[200ó]: La cuestión ambiental, CePA a Distancia, Buenos Aires, Mi-

- nisterio de Educaciqn, Gobierno de La Crudad de Buenos Aires'

RocNsrnov, JoHrN [2009]. "A safe operating space for Humanity", en /Va
2. NATURALEZA i:",,,

tu re News, 4ó'1 {sepl¡"¡¡5¡sJ Y AMBIENTE

tempo Razáo e
S¡Nros, MrroN [1996j: 4natureza do espaga. Técnica s
Emocáo, San Pablo, Edrtora Hucitec.
S,qssrN, S¡sNt¡ [2003]: Los especf ros de la globaLización, Buenos Aires'
Significados en contexto
Fondo de Cultura Económica.
La Argen-
Sc¡vrNo, D¡n¡o {1999}: l¿ desolación. Étrca y moraL en
era de La
tina de f rn de sigLo, Buenos Aires, ManantiaL. por Hortensia Castro
12007), I a fitosofía actual. Pensar sin certezas, Buenos Aires, Pai-
-
dós.
srnNrrr, RlcHnn¡ i2006¡. La cultura del nuevo capitaLtsmo, Barce[ona,
Anagrama
Wrrvtonr¡, MrcHEr (cornO.l [2009]: Otro munda... Dtscrepancras, sarpresas
y derivas en La antir¡rndialización, México, Fondo de CuLtura Econó-
mica.

UNA EXPLORACION A TRAVES DE IDEAs Y CONTEXTOS

Si nos preguntamos aceTCa del concepto de naturaLeza posi

btemente muchos evoquemos imágenes simiLares: una pLaya, un
bosque, un atardecer, un rebaño de animaLes, una toTmenta, entre
otras. Ahora bien, ¿qué ideas se pl.asman detrás de esas lmágenes,
apareniemente transparentes? Por ejempto, si quisiéramos deLimitar
esas evocaciones, ¿consideraremos como naturaleza tanto un bos-
que de araucarias en un parque nacionaLdeI sur deL Chile como una
ptantación de pinos destinada a La producción de pasta de cetulosa
en La provincia argentina de Misiones? PosibLemente muchos dirán
z
.O que soto e[ primer tipo de bosque sería considerado como naturaLeza,
(J remitiendo a una idea de fuerte arraigo en La actuaLidad: [a de natu-
(J
l rateza como mundo silvestre. Sin embargo, como ve[emos a [o Largo
ó
lll deL capitulo, esa no ha sido La única idea sobre La naturaLeza ni tam-
U poco [a predominante en [a historia reciente deL mundo occidentaL.
F
ztll
Los sentidos atribuidos a [a naturaLeza han sido no solo variados
ó
y cambiantes sino, incLuso, contradictorios. En diferentes contextos
la naturaLeza ha sido definida como e[ mundo silvestre y eLlardín, e[

s.
4t
 Bajo tat p[anteo, este capítuto presenta una aproximación a tas
y una ideas sobre [a naturateza en et marco del pensamiento occiden-
y [o secutar' una fuerza dominada
orden y e[ caos, to subtime [Smith' tat; también invotucra atgunas discusiones acerca de [a noción de
accidental y una diseñada
fuerza dominadora, un' "U'O"O de las imágenes ambiente, ya que en gran medida es tributaria de [a de naturateza.
1984). Es que' a pesar
de [a aparenie transparencia
No reaLizaremos un examen exhaustivo ni, menos aún, definitivo.
oue evoca, I'a naturalezl";J"
tt nos ofrece cruda' completamente Proponemos, en cambio, una exptoración a través de a[gunos con-
están siempre atrave-
::ilJ; á" ,tnt'oo' Nuestras percepciones por [a cultura de textos histórico-geográficos para identificar [a transformación de las
de ideas' en definitiva'
sadas y formadas por sistemas ideas sobre [a naturateza y, en particutar, comprender atgunos de tos
social [Nouzeitles' 2002)'
cada época, tugar y to'ÁttiOn se trata so[o de sentidos de nuestra época.
tener en cuenta que no
Asimismo es importante sino que' además'
acerca de [a naturaLeza'
ideas Idistintas, variab[esl ilus-
tipos de acciones A modo
generan y f undamentan diferentes
ettas es frecuente LA IDEA DE NATURALEZA EN LA
trativo, consideremot i;
;l;;;;'e situación: actuatmente diversión'
apacibles' aptos para TRADICIóN JUDEOCRISTIANA
concebir las ptavas ;;;;i;;"'"s '.a en
iJ de energías En cambio'
e[ descanso ¡,, =o¡"iooo' '"po'ition las playas
de [a Europa medieva[' Una de [as inftuencras más importantes y duraderas en [as ideas
otros contextos r"'tOrllJ''toto'tt Una y otra idea
insatubres y tenebrosos' sobre [a naturateza corresponde a ta tradición judeocristiana. ¿Qué
eran considettOt' attltos de
y transf ormaciones materia[es ptantea aI respecto esa tradicrón? Fundamentalmente, estabtece
han llevado Oit"'"ntJ'' "ttion"'
"
esos [ugares: como i'""
*'i"'ta' pfagaOa de tnfraest,ru:lf:]-tO'' que [a naturaleza es resultado de un ptan o designio divino, o sea,
etc')' en e[ primer caso' o cs [a obra de un creador supremo, Dios [Glacken, 199óJ. Se trata de
pamientos tntfn""io=' uccesos' f "t"l"r-]i caso'
en erial' en et segundo Lrn pLanteo desarrotlado más formalmente en [a Europa medievaI y
como área re[egada' transformada en
[a concepción y puesta (lue va a tener una inftuencia centraI en eI pensamiento occidentat,
¿Cómo ," tontottJ"ititt ioeas
¡,o,lie de fuentes
es su origen? EL[as derivan ,rtmenos hasta fines detsigto XlX. Sin embargo, esa idea de designio
vator de ia naturareza?, ¿cuár. histórico-
Según [os diferentes contextos rlivino no es estrictamente originaI deI pensamiento judeocristiano;
muy diversa' y ttrnOlnt?t
pu"d"n. estar' asociadas a[
conocjmiento rle hecho, en su formulación más general ya está presente en e[
geográficos, u"'"rno' qu" por ejemplo, ha sido notabte pcnsamiento griego de principios de La era cristiana, por elemplo en
crentífico-tecnotogi.";y; !f
Li.u.ion"r.
desde media-
tLg'nj;rías' como e[ evolucionismo
la rnfluencia Ot como ta ecotogía
los fi[ósofos pLatónicos y estoicos, bajo La anatogía deI artesano como
discrpLinas y corrientes' r readoT deI mundo IGtacken, 199ó; CoLtingwood, 200óJ.
dos del sigto XIX' y 'fl'n" del riesgo más recientemente; tambrén' A [o [argo de los sigtos XV a XVIll, [as informaciones y los ejempla-
en eL srglo XX o I'a *ootogit y' en
tecnológrcas' como la biotecnología rr'., de plantas y animates que los exptoradores europeos obtienen de
de atgunas innou*on"' ideas sobre
AsimisToi-rnutnt' de [as '.rr', viajes por e[ resto deI mundo Itos "nuevos mundos") son consi- u
F
especia[, La transgénesis' z
pensamiento retigioso' por "'"ttO!" 1:^11 rlllados balo esa tradición de pensamiento. Más precisamente, esas IJJ

[a natura[ez" ¿"'iJ'n deI manifiesta [a inftuencta

m
rrrLrcstTas son interpretadas como rndicios de l.a plenitud y [a variedad
judeocrrstiana' y de las artes'-como
tradición a[gunos eventos ,ll
del movimiett" lsimmons' 199ó) lncLuso la Creación y, por Lo tanto, confirmación de la existencia de un
';;;";i; [a transformación de esas ideas; es e|, caso rlr",ignio divino. De hecho, ta observación y eI estudio de [a naturaleza
NI
)
Lrl
naturates han rnftuldo en año 1755 y que'
qu""¿"'i"yó ta ciudad de Lisboa en eI ',,,r convertidas en estrategias de reconocimiento y honra a [a obra É.
del terremoto armónico y l
d;;i;"i; de [a naturaleza como un todo ,1,,1 Creador. F
frente a la idea y fuerza z
diseñado, t"";';ii;;n unt ptutba de su rmpredecibrl'idad
'"
tlcstructiva '

