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Valoración histórica

del contexto construido*


Cali, una mirada local
Historic evaluation of the constructed context. Cali, a local look

Susana Jiménez Correa


Arquitecta, Magíster en Educación.
Docente tiempo completo, Facultad de Arquitectura, Arte y Diseño, USB Cali
sjcorrea@usb.edu.co

Grupo de investigación Estéticas urbanas y socialidades


Universidad de San Buenaventura Cali

Resumen
Recorriendo la ciudad y su arquitectura como escenarios donde se construyen las identidades locales,
es un reto explorar los procesos que permitirían que las propuestas arquitectónicas, preocupadas por los
signos de su identidad, ofrezcan una respuesta “acertada” a los problemas, a las necesidades históricas,
a los aspectos geográficos y del lugar. Este artículo presenta un análisis interpretativo y una reflexión
crítica frente al problema de la valoración del contexto en la intervención arquitectónica contemporánea
y, en particular, la arquitectura de Cali, que ha contrapuesto las singularidades propias de las realidades
locales con la diversidad de los modelos importados de realidades externas.
Palabras clave. Cali, arquitectura, identidad, contexto.

Abstract
By observing the city and its architecture as settings where local identities are constructed, it becomes
a challenge to explore the processes which would allow those architectural proposals, concerned with
the signs of its own identity, to offer an appropriate response to its problems, historical needs, and,
aspects of geographical and local concerns. This article presents both an interpretative analysis and a
critical reflection of the problem concerning the evaluation of the context in contemporary architectural
intervention and, especially, architecture in Cali, which has within it the dichotomy of the singularities of
local realities in contrast to the models imported from external realities.
Keywords: Cali, architecture, identity, context.

* Las reflexiones consignadas en este artículo son producto de las indagaciones y los avances conceptuales desarrollados en el
marco del proyecto de investigación Valoración del contexto construido para el planteamiento de proyectos de intervención en
lugares urbanos, del grupo de investigación Estéticas urbanas y socialidades, y de la investigación de la autora en la Maestría en
Historia: Valoración histórica del contexto construido: Cali, 1995-2005, de la Universidad del Valle.
Fecha de recepción: Septiembre de 2006.
Aceptado para su publicación: Noviembre de 2006.

Revista científica Guillermo de Ockham. Vol. 4, No. 2. Julio-Diciembre de 2006 • ISSN: 1794-192X 83
Susana Jiménez Correa

Introducción Como efecto de la adquisición tardía de


conciencia histórica, surge la preocupación
Hasta la Constitución de 1886 se generalizó relativamente reciente por la reinvención y el
en Colombia una perspectiva centralista y resurgimiento de las singularidades y una re-
unitaria en los aspectos políticos y cultura- valorización de la historia de las localidades,
les, siendo reconocida la nación como en contraposición a la búsqueda incesante
blanca, católica y de habla castellana. Entre de referentes urbanos y arquitectónicos
los años 1940 y 1960 se consolida el valor externos y de modelos importados de rea-
del mestizaje, pero sólo hasta los cambios lidades física, cultural e ideológicamente
constitucionales de 1991 –concebidos como ajenas. Esta situación, que ha impedido que
instrumento político para la reconciliación la arquitectura latinoamericana construya
nacional y la modernización del Estado–, la coherencia y la continuidad necesarias
se explicita la pluriculturalidad de la nación para forjar una identidad regional, abre un
colombiana y se señala la necesidad de amplio campo de estudio de lo local, en el
proteger esta condición otorgando derecho cual se inscribe este trabajo, en desarrollo
a la identidad. Quince años después de del proyecto de investigación Valoración
proclamada la nueva Constitución, cabe histórica del contexto construido para el
preguntarse si la arquitectura contemporá- planteamiento de proyectos de intervención
nea, construida en Cali, muestra indicios de en lugares urbanos.
haber fortalecido identidades incorporando Ante la cada vez más frecuente llamada
la memoria y si, en respuesta a estas circuns- a la globalidad, la homogeneidad y la
tancias, ha contribuido a la configuración del interculturalidad –que es ya un hecho–,
contexto como el lugar para su afirmación o paradójicamente se multiplican las reivin-
reconocimiento. dicaciones de identidad local e historia de

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las localidades, acaso como una reacción evite el traslado literal y acrítico de lenguajes
y una apuesta crítica por un presente que de otros medios culturales al contexto local.
lucha contra el signo de la uniformidad. Al La aproximación al lugar, como espacio de
respecto, Francisco Zuluaga afirma: “Quizá lo identificación, interpreta la valoración que
que hoy están buscando las localidades de las intervenciones urbano-arquitectónicas
mayor conciencia histórica, sea el reconoci- le deben al lugar, al apropiarse del capital,
miento del significado de sí mismas para sí y la infraestructura, los usos, la memoria y las
frente a un mundo que procura desdibujarlas identidades colectivas acumuladas por las
en la globalidad” (Zuluaga, 2006). generaciones precedentes.

La carencia de valoración histórica en la Partiendo de la base de que toda interven-


arquitectura colombiana se ha expresado ción en el espacio construido materializa
también en su historiografía, que ha venido una visión del mundo y una ideología que
limitándose a dos tendencias primarias: la se expresan en la configuración de los
descripción y el análisis del hecho arquitectó- hechos arquitectónicos, se formula una pre-
nico –en una condición de fotogenia donde gunta para guiar la reflexión: ¿cuáles son los
prima la imagen sobre el contenido– y un elementos del contexto que es necesario
proceso de valoración de las obras, restringi- considerar para la formulación de un enfoque
do a la lectura físico-espacial individual del conceptual y una metodología para la inter-
edificio, donde los proyectos se estudian, vención arquitectónica en lugares urbanos
representan, aprueban y premian como ob- consolidados?
jetos exentos del contexto.1 Este interrogante vincula los hechos arqui-
La necesidad de dar sentido a los espacios tectónicos con las formas como se insertan
y lugares en los que se inscriben las rela- en el contexto y la red de relaciones que se
ciones sociales y la historia, se dificulta por constituyen, sobre cuya base de estudio es
las anonimias cada día más frecuentes en posible llegar a las generalizaciones y las pro-
espacios limitados a una experiencia empí- posiciones. Con el propósito de caracterizar
rica. De allí que una aproximación crítica a el contexto histórico de la arquitectura para
esta problemática que afecta la producción identificar sus influencias en la arquitectura
arquitectónica y urbanística latinoamericana, local y estructurar un marco conceptual que
y en particular la arquitectura de Cali, deba fundamente el proceso investigativo, este
partir del hecho arquitectónico como con- artículo presenta una reflexión sobre los si-
formador de lo urbano. La investigación del guientes aspectos:
contexto construido y su historiografía arqui- – Caracterización conceptual del hecho
tectónica, se presenta como alternativa para arquitectónico como objeto histórico y
una interpretación histórica y cultural que cultural;

1. De las más de cien obras de arquitectura de Cali publicadas en los libros de bienales nacionales, menos de 20 incluyen fotografías
de la obra en el contexto y ninguna, la presencia humana.

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– Revisión de la trayectoria historiográfica y técnica y la productividad, que constituyen


de las tendencias ideológicas relevantes su esencia material y, del otro, la dimensión
en la arquitectura occidental como base subjetiva del hombre, que con sus errores,
de apropiación e imposición de modelos imperfecciones, arbitrariedades, historia y
en la arquitectura local; cultura, lo dota de valores y significaciones.

– Identificación de la problemática local en Estas características reemplazan la inter-

la consolidación y el forjado de identida- pretación genérica de la arquitectura en su


condición material de objeto físico construi-
des;
do, utilitario y funcional, por particularidades
– Algunos antecedentes de estudios loca-
de su realidad subjetiva, con las cuales se
les de valoración contextual y de la crítica
define como hecho arquitectónico y se liga
publicada en las bienales nacionales de
al desarrollo humano.
arquitectura.
En el campo del desarrollo humano, Manfred
Max Neef concibe las necesidades como un
sistema interrelacionado y complementario
que puede subdividirse en dos categorías:
El hecho arquitectónico
las existenciales y las axiológicas. Como
como objeto histórico y
cultural necesidades existenciales, clasifica el ser,
hacer, tener y estar y como axiológicas, las
En contraposición a la racionalidad instru- necesidades de subsistencia, protección,
mental y la técnica, al cálculo económico y a afecto, entendimiento, participación, ocio,
las políticas de planificación urbana, los he- creación, identidad y libertad. El desarrollo
chos arquitectónicos continúan ligados con humano, por tanto, no se concibe para los
la vida que aún transcurre en los espacios objetos sino para los sujetos y las posibili-
tradicionales de las ciudades modernas. Son dades de suplir sus necesidades. En este
expresión simbólica de valores y memorias sentido, no son lo mismo las necesidades
que articulan diferentes dimensiones de humanas fundamentales –que son iguales
la vida cultural y social. Como campo de en todas las culturas–, que sus satisfactores,
significaciones, el hecho arquitectónico los cuales están culturalmente determinados.
es distinto de la obra de arquitectura y del Esta apreciación es importante para la com-
objeto arquitectónico, pues representa –a prensión del hecho arquitectónico, si se tiene
diferencia de los otros dos–, la unión entre lo en cuenta que este no es una necesidad sino
físico construido, que expresa lo que la obra un satisfactor existencial de la necesidad de
es, y lo interpretado de esa realidad física, estar; es decir, de habitar, pues provee la
que implica lo que significa para la gente. solución al albergue geográfico y a la per-
Sobre la base de una unidad dialéctica entre manencia espacio-temporal; pero también
subjetividad y objetividad, en el hecho arqui- es satisfactor axiológico, pues compromete
tectónico confluyen, de un lado, la ciencia, la valores de la vida social y es satisfactor de

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las necesidades de subsistencia, participa- con los cuales los hombres comunican,
ción, identidad y, en general, proporciona perpetúan y desarrollan su conocimiento
respuesta a cada una de las necesidades y sus actitudes frente a la vida” (Geertz,
axiológicas. En esta dimensión adquiere una 1995). En esta interpretación de la cultura,
carga de sentidos y significaciones que lo el hecho arquitectónico es un campo
caracterizan culturalmente, constituyéndose de manifestación de las formas simbóli-
en expresión simbólica y lugar de las identi- cas y, como hecho cultural heredado e
dades particulares y colectivas. históricamente transmitido, asume una
dimensión semiótica que, inherente a
Aldo Rossi vincula los hechos arquitectónicos
la condición humana, hace parte de la
con los hechos urbanos y en La arquitectura
red de significaciones que constituyen
de la ciudad, asume su naturaleza como
la subjetividad y el universo de la cultura.
un fenómeno complejo y multidimensional,
Cuando Geertz se refiere a la cultura
donde las palabras latinas urbis y civitas, re-
como un documento activo –que recono-
presentan una doble dimensión: física-cons-
ce como público– y como un conjunto de
truida y política-social. Para Rossi, existe una
mecanismos de control que gobiernan la
dialéctica entre los hechos arquitectónicos y
conducta, define el hecho arquitectónico
la totalidad, y fundamenta la ciencia urbana a
como un hecho cultural, condición en la
partir de la dimensión arquitectónica y artísti-
cual posee también un carácter público,
ca de la ciudad, valorando la trascendencia
pues impacta a los individuos, la comuni-
política, económica y social como variables
dad y el entorno en el que se implanta.
de lo urbano (Rossi, 1971).
– La identidad designa el carácter particu-
En estas apreciaciones sobre los hechos
lar del individuo que, idéntico a sí mismo,
arquitectónicos se ligan tres conceptos
adquiere un valor de afirmación personal
primarios: cultura, identidad y lugar, con los
y pertenencia que se construye en una
cuales es posible avanzar en su caracteri-
cultura particular. La identidad se nutre
zación:
de significados, simbolizaciones e ima-
– La cultura, como estructura que engloba ginaciones y define la especificidad de
o integra los miembros de una comuni- cada individuo en relación con la trama
dad, se comprende ligada al territorio de relaciones interpersonales, donde
físico y a los objetos sobre los cuales la historia personal se vincula con los
se manifiesta. En este sentido Clifford aspectos del ambiente, el contexto y la
Geertz propone la siguiente definición: cultura particular. Como lo afirma Renato
“La cultura denota un esquema históri- Ortiz, “la identidad es consecuencia
camente transmitido de significaciones de una estructura, de un universo que
representadas en símbolos, un sistema engloba de modo igual a los miembros
de concepciones heredadas y expresa- de una comunidad y una construcción
das en formas simbólicas, por medios simbólica que se hace en relación

