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Cartografía Del Silencio PDF
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Emmanuel Lévinas
1
Plegaria Muda es una instalación comisionada por la Fundación Calouste Gulbenkian (Lisboa) y el Museo de
Arte Moderno de Malmö (Suecia) que, en su mayor despliegue, consiste en 166 unidades donde cada una está conformada
por dos mesas invertidas y unidas por una estructura de tierra que permite el crecimiento de pasto.
conmemoración del Bicentenario de la Independencia y Centenario de la
Revolución Mexicana. Un ciclo que, más que celebrar, abría cuestionamientos
sobre el pasado, presente y futuro de México, poniendo en duda las narrativas
oficiales y dando visibilidad a historias marginales y censuradas de nuestro país.
En ese contexto, la pieza hacía una alusión directa a la violencia que se ha vivido
durante la llamada “guerra contra el narco”, la misma que en 2012 ha acumulado
ya un saldo de 60,000 muertos, aunque el gobierno no se ha encargado de
esclarecer las cifras oficiales, ni los nombres de los fallecidos. Pensando en dicho
contexto y reflexionando sobre la materialidad de la pieza y sus atributos formales,
comprendí que la artista había realizado una obra donde la denuncia, el luto y la
empatía se daban cita para hacer reflexionar a los asistentes sobre nuestra
dolorosa realidad.
Hay tres operaciones que, desde mi punto de vista, ejercen esa fuerza
penetrante en Plegaria Muda; he nombrado cada una para dar cuenta de las
poderosas reflexiones que de ellas derivan. Las he denominado: tragar muerte, el
silencio como mudo grito y morir al otro. A continuación ahondaré en cada una.
2
Doris Salcedo estudió bellas artes en la Universidad Jorge Tadeo Lozano en Bogotá, y un posgrado en la
Universidad de Nueva York. Su trabajo ha sido exhibido en numerosos eventos artísticos, museos y galerías internacionales
de amplio prestigio, entre ellos el MOMA en Nueva York y la Tate Modern en Londres.
TRAGAR MUERTE
La pieza nos lleva a reflexionar sobre esta brutalidad cotidiana. Todos los
días nos llevamos a la boca con amargura esa tierra negra de nuestros muertos,
pan hecho de huesos, bolsas negras, casquillos de balas, informes sin
seguimiento, cabezas mutiladas, huérfanos y olvidos que desgarran la garganta; y
tenemos que digerir el desagradable y pútrido banquete de la impunidad.
Los familiares de las víctimas se incluyen en este grito mudo, pues se han
quedado afónicos de tanto increpar, sofocados por la pena, no logran emitir ningún
sonido. De ellos se sabe poco o nada, algunas pancartas aparecen aisladamente
en el Zócalo capitalino, se han hecho algunas marchas con vestidos blancos en
busca de la paz, pero poco se ha alcanzado; la guerra contra el narco sigue su
curso y las muertes sin rostro se continúan acumulando.
MORIR AL OTRO
Así como amamos al otro, con su obra Doris Salcedo nos invita a morirlo,
es decir, a sentir su pérdida. Como Suely Rolnik4 plantea “una de las búsquedas
que ha movido especialmente las prácticas artísticas es la de la superación de la
anestesia de la vulnerabilidad al otro, propia de la política de subjetivación en
curso. Es que la vulnerabilidad es condición para que el otro deje de ser
simplemente un objeto de proyección de imágenes preestablecidas y pueda
convertirse en una presencia viva, con la cual construimos nuestros territorios de
existencia y los contornos cambiantes de nuestra subjetividad.” La obra de Doris
Salcedo redescubre nuestra potencia sensible, nos acerca al otro, hace íntimo
este pesar, regresándolo al mismo tiempo al campo de lo colectivo, porque la
responsabilidad de proteger la vida y todo lo vivo es nuestra. Quizá por eso Doris
ha dejado que nazcan algunas hierbas en la mesa, para hacernos reflexionar
sobre estas frágiles existencias que, pese a todo, se abren paso para poder vivir,
pero que están absolutamente amenazadas; probablemente sean una metáfora de
nosotros mismos, tratando de acercarnos a la luz desde áridos terrenos.
3
Carlos Ramírez, Inseguridad:causa-efecto, consultado 03/02/2012
http://www.elfinanciero.com.mx/index.php?option=com_k2&view=item&id=699&Itemid=43
4
Cfr. Suely Rolnick, Geopolítica del Rufián, Traficantes de sueños, Madrid, 2006.
“ El artista es una persona completamente frágil, yo miro al mundo
desde la perspectiva de la víctima, desde la perspectiva de los derrotados”5,
comenta la artista en una entrevista para la serie Art 21 de PBS. Doris Salcedo
apela a nuestra responsabilidad por los otros pues, como indica el filósofo
Emmanuel Lévinas6, “la obra pensada a fondo exige una generosidad radical del
movimiento que va en él mismo hacia el otro.” Ese es también el llamado de Doris
Salcedo, una apelación a la ética en la estética contemporánea. Según comenta la
autora “siempre habría que redactar de nuevo el valor ético y moral de la sociedad
globalizada. El arte contemporáneo tiene que permanecer dentro de los límites de
la ética y cada artista debe poner en duda su responsabilidad. Debemos abordar
los problemas de la violencia y la política, pero fuera de las imágenes explícitas.”7
Este es otro aspecto significativo de Doris Salcedo: ella reconstruye la trama del
dolor a través de metáforas emotivas. “La expresión libera afecto, y el afecto es lo
que mueve. La presencia, la gestualización y el habla transforman la cualidad del
contacto entre las personas, crean tanto quiebres como junturas, y las técnicas
expresivas del arte pueden multiplicar estos cambios inmediatos a lo largo de
miles de caminos de la mente y los sentidos”, propone Brian Holmes en su
Manifiesto afectivista.8
5
Doris Salcedo, Compassion, Art 21, PBS, Sesión 5, 2009.
6
Emmanuel Levinas, Humanismo del otro hombre, Siglo XXI editores, México, 2009, p.
50.
7
Doris Salcedo, Plegaria Muda: Doris salcedo en el MAXII de Roma, consultado el
22/03/2012, http://esferapublica.org/nfblog/?p=23824
8
Brian Holmes, Manifiesto Afectivista, consultado el 01/01/2011,
http://www.enmedio.info/manifiesto-afectivista-brian-holmes/
9
Antonio Arevalo, Plegaria Muda: Doris Salcedo en el MAXXI de Roma, consultado
22/03/2012, http://www.artishock.cl/2012/03/plegaria-muda-doris-salcedo-en-el-maxxi-de-roma/
sucumben a la depredación. Nuestro momento histórico es tan violento, que vaya
a donde vaya, la obra sigue siendo un homenaje a los más vulnerables dentro del
sistema de poder mundial.