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Darío Páez
Facilitación Social
A fines del siglo XIX Tripplet descubrió que ciclistas que corrían acompañados
contra reloj lo hacían más rápido que cuando corrían solos contra reloj. Una serie de
estudios han confirmado que la presencia de otros aumenta la velocidad con que las
personas llevan a cabo diferentes tareas, como multiplicaciones simples, descubrir vocales
en palabras, etc. La competición con otros no era necesaria, simplemente bastaba que los
otras personas desarrollaran la misma actividad que el sujeto, es decir, que estuvieran
presentes como co-actores.
Sin embargo, en tareas complejas o tareas que se estaban aprendiendo, la presencia
de otros hacía más lento o disminuía el rendimiento. Un meta-análisis que sintetiza cerca de
241 estudios llevados a cabo con alrededor de 24 mil sujetos ha confirmado este efecto de
facilitación social de tareas simples. En la revisión de Bond y Titus (1983 en Morales,
1994) fue donde se encontró el efecto de facilitación social más alto1 Es decir, si el 50% de
la población rendía bien en general, rendía bien el 68% de las personas que realizaban la
tarea (simple o bien aprendida) en presencia de otros que trabajaban simultáneamente de
forma individual en una tarea no competitiva. En contraposición, de las personas que
trabajaban solos en la misma tarea sólo rendía bien el 32%.
1
Efecto Socialización: 0,36 (Bond y Titus, 1983 en Morales, 1994).
Estos resultados se encontraron estudiando animales: los insectos trabajaban más
rápido y mejor (excavaban más arena) en tareas simples y aprendidas en presencia de co-
actores o congéneres, mientras que la presencia de otros insectos entorpecía el aprendizaje
(aprendían laberintos con más lentitud).
Desindividuación
La pérdida de identidad y responsabilidad en el grupo, conducente a la realización
de conductas anti-sociales, es un efecto atribuido a los grupos.
Mullen (1986 en Hoog y Vaughan, 2002) encontró que a mayor tamaño de la
multitud, más crueles eran las conductas colectivas - por ejemplo de linchamiento; los
grupos pequeños "sólo" colgaban al pobre asesinado, los grupos mayores le arrancaban la
piel de la cara y lo quemaban vivo-. En el anonimato de la multitud, las personas llevan a
cabo acciones extremas y más violentas de lo que harían solas. Esta idea es congruente
parcialmente con los resultados que muestran que los grupos toman conductas más
arriesgadas, así como deciden dar castigos más fuertes que los individuos. Por ejemplo,
Yaffe y Yinon (1979) encontraron que la media de intensidad de choques eléctricos
administrada por individuos era menor que la intensidad media de choques eléctricos
administrados como castigos por grupos de tres personas (en Brown, 2000). Aunque por
otro lado, como veremos, los grupos no siempre toman decisiones más arriesgadas. Cuando
la tendencia dominante es hacia la moderación, se toman decisiones más moderadas que la
media simple de actitudes individuales.
La desindividuación es la pérdida de la aprensión de evaluación individual que se
da en situaciones de grupo que favorecen el anonimato. Al no ser identificable en la
2
Desindividuación /Conductas Antisociales: r = 0,09 (Postmes y Spears, 1998). Anonimato ante Exo-grupo/
Conductas Antisociales: r = 0,16; Menor Conciencia Pública / Conductas Antisociales: r = 0,16; Tamaño del
grupo/ Conductas Antisociales: r = 0,11; Conductas Antisociales/ Anonimato-Menor Conciencia Pública-
Tamaño Grupo: r = 0, 18).
Cultura y Desindividuación
Estudios comparando sociedades ‘simples’ confirmaron que las culturas en las que
los guerreros cambiaban su apariencia antes de la batalla (usando máscaras o pintándose la
cara) tendían a realizar prácticas de lucha más agresivas (mutilación o torturas de los
enemigos). De las 13 culturas con fuerte agresividad guerrera, 12 o más del 90%
compartían ritos de desindividuación antes del combate, frente a 3 de las 10 culturas con
prácticas menos agresivas. Es decir, hay evidencia que confirman que la desindividuación
ante el enemigo se asocia culturalmente a un trato más cruel con éste.