,)'),',
 Asimismo, e[ reconocimiento de La diversidad terrestre ptantea en
ese contexto ta necesidad de determinar Las relaciones y eLfunciona-
miento deL orden naturaL para, de esa manera, recuperar [a imagen
anterior de armonía, alterada por [a impresión de caos derivada de
Las exploraciones por esos nuevos mundos". Una de [as estrategias
de estudio de La naturaleza más embLemáticas de ese contexto es eL
sistema ctasificatorio que propone CarL Linneo Íll0l-1778) para el
mundo vegetat y animal. En particular, en su l.ibro El Sistema de La
NaturaLeza lsytema Naturae, 1735] expone una estructura descripti-
va que clasifica todas Las plantas del mundo {Luego Lo hará con los
animaLes] según [as características de Los órganos reproductores,
a partir de cuatro parámetros visuales Inúmero, magnitud, forma y
disposición). Esta obra tendrá un gran éxito en su época y provocará
que muchísimos naturalistas, de diferentes nacionaLidades, empren-
dan vlajes de expLoración para inventariar y cLasificar La naturaleza
orgánica de los "nuevos mundos".
En esa propuesta de Linneo se pueden observar varios de los
rasgos del tratamiento de La naturaLeza en ese contexto. Su sistema
condice con La idea de designio divino: imptica una conceptuaLización
de La naturaLeza como un todo acabado, finito e inmutabte; de hecho,
una de sus frases más citadas con relación a su propuesta cLasifica
toria es: "Ahora podemos contar tantas especies como se crearon aI
principio de Los tiemp os" lcf r. Boorstin, 2000: 4311.
Como seña[amos, estas ideas van a tener una gran difusión en
eI mundo occidentaI hasta prácticamente fines deL siglo XlX. A partir
de aLLí entonces comienzan a sedimentar una serie de postutados y
teorías científicas {el I.amarckismo, eL organicismo y, sobre todo, eI
evolucionismo], que plantean a [a naturaleza misma como una fuerza
vital', creadora y activa que rige el mundo. De esta manera, se produce
La [enta desteoLogización de ta idea de naturaleza ILivingstone, 1993].
z u-.1
IO Más aLLá de eLLo, varias de las ideas de La tradición judeocristiana,
(J como Lasde orden y armonía de La naturaLeza, serán retomadas bajo
)
tt otras premisas por eI movimiento romántico de fines deI sigto XVlll y
principios deL sigl.o XlX, así como por aLgunas de Las corrientes ecoto-
qistas, especiatmente desde mediados del sigto XX.
*ú
LA NATURALEZA ILUSTRADA: ÚTII Y PERFECTIBLE
Fn eLcontexto de La ltustración europea {sigto XVlll a principios deL
sigto XIX), surgen una serie de ideas sobre l.a naturaLeza que serán
centraLes en e[ pensamiento moderno y que, como tales, tendrán una
gran permanencia, inctuso hasta nuestros días.
En primer [ugar, se recupera [a idea de ptenitud de [a naturaleza
fes decir, de abundancra y fecundidad de [a naturaLeza, ya presentes
en aLgunos pensadores griegos de La Antigüedad cLásica), pero balo
una concepción cLaramente utiLitarista: se considera que La natu-
rateza está disponible para satisfacer las necesidades humanas y
mejorar las condiciones materiaLes y espirituales de la humanidad.
Esta val.oración de La naturaLeza como recuTso para eL meJora-
miento o perfectibilidad humana se conecta con una idea cLave de[
pensamiento itustrado: La de progreso. Efectivamente, La noción de
progreso implica, para [a época, La creencia en una mejora sostenida
y ascendente de La sociedad humana, derivada de La confianza des-
pertada por las reformas poLíticas Ien particu[ar, eI derrocamiento deL
Antiguo Régimen y su reemptazo por un contrato sociaL], así como por
Las innovaciones tecnoLógrcas [[a máquina de vapor, [os ferrocarrires,
etc.] y Las transformaciones económicas y sociales asociadas {La
industriaLización y la urbanización, entre otras).
En relación con esa concepción utilitarista, se emprenden nume,
rosos viajes de expLoración, organizados por las coronas europeas o
por asociaciones de científicos y/o empresarios, con eL fin de exptorar
y aprovechar [a naturateza de los nuevos mundos" [sobre todo, de
América deL Sur, África y las tierras deL océano pacífico]. Es eL caso,
por elemplo, de La expedición de Luis María de La Condamine por
América de[ Sur {1735-1745], encomendada por e[ rey francés Luis
XV; más atLá de su objetivo iniclaIde determinar [a forma de [a Tierra,
F
descubre para eI mundo europeo eI caucho y [a quina, especies que z
trl
son exportadas a Francia para su cu[tivo en e[ Jardín det Rey Ipratt, m
1997J. Este elempto marca otro rasgo de esa época, Los nexos entre
el estudio de [a naturaleza y los intereses poLíticos y económicos de N
Ltl
j
[a exp[oración territoriaL europea; aunque La re[ación no siempre fue
CY
directa y ex profeso, los reLevamientos, inventarios y recopi[aciones :)
F
de eLementos naturales [flora, fauna, minerates, etc.] fueron cen- z-
1íl ,
trates para [a identificación de recursos destinados a [a exptotacion
Precisamente a partir de [a vatoración det dominio
coton ia |.. sobre [a natu-
raleza se interpreta que América es una especie
En segundo lugar, y en estrecha asociación con [o anterior, se de modeto del primer
estado de [a humanidad, y que Europa [eImundo
desarrotla otra idea sobre [a naturateza: [a de dominio del hombre civiLizado según Los
hombres rtustradosl habrÍa sido una especie de
sobre et[a. Más precisamente, se plantea que aquelta p[enitud origi- América ,u! ti",n-
pos primitivos. Estas apreciaciones generan fuertes "n
naI de [a naturateza se vería amptiada y mejorada por las interven- debates entre
intelectuales y potíticos
de ambos continentes; por ejempto, entre
ciones humanas, que permitirían controtar a [as f uerzas indeseables
George Louis Lecterc, conde de Buffon Iuno de [os
y obtener los productos deseados. Un ejemplo de elto son los ctareos más destacados
naturatistas europeos del'sigto XVil), quien ptantea
de los bosques, en tanto se suponía que mejoraban las tierras y ta debitidad de ta
naturaleza americana por [a supuesta ausencia de
hacían más saLudabLes Los [ugares {G[acken, '199óJ. En def initiva, ra obra ordenado-
ra de[ hombre civitizado, y Thomas Jefferson
esa idea de dominio sobre [a naturateza expresa e[ optimismo de los [iuego tercer presidente
de Estados Unidos), quien destaca la variedad y grandiosidad
hombres itLrstrados sobre [a crencia y [a técnica como medios para de ta
naturaleza de este continente.
loqrar el progreso materiaL.
En síntesis, e[ pensamiento de [a ltustración contteva
Esa idea de dominio, además, presupone a [a naturateza no soto iniciatmente
un propósito de [iberación deL hombre con respecto
como una materialidad, sino, fundamentalmente, como una fuerza a [a naturaLeza
{extraña y temida} a través del uso de [a razón y [a técnica;
que interactúa con eL hombre y que,se estima, este debe y puede de esta
rranera, ta naturaleza se convertiría en eI medio para
controtar a su favor. De hecho, en ese contexto existen numerosos [a propia reati-
zación humana bajo una premisa de progreso
estudios y debates acerca de las fuerzas naturales que no pueden sostenido. En parateto,
y desde un punto de vista epistemotógico, se
ser dominadas e influyen sobre los grupos humanos, entre [as que va consolidando una
vrsión dicotómica de La realidad, conformada por
se destacan especiatmente [as ctimáticas.1 [a idea del hombre y
l,i naturaleza como dos entidades separadas y en
De esta manera, La naturateza que se va[ora en ese contexto es [a oposición [Glacken,
I 99ó; Coates , j99Bl.
que ha sido transformada y ordenada por las intervenciones y obras
humanas, y que muestra, por [o tanto, su dominio y controt. Por eso,
eL melor ejemplo de [a natura[eza ilustrada son los jardines de las
residencias de [a aristocracia europea Iparticutarmente, los jardines LAS IDEAS ROMÁNTICAS ACERCA DE LA NATURALEZA
ingLeses), donde se seleccionan las especies y se dispone su ubica-
ción y asociacrón. Ese dominio de los hombres sobre [as plantas, los E[ movimiento romántico, es decir, aquel conjunto
de perspectivas
animates y otros etementos y fenómenos de [a naturateza sería una v ¡rlanteos iniciados hacia fines det sigto XVilr en Europa,
fundamen-
muestra de [a civitización humana.2 l,rlrnenie en eL campo de [a pintura y la Literatura,
va a producir una
¡'r 'rf Lrnda transformación en las ideas sobre [a naturateza.
se trata,
r' r.' precisamente, de un movimiento cultural fuertemente crítico
r Entre otras cuestiones, r. pLrnt., la intluencia Or"'a, climas tropicates ejer i r'l.a i[ustrada de progreso, especiaLmente
de *,
cerían sobre la voluntad humana, lustificando de ".n",
esa "a
manera La colonización europoa en reLación con [a Revo-
i'r' r''r, lndustriaI y ta transformación sociaI A
sobre e[ continente africano. Más precisamente, se plantea que esas condiciones ctim¿l que contleva. se cuestion"
ticas no permiten el desarroLlo de sociedades avanzadas, por lo que [a civiLización debo
' | 'l'l.rioro de Las condiciones de vida y de trabajo en las principates =.
ser transplantada, desde Europa a África, bajo eI tutetaje colonral lArnold, 200'] J.
I Ese gran optimismo respecto de La posibi[idad de progreso y, por ende, de perfeclr- r r'l'rrles europeas, fundamenta[mente
;
bitidad humana, comienza a ser discutido ya hacia fines del sigLo XVlll con relación,r
como producto de [a ace[era- ñ
lo,, ritmos de crecimiento de [a pobtación. Es eI caso, por ejemp[o, de Thomas Matthtr,, " i' 'lr'tos procesos de industriatización y e[ crecimiento demográfi- .i
ll/1,(, 1834)ysuEnsayosobreelprinciptodepoblación, escritoen 1798[Glacken, 199ó], ,' ,r,,i r:omo [a desaparición de puebtos, modos de vida y etemJntos
;f
r ¡r.,' rros naturates en [os ámbitos conquistados
por europeos. Tam-
 vatoración de una naturateza pura, virgen f una primera naturateza),
la conmoclon
detonador de esos ptanteos
bién suel,e señalarse como que destruye La cn oposición a aqueLla artificiat o falsa que produce, especiatmente, eI
por el. terremoto
originada, to*o u'"Jüitnoto= avance de fa qgricuttura a gran escala, la industrialización y la urba-
attera la idea de [a naturaleza como
crudad de Lisboa; t?5; U que nización [una
\unda naturatezal. Estas nociones contrapuestas
un todo armónico Y estabte' itimitado y también se des[iza\ hacia otros pares de opuestos, como e[ de campo
manera, se discuten ras practicas de dominio versus ciudad y, sodre todo, naturaleza versus tecnotogía.
De esta contra-
y comienza a va[orarse' en
transformación de ta natura[eza' transforma- Una derivaciór/ ¿e estos p[anteos acerca de [a autenticidad de La
partida, tt p'"'"'u"t"lón Ot
unt naiurateza escasamente naturateza es [a noción dewtlderness o mundo sitvestre (o satvale]. En
u''g"n Este movimiento expresa * t]:^1: sentido' eI
particu[ar desde fines det sigto XlX, esos ámbitos y elementos serán
da o, inctuso, un'sentido
hacia ta civrLización y' contiene
descontento ¿"t ttiL¡t¡o objeto, en tanto expresión de [a "primera natura[eza", de diferentes
y [ugares preindustriales ,tcoates'
de nostatgia t,u.i. to, tiempos de |.a naturateza que ¡rolíticas de protección y conservación. Et caso más emb[emático es
onn fas ideas centrates acerca r¡l de[ Sistema de Parques Nacionales de Estados Unidos, que se
19981 ¿.Ctrát"t su repre-
Cabe destacar dos' por r.onvertirá en un mode[o de protección de [a naturaLeza imitado, sobre
;t¡ttlr ta ,,1 ntoui'nrento-'orn¿nt'to? y de lo auténtico'
[a idea de lo subl'ime Iodo, en Los "nuevos mundos", entre eltos [a Argentina. Se trata, más
r,cntatividad intüentiu'
" n"t'u""Lt'l subtrme atude a los efectos que [a natura[eza r'oncretamente, de una red de áreas de carácter silvestre (es decir,
La idea Ot generan sobre
rn;";;;rtas características o atributos' rionde operan -o parecen operar- soto las fuerzas de [a natura[eza),
en generat, que [a contemp[ación
" "l. precisamente se desiaca
et espíritu ftum'no Más u otros de con-
lr,rlo administración estataty destinadas aL uso púbtico.
preferencia Los de alta montaña
de ciertos p"i="¡"' tton ata rdece res'
Muchas de estas ideas serán retomadas y resignificadas en otros
trastes pto=il'l:"'ü=tt"otenos ltas tormentas' [os r ontextos. Es et caso, en generat, de gran parte de los movimientos
y pasiones lta
"nf.u e[ despertar de sensaciones
etc.) permiten af observador e[ respeto)' De esta
,'r o[ogistas de los sigtos XX y XXl, asícomo de ciertas modatidades det
e[ temor' [a reverencia'
sorpresa, [a admiración' se convierte
trrr ismo y otras prácticas sociates de ocio y recreación.
que [a experiencia de [a naturateza
manera, se considera betta' sino' también' men-
ta naturaieza no soto es
en un acto espiritual: 1992.)'
saluclab[e IMarshalL' LA CUESTIóN AMBIENTAL Y LA TRANSFORMACIÓN
tatmente edificante y mora[mente la razón como
tuestión: ta discusión de
Esto se tontiiu"on otra y [a DE LAS IDEAS SOBRE LA NATURALEZA
de conocimiento' propia del pensamiento' itustrado'
única fuente
ape[ación-tntont"fartida-aLaintuición'tasensibiLidad'eIsenti- I lacia mediados det sig[o XX se van evidenciando y dif undiendo una
I ittginttión' Se busca' dt ttl: :?:^tra'
reem-
,,,rc de procesos de degradacrón de las bases naturales del ptaneta
miento v, subjetiva'
p[azar oUltitt ¿" t" naturateza por [a descripcón
'onr"1"oOo'
Por e]empto' lr{, pondrán en crisis aquetlas ideas ilustradas acerca deI progreso
"t "t'"to y humores de[ observador' ,i,, l,r humanidad a partir deI dominio de [a naturateza.
que refl'eje tas sensaciones creativa es [a principaI
ia imaglnación I ntre esos procesos se destacan l'a contaminación y destrucción
para los artrstas románticos mas
[es interesa interpretar [a naturaleza'
6 fuente de conocimiento: de betLeza neoctásica etr
l, rr('r'adas por [a utilización de la energía nuctear con fines béticos,
li"" ::t::;, ton ro cuaI se rechaza el ideaL , rro evidencian los bombardeos atómicos de Hiroshima y Nagasaki
3 persona[ [Rojas Mix' 1992J'
e favor de una expresión más e[ va[or en st
ll')/rlrJ e, inctuso, las pruebas nucleares en e[ atotón de tas istas Bikini
y La idea ¿" auténiica apeta a reconocer , rrlr{, las décadas de 1940 y 1950. También [a expansión de [a ltuvia
lil
'i"iu'"tt'a
[ugares o e[ementos sobre los que no ha intervenido r, rrl,r r)n La Europa industriaI y e[ nordeste norteameTicano, l'a degra-
Y de aquetios
de ámbitos que no han
sido- clominador;'
i' r,,r de sueLos [por ejempto, en Las pLanicies deI centro-oeste esta-
H mano deI homLt"' es decir'
eespecia[menteporsociedadesconsideradascivi[izadas.Setratadel¡t