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con un referente”2 (Ortiz, 1998). Como su contexto urbano, al que ha contribuido


construcción simbólica, la identidad es en diversas medidas a definir y el cual, a su
producto de la historia de los hombres y vez, contribuye permanentemente a calificar
la arquitectura es expresión material de y a determinar su significado” (Waisman,
esa carga simbólica. 1990).
– El lugar referencia el espacio físico que Más que una determinante física, el contexto
conforma el entorno habitable, las vi- es un conjunto de relaciones; es el tejido, la
vencias, los significados y la memoria. urdimbre, el hilo de la historia, las circunstan-
Como lo firma Nancy Motta, ”la identidad cias y todos los aspectos que afectan y
espacial de un ser humano o de los gru- determinan el hecho arquitectónico y sobre
pos sociales y étnicos, se fija a la trama el cual se construyen símbolos y emblemas
social, en tanto que el ser está sujeto y identitarios.
se identifica con el sitio en que habita”
Como campo de inserción del hecho arqui-
(Motta, 2006).
tectónico y como conjunto de relaciones,
El vínculo entre cultura, identidad y lugar
el contexto pone en juego interacciones
determina el concepto de contexto. Al invo-
entre sus variables fundamentales: física,
lucrarse con la dimensión subjetiva, los he-
cultural, social, política, económica, histórica,
chos arquitectónicos y sus conformaciones
ambiental y tecnológica, conformando un
urbanas apropian tendencias ideológicas,
escenario de expresión de valores.
pautas culturales y relaciones históricas.
Por lo tanto, sus interpretaciones sólo son En cuanto hecho cultural, el conocimiento

posibles ligadas al contexto en el que se cuantitativo, dimensional y objetivo del es-


implantan y no como si se tratase de hechos pacio físico construido, no es la realidad
aislados. En este sentido, es pertinente la arquitectónica fundamental o única.
definición de Juan Pablo Bonta: “la obra de La dimensión cualitativa de la arquitectura,
arquitectura o arte nunca se interpreta indivi- como realización de lo humano, implica la
dualmente sino dentro del contexto de otras coexistencia de otras dimensiones subjeti-
obras con las cuales parece relacionarse vas que, ejerciendo su efecto sobre las
(…) una arquitectura o arte no significantes formas que propone el arquitecto, impide
permanecerían ajenos al campo de la cultura que estas puedan ser neutrales. Justamen-
y por tanto dejarían de ser arquitectura o arte” te, cada quien representa y manifiesta sus
(Bonta, 1977). significaciones de una manera y desde
Asimismo, Marina Waisman afirma: “parece esas representaciones y manifestaciones,
establecida la imposibilidad de comprender los individuos dan sentido al mundo, recu-
un hecho arquitectónico separadamente de rriendo al simbolismo para llegar a un len-

2. El término referente habla de relación, vínculo e interacción con otras identidades o con otros universos donde se revelan esas
relaciones y se producen las construcciones simbólicas.

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guaje formal.3 Como lo afirman Saldarriaga hegemónico en la producción de las ar-


y Fonseca en Lenguaje y métodos en la quitecturas locales. Esta afirmación, por
arquitectura, “...el lenguaje arquitectónico es supuesto, precisa el reconocimiento de las
un sistema abierto, regulado por influencias tendencias ideológicas de la arquitectura
ambientales y culturales, poseedor de una occidental, para determinar sus influencias
parte totalizadora y de una parte expresiva, en la arquitectura local.
y dotado de componentes diversos que se
reúnen en sistemas de reglas y en modos
de empleo correspondientes”4 (Saldarriaga
y Fonseca, 1983). Trayectoria
historiográfica y
¿Cuáles son esos sistemas de reglas que se tendencias ideológicas
ponen en juego en la relación entre edificio relevantes en la
y entorno?, ¿cómo reconocerlos en contex- arquitectura occidental
tos particulares? Podría afirmarse que las
Para iniciar la reflexión historiográfica, que
constantes transformaciones urbanas y las
busca dar una mirada muy esquemática a
realidades sobre las que se ha construido la
las características esenciales que, fundamen-
arquitectura colombiana, dificultan la valora- tadas en lo ideológico, particularizan los
ción del contexto construido, como garantía diferentes períodos de la arquitectura como
de las intervenciones y su consolidación co- paradigma occidental, es necesario iden-
mo el lugar de las identidades. La diversidad, tificar las diferencias entre la historiografía
la discontinuidad y el anacronismo de los general y la producción historiográfica de la
desarrollos locales, como producto de las arquitectura.
frecuentes imposiciones dadas por la situa-
En la historiografía general, el historiador
ción de dependencia política, económica y
recurre a las fuentes y las transforma en do-
cultural, además de imposibilitar el reconoci-
cumento, para luego constituir esos docu-
miento de periodicidades históricas, dificulta
mentos y esos hechos históricos en proble-
la coherencia y la continuidad histórica de
ma.5 En esta situación, los acontecimientos
las ideas.
y hechos –que son el objeto de estudio–,
Aunque esta situación diferencia profun- han desaparecido o dejado de existir en
damente el carácter de la arquitectura lati- el tiempo, y el propósito del historiador es
noamericana de la europea, el paradigma la reconstrucción descriptiva o narrativa de
de la arquitectura occidental sigue siendo esos hechos para traerlos al presente. En la

3. En la comprensión de la arquitectura como símbolo se introducen valoraciones sociales que superan su funcionalidad práctica
relacionando aspectos relevantes para la cultura de los individuos o el grupo social.
4. Este enfoque hace explícita la composición del lenguaje arquitectónico por: a) la estructura, que define la ocupación y subdivisión
del espacio, de acuerdo con su finalidad, b) la forma, como principio que rige el límite y el contorno del espacio y c) el significado,
como representación de los valores y condiciones del contexto cultural de una edificación.
5. Marc Bloch plantea que la historia es una ciencia, aunque su objeto no pueda ser considerado un dato positivo; la define como
una investigación cuyo objeto no se centra en el pasado sino en el hombre y sus actividades situadas en el tiempo (Bloch,
1993).

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historiografía de la arquitectura la situación es La fuerza de las imágenes y su poder cohe-


diferente, pues el objeto de estudio –referido sionante y portador de significaciones,
al hecho arquitectónico–, existe en el pre- ha permitido conservar las estabilidades
sente del historiador y “aunque pertenezca culturales, manteniendo coherencias y
a otro tiempo, es en sí mismo el testimonio continuidades como garantía de la supervi-
histórico principal e imprescindible que reú- vencia humana. Las imágenes construyen
ne en sí los datos más significativos para realidades y las representaciones simbólicas
su conocimiento” (Waisman, 1990). De allí transmiten significaciones, posibilitando lo
que la labor historiográfica de la arquitectura que Geertz, en su definición de cultura, de-
busque definir las circunstancias culturales nomina como “un esquema históricamente
e históricas en las que fue materializado el transmitido de significaciones representadas
hecho arquitectónico, para que –teniendo en en símbolos”.
consideración los múltiples factores que lo
Cobran valor las imágenes como documen-
determinan–, sea posible identificar el con-
tos históricos, pero también se hace evidente
texto de la obra, sus significados y valores,
el riesgo de su explotación equivocada, caso
así como los motivos que han provocado
frecuente en la historiografía de la arquitectu-
sus transformaciones en el tiempo.6
ra. A esto se refiere Peter Burke cuando afir-
ma: “la buena noticia para los historiadores
Las imágenes y la historiografía
es que el arte puede ofrecer testimonio de
En la historiografía de la arquitectura oc-
algunos aspectos de la realidad social que
cidental puede evidenciarse la manera
los textos pasan por alto (…) la mala noticia
como la cultura de cada época ha teñido
es que el arte figurativo a menudo es menos
las formas de expresión e interpretación de
realista de lo que parece, y que, más que
la realidad, que unas veces ha privilegiado
reflejar la realidad social, la distorsiona, de
las indagaciones formales, otras veces ha
modo que los historiadores que no tengan
optado por búsquedas racionales centradas
en cuenta la diversidad de las intenciones de
en lo funcional o lo tecnológico y otras por
los pintores o fotógrafos, pueden verse indu-
la valoración del arte y la búsqueda de la
cidos a cometer graves equivocaciones (…);
belleza.
sin embargo, el proceso de distorsión consti-
En general, las preocupaciones estético- tuye un testimonio de ciertos fenómenos que
formales, funcionales y técnicas, poseen muchos historiadores están deseosos de
finalidades simbólico-comunicativas y se estudiar: de ciertas mentalidades, ideologías
valen de sistemas de representación que, e identidades” (Burke, 2005). Estas aprecia-
apropiados a sus fines, constituyen una ciones sobre las imágenes, como fuente
forma de documentación histórica. poco fiable y poco objetiva de un tiempo y

6. En La investigación histórica: teoría y método, Julio Aróstegui define la historia en su significación etimológica derivada del término
“istorie” –empleado por Heródoto–, que significa investigación, precisando su referencia a los hechos y eventos. Aunque plantea
que con el término historiografía se identifica la escritura de la historia y su relato, reconoce que ésta se ha venido aceptando con
la doble significación.

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de un espacio, son válidas para gran parte parecida, que con formas simples y una
de la historiografía actual de la arquitectura, estricta organización geométrica, representó
la cual se ha centrado fundamentalmente la abstracción del orden eterno que busca-
en la difusión de imágenes fotográficas sin ba la continuidad de la vida después de la
reflexión ni contenido teórico, sublimando muerte. La organización axial de los recintos,
las condiciones de fotogenia por encima el orden ortogonal y la abstracción formal con
de las valoraciones analíticas y críticas de prevalencia de las masas, formalizaron en
las obras. Particularmente, en el caso de las las tumbas y templos funerarios la relación
bienales de arquitectura colombiana, los entre hombre y naturaleza, simbolizando el
jurados seleccionan y premian las obras de camino hacia la eternidad como expresión
la mejor arquitectura sin conocerlas, guiados de seguridad en su identidad existencial.
por el impacto visual de la documentación
En el siglo VII a.C y con el desarrollo del
fotográfica suministrada.
pensamiento griego, el hombre imita las
Elementos significativos y tendencias leyes de la naturaleza y actuando en armonía
El poder de las imágenes en la construc- con ellas, edifica sus ciudades y construye
ción de las identidades es connatural a la su cultura. La ciudad clásica era un lugar de
civilización. En las sociedades cazadoras y encuentro y acción comunicadora, social,
recolectoras se dibujaba, como expresión política y artística, forjadora de ciudadanos e
de la magia invocadora, tótem y relato de la intermediaria entre lo colectivo y lo público, lo
memoria. Desde 2800 a.C. la arquitectura político y lo ético. Para los griegos, las ciuda-
egipcia expresó, a través de un sistema des eran centros artísticos y culturales, ejes
simbólico, el ideario de una civilización desa- de la formación comunitaria, y su arquitectura
–con la cual se quería alcanzar la
perfección– era la máxima expre-
sión de su cultura. La búsqueda
de la belleza, como atributo de los
dioses, fue un ejercicio religioso
que forjó la construcción de los
órdenes griegos, cuyas reglas
ideales garantizaban el equilibrio
compositivo. La arquitectura grie-
ga determinó el simbolismo de
los siglos posteriores y la polis,
que surge como resultado del
ordenamiento social y cultural,
alcanza el sentido constructivo de
relación y libertad que organizó la
Formas canónicas del templo griego. Siglo V a.C. democracia.

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El arte y la arquitectura
ro mana, aunque tienen
un pasado etrusco, son
fundamentalmente influen-
ciados por las imágenes
griegas. La ciudad romana
se complejiza como pro-
ducto del surgimiento de
nuevas estructuras socia-
les que, en la grandiosidad
espacial de las obras,
monumentos, puertas y
El Panteón. Apolodoro de Damasco, Roma. Siglo II.
arcos triunfales, expresan
la conquista del entorno que lleva a cabo el cedera triada: utilitas, firmitas y venustas,
imperio romano. en el siglo I, Vitruvio sienta los principios del
conocimiento arquitectónico que se han
La investigación tecnológica desarrollada
mantenido a través de los siglos y propone
por los romanos permitió realizaciones antes
la funcionalidad, la solidez y la belleza como
nunca vistas, plasmando en la arquitectura
una esencia que abarca, desde los aspec-
las significaciones propias del apogeo del
tos constructivos hasta las significaciones
imperio. En el siglo I, Vitruvio inicia la escritura
míticas.8
de la historia de la arquitectura y asienta en
sus manuscritos las bases canónicas de la La construcción en argamasa y la poten-
tradición clásica.7 cialidad que dieron los romanos a los abo-
vedados y los arcos, permitió el reemplazo
Vitruvio rechazó las prácticas constructivas
estructural de los órdenes griegos, relegando
de su época y propuso la arquitectura
su uso a una solución formalista y decora-
como teoría y como práctica, concibiendo
tiva. Las nuevas posibilidades técnicas y la
la teoría como la habilidad demostrativa de sistematización permitieron la construcción
los principios de proporción, y la práctica, de nuevas edificaciones en respuesta a la
como el empleo y trabajo manual de estos complejidad de la estructura social, la crea-
principios. ción de nuevas formas simbólicas y sistemas
Dada la gran extensión del imperio romano, espaciales más complejos.
las obras son influidas por diversos estilos La centralidad y el poderío de Roma imponen
regionales, sin embargo, sobre la impere- sistemas y trazados geométricos unificado-

7. Vitruvio es un arquitecto e ingeniero romano, único escritor antiguo de arquitectura cuyo tratado se ha conservado.
8. A partir de Vitruvio, en el siglo I, y reconfigurados con Alberti, en el Renacimiento, se establecen los componentes básicos que
generan los procesos de aproximación en la arquitectura: utilitas, firmitas y venustas. Estas premisas vitruvianas plantearon las
búsquedas metodológicas en tres aspectos fundamentales: las utilitas buscan la utilidad de los edificios, en coherencia con los
usos para los que se proyectan y el modo de vida de sus usuarios. Las investigaciones basadas en firmitas hacen indagaciones
para obtener la estabilidad, firmeza, seguridad estructural y material de los edificios, desarrollando la aplicabilidad técnica.

