 años en el momento de la en-
trevista y se preparon cuidadosamente para ella.
1) Mary Israel de Levy; procedía de Melilla, Marruecos. Venía a nuestra
ciudad durante temporadas más o menos prolongadas para visitar a
sus hijas. La entrevisté en una de esas ocasiones. Revisó su reperto-
rio de romances ya medida que la reunión avanzaba sacaba de su me-
moria nuevos cantos de la índole más diversa.
2) Victoria Fresco de Levy había nacido en Constantinopla y se había ra-
dicado en Buenos Aires aproximadamente en la década del '30. Fue
aún más detallista. Escribió todos los ejemplos en un cuadernillo que
nos deja ver su ortografía. Se centró exclusivamente en el Romance-
ro. No obstante ello; durante la sesión de documentación se sumaron
su hermana, su marido y su cuñado, quienes aportaron algunos ejem-
plos muy poco frecuentes, del repertorio litúrgico de la tradición de
Damasco, Siria. En un momento V. F. de Levy olvidó cantar la "estro-
fa- clave" del romance de La vuelta del hijo maldecido que dice:
-¡Todas las naves del mundo vayan y vuelvan en paz,
y la nave de mi hijo vaya y no vuelva más!
Su hermana, Estela Fresco de Levy, 10 notó y entonces Victoria la
agregó. Esto nos ocurrió otras veces y con otros informantes, de 10 que
podemos deducir que hay quienes escuchan y no cantan, pero conocen
muy bien el repertorio y son capaces de indicar si algo falta o está mal.

La Transcripción

Texto- La hicimos de acuerdo a las reglas fonéticas universales y


a la pronunciación de los informantes. La puntuación es nuestra, ya que
generalmente quienes cantan no realizan inflexiones expresivas que per-
mitan suponerlos. Fue deducida del significado del mismo.
Adoptamos la forma de verso de dieciséis sílabas, dividido en dos
hemistiquios de ocho sílabas cada uno.
Agregamos además el texto de Victoria Fresco de Levy según su
propia ortografía y forma en versos de ocho sílabas.
Música - Las melodías están en su altura original, salvo en el ca-
so de Abenamar. En el ejemplo documental está un tono más grave que
la transcripción. Por razones prácticas la traspusimos.
Para la pautación respetamos la división habitual del fraseo, un
hemistiquio = una semifrase melódica.
La indicación metronómica es aproximada, ya que nuestras can to-
ras raramente mantuvieron un tempo fijo.
Casi no hubo variantes melódicas o rítmicas y las pocas que apa-
recieron no justifican una transcripción especial. Generalmente se tra-
taba de una reubicación del texto dentro de la melodía básica.
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Para una mejor visualización de la forma total y de la correspon-
dencia texto-música, agregamos a los textos el esquema de frases y semi-
frases musicales.

Ejemplos

La duración total de cada grabación documental es la que sigue:

Las hermanas Reina y Cautiva (í-a) (6'05")


} Melodía 1
Abenamar (í-a) (3'21")

La vuelta del hijo maldecido (a) (2'29")


} Melodía 11
La vuelta del marido (a) (3'26")

Melodía 1

Pertenece a los romances


Las Hermanas Reina y Cautiva (ía-a) Texto 1
Abenamar (í-a) Texto n
Informante:
Mary Israel de Levy (Melilla)
Recopiladora y transcriptora:
Eleonora Noga Alberti-Kleinbort, Bs. As. 1977.

~ b._

237
Texto I

Informante:
Mary Israel de Levy (Melilla)
Recopiladora y transcriptora:
Eleonora Noga Alberti-Kleinbort, Buenos Aires, 1977

Las hermanas Reina y Cautiva (í-a)

La reina Xarifa mora, la que vive en Almería, (A) (a) - (b)


dicen que tiene deseo de una cristiana cautiva, ] (B)(c)-(b')
Los moros cuando lo oyeron de repente se partían;
unos se iban para Francia y otros para la Almería.
]
Encuentran a Condes Flore y a la condesa traía,
en presencia se la ponen de la reina d'Almería.
]
- ¡Tomés señora la esclava, la esclava que vos queríais,
que ni es mora ni judía, señora de gran valía!
]
- [Tornéis esclava las llave' (1) de la despensa y cocina!
: Yolas tomaré señora por la gran desdicha mía, ]
que ayer condesa y marquesa, hoy esclava en la cocina. ] (A) (a) - (b)
Van días y vienen día' (1) las dos paren en un día,
las malas de las comadres para ganar su propina,
]
daban el niño a la reina ya la esclava dan la niña. ] (A)
Un día estando la esclava con su hija en la cocina,
con lágrimas de sus ojo' (1) la cara la lavaría.
]
- ¡Ay,hijita de mi alma! ¡Ay,hijita de mi vida! ] (A)
¡Quién te me diera mis tierras, en mis tierras d'Almería! ] (A)
Te nombrará Blanca Flor, nombre de una hermana mía, ]
me la cautivaron moro' (1) día de Pascua florida.
La reina cuando lo oyera desde su sala 'nde estaba, ] (A)
- ¿Quién es esa o cuál es esa y qué señas tenía tu hermana? ]
- Tenía un lugar negro y en su espalda la derecha.
y de allí se conocieron Las dos hermanas queridas. ] (B)(c)-(b')
Entre besos y abrazo' (1) cambiaron a su hijo. ] (A)