50,r
 lidad compteja, compuesta por organismos y factores físicos fuerte-
a lasgrandes
de aguas dulces en torno nhente interretacionados, y en [a que las actividades humanas también
dounidense) y ta contaminación ese repertot]o^'0"
se sumará a operan como factores bióticos {Del.éage, 1993}.
ciudades. En [as décadas siguientes especia[-
setvas y bosques tropicates' Con esos antecedentes y en e[ contexto de [as preocupaciones y
prob[emas ta degradación dá y movimientos
discipl'inas crentíficas atertas por [a degradación de las bases naturates de[ ptaneta, desde
mente en América y n'á' Diversas
y difusión de estas prob[emáticas; mediados det sigto XX et término ambiente pasa a designar e[ entor-
sociaies contribuyen ui tonotitnitnto de los
es e[ caso de I'a brotoqia
y [a ecotogía en particutar' así como no en donde se desarro[ta [a vrda, resuttado de fuerzas y procesos
pro desa'm" nuclear y eco[ogistas' naturales y sociates; un entorno que se caracteriza, además, por las
movimientos pacificistás' natu-
con respecto aI estado de la estrechas articulaciones entre sus diferentes componentes [tuz solar,
En ese contexto, [a preocupación esto?
hacla e[ ambiente. ¿Qué significa suetos, aires, aguas, ftora, fauna, anima[es, infraestructuras, equipa-
rateza deriva en una toJ.ti.u.ibn Por [o general'
enttende p-or ambiente rnientos, cuttivos, etc.). Por [o tanto, cuando se señata que, en este
En primer iug"', u"uto'-Out
"
usada para hacer referencta
a[ medio o entorno donde t-ontexto, [a preocupación por et estado de [a naturateza deviene en
esa noción es diferentes
taL' puede ser reconocida en locaLización hacia eI ambiente significa que ta atención pasa a estar
se desarro[la [a vida ¡l' torno por puede
ejempto, es,e,sentido r:entrada sobre ese entorno socionaiuraI donde vivimos y, fundamen-
c.o.textos y .on urri"i.s
derivaciones.
a"t sigl'o XIX en e[ marco del pensamiento l;rtmente, sobre su carácter comptejo e interretacionado.
:,cT reconocido a [o ütgo o" Si bien no es este eL momento cuando surgen las primeras pre-
hisienista, centrado .n it intt'uncia
det ambiente
"" -".!1::-T:"1t"des-
que las sustancias"en ,rr upaciones aceTca de [a transformación de las condiciones ambien-
más precisamente plantea
enfermedades; "miasmas" o 'vapores l,lles, es ctaro que en este contexto se convierte en una cuestión,
y [os cuerpos enfermos emanan
composición
de enfermedades' Enmarcados ,',, decir, en un conjunto de probtemáticas y debates amp[iamente
malignos" quu prouot"n La difusión idea de
en [a tradiciOn fripolr;tica'3
los higienistas se centran en [a , ornpartidos, aunque no unívocos. lnctuso décadas más tarde ese
fatta de saLubridad en las ciu- , rrácter se potenciará no solo por e[ agravamiento de atgunos proce-
influencra pl'" tu"'tio'ttr l.a ,
"mni"nt"f popu[ares en ',,r,, de degradación y agotamiento de recursos, sino, sobre todo, por
para los obreros y sectores
dades rndustrl.tt' t'JU'"todo
de medidas tendientes a alelar Lr ,,ocia[ización o difusión masiva de los estudios e interpretaciones
generaLl y proponu' áimpLementación de
de lodazates y [a retocatización ,r r,Íca de[ estado de [as condiciones ambientates en diferentes par-
esos efluvios, como ef cu'Urimi"nto Paiva,
y hospitates IUrteaga, 1980; 1,,, rlel mundo; también, pot su internacionalización, es decir, por eI
mercados, mataderos, cementerios aún una fuerza
entorno o ambiente cobra ', rlrIecimiento de instituciones y potíticas internacionales aL respec-
,1,
2000). Esa importaJa-deL
con e[ o:t:"tllt-o: u r,, lNogué Font y Rufí, 2001; Estenssoro Saavedra, 2007J.
mayor desde principios de[ sigto XX ]i::":tn't
los organismos con stl I os diferentes ptanteos acerca de [as condiciones ambienta[es
su inierés por estudio de Las re[aciones de
eL
a traves de[ desarrotto de concepto'; | .rr r,rrácteT, sus causas, sus consecuenciasJ van redefinir a su vez
mundo exterior' En particutar i,, rrl()¡,ls acerca de l.a naturaleza. ¿Cuáles son esos planteos e ideas
entre otras ideas y planteos' estit
como los de ecosistema y biósfera' como una tota
a consoLidar [a idea de ambiente , ,,, 1,¡1J¿s? Veamos a[gunos ejemptos vincutados a diferentes posi
ciencia ha contribuido
z
.(f
rr,rrnientos teóricos y contextos cu[turales
obr¿r A'
(,)
, Esa traoicrón remire a Hrpócrates f4ó0 a c 370 a.c l' v en particular a su
(J llr,l rlominio a [as mediaciones
l
O res, asuasv i,s,.,:::-1,.j[::iji:Hli:Í;1'.",'":í*:iff3,.::;li5'i]?f lll,ll
t! riertas caracreristrcas amotentat:;:;i;;;r;;l;i¿, I ¡ef ,-niendo sus condicr0,r,,'
"í. irn rle los debates más interesantes con respecto a [a cuestión
::T:, :T'lfl TH S',: i'' 3 i:' : i lil:
,
ul
F
l'{ !:-'U; :::t : m:5 que ; : :'"afecta;t lr¡t "tt'
"
zLrl
i

sobre todo, g¡ e¡¿5ión O" *po'itnt"t

epidemias' como
r Lá de cólera I I

, ,1,r,¡l,rI se focaLiza en [a discusión de ta dicotomía moderna hom-

amaritla en Buenos Aires a prtttt
t1't"
n o"'l'"u'"
ó oarte de Europa entre to" utióiñi '"i,','
de ta década de 1870