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res en las diversas regiones del imperio, El templo paleocristiano se despoja de


generando significaciones que se expresan expresiones estructurales complejas y
en la grandiosidad y complejidad de los costosas, y el espacio interior se dinamiza
espacios interiores. representando el recorrido longitudinal hacia
En la Edad Media los edificios expresan un el altar como el camino hacia Cristo, siendo
giro ideológico fundamental, provocado por la cruz el símbolo que configura la planta de
el Cristianismo y los nuevos significados exis- gran parte de las iglesias. Cuando en el año
tenciales. Aunque la escultura, la pintura y 330, la sede del Cristianismo es trasladada a
la arquitectura son derivadas e influidas por Bizancio, la arquitectura toma un nuevo rum-
Roma, nuevas simbologías estructuran las bo sobre las bases del romano anterior.
formas arquitectónicas del misticismo oc- Entre los siglos XI y mediados del XII, la arqui-
cidental, surgiendo una reinterpretación del tectura románica, basada en las influencias
hecho arquitectónico como objeto cultural y bizantinas “a la manera de los romanos” –de
lugar de identidad cristiana. donde toma su nombre–, surge como pro-
La arquitectura paleocristiana desarrolló un ducto del fervor religioso y la expansión del
misticismo que empobreció la apariencia Cristianismo. El estilo de las pinturas murales
formal de los templos, pues sobre la base continuó en gran medida las tradiciones del
de la espiritualidad cristiana, crítica de la arte paleocristiano y bizantino, y la escultura
materialidad pagana, las obras rechazan la en piedra hace monumental la decoración de
expresión desbordante del paganismo y el los templos. Con el nombre de monasterios
poder romano.9 se conforman nuevas comunidades de re-
ligiosos afines que construyen sus edificios
en toda la Europa cristiana, constituyéndose,
junto con las iglesias, en las máximas expre-
siones arquitectónicas de la época.

La arquitectura románica representa nuevas


aspiraciones existenciales que se expresan

Románico. Iglesia San Martín de Frómista. Palencia,


Paleocristiano. Iglesia Santa Sabina, Roma. Siglo V España. Siglo XII.

9. La adecuación bella y estética de la obra a los requerimientos del clima, lugar, paisajes, recursos y circunstancias que lo determinan,
se fundamenta en la venustas, sobre teorías críticas y de la sensibilidad.

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Románico español. Siglo XII.

en la búsqueda de verticalidad y la simbo- En los siglos XII al XIV, el Gótico, que en el


logía de la torre como fortaleza. Aunque las arte se expresa en la pintura, la escultura,
Cruzadas y las peregrinaciones facilitaron la la pintura mural y los vitrales, alcanza su
difusión de las formas románicas, el estilo máxima expresión en la arquitectura. Nace
evoluciona con grandes diferencias en los di- como evolución del románico y es soporta-
versos países (Francia, Inglaterra, Alemania, do en nuevos avances tecnológicos que
España, Italia); las variaciones locales incor- permiten que la estructura se torne ligera y
poran múltiples experimentaciones plásticas transparente, llevando a su máxima expre-
y estructurales que dejan ver bóvedas de sión el simbolismo religioso. Las catedrales,
crucería, nervios y contrafuertes, articulados símbolo identitario de las ciudades, tardaban
a una mampostería pesada, construida en más de un siglo en concluir y competían
ladrillo o barro a la vista y con la cual se cierra por obtener la máxima altura y belleza. En la
el edificio. búsqueda simbólica de la luz, fundamental
para el espacio cristiano, se perfecciona el
El románico articula y da unidad a los ele-
sistema de esqueleto, experimentado en el
mentos, produciendo una fusión del edificio
románico, y se separa la estructura del cerra-
que simboliza la unión entre lo divino y lo
miento, incorporando los vitrales para permitir
humano. La verticalidad de la torre repre-
senta la trascendencia existencial, mientras
que la robustez de las estructuras en piedra
y los cerramientos que constituyen la forta-
leza románica, expresan la necesidad de
protección. El contraste entre la estructura
maciza y cerrada y la verticalidad de las
torres, imprime a los edificios un carácter de
fortaleza que es reforzado por la implantación
en lugares altos, exaltando los campanarios
y las torres. Gótico. Iglesia Notre Dame. París. Siglos XI - XIII

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Valoración histórica del contexto construido...

una nueva relación Los intelectuales del Renacimiento retoman


interior-exterior. En los manuscritos de Vitruvio y hacia finales del
pos de la verticali- siglo XV, Alberti escribe un nuevo tratado don-
dad trascendental de expone la doctrina de la armonía matemá-
se desarrollan el tica y la proporción en arquitectura. En Diez
arco apuntado, libros de arquitectura, reafirma la teoría com-
los arbotantes y positiva y fundamenta –sobre los principios
Sistema de esqueleto góti- contrafuertes, y se y métodos griegos y romanos–, una nueva
co. Bóveda de crucería.
multiplican las bó- teoría para su época.11 La vuelta al pasado,
vedas de crucería como módulo universal que se efectúa en el Renacimiento y que con
que logra la magnificencia de las catedrales. los constructores cristianos había negado los
Los edificios se liberan del rigor racional y la cánones antiguos, se nutre de la historia y
pesadez del románico, y el avance estruc- de los referentes, pero no para reproducirlos
tural posibilita una nueva espontaneidad for- técnica y estilísticamente, sino para recrear-
mal, cuya expresión simbólica se expande los, estudiando los elementos del lenguaje,
por Europa, homogeneizando con un nuevo las relaciones espaciales y la aplicación
lenguaje el repertorio y las tradiciones cons- del método compositivo a los problemas,
tructivas locales. las significaciones y las búsquedas de su
época. “Los artistas del quattrocento buscan
En el Renacimiento, término que referencia la
en los monumentos antiguos los principios
revitalización de los cánones y de las formas
de un método perdido, no un repertorio de
griegas y romanas, se vuelve al Humanismo,
modelos constructivos y distributivos que ya
que durante la Edad Media había negado las
no les interesan” (Benévolo, 1992).
representaciones naturalistas y humanas,
restringiéndolas a un austero contenido re- Con la invención de la perspectiva se pro-
ligioso. 10
duce una revolución espacial y la imagen
renacentista se transforma dramáticamente.
Las figuras obtienen en la representación
bidimensional la ilusión de su prolon-
gación en el espacio, surgiendo
un nuevo naturalismo y expre-
sividad antes nunca vistos. Los
razonamientos matemáticos de
la época y su apropiación con
el manejo perspectívico de la
imagen, retornan la arquitectura
Renacimiento. Santa María de Fiore (duomo). Filippo brunelleschi. Cúpula
construida en 1420. a la escala humana, aboliendo

10 El Renacimiento comenzó hacia 1420, en Florencia, iniciado por un grupo de artistas (Brunelleschi, Donatello, Ucello).
11. H. W. Kruft. Historia de la teoría de la arquitectura. 1: desde la antigüedad hasta el siglo XVIII. Madrid: Alianza Editorial, 1990.

Revista científica Guillermo de Ockham. Vol. 4, No. 2. Julio-Diciembre de 2006 • ISSN: 1794-192X 95
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sitiva y, sobre una solidez cor-


pórea y una plástica maciza,
se universaliza un sistema de
cánones que proveen una se-
guridad estética, que privilegia
la forma ocultando el material
y la estructura, para dar origen
al ornamento y la decoración.
La genialidad creativa y la
libertad en la aplicación de los
Renacimiento. Plaza de la República. Roma.
cánones, genera tendencias y
la inconmensurabilidad gótica y su verticalis- búsquedas estilísticas que particularizan las
mo existencial. Se pasa del éxtasis religioso obras y las identifican con el sello de artistas
del gótico, a un razonamiento matemático y como Brunelleschi, Alberti o Bramante.12
humano que sistematizó métrica y canóni- Como resultado de la aplicación de las reglas
camente el gusto individual de los artistas de y tratados renacentistas, en el siglo XVI surge
la época, fusionando la generalización ca- el Manierismo, donde la maniera significaba
nónica de los órdenes arquitectónicos, con un procedimiento artístico para trabajar sobre
la individualidad creativa de los arquitectos, los modelos de los maestros, imitándolos
para producir obras que se caracterizan por para alcanzar su perfección.
su perfección y belleza.
La búsqueda de la maniera se convierte en
A diferencia del pasado arquitectónico me- preceptiva, restringe las posibilidades de
dieval –que a través de las tradiciones había innovación y sobre el ideal clásico, el Manie-
transmitido el rigor constructivo, los simbolis- rismo construye un formulario de tratados y
mos y las significaciones, hasta homogenizar fórmulas para la aplicación de los cánones,
un lenguaje colectivo–, en el Renacimiento
los hechos arquitectónicos incorporan
las singularidades y los gustos de
sus proyectistas.

Dado que el soporte científico


de la perspectiva permitía dilu-
cidar las formas arquitectónicas
previamente a su construcción,
Manierismo. Villa Capa (Villa Rotonda). 1566 - 1569. Andrea Palladio.
se explota la búsqueda compo- Vicenza, Italia.

12. Alberti impuso la pureza clásica de los órdenes; Brunelleschi impulsó las proporciones matemáticas y la austeridad formal y
Bramante logró la exaltación del espíritu clásico y los ideales de la cristiandad. Posteriormente, Miguel Ángel incursiona en las
formas aplicando la expresividad propia de sus obras artísticas, variando los cánones clásicos para introducir la monumentalidad
que produce el orden gigante y una nueva expresividad que impulsó el Barroco.

96 Universidad de San Buenaventura, Cali-Colombia


Valoración histórica del contexto construido...

con los cuales garantizar la belleza composi-


tiva de las obras (Serlio: 1540, Vignola:1562,
Palladio 1570). El tratado de Palladio, como
guía metódica y compositiva, se constituye
en un canon de los ideales de la arquitectura
occidental.

Cultivando hasta el exceso los estilos de los


maestros y en especial la nueva expresividad
de Miguel Ángel y Rafael, el Manierismo
acentúa los efectos desarrollando composi-
ciones de mayor movimiento, complejidad
y contraste entre los elementos. Ante la
carencia de expresiones ideológicas y de
nuevas teorías para justificar las búsque-
das existenciales representadas en formas
arquitectónicas, las composiciones ponen
Barroco. Iglesia San Carlos de las Cuatros Fuentes.
a prueba las reglas clásicas hasta llegar a 1635 - 1639. Francesco Borromini. Roma

transgredirlas, alcanzando los extremos que


manos, las miradas y la tensión del sufrimien-
anticiparon el Barroco.
to de los cuerpos. La imagen y la expresión
En los siglos XVII y XVIII el proyecto Barroco barroca se magnifican en el detalle decora-
se dinamiza en la búsqueda de lo comple- tivo de la arquitectura, donde el sentido del
jo, con una expresividad desconocida an- movimiento, la energía y la tensión, adoptan
teriormente que, unida a un claro sentido contrastes entre cóncavos y convexos para
escenográfico, hace prevalecer la plasticidad generar dinamismo y expresividad. Como
y los elementos decorativos frente a los efecto de estas búsquedas innovadoras, la
constructivos. Dado que la religión Católica heterogeneidad formal provoca el abandono
se convirtió en mecenas y se buscaba
combatir el Protestantismo, se privilegia
la propagación de la fe y, con ello,
el dramatismo naturalista, la ex-
presividad emocional y el es-
piritualismo. El arte propone
imágenes capaces de con-
mover, trabajando elementos
visuales exaltados por el
claroscuro de los tonos, para
lograr el dramatismo del dolor
expresado en los gestos hu- Barroco Español. Calle de Alcalá - Caballero de Gracia. Madrid.