(1) Es frecuente en el habla de los sefardíes nordafricanos la omisión de


la s final que indica el plural.

238
Texto TI

Informante:
Mary Israel de Levy (Melilla)
Recopiladora y transcriptora:
Eleonora Noga Alberti-Kleinbort, Buenos Aires, 1977

Abenámar (í-a)

- Abenámar, Abenámar moro de la morería, ] (A)(a)-(b)


el día que tu naciste, grandes señales había. (B)(c) - (b)
Estaba la mar en calma, la luna estaba crecida,
moro que en tal signo nace no debe decir mentira.
]
- Yo te la diré Señor, aunque me cueste la vida.
Cuando yo niño y muchacho mi madre me lo decía
]
que mentira no dijera, que era grande villanía.
Por eso pregunta, el rey, que la verdad te diría.
]
-¿Qué monumentos tenía Granada y qué castillo' eran aquéllo'?
- La Alhambra y el Albermúdar (1) también el Generalife ]
y otros tantos mi Señor, que también te lo diría. ] (A)(a) - (b)
- Yo te agradezco Abenámar Aquesta tu galanía
te nombraré a mi servicio, te quedarás en palacio.
]
ra ri re ro re ro re ro ra ri re ro re ro re ro ] (A)

(1) Resultó imposible saber a qué monumento se refirió la informante.

239
Melodía 11

Pertenece a los romances


La vuelta del hijo maldecido (á) Texto 111
La vuelta del marido (O Texto IV
Informante:
Victoria Fresco de Levy (Constantinopla)
Recopiladora y trasncriptora:
Eleonora Noga Alberti-Kleinbort, Bs. As., 1975.

240
Texto m
Informante:
Victoria Fresco de Levy (Constantinopla)
Recopiladora y transcriptora:
Eleonora Noga Alberti- Kleinbort, Bs. As. 1975.

La vuelta del hijo maldecido (á)

Ya se va el cabaiero, ya se va el Carolán. (A)(a) - (b)


Ya se va el cabaiero, ya se va por alta mar. 1 ] (B) (e) - (d)
- Cabaiero, cabaiero, ¿ande vas y me desas?
me desas muy angusiada, (1) angusiada de esperar. 2 ]
¡Todas las naves del mundo vayan y vengan en paz
y la nave de mi hijo vaya y no venga más! 3]
Pasó tiempo y vino tiempo el escariño (2) le subió.
Aparóse (3) a la ventana, la ventana de la mar. 4]
Vida (4) venir nave franca navegando por la mar.
Vido venir nave franca navegando por la mar. 5]
- Así viva el capitán y así viva el capitán
así viva el capitán, que me diga la vedrá (5) 6 ]
Si lo vido al mi hijo, al mi hijo el Caro Alán (6)
- Yo lo vide al vuestro hijo, al vuestro hijo el Carolán. 7 ]
Con la piedrá (sic) por cabecera y el lunar por cubiertá (sic).
Con la piedrá por cabecera y el lunar por cubiertá. 8 ]
Esto que oyó la su madre, a la mar se quiso echar.
- No os eches la mi madre, so' (7) vuestro hijo el Carolán. 9]
Ya se besan, ya se abrazan, ya se meten ajadrear (8)
ya se besan, ya se abrazan, ya se meten ajadrear. 10 ]

(1) angustiada.
(2) nostalgia.
(3) -se paró; a protética, arcaísmo muy frecuente.
(4) arcaísmo por vió.
(5) = verdad; metástasis frecuente.
(6) = Carolán, equivalente a, o referencia a Carlomagno.
(7) = soy
(8) = coquetear, juguetear.