Ahora bien, recordemos que la desindividuación en el seno de un grupo hace a las
personas más sensibles a las normas y claves contextuales. Así, personas uniformizadas
mediante vestimentas de enfermeras administraron choques eléctricos más débiles que las
personas cuyos nombres e identidades personales eran puestos de relieve - se supone que
fue debido a que la vestimenta de enfermera hizo saliente la norma contextual altruista
asociada a esa profesión. Por otro lado, soldados belgas a los que se desindividualizó
cambiándoles sus uniformes por capuchas estilo Ku-Klux-Klan dieron respuestas menos
agresivas que aquellos que seguían individualizados usando sus uniformes militares.
Aparentemente, los soldados se veían más uniformizados, anónimos y orientados por una
norma de agresión en sus vestimentas originales que en las ropas que teóricamente
reforzaban su anonimato. Por otro lado, en muchas culturas situaciones de anonimato y de
baja individuación se asocian al seguimiento de normas sociales. Por ejemplo, en las
culturas islámicas el uso del burka o del velo en vez de liberar a las mujeres y facilitar
conductas innovadoras o anti-normativas de su parte, más bien sirve para especificar y
subrayar sus obligaciones sociales y las normas de interacción entre géneros (Smith y
23,83 24,55
25
18,49
20 16,5
Individualistas
15
Colectivistas
10
0
Rendimiento Grupal Rendimiento Individual
En los años 50 del siglo pasado, se daba por sentado que los grupos moderaban las
decisiones de las personas - se suponía que el grupo normalizaba consensualmente las
opiniones de sus miembros. Sin embargo, los estudios de Stoner y otros autores mostraron
que los grupos tomaban decisiones más arriesgadas que el promedio de opiniones
individuales. Posteriormente se mostró que en realidad los grupos no siempre reforzaban el
riesgo, sino que cuando predominaba la cautela, las decisiones grupales eran más
moderadas que las individuales.
Cientos de investigaciones han mostrado que los grupos tienden a polarizar sus
juicios. En el paradigma clásico, los sujetos primero eligen alternativas o toman decisiones;
posteriormente lo discuten en grupo; y finalmente toman por segunda vez una decisión. Se
constata generalmente que la media de la segunda decisión es más arriesgada que la
primera (o en ocasiones más cauta). Lo que se encuentra es que la media grupal después de
una discusión no es la simple media de las actitudes individuales previas, sino que está más
polarizada o reforzada en el sentido de la tendencia grupal. En otros términos, los grupos
adoptan posturas más exageradas que las opiniones promedios de sus miembros. Por
ejemplo, después de una discusión grupal, estudiantes franceses reforzaban su actitud a
favor de De Gaulle, así como su actitud contraria a los EEUU. La media grupal posterior a
la discusión era más extrema que el promedio de las opiniones y actitudes previas de las
personas que componían los grupos.
Wallach y Kogan (1959) fueron los autores del Cuestionario de Elección de
Dilemas que sirvió como base para mostrar que los grupos tomaban decisiones más
extremas que las opiniones promedio de sus miembros.
Un ejemplo es el siguiente:
1) El Sr. A es un ingeniero, casado con un hijo, que trabaja desde hace cincos años para una
gran empresa. Fue contratado justo después de haber conseguido la licenciatura, y su empleo le
garantizará para toda su vida un salario modesto, aunque adecuado, y una consistente pensión
al final de su carrera. Por otro lado, sin embargo es algo improbable que obtenga aumentos de
salario. Durante un congreso, al Sr. A se le ofrece un puesto de trabajo en una compañía apenas
fundada, de pequeñas dimensiones y un futuro más incierto. El nuevo empleo le implicaría
desde el inicio un salario más alto y la posibilidad de beneficiarse de la distribución de los
dividendos en el caso en que la compañía sobreviva a la competencia de las empresas ya
operantes en el sector.