Revista científica Guillermo de Ockham. Vol. 4, No. 2. Julio-Diciembre de 2006 • ISSN: 1794-192X 97
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de los cánones clásicos y la seguridad esté- En el Iluminismo (1750-1800) la arquitectura


tica que ellos proporcionaban, gestándose adquiere un carácter racional y transmisible
la producción de nuevos juicios estéticos y con Ledoux, Quatremère y Durand. Ledoux
un nuevo concepto de belleza. y Boullée forman parte del grupo de los
llamados arquitectos “visionarios” que se
Con la Academia Real de Arquitectura, fun-
opusieron al rígido neoclasicismo académi-
dada en 1671 –que como producto de la
co. Ledoux publica, en 1804, su obra
edad de la razón, tiene como objetivo “impul-
L´architecture considérée sous le rapport
sar un conocimiento más exacto y una teoría
de l´art, des mœurs et de la législation (La
más correcta”–, se ubica a la arquitectura en
arquitectura considerada desde el punto
el campo de la ciencia. Con el movimiento de vista del arte, las costumbres y la legis-
ilustrado, que inicia en 1690 la primera fase lación) y Boullée divulga en su manuscrito
de la modernidad, la ciencia se vuelve un Arquitectura. Ensayo sobre el arte, el valor
arma contra la Iglesia y la religión, abriéndose esencialmente artístico de la arquitectura,
el camino hacia la búsqueda objetiva que, considerándola “inspiración creativa”, en
bajo los Principia de Newton, consolida la contraposición al “procedimiento mecánico”
imagen matemática y mecánica del univer- con el cual denomina la construcción. Estos
so. La ciencia –como movimiento vital de la arquitectos revolucionarios incursionan en
Ilustración– interviene en una transformación las búsquedas formales y las significaciones
fundamental de la historia humana: la meca- simbólicas de los elementos, siendo la obra
nización del trabajo que, bajo el poder y la dibujada de Boullée, expresión de su interés
admiración por las máquinas, ocultaba un in- investigativo por estudiar la configuración
contenible afán de lucro. El hombre comien- formal y los efectos del claroscuro, la cual
za su carrera de dominio de la naturaleza, emprende a través de proyectos de edificios
separándose de ella y separando también fantásticos e irrealizables a causa de sus
ciencia y cotidianidad, ciudad y vida urbana. enormes dimensiones.
En esta búsqueda racionalista, Descartes Entre 1795 y 1830 Jacques Nicolás Du-
había llegado a declarar, en 1637, que las rand, el más influyente de los discípulos de
viejas plazas medievales eran antiestéticas, Boullée, publica Compendio de lecciones de
admirando la pureza geométrica de los po- arquitectura, donde reafirma la composición
blados holandeses: “Descartes prefería las arquitectónica como un saber esencial y un
ciudades construidas por un solo arquitecto. método racional para entender la arquitectura
Sin percatarse de las implicaciones de su y manipular los elementos, los materiales, las
mensaje sobre el individualismo, el comercio formas y proporciones. El método se basaba
y las ciencias aplicadas, tanto Bacon como en tres aspectos básicos: la decoración,
Descartes ayudaron a vincular la ciencia con la distribución y la construcción, prevale-
un sistema mercantil e industrial al modo ciendo los principios de funcionalidad y de
capitalista” (Apleby y otras, 1994). utilidad sobre cualquier otra consideración

98 Universidad de San Buenaventura, Cali-Colombia


Valoración histórica del contexto construido...

de estilo o de estética. La
propuesta publicada de
Durand influye en el siglo
XIX sobre la escuela de
Bellas Artes de Francia,
iniciada en París, en 1819,
y que perdura hasta 1968,
siendo reconocida como
centro mundial para el
estudio de la arquitectura.
Sobre el método lógico
que estructura la Escuela
de Bellas Artes, se sientan
las bases del cientificismo
académico como paradig-
ma del pensamiento occi- Historicismo. Revival neogótico. Parlamento inglés. 1840 - 1865. Charles Barry,
Augustus Pugin. Londres.
dental moderno.

En el siglo XIX, ya en la cúspide de la razón, géneas, son rechazados con el Art Nouveau
se generaliza una manualística que introduce (1893-1905), que sobre los postulados del
tipologías y técnicas de construcción. En Arts & Crafts, propone formas complejas de
este marco normativo, la composición se líneas curvas y ondulantes. Los “latigazos”
considera sinónimo de creación y orden, y decorativos y las formas ondulantes del Art
los conceptos que el arquitecto elabora le Nouveau, cierran el siglo centrándose en
demandan formas sensibles y razonables. la tecnología y la producción industrial del
En el período romántico (1795-1840) se de- objeto arquitectónico.
sarrolla el eclecticismo, donde el arquitecto Hacia finales del siglo XIX surge en Estados
selecciona el estilo, de acuerdo con las sig- Unidos la denominada Escuela de Chicago,
nificaciones que quería imprimir al edificio, cuyos arquitectos inician la búsqueda racio-
trabajando con los modelos de la historia – nal que entroniza el funcionalismo y la con-
neoclásicos, neorrenacimientos, neogóticos, cepción donde “la forma sigue a la función”,
neobarrocos–, y lo que ellos significaron. 13
acuñada por Sullivan.14 Influenciado por el
Estos lenguajes estilísticos del historicismo racionalismo de la Escuela de Chicago, Adolf
ecléctico que buscan capturar diferentes Loos publica su conocido ensayo Ornamen-
bellezas produciendo asociaciones hetero- to y delito, en el cual reacciona violentamente

13. Si se trataba de un edificio de justicia, el estilo romano; para la administración, el griego, etc.
14. Arquitecto, líder de la Escuela de Chicago, conjunto de obras que conforman el centro administrativo de esta ciudad –que en
la época se constituye como el mayor centro de intercambio de Estados Unidos–, donde el alto costo de la tierra determina el
nacimiento de los rascacielos. En los edificios que construye la Escuela de Chicago los valores arquitectónicos y compositivos
se subordinan al nuevo concepto de competencia, donde el sistema liberal se aplica a la construcción.

Revista científica Guillermo de Ockham. Vol. 4, No. 2. Julio-Diciembre de 2006 • ISSN: 1794-192X 99
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cánones clásicos habían garantizado por


siglos. La belleza, cuyo juicio se relativiza
como efecto de las búsquedas modernas,
se estereotipa comercialmente en razón al
mundo del consumo y la nueva razón instru-
mental busca geometrías puras y eficientes,
demandando métodos racionales y eficaces
para maximizar las ganancias de las obras.

En 1919 se funda La Bauhaus, en Weimar,


Alemania, como escuela de arquitectura que
pretendía combinar la Academia de Bellas
Escuela de Chicago. Almacenes Causon Pirie Scott. Artes y la Escuela de Artes y Oficios. Gropius
1899 - 1904. Chicago. Luis Sullivan.
concibe el edificio como la máxima expresión
contra el Art Nouveau y, en general, contra la de toda actividad creadora y se defienden
superficialidad de las tendencias historicis- los principios vanguardistas que relacionan
tas, influyendo notablemente sobre la nueva el arte, la artesanía y la arquitectura con la
arquitectura del siglo XX: “El hombre de industria. Estos conceptos influyeron en la
nuestro tiempo que, a causa de un impulso práctica de los ideales de la modernidad en
interior, pintarrajea las paredes con símbolos el mundo europeo de los años 20, donde se
eróticos, es un delincuente o un degenera- gestaron movimientos como el holandés De
do” (…) “El hombre moderno reconocerá Stijl y el Constructivismo ruso, que proponían
de inmediato en los ornamentos modernos, nuevas y radicales ideas acerca del mundo
lo torturado, lo penoso y lo enfermizo de los de lo visual y de lo artístico.
mismos” (Loos, 1908).
Los nuevos enfoques de La Bauhaus (1919),
Al inicio del siglo XX y bajo el alero de la los vchutemas soviéticos (1920) y los grupos
modernización, la producción industrial de vanguardia (neoplasticismo, futurismo,
desalienta el expresionismo formal de los constructivismo ruso, suprematismo y pu-
edificios y se generaliza la individualidad
y la desestimación de las connotaciones
ideológicas del clasicismo. La máquina, y lo
que ello significaba, se asimila a la belleza
y la tecnología es la expresión de un nuevo
paradigma basado en la objetividad y la
racionalidad. La ruptura con lo clásico y la
redefinición moderna de la belleza provocan
el abandono de la historia, de la búsqueda
en los estilos anteriores y su consecuente Vanguardia moderna. Racionalismo. Edificio de La
Bauhaus. 1923 - 1925. Walter Grupios. Dessau, Ale-
soporte en la seguridad estética que los mania.

100 Universidad de San Buenaventura, Cali-Colombia


Valoración histórica del contexto construido...

las matemáticas, la técnica, etc., nos llevan


hacia una nueva unidad plástica".16

El concepto modernidad se vincula con el


estilo de vida industrial y urbano, y el Mo-
dernismo –movimiento surgido en las artes
y la arquitectura–, intenta capturar la esencia
de este nuevo estilo de vida (Apleby y otras,
A. B.
A. Vanguardia moderna. Neoplasticismo. Café de Unie. 1994). Los maestros de la arquitectura del
1925. J.J.P. OUD. Rotterdam, Holanda. movimiento moderno, Gropius, Mies Van
B. Vanguardia rusa. Constructivismo. Monumento a la
Tercera Internacional (proyecto). 1919. Vladimir Tattin. Der Rohe, Kandinsky y Le Corbusier, entre
San Petersburgo (Petrogrado). otros, se encuentran conceptualmente en
principios que unifican el arte y la técnica. Se
rismo), rechazan el academicismo de la
concibe una nueva ciudad de máquinas para
Escuela de Bellas Artes –cuya lógica se ba-
habitar,17 en consonancia con la influencia
saba en la objetividad del conocimiento y en
conceptual de los avances industriales que
el dominio instrumental de la arquitectura– y
incorporan los automóviles, los grandes trans-
dan paso a la arquitectura moderna, trans-
atlánticos y los modernos aeroplanos. Los
formando los paradigmas asociados con la
nuevos materiales: hierro, vidrio, concreto
ciencia. Se refuerza lo artístico y lo creativo,
armado, permiten el desarrollo de modelos
proponiendo una abstracción progresiva
y prototipos que modifican radicalmente
de las formas y las geometrías, eliminando
la conformación urbana y se interrumpe la
los elementos accesorios. Los movimientos
tradición clásica que había estructurado las
vanguardistas de comienzos del siglo XX afir-
ciudades.
maban: "El triunfo del presente sobre las cos-
tumbres arraigadas presupone la negación La moderna arquitectura del prototipo y la
del pasado, la purificación de la conciencia. nueva concepción individualista del hombre,
Todo lo que aún pertenece al pasado, es hace tábula rasa del pasado y del lugar, de la
ecléctico: la carreta, el arado primitivo, el vida comunitaria y del encuentro ciudadano,
caballo, el trabajo doméstico, la pintura de que se había sido consolidado con el clásico
paisajes, las estatuas de la libertad, los arcos anterior.
de triunfo y, sobre todo, la arquitectura al El desbocado entusiasmo por lo nuevo
estilo antiguo". 15
"Exigimos la construcción conlleva al desprecio del pasado y sus ex-
de nuestro entorno según leyes derivadas presiones arquitectónicas, las cuales son
de un principio previamente establecido. destruidas y alteradas desde una nueva y
Estas leyes, ligadas a las de la economía, avasallante concepción individualista. Los

15. MALEVICH, Casimir. Manifiesto suprematista Unovis. 1924. Textos de Arquitectura de la modernidad. Pere Hereu, Joseph M.
Montaner, Jordi Oliveras. Editorial Nerea. 1994.
16. VAN DOESBURG, Theo y VAN ESTEREN, Cornelius. Hacia una construcción colectiva. 1923 Textos de Arquitectura de la modernidad.
Pere Hereu, Joseph M. Montaner, Jordi Oliveras. Editorial Nerea. 1994.
17. En la obra de Le Corbusier.

Revista científica Guillermo de Ockham. Vol. 4, No. 2. Julio-Diciembre de 2006 • ISSN: 1794-192X 101
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desarrollándose nuevas teorías


en la interpretación de los hechos
arquitectónicos y urbanos.