,68,ii:
 de la
tiempo, favorecen [a conformación de otra idea' La de finitud
naturateza y escasez de sus recursos' sol.o que ahora -a
diferencia
de una
de Lo planteado por La tradición judeocristiana- se trataría
escasez generada por acciones y transformaciones sociales
Ahora bien, en gran medida esos ptanteos acerca de [a finitud
escasez de [a naturaLeza se formu|tan de manera
genérica' donde son
f [as aLusiones aI mundo como espacio cerrado y ais[ado'
recuentes
de finitud
sin a|tternativas en cuanto a ta modlficación de [a condición
[a situación de escasez; por ejempto, son usuates las
metáforas sobre
"nave Tierra"]. Además, las atusiones
eI p[aneta como is|.a o nave fla
a [as causas de esos problemas de recursos [imitados o escasos
"[a humanidad
sue|.en ser generaLizantes, con afirmaciones deI estito
amenaza I.a habitabitrdad de [a Tierra" {Le Bras, 1997)'
[a esca-
Se trata de ptanteos que sostienen una idea absotuta de
que se irían agotando
sez: existiría una drsponibiLidad fija de recursos
degradan
porque se extTaen más de [os que se generan y/o porque se
parte de Los existentes. No se considera que [a noción de escasez {e'
inctrso, La misma definición de recurso] sea relativa a varios factores:
lasnecestdadessocia[esquedefinen[arecurrenciaa[anatura[eza,Las
de uso y
formas de apropiación o control de [a naturaleza' Las formas
gestión, Las tecnotogias con las que se reatiza su aprovechamiento'
Asimismo, aquellas ideas de finitud y escasez de |.a naturaleza
encubren [as importantes diferencias en cuanto a [a responsabiLidad
generan los
sociaI por e[ consumo y abuso de [a naturaLeza {¿quiénes
qué?, Los suf ren?l
procesos de degradación ambientaLy por ¿quiénes
por eso, preferimos hab[ar det"mito de [a escasez". Esto no significa
negarLosprocesosdedeterioro,muchosdee[LosirreversibLes'sino
qrá L. id"" labsoluta] de escasez diLuye, por su propio carácter gene-
en el
ratizador, La atención sobre los procesos sociaLes que median
escasez'
uso de [a naturateza y que definen Las condiciones de
¿Et fin de [a naturateza?
Desde ta década de 1970, una serie de procesos ambientales,
como de innovaciones tecno[ógicas, van a contribuir a [a conform;¡
"fin de [a naturateza", es decir, de dir,r
crón y difusión de La idea de
sido conocida hasta entonct'',
¡Itción de La natura[eza taI como había
,. ,
Más precisamente, se sostiene que los niveles de domesticación y
deterioro ya no permitirían hablar de [a naturaleza como atgo con
existencia separada de las acciones humanas; es decir, [a naturaLeza
ya no soLo estaría artificializada, sino que, además, ya no sería autó-
y
noma sino dependiente IMcKlbben, 1990). Asimismo, esas interven-
ciones [a habrían vueLto impredecibte, resurgiendo de esta manera la
idea de naturateza como una fuerza caótica y agresiva.
y
Una de las vertientes de conformación de esa idea de "fin de la
naturaLeza" proviene de los nuevos estudios sobre los crecientes
procesos de degradación ambientaL, sobre todo a partir de [as evi-
dencias acerca del ca[entamiento gLobaL y otros procesos clrmáticos,
potenciados en parte por emisiones de gases oriqinadas en activi-
rlades humanas {La producción industriaL, los incendios provocados,
,rtc.l. También contribuye a esa idea La ocurrencia de una serie de
rlcsastres ambientates vincutados a fatLas tecnoLógicas, como ta fuga
rl. sustancias tóxicas en la fábrica de pesticidas de union carbide en
ItlropaL{lndial en 1984y eI accidente ocurrido en La centraLnucLear de
{)lrernobylIUcrania]en 198ó, entre otros. Es decir, debido a [a ampLia-
,r{in y eI agravamiento de los procesos de degradación ambienta[, a
irr', QUe contribuye ese tipo de desastres tecno[ógicos, [a naturaleza
y,r no sería La misma, estaríamos asistiendo a su fin.
()tra de Las vertientes de [a idea de "fin de La naturaleza" procede
'1,' i iertas transformaciones originadas en innovaciones y apLicaciones
l,r,rl.cnológicas. Es eI caso de las prácticas de transgénesis, es decir,
' 1,' lr ;rnsfeTencia o incorporación de determinada información genética
,l¡'rr)a especie en otra, con eIfin de obtener un nuevo producto con [as
, ,r,r( leristicas deseadas; un ejempto de etlo son Las experiencias de
, r',r,rr.ióo de genes de [enguado Icorrespondientes a su característica
' t,' , rrrlicongelamiento en grandes prof undidadesJ en eI tomate, con el
t,,, ,lr, ¡tosibititar su sobrevivencia con bajas temperaturas y garantizar U
F
, L, rr rJO conservación en cámaras frigoríficas. También es el caso de zLrl
l(.( lrca de ctonación, es decir, de La obtención de uno o varios indi- m
, i,r. ,,l partir de una céLuta o un núcleo de otro; son recordadas, por
a.'i
r, rlrlo, Las experimentaciones realizadas aL respecto en Gran Bretaña
.',' i r rl.cada de 1990, que dieron lugar a[ primer animal clonado, la
N
Lll
_t
1 r l)rrlLy. Otro desarroL[o biotecnotóqico reciente es eL de xenotras-
CY
f
a
, ,,r,',. os decir de trasplantes de órganos o telidos de un animal 7