241
La vuelta del hijo maldecido (a)

Transcripción de lo escrito por


Victoria Fresco de Levy (Constantinopla)

iá se vá el cavaiero
iá se vá el Carolán
iá se va el cavaiero
iá se va por alta mar
- cavaiero, cavaiero
ande vash y me deshash
me deshash muy angusiada
angusiada de esperar
(*) Aquí debe intercalarse la estrofa
pasó tiempo y vino tiempo que fuera cantada al final:
el escariño le subió - ¿Todas las naves del mundo
aparóse a la ventana vayan y vengan en paz?
la ventana de la mar; y la nave de mi hijo
vida venir nave franca vaya y no vuelva más!
navegando por la mar
-así biva el capitán (**) Este verso fue bisado
así biva el capitán en el ejemplo sonoro
que me diga la vedrá
si 10 vido al mi hiyo
al mi hiyo el Carolán.
- ió 10 vide al vuestro hiyo
el vuestro hiyo el Carolán
con la piedra por cabecera
y el lunar (1) por cubierta
esto que oió la su madre
a la mar se quiyo (2) echar
- no vos echesh la mi madre
só vuestro hiyo el Carolán
ia se basan ia se abrazan
iá se meten a jadrear

Notas de la informante:
(1) la luz de la luna
(2) quiso
(3) bromear, jalear

242
Texto IV

Informante:
Victoria Fresco de Levy (Constantinopla)
Recopiladora y Transcriptora:
Eleonora Noga Alberti-Kleinbort. Bs. As., 1975.

La vuelta del marido (í)

Ya venía el cabaiero de la guerra para holgar, (A)(a) - (b)


y ya vido a la dama aparada en el portal. 1 ] (B) (c) - (d)
- Cabaiero, cabaiero, que de la guerra venís,
si vites a mi marido, a mi marido el Amadí. 2 ]
- Yo lo vide a su marido a su marido el Amadí.
¿Qué das vos la mi señora si yo vo' (1) lo traigo aquí? 3 ]
- Daba yo mis tres cabaios, tres cabaios de Amadí,
daba yo mis tres cabaios, (2) tres cabaios de Amadí. 4 ]
El uno para la guerra, el otro para servir,
el más chiquitico de ellos para holgar y durmir. 5 ]
- ¿Qué más da la mi bulisa (3) si yo se lo traigo aquí'?
- Daba yo mis tres palacios, tres palacios de Amadí. 6 ]
El uno para la gala, el otro para servir,
el más chiquitico de ellos para holgar y durmir. 7 ]
- ¿Qué más da la mi bulisa si yo se lo traigo aquí?
- Daba yo mis tres donceias (4) tres donceias de Amadí. 8]
La una para la mesa, la otra para servir,
la más chiquitica de ellas para holgar y dormir. 9 ]
_ ¿Qué más da la mi bulisa si yo se la traigo aquí?
¿dabas vuestro bel (5) hermoso vuestro bel de Amadí? 10 ]
- ¡Malaño a tal cabaiero que tal pasó por aquí!
- No maldiga mi bulisa que yo so' su Amadí. 11]
- ¿Qué señas da el cabaiero de que es mi Amadí?
debaxo del pecho siedro (6) ¿tenés un lunar maví (7)? 12 ]
Ya se besan, ya se abrazan, ya se meten ajadrear.
Ya se besan, ya se abrazan, ya se meten ajadrear. 13 ]

(1) = os
(2) = caballos
(3) = bula, señora (en turco), esposa
(4) = doncellas
(5) = cintura (en turco)
(6) = izq uierdo
(7) = azul (en turco)

243
La vuelta del marido (a)

Transcripción de lo escrito por


Victoria Fresco de Levy (Constantinopla)

ia venía el cavaiero
de la guerra para holgar
y iá vida a la dama
aparada (1) en el portal.
- cavaiero, cavaiero
que de la guerra venish
si vitesh a mi marido
a mi marido el Amadí.
- ió 10 vide a su marido,
a su marido el Amadi
que dash vos la mi señora
si ió vo 10 traigo aquí
- daba ió mis tres cavaios
tres cavaios de Amadí
el uno para la guerra
el otro para servir
el más chiquitico de eios
para holgar y durmir.
e más dá la mi b . a (*) Lo tachado es de la informante
quí
- daba' 'lS alacios
palacios de Ama '.
- que más dá la mi bulisa
si ió se 10 traigo aquí
- daba ió mis tres palacios
tres palacios de Amadi,
el uno para la gala
el otro para servir (2)
el más chiquitico de eios
para holgar y dormir.
- que más dá la mi bulisa
si ió se 10 traigo aquí.
- daba ió mis tres donceas (3)
tres donceas de Amadi,
la una para la mesa
la otra para servir
la más chiquitica de eias
para holgar y durmir.
- que más dá la mi bulisa
si ió se la traigo aquí,
dabash vuesto bel (4) hermoso
vuestro bel de Amadí.
- mal año a tal cavaiero!