Desde 1960 los nuevos movi-


mientos cuestionan y luchan por
la transformación social y política,

Racionalismo - Purismo. Villa Savoye. Le Corbusier. Poisy. Francia.


en contra del modelo heroico de
la ciencia y la modernidad, y se
códigos modernos rechazan las significacio- reivindica lo popular principalmente a través
nes y precedentes de los estilos “antiguos”, del Pop Art. Los arquitectos rechazan las
considerando como una falta de creatividad búsquedas racionales del Funcionalismo
sus referencias históricas, en una situación y la concepción donde “la forma sigue a la
donde la novedad se convierte en una nece- función”, promovida por Sullivan, y surge el
sidad. Se inicia la destrucción de la arquitec- Postmodernismo, en contra de los postula-
tura y de la ciudad como objetos culturales dos modernos, los movimientos modernistas
consolidados históricamente, proliferando y el funcionalismo pragmático. El rechazo a la
las imágenes sin identidad, repetibles y eficiencia racional produce el giro hacia una
adquiribles a través de fórmulas genéricas, concepción de la arquitectura y la ciudad
producto del poder político y económico. como prácticas colectivas y dialécticas,
Las condiciones modernas generan des- donde se valora la historia y el lugar, las
conciertos, cambios de vida, nuevas nece- ciudadanías diversas y la multiplicidad cul-
sidades y conceptos liberales de autonomía tural. En contraposición al lema moderno,
que chocan con las costumbres arraigadas y proclamado por Mies van der Rohe: “menos
producen un nuevo concepto de desarrollo
y progreso. Pero hacia la segunda mitad del
siglo XX, a causa del desencanto y el senti-
miento generalizado de fracaso y pesimismo
frente a una modernidad que, incumpliendo
sus promesas, demostró falta de garantías
en el mejoramiento del hábitat y de la calidad
de vida, se empieza a cuestionar la objetivi-
dad de la ciencia y de los métodos científicos
aplicados a la arquitectura. La historiografía
se constituye en dominio de la investigación
y los historiadores se comprometen crítica-
mente. Surgen requerimientos acerca del
papel social del arquitecto y su participación
Postmodernismo. Edificio AT&T. 1984. Philip Johnson.
en la transformación del medio ambiente, New York.

102 Universidad de San Buenaventura, Cali-Colombia


Valoración histórica del contexto construido...

es más”, que buscaba la abstracción y el la naturaleza de los hechos urbanos, su


sintetismo de las formas, Venturi plantea dimensión cualitativa y su semejanza con
como desafío: “menos es un aburrimiento”, las obras de arte.
reivindicando el enriquecimiento de las for- El movimiento postmoderno, surgido en el
mas y las imágenes. En búsqueda de ele- campo de la arquitectura en los años 70, se
mentos históricos y culturales, la arquitectura generaliza en casi todas las manifestaciones
adquiere un carácter ecléctico de múltiples culturales, las artes y las ciencias sociales,
estilos, donde se reflejan la pluralidad y las donde se cuestiona la fragmentación de la
referencias culturales dispares. identidad personal; en el debate de la noción
La nueva producción historiográfica se ve de individualidad –que entronó la moderni-
enriquecida con el trabajo de importantes dad liberal– el Postmodernismo se vuelve
historiadores: Argan, Zevi, Tafuri, Pevsner, hacia el reconocimiento de la identidad
Kaufmann, Giedion, Banham, Hitchcock, cultural y la diversidad.18
Collins, Framptom. Se generaron fuertes La valoración del genus loci o genio del lugar,
movimientos en la arquitectura, que vieron es un concepto postmoderno que asocia la
la necesidad de recuperar para lo urbano obra de arquitectura con el contexto urba-
las significaciones del lugar, diluidas en la no, físico e histórico en el que se inscribe.
modernidad, destacándose la postura de De allí que la arquitectura posmodernista,
Robert Venturi y su texto más conocido: contraviniendo los postulados modernos
Complejidad y contradicción en Arquitectura, de la obra aislada, regresa a la búsqueda
donde señala la capacidad de la arquitectura formal e histórica y a la noción de lugar y
para producir significaciones contradicto- contexto. Sin embargo, amparado por el
rias y múltiples, integradas en una unidad triunfo neoliberal del poder económico, el
arquitectónica relevante para la cultura y el postmodernismo generalizó una explosión
lugar. Aldo Rossi publica en 1966 La arqui- de búsquedas formales, como medio para
tectura de la ciudad, proponiendo un sólido obtener las imágenes que este poder recla-
planteamiento teórico basado en la historia, ma en la sistematización de los significados.
las tipologías formales y el principio de tipo Contra la austeridad formal del modernismo y
como investigación urbana, donde vincula bajo la presión de un mercado de consumo,
estrechamente el hecho arquitectónico y la proliferan las indagaciones escenográficas
ciudad, la cual analiza a partir de su arqui- que conjugan elementos de la cultura, la
tectura. Rossi propone la razón dialéctica historia y el lugar, para construir lo que se ha
como soporte de la metodología; no habla denominado como el kish postmoderno, que
de conocimiento sino de lectura de la ciu- exalta referencias y motivos decorativos de
dad y esta referencia la hace asumiendo los estilos históricos.

18. Focault proclama la muerte del sujeto y la necesidad de desaparición de la noción de individuo. En la filosofía posmodernista
sus más importantes representantes son los franceses Michel Foucault y Jacques Derrida. También en la filosofía se destaca
Jean Francois Lyotard, en psicoanálisis Jacques Lacan y en la crítica literaria Roland Barthes.

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Con la preocupación posImoderna del ge- donde la situación de dependencia política


nus loci, a partir de los años 90 y asociado y cultural produjo la imposición anacrónica
con los procesos de globalización, se ge- de los estilos, sin un trasfondo ideológico
neraliza el término no-lugar, que proviene del para justificarlos. Como lo afirma Saldarria-
antropólogo francés Marc Augé, quien en su ga en Arquitectura fin de siglo, en el gremio
obra: Los no lugares. Espacios del anonima- profesional de la arquitectura, amparado
to. Una antropología de la sobremodernidad, por el triunfo del dinero y bajo las banderas
desarrolla una reflexión sobre la identidad del del Postmodernismo, se ha establecido un
individuo en función de su relación con los festival de gestos, formas y maquillajes,
lugares cotidianos. Augé define “el lugar” ingredientes necesarios para que evidencie
como un espacio antropológico y relacional su poder. De esta celebración se ha excluido
donde se pueden leer la identidad y la his- la responsabilidad social de la arquitectura
toria, y el “no-lugar” como el espacio donde y la arquitectura se ha puesto al servicio del
esta lectura no es posible, pues se caracteri- poder (Saldarriaga, 1994).
za por ser anónimo, neutro, autónomo de las Esta mirada panorámica sobre los diversos
inmediaciones contextuales y de la historia. 19
períodos de la arquitectura occidental, per-
Estos no-lugares –que han proliferado funda- miten reconocer los aspectos ideológicos
dos en una supuesta neutralidad simbólica–, específicos que produjeron en Europa una
contravienen el concepto postmoderno de voluntad de cambio permanente. Las trans-
lugar, contexto e identidad, y se presentan formaciones, provocadas por las motivacio-
como formas homogeneizadoras de una nes ideológicas de cada época, presentan
identidad global, multiplicable, que anula un proceso continuo y concatenado, donde
las significaciones y la historia, produciendo cada período se sustenta en los anteriores
arquitecturas de catálogo, repetibles e im- para desarrollar nuevas soluciones. Contra-
plantables en cualquier lugar. rio a esta situación, y como producto de
En la confrontación de disensos entre pasa- rupturas e imposiciones endémicas, en
do y presente, clasicismo, modernidad y Latinoamérica no ha podido construirse la

postmodernidad, las propuestas actuales continuidad que consolidó la arquitectura

son derivaciones surgidas de los diversos occidental. De allí que las nuevas propuestas

momentos e ideologías, coexistiendo una y las búsquedas investigativas reclamen una

pluralidad de orientaciones que imposibi- mirada a los desarrollos propios, para vincu-

litan las periodizaciones basadas en lo lar coherentemente lo global y lo local.

estilístico. La indefinición que caracteriza la En esta dirección, es necesario reconocer la


arquitectura contemporánea occidental es problemática que ha gestado la realidad co-
maximizada en los países latinoamericanos, lombiana y las posibilidades que ofrece una

19. Para Augé entre los “no lugares” paradigmáticos se cuentan las autopistas, los aeropuertos, las grandes cadenas hoteleras, los
parques de recreo, los supermercados, listado que podría complementarse en nuestro medio con todas aquellas obras que
importan y copian lenguajes formales sin incorporarles un tamiz cultural.

104 Universidad de San Buenaventura, Cali-Colombia


Valoración histórica del contexto construido...

valoración histórica del contexto construido, de Enciso funda, en 1510, San Sebastián de
para la consolidación de una arquitectura Urabá, que fue prontamente evacuada y re-
con identidad. fundada en Santa María la Antigua del Darién,
también posteriormente abandonada.

Los requerimientos de puertos de comuni-


cación con España propiciaron la fundación
La problemática local de Santa Marta, Cartagena y Riohacha, y la
en la consolidación y el necesidad de resolver el transporte por el río
forjado de identidades
Magdalena y el Cauca, produce la fundación
El modelo actual de la ciudad colombiana de Mompox, Tenerife, Tamalameque, Honda
es producto de una relación histórica con- y Ocaña.
flictiva, moldeada por discontinuidades en la La estructura de la ocupación española,
ocupación territorial, intereses económicos y basada en la explotación de los recursos y
procesos de desarrollo que, al igual que en la necesidad auspiciada de fundar ciudades
los aspectos físicos de lo urbano, configuran a cambio de prebendas y títulos, hace que
culturalmente una colcha de retazos tejida a entre 1525 y 1550 prolifere la fundación de
lo largo de cuatro siglos y medio de existen- ciudades incipientes y precarias que, como
cia urbana. La conformación de la ciudad efecto de las imposiciones españolas,
cultural no ha sido armónica; al contrario, implantan un trazado de damero en torno
ha sido escenario de luchas perennes por al espacio central de la plaza.20 La nueva
la construcción y apropiación de territorios y geometría concibe una “ciudad ideal” que
espacios materiales y simbólicos, que a partir sublima la pureza formal y hace tábula rasa
de la conquista española, se han producido de lo geográfico y lo cultural, donde el cre-
en extremas condiciones de desigualdad cimiento de los centros urbanos se produce
entre sus actores. por la adición de las manzanas como la
Cuando los conquistadores llegaron al te- célula básica que conforma la retícula del
rritorio colombiano, convencidos –desde trazado ortogonal. Las ciudades son conce-
su posición dominante– de que llegaban bidas como “implantaciones de Europa,
a un vacío cultural al que despreciaron por independientes del lugar donde se localiza-
bárbaro, iniciaron la invasión, depredación, ban, con las dimensiones deseadas por los
arrasamiento, saqueo y dominio de las cos- pobladores provenientes de un continente
tas del Golfo de Urabá para, posteriormente, saturado y sin espacio, y marcadas por el
continuar con la conquista territorial del carácter de hecho artificial, acto de cultura
interior. En la tierra de los Embera, Catíos y de una civilización, frente a la barbarie” (Sala-
Chamíes, de los Tule y los Zenúes, Diego zar, 1997).

20. El trazado urbano de damero posee una geometría que conforma calles rectas, manzanas cuadradas –con una longitud promedio
de 80 mts. de lado y conformadas entre cuatro y seis solares– y la plaza como centro de poder, sobre la cual se localizaban la
iglesia, el cabildo y las casas de los encomenderos.

Revista científica Guillermo de Ockham. Vol. 4, No. 2. Julio-Diciembre de 2006 • ISSN: 1794-192X 105
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El ímpetu poblador y la política de agrupación Ortiz, Nunca crió Dios gente más cocida en
de los indígenas en poblaciones urbanas vicios y bestialidades” (Echeverry, 2006).22
como centros de tributación, catequesis En el mismo sentido del sometimiento indí-
y pacificación, facilitan el aculturamiento y gena, la reconquista católica de los grupos
el control, generando el traslado, la unión afrocolombianos de la región del Pacífico
de poblaciones y el rediseño de espacios sur, buscaba “absolver, condenar y corregir
urbanos, símbolos y ornatos. Los nuevos las malas costumbres”, instaurando un
diseños urbanísticos consolidan los oscuros sistema de terror que debilitó sus formas
antecedentes de una sociedad desarraigada organizativas y produjo fragmentaciones
y disciplinada en las políticas coloniales, y rupturas tanto en sus asentamientos y
orquestando la ruptura de simbolismos y reordenamientos territoriales como en sus
formas de vida, así como una nueva clasifi- formas organizativas y culturales. “La recon-
cación semiótica de los espacios, recorridos quista significó un ejercicio de coerción
y permanencias. Las nuevas condiciones sobre las prácticas cotidianas de la cultura
habitacionales y las clasificaciones étnicas, popular negra y, avanzado el tiempo, implicó
inventaron, más adelante, las categorías de el reordenamiento territorial en una lógica
mestizaje y su consecuente segregación integracionista que concentró la población
espacial y urbana. en las desembocaduras de los ríos al mar
Sobre un pasado de expropiaciones, pérdi- y en las cabeceras municipales” (Arboleda,
das territoriales comunitarias, implantaciones 2002).
y rupturas, donde los vestigios urbanos de El proceso de colonización fue una empresa
las tribus indígenas fueron borrados por los privada que reprodujo el esquema jerárquico
conquistadores como símbolos de herejías y de la época, estratificado en una escala ra-
demonismo, se consolida la ciudad colonial cial que era trasladada a la fundación de las
y la ciudadanía colombiana. 21
El violento ciudades. Las poblaciones, violentamente
sometimiento e integración del indígena a transformadas, segmentadas e insertas en
la producción colonial, altera sus represen- formas particulares de lo urbano, generan
taciones identitarias, siendo considerado actitudes, sentimientos, discursos, rituales
en una condición de “bárbaro e infiel” que de la cotidianidad y la vida doméstica y
lo identifica como enemigo de la civilización social, donde el terrorismo de la exclusión
y del progreso. Víctimas de la satanización rediseña escenarios y gesta nuevas cultu-
de sus costumbres, los aborígenes se ralidades, diversidades e identidades. Estas
catalogan como “antropófagos sin justicia, segmentaciones producen dificultades para
desnudos sin vergüenza, asnos, abobados, la cohesión política, étnica y cultural de los
alocados e insensatos. Según Fray Tomás territorios y como afirma Catalina Reyes,

21. Actualmente se conservan algunos centros ceremoniales, entre ellos, los complejos funerarios de San Agustín y Tierradentro, las
ciudades taironas de la Sierra Nevada y sus casas ceremoniales.
22. En la investigación de las crónicas de Pedro Simón, Noticias historiales, Tomo I.