lgeneratmente primates o cerdos] a un humano [PapagaroufaLi, 2001;
Faraco Benthien, 200ó1. De esta manera, se estaría desarrottando un
proceso de transformación y domesticación acelerado de [a naturate-
za que contribuiría a minar su autonomía y compl.ejizar cada vez más
"to naturaL" y "lo artificia[".
los [ímites entre
Ahora bien, estas prácticas biotecnotógicas han generado una
variedad de cuestionamientos y debates; por ejemplo' acerca de Las
consecuencias de esas transformaciones sobre [a satud humana y e[
ambiente. Más aLl.á de estas discusiones, sin duda Las transforma-
ciones devenidas del campo de ta biotecnotogía pueden ser interpre-
tadas como un paso más en aquella aspiración itustrada de dominio
y control de [a naturateza. lnctuso es frecuente que se atuda a esos
elementos obtenidos por tales técnicas como una nueva naturaleza:
ya no nos enf rentaríamos a una primera naturateza [aquetta prísiina
o virgen), ni a una segunda naturaleza [aque[[a transformada por
e[ conocimiento y los instrumentos humanos conocidos hasta hace
unas décadas], sino que se trataría de una nueva natura[eza, una
tercera naturaleza, que no existe, aI menos en e[ estado actuat de [a
evotución bioLógica, por sus proplas fuerzas y leyes' De hecho, parte
de [as discusiones aI respecto se centran en evatuar si se trata de un
paso más en eLproceso sociaLde domesticación de [a naturaleza o si,
por su carácter, impticancias y consecuencias, se trataría de un satto
cuaLitativo en cuanto a [a inlerencia humana en [a naturaLeza'
Asimismo, y desde otra perspectiva, ha comenzado a discutirse
l'a existencia misma de objetos puramente naturates y a pLantearse
[a necesidad de etaborar teorías y conceptos capaces de dar cuenta
de esa difuminación de las fronteras entre to animal y [o humano, e
inctuso entre los organismos y Las máquinas. ¿Cómo denominar, por
ejempLo, los cu[tivos transgénicos? Es decir, productos que resuttan
de [a combinación de información genética de especies distintas, que
difícitmente se cruzarían sin intervención humana. ¿Y a los robots
con sensores? Es decir, máquinas que reproducen ciertos atributos
humanos que Les permiten interpretar diferentes parámetros de la
reatidad. Estos etementos, que no pueden ser concebidos entera-
mente desde eL mundo de La naturaleza o desde e[ sociaL, podrían
,,cr pensados por ejempLo como híbridos, a mitad de camino entre [a
rr,rlrrla|.eza y [a cuLtura ICoates, 1998; Castro y Zusman, 2009)'
Esias ideas acerca det "fin de [a naturateza" son discutidas desde
diferentes frentes y con variados argumentos. Por ejemp[o, se seña[a
que esos procesos de deterioro y de domesticación no comprenden
a todas las fuerzas y etementos naturates, y que tampoco tienen una
expansión taI que permitan habtar de su completa mundialización.
Se al.ude también a que en muchos aspectos [as fuerzas natural.es
continúan siendo independientes y autónomas de [a conciencia y [a
voluntad humanas. Esto es evidente en atgunos procesos simptes y
cotidianos Iinctuso necesarios para [a apLicación de tos desarrottos
biotecno[ógicos) como La fotosíntesis. También se observa en fenóme-
nos de gran ímpacto, fundamenta[mente vincutados a f uerzas físicas,
como los terremotos, tsunamis y huracanes {Soul.é y Lease, 1995).
lnctuso se advierte que gran parte de esos procesos biotecnotógicos
de domesticación no podrían desarrollarse sin [a existencia de mate-
riaI genético conservado in situ, es decir, en sus [ugares de oriqen
y escasamente atterados; más adetante, se analizan los debates e
impticancias acerca de los derechos sobre los recursos genétrcos.
Desde estos planteos, cabría advertir que tates procesos de domes-
ticación comprenden, fundamentatmente, un tipo de naturateza, [a
biotógica; también, que eL "fin de [a naturateza" es, sobre todo, etfin
de una idea: [a de naturateza como mundo sitvestre o satvaje.
EL REGRESO A LA NATURALEZA
,A[ mismo tiempo que se desarrot[an aquetlos planteos acerca del
"fin de [a naturateza", y muy posibtemente como derivación de ettos,
se registra una serie de ideas, actitudesy prácticas que remiten a [a
necesidad de retorno a [a naturateza. De hecho, se podría pensar en
estos procesos como una especie de pénduto que oscil.a entre dos U
F
z.
extremos: cuanto los modos de vida más se aproximan a entornos Lrl
m
totatmente transformados y degradados, surgen movimientos que
intentan Itevartos hacia eI otro extremo, et de [a experiencia de con-
tacto con La naturaLeza silvestre u otros simitares. En ocasiones, ese t\
movimiento de regreso se vincuta con búsquedas espirituates y de
)
U
É.
f
estitos de vida, y en otras simptemente como formas de obtener nue- F
vos productos [en este caso, "naturates"J para comerciatizar. z
 Ahora bien, ese regreso" es metafórico: no se trata, en [os tlem-
directa de La naturateza, desde los atimentos y las ropas hasta La
pos actua[es, de sujetos que regresan a un lugar del que partieron,
energía y [as viviendas en generaL. Es eLcaso de a[gunas atdeas eco-
sino que se atude aI regreso de La humanidad a sus supuestos entor-
lógrcas en las provincias de Buenos Aires y Córdoba o Las ecovittas
nos de origen. Como vemos, esta idea de regreso se vincuta aI pen-
en México; se trata de una corriente que recuerda a los back to the
samiento romántico acerca de [a conveniencia, materiaI y espirituat,
Landers Iintegrantes deL movimiento "vuetta a La tierra"] en Estados
de modos de vida más próximos a [os tiempos, ritmos, etementos y
Unidos, que a principios deLsigLo XX migraron desde Las grandes ciu-
leyes naturaLes.
dades hacia las áreas ruraLes para vivir solo de Lo que producían en
No obstante, este movimiento no ha sido inaugurado en nuestra
sus pequeñas gran1as. También ese ideaI de regreso a La naturaleza
época, sino que Teconoce diferentes antecedentes históricos, parti-
se concTeta bajo la forma de nuevas prácticas de alimentación, como
cu[armente en contextos sociaLes de brusco cambio en [as formas
manifiesta eL movimiento sLow food [aLimentación o comida Lenta, en
de vida, aL menos por parte de aque[Los sectoTes acomodados con
oposición a fastfoodJ: una corriente nacida en ltatia en La década de
posibitidades fácticas de emprender ese regreso. Por ejemplo, en Los
1980, con adeptos en todo el mundo, que se opone a La estandariza-
tiempos heténicos de La Grecia antigua frente aL crecimiento de [as
ción de Los alimentos, promueve su producción orgánica y su catidad,
ciudades o en Europa occidentaL frente at avance de |'a Revolución
y busca recuperar [as producciones [ocales y tradicionaLes, entre
lndustrial IGtacken, 1 99ó].
otros aspectos.
Ahora bien, ¿cuáL es La especificidad de ese movimiento e ideal
En otros casos -en realidad en [a mayor parte de Los casos-, ese
en tos tiempos actuaLes? En términos generates, se destaca por dos
retorno a [a naturateza está fuertemente mediado por eL mercado. Es
aspectos novedosos: su importancia y masividad, por un [ado, y [a
que esa necesidad de regreso se ha constituido en una amptiación de
diversidad de formas que asume, por otro.
"mientras todos nos Ias formas de mercantilización de [a natural.eza: ya no se trata soLo
Como bien señata Nouzeitles 12002: 1'lJ,
ile extraer, transformar y vender productos derivados de la naturaLe-
preparamos para su funerat, [a naturaleza nunca ha sido más popu-
za, sino, además, de producir y vender naturateza, con [as menores
lar". Ffectrvamente, cada vez más [a prensa, La televisión, e[ cine,
cvidencias posibLes de transformación.
La titeratura y [as artes ptásticas informan sobre [a transformación
Uno de los ejempLos-icono de estas formas de regreso son las
y e[ deterioro de [a naturateza, y presentan diferentes señales o ,ireas residenciales deI tipo cLub de campo Ícountry club) y barrio de
muestras sobre [a importancia de defender su permanencia para [a
r.hacras. Se trata de ámbitos de residencia permanente o periódica
vida contemporánea. Soto basta, por ejemplo, con prestar atención
Ipor elemplo, fines de semana) construidos en las periferias de las
a [a cantidad de documentaLes televisivos y de canates de teLevisión
rlrandes ciudades o en medios ruraLes, que son vatorizados por su
dedicados a mostrar [a naturaLeza y presentar y [amentar ejemptos
¡rosibitidad de mayor contacto con [a naturaleza. Más altá de otras
de su deterioro. Otro signo de su masividad se observa en La cantidad
, ;rracterísticas, nos interesa destacar aquí tos atributos de esos
y diversidad de situaciones cotidianas, más atLá de los medios de lrrgares que se asocian con aque[ ideal de regreso: por ejemplo, U
comunicación y tas artes, donde se hace referencia a [a necesidad zLrlF
l,r tranquilidad y la quietud, Las vistas abiertas y con vegetación, el
de retorno: en Los a[imentos, [a ropa, eLequipamiento y [a decoración ó
,rrre puro, La posibitidad de rea[izar actividades aL aire [ibre; es decir,
hogareña, eL diseño de viviendas y otros edlflcios, [as vacaciones.
,rluaciones que se diferencian, por oposición, aL buLLicio, [a ace[era
Ese ideal de retorno se concreta de maneras muy diversas. En
, rrin, [a contaminación y eL encierro de Los ámbitos metropolitanos. N
ocasiones, se desarrolla a través de nuevas experiencias comunita- LI
I
I ,rs diferencias entre estas experiencias de regreso a [a naturaleza
r i¡s en las que se busca vivir en armonía con La naturateza y consumir (Y
y ;rquetlas de las aldeas ecológicas son muchas. Mientras que las ,)
,,olo aqueLlo que [a misma comunidad obtiene o produce de manera F
, rlrleas ecoLógicas pueden ser denominadas 7
como experiencias de

t* .:
 de vida
Dos premisas han guiado esa exploración. Por un [ado, l'a consi-
"búsqueda de La naturaleza"' es decir' de búsqueda por modos rlcración de que las ideas sobre [a naturateza expresan, de manera
los ctubes de
las referidas a
austeros, en armonía con [a naturateza' precisa- rrruy c[ara, los anhetos, las preocupaciones y los prob[emas de [as
pueden ser caracterizadas' más ,,ociedades en sus diferentes contextos: esas ideas evidencian no soto
campo y barrios de chacras
"nl'q'"J"'OeI campo:" es decir' de disfrute de [as ll estado de [a naturateza, sino, sobre todo, et estado de [as socieda-
mente, como de t!is1:::]
p"r.o bajo un confort urbano' t"
bondades de [a natura[t'" y rlcs que [as producen. Por otro [ado, esa exptoración también estuvo
tipo de equipamiento servrcros
;;; i; prácticas desarrotladas y et Cruz y Raymond' 2007)'
r¡triada por [a consideración acerca de [a retación entre Las ideas y [as
disponibtes en esos tugu'"= [Naies ,rr:r:iones, tanto con respecto a [as prácticas sociates que son genera-
estas formas mercantilizadas
Otra de Las situaciies que itustra y:"-::"' ,1, rr; y/o justif icadas por determinadas ideas sobre [a naturateza como,
vincuta con prácticas de ocio
de regreso a [a naturateza se o turtsmo ,'rr sentido contrario, con respecto a las ideas que son derivadas de
ción, especia[mente tas asociadas aI turismo ecotógico , rr,r'tas acciones sobre los etementos y fuerzas natura[es.
[os que se ofrece un retorno
tempo-
verde. Se trata de servicios en Iambién hemos identificado ideas y prácticas predominantes,
de [a visita a entoTnos sitvestres Icomo
rarto a [a natura|.eza a través ,r l,r vez que hemos visuatizado atgunas tendencias de cambio. Por
de áreas protegidas)' eL recorrido
parques nacionales f ot'o' tipos ,,¡r'rnpto, [a [enta desteotogización de [a idea de naturateza y [a trans-
y [a observación de p'i"¡tt ["n
tutho' casos' invocando aquetta l,)r ¡rac¡ón de la idea de naturateza como totaLidad {l.a NaturaLezaJ a La
de cono-
et desarrollo de estrategias
idea romántica de [o'subtime], de fauna] y [a ,1,,r'ntidad parcia[, opuesta al hombre Ien ciertos contextos, como eI
ejempto' e[ avistaje
cimiento de La naturateza [por ,1,,1 ¡rcnsamiento i[usirado, val,orada negativamente y, en otros, como
físicas y deportes [senderismo'
reatización de diferentes actividades se
,,rr ,,1 deI romanticismo, va[orada en sentido positivo). También, La
de riesgo' etc l' En este conjunto'
cicl"ismo, cabatgatas, deportes rll,'r¡¡¿¡6i¿ entre las ideas de naturateza como una fuerza estabte y
de salud o
puede inclurr .t tL.Á"Jl turismo lát.':njlTl]ti"
los efectos terapéuttcos
,r u(')n¡ca y [a de naturateza como caos y fuerza impredecibte.
e[ turtsmo de spa, donde se aprovechan tlorr relación a nuestros tiempos contemporáneos, cabe destacar
termales' vapores' sates
de ciertos eLementos natural'es [aguas I r lr,r rr)anencia de [a idea de naturateza como mundo silvestre. Como
inciuir aI agroturismo les decir'
[ar'
minera[es, t.ngo=]' intt"o t"n" ' rr,rl,¡rnos en Los ejemp[os aI inicio, ese es indudabl.emente eI senti-
actividades recreativas y de
ocio practicadas dentro de exptotacio i , rrr,r,, [uertemente asociado en [a actual.idad aItérmino naturaLeza.
en genera[' ya que t:"ti"""1^Y::l:.'
nes agrariasly ai turismo rural r ,, Ir,,o aquetlas cuestlones y ptanteos acerca det "fin de [a natura-
e[ mayor contacto con palsa1c.' r, | {y,r sea por deterioro o domesticación} refuerzan La definición
J" t"=-pr"tisas de[ ideal' de retorno:
de prácticas más acordet'
y eLementos naturates y eI seguimiento t' Lr rr,rturateza como aquetto sitvestre, ajeno e independiente a [as
con los ritmos de l'a naturateza' , ,, r\./r'n( iones y transformaciones sociates. De hecho, esa es [a idea
,,, r , rlrcr tamente invocada en tos procesos de mercanti[ización de [a
"regreso q retorno '.
'r,¡¡ . ¡11,7;1 vincutados a[ deseo de p
NATURALEZAS '.,rrr',rno, se detecta una importante acpptación y consenso en
DE LA NATURALEZA A LAs 6
: , i, ,r l,r rdea de[ ser humano como naturald¿a, posibtemente como I
exptorado atgunos contcxlrr" ' ll r,lrr tie La difusión de ciertos p[anteos ecd¡ógicos y antropoLógi- Í
A Lo |.argo deI capítulo' hemos
l rrrrlrrin, en cuanto a [a idea de que los sere'S-hulngl]oq a través Ñ
histórico_geográficos.oneLfindeidentificartasideaspreva[ertt'tt
tes acerca de [a natura[eza; de
se ha bu:'t¡trlrr
modo más específico' ,, , rrrl('tacciones con [a naturateza externa, se transforman a sí #
t¡tte
y comprender [s5 5s¡tifle" ,,,,,',,,'llo permite retomar, desde otro tugar, ta idea de unidad de ,j
icJentificar las ideas contemporáneas
histórica' , ,l ' I rlr',2,1. ,f
grot lrtn, evatuados en perspectiva