Imaginad que debéis dar consejo al Sr. A considerando los diversos valores de probabilidad
mínima de éxito que crees necesaria para que el Sr. A acepte el nuevo trabajo:
1.El Sr. A debe cambiar de empleo si la probabilidad de que la compañía alcance una solidez
financiera es:
1/10 2/10 3/10 4/10 5/10
6/10 7/10 8/10 9/10 10/10*
2) El Sr. B es un contable de 45 años que ha sido recientemente informado por su médico que ha
contraído una grave molestia en el corazón. El dolor es tan serio que exige que el Sr. B cambie
la mayoría de sus costumbres de vida: tendrá que bajar de peso, cambiar totalmente la dieta y
renunciar a sus pasatiempo preferidos. El médico sugiere que una delicada operación quirúrgica
podría, en caso de éxito, restablecer enteramente la eficiencia de su corazón. Sin embargo el
éxito no está garantizado y la intervención podría ser fatal.
1. El Sr. B debe aceptar la operación si la probabilidad de éxito es:
1/10 2/10 3/10 4/10 5/10
6/10 7/10 8/10 9/10 10/10*
1.1.El Sr. B no debería aceptar la operación independientemente de los diferentes valores de
probabilidad considerados.
3) El Sr C. es un hombre casado, con dos hijos y un empleo seguro que le garantiza 24 mil euros al
año. Puede hacer frente fácilmente a las necesidades vitales, pero puede concederse pocos lujos. El
padre del Sr. C. que ha muerto recientemente le ha dejado una herencia de 20 mil euros por una
póliza de seguro. El Sr. C. quiere invertir esta suma en acciones. Tiene mucha confianza en unos
títulos y obligaciones bancarias que le darán un 6% de interés. Por otro lado, el Sr. C. ha tomado
conocimiento que las acciones de la compañía X, relativamente poco destacada, deberían doblar su
valor si un nuevo producto, actualmente en fase de perfeccionamiento, fuera bien aceptado por los
consumidores. Si el producto no obtuviera el éxito esperado, las acciones verían disminuidos sus
valores.
1El Sr. C. debería invertir en las acciones de la compañía X si las oportunidades de que el producto
sea un éxito son al menos:
1/10 2/10 3/10 4/10 5/10
6/10 7/10 8/10 9/10 10/10*
1.1.El Sr. C no debería invertir el dinero en acciones independientemente de los diferentes
valores de probabilidad considerados.
4) El Sr. D es el capitán del equipo de fútbol de la universidad X. El equipo está jugando la final
de la temporada contra la universidad Y, su tradicional rival. Estamos en los último segundos de
juego y el equipo del Sr. D, de la universidad X, esta en desventaja. Todavía hay tiempo para un
lanzamiento, el Sr. D, el capitán tiene que decidir si es mejor ponerse de acuerdo para un empate
utilizando un lanzamiento de seguro éxito, o bien intentar un lanzamiento más complejo que en
el caso que salga bien, llevara a la victoria pero que, si no sale bien, determinará la derrota.
1.El Sr. D debería intentar el lanzamiento más complejo si la probabilidad de éxito es:
1/10 2/10 3/10 4/10 5/10
6/10 7/10 8/10 9/10 10/10*
11.El Sr. D no debería intentar el lanzamiento más complejo independientemente de los
diferentes valores de probabilidad considerados.
6) El Sr. F es un estudiante del ultimo año de la universidad. Quiere asistir a un curso de post
grado en química para obtener así el doctorado. Su petición de inscripción ha sido aceptada
tanto en la universidad X como en la universidad Y. La universidad X goza de una fama
universal reconocida por sus cursos de química. Pero, si una especialización obtenida en esta
universidad significa una excelente preparación, los criterios aplicados son tan selectivos que
solo un pequeño porcentaje de los candidatos llegan a concluir los estudios. Por otro lado, la
universidad Y no tiene semejante reputación pero casi todos los estudiantes admitidos a los
cursos de química consiguen el doctorado, aunque este título no tiene el prestigio del título
correspondiente de la universidad X.