106 Universidad de San Buenaventura, Cali-Colombia


Valoración histórica del contexto construido...

en Soberanías, territorios y conflictos en el se produce un nuevo auge poblacional en


Caribe colombiano durante la primera repú- muchas regiones colombianas. Los héroes
blica: “la Nueva Granada era un reino poco que participaron en la conformación de la
cohesionado, con provincias débiles en las nación, gestan la historiografía, cuyo papel
que el control territorial y político y las iden- era educativo, en el propósito de inventar una
tidades colectivas estaban diseminados en nación que hasta entonces no existía, pues
sociedades locales –ciudades, villas, parro- había sido producto de las segmentaciones
quias, pueblos de indios– dominadas en su de la Conquista y la Colonia. Se inicia lo que
mayoría por los cabildos. Esta conformación Luis Ervin Prado denomina como la invención
dificultó el tránsito hacia formas modernas de de las identidades regionales, donde la his-
Estado y de nación” (Reyes, 2003). toria patria sirvió a un poder político y social:
El paso de la Colonia a la República repre- “la historia se convirtió en un dispositivo de
senta la independencia del dominio español poder por medio del cual se buscaba erigir
y desarrolla la instrucción política que busca los mitos fundacionales de la nación.…Para-
la conciencia colectiva del nuevo sistema, lelamente al nacimiento del Estado –y sobre
bajo regulaciones y procesos de integración mitos regionales–, los historiadores se inven-
nacional. Estos procesos ocultan nuevas for- taron los sentimientos de identidad, donde
mas de homogeneización y aculturamiento la historia se utilizó en un sentido pragmático
que promueven el desprecio por las identida- para fundamentar esa invención, construir
des locales y las etnias, bajo mecanismos de mitos fundacionales, símbolos y emblemas
integración y de mezclas que denigran de las identitarios24... El campo histórico ya estaba
existentes: “Dentro de cincuenta o sesenta prefigurado” (Prado, 2006).
años a lo más tarde, Colombia será habitada En el primer siglo de vida republicana, las
solamente por hombres libres, los indios se ciudades se fueron poblando de artesanos,
habrán mezclado con la raza europea y con tenderos, lavanderas, carpinteros, sastres
la africana, resultando una tercera que según y otros trabajadores que fueron saturando
la experiencia no tiene los defectos de los los antiguos barrios coloniales sin aumentar
indígenas; finalmente, las castas irán des- sustancialmente el área de las ciudades. La
apareciendo poco a poco de nuestro suelo. nueva realidad urbana de la República man-
Esta perspectiva es sin duda halagüeña y tiene las tradiciones de la Colonia hasta la
muy consoladora”23 (Bermúdez, 2002). mitad del siglo XIX, a partir de lo cual empieza
No obstante la conformación de la nación a introducir cambios que reemplazan la ima-
colombiana en medio de las guerras civiles, gen colonial con rasgos neoclásicos, consoli-
rivalidades políticas, inestabilidad social, dando una ciudad de barrios policlasistas
económica y pobreza, durante el siglo XIX que produce un eclecticismo asociado al

23. En cita de Hans Joachim Koning, En el camino hacia la Nación. Nacionalismo en el proceso de formación del Estado y de la
Nación de la Nueva Granada, 1750-1856. Bogotá: Banco de la República, 1988.
24. Se exaltaban los hechos y las virtudes de los hombres considerados como modelo y ejemplo a seguir.

Revista científica Guillermo de Ockham. Vol. 4, No. 2. Julio-Diciembre de 2006 • ISSN: 1794-192X 107
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progreso, donde ricos, pobres,


industrias y comercios conviven
en densas y pequeñas áreas
urbanizadas.

Cali: transformaciones e
influencia de las imágenes Iglesia y convento La Merced. 1541 - 1678. Cali
occidentales

El desarrollo de Cali, fundada en


1536, se da según los códigos
establecidos por las Leyes de
Indias, en 1680 y, dado su ba-
jísimo crecimiento poblacional,
mantiene por más de tres siglos
un carácter de aldea colonial.
Entre 1536 y 1809, la población
Teatro Municipal. 1917 - 1927.
alcanzó sólo 7.546 habitantes.

En este largo período, el aisla-


miento de la ciudad con el resto
del país mantuvo las técnicas
de construcción tradicionales y
la arquitectura, aunque importó
las formas y los tipos españo-
les en la composición de las
edificaciones, se adecuó al
clima, al paisaje y a los limitados
recursos del medio.

En los siglos XVII y XVIII la in-


fluencia del arte barroco euro- Edificio Otero. 1926.
peo llega a América y detrás de
él se escondió todo un proceso
evangelizador en manos de la
Iglesia. La expresividad pro-
pia de los modelos barrocos
importados impone la pauta
para la producción artística.
Sin embargo, tanto en el arte
como en la arquitectura, estas Palacio Nacional. 1926 - 1933.

108 Universidad de San Buenaventura, Cali-Colombia


Valoración histórica del contexto construido...

influencias produjeron copias disminuidas y nes “piratas”, que por medio de invasiones
pobres que hicieron deficientes y eclécticas se asientan en las periferias urbanas. La
apropiaciones del Barroco Europeo. En 1910 modernización de la ciudad –importada de
se crea el departamento del Valle, con Cali Europa e identificada con el término civiliza-
como capital y la ciudad inicia un vertigi- ción–, segmenta el espacio urbano y rompe
noso crecimiento. Con la construcción del con todo lo anterior, rechazando el pasado
ferrocarril del Pacífico, en 1925, la pequeña colonial. Nuevos imaginarios soportados
provincia abandona el aislamiento que había sobre la idea de progreso, integran signifi-
mantenido; se agiliza comercialmente y para caciones con base en el bienestar social, la
1938 ya poseía una población de 88.000 búsqueda de condiciones de vida digna y el
habitantes. reconocimiento de una ciudadanía social.

A mediados del siglo XX las condiciones


Con la importación de nuevos materiales y
urbanísticas tuvieron que responder a los
el recurso de arquitectos e ingenieros recién
fenómenos sociales de la modernidad y a
graduados en el extranjero, se introducen las
la altísima tasa de crecimiento que multipli-
tendencias europeas y estadounidenses,
caba la población urbana. Bajo la influencia
y se construyen los primeros edificios del
del estilo internacional –determinado por
período de la República. Estos edificios son
las tendencias de la Escuela de Chicago,
destinados principalmente al funcionamiento
donde el alto costo de la tierra elevó la altura
de bancos, hoteles y teatros, en los cuales
de los edificios–, se inicia la construcción de
se incorporó un eclecticismo neoclásico
nuevos edificios modernos localizados en
con elementos del neobarroco, neogótico y
el centro histórico: Edificio Zaccour (1952),
neorrenacentista.25 Estas obras eclécticas, a
Hotel Aristi (1946), Banco de la República,
las que se ha denominado arquitectura repu-
Banco Industrial Colombiano, etc., y se
blicana, constituyen parte del escaso patri-
monio arquitectónico que aún se conserva.

Con el proyecto modernizador del Estado,


en la primera mitad del siglo XX se produce
la drástica transición entre la antigua aldea
colonial y la ciudad metropolitana actual.
Cali pasa de 284.186 habitantes en 1951, a
637.929 en 1964. Sobre la base de las migra-
ciones rurales que provocan un crecimiento
urbano desmesurado, se acentúa la pobreza
y el conflicto por el derecho a la ciudad, y se
Banco Industrial Colombiano 1958 - 1960. Borrero,
generalizan en todo el país las urbanizacio- Zamorano y Giovannelli. Cali.

25. Entre otros, se pueden mencionar el Teatro Municipal (1918), el Edificio Otero (1924-1926), el Palacio Nacional (1926-1933), el
Teatro Jorge Isaacs (1931) y el Hotel Alférez Real (1929-1933).

Revista científica Guillermo de Ockham. Vol. 4, No. 2. Julio-Diciembre de 2006 • ISSN: 1794-192X 109
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produce una primera arquitectura


moderna que incorpora las formas
del racionalismo y la espacialidad
modernas y logra una relación
explícita con la ciudad, el clima
y el paisaje, contraponiendo lo
regional y lo universal con sentido
de identidad.

Bajo los principios de la mo-


dernidad y el afán renovador Hotel Alférez Real, demolido en 1972*
que traen consigo, gran parte
de estos edificios se construye
sobre las demoliciones de las
antiguas casas coloniales del
centro histórico de Cali. Es el caso
de las manzanas demolidas por
el Banco de la República y por la
antigua FES –hoy Centro Cultural
de Cali y premio nacional de ar-
quitectura–; el Batallón Pichincha, Batallón Pichincha, demolido en 1972*

que fue reemplazado por los edi- las modas, se traduce en un grande, des-
ficios del CAM; el Hotel Alférez Real, donde controlado y confuso crecimiento. La idea de
actualmente se ubica la Plaza de los Poetas lo moderno se asoció con lo urbano y con
y que por muchos años fue lote baldío; la nuevas imágenes estéticas importadas de
antigua Gobernación del Valle; la Biblioteca Europa y Estados Unidos. De esta manera,
Departamental; el Teatro Colombia; el Cuartel mientras las élites urbanas disponían de los
de Bomberos; el antiguo Club Colombia; el recursos para satisfacer no sólo sus necesi-
Claustro de Santo Domingo y muchas obras dades básicas sino las modas estéticas im-
más que ya no hacen parte de la memoria portadas, los sectores sociales marginados
colectiva. se veían estratificados y desplazados cada
Las búsquedas innovadoras y la generali- vez más hacia las periferias. Como lo explica
zación de los principios de individualidad, Santiago Arboleda: “Con el surgimiento y
propios del afán por lo moderno, rompen con consolidación del Distrito de Aguablanca
lo anterior destruyendo la imagen de los luga- se concreta un gran territorio de legitimidad
res consolidados y el patrimonio construido, para la reconstrucción y reelaboración de
donde el vigor que producen la novedad y distintos rasgos de la vida cotidiana de estas

* Fotos extraidas del patrimonio fotográfico y fílmico del Valle del Cauca. Gobernación del Valle y Secretaría de Cultura y Turismo.

110 Universidad de San Buenaventura, Cali-Colombia


Valoración histórica del contexto construido...

comunidades, anclados en sus tradiciones y puede observarse en las publicaciones de


recreados con elementos modernos de este la Sociedad Colombiana de Arquitectos a
contexto” (Arboleda, 2002). través de Testimonio, que recopila las obras

En 1971 y con motivo de los Juegos Pana- seleccionadas en las Bienales nacionales

mericanos, se lleva a cabo un cambio radical de arquitectura.26

en la imagen urbana. Con la construcción de


las obras viales que privilegiaron el vehículo
frente al peatón, se anuló la vivencia de lo Valoración del contexto
urbano y con la demolición sistemática de los
edificios de valor histórico y la proliferación Una mirada crítica desde
las bienales de arquitectura
de la construcciones en altura de edificios
exentos y de bloques comerciales produc- En una revisión de las publicaciones que
to del UPAC, se rompe la unidad colectiva desde 1971 hace el primer anuario de arqui-
de una ciudad que había conservado una tectura y las subsiguientes publicaciones de
imagen amable y una identidad. Durante las los libros Testimonio, puede reconocerse la
dos últimas décadas del siglo XX la trans- forma en que los intelectuales y críticos de la
formación acelerada de los roles sociales arquitectura colombiana invitan a reflexionar
y las distintas representaciones a las que sobre los problemas surgidos por el des-
estos cambios dan lugar, moldean nuevas mesurado crecimiento de las ciudades y el
sociabilidades que buscan, a su vez, nuevas incierto porvenir que, como efecto, se veía
formas de expresión urbana y arquitectónica. avecinar.
Con la aparición contemporánea de nuevos En relación con la muestra seleccionada en
materiales y el ingreso de dineros, culturas 1971, los miembros del jurado afirmaban
y estéticas del narcotráfico, la preocupa- lo siguiente: “Las obras premiadas, llenas
ción por el confort y por la moda produce de valores expresivos, se califican como
una arquitectura comercial, de catálogo, elementos aislados en el contexto urbano,
acontextual y global, que ignora lo público y en la medida en que son excepciones
constituye una nueva realidad urbanizadora que proponen un lenguaje estético, como
donde la economía fundamenta la dimensión escapatoria al asfixiante mundo de la triste
ciudadana. anonimidad o a la fealdad limitante del medio
El olvido del contexto y la respuesta autó- urbano”.27 En publicaciones posteriores se
noma y utilitaria que ofrece la arquitectura al acentúan las críticas y en 1973 se denuncia
lugar y a la historia, violenta lo urbano como la deshumanización a la que ha llegado la
el lugar de las identidades y multiplica la arquitectura y la conformación urbana que
crítica en las tres últimas décadas, como olvida la actividad ciudadana y el acontecer

26 Publicación de las obras de arquitectura y urbanismo seleccionadas y premiadas cada dos años en una muestra nacional.
27. Anuario No. 2, Miembros del jurado: Germán Téllez, Germán Pardo, Jorge Bernal.