244
que tal pasó por aquí.
- no maldiga mi bulisa
que ió só su Amadí.
- que señas da el cavaiero
de que es mi Amadí.
- debasho del pecho siedro
aí tenesh un lunar maví (5)
iá se besan, ia se abrazan * (*) Esto fue bisado en el ejemplo sonoro.
iá se ponen a ajadrear (6)

(1) asomada
(2) servidumbre
(3) doncellas
(4) cintura
(5) azul
(6) jalear, bromear

Observaciones

1 - Dos de los ejemplos que nos ocupan, Abenámar (f-a) (Melilla) y La


vuelta del hijo maldecido (a) (Constantinopla), figuran en el Archi-
vo Menéndez Pidal dentro de la "Antología de Romances RarÍsi-
mos" (1).
Merecerán, por lo tanto, un análisis en profundidad ya que considera-
mos que nuestras verdaderas versiones -sobre todo en el caso de Abe-
namar- conservan las características originales que poseían en los si-
glos XV y XVI, según figura en algunas fuentes escritas (2).

2 - Las Hermanas Reina y Cautiva (ía-a) pertenece al mismo grupo de


"Romances Moriscos" que Abenámar, con el cual aquí comparte la
melodía.
La vuelta de Marido (a) incluye un rasgo característico del Roman-
cero, que es el canto paralelístico, estrofas números 3 al 10.

3 - En ambos casos la melodía es usada para textos que se relacionan,


a) por la rima
b) por la temática

4 - El contrafactum de lo profano a lo litúrgico fue un recurso muy uti-


lizado en la tradición sefardí. ¿Se trataría aquí de algo semejante? O
bien es una mera adaptación funcional que hizo cada informante?

5 - Mientras los ejemplos de Constantinopla son absolutamente silábi-


cos, los de Melilla tienen un final de sernifrase (b') o (b), con un com-

245
pás que hace las veces de cadencia. Eso es más notorio cuando, por el
fraseo, nuestra informante articula en Abenámar de la siguiente ma-
nera:

Esto pone en tela de juicio algunas afirmaciones según las cuales lo


que aquí aparece como rasgo del Mediterráneo Occidental sería propio
del Mediterráneo Oriental y viceversa.

6 - La omisión de la parte (B) o (A) de la melodía, como ocurre en los dos


ejemplos marroquíes, ¿indicaría un olvido de parte del texto?
La repetición de algunos versos -y no de la línea melódica- de los Tex-
tos IIIy IV, ¿sería consecuencia de una distracción momentánea? o
¿se trata de resabios de una forma musical adaptada a la estructura
métrica del romance?

7 - ¿Qué factores determinan la métrica más rica y variada de la Melo-


día I?
a) ¿Un mayor arcaísmo?
b) ¿La influencia de otras tradiciones musicales, por ejemplo la
árabe?
e) ¿Características propias que deberemos determinar?

8 - Las candencias y finales de la Melodía 11,¿indican la presencia de al-


go frecuentemente atribuído a la música sefardí, como es la cadencia
medieval ooert-clos (3)?

A modo de reflexión final

Todas estas incógnitas nos muestran cuán complejo es el fenóme-


no de la tradición musical oral sefardí.
La riqueza lingüística, filológica, temática, melódica, rítmica y for-
mal que posee, además del significado histórico (conservado exclusiva-
mente a través de lo oral).
Todo ello nos permite a cada paso hacer un nuevo aporte al cono-
cimiento de la tradición hispano-judía y al modo en que se perpetuó en
este grupo étnico-cultural.

Mayo,1991
246
Notas

(1) Armistead, Samuel G. -"El Romancero Judeo-español en el Archivo


Menéndez Pidal". (Catálogo índice de romances y canciones). Madrid,
Cátedra - Seminario Menéndez Pidal, 1978. Vol 111.Abenámar, pp.
15-16; La vuelta del hijo maldecido. p.50

(2) Durán, Agustín. "Romancero General" o "Colección de Romances


Castellanos". Madrid, Imprenta de los Sucesores de Hernando, 1921.
Abenámar, Vol. 11,p. 80.

(3) Al respecto ver nuestro: "Un rasgo arcaico en el repertorio tradicional


sefaradí: La cadencia overt-clos" En: FICTA: Bs. As., Ficta Difusora
de Música Antigua, Tomo 1, Setiembre 1977, n 4, pp. 241-253.
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