6$,"
 'f

0irrLrNowooo, R. G. [1945] [200ó): ldea de la naturaleza, México, Fondo de

categoría sociat'
p[anteos acerca de [a naturaleza como una Cuttura Económica.
Los campo de [as crencras llt r rncr, JEnn Pnur (1 993), Historia de la Ecología. Una ciencia del hombre
ptou"nitn]es .dei
aportados por est;d;;' y
sociales, r''n tontliiiio'a
di"utir afirmaciones genera[izantes y
y la naturaLeza, Barcetona, lcaria.
estado de [a naturaleza lJrr r;urs, ANroNro Cnnlos [199ó), 0 mito moderno da natureza intocada,
absolutas cut'tiones ancladas en e|.
'ob'" San Pabto, Hucitec.
e[ambiente'U"*""t"Llzadoparticutarmentelosriesgosdenatura-
escasez de recursos' I ',rr,russono S¡¡vEoR¡, FEnrunxoo J. '2007},'Antecedentes para una his-
como [a de
[izar algunas definiciones' impresiones loria deI debate potítico en torno aI medio ambiente: [a primera
que una de las principales
En síntesis' t";;;;;;"s [a dificuLtad de
quedan tu"go l; este recorrido exploratorio es :,ociafización de [a idea de crisis ambientalllg43-19721", en Univer-
que de ctencta
t'^n'tar' Así como los hombres sum, vot. 22, no 2, Tatca, Chite.
hablar de [a naturaült "" referían' por dife- I nrr¡r:o BrNrHrrN, P¡rRrcrn {200ó): "Engenharia genética nos sécutos XIX e
y artistas románticos se
medievates o los pensadores
tton mayúscuta y t'"n'l"il'^"^l¡uestroe XX e a transgenia agrícota no sécutoXXl", en RevistaTheomai no 13.
rentes motivos, ü Ñuturattta "Racionatidad moderna y probl.emática ambien-
' diferentes sentidos contemporaneos
los
r ;^ Gul¡o 12002):
tiempo -y ^t ^s!.1,
lirl. Una interpretación a La Luz de La articuLación sociedad-natura-
"tonot'"ndo
hrstóricos-deberíamoshablardenaturalezas[conminúsculay'sobre lr,za", en G, Galafassi y A. ZarriU.i, Ambiente, sociedad y naturaleza.
todo, en Pturatl' I t¡lre La teoría social y Ia historia, Buenos Aires, Universidad Nacio-
rr,rl rle Qui[mes.
,' .' r,.r N, CraRrrucr {199óJ' Huellas en Ia playa de Rodas. Naturaleza y cul-
BIBLIOGRAFíA ttu,t en el pensamiento occidental desde Ia Antigüedad hasta finales
histórico: el medio' ,1,,1 ,;rgLo XVlll, Barcelona, Ediciones deI Serbat.
La naturaleza como problema
Anuoro, Dnvlo [2001 l: de Cu[tura Eco I l1r,'n',, Hr,nvÉ [1997]: Los limites del planeta. Mitos de La naturaleza y de
y ta expansión de Europa' Máxico' Fondo
la cuLtura t. t tr tltlación, Barcetona, Ariet.
I

v Zuppn' GnncteLn [orgs'] [20011

o-J:l';ltAR; vELÁzouEZ ToRnrs'.D¡vto
Latina Apropiagoes
i 993], The GeographicaL Tradition. Episodes in the His-
r , ,l,)Nr , D¡,vro [1
e representaEoes' Londrt t',ry, ,, Contested Enterprise, Cambridge, Btackwetl Pubtishers.
¡11

Natureza
'a'Amér¡ca ' 1
' r,,r r , l)rrrR Í19921, Nature's Web: an exploratíon of ecological thin-
Barcerona' crítica r',rrrl, I ondr€s, Simon & Schuster.
,..?1; lljlli'it1bt" {2000)' Los descubridores' G' Prall v ! ,rr . Ar n rr, Jo¿¡l [2001): 'Justicia ambientat, sustentabiLidad yvato-
en R,J,Johnston' D Gregory' '
CrcrnEE, No" fzoooi:fÑ"tu" ' Btar h , r, r,r , cn M. Gonzátez de Motina y J. Martínez ALier Ieds.J, Natura-
Dictionary of Human Geography' 0xford'
M. Watts [eds'), fhe . t tt,tt¡,;lormada, Barcel'ona, lcaria, 2001, pp. 289-335.
naturel"' en Environment 'tt¡'¡t 'I i r rl, llrrr[1990]: El findeLanaturaleza, Barcetona,P[aza&Ja- U
üihit lt11"?10* o"o' Lons rive F
zLrl
- PlanningA' voL 3ó' PP' -t9,!^^^ "Natura[eza y cultura:
191
,\r r,rrlo [2004)' "Vator, Natureza e Patrim6nio Naturat", en Re- ó
á- c¡srno, iü'i'J*' p'*'o [2009)' ltf ],ll
por los estudios sobre rtt"'tl" ' t t tt'nt t,t e Ambiente, Santa Maria, RS, v. 28, pp.107-120.
"*;; "t*""1^'
n'o'iJ"'¿t?' Una exploración
,,,,
3 " Geográf ica:; t|' llt I jr ¡lrzy R¡yMONo, SrÉpH¡Nlr t20071, Buscando la naturaleza. Mi- N
¿",1" u Geograf ía'' ' en Investigaciones L!
I
li
y paisaje ,',t ¡ ,hrr,irnicas rurales contemporáneas, Barcetona, Anthropos.
.BoletíndeIlnstrtutodeGeografía,UniveisidadNacionaIAUl¿)|ltllll.1 Í.
i , lir¡r.r y VrcENrE RurÍ, Jonn [2001J, Geopolítica, identidad y glo- l
I' áe México, Méxrco, pp.
135-153.
ll''t ,, ,r. l j, rr cetona, Ariel., pp. 189-209.
kz
ancient tir¡rr:"'
l:l (lrr¡lts, Percn (1998): Nature' Western attitudessince
,i U,.lcy, University of California
Press'