1.El Sr. F debe elegir la universidad X si las probabilidades de éxito son
1/10 2/10 3/10 4/10 5/10
6/10 7/10 8/10 9/10 10/10*
1.1.El Sr. F no debería elegir la universidad X independientemente de los diferentes valores de
probabilidad considerados.
12) El Sr. M está estimando la posibilidad de casarse con la Srta. T, una chica que conoce desde
hace poco más de un año. Sin embargo, recientemente, han tenido algunas discusiones entre
ellos que sugieren la existencia de profundas diferencias de opiniones sobre muchos temas. Por
lo tanto, los dos chicos deciden consultar a un profesional para dilucidar sobre su futuro como
pareja. Llegando a la conclusión de que tienen muchas limitaciones para ser una pareja feliz.
1.La Probabilidad de que el Sr. M tenga una pareja feliz casándose con la Srta. T es:
1/10 2/10 3/10 4/10 5/10
6/10 7/10 8/10 9/10 10/10*
1.1.El Sr. M no debería casarse con la Srta. T independientemente de los diferentes valores de
probabilidad considerados.
Claves de Corrección
1- Conteste a estos dilemas individualmente.
2- Discuta los dilemas y tome una decisión grupal por consenso en grupo con tres o
cuatro compañeros.
3- Vuelva a contestar individualmente el cuestionario.
4- Constate la diferencia entre las respuestas 1 y 3. Generalmente, aunque no en todos los
casos, se produce una acentuación de la tendencia dominante en el grupo. Por ejemplo,
tres personas contestaron individualmente al primer dilema 5, 7 y 8, la media
consensuada del grupo fue de 7, en la respuesta posterior la persona que contestó 5 se
desplazó a 7, la de 7 a 8 y la de 8 a 9. Se puede constatar que el grupo acentuó a exigir
mayores probabilidades de éxito para arriesgarse a un nuevo empleo
Se debe constatar que la decisión grupal consensual está más cerca del polo dominante
de opinión - por debajo de 50% y cercana al 10% si la tendencia general del grupo es hacia
el riesgo y por encima del 50 % y cercana al 100% si la tendencia del grupo es hacia la
moderación.
3
Polarización/ Argumentación Persuasiva: r = 0,75; Polarización/ Comparación Social: r = 0,44.
Pensamiento Grupal
El pensamiento grupal caracteriza a grupos cohesivos que toman decisiones
arriesgadas que les llevan a fracasos, debido a procesos de pensamiento grupal que tienden
a ignorar la evaluación realista de los cursos de acción posibles. Fenómenos de
pensamiento grupal han precedido y facilitado catástrofes provocadas por el hombre. Es
decir, las elites que tomaban decisiones ante situaciones de riesgo generalmente suprimen
las opiniones e informaciones contradictorias con un curso de acción optimista e ignoran
las alternativas. Procesos similares se manifestaban ante las epidemias. Cuando aparecía la
amenaza de la Peste, los médicos y las autoridades buscaban tranquilizar a la población
negando la posibilidad de que ocurra o minimizando su alcance. Se decía que no era la
peste, que eran otras enfermedades más benignas y se atribuían los aumentos de mortalidad
a causas menos amenazadores, como los problemas de alimentación, etc.; se decía que la
enfermedad era una invención de las autoridades. Actitudes colectivas similares emergían
ante el caso del cólera en el siglo XIX. En el caso del SIDA ha ocurrido algo similar: por
ejemplo, en Francia se minimizó el riesgo de transmisión por transfusión, con un resultado
fatal para muchos hemofílicos (Delumeau, 1993).