Revista científica Guillermo de Ockham. Vol. 4, No. 2. Julio-Diciembre de 2006 • ISSN: 1794-192X 111
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callejero. En 1977 se afirmaba: “Las deficien- apetecidos para ese mercadeo, sometidas
cias en el diseño se suplen con conceptos a una de las etapas más vandálicas de la
de moda y estilo, con frecuencia importados historia de la arquitectura nacional”.30
y casi siempre tergiversados, que no tienen La publicación de la XI bienal, en 1988, reitera
tradición alguna, aunque pretenda decirse lo la necesidad urgente de la búsqueda y de-
contrario en el medio nacional”.28 finición de una arquitectura propia y acorde
Hacia 1979 la crítica se vuelca sobre el con las condiciones locales. Al respecto,
afán mercantilista que ha proliferado y su Carlos Niño escribe: “La arquitectura colom-
expresión en la construcción de conjuntos biana realizada hacia la mitad de este siglo
multifamiliares como tipología que respon- tuvo un rigor y una mesura admirables....
de a las exigencias comerciales, pero que Pues bien, tal mesura puede perderse si
ignora la escala y la proporción de la calle, continúa la adopción decorativista de re-
la conformación del barrio, el sector y la cursos gratuitos como la rotación forzada,
ciudad. Se resalta el abandono y el olvido
29 el pórtico adosado, el ventanal escalonado,
de las valiosas propuestas arquitectónicas las columnitas decorativas, la adopción de
unifamiliares construidas en Colombia entre colores (violeta, curuba, después del verde
los años 1936 y 1966, y las dificultades de biche y el rojo avinagrado), las marquesinas
la masificación que, a cambio de lo espera- de fórmula o las molduras historizantes; y
do, desarrolla arquitectura de gran pobreza no es que este repertorio deba ser evitado
conceptual, poca racionalidad constructiva sino que si se le usa, ha de ser con sentido
y resultados plásticos, climáticos y estéticos arquitectónico y significativo y no como un
deplorables. En 1980 se afirmaba: “...Se ini- obvio y superficial maquillaje que de manera
ció, y no propiamente por los arquitectos sino aparente confiere al diseño un aspecto con-
por manos ajenas que dominan el mercado temporáneo y cosmopolita”.31
de la construcción en su exclusivo
beneficio, uno de los períodos más
escandalosos de especulación de
la finca raíz. Las consecuencias se
han manifestado en las despro-
porcionadas alzas del valor de los
predios, de la construcción y de
las viviendas y en el arrasamiento
de centenares de casas ubicadas,
Edificio FES, hoy Centro Cultural de Cali. Premio Nacional de Arqui-
para su infortunio, en los barrios tectura. 1990.

28 Anuario No. 6, 1977. Comité Editorial: Dicken Castro, Julián Guerrero, Jorge Rueda.
29. Anuario No. 9, Jorge Rueda G, crítica que hace referencia a la alarmante multiplicación de conjuntos multifamiliares o unifamiliares,
como respuesta a un mayor aprovechamiento económico del terreno, gran parte de ellos cerrados y con diseños urbanos que
cambian notoriamente el trazado de la manzana tradicional, trabajando supermanzanas circundadas por vías vehiculares, o vías
internas que muchas veces destruyen los espacios de uso común.
30. Anuario No. 10. Comité Editorial.
31. Bienal XI. Carlos Niño M.

112 Universidad de San Buenaventura, Cali-Colombia


Valoración histórica del contexto construido...

En 1990, para la bienal No. XII, con la cual se espacio público, la Sociedad Colombiana
otorga el Premio Nacional de Arquitectura a de Arquitectos decide incluir y valorar su
la obra para la antigua Fundación FES, hoy participación en las bienales: “Inspirados
Centro Cultural de Cali, de los arquitectos en los enunciados anteriores, que destacan
Rogelio Salmona, Pedro Mejía, Jaime Vélez la necesidad de contribuir al ordenamiento
y Raúl H. Ortiz, Silvia Arango reconoce el de la ciudad y el urgente requerimiento de
valor de las arquitecturas con sentido del motivar la reflexión sobre la prioridad de
lugar donde se valora lo convencional y producir un hábitat digno, se crearon dos
se evidencia el “oficio” del diseñador: “La nuevos premios: el de vivienda de interés
conciencia del lugar que el edificio ocupa social y el de urbanismo”.34
en la ciudad, no le impide la formulación de
En 1996, para la XV bienal, se establecen
nuevas propuestas espaciales en las áreas
a nivel nacional las muestras regionales
abiertas y públicas interiores”.32
de arquitectura. Como efecto del auge de
En 1992, fecha en que se lleva a cabo la bie- la historia iniciado con la premiación de la
nal No. XIII, se otorga el Premio Nacional de investigación de Silvia Arango, se presentan
Arquitectura a Silvia Arango, con su trabajo gran cantidad de trabajos en la categoría de
Historia de la Arquitectura en Colombia, con investigación, los cuales se inscriben en su
lo cual se inicia la valoración de los temas de gran mayoría en temas sobre el patrimonio
investigación, los estudios teóricos y el re- histórico colombiano, que buscan detener su
conocimiento de la historia de la arquitectura destrucción. Se otorga mención de honor a
nacional. Sin embargo, continúa la crítica a la la investigación Proyectos de la Arquitectura
producción arquitectónica con los comen- en Colombia. Historiografía proyectual, desa-
tarios de Sergio Trujillo: “La gran masa de lo rrollado por Noel Cruz, en la Universidad del
que cotidianamente se produce, permanece Valle y se declara desierto el recientemente
atada a los términos impuestos por una creado premio de urbanismo, debido a
voraz especulación, muy poco preocupada que el jurado consideró que “los proyectos
por los asuntos urbanos y constructivos, presentados eran más una propuesta de
depredadora sistemática de los lugares y ex- gestión y diagnóstico, que auténticos pro-
presivamente conformista; situaciones que yectos de urbanismo”.
hoy nos enfrentan al océano de mediocridad
En 1998, año de la XVI bienal, se selecciona
arquitectónica que cada día es más tangible
la investigación Estudio diagnóstico para
en la ciudades colombianas”.33
la renovación urbana del centro. Ciudad
Para 1994, año de la XIV bienal y ante las Santiago de Cali, desarrollado por convenio
críticas de los últimos años sobre la es- entre la Universidad de San Buenaventura
casez de proyectos y estudios sobre el y la Sociedad Colombiana de Arquitectos

32. Bienal XII. Silvia Arango.


33. Bienal XIII. Sergio Trujillo.
34. Bienal XIV. José Pablo Uricoechea. Presidente S.C.A.

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Graderías Universidad de San Buenaventura, premio Diseño Arquitectónico, 2002. Jaime Beltrán.

Cali, bajo la dirección de la arquitecta Mar- folclorizante, lo engañosamente modesto


cela Falla. o la imitación facilista y autopromocionada

En el 2002, la bienal XVIII otorga el premio de la penúltima moda que nos llega en las

nacional de diseño arquitectónico “Fernan- bonitas y costosísimas revistas españolas y

do Martínez Sanabria”, a la obra Graderías es replicada alegremente en las de aquí”.35

Universidad de San Buenaventura Cali, del Las nuevas formas de vida que comporta el
Arquitecto Jaime Beltrán, destacándose por afán por lo moderno, ligadas a la avidez mer-
parte del jurado la forma como el proyecto cantilista, han traído consigo requerimientos
maneja la escala, para lograr la integración de nuevos lugares para las interacciones
con el paisaje y la apropiación del lugar. sociales y, en consecuencia, el reemplazo
Esta nueva mirada hacia proyectos de pe- de los existentes por nuevas espacialidades.
queña escala, la reciente estimación de los El afán demoledor de los espacios y lugares
trabajos de investigación y la crítica reiterada tradicionales ha demostrado en Cali la efica-
al olvido del lugar, pone de presente una cia de los mecanismos de transformación
revaloración de la historia, de la intervención como efecto de una ideología. Esto se hace
patrimonial y del reconocimiento contextual evidente en la eliminación sistemática de
que han impulsado la producción historio- los sectores consolidados y la ejecución de
gráfica. nuevas edificaciones que ignoran las carac-
terísticas predominantes de los lugares, para
En los últimos años, como lo afirma Benjamín
insertar obras producto de la individualidad
Barney en su columna de opinión ¿Ciudad?,
de sus autores.
que semanalmente publica en el diario El
País de Cali, “en las erráticas últimas bienales En efecto, en Cali no sólo se ha destruido
de arquitectura colombiana y, al margen de la arquitectura tradicional sino las formas de
ocasionales aciertos, los premios, que sólo vida que llevaba asociadas. La supresión de
son ad honorem, con frecuencia se han es- los patios, las terrazas y los balcones, implica
cogido con demagogia entre lo tontamente no sólo un efecto en el comportamiento cli-

35. Holcim Awards. El País, enero 19 de 2006.

114 Universidad de San Buenaventura, Cali-Colombia


Valoración histórica del contexto construido...

mático de las edificaciones, sino la ausencia lombiana y estudios regionales, entre los
de lugares de encuentro y socialización, que pueden destacarse los siguientes:
ocurriendo lo mismo con la eliminación del Arquitectura de la colonización antioqueña
estar de alcobas y la reducción de las áreas (1989), de Néstor Tobón Botero; Poblamiento
de circulaciones para bajar los costos de y urbanismo colonial en Santander (1987), de
las obras. Ángela Inés Guzmán; Arquitectura y Estado,

La diversidad, la fragmentación cultural y las contexto y significado de las construccio-

condiciones de desigualdad en las que se nes de obras públicas 1905-1960 (1991),

ha construido la arquitectura y el urbanismo de Carlos Niño Murcia; Rogelio Salmona,


local, no han encontrado un potencial unifi- arquitectura y poética del lugar (1991), de
cador y es evidente la falta de influencia de Germán Téllez; Ciudad colombiana (1991),
las críticas intelectuales en la estructuración de Jacques Aprile Gniset; Arquitectura po-
de procesos políticos y culturales de tras- pular en Colombia. Herencias y tradiciones
cendencia y, por supuesto, en una planifica- (1992), de Alberto Saldarriaga Roa y Lorenzo
ción urbana acertada.36 La debilidad de las Fonseca; Ciudad y territorio. El proceso de
influencias de los intelectuales en el mundo poblamiento en Colombia (1993), de Fabio
político y cultural se manifiesta claramente Zambrano y Oliver Bernard; Arquitectura fin
en las expresiones urbanas y arquitectónicas de siglo (1994), de Alberto Saldarriaga Roa,
de la ciudad de Cali. Pese a que su función Patrimonio urbano en Colombia (1996), del
como intelectuales críticos los ha posicio- Instituto Colombiano de Cultura; Rogelio
nado como elementos protagónicos en el Salmona (1998), de Ricardo Castro, y la
campo de la arquitectura, no han contribuido reciente publicación de Escala de la obra
a definir una cultura política en la que se completa de Rogelio Salmona, 2006, de
conjuguen las ideologías y las decisiones, Germán Téllez.
y tampoco lo han conseguido en el campo
Estudios locales
académico e intelectual. Sus críticas de más
de treinta años siguen permaneciendo en el La fundación del Instituto Colombiano de
lugar de la teoría, que separada del mundo Cultura –Colcultura– en 1968 y del Consejo
de las acciones, produce el mismo efecto de Monumentos Nacionales, generó las
en la relación entre la historia política y la vida primeras legislaciones para la conserva-
intelectual. ción arquitectónica de sectores y obras
patrimoniales. En Cali estos trabajos fueron
La acción investigativa
enriquecidos por las investigaciones de
En los últimos años se ha publicado una Gilma Mosquera y Jacques April-Gniset, con
extensa producción sobre arquitectura co- estudios de arquitectura de la región; Carlos

36. En el texto Los intelectuales y la historia política en Colombia, Loaiza aclara que el pasado intelectual del siglo XIX concentró en
los políticos letrados el saber intelectual de producción de ideas y el poder político para su ejecución. Sin embargo, esta situación
es distinta en la historia moderna, donde se han separado las funciones de los intelectuales y los políticos: para los intelectuales
se ha dejado la teoría, las ideas, el saber y para los políticos el mundo de las acciones (Loaiza, 2004).