I
 "lntroducción", La naturaLeza en disputa.
Nouzrrrrrs, GneRlEr¡ 120021,
Retórtcas deL cuerpo y el paisale en América lafrna, Buenos Aires,
Paidós, pp.11-38.
O'Corlruon, Jnvrs [2001]l, Causas naturales. Ensayos de marxismo ecoló- LAS IDEAS DE LOS
CONQUISTADORES
gico, México, Sigl.o XXl. DE LOS TRóPICOS EUROPEOS ACERCA
Parva, VrnóNtc¡
"Medio ambiente urbano: una mirada desde [a
[2000],
historia de [as ideas crentíficas y Las profesiones de [a ciudad, Bue-
nos Aires, 1850-1915", en Revista de lJrbanismo, no 3, Santiago de Durante su primer viaje ,
at Caribe, Col on
Chile, Universidad de Chite. ese un mundo conocido t* muestra indeciso:
P¡p¡onRournu, ErrNr [200 1 ],
"Xenotrasp[a ntes y transgénesis. H istorias o extraño? an ¿era
veces ros árbores,
in-morates sobre las relaciones entre humanos y animates en 0c-
ras aves
; i;; p;.; ;: ill':Hif;::
en España: atgunos
t" p".".i* ;;ñ; l:.1?:
cidente", en P. Descota y G. Pa[sson, Naturaleza y Sociedad. Pers- .xtraños v sugárentes asombrosamente
de un paraGo ,;r;fi,11:os
pectivas antropoLógicas, México, Sigl.o XXl, pp.277 -294' Si en América [t
Pnnrr, Mnny Loursr [1992) t1997], )ios imperiales. Literatura de viaies y , o, ro. t.op i.Jl
transculturación, Buenos Aires, Universidad NacionaI de Quitmes.
RreoR¿rl, C¡nros [2000): Ambiente y sociedad, conceptos y relaciones'
:o
,r,;ociados con [a
.r)
:
abundancia de :Td: :ffiJi
b
:,',i;,n r";,r :"jT;:T JJil;
QU€ Europa hasta entonces
soto
";;;;i
n"o,""rril",l:..,.r"r
de riquezas
Buenos Aires, Arie[. Los visitantes aI sur
Ro¡¡s Mrx, Mlourl 11992J' América imaginaria, Madrid, lCl-Lumen. v'r era ción exu u ,rr"rü O"'0,
Scnvr¡r, Ar-rnro [1983) : EL concepto de naturaleza en Marx, México, Sigto XXI'
¡

,rvr,:; que [es

bera nte, ros co ro res
daban [a bienvenid"
ffi Jil.",T;";,:T::J:f J:
Srr.¡voxs, Inr'r G. ['1 996J: lnterpreting nature. CulturaL constructions of the ' r,',,1¿rs de Ma[abar, sumatra
;;; tt aproximaban a [as
environment, Londres, Routtedge. n,;;
I I tiempo _y e[ conocimiento
MJ..r]"
SvrrH, Nrt [1984], Uneven development. Nature, capital and production ol rl rrl.nos algunas
d" .;;; srrvleron para fortalecer
de estas impresiones
space, Oxford, BasiI B[ackwe[t. ¡'r,,Jr,rqación de tates de-
ideas por medio o" y ta
SourÉ, Mrc¡¡Er v Lrnsr, Gnnv (eds.) [1 995]: Reinventing nature? Response" Irrtr'., en Europa. ,1",t*t:uoicos.benignos,
les dio ampria
[...J ciertame";;;;,;r'llTlt.nta
to postmodern deconstructlon, Washington, lstand Press. q.ue [os europeos
', , ,r, r r, cJe [os tróprcos húmedos
URrr¡on, Lurs (1980j,
"Miseria, miasmas y microbios. Las topografíir" r' r' r''¡1'paradisíaco , ;";;;;;; ^"tr:ones
médicas y et estudio del medio ambiente en e[ sigto XlX", en 0r'rr
que hacia [o pestrtente;:
:tj:iT^mucho más
Crítica. Cuadernos Críticos de Geografía Humana, no 29' Barcetorl'r, ,,' ,," ;',' I :. i,',^,:1":f il.=1": l' f "lJ ;;i:l''L"J:'o:1.:;:'il T:i
todavía con [os encuentros
Universidad de Barcetona. ,,, l r., r,,ras ¿et pacirT de tos europeos
Vl¡¡annrnr, JoneE; Hrlrnlcu, StrNr, v CaLvtLl-0, ALrlanoRo {20051: ¿Un nrrtttrh'
patentado? La privatización de la vida y del conocimiento, San li;¡lv'I l1'¡;
i* ;n:T,^n;'ü::i:'l:i:: ;:J: :::::r:;¡{1i*
1
dor, Fundación Heinrich Bótt. , , r, r,, Eu.opa i,,""'*J;:J:"#;.i:jJ;fií":" Á1.",.,,0i
wrrlavs, R¡vvonn t197ól f 20001 : PaLabras cLave. un vocabuLario rfu: l,t t ttl l'' r,r ',{rria erróneo
im..;^"" i*,,"1 n''"t"l1clones. _;

j
co
tura y la sociedad, Buenos Aires, Nueva Visión. ,,,os,,u;;;: ;T:3:ru:i*;;H,:,
' ' " '¡rr¡r"'l'¡ prevatecient., ;ff,i:,ilH,".J
¡n.trrl'.ntr"" Lo. natura[istas. por
¡'llll',tlt'||.i.,cjellemor."u"."nro',,;:'"'^:-tt¿tuTatlStaS.Por-.< pr 5
, , , , ,,,,,,,,¡,"r,oT;::::J,;l:t:1.,::9:,"ncias de ,n o".u,,o g
il

rón de petigro, ena1ena_

3 il

*
ción y repugnancia, sentimientos expresados de modo tncomparabte
por Joseph conrad en su noveLa Heart of Darkness lEl corazón de [as
ttnieblas). UNA DE PlRArAsl LA BtoPRosPEcctóN
Desde mediados det sigLo XVlll, Las represeniaciones negativas
de los trópicos se empezafon a convertir en |.ugares comunes de los
relatos de los vialeros e inctuso en [a ficción. [...] Las imá9enes vio Todos Los pueblos deL mundo han compartido generosamente
lentas de Los trópicos abunciaban también en Las [iteraturas médica
y sus
r.onocimientos y sus recursos durante sigtos y, esta
topoqráfica que estaban empezando a surgir de Los enctaves comet- ha sido ra fuente
rleL enriquecimiento de curturas y cul.tivos en
todas Las regiones deL
ciales que los europeos habían sembrado a Lo largo de Las costas
¡rlaneta. Hacer un recuento de los inmensos aportes que América ha
de África occidentaI y en eI Caribe Los escritores de esa época' con rcalizado a La humanidad a través de sus cuLtivos a[imentrcios
frecuencia ponian guardia sobre los peLigros del c[ima inctemente y ,raí2, batata, zapal[0, pimiento, friloLes, tomate, etcétera]o
Ipapa,
l.oda csa cla:;e de animaLes que roen, que rugen y muerden' [" sus hierbas I
1

rncdicinales Iqurna, curare, zarzaparriLLa, ipecacuana,

Detrás cle ese cambio de acento de lo paradisíaco a [o pestiLen (
laLapa, botdo,
paico, etcéteraJ merecería de por sí un artícuto especiatmente
le hubo, desde luego, un proceso de cambio real que se dio con [a '¡sia,
,lr,rlicado al tema.
importacrón masiva de esclavos af ricanos como resuttado de La revo- lamentabtemente, durante et sigLo XX, ta sociedad occidentaL
lución azucarera ly de Los riesgos que esa exptotación conl[evaba]. r, rn proC€so de mercantiLización e industriaLizacrón de
rni
[a naturaLeza
,¡Lr. introdujo el concepto de propiedad sobre
Fuente
los seres vivos, por el
rl los recursos naturales comen,/aTon a ser visLos como
Arno[d, David [2001): La naturaleza como problema histórtco: el me- 'r'
"industrias"
marerias
Eco- r)r rrils para [as farmacéuticas y de La alimentación entre
dio, [a cultura y la expansión de Europa, México, Fondo de CuLtura
'132- 139. "tr ' r" lp[antas usadas para telidos, tinturas y [a construcción de vivien-
nómica, pp. Lr ro escapalon tampoco a estos procesosJ.
| ,ta lógica arrasadora se inirodulo también en La búsqueda de
rrlr 'v'rs pLantas útrLes para Las gigantescas corporaciones
de Las Lta-
r" r'i r', industrias de ta vida Irndustrias de [a arimentación
yfarmacéu-
tr , r ,l r/
al[í nació el concepto de bioprospección.
r directa de La prospección [exptoración deL subsueLo
I lr1,
basada
rr i l .x(lmen de Los caracteres deL terreno
y encaminada a ciescubrrr
r' rrr {'rIos mineraLes, petro[íferos, aguas subterráneas,
etcétera;
''r r/r 'l diccionario de ra ReaIAcademia de La Lengua Españoraj, La
l' '¡ r" ¡ri:cción busca encontrar seres vivos útiLes para los fines U
F
de z
U
, ,r ,lrr ,tria C[aro que en este caso eL "examen',
generalmente no se m
i';r ir 1 ¡ l'r exploración deLterreno,
sino que tiene como uno de sus_eJes
i rr ' rl.r, [a recolección de conocimientos de Las comunidade, ioio-
N
rLr' , y,rsean indígenas o campesinas, tienen un extensísimo ll.l
aco- .l
¡'j 'r' ".ocrmientos sobre su entorno. por [o tanto, los bioprospec- :f
Tt-

, ,olo recolectan plantas, microorganismos o animaLes, sino I

4r.
 que también registran usos, prácticas y recetas que resuttan [uego y pueblos y, a menudo, destruyen biodiversidad.
EL objetivo finaI es
fundamentales para sus "descubrimientos". Una vez en sus [aborato- producir dependencia. a través de ta monopotización
deI mercado y
rios, [as investigaciones se orientan a confirmar los usos tradicionates [a destrucción de cua[quier atternativa a aquetlo que
[as empresas
a través de métodos "científicos" que hacen que un uso iradicionaI quieren vender.
se convierta de pronto en un "descubrimiento". Si bien [a bioprospec-
ción tiene como uno de sus focos principates las plantas medicinates, Fuente
son variados los fines con los que se reatiza, búsqueda de plantas aLi- Montecinos, Camita y Vicente, Cartos A. ,,Naturateza,
[2005.J, co_
menticias, tintóreas, insecticidas, industrlaLes, ornamentaLes, fibras, nocimiento ysabiduría", en -J. ViLlarreat, s. Hetfrich
y A. catvir.[o. ¿rJn
etcéte ra. mundo patentado? La privatización de Ia vida y der
conocimien¿o, san éat-
E[ cicto se compteta con eI patentamiento de [a ptanta para et em- vador, Fundación Heinrich Bólt, pp. 206,208.
pteo "descubierto", [...] que Le otorga a [a empresa eI monopotio en ta
comercialización de La misma y [e permite otorgar licencias a cambio
det pago de regatías, aun a[ mismo país det que provino [a ptanta y
e[ conocimiento. Muchas veces, [o que se patenta no es [a ptanta en
sí misma, sino los principios activos de etla extraídos; con [o que [a
apropiación queda encubierta en [a patente de una sustancia, sin que
sea visible para [a sociedad que eI origen de esa ap[icación provenía
de un uso tradicionaL. De esta manera, ta bioprospección se convierte
en una apropiación de los recursos y los conocimientos de los puebtos,
por eLLo es que eI movimiento ecologista la ha re-bautizado con toda
propiedad como biopiratería.
La biopiratería se ejerce de las más variadas formas en todas par-
tes del ptaneta, pero f undamentatmente en los países del sur, ricos en
diversidad biotógica y en conocimientos tradicionates: robo descarado
de recursos genéticos y conocimientos, investigaciones de campo de[
ámbito públ.ico o privado, proyectos de "cooperación", contratos con
comunidades locates; son [as distintas formas que adopta en [a pos-
modernidad eI robo de [os recursos deI sur, que en América [teva más
de 500 años ininterrumpidos.

