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Centro

Para escribir un enunciado de la misión personal tenemos que


empezar tomando en cuenta nuestro centro, ese centro
compuesto por nuestros paradigmas más básicos, que nos ayuda a
tener una visión del mundo. Es allí donde ponemos en práctica
nuestra visión y nuestros valores de que nuestros paradigmas se
basen en principios y en la realidad. El centro nos ayudara a
construir una imaginación con el fin de imaginar para crear lo que
deseamos Lo que haya en el centro de nuestra vida será nuestra
fuente de seguridad, guía, sabiduría y poder.

La seguridad es la cualidad que posee una persona para poder


transmitir una buena base emocional y una autoestima positiva a
cualquier circunstancia Otro factor seria la guía. Esta la podemos
catalogar como la dirección de la vida, también tenemos la
sabiduría que nos permite adquirir el conocimiento necesario de la
vida y como debemos emplear nuestros principios y por último el
poder que es la fuerza que tenemos para realizar algo y la energía
vital para elegir y decidir. Estos cuatros son interdependientes. La
seguridad y la guía clara otorgan verdadera sabiduría, y la sabiduría
se convierte en la chispa o el catalizador que libera y dirige el
poder.

Identificando su propio​ ​centro

Es fundamental que una persona se conozca interiormente, ubique


e identifique su propio centro. Examinar atentamente los factores
que sustentan la vida quizás puede ser el mejor modo de identificar
nuestro propio centro Cuando una persona fluctúa de un centro a
otro, el relativismo resultante es como avanzar en la vida subiendo
y bajando por una montaña rusa. En un momento se está alto, en el
momento siguiente bajo, y uno hace esfuerzos por compensar una
debilidad sacando fuerzas de otra debilidad.

Centro alternativos

Todas las personas tenemos un centro aunque hay algunas veces


que no los reconozcamos o estamos ajenos a ello. Cuando todavía
no hallamos nuestro propio centro existen algunos paradigmas que
nos ayudaran a comprender como afecta esto y optamos por
adoptar otros centros como por ejemplo ​centrarse en el conyugue​.
El matrimonio puede ser la relación humana en la cual dos
personas tienen el mayor contacto a veces nos volvemos
dependiente de esa relación Somos vulnerables a los estados de
ánimo y los sentimientos, la conducta y el tratamiento que nos da
nuestro cónyuge,

Centrarse en la familia.​ Otro centro común es la familia. Las


personas centradas en la familia obtienen su sentido de la
seguridad o la valía personal de la tradición, cultura y reputación
familiares. De tal modo, se vuelven vulnerables a cualquier cambio
de esa tradición o cultura y a cualquier influencia que afecte a esa
reputación.

Centrarse en el dinero​. Muchas personas creen que para obtener el


éxito el dinero y la seguridad económica es importante pero no es
así la supervivencia o las seguridades físicas aparecen en primer
lugar. Mientras esas necesidades básicas no están, las otras
necesidades ni siquiera se activarán.
Centrarse en el trabajo​. Una persona centrada en el trabajo puede
convertirse en adicta y obsesiva, y llegar al punto de olvidar otras
responsabilidades, de tener, vida social, familia hasta de poner en
riesgo su salud.

Centrarse en las posesiones​ muchas personas nos centramos en las


posesiones tangibles, materiales, tales como la ropa de moda,
casas, coches, barcos, joyas, sino también las posesiones
intangibles de la fama, la gloria, la posición social). Y este centro es
poco satisfactorio por que llega un momento que desvanece y trae
consecuencias muy fuertes

Centrarse en amigos o enemigos​. Las personas enfocándonos en


los jóvenes tienen a centrarse en los amigos y hacer lo posible para
ser aceptado a un grupo social y llegar a ser importante crea
entonces un alto grado de dependencia respecto de los estados de
ánimo, sentimientos, actitudes y conductas de los otros

Centrarse en la Iglesia​. Muchas personas seriamente


comprometida a Dios tienen la responsabilidad en asistir a las
reuniones pero si se centran de lleno en ella puede caer en
centrarse a un nivel avanzado de tal forma que llegaría a
obsesionarse con los cultos.

Centrarse en uno mismo​. A veces nos centramos en nosotros


mismo, pensamos que somos la única persona y La forma más
obvia de darnos cuenta es el egoísmo

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