Revista científica Guillermo de Ockham. Vol. 4, No. 2. Julio-Diciembre de 2006 • ISSN: 1794-192X 115
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Botero y la investigación sobre la arquitectura y Mauricio García. Carlos Enrique Botero llevó
del Ferrocarril del Pacífico; Ricardo Hincapié, a cabo el estudio Espacio público abierto,
Ramiro Bonilla y Carlos Zapata con el estudio plaza, parque y zona verde, en el desarrollo
de las iglesias; las modernizaciones de Cali urbano de Cali en el siglo XX.
y los puentes sobre el río Cali, de Ricardo
Además de los estudios mencionados,
Hincapié; la evolución morfológica del río Cali
iniciativas académicas emprendidas por la
de Ramiro Bonilla; la arquitectura industrial
Universidad del Valle y San Buenaventura,
de Jorge Galindo; La casa de hacienda en
han acometido problemáticas de investiga-
el valle del alto Cauca, 1994, de Benjamín
ción patrimonial entre las que pueden men-
Barney y Francisco Ramírez; el estudio de
cionarse: “Plan especial del espacio público
la arquitectura racionalista moderna de este
y equipamiento colectivo de Santiago de
último; así como los diversos trabajos sobre
Cali, convenio entre la Universidad de San
mudejarismo y arquitectura en la Nueva
Buenaventura, la Sociedad Colombiana de
Granada y la columna de opinión que cada
Arquitectos y el Departamento Administrativo
jueves publica en el diario “El País” Benjamín
de Planeación Municipal y el Plan especial
Barney, como reflexión y llamado de atención
de protección del patrimonio arquitectónico
sobre aspectos que reclama la ciudad; la
urbano de Santiago de Cali, desarrollado
reciente publicación de Edgar Vásquez:
por el CITSE, perteneciente a la Universidad
Historia de Cali en el siglo XX. Sociedad,
del Valle.
economía, cultura y espacio y el libro editado
por el Centro de Investigaciones Territorio, Como parte de esta contribución académica,
Construcción y Espacio, CITCE: Arquitectura, múltiples trabajos de grado han consignado
industria y ciudad, tipos y técnicas 1917- las obras de Borrero, Zamorano & Giovanelli,
1945, de Jorge Galindo. también investigada y publicada por Rodrigo
Tascón, como también las obras de Alfonso
En los últimos años se han incrementado las
Caicedo Herrera y Francisco Zornosa, que
investigaciones tendientes al reconocimiento
constituyen aportes a la consolidación de un
de las condiciones urbanas, los inventarios
estado del arte de la arquitectura en Cali.
patrimoniales y normativas para la interven-
ción. Entre ellos se destacan el Estudio Actualmente se desarrolla la revisión y actua-
diagnóstico del Centro Ciudad Santiago de lización del patrimonio arquitectónico de
Cali, con la participación de los arquitectos Santiago de Cali, como un convenio entre el
Marcela Falla, Esperanza Cruz, Juan Carlos Departamento Administrativo de Planeación
Vallecilla y Juan Carlos Ponce de León; el Municipal (DAPM) y la Empresa Municipal de
Inventario del patrimonio arquitectónico Renovación Urbana (EMRU). Este trabajo se
monumental moderno de Santiago de Cali, sustenta en el inventario de bienes inmuebles
desarrollado por el equipo de la Fundación desarrollado por José Luis Giraldo, en 1986,
Arquitectura y Ciudad, conformado por Car- el Plan de Ordenamiento Territorial, en su
los Bernal, Constanza Cobo, Mauricio Otero capítulo sobre el patrimonio arquitectónico

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Valoración histórica del contexto construido...

del municipio de Cali y el Plan Especial de les particulares. Frente a la incertidumbre que
Patrimonio, desarrollado por el CITSE bajo la conlleva la heterogeneidad de las formas y la
coordinación de Francisco Ramírez. carencia de cánones estéticos, las propues-
tas arquitectónicas son permanentemente
sometidas a adaptaciones forzosas que,
bajo el recurso de las modas y la importación
Observaciones finales de modelos extranjeros, ignoran los proble-
mas propios de las localidades afectando la
La manera superficial y rápida como la obra consolidación de una memoria colectiva.
de arquitectura da respuesta inmediata al
En la arquitectura de Cali se perciben frag-
“encargo profesional”, es promovida por
mentos heredados de los diversos momen-
la apertura de concursos nacionales con
tos históricos, con asiento en modelos de
plazos ínfimos de entrega y bienales de ar-
planificación urbana que han favorecido
quitectura que, a pesar de las duras críticas
el desorden urbano. El uso indiscriminado
publicadas a lo largo de las últimas tres dé-
de los recursos formales del neoclásico y
cadas, siguen seleccionando y premiando
sus productos eclécticos, y el gusto por las
las obras sin conocerlas, recorrerlas y sin me-
formas griegas y romanas de columnas,
dir su impacto ciudadano. Estos escenarios
balaustradas, cornisamientos y sus aportes
esconden la realidad agobiante de las ciu-
dades colombianas y la situación dramática compositivos, proliferan como búsquedas

de Cali: el desconocimiento, subvaloración historicistas. Sin embargo, en medio de esta

y destrucción del patrimonio construido y la paradoja y como reacción a las nuevas reali-

respuesta inconsulta que ofrecen las obras dades urbanizadoras, han venido cobrando

al contexto, a la cultura y a la historia. valor las singularidades de los lugares y la


indagación por los valores de lo local, reco-
La diversidad, la fragmentación cultural y
nocido como “el lugar en y desde el cual
las condiciones de desigualdad en las que
un individuo o una comunidad se identifica
se ha construido la arquitectura local, no
y reconoce con otros y otras comunidades,
han encontrado un potencial unificador y se
tomando lugar dentro de la diversidad” (Zu-
siguen imponiendo formas hegemónicas
luaga, 2006).
forjadas en la imagen del poder económico
y los paradigmas occidentales. La libertad La arquitectura latinoamericana y particu-
generalizada en la búsqueda estética, la ig- larmente la colombiana, han carecido de la
norancia de la memoria y la inconciencia del afirmación de valores propios confrontados
contexto, han establecido una arquitectura con las problemáticas de su entorno particu-
de indiferencia social que celebra el triunfo lar. Profundizar en el reconocimiento de estos
del capitalismo, tomando un rumbo definido valores, así como en la construcción de
hacia el ánimo de lucro y demostrando su categorías de análisis, pautas de valoración
incapacidad para asimilar elementos cultura- y criterios de intervención en los contextos

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de la realidad local, es una prioridad para el creencia en rasgos puros de la tradición y


conocimiento y la proyectación de la arqui- la modernidad que se combinan para crear
tectura. Como lo afirma Marina Waisman: un híbrido con esencia nueva; ni se refiere
“la arquitectura es una praxis, una actividad tampoco a la combinación discrecional de
humana inserta en el transcurrir histórico y elementos de la tradición de la modernidad,
responde a necesidades culturales o cul- o una claudicación de lo tradicional frente
turalizadas.(…) Si bien puede admitirse la a lo moderno. La hibridación implica una
existencia de ciertos valores universales para (re)creación cultural que puede o no ser
la arquitectura –o al menos históricamente (re)inscrita en constelaciones hegemónicas”
universales, como podrían ser en este mo- (Escobar, 1996).
mento el bienestar del ciudadano común o
Por supuesto esta afirmación exige mati-
la calidad de vida–, en cuanto se profundice
zaciones, pues teniendo en cuenta que la
en cualquier tema saltarán a la vista valores
diversidad cultural, como hecho incontro-
específicos de cada cultura, o modos de
vertible, genera culturas híbridas, nuevas
interpretar esos valores universales que se
identidades, condiciones y contextos que
diferencian fuertemente entre sí” (Waisman,
afectan la arquitectura, se hace necesaria
1990).
una reflexión sobre lo local, que implica la
Sobre un pasado de implantaciones y valoración de la investigación sociocultural
rupturas se han fundado las tradiciones cul- e histórica como elemento concomitante a
turales que coexisten actualmente y sobre la producción del hecho arquitectónico. Esta
el desconocimiento de la socialidad y las condición permite, además, establecer los
diferencias culturales, se ha construido la referentes de identidad necesarios tanto para
ciudadanía nacional, invisibilizando indios, la sociedad, como para el arquitecto.
negros y categorías mestizas, violentando
La actual condición multicultural colombiana
e instrumentalizando los grupos étnicos.
presenta la coexistencia de más de cien
Estas fragmentaciones y rupturas han sido
grupos étnicos que generan diversidad de
fortalecidas por lenguajes importados,
interacciones y de sentidos, sobre los cuales
puestos en juego en escenarios anónimos y
el espacio de lo urbano se constituye en
autónomos de sus contextos e historias. Las
lugar de alteridad y construcción de iden-
nuevas identidades producen arquitecturas
tidades. Estas circunstancias reclaman el
acontextuales y segmentaciones que reflejan
reconocimiento de la obra de arquitectura en
una hibridación cultural que se expresa en las
un sentido de relación con los aspectos que
configuraciones arquitectónicas y urbanas.
involucra como respuesta a las necesidades
Como lo afirma Arturo Escobar, en La in- culturales, en cuya perspectiva, se supera
vención del tercer mundo: “La noción de su condición objetual, funcional y física,
culturas híbridas, como podría sugerirlo para reconocer su naturaleza ideológica y
una interpretación biológica, no implica la su destino sociocultural.

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Valoración histórica del contexto construido...

La adquisición tardía de conciencia patri- incultura ciudadana, las búsquedas formales


monial que se inició apenas en los años 90, sin contenido cultural y social y el impacto de
permitió que en las décadas de los 70 y 80 las variables del mercado que exigen inme-
se demolieran en Cali gran parte de las casas diatez y la expresión de efectos comerciales
del centro histórico, la arquitectura tradicio- en la arquitectura. Por lo tanto, una respuesta
nal y los barrios modernos. Hoy la ciudad proyectual que respete el entorno urbano,
se configura sobre una heterogeneidad de considerando como patrimonio las edifi-
representaciones y dimensiones donde con- caciones existentes y el tejido urbano que
vergen múltiples segmentaciones socio-cul- conforman, así como los procesos culturales
turales, usos del suelo, formas tradicionales, que están en la base de su producción, re-
premodernas, modernas y posmodernas conoce en ellos diferentes valores, además
y donde prevalece la individualidad de las de los tradicionalmente reconocidos como
propuestas. En este sentido, falta mucho su forma, estilo arquitectónico, uso y calidad
por hacer para el reconocimiento de valo- espacial. Es decir, valora su utilidad, su ca-
res que puedan considerarse propios de la pacidad de representar un momento de la
arquitectura local, así como la estructuración historia de la ciudad y su significado como
y difusión de los criterios con los cuales se referente urbano en la memoria colectiva de
seleccionan las obras o los contextos de los habitantes; propone un lenguaje arquitec-
valor. El paso del inventario patrimonial a la tónico que concilia lo nuevo sin caricaturizar
formulación de juicios y pautas de valoración lo antiguo y da una propuesta respetuosa,
de los contextos construidos, con los cuales condicionada por sus características. En
sea posible consolidar zonas con identidad otras palabras, una mirada sensible sobre
y multiplicar la calidad de las intervenciones las preexistencias del contexto y una con-
que consultan el contexto, exige el con- cepción más amplia del patrimonio arquitec-
secuente paso de la investigación, a una tónico, supera las visiones monumentalistas,
postura teórica y crítica que afiance y difunda morfológicas y estáticas del edificio, para
criterios para orientar las intervenciones en reconocerlo como hecho arquitectónico y
los lugares urbanos. objeto histórico y cultural, condición en la
cual se ligan la espacialidad y las formas ar-
Si bien la intervención arquitectónica en
quitectónicas, con las significaciones y la red
contextos preexistentes está generalmente
de expresiones simbólicas que representan,
normada, estas reglamentaciones, abiertas
constituyendo el patrimonio activo y presente
a múltiples interpretaciones y de difícil apli-
de una comunidad.
cación, son acogidas y hechas proyecto de
acuerdo con el talento y oficio del proyectista. Cuatro siglos de historia colombiana,
Estas circunstancias llevan consigo un uso transcurridos a lo largo de la Conquista, la
arbitrario de los elementos que conforman el Colonia y la República, han soportado el
patrimonio cultural de la humanidad, que se encadenamiento sucesivo de rupturas y
ven afectados por el deleznable efecto de la fragmentaciones, aunado a las separacio-

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