z ¿Por qué todo esto es biopiratería? En primer [ugar, porque una

.O Lrl
empresa, un individuo, una universidad, un centro de investigación, F
(-) z
(J organismos estatates o un grupo con combinaciones de ettos, se LU
o
l
O
LL]
apropia e intenta monopotizar [o que ha sido descubierto y/o creado
L! a través de [os años por puebtos y comunidades enteras. Porque, al
f- N
ztr"l hacerto, destruyen o agreden otras cutturas, exptotan a pueblos en' tJJ
-J
m teros, atteran sistemas de manejo de ecosistemas, perturban siste É
>
-l
:)
f-
mas económicos loca[es, crean división entre distintas comunidader,
 deL otro. Aun en [a Atemania nazi, ese concepto tuvo un amp[io éxito,
porque era sinónimo de crear una juventud sana y fuerte.
E[ contexto de degradación de ta vida urbana, particutarmente en
[a época de mayor industrialización en [a segunda mitad de[ sigto XlX,
EL..REGRESO A LA NATURALEZA'
fue un incentivo para que el" regreso a [a naturaleza siguiera siendo
COMO IDEARIO DEL TURISMO
un ideario significativo para las masas urbanas. La misma burguesía
contribuyó aL reforzamiento de taI ideario, cuando va[orizó [as curas
una cons- [e¡maLes y posteriormente Los baños de mar como terapia contra
;:r"t:' ,;''t",^ de antemano' que e[ turismo es
ya que de ese mundo surge' muchos maLes. EL efecto demostrativo de Los anhetos burgueses no
trucción social tíficamente occidenta|.' deI
marcado por tos idearios dejó de tener efecto sobre las clases popul.ares, prontas a considerar
Resulta entonces profundamente que se
sus creencias' y las imágenes como mode[o utópico propio [o que [a burguesía adoptó como moda
mundo occidentat, sus anhetos'
pasajera.
forma det otro a través de ta historia' [ ']
cuatro idearios centra[es para [a Lo anterior expiica cómo e[ mar o [a montaña tomaron tanta re[e-
Hemos identif icado por [o menos
iurísticos de[ mundo occidental' vancia para orientar a los turistas hacia ciertos destinos a expensas
formación del' o de [os imaginarios rle otros. E[ soI que "da vitaminas" {so[o mucho después se pensará
e[ deseo de evasión' e[ des-
Estos son r".onq'i't" dt á t"titi¿ad' "regata" cáncer), e[ baño de mar
a [a naturaleza' Cada uno tiene 11r.re también [aun bastante frío en
cubrimiento de [o otro y el' regreso los mares europeos) que "revitaLi za", el aire puro de las montañas
de [os mismos que se teierá et
su construc.iO" irofit t' ""p"'ti'
y
i¡ire "tonifica", fueron todos concepios muy difundidos en torno a[
|.as sociedades occidentates' en
sus
imaginario turístico'propro de
vrlor terapéutico de los etementos naturaLes.
diversos matices' [" ]
Posib[emente es a partir de 19óB y [a corriente contestatar¡a deI
rrodeto urbano-industriat, cuando se consotidó este ideario de [a
E[ regreso a [a naturateza r,rlurateza como fuente de satud y de vida, y [a necesidad consecuen-
lr, de adecuar [as vacaciones a ese tipo de actividades.
actual que e[ del regreso a
No hay, posrbtemente' ideario más La afirmación del ideario de [a naturaleza a [a cual se debe
y ta idea det buen satvaje'
[a naturateza Presente desde Rousseau r('(lTesar es parateta a [a dec[inación de ta catidad ambientaI generaI
pinturas de Gaugurn o la obra de
vehiculado, pot t¡ttpto' por las y lrqada a [a vida cotidiana en particu[ar. Comer entatados, ingerir
[a modernidad en sus escondiies'
Thoreau' ta naturaLeza persigue a "utopía tecnoLógica"' ,¡rrirnicos, vivir en ambiente de poLución, todo etlo resuttó ser un
podemos ttamar
Frente a aque[l'a corriente que rn cntivo dramático para todas Las cLases sociaLes en La dirección de
es decir, aquetfa que cree en un
futuro hecho de máquinas' botonesy ,,rl,,ideTaT que [a naturateza es esenciaLy debe contemp[arse como
regu[armente con una fuerza inusi-
robots, se presenta y representa ,lr,,rrio vacacionat. A[ no ser posib[e integrar este ideario a [a vida Lt-l
F
'-- el ideat de [a naturateza' que partrciparon activamente no pocos
tada , ,,lrrliana por razones económicas, para muchos [as vacaciones pue- z.
Lr-.1

6 L" t'ti¿. hrgienista en La l, r {'ntonces contemptarse como una fase patiativa a [a degradación m

.ír.rt";;;;'q'ii"" de fines deL sigLo p3:tdo t: tlt,!:1?'

un ante
3 l, l, ¡ vida cotidiana.
Scedentedirectodetasituaciónactuat:ctubesnaturistassinonudis lluscar los srtios satvajes, comer simplemente, vestir como semi N
todo et[o contribuvri U
E ;;";;;.;;Jon.. du vegetarianos o deportistas, rlv,rjt:s, se ha vuelto entonces una moda muy distinta a[ regreso a
I

í'; :.;;ñ;;;1. n.t,"t"za en las rormas de ocio Para ..a juventucl' ,r,rlLrraleza de los curistas que acompañaban su tratamiento con
(Y.
-
t.l-
optaron por un ideario simi[ar,
pot
iil asociaciones como [os Boy Scouts ' ,,, r,, lujosas y [as actividades sociaLes más eLegantes y protocolarias
y e[ descubrimienlrr
:i' .;;i;muy articul'ado con e[ de la exp[oración
ffi,
f|&',i
 no tanto' e[ naturista que perslgue
posibLes. Quizás exagerando, pero
[a trasmutación que [o hace votver-
3. RECURSOS NATURALES Y ffi
e[ regreso a [a naturateza opera
e[ buen salvaje' !': "-t-:::l=t' SERVICIOS AMBIENTALES
se y verse a sí mismo como e[ otro'
I

un ser distinto' E[ turista naturtsta

convencionat sigue viendo como
a su ser' ya que encontró en [a
vive así [a diferencia, incorporándota
pasa sus vacaciones' Reflexiones sobre tipos de manejo
naturateza eL l'ugar eutópico donde

Fuente "Turismo
Hiernaux-Nicotás, DanieI 12002]',
e imagrnarios"' en
por Lía Bachmann
123, San José de Costa Rica' FLACSO'
Cuaderno de Ciencias Sociales'
pp. 10, 12,25-26.

ABORDAR LO AMBIENTAL:
(:OMPLEJIDAD ECOLóGICA Y SOCIAL

I or; probLemas ambien-ta.!g¡

9-o¡.s!1tuye_l qna. cuestlóq muy cgmpte
- C.:. \ ' \"\, ,,
t){)r rnuy divil;t#á7óftül;ü;¡igén"r, rus efectos, su intensidad, q.-,..
i ,"
\
| '
tr ¡,',r ,rlo de atcance que ha cobrado en [a actuatidad, y por las mút-
t,t,lr,,, rlimensiones que abarca, tanto en eI plano de [a reatidad sociaI
,,rri,r rlt)[ sistema naturat, y [as diversas vincutaciones existentes en-
rr, ,,,,1,t,, dos dimensiones.
I rr r onsecuencia, este tipo de problemas requiere de un tratamien-
r,.,¡,r,,rrrr:Luya ta mayoiéaniiáffisLdj;a_e"_q.9.¡9le_;_-i-"jÉr*.d,"dt6-.]¡pt"
t ! ,,rlrpos deI conocimiento invo[ucrados, sea en retación con l.a
z 1. I ' '¡¡ , rrnbientá[ ó"óón-e'f óainpó éducatiVb.
.O
O I l,r l)rcmisa cobra cada vez más notoriedad y aceptación. Sin
(J r,¡. ta p1g-cJjgg.
=' ' 'r' ,, p"¡e_{9m1¡a1 !ra.!g¡1ent.os más bien
-o 'r(),
¡ J,, I rlr ',rrlol,,
-c-g_!lqjg-tg"
Lrl compartimentados y aistados, o que se centran específi-
L! 3 ¡, ¡,, ¡t r',' n a de"ias d i m ensi ones i n"vo t-uira da;;-eñflr3iiiib ¿ e
tg u na.
F-
zLll : ,'r ,,r,, rlcI probtema en cuestión, de su desarrolto o de [as posibtes
ó : 1r,", l lemptos de esto son [a proliferación de sotuciones tec-